III Congreso Catequístico Nacional

Morón, 24-27 de Mayo de 2012

50 Proposiciones destacadas
y otras que siguen en importancia

1
Comisión 1: Iniciación Cristiana y Kerygma
Desde la Situación
Visto que…
1. Visto que el kerygma es el primer paso
de la evangelización y de él deriva el
Proyecto de Renovación y Evangeliza-
ción de la diócesis.
2. Visto que es prioritario que los equipos
diocesanos de catequesis lleven esta
formación a toda la diócesis.
3. Visto que descubrimos un tesoro en la
religiosidad popular y la religiosidad en
las familias.
Tenemos la esperanza que el III CCN pro-
mueva un nuevo estilo catequístico.
Tesoros
Desde la Iluminación
Con la certeza que…
Con la certeza que “Urge desarrollar en las
comunidades un proceso de iniciación en la
vida cristiana que comience por el Kerigma
y por la Palabra de Dios, que conduzca a un
encuentro personal, cada vez mayor con
Jesucristo…” (DA 289)
Con la certeza que “La Iniciación cristiana
como acción evangelizadora de la Iglesia,
debe ubicarse en un proyecto pastoral y en
un marco eclesial determinado. El proyecto
pastoral es el marco necesario e inalterable
para la catequesis.” (Lineamientos y Orien-
taciones 7)
Con la certeza que “La piedad popular es un
imprescindible punto de partida para conse-
guir que la fe del pueblo madure y se haga
más fecunda, de allí que podamos señalar
que religiosidad popular más que un espacio
para la iniciación cristiana debe ser conside-
rada una ocasión para incentivar su consu-
mación.” (Lineamientos y Orientaciones 55)
Asumimos la Iniciación Cristiana como la
manera ordinaria e indispensable para in-
troducir a la vida cristiana y como cateque-
sis básica y fundamental (Lineamientos y
Orientaciones Nº23)
Tener una mirada con desafío para anunciar
Debemos ofrecer el encuentro personal con a Cristo a las nuevas familias discerniendo
2
Desde los anhelos
Proponemos…
Proponemos presentar el kerygma como
punto de partida de la catequesis de ini-
ciación cristiana, que sea significativo al
hombre de hoy y le dé sentido trascenden-
te a su existencia, comprometiéndolo en la
defensa y promoción de la vida.
Proponemos la realización de un proyecto
pastoral orgánico diocesano donde la Ini-
ciación cristiana, con estilo catecumenal,
se ubique en un lugar primordial, brin-
dando y multiplicando los espacios de en-
cuentro y formación Kerigmática para
catequistas.
Proponemos que desde la catequesis de
IC, en clave misionera, busquemos cami-
nos para revalorizar, promover y prote-
ger la piedad popular como lugar de
anuncio kerygmático a la familia.
Proponemos que desde la CEA se dé priori-
dad a la redacción del nuevo Directorio Ar-
gentino, optando por la Iniciación cristiana
en estilo catecumenal.
 Cristo. “Hemos de reforzar en nuestra Igle- los signos de los tiempos.
sia cuatro ejes: La experiencia religiosa, La
vivencia comunitaria, La formación bíblico- Generar un nuevo estilo catequístico.
doctrinal, el compromiso misionero de toda
la comunidad… (D.A 226). Formación de espacio que faciliten el en-
cuentro personal con Jesús Resucitado.
Descubrimos un tesoro en la religiosidad La piedad popular es imprescindible punto Proponemos que, desde la catequesis de Ini-
popular y la religiosidad en las familias. de partido para conseguir que la fe del pue- ciación Cristiana en clave misionera, bus-
blo madure y se haga más fecunda (Linea- quemos caminos para impregnar del anuncio
mientos y Orientaciones 55) kerygmático a la religiosidad popular.
La familia constituye uno de los tesoros más Aprovechar las festividades para hacer
valiosos de los pueblos latinoamericanos… anuncios kerygmáticos desde la realidad de
(DA 302). nuestras comunidades.
La familia sea escuela de la fe y pueda ayu-
dar a los padres a ser los primeros catequis- Revalorizar, promover y proteger la piedad
tas (DA 302). popular como lugar de encuentro de las fa-
milias con Jesucristo.
La piedad popular es un imprescindible pun-
to de partida para conseguir que la fe del
pueblo madure y se haga más fecunda, de
allí que podamos señalar que religiosidad
popular más que un espacio para la IC debe
ser considerada una ocasión para incentivar
su consumación. (Lineamientos y Orienta-
ciones 55)
El kerygma es el primer paso de la evangeli- Urge desarrollar en las comunidades un Proponemos el anuncio del kerigma como
zación y de él deriva el Proyecto de Renova- proceso de IC en la vida cristiana que co- una actividad que impregne todas las pasto-
ción y Evangelización de la diócesis. mience por el Kerigma y por la Palabra de rales donde los agentes estén en clave mi-
Dios, que conduzca a un encuentro perso- sionera.
nal, cada vez mayor con Jesucristo… (DA
289) Que el anuncio del kerigma esté en el plan
de Pastoral diocesano, de modo que todos
los agentes estén involucrados en el mismo.
3
 Tener en cuenta en la planificación anual
diocesana y parroquial el encuentro periódi-
co con la Palabra de Dios.
El kerigma como punto de partida de la ca-
tequesis de iniciación cristiana.
Es prioritario que los equipos diocesanos de La Iniciación cristiana como acción evange- Proponer la realización de un proyecto pas-
catequesis lleven esta formación a toda la lizadora de la Iglesia, debe ubicarse en un toral orgánico diocesano donde la Iniciación
diócesis. proyecto pastoral y en un marco eclesial cristiana de estilo catecumenal se ubique en
determinado. El proyecto pastoral es el un lugar primordial.
marco necesario e inalterable para la cate-
quesis (Lineamientos y Orientaciones 7) Toma de conciencia de los pastores propio
(obispo y sacerdotes) para asumir e impulsar
el proyecto pastoral que ponga en práctica
una catequesis de iniciación cristiana con
estilo catecumenal.
El anuncio misionero tiene como conse- El primer paso para planificar una pastoral Proponemos elaborar proyectos de pastoral
cuencia una catequesis kerygmática orgánica y asumir la renovación de la cate- orgánica donde todas las pastorales y los
quesis deberá estar impulsado por una sin- movimientos eclesiales junto con la cateque-
cera conversión pastoral, tal como dice el sis compartan experiencias del despertar
Documento de Aparecida y Navega Mar kerygmático.
Adentro. (Lineamientos y Orientaciones 9)
Comunidades pascuales que atraigan por
Hechos 2,42-47. Primera comunidad. seducción.
La ausencia del kerygma en nuestra cateque- “sentimos la urgencia de desarrollar en Promover espacios de comunión con los
sis trae como consecuencia una gran masa nuestras comunidades un proceso de inicia- movimientos eclesiales que ya tienen incor-
de bautizados no convertidos y sin compro- ción en la vida cristiana que comience por el porado en su metodología el anuncio ke-
miso con la Iglesia y con el mundo. kerigma y guiado por la palabra de Dios, rygmático.
conduzca un encuentro personal cada vez
mayor con Jesucristo”. (DA 289)
Buscamos valorizar la vida “Alabamos a Dios por el don de la vida” El acompañamiento de las personas que vi-
(D.A 106). ven situaciones difíciles: madres solteras,
violencia, abortos, drogadicción.
Ante una vida sin sentido, Jesús nos revela Trabajar en red de manera orgánica en situa-
4

Hay catequistas que se han encontrado con El kerygma es la proclamación testimonial y Retiros con la temática del primer anuncio.
el Señor y se interesan por este tema
La tecnología y la comunicación favorece la Para la Iglesia el nuevo mundo del espacio Invitar a los jóvenes a integrar a la Junta de
formación y la comunicación del kerygma.
Presencia de catequistas jóvenes.
El anuncio del kerygma a los catequistas
la vida intima de Dios en su misterio más ciones sociales de dolor, sin perder la identi-
elevado, la comunión trinitaria” (D.A 109). dad eclesial.
D.A: 226b. “Los fieles buscan comunidades
donde se sientan incluidos y valorados. Presentar de tal manera el kerigma que sea
significativo al hombre de hoy y le sentido a
sus vidas. Y se comprometa en la defensa y
promoción de ella.
gozosa de Jesús muerto y resucitado. El
anuncio del Reino de Dios para suscitar la Brindar y multiplicar los espacios de en-
fe y la conversión inicial. cuentro y formación Kerigmática para cate-
quistas.
cibernético es una exhortación a la gran catequesis.
aventura de la utilización de su potencial
para proclamar el mensaje evangélico… Priorizar la formación de los catequistas
(DA 487) teniendo en cuenta los espacios del mundo
de hoy.
La catequesis no puede prescindir de los
medios de comunicación y hacer uso de la Favorecer y fortalecer el uso de las nuevas
tecnología en pos del anuncio, los medios de tecnología al servicio de la catequesis.
comunicación “ofrecen la posibilidad de
extender sin límites el campo de audición de
la Palabra de Dios.” (EN 45)
Jóvenes son sujetos activos, protagonistas Animar, acompañar, escuchar y brindar es-
de la evangelización y artífices de la reno- pacio de participación en planificación y
vación social. (DCG 188). Representan un acción catequística.
enorme potencial para el presente y el futu-
ro de la Iglesia.
La formación obedece a un proceso integral Proponer la formación de los catequistas en
que comprende varias dimisiones basadas estilo catecumenal.
todas en el anuncio kerygmático (DA 279)
5
Comisión 2: Iniciación Cristiana y Familia

Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos

Visto que… Con la certeza que… Proponemos…
4. Vimos que la crisis deCon la certeza de que debemos ser como el Padre
la institución Proponemos:
familiar con la aparición de familias en- Misericordioso de la parábola (Lc 15, 11- Desarrollar criterios pastorales que per-
sambladas, familias monoparentales, fa- 32), que recibe, abraza y hace fiesta; y que mitan dar una respuesta a las necesida-
milias divididas, familias igualitarias, debemos aplicar la pedagogía de Jesús, que des de las familias que hoy son excluidas,
convivencias sin vínculos formales, co- en el camino a Emaús se acerca a los atribu- para que puedan tener una inclusión
mo una realidad reconocible y extendida, lados, camina con ellos, ilumina sus vidas cordial y PLENA en todas las instancias
es un signo de nuestro tiempo que nos con su Palabra y comparte con ellos el pan de la vida de nuestras comunidades pa-
exige una fuerte conversión pastoral. (Lc 24, 3-35) rroquiales.
Debemos, en lugar de juzgarlas, dar una Y también la certeza de que “Tu tienes com- Es urgente promover la CAFA en todo el
respuesta amorosa y audaz, acogiéndolos pasión de todos, porque todo lo puedes”, y país, con una impronta kerygmática y
cordialmente (con el corazón) y acom- “Tu amas todo lo que existe, y no aborreces misionera, donde se refuerce la cateque-
pañándolos al encuentro con el Padre. nada de lo que has hecho; de lo contrario sis bautismal y prematrimonial, refor-
Sólo esta conversión de nuestra actitud ¿cómo lo habrías creado?” (Sap 11, 23 y 25) zando el valor de la Familia.
catequística hará posible el camino de su
Iniciación Cristiana.
5. Vimos que los catequistas que trabajan Con la certeza de que “la capacitación de los Proponemos:
con familias necesitan una formación catequistas abarcará estos aspectos: el SER Desde las Diócesis promover la forma-
sólida que les permita ser acompañantes (madurar como persona y como creyente, ción permanente del catequista a través
disponibles y cercanos en el camino de para ser testigo de la fe y apóstol), el SA- de equipos parroquiales, con la partici-
la Iniciación Cristiana BER (conocimiento del mensaje, del desti- pación del párroco y con un coordinador
natario al que se dirige y del contexto social) que acompañe la maduración del cate-
y el SABER HACER (conocer la pedagogía quista y favorezca la integración cate-
y la metodología catequísticas). Además, el quistas/comunidad, y aprovechar los se-
3er. Encuentro Nacional de Catequesis Fa- minarios y talleres itinerantes.
miliar destacó que es necesario SABER ES- Desarrollar criterios unificados a nivel
TAR (acompañar, escuchar y compartir para nacional para la formación tanto doctri-
educar en la fe)”. CAFA para el Mundo de nal como espiritual de los catequistas que
Hoy. Y que los catequistas deben tener “una trabajen con familias.
6

6. Vimos que es necesario que los cate-
quistas que trabajan con familias, y en
particular los que lo hacen en la Cate-
quesis Familiar, conozcan la realidad de
cada una de ellas, y establezcan un
vínculo estrecho para poder acompañar a
sus integrantes al encuentro con Jesús
que es la Iniciación Cristiana.
formación integral, kerygmática y perma- Que se incorpore en los seminarios la
nente (DA 279) formación catequística de los sacerdotes,
Y con la certeza de “que nuestros candidatos para que puedan formar a los catequistas,
a ser catequistas, siguiendo un proceso ayudándose para ello con otros catequis-
evangelizador, hagan memoria de su propia tas formados.
iniciación cristiana y su encuentro con Jesu- Y que desde las Parroquias y Diócesis se
cristo, profundicen su fe y su compromiso de contemplen las dificultades económicas
vida cristiana, por medio de una renovada y que se les plantean a muchos catequistas
sincera conversión, en un ambiente de co- para acceder a las instancias formativas,
munidad cristiana, guiados por un equipo aportando soluciones efectivas.
formador en el cual todos son precisamente
catequistas.” (LORCIC 64); y que “las Pa-
rroquias deben ser lugares de formación
permanente” (DA 306)
Y que “El catequista es antes que nada un
discípulo-testigo. Con una vida impregnada
por el Espíritu Santo, abierta a la Palabra
como alimento y oración cotidiana: conocer
la Escritura es conocer a Jesucristo” (LOR-
CIC 63); y que “No se comienza a ser cris-
tiano por una decisión ética o una gran idea,
sino por el encuentro con un acontecimiento,
con una Persona, que da un nuevo horizonte
a la vida y, con ello, una orientación decisi-
va” (DA 243)
Con la certeza que ya expresamos de que los Proponemos:
catequistas debemos tomar la pedagogía de Que los catequistas en sus parroquias
Jesús, tal como el la hizo vida con los cami- SALGAN al encuentro de las familias, las
nantes de Emaús (Lc 24, 13-35) ESCUCHEN, y las ACOMPAÑEN para
que se encuentren con Jesús.
7
7. Vimos la necesidad de decir basta de
catequistas individualistas o que se cor-
tan solos. La falta de trabajo en equipo,
de una comunicación permanente, y de
evaluaciones compartidas en la Cateque-
sis Familiar, es un obstáculo a la renova-
ción de la Iniciación Cristiana
8. Vimos que humanizar más nuestras co-
munidades parroquiales, hacerlas más
cercanas y acogedoras, buscando junto
con las familias las respuestas a sus pre-
guntas actuales a la luz del proyecto del
Reino, les permitirá ser mejores instru-
mentos para la Iniciación Cristiana.
Visto que los catequistas que trabajan con
familias necesitan una formación sólida que
les permita ser acompañantes disponibles y
cercanos en el camino de la Iniciación Cris-
tiana
Con la certeza que Jesús nos dijo: “Les doy Proponemos:
este mandamiento nuevo: que se amen unos Conformar una auténtica “comunidad de
a otros. Ustedes se amarán unos a otros co- catequistas” en cada parroquia, compar-
mo yo los he amado. Y así reconocerán to- tiendo el trabajo y la alegría de nuestra
dos que ustedes son mis discípulos, si se vocación,
tienen amor unos a otros. (Jn 13, 34-36) y realizar encuentros de preparación de
cada encuentro catequístico con todo el
grupo de los catequistas de familias, y en
los mismos compartir, comentar y evaluar
comunitariamente la experiencia de los
encuentros realizados.
Con la certeza que “La familia es un valor Proponemos:
apreciado por nuestro pueblo. El hogar si- Que nuestras parroquias vivan una con-
gue siendo un lugar de encuentro de las per- versión pastoral que les permitan ser co-
sonas y en las pruebas cotidianas se recrea elmunidades vivas y el lugar privilegiado
sentido de pertenencia. Gracias a los afectos donde los fieles (incluidas las personas con
auténticos de paternidad, filiación, fraterni-discapacidad) vivan la experiencia concre-
dad y nupcialidad, aprendemos a sostenernos ta de encontrarse con Cristo.
mutuamente en las dificultades, a compren- Para propiciar esa conversión, realicemos
dernos y perdonarnos, a corregir a los niños en nuestras parroquias convivencias fra-
y a los jóvenes, a tener en cuenta, valorar y ternas para conocernos y amarnos, y así
querer a los abuelos y a las personas con poder amar e integrar.
capacidades diferentes” (NMA 43). Y que Porque una comunidad que vive como
“la familia, pequeña Iglesia debe ser, junto comunidad orante, fraterna y misionera,
con la parroquia, el primer lugar para la Ini-es el lugar de una catequesis nueva.
ciación Cristiana. Ella ofrece a los hijos un
sentido cristiano de existencia y los acompa-
ña en la elaboración de su proyecto de vida,
como discípulos misioneros” (DA 302)
Con la certeza de que “la capacitación de los Proponemos:
catequistas abarcará estos aspectos: el SER 1- Alentar la formación permanente del ca-
(madurar como persona y como creyente, tequista a través de equipos parroquiales,
para ser testigo de la fe y apóstol), el SA- con la participación del párroco y con un
BER (conocimiento del mensaje, del desti- coordinador que acompañe la madura-
8

Visto que enamorarnos de Jesús como cate-
quistas, y encontrarnos con El día a día en la
Palabra y la oración, nos hará creíbles para
invitar a las familias a que se encuentren con
El.
natario al que se dirige y del contexto social) ción del catequista y favorezca la inte-
y el SABER HACER (conocer la pedagogía gración catequistas/comunidad.
y la metodología catequísticas) . Además, el 2- Propiciar la participación en seminarios y
3er. Encuentro Nacional de Catequesis Fa- talleres itinerantes
miliar destacó que es necesario SABER ES- 3- aprovechar las instancias parroquiales y
TAR (acompañar, escuchar y compartir para diocesana de formación.
educar en la fe)”. CAFA para el Mundo de 4- Retiros para los catequistas ya con expe-
Hoy. Y que los catequistas deben tener “una riencia, que les aporten un fuerte acento
formación integral, kerygmática y perma- kerygmático.
nente (DA 279 5- Desarrollar criterios unificados a nivel
nacional para la formación tanto doctri-
nal como espiritual de los catequistas que
trabajen con familias.
Con la certeza de: Proponemos:
“que nuestros candidatos a ser catequistas, 1-Que los sacerdotes se formen en cateque-
siguiendo un proceso evangelizador, hagan sis para poder formar a los catequistas,
memoria de su propia iniciación cristiana y ayudándose para ello con otros catequistas
su encuentro con Jesucristo, profundicen s u formados.
fe y su compromiso de vida cristiana, por
medio de una renovada y sincera conver-
sión, en un
ambiente de comunidad cristiana, guiados
por un equipo formador en el cual todos son
Precisamente catequistas.” (LORCIC 64); y
que “las Parroquias deben ser lugares de
formación permanente” (DA 306)
Con la certeza de que “El catequista es antes Proponemos:
que nada un discípulo -testigo. Con una vida 1- Que los encuentros catequísticos integren
impregnada por el Espíritu Santo, abierta a claramente la Palabra de Dios y la Litur-
la Palabra como alimento y oración cotidia- gia, y que los catequistas vivan una co-
na: conocer la Escritura es conocer a Jesu- rrespondencia entre lo que guardan en su
cristo” (LORCIC 63); y que “No se co- corazón, y lo que nos propone la Palabra
mienza a ser cristiano por una decisión ética de Dios.
o una gran idea, sino por el encuentro con un 2- Que los catequistas nos respaldemos en la
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Visto que la crisis de la institución familiar
con la aparición de familias ensambladas,
familias monoparentales, familias divididas,
familias igualitarias, convivencias sin víncu-
los formales, como una realidad reconocible
y extendida, es un signo de nuestro tiempo
que nos exige una fuerte conversión pasto-
ral. Debemos, en lugar de juzgarlas, dar una
respuesta amorosa y audaz, acogiéndolos
cordialmente (con el corazón) y acompañán-
dolos al encuentro con el Padre. Sólo esta
conversión de nuestra actitud catequística
hará posible el camino de su Iniciación Cris-
tiana
acontecimiento, con una Persona, que da un oración compartida con la comunidad ca-
nuevo horizonte a la vida y, con ello, una tequística parroquial, nos propongamos
orientación decisiva” (DA 243) la docilidad al Espíritu, y recurramos a la
Adoración al Santísimo, para que el Se-
ñor genere vínculos de comunión y co-
municación que nos hagan vivir y trans-
mitir la ALEGRÍA DE LA PASCUA.
3- Promover en cada comunidad parroquial
encuentros que nos permitan conocer y re-
flexionar los documentos de la Iglesia.
Con la certeza que “Cuando el impulso del Proponemos:
Espíritu impregna y motiva todas las áreas 1- Que Obispos, Sacerdotes y laicos nos
de la existencia, entonces también penetra y pongamos en actitud de Conversión Pas-
configura la vocación específica de cada toral para ser más creíbles como Iglesia,
uno. Así se forma y desarrolla la espirituali- y para despertar nuestra vocación de co-
dad propia de presbíteros, de religiosos y munidad misionera y transmitir a Jesús a
religiosas, de padres de familia, …, de cate- nuestras familias.
quistas, etc.” (DA 285)
Con la certeza de que debemos ser como el Proponemos:
Padre Misericordioso de la parábola (Lc 15, 1-Desarrollar criterios pastorales que permi-
11-32), que recibe, abraza y hace fiesta; y tan dar una respuesta a las necesidades
que debemos aplicar la pedagogía de Jesús de las familias que hoy son excluidas,
que (como en el camino a Emaús) se acerca para que puedan tener una inclusión cor-
a los atribulados, camina con ellos, ilumina dial y PLENA en toda la vida de nuestras
sus vidas con su Palabra, y comparte con comunidades parroquiales
ellos el pan (Lc. 24, 3-35) 2- Darle impronta misionera y kerygmática a
la catequesis, visitando los hogares fami-
liares, convocando para la bendición de
embarazadas, y celebrando junto con las
familias los aniversarios de bautismos.
Con la certeza de que "Los padres de fami- Proponemos:
lia son los primeros educadores de la fe " de 1- La Catequesis Familiar debe ser promovi-
sus hijos. Por medio de la Catequesis Fami- da en TODO el país, ser una opción
liar se trata de ayudarlos a cumplir su mi- 2- A través de una renovada Iniciación Cris-
10

Visto que el acompañamiento comprometi-
do de la comunidad al catequista y a las
familias, recibiéndolas, animándolos y va-
lorando su proceso catequístico, enriquece
a la comunidad y promueve una nueva ca-
tequesis más propiciadora de la Iniciación
Cristiana de las mismas
Visto que es necesario que los catequistas
que trabajan con familias, y en particular
los que lo hacen en la Catequesis Familiar,
conozcan la realidad de cada una de ellas, y
sión . Por eso, la participación de la familia tiana, darle más fuerza a la catequesis
en la Catequesis Familiar es absolutamente bautismal y matrimonial y reforzar el va-
necesaria . Sólo así esta será "un espacio lor de la familia, aprovechando las rique-
donde el Evangelio es transmitido y desde zas que nos da la metodología de la Ca-
donde este se irradia ", cualquiera sea la tequesis Familiar.
modalidad de familia en la que vivan los 3- Involucrar a toda la comunidad parroquial
niños. (CAFA para el mundo de hoy 35), y a su pastoral en el proyecto de Renovar
que “La familia, patrimonio de la humani- la Iniciación Cristiana utilizando la cate-
dad, constituye uno de los tesoros más va- quesis familiar.
liosos” (DA 302), y que La familia cristia-
na, Iglesia doméstica, es un lugar de inicia-
ción que tiene un carácter único (LORCIC
50)
Con la certeza de que “Tu tienes compasión Proponemos:
de todos, porque todo lo puedes” y “Tu 1- Hacernos prójimos de estas familias
amas todo lo que existe, y no aborreces na- “irregulares”, con la actitud del Buen
da de lo que has hecho; de lo contrario Samaritano: acercarnos, hacernos cargo,
¿cómo lo habrías creado? responder por ellos, para que puedan co-
nocer el amor del Padre y compartir la
vida de nuestras comunidades parroquia-
les.
Con la certeza de que “por momentos, se Proponemos:
vive en el seno de nuestras comunidades 1-Una articulación de la catequesis con las
una cierta incapacidad para trabajar unidos, otras áreas pastorales, que la vinculen
que a veces se convierte en una verdadera particularmente con Liturgia y con los
disgregación. Por consiguiente, se pierden servicios que la parroquia preste a los
tiempo y esfuerzos en preocupaciones pe- más necesitados de su área geográfica.
queñas que desgastan las relaciones entre
los agentes pastorales y restan energías a la
causa de la evangelización” (NMA 46)
Con la certeza que los catequistas debemos Proponemos:
tomar la pedagogía de Jesús, tal como el la 1- Que los catequistas en sus parroquias
aplicó con los caminantes de Emaús (Lc 24, SALGAN al encuentro de las familias,
13-35) las ESCUCHEN, y las ACOMPAÑEN
11
 establezcan un vínculo estrecho para poder
acompañar a sus integrantes al encuentro
con Jesús que es la Iniciación Cristiana.
Visto que la Catequesis Familiar con sus
luces y sombras es una herramienta pastoral
valiosísima, adecuada y una oportunidad
única para la iniciación o reiniciación de las
familias en la vida cristiana. Es un modo de
catequesis que promueve y acerca la Inicia-
ción Cristiana
Visto que humanizar más nuestras comuni-
dades parroquiales, hacerlas más cercanas y
acogedoras, buscando junto con las familias
las respuestas a sus preguntas actuales a la
luz del proyecto del Reino, les permitirá ser
mejores instrumentos para la Iniciación Cris-
tiana.
para que se encuentren con Jesús.
Con la certeza que “la catequesis familiar Proponemos:
ha ayudado mucho a esta tarea de iniciación 1- Que se haga una revisión profunda y
cistiana, y es un instrumento de integración honesta de los contenidos y la metodo-
familiar, tanto hacia adentro de la misma logía de los encuentros para trabajar con
familia como dentro de la comunidad cris- familias, propiciando material que tenga
tiana” (DA XXX) en cuenta fuertemente la realidad que vi-
ven en todos sus aspectos. Y que esto sea
hecho con la participación de todos los
niveles eclesiales que participan en la ca-
tequesis.
2- En esa revisión, trabajar con contenidos
que respondan a las nuevas conforma-
ciones familiares.
3- Que los encuentros promuevan efectiva-
mente el encuentro de las familias con
JESUS.
Con la certeza que “La familia es un valor Proponemos:
apreciado por nuestro pueblo. El hogar si- 1- Que nuestras parroquias vivan una con-
gue siendo un lugar de encuentro de las per- versión pastoral que les permitan ser
sonas y en las pruebas cotidianas se recrea comunidades vivas y el lugar privile-
el sentido de pertenencia. Gracias a los giado donde los fieles (incluidas las
afectos auténticos de paternidad, filiación, personas con discapacidad) vivan la
fraternidad y nupcialidad, aprendemos a experiencia concreta de encontrarse con
sostenernos mutuamente en las dificultades, Cisto.
a comprendernos y perdonarnos, a corregir 2- Para propiciar esa conversión, realizar en
a los niños y a los jóvenes, a tener en cuen- nuestras parroquias convivencias fra-
ta, valorar y querer a los abuelos y a las ternas para conocernos y amarnos, y así
personas con capacidades diferentes” poder amar e integrar, viviendo como
(NMA 43). Y que “la familia, pequeña Igle- comunidad misionera.
sia debe ser, junto con la parroquia, el pri-
mer lugar para la Iniciación Cristiana. Ella
12

Visto que la catequesis integrada con la Li-
turgia promueven la Iniciación Cristiana.
Las misas convocando a las familias y reci-
biéndolas cordialmente renuevan el camino
de esta Iniciación
Visto que para promover la Iniciación Cris- Con la certeza que la experiencia demuestra
tiana, la Catequesis Familiar no puede ser que los efectos positivos de la Catequesis
responsabilidad sólo de los catequistas
ofrece a los hijos un sentido cristiano de
existencia y los acompaña en la elaboración
de su proyecto de vida, como discípulos mi-
sioneros” (DA 302)
Con la certeza que “ La parroquia es el lugar
más significativo en el que se forma y ma-
nifiesta la comunidad cristiana. Ella está
llamada a ser casa, escuela y taller de co-
munión, donde los miembros del Pueblo de
Dios disciernen y asumen su vocación de
discípulos misioneros. Ella es el ámbito or-
dinario donde se nace y se crece en la fe”
(LORCIC 51). Y que “La renovación de las
parroquias exige reformular sus estructuras,
para que sea una red de comunidades y gru-
pos, capaces de articularse logrando que sus
miembros se sientan y sean realmente
discípulos y misioneros de Jesucristo en
comunión”
Con la certeza que Jesús, con su pedagogía,
en el camino a Emaús se acerca a los atribu-
lados, camina con ellos, ilumina sus vidas
con su Palabra, y comparte con ellos el pan
(Lc. 24, 3-35)
Familiar son proporcionales al convenci-
miento, entusiasmo y preparación de sus
agentes, incluyéndolos a todos (obispos,
sacerdotes, catequistas, etc.) (CAFA para el
mundo de hoy 33)
13
Proponemos:
1- Convertirnos pastoralmente como comu-
nidades parroquiales, y vivir el Misterio
de la Encarnación de este Dios que qui-
so “abajarse” hasta nosotros para que lo
sintiésemos Padre cercano
Proponemos:
1- Cambiar el estilo de nuestras misas, para
que sean más cercanas a nuestra realidad,
más alegres, con homilías que contemplen
como alumbrar toda la realidad de nues-
tras familias, y con un modo litúrgico que
facilite la integración participativa del
pueblo.
Proponemos:
Que se formule en plan pastoral orgánico y
detallado donde en lo catequístico se de
centralidad a la Iniciación Cristiana, y con
el que se comprometa toda la Comunidad
Eclesial (Obispos, Sacerdotes, Catequistas
y las comunidades parroquiales)
Visto que dijimos “Basta de catequistas in-
dividualistas o que se cortan solos. La falta
de trabajo en equipo, de una comunicación
permanente, y de evaluaciones compartidas
entre Coordinadores, Matrimonios Guías y
Catequistas de chicos en la Catequesis Fami-
liar, es un obstáculo a la renovación de la
Iniciación Cristiana”
Con la certeza que Jesús nos dijo “Les doy Proponemos:
este mandamiento nuevo: que se amen unos 1- Conformar una auténtica “comunidad de
a otros. Ustedes se amarán unos a otros co- catequistas” en cada parroquia, compar-
mo yo los he amado. Así reconocerán todos tiendo el trabajo y la alegría de nuestra
que ustedes son mis discípulos: si se tienen vocación.
amor unos a otros” (Jn 13, 34-36) 2- Realizar encuentros de preparación de
cada encuentro catequístico con todo el
grupo de los catequistas de familias, y en
los mismos compartir, comentar y eva-
luar comunitariamente la experiencia de
los encuentros realizados.
14
Comisión 3: Iniciación Cristiana y Comunidad
Desde la Situación
Visto que…
9. Visto que nuestras comunidades no son
acogedoras y no dan testimonio evangé-
lico.
10. Visto que todo el camino de la ini-
ciación cristiana tiene carácter esencial-
mente comunitario, parte de la comuni-
dad y conduce hacia la comunidad.
11. Visto que la catequesis de iniciación
cristiana está aislada del contexto pasto-
ral de la comunidad.
Visto que a los catequistas nos falta la ad-
hesión y la conversión personal a Jesús.
Visto que hay catequistas que no buscan su
formación permanente y no celebran los
sacramentos.
Visto que reconocemos nuestra debilidad en
la espiritualidad personal y comunitaria.
Desde la Iluminación Desde los anhelos
Con la certeza que… Proponemos…
Con la certeza que una de las metas de la Proponemos propiciar desde la iniciación
catequesis es la construcción de la comuni- cristiana una comunidad con gestos y ras-
dad. (DP 992 y Hch. 2, 42-47) gos maternales.
Con la certeza que la catequesis anima y Proponemos formar comunidades que
capacita al cristiano para vivir en comuni- creen vínculos, celebren, vivan y anun-
dad. (DCG 86) cien la presencia de Jesús Resucitado a
través de una liturgia festiva, la oración y
la Palabra.
Con la certeza que la catequesis de inicia- Proponemos integrar la catequesis de ini-
ción forma parte de las actividades pastora- ciación orgánicamente a la actividad y
les de la Iglesia-comunidad. (CT 3 y 18) vida comunitaria, dejándonos iluminar
por el Espíritu para colaborar y generar
los espacios que la hagan posible.
Con la certeza que necesitamos tener espíritu Proponemos crear espacios de oración y
de oración, ser amantes de la Palabra, fre- formación permanente.
cuentar los sacramentos e insertarnos en la
comunidad. (Ap. 292)
Con la certeza que la vida entera de Cristo Proponemos fomentar el crecimiento espiri-
fue una continua enseñanza, solamente en la tual del catequista a través de la oración,
íntima comunión con Él los catequistas en- reflexión, para un encuentro personal con
contrarán la luz y fuerza para una renova- Jesús.
ción auténtica y deseable de la catequesis.
(CT 9)
Con la certeza que conocer a Jesús por la Fe Proponemos fortalecer nuestra espiritualidad
es nuestro gozo, seguirlo es una gracia y ser mediante la oración personal y comunitaria
eco de su voz es un encargo del Señor. Que (celebraciones, retiros, encuentros de forma-
“la Palabra” nos enseña cómo podemos for- ción) centrada en Cristo Resucitado, de la
15

Visto que la transformación personal hace
posible la transformación comunitaria casi
por añadidura.
Visto que necesitamos un nuevo catequista
que reconozca que su misión es un camino y
asume la vitalidad de integrarse a la comu-
nidad.
Visto que a veces no reconocemos nuestra
identidad de catequista.
Visto que los catequistas reconocen que su
misión es un camino, un proceso vital y per-
manente.
Visto que la comunidad cerrada no es inicia-
dora.
talecernos en el camino de la Fe. (Ef. 6,10- mano de nuestra madre la Virgen María,
20) para que la Iniciación Cristiana de frutos en
la comunidad.
Con la certeza que es el Espíritu Santo quien Proponemos organizar momentos que brin-
da la gracia de la Fe, la fortalece y la hace den una experiencia profunda de encuentro
crecer en la comunidad. (CATIC 1102) personal con Jesús por medio de retiros, ex-
Dios para revelarse a la persona humana posición del Santísimo, movimientos ca-
utiliza una pedagogía, se sirve de aconteci- rismáticos, seminarios de vida, encuentros
mientos y palabras humanas para comunicar bíblicos, etc.
su designio y lo hará progresivamente por
etapas. (DCG 38)
Con la certeza que catequesis es el conjunto Proponemos fortalecer los equipos de cate-
de los esfuerzos realizados en la Iglesia para quesis en donde los catequistas sean acogi-
hacer discípulos, para ayudar al hombre a dos fraternalmente y se sientan valorados e
creer en Jesús y así construir el cuerpo de incluidos en la comunidad parroquial.
Cristo. (CATIC Prólogo 4 – CT 1-2)
La catequesis no puede disociarse del con-
junto de actividades pastorales y misionales
de la Iglesia. (CT 3-18)
… acompañemos a nuestros hermanos en el
proceso comunitario de nuestra Fe. (JEP 64)
Con la certeza que Cristo nos sigue llaman- Proponemos no desanimarnos en nuestra
do y eligiendo. (Mc. 6, 7) tarea catequística y ser agentes de esperanza.
Con la certeza que la vida entera de Cristo Proponemos una formación integral, doctri-
fue una continua enseñanza, solamente en nal, metodológica y espiritual, centrada en la
íntima comunión con Él los catequistas en- Sagrada Escritura y con un acompañamiento
contrarán la luz y la fuerza para una renova- incondicional de los sacerdotes de cada co-
ción auténtica y deseable de la catequesis. munidad.
(CT 9)
Con la certeza que la Iglesia se manifiesta Proponemos realizar acciones concretas co-
como una madre que sale al encuentro, una munitarias, de misión (que muestren interés,
casa acogedora, una escuela permanente de acompañamiento hacia el otro en la inicia-
comunión misionera. ción cristiana).
(Ap. 370)
16
Visto que la catequesis no puede disociarse
del conjunto de actividades pastorales y mi-
sionales de la Iglesia.
Visto que no existe una pastoral orgánica.
Visto que una pastoral orgánica es el marco
necesario e infaltable para la catequesis, sin
él la catequesis puede convertirse en un es-
fuerzo vano o al menos desorientado. Esto
ha sido uno de los problemas de nuestra ca-
tequesis, estar aislado del contexto pastoral
de la comunidad.
Visto que una pastoral orgánica es el marco
necesario e infaltable para la catequesis.
Visto que por el bautismo y la confirmación
somos llamados a ser discípulos y misioneros
de Jesús y entramos a formar parte de la
Iglesia.
Con la certeza que el magisterio de la Iglesia Proponemos la implementación de una pas-
recomienda en sus diversos documentos toral orgánica cristocéntrica.
(Ap., NMA, etc.).
Con la certeza que tenemos por delante la Proponemos concretar un proyecto pastoral
apasionante tarea de hacer renacer el celo orgánico.
evangelizador…que desarrolle su misión de
un modo armónico integrado en el proyecto
pastoral de la diócesis (NMA 70).
La catequesis no puede disociarse del con-
junto de actividades pastorales y misionales
de la Iglesia.
(CT 3-18)
El proyecto pastoral es el marco necesario e
infaltable para la catequesis, sin él la cate-
quesis puede convertirse en un esfuerzo va-
no o al menos desorientado.(Lineamientos 7)
Con la certeza que la IC es ante todo una Proponemos que a nivel de consejo pastoral
iniciativa de Dios e interacción eclesial y se promueva el trabajo en red integrando los
concierne a toda la comunidad (Lineamien- distintos servicios y movimientos de la pa-
tos 34/35) rroquia.
Una de las metas de la catequesis es la cons-
trucción de la comunidad (Puebla 992)
Tenemos por delante la apasionante tarea de
hacer renacer el celo evangelizador…que
desarrolle su misión de un modo armónico e
integrado en el proyecto pastoral de la dió-
cesis. (NMA 70)
Con la certeza que la catequesis anima y Proponemos crear juntas parroquiales de
capacita al cristiano para vivir en comuni- catequesis.
dad. (DCG 86)
Con la certeza que el Magisterio ha consta- Proponemos el segundo anuncio a través de
tado que un alto porcentaje de bautizados no la catequesis de adultos con espíritu misio-
siguen su proceso de conversión e inserción nero que provoque en los bautizados su sen-
en la comunidad cristiana. tido de pertenencia a la Iglesia.
17
 Visto que estamos en un cambio de época Con la certeza que a todos nos toca reco- Proponemos generar espacios de reflexión
con profundas transformaciones, es necesario menzar desde Cristo reconociendo que no se en parroquias, colegios, movimientos, para
provocar un proceso de conversión pastoral. comienza a ser cristiano por una decisión trabajar lo tratado en este congreso.
ética o una gran idea, sino por el encuentro
con un acontecimiento, con una persona que Proponemos la renovación de la modalidad
nos da un nuevo horizonte a la vida y con catequística.
ello una orientación decisiva. (Ap. 12)
Visto que todo camino de iniciación tiene Con la certeza que con la Fe empieza y se Proponemos promover el diálogo fraterno
carácter esencialmente comunitario, parte de desarrolla la comunidad de los creyentes. entre sacerdotes, religiosos y laicos en la
la comunidad y conduce a la comunidad. Es el Espíritu Santo quien da la gracia de la igualdad de los hijos de Dios para construir
Fe, la fortalece y la hace crecer en la comu- una verdadera comunidad Iglesia.
nidad. (CATIC 1102)
Con la certeza que la Iglesia atrae cuando
vive en comunión (Ap. 158).
Que la Iglesia se manifiesta como una madre
que sale al encuentro, una casa acogedora,
una escuela permanente de comunión misio-
nera. (Ap. 370).
Visto que hay escasa oración en comunidad Con la certeza que para que la comunidad Proponemos la creación en todas las parro-
de los distintos grupos parroquiales y énfasis acompañe al pueblo al modo de Jesús, en el quias junta parroquial de catequesis a fin de
en sus tareas específicas. camino de Emaús, los pastores que busquen lograr comunidad evangelizadora y com-
ser padres, amigos, hermanos, siempre abier- prometida.
tos al diálogo y dar respuesta a las distintas
realidades que se le presentan. (Ap. 188)
Visto que estamos y nos sentimos ante un Con la certeza que tenemos por delante la Proponemos la urgente unificación de crite-
verdadero desafío. El Documento de Apare- apasionante tarea de hacer renacer el celo rios pastorales coherentes.
cida nos habla de una necesaria conversión evangelizador que desarrolle su misión de un
pastoral para poder responder a esta tarea modo armónico e integrado en el proyecto
evangelizadora. pastoral de la diócesis. (NMA 70)
Visto que estamos ante la necesidad de un Con la certeza que conocer a Jesucristo por Proponemos que se implementen reuniones,
cambio…en la iniciación cristiana, en un la Fe es nuestro gozo, seguirlo es una gracia cursos, talleres, y seminarios para formar
estilo catecumenal, que deberá destacar la y trasmitir este tesoro a los demás es un en- catequistas con el perfil apropiado, integral,
acción de Dios, la acción comunitaria de la cargo que el Señor nos da al llamarnos y permanente, con estilo catecumenal.
Iglesia y la eficacia de la Palabra de Dios. elegirnos, nos ha confiado, por esto podemos
18
 asegurar que la exigencia de la formación en
la catequesis es una formación integral, doc-
trinal, metodológica y espiritual centrada en
la formación. “La Sagrada Escritura debe ser
el alma” (JEP, 102-103).
La IC exige una renovación de modalidad
catequística. (Ap. 293, CT 14,Hch. 8, 31;
Mt. 20, 19)
Visto que estamos ante la necesidad de un Trasmitir con amor, humildad, lo aprendido Implementar formación catequística de ini-
cambio…en la iniciación cristiana, en un en nuestra preparación como misioneros. ciación cristiana al estilo catecumenal a los
estilo catecumenal, que deberá destacar la (CT 4-27) seminaristas.
acción de Dios, la acción comunitaria de la
Iglesia y la eficacia de la Palabra de Dios.
La iniciación cristiana queda reducida a la Dios para revelarse a la persona humana Adecuar los tiempos cronológicos en la ca-
catequesis para recibir los sacramentos. utiliza una pedagogía: se sirve de aconteci- tequesis de iniciación cristiana de acuerdo al
Comunidad con una multitud sacramentali- mientos y palabras huma-nas para comuni- proceso de los catequizandos.
zada pero no convertida, no evangelizada. El car su designio; y lo hace progresivamente-
Sacramento es considerado el único objetivo te, por etapas. (DCG 38)
de concurrir a la catequesis. La mayoría de
las familias y jóvenes toman los sacramen-
tos como una cuestión social más que como
un compromiso espiritual. Recibidos, un
gran porcentaje se alejan de la parroquia e
incluso no asisten a Misa.
Visto que aún esperamos que las personas se Con la certeza del “Vayan entonces y hagan Proponemos generar acciones misioneras
acerquen a las parroquias en vez de salir en que todos los pueblos sean mis discípulos, permanentes, por ejemplo: visitas domicilia-
su búsqueda. Falta trabajo misionero de to- bautizándolos en el nombre del padre, del rias, boletín parroquial, centros misioneros
dos los grupos. Hijo y del Espíritu Santo.” (Mt. 28, 19) en lugares alejados, grupos de reflexión de la
Ser misionero es trasmitir la Fe y servir a la Palabra.
comunidad. (EN 24)
Visto que a pesar de los 25 años transcurri- Con la certeza que es necesario continuar Proponemos que los frutos de este congreso
dos desde el último congreso, las recomen- caminando juntos para una nueva evangeli- lleguen a todos los catequistas de la diócesis.
daciones del mismo no fueron conocidas por zación permanente.
los catequistas.
19
Comisión 4: Iniciación Cristiana y Piedad Popular
Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos
Visto que… Con la certeza que… Proponemos…
12. Visto que basta ya de negarle a las D. de Aparecida 264: La R.P. es una manera Para saber discernir y valorar la piedad
personas la piedad popular sino abrirle legítima de vivir la fe, un modo de sentirse popular, incluir en la formación de los
un camino nuevo para anticipar la aurora parte de la Iglesia y una forma de ser misio- catequistas el conocimiento de la religio-
neros. sidad popular.
La catequesis debe incluir contenidos de
religiosidad popular. Este aporte debe ser
dado por quienes expresan y viven esos
gestos
13. Visto que basta de celebraciones D. de Aparecida 263: La espiritualidad po- Incluir en la Liturgia la cultura propia de
alejadas de la piedad del pueblo sencillo. pular, es decir, una espiritualidad cristiana cada pueblo, por ejemplo teniendo en
que, siendo un encuentro personal con el cuenta la celebración en honor al cura
El rezo del vía crucis, las peregrinacio- Señor, integra mucho lo corpóreo, lo sensi- Brochero se ofrece (en las ofrendas) el
nes, el culto a Jesús sufriente, el perma- ble, lo simbólico, y las necesidades más con- poncho, el mate…
necer junto a María dolorosa son diferen- cretas de las personas. Es una espiritualidad Acoger la manifestación de fe de algunos
tes expresiones de la piedad popular… encarnada en la cultura de los sencillos, que,
no por eso, es menos espiritual, sino que lo pueblos (por ejemplo Gauchito gil, Difun-
es de otra manera ta correa), educándolas kerigmáticamen-
te, inculturando el Evangelio.
Promover la piedad popular con respecto
al Crucificado donde se une fe y vida.
Valorar la religiosidad popular como re-
servorio de la fe de nuestros pueblos que
se deja encontrar por Dios, que es el que
siempre tiene la iniciativa, sale al encuen-
tro, llama, convoca e invita.
Celebraciones simbólicas y creativas.
Visto que la religiosidad popular es una D. de Aparecida 263: La espiritualidad po- Proponemos que desde la realidad urbana,
forma de vida… y que necesitamos dejar pular, es decir, una espiritualidad cristiana se creen espacios físicos como fraternos
20
algunos criterios que devalúan la piedad que, siendo un encuentro personal con el donde se pueda compartir las experiencias de
popular… Señor, integra mucho lo corpóreo, lo sensi- fe de las raíces de los que vienen de otras
ble, lo simbólico, y las necesidades más con- provincias.
cretas de las personas. Es una espiritualidad
encarnada en la cultura de los sencillos, que,
no por eso, es menos espiritual, sino que lo
es de otra manera. Lc. 10,21
Visto que basta ya de negarle a las personas D. de Aparecida 258: El Santo Padre destaca Crear una pastoral de religiosidad popular en
la piedad popular sino a abrirla a un camino la rica y profunda religiosidad popular en la cada Diócesis.
nuevo para anticipar la Aurora cual aparece el alma de los pueblos latinoa-
mericanos. Invita a promoverla y protegerla
y merece todo nuestro cariño y respeto por-
que expresa su piedad y refleja la sed de
Dios.
Visto que La fe popular considera el bautis- Hch. 8, 26-40 Unificar criterios diocesanos para los sacra-
mo, como una gracia y un bien que no puede mentos.
faltar en una familia cristiana; además el Lineamientos de la Iniciación Cristiana n°
bautismo es lazo y vinculo que liga con un 51: Parroquia casa, escuela y taller de comu- Postbautismal: Crear una cartilla de Bautis-
parentesco muchas veces más fuerte y dura- nión, donde los miembros del Pueblo de mo, en la cual se ofrezcan acciones para que
dero que los vínculos de afecto o sanguíne- Dios disciernen y asumen su vocación de los padres realicen año a año con sus niños,
os… el ser compadres es un vínculo muy discípulos misioneros. al estilo de la diócesis de San Francisco (1
fuerte… año: señal de la cruz, 2 años: Padrenuestro,
D. de Aparecida 263: La espiritualidad po- festejar el día del Bautismo).
Basta de exclusión... sea porque no reúnen pular, es decir, una espiritualidad cristiana
algunas de las condiciones que ponemos en que, siendo un encuentro personal con el Unificar criterios para la catequesis Prebau-
nuestras comunidades para los sacramentos Señor, integra mucho lo corpóreo, lo sensi- tismal. Tiene que estar. No se puede admi-
o no puede cumplir con las exigencias canó- ble, lo simbólico, y las necesidades más nistrar un Sacramento sin la preparación
nicas o no puede asistir normalmente a nues- concretas de las personas. Es una espirituali- previa adecuada y bien preparada: 3 encuen-
tras reuniones, pero que sin embargo busca y dad encarnada en la cultura de los sencillos, tros previos según las posibilidades de cada
valora la gracia del Bautismo, se acerca a que, no por eso, es menos espiritual, sino parroquia.
Dios a través de los sacramentales (bendi- que lo es de otra manera.
ciones, agua bendita, oración por difuntos,
etc..)
Visto que el Evangelio encarnado en nues- Lc. 24, 13-35 (discípulos de Emaús) Que la catequesis sea desde la Palabra (Con
tros pueblos, esta Fe vivida preferentemente la Biblia).
21
por los pobres y sencillos pero que abarca a
todos los sectores sociales siendo a veces uno
de los pocos vínculos que reúne a los hom-
bres de nuestras naciones a pesar de estar
políticamente divididos…
Visto que la devoción mariana en sus distin-
tas advocaciones, que ha contribuido a
hacernos más conscientes de nuestra común
condición de hijos de Dios y de nuestra
común dignidad ante sus ojos, no obstante
las diferencias sociales étnicas y de cualquier
otro tipo.
El Evangelio encarnado en nuestros pueblos,
esta Fe vivida preferentemente por los pobres
y sencillos pero que abarca a todos los secto-
res sociales siendo a veces uno de los pocos
vínculos que reúne a los hombres de nuestras
naciones a pesar de estar políticamente divi-
didos…
Visto que basta ya de negarle a las personas
la piedad popular sino abrirle un camino
nuevo para anticipar la aurora
SENAC pág 46 anexo 2 (Pueblo que cami-
na): Latinoamérica moviliza distintos estra- Aportar un mayor conocimiento bíblico a las
tos sociales en festividades y peregrinacio- expresiones y formulaciones de la religiosi-
nes. Signo del pueblo que camina dad popular (por ejemplo incluir en el rezo
del rosario la reflexión bíblica de cada mis-
Directorio sobre la Piedad Popular n° 87-88 terio).
Promover la formación de grupos bíblicos
Promover la celebración de la Palabra domi-
nical en los lugares alejados de las Parro-
quias (Siendo protagonistas los laicos).
Lc. 10, 21 (Revelación a los pequeños). Rescatar la experiencia de fe de quien es
iniciado valorando sus expresiones religiosas
aprendidas en el seno familiar y en su comu-
nidad.
D. de Aparecida 264: La R.P. es una manera Para saber discernir y valorar la piedad po-
legítima de vivir la fe, un modo de sentirse pular, incluir en la formación de los cate-
parte de la Iglesia y una forma de ser misio- quistas el conocimiento de la religiosidad
neros. popular.
La catequesis debe incluir contenidos de
religiosidad popular. Este aporte debe ser
dado por quienes expresan y viven esos ges-
tos
22
 Visto que basta ya de manipulaciones ide- D. de Aparecida 264: La R.P. es una manera Disponer de recursos y medios para la difu-
ológicas, económicas, sociales y políticas de legítima de vivir la fe, un modo de sentirse sión de la fe de nuestro pueblo y para la for-
la devoción popular parte de la Iglesia y una forma de ser misio- mación (boletines, videos,…)
neros.
Visto que la devoción mariana en sus distin- Navegar Mar Adentro 58: Si de veras hemos Aprovechar las fiestas patronales, novenas,
tas advocaciones, que ha contribuido a contemplado el rostro de Cristo tenemos que peregrinaciones para catequizar con una
hacernos más conscientes de nuestra común saberlo descubrir en el rostro de aquellos con evangelización sistematizada acorde a lo
condición de hijos de Dios y de nuestra los que Él quiso identificarse celebrativo previo o durante el acontecimien-
común dignidad ante sus ojos, no obstante to (por ejemplo una misión, encuentro bíbli-
las diferencias sociales étnicas y de cualquier D. de Aparecida 300: Para el crecimiento en cos).
otro tipo. la fe, también es conveniente aprovechar
pedagógicamente el potencial educativo que Recuperar la figura de la Virgen María como
encierra la piedad popular mariana. discípula y primera misionera.
Descubrir el gesto humano de María en cada
advocación.
Rescatar a María como peregrina en la fe.
Visto que basta de religiosidad popular car- Jn. 17, 21 Generar una evangelización permanente y
gada de diversas idolatrías. formación.
Impulsar una religiosidad dignificante, ge-
nuina y liberadora para evitar las prácticas
que condicionan a la sociedad.

23
Comisión 5: Iniciación Cristiana y Signos de los Tiempos

Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos

Visto que… Con la certeza que… Proponemos…
14. El clamor de la gente por un mundo Dios escucha a pesar de que tuvieron acallar Una catequesis que inicia en el compro-
más justo, equitativo y fraterno estas voces (Mc.10,48) miso por la justicia, la solidaridad y la
ecología el cuidado de la cosa común
15. Hay una realidad multicultural y plu- Que la misión de la Iglesia es iluminar a Una catequesis que inicia en diálogo con
ri- religiosa todos (I Cor. 9,19-23) todos los sectores, haciendo suya la pro-
puesta honesta y valiente de Jesús y su
mensaje
16. Hay nuevas realidades en las que De que afectan al mundo entero (DA 34) Una CI que aborde y profundice con toda
estamos inmersos la comunidad en la nueva fisonomía de la
sociedad, no para repetir normas estable-
cidas sino para buscar el tratamiento pas-
toral adeucado.
Visto que….. con la certeza que… proponemos….

GRUPO A Mateo 28, 19-20 “Vayan y hagan…” Catequesis kerigmática

1. Ante una catequesis sacramentalista DA 299 “Las transformaciones sociales nos
y doctrinal presentan nuevos desafíos en la misión de Una nueva catequesis desde la escucha y el
2. Ante la falta de empatía construir el Reino…” amor

GRUPO B
1. Solo podemos ser catequistas si te-
nemos una fuerte experiencia de
Cristo
2. Suele darse con frecuencia autorita-
rismos e imposiciones
3. Dado el clamor de la gente que pide
comunidades abiertas e incluyentes
4. Dado que hay muchos cristianos sa-
Marcos 10, 46-52 “Sanación de Bartimeo. Partir de una conversión real personal y pas-
Jesús escucha, ama y sana. toral (ser signo de comunión)
DA 147 “Como hizo Jesús…”
Comunidades donde sus miembros: sacerdo-
Cristo fuente de vida plena, centro de la vida tes, coordinadores, catequistas…. Tengan
cristiana protagonismo, se de entre ellos el diálogo y
hagan un camino de búsquedas juntos
Reconocer que somos iguales en dignidad:
“En esto reconocerán que son mis discípu- La formación de comunidades Iglesias que
24
 cramentalizados no evangelizados
5. La madurez de la conciencia de los
laicos y la escases de sacerdotes
6. Dados los cambios de la sociedad y
la falta de formación familiar
7. El clamor de la gente es que le mos-
tramos un Dios lejano, que castiga.
El clamor de la gente por un mundo
más justo y equitativo, más fraterno
8. Dado el avance de la ciencia y la tec-
nología
9. Dado que se terminó la época de la
cristiandad
GRUPO C
1. Hay nuevas realidades sociales en las
que ya estamos inmersos, ellas hacen
que realicemos un replanteo de nues-
tra tarea catequística. Hay necesidad
de dar una respuesta a situaciones
que nos angustian, experimentando
impotencia e inseguridad en lo que
testimoniamos
2. Los sacerdotes cambian (asignación
de nuevos destinos).
3. La formación es importante y necesa-
ria y debe ser integral (intelectual y
espiritual).
4. La forma vertiginosa en que se modi-
fican las realidades del hombre hay
necesidad de escucha y acompania-
miento
GRUPO D
los, si se aman unos a otros” sean abiertas, acogedoras e inclusivas
De la misericordia de Dios les proponemos Formar comunidades pequeñas o de base
la formación de comunidades (Iglesia) que donde se pueda dar, con estilo catecumenal
sean abiertas, acogedoras e inclusivas
La creación de seminarios catequísticos dio-
Comunidad de comunidades DA 178-179 cesanos (con equipo itinerante)
Necesitamos de una sólida formación huma- Una catequesis encarnada que abarque la
na y cristiana dimensión social, sexual, económica, ciuda-
dana, familiar
El hombre debe ser salvado integralmente
Una Iglesia encarnada que haga suyo el cla-
Dios es amor. Se “encarnó” en el hijo mor del pueblo que cree conciencia de jus-
Somos templos del Espíritu Santo. “Nuestra ticia, solidaridad y de compromiso ecológi-
persona es valiosa, somos un tesoro en vasija co
de barro”
Tomar conciencia de los graves peligros que
La misión de la Iglesia es la de iluminar a su encierra la tecnología moderna: Internet,
pueblo M.C.S., adicciones, etc. buscando caminos
que iluminan la situación
Tomar conciencia que la Iglesia dejó de ser
paradigma de la sociedad, somos parte y
La misericordia de Dios alcanza a todos tenemos que aprender a delegar no con to-
dos los sectores, haciendo la propuesta va-
liente y honesta del mensaje de Cristo
Desde la Iglesia, que es madre y maestra se
instrumenten pautas de acompaniamiento a
estas situaciones. Trabajo planteado inclu-
Somos discípulos misioneros capaces de yendo a los agentes de pastoral.
formar comunidades que comunican
25
1. Existe insuficiente formación en los
sacerdotes para acompañar específi-
camente en catequesis
2. Vemos comunidades encerradas en si
mismas
3. Nos encontramos con las limitacio-
nes de los catequizandos, sin hacer-
nos una adecuada autocrítica
4. Hay administración de sacramentos
sin evangelización
Estamos convencidos de que el Espíritu obra Se integren respetando la comunidad, refor-
en el compromiso que asume cada catequista mando con consenso y caridad.
La Iglesia debe acoger a todos y acompa- La formación tiene que ser convocada y
niarlos en el gozo y la esperanza, el dolor y propuesta por los sacerdotes de las comuni-
la angustia de los hombres de este tiempo dades con mayor frecuencia iluminándola a
la luz del CV II
Es necesario un acompañamiento catequísti-
co desde el CV II Que estos Congresos se realicen cuando la
realidad lo requiera.
Debemos asumir el espíritu misionero,
aprender a salir al encuentro del hombre de Formar al sacerdote en los seminarios inclu-
hoy, ofrecerle la buena noticia de Cristo yendo en la curricula el área catequística
Jesús. Anunciar el kerigma
La búsqueda de una catequesis “encarnada” Propiciar comunidades que se reúnan en
de verdad, que parte de la esperanza y se torno a la Palabra en casas de familias y que
articula con la vida cotidiana se mantengan unidas a la Parroquia
Profundizaremos en la evangelización respe- Crear espacios formativos permanentes, in-
tando la madurez en la fe, logrando poten- tegrales, periódicos para fomentar la comu-
ciar valores y riquezas de las familias y des- nidad catequística en aras de la preparación
pertar la conciencia de la urgencia de su pro- de los encuentros y/o la formación de di-
tagonismo en su rol en la Iglesia mensiones específicas
Concretar el ICP formando comunidades
específicas a partir de la preparación para el
Bautismo, acompañados por un catequista
que guíe todo el proceso de maduración en
la fe hasta su inserción en la vida de la Igle-
sia
26
Comisión 6: Iniciación Cristiana de Adultos y Jóvenes

Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos

Visto que… Con la certeza que… Proponemos…
17. La catequesis implica una transfor-  Ser testigo del Resucitado genera una La catequesis necesita de un catequista
mación, como tal, un cambio profundo: transformación de la vida personal y comu- testigo, fruto del encuentro personal con
conversión y esto se produce porque nitaria Cristo y con la formación adecuada
primero se dejó arrastrar por Jesús y lue-  El conocimiento de Cristo es fruto de
go arrastrará a otros. Este “arrastre trans- una experiencia de encuentro kerigmático en
formador” es una ocasión personal y el que el saberse amado por Dios genera la
comunitaria. necesidad de conocerlo y saber más de Él
18. El catequista, vivencia la alegría  Tenemos la certeza que Cristo está Para una catequesis que es proclamación
propia de quien cree y espera. Y la alegr- anunciando el Reino. Un Reino de tal impor- y anuncio, encuentro y conversión, fe y
ía arde y se propaga en uno mismo, en tancia que todo lo demás es relativo compromiso, proponemos catequistas que
un grupo, en una comunidad  El Espíritu Santo asiste y ha hecho tengan una comunidad de pertenencia
resonar su voz, sobre todo en épocas de pro- donde alimentar su fe y su vinculo con la
fundo cambio Palabra de Dios
19. La Catequesis es parte del ministerio  La Palabra de Dios es fuente y fun- Una catequesis encarnada, vivencial don-
de la Palabra. Es servicio a la Palabra damento de la Iniciación cristiana de la palabra sea el eje
con una identidad propia: proclamación
y anuncio, encuentro y conversión, fe y
compromiso.
20. Un catequista sin vivencia de la Pas-  Ser testigo del Resucitado genera una Que cada Parroquia asuma la formación
cua, sin creer en resurrección, no puede transformación de la vida personal y comu- integral de sus catequistas (conversión
por lo tanto, dar Amor, ni Fe, ni Espe- nitaria personal y formación bíblica )
ranza cristiana
21. La Catequesis como misión infruc-  Existe la necesidad de cambiar la Queremos un estilo de catequesis catecu-
tuosa: que no crece y no hace crecer, que propuesta pastoral de acuerdo a los cambios menal por eso proponemos realizar itine-
no da frutos ni los comparte, que no de la realidad. Propuesta: el catecumenado, y rarios catequísticos que integren y que
transforma y es liviandad y mera apa- para esto necesitamos un catequista nuevo, lleven a un encuentro kerigmático, vital,
riencia, que no exige compromiso ni que sabe de su necesidad de conversión personal y comunitario con Jesucristo, a

27
 amor ni verdad
22. La vida actual tanto de los adultos
como de los jóvenes y niños, es tan ver-
tiginosa y llena de actividades que se
pierde de vista lo esencial y verdadera-
mente importante, lo que vale la pena y
da sentido, corriendo el riesgo de vivir
en el relativismo del “todo depende de y
todo vale”
Visto que…
Luces
1. La catequesis implica una transforma-
ción, como tal, un cambio profundo:
conversión y esto se produce porque
primero se dejó arrastrar por Jesús y lue-
go arrastrará a otros. Este “arrastre trans-
formador” es una ocasión personal y
comunitaria.
2. El catequista tiene la certeza que Dios
cumple lo que promete, por lo tanto, vi-
vencia la alegría propia de quien cree y
espera. Y la alegría arde y se propaga en
uno mismo, en un grupo, en una comu-
nidad
3. La Catequesis es parte del ministerio de
la Palabra. Es servicio a la Palabra con
una identidad propia: proclamación y
anuncio, encuentro y conversión, fe y
compromiso.
Sombras
1. Un catequista sin vivencia de la Pascua,
sin creer en resurrección, no puede por
lo tanto, dar Amor, ni Fe, ni Esperanza
través de la oración, el compartir de la
vida y la celebración de los sacramentos.
 La Iglesia es Madre que gesta y Conocer la realidad y cultura juvenil, pa-
acompaña ra desde allí atraerlos con propuestas de
 El fin definitivo de la catequesis es acciones concretas que los lleve a una vi-
poner a la persona no sólo en contacto sino vencia de la fe
en Comunión e intimidad con Cristo (CT 5)
Con la certeza que… Proponemos…
 Existe la necesidad de cambiar la 1. Tomar conciencia y dar los pasos necesa-
propuesta pastoral de acuerdo a los rios para que la catequesis de estilo cate-
cambios de la realidad. Propuesta: el cumenal sea una realidad en la Argentina
catecumenado, y para esto necesita- (DA 294)
mos un catequista nuevo, que sabe de 2. La catequesis necesita de un catequista
su necesidad de conversión testigo, fruto del encuentro personal con
 La iniciación cristiana tiene su origen Cristo y con la formación adecuada
en la iniciativa divina y supone la 3. Asumir la catequesis al estilo catecume-
decisión libre de la persona. Cate- nal requiere una conversión pastoral de
cumenado parte de la Comunidad y los agentes y de la comunidad para reci-
debe tener como fin integrar al ca- bir, alojar y dar espacios de participación
tecúmeno a la Comunidad a los neófitos y a los que finalizan su
 Tenemos la certeza que Cristo está proceso de iniciación
anunciando el Reino. Un Reino de tal 4. Proponemos afianzar la dimensión mi-
importancia que todo lo demás es re- sionera de la catequesis de cada comuni-
lativo dad, y a partir de ella implementar estra-
 El Espíritu Santo asiste y ha hecho tegias que ayuden a las personas a en-
resonar su voz, sobre todo en épocas contrarse con Jesús.
de profundo cambio 5. Promover encuentros para catequistas de
 La Iglesia es Madre que gesta y formación y espiritualidad.
acompaña 6. Concientizar que la catequesis es respon-
 La Palabra de Dios es fuente y fun- sabilidad de toda la comunidad, aunque
se delegue en algunas personas, traba-
28
 cristiana
2. La Catequesis como misión infructuosa:
que no crece y no hace crecer, que no da
frutos ni los comparte, que no transfor-
ma y es liviandad y mera apariencia, que
no exige compromiso ni amor ni verdad
3. La vida actual tanto de los adultos como
de los jóvenes y niños, es tan vertiginosa
y llena de actividades que se pierde de
vista lo esencial y verdaderamente im-
portante, lo que vale la pena y da senti-
do, corriendo el riesgo de vivir en el re-
lativismo del “todo depende de y todo
vale”
damento de la Iniciación cristiana
 Ser testigo del Resucitado genera una
transformación de la vida personal y
comunitaria
 El fin definitivo de la catequesis es
poner a la persona no sólo en contac-
to sino en Comunión e intimidad con
Cristo (CT 5)
 El conocimiento de Cristo es fruto de
una experiencia de encuentro ke-
rigmático en el que el saberse amado
por Dios genera la necesidad de co-
nocerlo y saber más de Él
 El catecumenado no es un método
pastoral, es función esencial de la
Iglesia.
29
jando en conjunto con los grupos parro-
quiales, promoviendo acciones comunes,
facilitando el diálogo, la solidaridad, …
7. Que los ministros ordenados asuman la
responsabilidad de conducir la cateque-
sis, compartiendo con los catequistas la
misión de acompañar la vida de la Igle-
sia.
8. oponemos…
9. Lograr una planificación catequística
unificada que acompañe las distintas eta-
pas de la vida y que perdure como obje-
tivo permanente
10. Comunión de sacerdotes, obispo y
laicos
11. Una catequesis encarnada, vivencial
donde la palabra sea el eje
12. Que la Comunidad genere espacios
de encuentro para descubrir a Cristo en
el servicio a los hermanos
13. Asumir la propuesta de catequesis de
iniciación cristiana en un itinerario cate-
quístico permanente que lleve a la co-
munidad a reconocerse catequística , pa-
ra que asuma gradualmente la responsa-
bilidad de vivir y compartir la fe
14. Que el sacramento de la reconcilia-
ción esté más presente en un contexto ce-
lebrativo del proceso catecumenal (NMI)
15. Que los sacerdotes propicien los es-
pacios formativos de sus catequistas,
acompañándolos en este proceso
16. Que haya un plan catequístico de
pastoral en cada diócesis que tienda a la
 unidad de la misma, inspire, fomente, y
aplique el estilo catecumenal, sin avasa-
llar la libertad de cada comunidad y ten-
ga en cuenta la riqueza de lo diverso
17. Asumir la propuesta de catequesis de
iniciación cristiana en un itinerario cate-
quístico permanente que lleve a la co-
munidad a reconocerse catequística , pa-
ra que asuma gradualmente la responsa-
bilidad de vivir y compartir la fe
18. Que el sacramento de la reconcilia-
ción esté más presente en un contexto ce-
lebrativo del proceso catecumenal (NMI)
19. Que los sacerdotes propicien los es-
pacios formativos de sus catequistas,
acompañándolos en este proceso
20. Que haya un plan catequístico de
pastoral en cada diócesis que tienda a la
unidad de la misma, inspire, fomente, y
aplique el estilo catecumenal, sin avasa-
llar la libertad de cada comunidad y ten-
ga en cuenta la riqueza de lo diverso
21. Queremos un estilo de catequesis ca-
tecumenal por eso proponemos realizar
itinerarios catequísticos que integren y
que lleven a un encuentro kerigmático,
vital, personal y comunitario con Jesu-
cristo, a través de la oración, el compartir
de la vida y la celebración de los sacra-
mentos.
22. Impulsar una catequesis con un fuer-
te compromiso de la comunidad que in-
tegre y acompañe con su testimonio fa-
voreciendo una transformación de vida
30
 en Cristo.
23. Proponemos una iniciación cristiana
misionera que profundice y hunda sus
raíces en la Palabra de Dios.
24. Para una catequesis que es proclama-
ción y anuncio, encuentro y conversión,
fe y compromiso, proponemos catequis-
tas que tengan una comunidad de perte-
nencia donde alimentar su fe y su vincu-
lo con la Palabra de Dios
25. La elaboración de líneas comunes de
trabajo en iniciación cristiana a nivel
diocesano y parroquial
26. Que la Parroquia asuma el catecume-
nado como una acción comunitaria
27. Que cada Parroquia asuma la forma-
ción integral de sus catequistas (conver-
sión personal y formación bíblica )
28. Enriquecer la formación catequística
de los sacerdotes
29. Generar espacios de encuentro fra-
ternos de oración y formación para cons-
truir la comunidad
30. Conocer la realidad y cultura juvenil,
para desde allí atraerlos con propuestas
de acciones concretas que los lleve a una
vivencia de la fe
31. Teniendo en cuenta que el adulto es
el primer destinatario de la catequesis
aprovechar el momento en que ellos se
acercan por distintas circunstancias para
suscitar el encuentro e invitarlos a acti-
vidades integradoras en la comunidad

31
Comisión 7: Iniciación Cristiana y Pastoral Orgánica

Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos

Visto que… Con la certeza que…
23. en la Iglesia de hoy los catequistas 1- El misterio de la trinidad es fundamento 1. Que es impostergable e imprescindible
son una presencia activa y entusiasta y
están convencidos que el ser, el saber
hacer y el hacer se gesta en comunidad.
La situación eclesial padece la consecuencia
de un individualismo y una fragmentación
pastoral que reclama una pastoral orgánica
con metas y criterios claros, que involucre y
comprometa a todos.
Proponemos…
de la comunidad y que no hay Iniciación poner en marcha una Pastoral Orgá-
Cristiana sin comunidad nica, elaborando un Proyecto Pastoral
Diocesano que asuma la Iniciación
Cristiana al estilo Catecumenal, para
hacer posible el ideal de Iglesia de
Comunión, en un itinerario perma-
nente de evangelización
2. Implementar un itinerario formativo
integral para todos, en forma particu-
lar para los clérigos, en orden de ser
protagonistas de una pastoral orgáni-
ca según el espíritu de la iniciación
cristiana y de la nueva evangelización.
desde los documentos pastorales del magis- Consensuar estructuras que permitan preci-
terio se insiste en la importancia y necesidad sar y armonizar las distintas acciones pasto-
de responder a estos desafíos. Desde hace rales en todos los niveles pastorales y juris-
diccionales
25 años la Propuesta realizada en el ultimo
CCN, sobre la necesidad de una pastoral
orgánica, no fue atendida. (Cfr. 127ss JEP)

La infecundidad de nuestra catequesis es una DA 286 “…una catequesis que inicie verda- Un itinerario formativo integral, para que los
falta de respuesta a las nuevas realidades, de deramente en la vida cristiana y este inte- catequistas sean realmente protagonistas en
profunda secularización y creciente indife- grada en la pastoral orgánica” todo el proceso (desde el diagnóstico hasta
la evaluación).
rencia religiosa .Además la catequesis no se
vincula a la Dios, reduciéndose a una cate- Formar a los clérigos con estos criterios

32
quesis pre sacramental; no tiene un buen
acompañamiento de sus pastores, disgrega
esfuerzos, y no busca una verdadera conver-
sión pastoral.

33
Comisión 8: Iniciación Cristiana y conversión pastoral
Desde la Situación
Visto que…
24. La fuerte intuición de que la cateque-
sis no empieza y termina sino que es
“proceso-itinerario-camino de madura-
ción en la fe” que dura toda la vida
25. En la práctica actual los sacramentos
de IC están separados
26. La catequesis necesita de la comuni-
dad y debe formar para la vida en comu-
nidad
La fuerte intuición de que la catequesis no
empieza y termina sino que es “proceso-
itinerario-camino de maduración en la fe”
que dura toda la vida
Desde la Iluminación
Con la certeza que…
Dios se manifiesta y nos elige en primer
lugar, y que debe hallar nuestra disponibili-
dad para poder obrar tal como aparece en la
conversión de Pablo (Hch, 9)
Como con Felipe, el Espíritu guía, el discí-
pulo “va” a cumplir la misión (Hch 8, 26 -
40 Felipe y el etíope)
El encuentro personal con Cristo lleva a la
conversión, esta al discipulado, que se mani-
fiesta en la vida en comunión y la misión
(Aparecida 278)
En el Nuevo Testamento y en la práctica
primitiva de la iglesia la IC estaba unificada
por el proceso del catecumenado , al final
del cual se recibían los tres sacramentos jun-
tos (Lc 24, 13-35 – 1 Jn, 38-40 – Puebla 12
– Dap 278)
La comunidad es el origen, lugar y meta de
la catequesis (DGC 254
Los discípulos de Emaús necesitaron en el
caminar que Jesús resucitado les explicara
las escrituras y partiera el pan (Lc 24 – Dap
298)
Dios siempre inspira con su Espíritu a al-
guien para que lo acompañe en el proceso de
la vida de fe (Hch 8, 26-40 y DAp 294 que
34
Desde los anhelos
Proponemos…
Proponemos que la catequesis de IC,
asumida como el modo ordinario de in-
troducir a la vida cristiana, recupere el
trayecto catecumenal y un talante misio-
nero con catequistas formados como
discípulos misioneros,
Proponemos que por la unificación del
proceso de preparación a los tres sacra-
mentos de Iniciación Cristiana se realice
el camino de la conversión pastoral
Proponemos que para la conversión pas-
toral la IC forme parte de la vida de la
comunidad y a su vez la comunidad se
involucre en el proceso catequístico
- Generando una fuerte conciencia de
este itinerario, podamos dialogar y enrique-
cernos entre todos los carismas que el Espí-
ritu ha suscitado en la Iglesia de hoy bus-
cando y compartiendo metodologías, accio-
nes y experiencias
- Que todos los miembros que forman el

En la práctica actual los sacramentos de IC
están separados
Una catequesis que se fundamenta en: la
Persona de Jesús, el Señor; la centralidad de
la Palabra de Dios; la participación gozosa
en la Eucaristía; la Comunidad cristiana co-
mo hogar donde se vive la fe; la Misión co-
mo fruto.
habla en la renovación catequística en la cuerpo de Cristo en la Iglesia estén en
parroquia) permanente conversión con corazón
abierto a la escucha y al acompañamiento
El mismo Jesús se acerca a los discípulos y del pueblo de Dios
sigue caminando con ellos (Lc 24, 13-35) y - Que toda acción catequística tenga pre-
que el encuentro debe renovarse constante- sente que la catequesis no empieza y ter-
mente por el testimonio personal (kerygma), mina en un mero ritual eucarístico sino
que no es sólo una utopía sino el hilo con- que es un proceso, camino de maduración
ductor de un proceso que culmina en la ma- en la fe, que dura toda la vida
durez del discípulo de Jesucristo (DAp 278) El proceso de IC sea asumido como el modo
Hch 9; conversión de Pablo ordinario de introducir en la vida cristiana a
Hch 8; Felipe y el etíope todos y no sea reducido sólo a la preparación
DAp 278 – 291 – 294 – 298 y 293 sacramental
La Parroquia ha de ser el lugar donde se Crear una catequesis por comunidades de
asegure la IC como tarea irrenunciable familias (concepto amplio como lo concibe
1 Jn 4-19 “Él nos amó primero” Aparecida); reiniciación del adulto, perseve-
Puebla 12: a todos nos toca recomenzar des- rancia en jóvenes., iniciación de niños, con
de Cristo uno o dos catequistas por cada comunidad
Lucas 24, 13-35 ¿No ardía acaso nuestro
corazón
En el Nuevo Testamento y en la práctica - Retomar la unificación de los sacra-
primitiva de la Iglesia la IC estaba unificada mentos de IC (el gran Sacramento con una
por el proceso del catecumenado, al final del única catequesis)
cual se recibían los tres sacramentos juntos
(lc 24 ;13-35 - 1 Jn 4 - Jn 1, 38-40 - Puebla
12; DAp 278
Sentíamos arder nuestro corazón cuando nos - Debe ser Cristocéntrica que se fun-
hablaba en el camino y nos explicaba las damenta en la persona de Jesús, en la Pala-
escrituras (lc 24, 13-35) bra de Dios, que tiene la celebración gozosa
Los discípulos de Emaús lo reconocen al en la Eucaristía, en la comunidad cristiana
partir el pan. Es la experiencia inicial de como hogar donde se vive y se madura la fe,
quien ha escuchado al Señor con admira- que tenga como fruto la misión
ción, cree en Él por acción del Espíritu San- - Que en la comunidad se fundamente
35

Una catequesis que se fundamenta en: la
Persona de Jesús, el Señor;
La onda conciencia de que el ser catequista
es un llamado que el Señor nos hace
La fuerte intuición de que la catequesis no
empieza y termina sino que es “proceso-
itinerario-camino de maduración en la fe”
que dura toda la vida
Tesoros y riquezas que contribuyen a la IC y
a la conversión pastoral
to, decide ser amigo e ir tras de Él (Lc 24, la catequesis en la persona de Jesús, la cen-
13-35 - Ap 278) tralidad de la palabra y de la eucaristía,
transformando su vida en discípulos misio-
neros.
- Insistir en la formación que ilumine
el camino y la vida de los catequistas
haciéndoles volver a la única fuente que es
la Eucaristía
- Impulsar una comunidad centrada en
la persona de Jesús donde se viva la fraterni-
dad
1 Jn 4 nos dice que Él nos amó primero y en Proponemos una catequesis orientada a la
Jn 15, 16 que ÉL nos eligió a nosotros. misión: mostrar el rostro paterno de Dios
DAp 278 nos propone el encuentro
Él nos amó primero (1 Jn 4 - Jn 15,16 – - La catequesis como un encuentro
DAp 289) gozoso con el señor de la historia y de nues-
tra historia
- Que los catequistas y agentes de pas-
toral teniendo el encuentro personal con
Jesús sea fructífero y renovado para dar tes-
timonio
Hch 9, así como Saulo es invitado a seguir a Una iglesia con espacios en la que los ca-
Jesús, comienza su catecumenado, es bauti- tecúmenos no se alejen luego de cada sacra-
zado y sigue hasta su muerte, vemos en Apa- mento ya que en ellos podía seguir desarro-
recida 289 que hay una urgencia por desarro- llando y acrecentando su fe
llar un proceso de IC que comience con el
kerygma y en Ap 288 que la catequesis es un
itinerario de toda la vida
Los obispos en Puebla nos dicen que la Igle- Impulsar una comunidad centrada en la per-
sia está dispuesta a evangelizar para contri- sona de Jesús, donde se viva la fraternidad
buir a una nueva sociedad más justa y frater- como testimonio de una iglesia atractiva
na (Puebla 12) Crear ámbitos de diálogo y apertura para que
Y en la que Juan 4 nos dice “ÉL nos amó se dé la acogida cordial, fraterna y miseri-
primero” cordiosa
36
 La ausencia de propuestas de catequesis evo- DGC 3º parte Cap II
lutiva
Búsqueda de una pastoral orgánica Hch 4, 42 la multitud de los fieles tiene un
mismo corazón y una misma alma
Lineamientos 29: una comunidad que asume
la IC renueva su vida cristiana y despierta su
carácter misionero
DAp 366 a 368: los obispos nos hablan de la
conversión pastoral y de la renovación mi-
sionera de las comunidades
Que hay una apertura a la formación perma- Que la Palabra de Cristo habite en uds con
nente toda sus riquezas (Col 3, 16)
La Iglesia busca la comunión respetando los Que la multitud de los creyentes está llama-
carismas da a tener un solo corazón y una sola alma
(Hch 4, 32 y DGC 254)
La realidad hoy nos pide una pastoral orgá- La diócesis debe impulsar una pastoral orgá-
nica para transformar la Iglesia nica, renovada (Jn 17,20) Que todos sean uno
como Tú estás en mí y yo en ti” y DAp 169
Realizar propuestas y orientaciones que
ayuden a una catequesis evolutiva
Que la Iglesia a través de sus pastores opten
decididamente por implementar la IC para
dinamizar con fuerza y audacia la fe en Jesús
Señor de la Historia
Promover la creatividad que ayude a propo-
ner un encuentro más fecundo con la perso-
na de Jesús
- Un proceso catequístico de madura-
ción en la fe que tenga como objetivo que las
personas y comunidades vivan en comunión
buscando a través del diálogo el respeto a los
distintos carismas
Generar espacios y tiempos de diálogo entre
las distintas áreas pastorales

La catequesis necesita de la comunidad y Lineamientos 20 y CT 24 “una comunidad En este proceso catequístico de la IC se in-
debe formar para la vida en comunidad. Por que asume la IC renueva su vida comunitaria volucre la comunidad pastoral, de manera
lo tanto toda la tarea debe estar involucrada y despierta su carácter misionero” que catequizados catequicen a sus hermanos
en el proceso catequístico y a su vez toda la haciendo de la catequesis tarea de todos
tarea debe ser constantemente catequizada Hch 4, 32, todos los creyentes que eran mu-
chos pensaban de la misma manera, todas las El proceso de itinerario catequístico perma-
cosas eran de todos nente en las familias lo lleva a la comunidad
pascual, comparten acontecimientos de vida
La iniciación cristiana supone la comunidad La comunidad es el origen, lugar y meta de - Generar una metodología que ayude
y vive para la comunidad la catequesis (DGC 254) a superar las separaciones que existen entre
fe y vida
- Que la catequesis debe formar parte
37
 La catequesis necesita de la comunidad y La comunidad es el origen, lugar y meta de de la vida de la comunidad y todo tema pas-
debe formar para la vida en comunidad la catequesis (DGC 254) toral estar involucrado en proceso catequísti-
co y toda acción catequística es acción de la
comunidad y todos los catequistas son parte
activa de la comunidad a la cual pertenecen
La búsqueda de auténtica comunión en la Mc 3, 13-15 Como Jesús llamó a los que Él Una comunicación fluida entre catequistas y
iglesia y de respeto por el camino de cada eligió y vinieron a Él para ser enviados el resto de la comunidad eclesial donde cada
uno: entre sacerdotes y catequistas, entre En CT 24: manifiesta la necesidad de unión uno acepte el carisma de los demás
obispos y sacerdotes, entre teólogos y cate- entre catequistas y comunidad eclesial
quistas, entre liturgistas y catequistas En Lineamientos 29 que muestra la necesi- Que la misión esté presente siempre en el
dad de una comunidad que asume la IC, re- quehacer catequístico
nueva su vida comunitaria y despierta el
carácter misionero
Tesoros que contribuyen a transformar las Que el CVII en LG 12 nos dice el mismo Fomentar espacios de participación, de todos
comunidades en comunidades pascuales en Espíritu Santo no solamente santifica y dirige los agentes pastorales respetando sus propios
las cuales la comunión las transforme y las al pueblo de Dios sino que los enriquece, carismas para enriquecernos mutuamente
convierta en transformadoras distribuyendo sus dones a cada uno según
quiere 1 Cor 12, 11 Impulsar espacios de formación con signos
pascuales para revalorar la fe viva que debe-
mos anunciar
Necesidad de una pastoral de conjunto Jn 17,20 El Señor pide que sean uno Una catequesis inserta en un plan de pastoral
Hch 4, 32 La multitud de los fieles tiene un diocesano
solo corazón y una sola alma
DCG 63 coloca a la catequesis como el mo-
mento esencial del proceso de evangelización
La falta de conciencia del valor infinito de la Hch 1, 42-47 Priorizar la Eucaristía dominical como lugar
Eucaristía de encuentro y catequesis de la comunidad

38
Las comunidades deben favorecer la inser- Que las comunidades de vida cristiana ofre- Que los distintos ámbitos pastorales sean
ción de nuevos miembros.. cen la integración de los que han celebrado abiertos, acogedores, sean casa donde todos
los sacramentos de la iniciación (Lineamien- se sientan escuchados y valorados
tos 46 – Hch 2, 42-47)
La práctica de la fe produce cambios, re-
Ef 4, 22-24 todos son prisioneros del pecado flexión, adhesión por contagio a todos sus
para que quienes creen en Jesús puedan re- miembros que se convierten respetando los
… dispuestos a aceptar una formación per- cibir lo que Dios ha prometido tiempos de cada persona, recordando que la
manente iglesia invita y Jesús es el que llama
Hay una búsqueda de pastoral de conjunto, En Hch 4, 32 la multitud de los fieles tiene La implementación pastoral orgánica que
de una unidad pastoral un mismo corazón y una sola alma posibilite la conversión pastoral, asumiendo
la historia y las características de cada dió-
cesis, en continuidad con los proyectos exis-
tentes evitando comenzar siempre de nuevo
Hay catequistas dispuestos a aceptar una En DAp 243 vemos que se empieza a ser Una iglesia cuyos sacerdotes y obispos junto
formación permanente cristiano por el encuentro como en Ef 4, 22- a catequistas promuevan y faciliten la for-
24, Cristo es el comienzo de una vida nueva mación permanente
y en 1 Cor 12,12 la iglesia que somos todos
los bautizados es el cuerpo místico de Cristo
Abren horizontes a un proceso de conversión Lineamientos 46 dice que las comunidades Favorecer una conciencia maternal de la
de vida cristiana han de ofrecer ámbitos que iglesia donde sus miembros se sientan inte-
posibiliten paulatina, libre y fraterna integra- grados a la misión de llevar a todos la buena
ción de los que han celebrado su IC y vien- noticia
do el modelo de las primeras comunidades
Hch 2, 42-47 Propiciar encuentros en la comunidad donde
a través de la oración se logre el encuentro
con Jesús vivo para lograr una conversión
sincera
La necesidad de una formación permanente En Jn 1, 35-51 los discípulos están deseosos
de seguir conociendo a Jesús Disponer al conocimiento de Dios desde el
DAp 243 se empieza a ser cristiano por un bautismo. Actualización a los tiempos pre-
acontecimiento sentes
NMA es urgente y se pierde tiempo en dis-
cusiones pastorales
39
Marcada tendencia al institucionalismo 1 Cor 12, 1-11 Comunidades que favorezcan una catequesis
kerygmática y carismática que contribuya al
desarrollo de la multiforme gracia en los
fieles
La iniciación cristiana supone la comunidad Uno de los ejes de los distintos documentos - Una iglesia atenta a las necesidades,
y debe formar para la comunidad del magisterio es la conversión pastoral cercana al pueblo, inserta en la realidad, que
(DAp 366, 368 – LG 46; Mt 9, 16-17) escuche, que acompañe y que ayude a des-
La búsqueda de auténtica “comunión” en la cubrir una vida nueva en Jesucristo.
Iglesia y de respeto por el carisma de cada Ef 4, 23-24 – Col 3, 16 - Coherencia y una toma de concien-
uno: entre sacerdotes y catequistas, entre cia en cuanto a nuestra responsabilidad co-
obispos y sacerdotes, entre teólogos y cate- Dios siempre inspira con su Espíritu para mo catequistas anunciadores de la palabra
quistas, entre liturgistas y catequistas que nos acompañe en el proceso de la vida - Que nuestras comunidades sean más
de fe (Hch 8, 26-40) Tal como dice en Apa- abiertas y puedan favorecer los distintos
Búsqueda de una pastoral de conjunto, de recida 294 que habla de la renovación cate- carismas que el Espíritu suscita, posibilitan-
unidad pastoral quística en la parroquia do el sentido de pertenencia a la misma
- Fomentar espacios de participación,
Que debemos convertirnos pastoralmente Que el CVII en LG 12 nos dice el mismo de todos los agentes pastorales respetando
Espíritu Santo no solamente santifica y diri- sus propios carismas para enriquecernos
ge al pueblo de Dios sino que los enriquece, mutuamente
distribuyendo sus dones a cada uno según - Impulsar espacios de formación con
Hay una actitud positiva de nuestra iglesia quiere signos pascuales para revalorar la fe viva
en los esfuerzos pastorales que debemos anunciar
Catequesis que nos lleve a "encontrarnos " Los apóstoles reunidos en el Concilio de Asumir una catequesis que profundice la
con Jesús, que nos renueva, nos convierte, Jerusalén deciden atender la situación plan- Doctrina Social de la Iglesia y la opción pre-
nos exige respuestas acordes con los tiempos teada por el ingreso de los paganos a la fe ferencial por los pobres
que vivimos porque su mensaje es siempre Los obispos en DAp 33 dicen que los discí-
vigente. pulos deben sentirse interpelados a discernir
los signos de los tiempos a la luz del evange-
lio y en DGC 17 se nos invita a profundizar
en la Doctrina Social de la Iglesia y la op-
ción preferencial por los pobres
Que como discípulos de Cristo nos sentimos - La catequesis que nos lleve a encon-
interpelados a discernir los signos de los trarnos con Jesús, que nos renueva, nos con-
tiempos a la luz del Espíritu Santo (DAp 33) vierte, nos exige respuestas acordes con los
40

Los esfuerzos pastorales orientados al en-
cuentro con Jesucristo y algunos esfuerzos
de renovación pastoral de nuestra parroquia
La comunidades que favorecen la inserción
de nuevos miembros y que brindan la posibi-
lidad de pertenencia a diferentes grupos:
bíblicos, misioneros, juveniles, etc
La necesidad y búsqueda de Dios, la avidez
de quienes se acercan a la catequesis bus-
cando conocer a JESUS
Catequesis que nos lleve a "encontrarnos "
con Jesús, que nos renueva, nos convierte,
nos exige respuestas acordes con los tiempos
que vivimos con actitud positiva de nuestra
iglesia en la necesidad y búsqueda de Dios
de todos los hombres
Catequesis que nos lleve a "encontrarnos "
con Jesús, que nos renueva, nos convierte,
nos exige respuestas acordes con los tiempos
que vivimos porque su mensaje es siempre
vigente.
De la misma manera el Señor ordenó a los tiempos que vivimos porque su mensaje es
que anuncian el Evangelio que vivan el siempre vigente
Evangelio - Proponemos una catequesis que con-
(Hch 9) La conversión de Pablo temple el encuentro con Jesús que nos re-
nueva, nos convierta en la realidad cotidiana
La pastoral de la Iglesia no puede prescindir Que la pastoral parroquial contemple una
del contexto histórico donde viven sus renovación de la catequesis que oriente hacia
miembros. Su vida acontece en contextos el encuentro con Jesús vivo
socioculturales bien concretos (Ap 367)
En LPNE 53 dice que es tarea de la comuni- Que las comunidades asuman su dimensión
dad acoger a sus miembros en un ambiente misionera proponiéndose llegar a todos y
donde pueda vivir lo aprendido organizar su vida de modo que todos se sien-
tan llamados y acogidos
MA 30: la oferta masiva de algunos sectores Una Iglesia abierta a las inquietudes de to-
que distorsionan la verdadera respuesta tien- dos que muestren el verdadero rostro de
tan al que busca a Dios y puede torcer su Jesús
camino
Salmo 63: el hombre busca ardientemente a Que crezcamos en una mirada positiva del
Dios mundo y de las personas descubriendo sus
valores, sus posibilidades, sus certezas, y
desde allí con creatividad mostrar la belleza
del llamado de Jesús y su seguimiento a
Jn 4, 8-21 Encuentro con la samaritana que Incluir en la comunidad a los que están vi-
para los judíos no eran aceptados y no tenían viendo en forma irregular
trato; Jesús le descubre su vida de pecadora
y se ofrece como agua viva
DAp 314: la catequesis comienza en la fami- Proponemos que los que no viven de acuer-
lia y continúa en la comunidad cristiana do a los modelos de familia cristiana puedan
Lineamientos 51, la parroquia es el lugar tener un lugar en la comunidad eclesial des-
más significativo en el que se forma y mani- de el cual puedan encontrar a Jesús y cami-
fiesta la comunidad nar con Él
41
Descubrimos señales y signos de su presen- Los obispos en DAp 243 nos exhortan a ser Promover el encuentro con Jesús para que
cia cristianos por el encuentro con Cristo y con los catequizandos perseveren en su segui-
el encuentro de la samaritana con Cristo Jn miento en todas las etapas de su vida
4, 1-7
Potenciar encuentros y celebraciones que
fortalezcan la comunión y el sentido de per-
tenencia
La necesidad de una catequesis que nos lleve DAp 33 como discípulos de Jesús nos sen- Formar cristianos sensibles al encuentro con
al encuentro con Jesús timos interpelados a discernir los signos de el pobre, abrir las puertas al ser humano,
los tiempos obra maestra de Dios
Salmo 63 (62) Señor Tú eres mi Dios, mi
alma tiene sed de Tí
La tendencia de cristiandad y adoctrinamien- Directorio 150 Que la catequesis muestre en primer lugar la
to belleza y seducción de Cristo y después
venga el adoctrinamiento
Que todos los miembros de la comunidad Tener una fuerte conciencia y claros objeti-
parroquial son responsables de la evangeli- vos que tiendan a implementar en nuestras
zación (DAp 171) comunidades el estado de misión permanen-
te propuesto por Aparecida
Actitud positiva de nuestra Iglesia: esfuerzos El verbo se hizo carne, no existe el mensaje - El mensaje debe ser ajustado a la
pastorales orientados al encuentro con Jesu- cristiano químicamente puro (DAp 33 – CT cultura de cada pueblo sin perder su identi-
cristo: animación bíblica, aprecio de nuestro 64 – NMA 391) dad
pueblo de los sacerdotes, entrega generosa - Que en la catequesis haya un discer-
de discípulos misioneros en nuestros pue- Sólo Jesús realiza la salvación por medio de nimiento de los signos de los tiempos para
blos, los esfuerzos de renovación pastoral los innumerables signos de los tiempos (EN responder a las distintas realidades y situa-
en nuestras parroquias, la doctrina social 12) ciones.
ilumina e impulsa numerosas experiencias - Un catequista atento a los cambios
solidarias laicales. DA 399 – NMA 391 – DA 391 – DA 367 culturales y sociales, a la tecnología y sus
avances a fin de que el anuncio sea creíble,
El escenario actual del mundo no es la cris- Que el CVII en LG 12 nos dice el mismo transformador y que impulse a la misión.
tiandad, sino más bien de pluralidad religio- Espíritu Santo no solamente santifica y diri- - Desde la catequesis llevemos a un
sa y cultural ge al pueblo de Dios sino que los enriquece,
distribuyendo sus dones a cada uno según encuentro personal con Jesús en las distintas
Descubrimos señales y signos de su presen- quiere situaciones que nos toquen vivir y así poder
cia leer los signos de los tiempos
42
 - La creación de espacios de reflexión,
escucha y acompañamiento a la búsqueda
desde la catequesis
- Fomentar espacios de participación,
de todos los agentes pastorales respetando
sus propios carismas para enriquecernos
mutuamente
- Impulsar espacios de formación con
signos pascuales para revalorar la fe viva
que debemos anunciar

43
Comisión 9: Iniciación Cristiana y catequista iniciador y su formación
Desde la Situación
Visto que…
27 Viendo que no hay experiencia en la
iniciacion en estilo catecumenal de los
catequistas.
28 La fuerte intuición de que la catequesis
no empieza y termina sino que es proce-
so, itinerario, camino de maduración en
la fe que dura toda la vida
Tesoros
Desde la Iluminación
Con la certeza que…
La iniciación cristiana, se refiere a la prime- a) Comunidades formadoras que acom-
ra iniciación en los Misterios de la fe"
Que anunciamos de lo que hemos visto y va al Padre en el Espiritu.
oído.. . 1jn. 1,1.3
Comunidades discípulas configuradas en
Xto. (CT.20)
La Iglesia crece no por proselitismo, sino hoy.
por atracción, por la fuerza del amor Ap. 159
Evangelizar es un acto o gesto Eclesial, en munitarios un estilo catecumenal y su cen-
unión con la Iglesia y en su nombre EN 60
En la conciencia de que ser discípulos Don
destinado a Crecer. Ap. 291
La samaritana paulatinamente, fue crecien-
do en la fe al encontrarse con Jesús JN 4, 1
– 44
Los discípulos de Emaús en el camino des-
cubrieron al Resucitado.LC 24, 13 – 35
Felipe fue explicando las Escrituras al Etío-
pe, que pidió ser bautizado Hech. 8, 26 – 40
Proceso Gradual Articulado, Acompaña-
44
Desde los anhelos
Proponemos…
pañen a los catequistas en un camino de
encuentro con Jesús Resucitado, que lle-
Encuentro kerigmatico-Pascual que
transforma la vida y lo impulsen a anun-
ciarlo. En diálogo profundo con el con-
texto cultural del hombre y la mujer de
b) Fomentar desde todos los espacios co-
tralidad en el kerigma.
c) Trabajos en red con otras comunidades
de catequistas.
a) Que las comunidades diseñen sus
itinerarios formativos permanentes de
acuerdo a su realidad: Seminarios itine-
rantes, retiros, etc.
b) Que el catequista iniciador sea
acompañado en su vida de fe por un foma-
dor que y lo guíe. un guía espiritual-

29 Itinerarios de Formación” como itinera-
rios de fe, como camino mistagógico,
que profundice la amistad con el Señor,
transforme la vida del catequista ayu-
dando a forjarlo como discípulo y mi-
sionero.
miento Para Toda La Vida. Lorcic Cap- IV.
4
Preparar a los catequistas en función del
ICP. JEP 115. 2.
Siendo la catequesis un camino de creci-
miento y maduración de la fe en un contex-
to comunitario eclesial que da sentido a la
vida”. CT17. JEP 50
Jesús nos muestra el camino: a) Fomentar en la formación una con-
Vengan y vean- JN.1,39 ciencia y una espiritualidad de comunión
que se expresen en una pastoral orgánica.
“La formación del discípulo se basa en la
docilidad al impulso del Espíritu, a su po- b) Incentivar y promover la creación
tencia de vida que moviliza y transfigura de seminarios de catequesis con una for-
todas las dimensiones de la existencia. Ap. mación integral que tengan, entre sus
Cap. 6,2 prioridades, la persona del catequista y el
Encuentro de éste con el Resucitado.
“Ahora creemos, porque nosotros mismos
lo hemos oido”. Jn 4, – 42 c) Incentivar a la lectura diaria de la pa-
Itinerarios de formación, que acompañan, labra, la lectura orante.
contienen e iluminan la vida. Disc. Emaús d) Fomentar en la formación una con-
LC. 24, 13-35 ciencia y una espiritualidad de comunión
Itinerarios formativos fruto de un laborioso que se expresen en una pastoral orgánica.
itinerario del Espíritu NMI 19 e) Que en la formación sacerdotal se
Formación del Catequista y de los formado- propicie una experiencia kerigmática. In-
res de catequista, una urgencia para la Igle- cluir en la formación de los seminaristas, y
sia. Sem. Lat. Cat. Cap. II, 6.1 en la formación permanente de los sacerdo-
tes el estilo catecumenal.
Primacía de la Palabra de Dios en la forma-
ción – III Semana lat. de catequesis- Sem.
1.1, 1.2, 4.5, 4.6
Aparecida Cap. 6, 2
45
“Ya no creemos por lo que nos han conta-
do, Si no porque nosotros lo hemos escu-
chado- Jn.4,42
Decir «sí» a Jesucristo….: consiste en en-
tregarse a la Palabra de Dios y apoyarse en
ella, pero significa también, en segunda ins-
tancia, esforzarse por conocer cada vez me-
jor el sentido profundo de esa Palabra. CT
20
Proceso de formación del catequista como
discípulo y educador de la fe. La persona
del catequista, madurez humana, yente espi-
ritualidad, encuentro vivo con Jesucristo,
adhesión, oyente de la Palabra, vida de co-
munión, sentido de justicia social mística
misionera. Sem. Lat. de Catequesis 2, 2.1.
Formación que no solo ponga en contacto,
sino en intimidad, en comunión con la per-
sona de Jesús DCG. 80
Itinerario de formación como itinerario de
fe- III SEM lat. Cap. II. 6.2 Y 6.4. Hacer
crecer la fe sembrada por el Espíritu Santo
CT. 20. Madurar la fe inicial y educar la fe
en el conocimiento profundo de la persona
y mensaje de Jc…(CT. 19)
La renovación de la Catequesis necesita de
catequistas renovados- Lorcic
La formación de los catequistas es priorita-
ria como tarea de máxima importancia.JEP
96
Formación de catequistas para una cateque-
sis en estilo catecumenal Palabra, vida, li-
turgia, Sacramentos, discipulado Sem. Lat.
C. 4.
46
Inspiración kergimática y catecumenal de
toda la catequesis. III Sem. Lat. Cat. 4.
Formar en la celebración y la fiestas La li-
turgia en la vida y en la formación de los
catequistas. II Sem. Lat. Catequesis. CII. 5.
La formación de los catequistas comprende
varias dimensiones. La más profunda hace
referencia al ser del catequista DGC. 238
La formación del catequista buscará capaci-
tarlo para transmitir el Evangelio en nombre
de la Iglesia, teniendo en cuenta el momen-
to histórico, sus valores y desafíos. Las
formación ha de ayudar al catequista como
persona, como creyente y como apóstol.
DGC 236,237,238.
Formar en el discernimiento e itinerario pe-
dagógico conforme a la fe Xtiana funda-
mentado en el Kerygamal IC 5,3.A Y B
Itinerario que nos conduce a hacer disc. Y
misionero- Ap. 31
Para que la renovación sea eficaz, se necesi-
ta un trabajo de reflexión, orientación y
evaluación en los diferentes aspectos de la
catequesis. Han de multiplicarse por todas
partes los Institutos Catequísticos, los equi-
pos de trabajo, en que pastores, catequistas,
teólogos, especialistas en ciencias humanas,
entren en diálogo y trabajen conjuntamente
a partir de la experiencia, a fin de proponer
formas nuevas de palabra y acción, de ela-
borar el material pedagógico correspondien-
te y verificar y evaluar, en cada caso, su va-
lidez. Es necesario que estos equipos sean
dotados de medios de trabajo adecuados y
47

30 Es necesario salir de una catequesis es-
tructurada a una catequesis del Encuentro,
con Jesús y con el hermano
de la indispensable libertad de acción. Med.
VIII. 16
Formación que lleve a vivir como discípu-
los, en el descubrimiento más profundo del
Misterio de Cristo. CT.22. Litúrgica y Sa-
cramental (CT. 23) y Misionera (CT 24)
“La formación de catequista adquiere un
carácter iniciático cuando introduce a la
persona en un proceso que paulatinamente
te cambian la vida a raíz del contacto con
ALGUIEN que da un significado nuevo a
su existencia, que ofrece motivos para vivir
con esperanzas y ser feliz, que da sentido al
sufrimiento, que da sentido al seguimiento,
que invita a compartir con los demás, que
impulsa a transformar el entorno y a tras-
cender de sí mismo y de su realidad”. Scala
primera jornada de estudio Santa Bárbara (
Costa Rica)
Con la certeza de que Jesús nos eligió para a)Que el itinerario de formación del cate-
que estuviéramos con El. Mc. 3,12 quista debe profundizar el encuentro y la
amistad con el Señor y que la palabra de
Que necesitamos: Catequistas testigos. Dios debe ser el centro de la formación
Testigo que conoce de cerca a la persona
de quién se testimonia. b) Proponemos itinerarios de formación
Catequistas testigos del Encuentro con el que favorezcan en el catequista la con-
Resucitado. templación en el diálogo con Jesús, en la
Porque de lo que hemos visto, oído, y to- escucha de la Palabra, la vida de oración,
cado con las manos, eso les anunciamos…. la Eucaristía y la vida comunitaria.
1°Jn. 1,1-4
Que no fuimos convocados para algo, sino
para Alguien, elegidos para vincularnos
48
íntimamente con Jesús muerto y Resucita-
do.…. DA 131 –
Desde una experiencia de fe para el convite
a los hermanos. Encontró a su hermano y le
dijo hemos encontrado al Mesías Jn.1,40-
42.
Reconociendo a Xto. Como único Maestro
transmitiendo el Mensaje de Jesús y no el
propio- Mt. 28
Desde la Pedagogía original de la Fe. CT.
58
Al servicio del diálogo de la Salva-
ción.DGC 143
En el Encuentro con la Persona de Jesús
Ap. 243- nace la alegría de ser discípulos y
misioneros. Ap. 32
En Jesús encontramos el itinerario formativo
del discípulo misionero… Aparecida 30
En Proceso que conduce: al Encuentro con
Jesucristo, a la conversión, al discipulado, a
la comunión y la misión. Ap . 278
Renovar la Catequesis implica promover la
evolución de formas tradicionales insistien-
do en la formación permanente de los cate-
quistas… Medellín 8. 1,2,3-
Que exprese la unidad del Plan de Dios, que
evite dicotomías y dualismos…. Medellín
8.4

49

31 Basta ya de una formación que no pro-
fundice la amistad con el Señor.
Impulsar una formación que transforme la
vida del catequista, impulsándolo a forjar-
se como discípulo-misionero.
Formación en Lenguaje adaptado al hom-
bre de hoy , guardando siempre la fidelidad
a la Palabra revelada... Respetando la uni-
dad y el pluralismo de situaciones. Medellín
VIII. 15
Crees verdaderamente en lo que anuncias?
Vivís lo que crees? Anuncias lo que vivís?
CT. 76
En la certeza de que la formación debe ini-
ciar en un aprendizaje gradual en el cono-
cimiento amor y seguimiento a Jesucristo.
Ap. 291
Formación que comprende varias dimen-
siones. DGC 238
Una formación que favorezca la amistad
profunda con Jc. alimentada por la Palabra
y la Eucaristía. Ap. 255
a) Favorecer itinerarios de formación
de catequistas y de formadores de cate-
quistas, que conduzcan a la experiencia
de Dios. En el Encuentro con Cristo que
da origen a la inciación cristiana, que
transforma la vida e invita a su segui-
miento. Formación en la dimensión
humana comunitaria, espiritual, doctri-
nal, pastoral y misionera.
b) En el Encuentro profundo con la Pa-
labra de Dios, que el formador contemple
el perfil y la identidad del catequista que
soñamos.

En la centralidad de la Palabra en la forma-

ción del Catequista. Como María el cate-
quista es discípulo fiel que escucha y acoge
la Palabra. III Sem. Lat. Cap. III. 4.1.

El anuncio de Jc. Nos hace partícipes del

triunfo del Resucitado. Ap. 351
La catequesis debe ayudar a los Xtianos a
ser para su gozo y servicio de todos, luz y
sal CT- 56.
Formación en estilo catecumenal. Lorcic 64

50

El camino lento pero firme hacia una comu-
nidad catequística
El que ha sido evangelizado evangeliza a su
vez. He aquí la prueba de la verdad, la pie-
dra de toque de la evangelización. Es im-
pensable que un hombre haya acogido la
palabra y se haya entregado al reino sin
convertirse en alguien y a su vez da testi-
monio y anuncia EN 24
El impulso misionero es fruto necesario de
la vida que la Trinidad comunica a sus
discípulos. Lorcic 10
Donde están dos o tres reunidos en mi Formar comunidades de catequistas que vi-
nombre, Jesús está en en medio de ellos. van la comunión en el encuentro con Jesús .
Mt. 18:20 Comunidades Pascuales de discípulos. Mi-
sioneros.
Que “Jesús elige a los doce para vivir en
comunión con él.” DA 154 B.- Impulsar y promover la formación de
“Toda la Iglesia y todos en ella estamos catequistas acompañantes
llamados a formar comunidades Santas y
misioneras”. NMA 62
Que “La Experiencia de la Iglesia y sus en-
señanzas van mostrando las infinitas rique-
zas que existen en la unión de los herma-
nos, construida de esfuerzo y oración, de
comprensión, de perdón, y de alegría”. Ca-
tequesis en America Latina 19
Estamos llamados a vivir como lo hicieron
las primeras comunidades, compartiendo
todo Hch. 2, 42 – 47
Necesitamos Comunidades que alimenten
la vocación eclesial de los catequistas y fo-
menten en ellos la honda conciencia de que
51

La formación iniciática necesita de una
comunidad que valore y promueva en su
seno la iniciación.
1) EL catequista, llamado, elegido, convo-
cado. Ser catequista es un llamado que el
Señor nos hace. Llamado, vocación que
es don de Dios
son enviados por la Iglesia DCG. 246/247
Estamos llamados a vivir en comunidad la
fe que profesamos (ct. 24)
Y hacer de nuestras Comunidades casa y
escuela de comunión testigos del amor del
Padre ( NMI42/ 43)
Comunidades Iniciadores, fuente, lugar y
meta de la catequesis, lugar visible del tes- A.- Que el catequista iniciador en su for-
timonio de la fe, llamada a ser lugar de ex- mación sea acompañado en su vida personal
periencia de comunión DGC 158. CT. 24 y espiritual.
En la búsqueda de auténtica comunión y la Y se deje guiar por un guía espiritual.
formación iniciática de la comunidad -III
Sem. Lat.de catequesis
La condición del discípulo brota de Jesu-
cristo… por la fe y el bautismo y crece en la
Iglesia, comunidad donde todos sus miem-
bros adquieren igual dignidad…..viviendo
al servicio del Reino de Dios. DA 184
Quien se ha adherido a Jesucristo por la fe y
se esfuerza por consolidar esta fe mediante
la catequesis, tiene necesidad de vivirla en
comunión con aquellos que han dado el
mismo paso”. CT 24
a) Que la comunidad sea lugar de dis-
Llamado que brota del amor de Dios Is. 43, cernimiento de la vocación del catequista,
4-5. en orden al Ministerio que se le va a con-
Antes que te formarás te llamé y te elegí fiar.
Jer. 1,5.
Comunidad iniciadora Fuente, lugar y meta
Llama por el nombre” IS. 43, 1-2 de la formación de los catequistas iniciado-
res.
“Te elegí para que hablaras en mi nombre”
52
jer. 1, 5
“Yo te vi antes que Felipe te llamara” JN 1,
48
En la certeza
Del dinamismo del Espíritu en el llamado-
Ananías Felipe
Catequista elegido para estar con con El
Mc. 3,14, en la certeza de su presencia y su
promesa “Yo estoy contigo” Ex. 3, 11-12-
El Señor llama por pura gracia. Si el señor
se enamoró de ustedes, no fue por mérito de
ustedes sino por puro amor. DT 7, 7-8:
Llamado que requiere una respuesta- Jesús
le dijo sígueme, El se levantó y lo siguió-
Mt. 9,9 Mc. 1,1-17.
Catequista se sabe interiormente llamado
por Dios- Encuentro personal con Xto. Im-
plica la conversión y la fe y la adhesión a su
Persona.Reconociéndolo como Maestro- Jn.
1, 35-51, Jer. 1,5, Is. 43,4-5, III.S.LAT. 3,
1-2, DA. 277, CT.10
La llamada personal de Jesucristo, y la rela-
ción con El, son el verdadero motor de la
acción del catequista. DGC 231
De este conocimiento amoroso de Cristo es
de donde brota el deseo de anunciarlo, de
evangelizar, y de llevar a otros al "sí" de la
fe en Jesucristo. (CEC 429.)

53
Saber que somos llamados y enviados nos
anima a vencer obstáculos perseverando y
permaneciendo en El. Mt.28
La vocación del catequista, enraizada en la
vocación de la Iglesia EN 15

54
Comisión 10: Catequesis y Ministerio Ordenado
Desde la Situación
Visto que…
32 Nos falta ayudar a los seminaristas y al
cuerpo presbiteral a pensar catequísticamen-
te
33 Movimiento hacia una catequesis no Hoy renovar a la catequesis es hacerla más
sacramentalista sino MÁS MISIONERA.
Por allí pasa la sacramentalidad de la Inicia- La Eclesiología
ción Cristiana.
Desde la Iluminación Desde los anhelos
Con la certeza que… Proponemos…
Los ministros ordenados estamos llamados a  Favorecer, desde alguna instancia na-
una conversión pastoral que nos lleve a pen- cional (CEMIN, OSAR), ámbitos pa-
sar más catequísticamente y acompañar ra compartir proyectos y experiencias
mejor, integrándonos en las comunidades de formación catequística en los semi-
catequísticas. .“La renovación parroquial exige narios de formación de presbíteros.
actitudes nuevas de los párrocos” (DA 201)  Cuidar los espacios catequísticos para
los presbíteros jóvenes.
 Ofrecer, desde la Junta Nacional, un
acompañamiento de los espacios sa-
cerdotales en las regiones y/o diócesis
para reflexionar pastoralmente pro-
puestas y proyectos de Iniciación
Cristiana.
 Facilitar encuentros de laicos, religio-
sos y ministros ordenados que, al esti-
lo de los ISCA regionales, favorezcan
la formación comunión y la integra-
ción.
 Ofrecerse a la CEMIN para integrar
en los Talleres para Párrocos el tema
de catequesis.
bíblica.  Compartir, a través de la Junta Na-
del Concilio todavía no ha cional, experiencias y proyectos con-
echado raíces en nuestras estructuras cretos de Iniciación Cristiana (más
eclesiales, aunque hablamos continua- allá del orden de los sacramentos; no
mente de eclesiología de comunión. Sin en la línea de proselitismo, sino con la
comunidad generamos una Iglesia intención de Irradiar esperando con-
abandónica. vocar por “atracción”)
55
La Iglesia crece no por proselitismo sino
“por ‘atracción’
(DA 159, Benedicto XVI disc. Inaug. Apare-
cida)
 Generar espacios de reflexión sobre la
Iniciación Cristiana integrando en es-
te diálogo a las comisiones Episcopa-
les de Catequesis, de Liturgia y Ani-
mación Bíblica de la Pastoral.

56
Comisión 11: ICP y Palabra de Dios
Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos
Visto que… Con la certeza que… Proponemos…
34. Visto que decimos: “basta ya” a una Con la certeza que nos da la Biblia: Proponemos: Vemos la necesidad de ela-
catequesis donde la Palabra no es el cen- o Is 55, 10-11: “Del mismo modo que borar un proyecto de ICP en el que la
tro descienden la lluvia y la nieve de los cielos y Palabra de Dios sea centro propicie el
no vuelve allá de vacío, sino que empapan la encuentro personal con Jesús transfor-
tierra, la fecundan y la hacen germinar, para mando la vida.
que de simiente al sembrador y produzca pan
para comer, así será la palabra de mi boca: no
tornará a mí de vacío, pues realizará lo que
me he propuesto y será eficaz en lo que le
mande”
o Jn 1, 1.14: “En el principio existía la
Palabra. La Palabra estaba junto a Dios. Y la
Palabra era Dios.” “Y la Palabra se hizo
carne y puso su morada entre nosotros”
o 2 Tim 3, 16-17: “Toda Escritura es
inspirada por Dios y útil para enseñar, para
argüir, para corregir y para educar en la justi-
cia; así el hombre de Dios se encuentra per-
fecto y preparado para toda obra buena.”
Y de los documentos de la Iglesia:
o VD 74b En el Directorio general
para la catequesis encontramos indicaciones
válidas para animar bíblicamente la cateque-
sis, y a ellas me remito.258 En esta circuns-
tancia, deseo sobre todo subrayar que la ca-
tequesis « ha de estar totalmente impregnada
por el pensamiento, el espíritu y las actitudes
bíblicas y evangélicas, a través de un contac-
to asiduo con los mismos textos; y recordar
57
también que la catequesis será tanto más rica
y eficaz cuanto más lea los textos con la inte-
ligencia y el corazón de la Iglesia », y cuanto
más se inspire en la reflexión y en la vida
bimilenaria de la Iglesia. Se ha de fomentar,
pues, el conocimiento de las figuras, de los
hechos y las expresiones fundamentales del
texto sagrado; para ello, puede ayudar tam-
bién una inteligente memorización de algu-
nos pasajes bíblicos particularmente elocuen-
tes de los misterios cristianos. La actividad
catequética comporta un acercamiento a las
Escrituras en la fe y en la Tradición de la
Iglesia, de modo que se perciban esas pala-
bras como vivas, al igual que Cristo está vivo
hoy donde dos o tres se reúnen en su nombre
(cf. Mt 18,20). Además, debe comunicar de
manera vital la historia de la salvación y los
contenidos de la fe de la Iglesia, para que
todo fi el reconozca que también su existen-
cia personal pertenece a esta misma historia.
En esta perspectiva, es importante subrayar
la relación entre la Sagrada Escritura y el
Catecismo de la Iglesia Católica, como dice
el Directorio general para la catequesis: «
La Sagrada Escritura, como “Palabra de Dios
escrita bajo la inspiración del Espíritu Santo”
y el Catecismo de la Iglesia Católica, como
expresión relevante actual de la Tradición
viva de la Iglesia y norma segura para la
enseñanza de la fe…”
o CT 20: “Más concretamente, la fina-
lidad de la catequesis, en el conjunto de la
evangelización, es la de ser un período de
58
enseñanza y de madurez, es decir, el tiempo
en que el cristiano, habiendo aceptado por la
fe la persona de Jesucristo como el solo Se-
ñor y habiéndole prestado una adhesión glo-
bal con la sincera conversión del corazón, se
esfuerza por conocer mejor a ese Jesús en
cuyas manos se ha puesto: conocer su "miste-
rio", el Reino de Dios que anuncia, las expe-
riencias y las promesas contenidas en su
mensaje evangélico, los senderos que El ha
trazado a quien quiera seguirle. Si es verdad
que ser cristiano significa decir "sí" a Jesu-
cristo, recordemos que este "sí" tiene dos
niveles: consiste en entregarse a la Palabra de
Dios y apoyarse en ella, pero significa tam-
bién en segunda instancia, esforzarse por
conocer cada vez mejor el sentido profundo
de esa Palabra.”
o DCG 94: “La fuente de donde la ca-
tequesis toma su mensaje es la misma Pala-
bra de Dios: « La catequesis extraerá siempre
su contenido de la fuente viva de la Palabra
de Dios, transmitida mediante la Tradición y
la Escritura, dado que la Sagrada Tradición y
la Sagrada Escritura constituyen el único
depósito sagrado de la Palabra de Dios con-
fiado a la Iglesia ». Este « depósito de la fe »
es como el arca del padre de la casa, que ha
sido confiado a la Iglesia, la familia de Dios,
y de donde ella saca continuamente lo viejo y
lo nuevo. Todos los hijos del Padre, anima-
dos por su Espíritu, se nutren de este tesoro
de la Palabra. Ellos saben que la Palabra de
Dios es Jesucristo, el Verbo hecho hombre y
59
 que su voz sigue resonando por medio del
Espíritu Santo en la Iglesia y en el mundo. La
Palabra de Dios, por admirable « condescen-
dencia » (300) divina, se dirige y llega a
nosotros a través de « obras y palabras »
humanas, « a la manera como un día el Ver-
bo del Padre eterno, al tomar la carne de la
flaqueza humana, se hizo semejante a los
hombres ». Sin dejar de ser Palabra de Dios,
se expresa en palabra humana. Cercana, per-
manece sin embargo velada, en estado «
kenótico ». Por eso la Iglesia, guiada por el
Espíritu, necesita interpretarla continuamente
y, al tiempo que la contempla con profundo
espíritu de fe, « la escucha piadosamente, la
custodia santamente y la anuncia fielmente »
o DA 299: La catequesis no puede li-
mitarse a una formación meramente doctrinal
sino que ha de ser una verdadera escuela de
formación integral. Por tanto, se ha de culti-
var la amistad con Cristo en la oración, el
aprecio por la celebración litúrgica, la viven-
cia comunitaria, el compromiso apostólico
mediante un permanente servicio a los de-
más. Para ello, resultarían útiles algunos
subsidios catequéticos elaborados a partir del
Catecismo de la Iglesia Católica y del Com-
pendio de la Doctrina Social de la Iglesia,
estableciendo cursos y escuelas de formación
permanente para catequistas.

35. Visto que decimos: “basta ya” de Con la certeza que nos da la Biblia: Proponemos: Una catequesis que sea par-
catequistas que no quieren trabajar en o Jn 15, 5: “Yo soy la vid; ustedes los te de un proyecto pastoral que considere
equipo sarmientos. El que permanece en mí y yo en que toda la comunidad es quien evangeli-
60
él, ése da mucho fruto; porque separados de za
mí no pueden hacer nada”
o Hch 2, 42-47: “Se mantenían cons-
tantes en la enseñanza de los apóstoles, en la
comunión, en la fracción del pan, y en las
oraciones…”

Y de los documentos de la Iglesia:

o DP 214: “Por Cristo, con Él y en Él,
entramos a participar en la comunión de
Dios. No hay otro camino que lleve al Padre.
Al vivir en Cristo, llegamos a ser su cuerpo
místico, su pueblo, pueblo de hermanos uni-
dos por el amor que derrama en nosotros el
Espíritu. Ésta es la comunión a la que el Pa-
dre nos llama por Cristo y su Espíritu. A ella
se orienta toda la historia de la salvación y
en ella se consuma el designio de amor del
Padre que nos creó.”
o DA 156: “…La fe nos libera del ais-
lamiento del yo, porque nos lleva a la comu-
nión”. Esto significa que una dimensión
constitutiva del acontecimiento cristiano es
la pertenencia a una comunidad concreta, en
la que podamos vivir una experiencia per-
manente de discipulado y de comunión con
los sucesores de los Apóstoles y con el Pa-
pa.”
o DP 214: “Por Cristo, con Él y en Él,
entramos a participar en la comunión de
Dios. No hay otro camino que lleve al Padre.
Al vivir en Cristo, llegamos a ser su cuerpo
místico, su pueblo, pueblo de hermanos uni-
dos por el amor que derrama en nosotros el
61

36. Visto que decimos: “basta ya” de
una catequesis donde falta el encuentro
personal con Jesús en la vida de los ca-
tequistas
Espíritu. Ésta es la comunión a la que el Pa-
dre nos llama por Cristo y su Espíritu. A ella
se orienta toda la historia de la salvación y
en ella se consuma el designio de amor del
Padre que nos creó.”
o DA 156: “…La fe nos libera del ais-
lamiento del yo, porque nos lleva a la comu-
nión”. Esto significa que una dimensión
constitutiva del acontecimiento cristiano es
la pertenencia a una comunidad concreta, en
la que podamos vivir una experiencia per-
manente de discipulado y de comunión con
los sucesores de los Apóstoles y con el Pa-
pa.”
Con la certeza que nos da la Biblia: Proponemos: Vemos la necesidad de for-
o 1 Jn 1, 2-3: “Pues la Vida se mani- mentar en el pueblo de Dios, una profunda
festó y nosotros la hemos visto y damos tes- espiritualidad bíblica a través de un pro-
timonio y les anunciamos la vida eterna que ceso de catequesis permanente
estaba junto al Padre y que se nos manifestó,
lo que hemos visto y oído se los anunciamos,
para que también ustedes estén en comunión
con nosotros. Y nosotros estamos en comu-
nión con el Padre y con su Hijo Jesucristo”
o Lc 24, 15-17: “Mientras conversaban
y discutían, el mismo Jesús se acercó a ellos
y caminó a su lado; pero sus ojos estaban
como incapacitados para reconocerle. Él les
dijo: “¿De qué discutían por el camino? Ellos
se pararon con aire entristecido.”
Y de los documentos de la Iglesia:
o DC 1: “No se comienza a ser cristia-
no por una decisión ética o una gran idea
62
sino por el encuentro con un acontecimiento,
con una Persona, que da un nuevo horizonte
a la vida y con ello una orientación decisiva”
o VD 2: “En primer lugar, quisiera
recordar la belleza y el encanto del renovado
encuentro con el Señor Jesús experimentado
durante la Asamblea sinodal. Por eso,
haciéndome eco de la voz de los Padres, me
dirijo a todos los fieles con las palabras de
san Juan en su primera carta: «Os anuncia-
mos la vida eterna que estaba con el Padre y
se nos manifestó. Eso que hemos visto y oído
os lo anunciamos para que estéis unidos con
nosotros en esa unión que tenemos con el
Padre y con su Hijo Jesucristo» (1 Jn 1,2-3).
El Apóstol habla de oír, ver, tocar y contem-
plar (cf. 1,1) al Verbo de la Vida, porque la
vida misma se manifestó en Cristo. Y noso-
tros, llamados a la comunión con Dios y
entre nosotros, debemos ser anunciadores de
este don. En esta perspectiva kerigmática, la
Asamblea sinodal ha sido para la Iglesia y el
mundo un testimonio de la belleza del en-
cuentro con la Palabra de Dios en la comu-
nión eclesial. Por tanto, exhorto a todos los
fieles a reavivar el encuentro personal y co-
munitario con Cristo, Verbo de la Vida que
se ha hecho visible, y a ser sus anunciadores
para que el don de la vida divina, la comu-
nión, se extienda cada vez más por todo el
mundo… En efecto, participar en la vida de
Dios, Trinidad de Amor, es alegría completa
(cf. 1 Jn 1,4). Y comunicar la alegría que se
produce en el encuentro con la Persona de
63
Cristo, Palabra de Dios presente en medio de
nosotros, es un don y una tarea imprescindi-
ble para la Iglesia…”
o DA 99 a): “Debido a la animación
bíblica de la pastoral, aumenta el conoci-
miento de la Palabra de Dios y el amor por
ella. Gracias a la asimilación del Magisterio
de la Iglesia y a una mejor formación de
generosos catequistas, la renovación de la
Catequesis ha producido fecundos resultados
en todo el Continente, llegando incluso a
países de Norteamérica, Europa y Asia, don-
de muchos latinoamericanos y caribeños han
emigrado”
o DA 297: “Los desafíos que plantea la
situación de la sociedad en América Latina y
El Caribe requieren una identidad católica
más personal y fundamentada. El fortaleci-
miento de esta identidad pasa por una cate-
quesis adecuada que promueva una adhesión
personal y comunitaria a Cristo, sobre todo
en los más débiles en la fe. Es una tarea que
incumbe a toda la comunidad de discípulos
pero, de manera especial, a quienes, como
obispos, hemos sido llamados a servir a la
Iglesia, pastoreándola, conduciéndola al en-
cuentro con Jesús y enseñándole a vivir todo
lo que nos ha mandado (cf. Mt 28, 19- 20) “
o NMA 93: “Cuando el seguimiento de
Jesús se profundiza y fortalece, son numero-
sos los frutos de conversión y santidad. Así
se abren para la Iglesia enormes posibilida-
des en el campo de la pastoral vocacional,
porque las personas se disponen con mayor
64
prontitud a la obediencia de la fe (Rom 1,5),
y por tanto, a escuchar la voluntad de Dios
que invita personalmente a cada uno a ser
testigo de la propia fe y a ocupar su lugar
irreemplazable en la evangelización. Una
pastoral de la espiritualidad bautismal ha de
complementarse con los esfuerzos que ac-
tualmente realizan la pastoral de juventud y
vocacional, y priorizarlas en el orden de la
acción. Las vocaciones son un don de Dios,
una manifestación de su iniciativa de amor.
Surgen ante todo entre los niños y jóvenes de
las comunidades de fe: en la familia, en la
parroquia, en las escuelas católicas y en otras
comunidades, en las que se experimenta la
vida de la Iglesia.
o NMI 46: “Esta perspectiva de comu-
nión está estrechamente unida a la capacidad
de la comunidad cristiana para acoger todos
los dones del Espíritu. La unidad de la Iglesia
no es uniformidad, sino integración orgánica
de las legítimas diversidades. Es la realidad
de muchos miembros unidos en un sólo
cuerpo, el único Cuerpo de Cristo (cf. 1 Co
12,12). Es necesario, pues, que la Iglesia del
tercer milenio impulse a todos los bautizados
y confirmados a tomar conciencia de la pro-
pia responsabilidad activa en la vida eclesial.
Junto con el ministerio ordenado, pueden
florecer otros ministerios, instituidos o sim-
plemente reconocidos, para el bien de toda la
comunidad, atendiéndola en sus múltiples
necesidades: de la catequesis a la animación
litúrgica, de la educación de los jóvenes a las
65
más diversas manifestaciones de la caridad.
Se ha de hacer ciertamente un generoso es-
fuerzo —sobre todo con la oración insistente
al Dueño de la mies (cf. Mt 9, 38)— en la
promoción de las vocaciones al sacerdocio y
a la vida de especial consagración. Éste es un
problema muy importante para la vida de la
Iglesia en todas las partes del mundo.
Además, en algunos países de antigua evan-
gelización, se ha hecho incluso dramático
debido al contexto social cambiante y al en-
friamiento religioso causado por el consu-
mismo y el secularismo. Es necesario y ur-
gente organizar una pastoral de las vocacio-
nes amplia y capilar, que llegue a las parro-
quias, a los centros educativos y familias,
suscitando una reflexión atenta sobre los
valores esenciales de la vida, los cuales se
resumen claramente en la respuesta que cada
uno está invitado a dar a la llamada de Dios,
especialmente cuando pide la total entrega de
sí y de las propias fuerzas para la causa del
Reino. En este contexto cobran también toda
su importancia las demás vocaciones, enrai-
zadas básicamente en la riqueza de la vida
nueva recibida en el sacramento del Bautis-
mo. En particular, es necesario descubrir
cada vez mejor la vocación propia de los
laicos, llamados como tales a « buscar el
reino de Dios ocupándose de las realidades
temporales y ordenándolas según Dios »32 y
a llevar a cabo « en la Iglesia y en el mundo
la parte que les corresponde [...] con su em-
peño por evangelizar y santificar a los hom-
66
 bres». En esta misma línea, tiene gran impor-
tancia para la comunión el deber de promo-
ver las diversas realidades de asociación, que
tanto en sus modalidades más tradicionales
como en las más nuevas de los movimientos
eclesiales, siguen dando a la Iglesia una vi-
veza que es don de Dios constituyendo una
auténtica primavera del Espíritu. Conviene
ciertamente que, tanto en la Iglesia universal
como en las Iglesias particulares, las asocia-
ciones y movimientos actúen en plena sinton-
ía eclesial y en obediencia a las directrices de
los Pastores. Pero es también exigente y pe-
rentoria para todos la exhortación del Após-
tol: « No extingáis el Espíritu, no despreciéis
las profecías, examinadlo todo y quedaos con
lo bueno » (1 Ts 5,19-21).”
 Visto que decimos: Basta ya de una Con la certeza que nos da la Biblia en Is 55, Proponemos:
catequesis donde la Palabra no es el 10; Jn 1, 1.14; 1. Que se trabaje de una manera pedagógica
centro 2 Tim 3, 16-17 y progresiva.
Y de los documentos: VD 74b; CT 20; DCG 2. Que en momentos fuertes especiales de
94; DA 299; la vida parroquial se hagan celebraciones
con la centralidad de la Palabra que ilu-
mina y la Eucaristía concluye
3. La lectura orante de la Biblia (Lectio di-
vina) que permite tener un encuentro
personal con Jesús.
4. Que los catequistas se reúnan a preparar
encuentros meditando la Palabra de
Dios.
5. Proveer un proyecto de ICP donde la Pa-
labra de Dios sea centro y transforme la
vida
6. Una catequesis que pone en contacto con
67
 la Palabra. Que nuestro CATIC inspire
un catecismo que exprese la Palabra que
se anuncia, se celebra, se vive y se ora.
7. Buscar a Dios en la Palabra a través de
una escucha atenta con la certeza de que
él escucha las súplicas y responde a las
necesidades y, envía su Espíritu divino
que como dice Jesús “él les enseñará y
les recordará todo”
8. Donde la Palabra deje de ser un recurso,
una herramienta, una referencia, una
compañera de trabajo, la Palabra que
acogida, escuchada, metabolizada, intui-
da, guardada, palpada, encarnada…nos
devuelva el Espíritu de la Iglesia primiti-
va.
 Visto que decimos: Basta ya de una Con la certeza que nos da la Biblia: Jn 4, 28- Proponemos:
catequesis que no transforma la vida 29; Hch 8,4.26; Lc 19, 9 1. Colaborar con retiros bíblicos
Y de los documentos: DA 364; 287 2. Asumir los deberes de bautizados.
3. Que las personas que acompañan los
procesos de fe sean aquellos que funden
su vida en un encuentro orante con la Pa-
labra de Dios
4. Jornada de retiro espiritual
5. Fomentar encuentros para vivenciar la
Palabra de Dios
6. Una catequesis que transforme la vida
con un anuncio de la comunidad parro-
quial para afuera: altares al aire libre uti-
lizando todos los medios de comunica-
ción existentes y tejer vínculos materna-
les

 Visto que decimos: Basta ya de una Con la certeza que nos da la Biblia: 1 Jn 1, Proponemos:
68
 catequesis donde falta el encuentro 2-3; Lc 24, 15-17. 1. Encuentro personal con Jesús desde la
personal con Jesús en la vida de los Y de los documentos: DCE 1; VD 2; DA asidua lectura de la Palabra
catequistas 99a; 297; NMA 93; NMI 46; 2. Coordinar actividades con el párroco pa-
ra vivenciar una espiritualidad más pro-
funda que lleve a los catequistas al en-
cuentro personal con Jesús
3. Retiros espirituales y encuentros perso-
nales diarios, comunitarios, que dan la
fuerza vital para la misión.
4. Que deje de ser una clase, que sea un en-
cuentro cristocéntrico partiendo de una
experiencia personal.
 Visto que decimos: Basta ya de una Con la certeza que nos da la Biblia: Mt 7, 21 Proponemos:
catequistas con falta de formación Y de los documentos: DA 296; DV 25; 1. Desde las juntas de catequesis “salir al
Bíblica encuentro” de los catequistas y de sus
párrocos, ofreciendo equipos de forma-
ción en espiritualidad, oración y metodo-
logía (en trabajo conjunto y participativo
con los respectivos sacerdotes de comu-
nidades) colaborando así en la formación
y acompañamiento de los catequistas.
Equipos con dos características: que sean
equipos varios, diversos e itinerantes y
fundamentados en la Palabra.
2. Creación de un curso para la formación
bíblica por internet para los catequistas y
su difusión a nivel nacional. Tiene que
incluir dos aspectos: formación personal
y que acompañe y facilite su tarea
3. Propagar los subsidios de Formación
bíblica que recibimos
4. Dentro de cada grupo parroquial ten-
ga la Palabra un momento de reflexión
 Visto que decimos: Basta ya con la Con la certeza que nos da la Biblia: Heb 10, Proponemos:
69
 inexistencia de una catequesis per-
manente en la comunidades parro-
quiales, de un ICP
 Visto que decimos: Basta ya de ca-
tequistas con esquemas antiguos, con
temor a salir de los libros
 Visto que decimos: Basta ya de falta
de tiempo/compromiso de los sacer-
dotes en la formación y en el acom-
pañamiento de los catequistas
 Visto que decimos: Basta ya de cate-
quistas que trabajan solos y sin el
acompañamiento comunitario
23-25; Is 61, 1-3; Rm 1, 16-17.
Y de los documentos: DA 298; JEP 61;
Con la certeza que nos da la Biblia: Lc 18, Proponemos:
20-22;
Y de los documentos: DA 299
Y de otros: Scala: Mesas de trabajo pág 88
Con la certeza que nos da la Biblia: Jn 10, 1- Proponemos:
21; Lc 24, 13; Hch 8, 26
Y de los documentos: LG 28; JEP 138; EN
68;
Con la certeza que nos da la Biblia: Hch 4, Proponemos:
32-35; 1 Co 12, 12-13;
Y de los documentos: GS 12; EN 60; Li-
neamiento y Orientaciones para la catequesis
de IC 40;
70
1. Incorporar en el plan de estudios de los
seminarios del país algunos contenidos
que ayuden a los futuros pastores a pro-
fundizar junto al Espíritu, la estrecha re-
lación de ésta con la catequesis y propi-
ciar espacios que permitan reflexionar
acerca de la necesidad de acompañar los
procesos de un ICP
2. Que los seminarios intensifiquen la for-
mación catequística de los sacerdotes
1. Promover la lectura orante de forma co-
munitaria ya que este compartir promue-
ve la vida en comunidad, mejorando el
encuentro no sólo con Jesús, sino tam-
bién con el hermano
2. Utilización de métodos y técnicas que
ayuden a la integración
3. Crear instancias donde se encuentren con
Jesús, Palabra de Dios y puedan rezar en
pequeños grupos, mediante Lectio Divi-
na y así descubran la riqueza de la Pala-
bra compartida en comunidad, buscando
juntos el mensaje del Padre para el hoy,
en nuestra realidad concreta. La invita-
ción debe llegar a través de hermanos

 Visto que decimos: Basta ya de cate-
quistas que no quieren trabajar en
equipo
 Visto que decimos: Basta ya de la
falta de compromiso de la comuni-
dad parroquial en relación a apoyar y
sostener a sus catequistas
 Visto que decimos: Basta ya la exis-
tencia de catequesis para adultos pe-
ro sin un proyecto permanente como
itinerario a nivel parroquial
 Visto que decimos: Basta ya de falta
de preparación para sostener proce-
sos
 Visto que decimos: es un tesoro la
conciencia de la necesidad de que el
pueblo de Dios se alimente de la Pa-
labra de Dios
que hayan tenido esta experiencia.
Con la certeza que nos da la Biblia: Jn 15, 5; Proponemos:
Hch 2, 42-47; 1. Frecuentes celebraciones de la Palabra
Y de los documentos: DP 214; DA 156 donde con los signos vividos y compar-
tidos nos impregnamos de su amor, para
transmitir a todos los integrantes.
2. Renovar las formas autoritarias de impa-
ciencia de obligaciones, donde no se res-
peta la pedagogía de Jesús que es amor y
misericordia, buscando caminos de escu-
cha, de búsqueda, de modos creativos,
atendiendo las nuevas necesidades del
mundo actual
3. Una catequesis que sea parte de un pro-
yecto pastoral en el que considere que la
comunidad es quien evangeliza
Con la certeza que nos da la Biblia: Col 3, Proponemos:
13-14; Que exista una pastoral orgánica con líneas
Y de los documentos: DA 172; 296 pastorales que reflejen y respondan a las
necesidades de las comunidades y que sean
llevada a las prácticas
Con la certeza que nos da la Biblia: Mt 7, Proponemos:
24-27; 23, 23-24;
Y de los documentos: DA 3; CT 43; Linea-
mientos y Orientaciones para la renovación
de la catequesis de la IC 58
Con la certeza que nos da la Biblia: Mt 7, Proponemos:
24;
Y de los documentos: DA 298;
Con la certeza que nos da la Biblia: Mt 4, 4; Proponemos:
Dt 8, 3; Sal 78, 3-6; 1. Propiciar, aportar y contribuir desde
Y de los documentos: VD 72; EN 22 nuestro ministerio a que todo el itinerario
Y de Otros: San Jerónimo, Com. In Is, Prol.; catequístico se desarrolle a partir del
71

 Visto que decimos: es un tesoro los
catequistas comprometidos que con
alegría transmiten la buena noticia a
los demás
 Visto que decimos: es un tesoro los
catequistas que llevan una vida de fe
y de compromiso insertos en activi-
dades pastorales con vida comunita-
ria
PL 24, 17
Con la certeza que nos da la Biblia: Lc 1, 46; Proponemos:
1 Co 1, 25; 1 Co 1, 17; Flp 4, 4
Y de los documentos: DA 17-18
Con la certeza que nos da la Biblia: Hch 2, Proponemos:
42-47; Jn 17, 21; Lc 11, 28
Y de los documentos: CT 9; DA 356; 155;
72
contenido bíblico, con una impronta
profética: escucha de la Palabra de Dios
e interpretación de su mensaje para el
pueblo en el aquí y ahora de la historia.
Sabiendo que siempre es historia de sal-
vación.
2. Formar con los niños de catequesis pe-
queños círculos bíblicos
3. Incluir en la pastoral orgánica a los
círculos bíblicos
4. Formar pequeñas comunidades que se
reúnan en torno a la Palabra de Dios, la
conozcan y la interioricen, nutriendo e
iluminando las realidades que les toca
vivir para acompañarse y sostenerse mu-
tuamente.
5. Convidando, buscando, proponiendo,
seduciendo con espacios donde la Pala-
bra sea el centro (no sólo como lugar,
gesto o rito vacío) sino desde donde se
sueñe todo el andar parroquial, los en-
cuentros, las actividades, con los modos,
los criterios, al mejor estilo de nuestro
Dios.
1. Vivir según la Palabra de Dios y conta-
giar la alegría de un Cristo que nos habla
en las Escrituras
1. Revalorizar el “templo doméstico” (casa,
barrio, colegio) como comunidad ecle-
sial, fuente, y camino humilde de una es-
piritualidad sana, creativa, liberadora y
generadora de esperanza en torno a la pa-

 Visto que decimos: es un tesoro la
creciente conciencia de la centralidad
de la Palabra en la catequesis de los
mismos catequistas y en sus guías y
en su comunidad
 Visto que decimos: es un tesoro el
gran entusiasmo de los catequistas
por dar sus tiempos y talentos al ser-
vicio de la formación de los cristia-
nos
 Visto que decimos: es un tesoro los
retiros espirituales y momentos de
encuentros con Jesús que refuerza la
espiritualidad de los catequistas
 Visto que decimos: es un tesoro el
fuerte deseo constantemente expre-
sado de una formación permanente
por parte de los catequistas
 Visto que decimos: es un tesoro el
crecimiento de una catequesis más
vivencial y humanizada
 Visto que decimos: es un tesoro la
accesibilidad de la Palabra de Dios
para todos
labra confrontada con la realidad
Con la certeza que nos da la Biblia: Lc 5, 1; Proponemos:
Y de los documentos: DV 25
Con la certeza que nos da la Biblia: Lc 24, Proponemos:
32
Y de los documentos: DP 9; DP 10; CT 66
Con la certeza que nos da la Biblia: Lc 6, 45; Proponemos:
Mc 9, 2-3
Y de los documentos: DA 365;
Con la certeza que nos da la Biblia: Jn 8, 31- Proponemos:
32 1. Organizar proyectos de formación de
Y de los documentos: DA 279 catequistas de acuerdo a la realidad de
cada diócesis.
2. Que la disponibilidad y deseo sea co-
rrespondido y se busque favorecer la
profundización en el conocimiento de
la Sagrada Escritura
Con la certeza que nos da la Biblia: Jn 4, 1- Proponemos:
45; 1 Jn 4, 8
Y de los documentos: Lineamientos para una
catequesis permanente 63; DA 299; EN 18
Con la certeza que nos da la Biblia: Lc 10, Proponemos:
38-42
Y de los documentos: DV 22
Y de otros: Scala, Jaime Castillo “la anima-
ción bíblica de la Pastoral” pág 93; Scala,
aportes de las mesas de trabajo, pág 87
73
 Visto que decimos: es un tesoro la
búsqueda y el deseo de los catequis-
tas para acercarse más a la Palabra de
Dios, especialmente realizando cur-
sos en forma directa o por internet
 Visto que decimos: es un tesoro el
creciente reconocimiento de la pasto-
ral bíblica y la animación bíblica de
la pastoral en las diócesis de la Ar-
gentina que permiten que la cateque-
sis se nutra progresivamente de la
Palabra de Dios
 Visto que decimos: es un tesoro la
disponibilidad de tiempo para for-
marse y formar
Con la certeza que nos da la Biblia: Jn 4, 29- Proponemos:
30; Am 8, 11 1. La búsqueda de una metodología que
Y de los documentos: DA 3; ayude a la conversión, por ejemplo, en-
cuentros bíblicos, talleres, lectura orante.
Con la certeza que nos da la Biblia: Is 55, Proponemos:
10-11 1. Una comunicación más fluida, compro-
Y de los documentos: DV 21; DV 25; DV metida y cercana en cuanto al acompa-
26 ñamiento a la formación bíblica desde la
animación pastoral nacional hacia los
ámbitos parroquiales teniendo en cuenta
la realidad y cultura de cada zona.
Con la certeza que nos da la Biblia: Is 50, 4- Proponemos:
5; Lc 1, 26;
1 Sa 18
Y de los documentos: EN 44; Lineamientos
para una catequesis permanente 63-64; EN
82
Y de otros: SENAC 58; 60
74
COMISION 12: ICP e Itinerario Litúrgico
37. Vemos que existe una catequesis escolarizada, sin tiempos litúrgicos, que no se centra en la Eucaristía dominical,
Con la certeza que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación
integral y por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el com-
promiso apostólico mediante un permanente servicio a los demás (DA 299);
Proponemos: recrear el catecumenado y discipulado como una experiencia para conocer, seguir, amar e imitar a Jesús y valorando la li-
turgia como lugar de catequesis permanente, un itinerario catequístico que acompañe los tiempos litúrgicos.

38. Visto que muchos catequistas no tienen formación litúrgica;

Con la certeza que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación
integral y por tanto se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el com-
promiso apostólico mediante un permanente servicio a los demás (DA 299);
Proponemos que los catequistas volvamos al primer amor viviendo en intimidad con Cristo en una actitud de continua imitación,
formándose en la catequesis y en la liturgia (la lectio divina, la liturgia de las horas, talleres bíblicos y la formación litúrgica kerygmáti-
ca), compartiendo la celebración del Misterio Pascual en la comunidad y bebiendo de la fuente principal: la Palabra y la Eucaristía para
ser verdaderos discípulos misioneros.

Visto que encontramos una dicotomía entre catequesis vivas y liturgias rígidas, sin fiesta; con la certeza que el trabajo coordinado
entre el grupo de catequesis y liturgia, para que los ritos resplandezcan con noble sencillez. (SC 34); proponemos insistir en el
centro, el eje que es Jesús, explicando los signos antes de realizar, con la citas bíblicas, para que los que participan en la celebra-
ción lleguen a saborear el encuentro con el Señor.

Visto que encontramos una dicotomía entre catequesis vivas y liturgias rígidas, sin fiesta; con la certeza que el trabajo coordinado
entre el grupo de catequesis y liturgia, para que los ritos resplandezcan con noble sencillez. (SC 34); proponemos que todas las
celebraciones sean kerygmaticas, dejando resonar el sentido profundo del mensaje del Maestro.

Visto que encontramos una dicotomía entre catequesis vivas y liturgias rígidas, sin fiesta; con la certeza que el trabajo coordinado
entre el grupo de catequesis y liturgia, para que los ritos resplandezcan con noble sencillez. (SC 34); proponemos que haya un
trabajo coordinado entre el grupo de catequistas y liturgia

Visto que encontramos una dicotomía entre catequesis vivas y liturgias rígidas, sin fiesta; con la certeza que la catequesis no pue-
de limitarse a una formación meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación integral. Por tanto, se ha
75
de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el compromiso
apostólico mediante un permanente servicio a los demás. (DA 299); proponemos que los catequistas procuren introducir en la
“iniciación litúrgica” desde la catequesis.

Visto que encontramos una dicotomía entre catequesis vivas y liturgias rígidas, sin fiesta; con la certeza que "La santa Madre
Iglesia considera que es su deber celebrar la obra de salvación de su divino Esposo con un sagrado recuerdo, en días determina-
dos a través del año. Cada semana, en el día que llamó 'del Señor', conmemora su resurrección, que una vez al año celebra tam-
bién, junto con su santa pasión, en la máxima solemnidad de la Pascua. Además, en el círculo del año desarrolla todo el misterio
de Cristo. Al conmemorar así los misterios de la redención, abre la riqueza de las virtudes y de los méritos de su Señor, de modo
que se los hace presentes en cierto modo, durante todo tiempo, a los fieles para que los alcancen y se llenen de la gracia de la sal-
vación" (SC 102) proponemos una catequesis que acompañe el calendario litúrgico, realizando las celebraciones fuera de los sa-
lones, sin calificar los trabajos

Visto que vemos una catequesis escolarizada, sin tiempos litúrgicos, que no se centra en la eucaristía dominical, con la certeza
que reconocemos las siguientes relaciones entre catequesis y liturgia:
La catequesis como preparación para la vida litúrgica;
La liturgia como catequesis en acto;
La liturgia como fuente de la catequesis.
(Sartore, “Liturgia y catequesis”)
Proponemos que respete los tiempos fuertes de la liturgia con lenguajes propios de la catequesis.

Visto que vemos una catequesis escolarizada, sin tiempos litúrgicos, que no se centra en la eucaristía dominical, con la certeza
que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación
integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comu-
nitaria, el compromiso apostólico mediante un permanente servicio a los demás. (DA 299); proponemos recrear al catecumenado
y discipulado como una experiencia para conocer, seguir, amar e imitar a Jesús.-

Visto que vemos una catequesis escolarizada, sin tiempos litúrgicos, que no se centra en la eucaristía dominical, con la certeza de
que la Liturgia, obra de Cristo, es también una acción de su Iglesia; la manifiesta como signo visible de la comunión entre Dios y
de los hombres. Implica una participación "consciente, activa y fructífera" de todos (SC 11); proponemos una Formación litúrgi-
ca de los catequistas como requisito para la formación liturgia de los catequizandos en clave mistagógica para facilitar la partici-
pación plena, consciente y activa de los bautizados en las celebraciones.

76
Visto que vemos una catequesis escolarizada, sin tiempos litúrgicos, que no se centra en la eucaristía dominical; con la certeza
que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación
integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comu-
nitaria, el compromiso apostólico mediante un permanente servicio a los demás. (DA 299); proponemos que a ejemplo de los
discípulos de Emaús, los catequistas lleven al encuentren con Cristo y a reconocerlo en la Eucaristía.

Visto que vemos una catequesis escolarizada, sin tiempos litúrgicos, que no se centra en la eucaristía dominical; con la certeza
que la catequesis litúrgica pretende introducir en el Misterio de Cristo (es "mistagogia"), procediendo de lo visible a lo invisible,
del signo a lo significado, de los "sacramentos" a los "misterios". (CATIC 1075); proponemos valorar la liturgia como lugar de
catequesis permanente (sobre todo en la homilía).

Visto que frecuentemente descubrimos una catequesis que no vive en comunión con la pastoral misionera y la oración, nunca lo-
grará “iniciar en la vida cristiana”; con la certeza que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino
que ha de ser una verdadera escuela de formación integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el
aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el compromiso apostólico mediante un permanente servicio a los
demás. (DA 299); proponemos que cada grupo de catequesis de acuerdo a la edad, lugar, cultura contemple una actividad misio-
nera haciendo pequeños sacrificios para prestar ayuda al prójimo.-

Visto que frecuentemente descubrimos una catequesis que no vive en comunión con la pastoral misionera y la oración, nunca lo-
grará “iniciar en la vida cristiana”; con la certeza que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino
que ha de ser una verdadera escuela de formación integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el
aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el compromiso apostólico mediante un permanente servicio a los
demás. (DA 299); proponemos propiciar momentos de oración

Visto que frecuentemente descubrimos una catequesis que no vive en comunión con la pastoral misionera y la oración, nunca lo-
grará “iniciar en la vida cristiana”; con la certeza que la catequesis no puede limitarse a una formación meramente doctrinal sino
que ha de ser una verdadera escuela de formación integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con Cristo en la oración, el
aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el compromiso apostólico mediante un permanente servicio a los
demás. (DA 299); proponemos que el catequista vuelva al primer Amor; viviendo en intimidad con Cristo en una actitud de con-
tinua iniciación, formándose en la catequesis y la liturgia, compartiendo la celebración y bebiendo de la fuente principal: Palabra
y Eucaristía para ser verdaderos discípulos misioneros.

Visto que frecuentemente descubrimos una catequesis que no vive en comunión con la pastoral misionera y la oración, nunca lo-
grará “iniciar en la vida cristiana”; con la certeza que la Liturgia, obra de Cristo, es también una acción de su Iglesia; la mani-
77
fiesta como signo visible de la comunión entre Dios y de los hombres. Implica una participación "consciente, activa y fructífera"
de todos (SC 11); proponemos que en el diálogo y la escucha lograr la unidad criterios y de objetivos a nivel diocesano / parro-
quial que posibilite la IC y el ICP.

Visto que muchos catequistas no tienen formación litúrgica; con la certeza que la catequesis debe partir de la vida, de la situa-
ción concreta, iluminarla con la Palabra de Dios y la liturgia, y volver a la vida y que es necesario que el catequista tenga una
formación no meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación integral fundada en un conocimiento
serio del significado de los sacramentos desterrar los catequistas individualista, que no cobra vida en la práctica sacramental
(DCG 234); proponemos propiciar la lectio divina, la liturgia de las horas, talleres bíblicos y formación litúrgica kerygmatica pa-
ra los catequistas.

Visto que muchos catequistas no tienen formación litúrgica; con la certeza que la catequesis no puede limitarse a una formación
meramente doctrinal sino que ha de ser una verdadera escuela de formación integral. Por tanto, se ha de cultivar la amistad con
Cristo en la oración, el aprecio por la celebración litúrgica, la vivencia comunitaria, el compromiso apostólico mediante un per-
manente servicio a los demás. (DA 299); proponemos que el catequista vuelva al primer Amor; viviendo en intimidad con Cristo
en una actitud de continua iniciación, formándose en la catequesis y la liturgia, compartiendo la celebración y bebiendo de la
fuente principal: Palabra y Eucaristía para ser verdaderos discípulos misioneros.

Visto que muchos catequistas no tienen formación litúrgica; con la certeza que la Liturgia, obra de Cristo, es también una acción
de su Iglesia; la manifiesta como signo visible de la comunión entre Dios y de los hombres. Implica una participación "conscien-
te, activa y fructífera" de todos (SC 11); proponemos que en el diálogo y la escucha se logre la unidad de criterios y de objetivos
a nivel diocesano / parroquial que posibilite la IC y el ICP.

Visto que muchos catequistas no tienen formación litúrgica; con la certeza que la Liturgia, obra de Cristo, es también una acción
de su Iglesia; la manifiesta como signo visible de la comunión entre Dios y de los hombres. Implica una participación "conscien-
te, activa y fructífera" de todos (SC 11); proponemos pensar, y desarrollar el ICP como acompañamiento, apoyo y discernimiento
de carismas y vocaciones al servicio de la Iglesia y de la sociedad.

78
Comisión 13: ICP y el catequista acompañante y su formación
Desde la Situación Desde la Iluminación Desde los anhelos
Visto que… Con la certeza que… Proponemos…
39. A) Viendo que por urgencias pasto- Con la certeza que Proponemos:
rales carencias formativas, vacíos pasto- D.A. 289 completo nos invitan a vivir un  Que para tener catequistas acompa-
rales o errores de comprensión del minis- proceso de IC y a un encuentro personal con ñantes formados y con coraje para
terio del catequista muchas veces nos Jesús. llevar adelante el ICP, vemos la ne-
encontramos con catequistas no evange- cesidad urgente de una formación
lizados. DCG 234 con estilo catecumenal, gradual, inte-
gral y permanente dentro de una
Viendo que :.en la formación del Cateq no Con la certeza que lo que hemos visto, oído pastoral orgánica.
siempre se tiene en cuenta la dimensión dis- y palpado sobre el Dios de la vida les anun- Proponemos:
cipular y apostólica ciamos,  Profundizar la formación bíblica y
la lectura orante para crecer en la
dimensión discípulos misioneros.
40. B) -Viendo que decimos: que no pre- Con la certeza que el catequista debe ser Proponemos:
sentamos una eclesiología de comunión dócil al Espíritu de Dios ( Hch 8,26)  Que la formación de catequistas ilu-
propuesta por el Vaticano II, encontra- mine y posibilite un discernimiento
mos líneas eclesiológicas opuestas y en Con la certeza que nos descubrimos crítico y libre a la luz del Evangelio
Llamados a renovar
conflictos ( en Seminarios de formación , en la espiritualidad de comunión como
movimientos, parroquias) dice JPII en NMI 43; y los obispos en DA Proponemos:
371)  Que los planes formativos de los ca-
tequistas se construyan en plena sin-
Visto que decimos: el modelo de ca-
tonía con la espiritualidad de co-
tequista individualista no responde a
munión y con los planes pastorales
la dimensión comunitaria de la fe
diocesanos y/o parroquiales.
 Que en los seminarios para la for-
mación del sacerdote se revisen y
profundicen los planes catequísticos
pastorales
41. C) Que no hay discernimiento co- Con la certeza que el ICP es una opción  Proponemos:
munitario de la vocación catequística; se comunitaria, debe haber un discernimiento  Profundizar la conciencia de perte-
79
 supone, se improvisa y se convoca
irresponsablemente
13.A
 Que por urgencias pastorales caren-
cias formativas , vacíos pastorales o
errores de comprensión del ministerio
del catequista muchas veces nos encon-
tramos con catequistas no convertidos y
es lo que más grave aún no misionados
 Hay catequistas que trabajan aislados
y no se sienten comunidad
13.B
 Faltan catequistas apasionados que
provoquen el encuentro y con una vida
coherente con la fe que profesan
 Sabemos que nos asiste el Espíritu de
serio y responsable de los carismas presentes
en la comunidad; ya que a tal catequista, tal
Iglesia
ICP es una opción comunitaria
 Profundizar la conciencia de Eclesia-
Con la certeza que
D.A. 289 completo nos invita a vivir un
proceso de IC y a un encuentro personal
con Jesús.
DCG 234
Con la certeza que nos da NMI 43; DA
307-310; DCG 219
Con la certeza que seamos testigos va-
lientes y fervorosos que sean evangeli-
zadores convencidos y entusiasta y por
sobre todo discípulos testigos con una
80
nencia a la comunidad para que toda
ella se haga responsable del discer-
nimiento y formación de los catequis-
tas.
lidad en los catequistas para no rom-
per la unidad y ser piedra de escán-
dalo.
Proponemos:
1. Que para tener catequistas acompa-
ñantes formados y con coraje para llevar
adelante el ICP: revisar los planes de es-
tudios de los seminarios catequísticos
diocesanos provocando un encuentro,
fortaleciéndolos en su misión y lo for-
men al estilo de Jesús (doctrinal-bíblica-
metodológica- litúrgica)
2. Que en los seminarios donde se for-
man los sacerdotes se incluya la forma-
ción catequística.
Proponemos:
7. Que las parroquias sean lugar privi-
legiado donde los fieles se formen en la
fe y la caridad en la que mutuamente se
acompañen y ayuden en el seguimiento
de Cristo.
8. Que las comunidades ayuden en el
discernimiento vocacional.
Proponemos :
Crear centros formativos parroquiales y
diocesanos que pongan el acento en la
formación permanente privilegiando su
Dios Que por urgencias pastorales ca-
rencias formativas , vacíos pastorales o
errores de comprensión del ministerio
del catequista muchas veces nos encon-
tramos con catequistas no convertidos y
es lo que más grave aún no misionados
 Hay catequistas que trabajan aisla-
dos y no se sienten comunidad y que hay
comunidades inmaduras y expulsivas. La
celebración y la liturgia, alegría del en-
cuentro con Jesús.
 Hay comunidades donde Cristo está
presente.
 Hay catequistas que no respetan pro-
cesos y que no descubren los signos de
los tiempos, además con una mentalidad
estructurada…
13- C
 No presentamos una eclesiología
post Vaticano II, encontramos líneas
eclesiológicas opuestas y en conflicto
(Seminarios de Form, movimientos, pa-
rroquias)
 Que no hay discernimiento comunita-
rio de la vocación catequística; se “su-
pone”, se improvisa, se convoca irres-
ponsablemente
 Que nuestra predicación responde a
preguntas que nadie se hace y que el
mundo en lugar de ser objeto de diálogo
es de temor.
 En la formación del Catequista no
vida impregnada por el Espíritu.
La Palabra de Dios, brújula y centro para
el ICP y Cat. Acomp. Y su Form. Como
con los discípulos de Emaus, Felipe; la
samaritana, la elección de Matías, Je-
remías en el taller del alfarero
El ICP es la opción comunitaria. Es la
comunidad que anuncia, recibe, acom-
paña y celebra.
Intuimos, percibimos que el catequista
acompañante del ICP necesita una for-
mación permanente.
El catequista debe ser dócil al espíritu de
Dios (Hch 8,26)
Que debe haber un discernimiento serio
y responsable de los carismas presente
en la comunidad, ya que a tal catequista
tal Iglesia…
Que el Evangelio responde a todos los
interrogantes del ser humano; que el
mundo nos da una enorme posibilidad de
presencia evangélica.
“Lo que hemos visto, oído, y palpado
sobre el Dios de la Vida les anunciamos”
81
ser desde la concepción.
Que es necesario el discernimiento voca-
cional- la apertura al Espíritu Santo y la
conversión abrazando la pedagogía de
Jesús, encarnándolo en su propia vida
que privilegian formar comunidades pe-
queñas que contagien, que atraigan a se-
guir el camino, comunidades personali-
zantes que vayan hacia la flia. , propo-
niendo valores, construyendo comunida-
des de comunidades …
 Que la formación de catequistas ilu-
minen y posibiliten un discernimiento
crítico a la luz del Evangelio para que
pueda optar por los espacios que le den
más vida y libertad.
 Profundizar la conciencia de perte-
nencia a la comunidad para que toda ella
se haga responsable del discernimiento y
formación de los catequistas.
 Avanzar sin miedos en el mundo de
la ciencia y la técnica ofreciendo las
propuestas alternativas del evangelio
 Profundizar la formación bíblica y
siempre se tiene en cuenta la dimensión
discipular y apostólica
 Carecemos de una conciencia plena
de pertenencia eclesial
13- D
 Las urgencias pastorales
 Los catequistas están sujetos a es-
quemas que no responden a las necesi-
dades de su interlocutor.
 El modelo de catequista individualis-
ta no responde a la dimensión comunita-
ria de la fe.
 Aún percibimos comunidades inma-
duras y expulsivas
13- E
 Estamos invitados a redescubrir no-
sotros y hacer redescubrir a todos el se-
guimiento de Cristo.
(1Jn 1,1)
Tenemos que ser “uno para que el mun-
do crea” (Jn 17,23)
El catequista descubre y desarrolla su
vocación sólo desde el encuentro con
Cristo (DA 243)
Que el espíritu nos invita a caminar junto
a… (Hch 8,29 ss)
De que nos descubrimos llamados a re-
novar en la espiritualidad de comunión
(NMI 43; DA 371)
La llamada a una conversión comunitaria
y pastoral
Con la certeza que nos da la Palabra de
Dios del encuentro del Resucitado ( Lc
24,13-35; Hch 8, 6-40, Jn 4,1-45)
82
lectura orante para crecer en la dimen-
sión discipular apostólica.
 Profundizar la conciencia de Eclesia-
lidad en los catequistas para no romper
la unidad y ser piedra de escándolo.
 La necesidad urgente de una forma-
ción con estilo catecumenal, gradual, in-
tegral y permanente.
 Que el catequista conozca y haga vi-
da la en pedagogía de Jesús que se acer-
ca, va al encuentro, acompaña, escucha y
anuncia.
 Que los planes formativos de los ca-
tequistas se construyan en plena sintonía
con la misma (espiritualidad de comu-
nión) y con los planes pastorales dioce-
sanos y/o parroquiales.
 Comunidades convertidas que for-
men y animen el desarrollo del ICP para
su catequista.
Proponemos realizar una pastoral comu-
nitaria catequística, orgánica, con itine-
rario gradual que respete los procesos y
los tiempos de las personas.
Comisión 14 – ICP y Doctrinal Social de la Iglesia

BASTA YA PROPONEMOS

42. Del desconocimiento y Falta de Compromiso con
la DSI de Obispos, Sacerdotes, Catequistas y Agen-
tes Pastorales.
Reconocer la DSI como prioridad pastoral. Impulsar su conoci-
miento y promover su efectiva aplicación en el ICP para que nues-
tros Pastores, Catequistas y demás Agentes de Pastoral, puedan
vivirla en comunión y misión, con un lenguaje adecuado a las di-
versas realidades, con proyección social.

QUERIDOS HERMANOS CONGRESISTAS…

Este CONGRESO HA SIDO UN ACONTECIMIENTO DE GRACIA

Este CONGRESO HA SIDO UNA MANIFESTACIÓN DE TU PASCUA
Este CONGRESO ES UN COMPROMISO PARA CONSAGRAR NUESTRA VIDA PARA EL REINO

… GRACIAS PADRE… GRACIAS JESUS … GRACIAS ESPIRITU

GRACIAS COMUNIÓN TRINITARIA

… POR ESCUCHAR NUESTRA ORACIÓN

COMO CONGRESISTAS, DE UNA COMISIÓN MINOTARIA, QUEREMOS HACER OIR NUESTRA VOZ, EN MEDIO DE
TANTAS PROPUESTAS. Y COMO MINORIA QUE SOMOS, DEBEMOS SER AUDACES EN CONTAGIAR EL EN-
TUCIASMO QUE NOS EMBARGA, Y QUE NUESTRA PROPUESTA TENGA LA MISMA FUERZA, QUE MUCHAS
PROPUESTAS CON DIVERSIDAD DE EXPRESIÓN, COMO LAS ESCUCHADAS.-
A NOSOTROS NOS TOCA SOLAMENTE UNA PROPOSICIÓN, Y POR ELLO, NOS HEMOS PERMITDO DOS LICENCIAS:

1- LA PRIMER LICENCIA O PRIMER PERMISO, ES QUE NUESTRA PROPUESTA NO SOLAMENTE LA VAN A ESCUCHAR
SINO QUE LA VER.
Y PARA ELLO, HEMOS ELEGIDO UN SIMBOLO QUE NOS ACOMPAÑO DESDE EL PRIMER MOMENTO. QUE FUE CEN-
TRAL EN NUESTRA COMISIÓN, PORQUE ESTABA EN EL MEDIO, RODEANDO A LA PALABRA, COMO QUE-
RIENDO MOSTRARNOS UN CAMINO…

83
Y ESTE OBJETO… ES EL MATE… TAN SENCILLO Y TAN PARTE DE NUESTRO PUEBLO… ESPECIALMENTE EL MAS
POBRE.
Y USTEDES CONGRESISTAS SE DIRAN… QUE TIENE QUE VER EL MATE CON LA DOCTRINA SOCIAL…

EL MATE … ES MUCHAS VECES EL UNICO ALIMENTO DE NUESTRO PUEBLO.-

EL MATE… ES LA REUNIÓN OBLIGADA DEL INICIO O EL TERMINAR DEL DIA…
EL MATE… ES COMPAÑÍA …ENCUENTRO Y ENTREGA…
EL MATE… QUITA LA SED DEL HOMBRE TRABAJADOR..
EL MATE… ES ALEGRIA Y COMPARTIR …
EL MATE … ES DIGNIDAD Y HONOR… PARA EL HUESPED MAS HUMILDE Y AUN EL MAS DISTINGUIDO
EL MATE … ES LENGUAJE SENCILLO …SIMPLE Y DIRECTO

SE DA DE MANO EN MANO… NO SE PUEDE ARROJAR DESDE LEJOS ... TIENE QUE SER ENTREGADO DE CERQUITA.
TIENE QUE SE ESPUMOSO… TIENE QUE SER FRATERNO.

NO BASTA SABER PREPARAR EL MATE … HAY QUE HACERLO Y COMPARTIRLO, PARA QUE LA SONRISA SE DIBUJE
EN LA CARA…

Y USTEDES SE DIRAN… QUE TIENE QUE VER ESTO CON LA DOCTRINA SOCIAL …

MUCHAS VECES SABEMOS PREPARAR EL MATE … PERO POR LOS LIBROS … CUANTO NOS CUESTA SEÑOR… PRE-
PARARTE UN RICO MATE … QUE PODAMOS COMPARTIR CON NUESTRO PUEBLO…

AHORA VIENE LA PROPUESTA…

HERMANOS CONGRESISTAS …
LA DOCTRINA SOCIAL ES TAN SIMPLE COMO EL MATE…

CATEQUISTAS… COMO NOS DECIA MONSEÑOR ANGELELLI…

CON UN OIDO EN EVANGELIO Y EL OTRO OIDO EN EL PUEBLO …
TAN SIMPLE COMO EL MATE….

LA SEGUNDA LICENCIA O SEGUNDO PERMISO QUE NOS HEMOS TOMADO

84
ES QUE ESTE MATE QUE HEMOS COMPARTIDO EN NUESTRA COMISIÓN DESDE QUE DIMOS INICIO AL CONGRE-
SO… SE LO VAMOS A ENTREGAR A MONSEÑOR CELSO MORGA IRUZUVBIETA .. PARA QUE CUANDO ESTE
CON SU SANTIDAD BENEDICTO XVI … LE INVITE Y LE CUENTE QUE ES UN ANHELO DE LOS CATEQUIS-
TAS DE ARGENTINA, QUE EN NUESTRA IGLESIA QUIERE NO SOLO CONOCER, SINO COMPROMETERSE
CON NUESTRO PUEBLO… ESPECIALMENTE EL MAS HUMILDE, PARA LLEVAR LA DOCTRINA SOCIAL EN
UN LENGUAJE SENCILLO Y FRATERNO…

TAN SENCILLO… COMO EL MATE, EN UN NUEVO PENTECOSTES.-

DESDE LA SITUACIÒN DESDE LA ILUMINACIÒN DESDE LOS ANHELOS

VISTO QUE… CON LA CERTEZA QUE… PROPONEMOS…
SIGNOS DE LOS TIEMPOS – 1 LUCES TESORO – IMAGEN DE LA TRINIDAD – A los obispos, Sacerdotes y Catequistas de
MODELO DE INICIACIÓN – IGLESIA America Latina, de realizar un Congreso de
1- La importancia de la familia como célula
de la sociedad, capaz de comprometerse con
DOMESTICA Familia. (Padres e hijos) para poder armar
los valores y con la Sociedad.- lineamientos que nos permitan al resto de
los catequistas seguir evangelizando y cate-
quizando a las familias modernas; defender
los valores morales, con criterios y funda-
mentos.-
Revisar el documento Familiaris Consortio
CONVERSIÓN PASTORAL – 3 BASTA Cuidado con el doble discurso. La realización de Encuentros Regionales
YA AP 366. CDSI 11 frecuentes y gradual de Catequistas, desarro-
3-Del desconocimiento y Falta de Compro- llando la formación en DSI.-
miso con la DSI de Obispos, Sacerdotes,
Catequistas y Agentes Pastorales. Elaborar programas donde estén temas de
DSI para niños, adolescentes y jóvenes.
Desde la Junta ofrecer talleres de formación
para catequistas sobre DSI.
Dentro de las bibliotecas de Catequistas de la
parroquias esten los documentos de DSI.
CAMUNIDADES – LUCES Acción privilegiada y primordial. Imitar a Abrirse y actuar en conjunto con las demás
3- La Misión como herramienta de evangeli- Jesús y copiar sus actitudes. instituciones civiles de ayuda para el bien
zación AP.170-28-29. CATIC173 común.
85
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUZ 2 La acción desarrollada por la Iglesia, fijando Una catequesis creible que anuncie el evan-
El esfuerzo de la Pastoral Social, para cons- los principios de Dignidad Humana, Bien gelio con lenguaje popular, denuncie con
truir CIUDADANOS comprometidos. Común, Subsidiaridad, Participación, Solida- valentía las injusticias sociales y renuncie a
ridad y Justicia. estructuras que no funcionen.-
D.S.I 189, 147.
G.S 50, 29.
Aparecida 99 (f)
SIGNO DE LOS TIEMPOS – BASTA YA 2 D.S.I 464,465. Una catequesis con espiritualidad de comu-
El relativismo, la sociedad de consumo, la Aparecida 357 nión que viva la realidad y de respuestas
indiferencia social y falta de respuestas ade- concretas a los nuevos desafíos.-
cuadas a los nuevos desafíos.-
CONVERSION PASTORAL – LUZ 1 Cristo nos invita a un PROCESO DE CON- Una catequesis que forme cristianos en la
Los Sacramentos como camino de GRACIA, VERSIÓN. oración, la eucaristía, la vida comunitaria y
comunicación de DIOS con el HOMBRE e C.V 54. el compromiso-Servicio.-
invitación en Cristo a la Comunión Trinita- S.C 7.
ria. N.M.A 50, 54, 73, 74.
CONVERSIÒN PASTORAL – BASTA YA Apertura hacia la formación permanente de
3 Cuidado con el doble discurso. los Agentes de Pastoral, que incluya los con-
Del desconocimiento y Falta de Compromiso AP 366. CDSI 11 tenidos de la DSI para conocer y actuar en
con la DSI de Obispos, Sacerdotes, Cate- los distintos ámbitos sociales a través de un
quistas y Agentes Pastorales. proyecto pastoral que se abstenga “ del do-
ble discurso”.
NUEVA CATEQUESIS – NUEVO CATE- CONOCIMIENTO. FIDELIDAD El aumento y la mejora de las instancias
QUSITA – LUCES 3 AP 99 a formativas, de orden sistemático y no for-
Los centros de formación y difusión incorpo- DSI 528 mal, que estén al alcance de todo miembro
rando nuevas formas de impulsar la difusión CFL 60 de la sociedad.
de la catequesis y la DSI.-
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUCES 1 Tesoro de nuestro Pueblo, Imagen de la Tri- Revalorizar la Catequesis Familiar, adaptan-
- La importancia de la familia como célula de nidad y Vital de nuestro pueblo. Modelo de do su metodología a estos tiempos; porque
la sociedad, capaz de comprometerse con los Iniciación en la Vida Social. Modelo de Ini- entendemos que es el primer ambito donde
valores y con la Sociedad.- ciación Cristiana Domestico. se educa desde la fe para la vida. Se transmi-
Gn. 1, 28 te los valores y se enseña el bien común.-
c.ic 2207
86
 D.S.I 14-147- Dignidad de la mujer. J. P II
Aparecida 432-436.
NUEVA CATEQUESIS - LUCES 2 DELEGADOS DE LA PALABRA POR EL Definir un perfil de catequistas donde la
El rol asignado por el Magisterio a los Cate- BAUTISMO formación sea un requisito indispensable,
quistas. AP 211 incluida la DSI.-
CONVERSION PASTORAL – BASTA YA Cuidado con el doble discurso. Revisar que catequistas tenemos.
3 AP 366. CDSI 11
Del desconocimiento y Falta de Compromiso
con la DSI de Obispos, Sacerdotes, Cate-
quistas y Agentes Pastorales.
CONVERSIÓN PASTORAL – BASTA YA Talleres de estudio, formación seminarios de
3 Cuidado con el doble discurso. catequesis para los catequistas que se ini-
Del desconocimiento y Falta de Compromiso AP 366. CDSI 11 cian, con los sacerdotes que acompañen este
con la DSI de Obispos, Sacerdotes, Cate- proceso y así puedan vivir con firmeza y sin
quistas y Agentes Pastorales. temor los principios de la verdad cristiana
enseñados por el magisterio de la iglesia.-
NUEVA CATEQUESIS - NC – BASTA YA AP 296 Que la formación catequética de los semina-
3 ristas comience a partir del primer año de
De Sacerdotes que, como primeros catequis- formación.
tas, no asumen la conducción de la cateque-
sis y reducen su ministerio a impartir sacra-
mentos.-
SIGNO DE LOS TIEMPOS – BASTA YA 3 Fe y Razón dualidad inseparables, destacan- Incluir la Doctrina Social en la Catequesis
Desconocimiento de la Doctrina Social en la do la Centralidad de Cristo. Es escandaloso interactuando ambas pastorales ( catequesis
propia Iglesia.- frente a una sociedad mayoritariamente de y Pastoral Social)
bautizados.-
D.S.I 7, 38, 75.
COMUNIDADES – BASTA YA 3 y DIALOGO MODERNO Que se transmita el mensaje evangélico de
De un Lenguaje que no se adapte a cada rea- JPEP.38. AP. 480-518 forma sencilla mimetizado a cada realidad,
lidad. utilizando modos creativos.
NUEVOS CATEQUISTAS – BASTA YA 3 AP 296
- De Sacerdotes que, como primeros cate-
quistas, no asumen la conducción de la cate-
87
quesis y reducen su ministerio a impartir
sacramentos.-
CONVERSION PASTORAL – BASTA YA Cuidado con el doble discurso. La DSI sea conocida a través de espacios de
3 AP 366. CDSI 11 reflexión y debate, por la iglesia y que com-
- Del desconocimiento y Falta de Compromi- prometidas con ella, la vivifiquemos y la
so con la DSI de Obispos, Sacerdotes, Cate- transmitamos.-
quistas y Agentes Pastorales. Fe y Razón dualidad inseparables, destacan-
do la Centralidad de Cristo. Es escandaloso
SIGNO DE LOS TIEMPOS – BASTA YA 3 frente a una sociedad mayoritariamente de
Desconocimiento de la Doctrina Social en la bautizados.-
propia Iglesia.- D.S.I 7, 38, 75.
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUCES 1 Tesoro de nuestro Pueblo, Imagen de la Tri- Reforzar e iniciar la Catequesis Familiar co-
- La importancia de la familia como célula de nidad y Vital de nuestro pueblo. Modelo de mo ámbito para el ICP que acompañe y sos-
la sociedad, capaz de comprometerse con los Iniciación en la Vida Social. Modelo de Ini- tenga a la familia.-
valores y con la Sociedad.- ciación Cristiana Domestico.
Gn. 1, 28
c.ic 2207
D.S.I 14-147- Dignidad de la mujer.
J. P II
Aparecida 432-436.
SIGNO DE LOS TIEMPOS – BASTA YA 3 Fe y Razón dualidad inseparables, destacan- Preparación y compromiso de los laicos para
- Desconocimiento de la Doctrina Social en do la Centralidad de Cristo. Es escandaloso intervenir en asuntos sociales, y promover la
la propia Iglesia.- frente a una sociedad mayoritariamente de formación y acción de laicos competentes;
bautizados.- animarlos a organizarse para defender la vi-
D.S.I 7, 38, 75. da y la familia ( problemáticas sociales).
Promover espacios de una atención a la niñez
y adolescencia.-
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUCES 2 La acción desarrollada por la Iglesia, fijando Una pastoral orgánica y de conjunto, que nos
El esfuerzo de la Pastoral Social, para cons- los principios de Dignidad Humana, Bien permitan establecer lineamientos claros para
truir CIUDADANOS comprometidos. Común, Subsidiaridad, Participación, Solida- abordar la problemática actual, a la luz de
ridad y Justicia. DSI.-
D.S.I 189, 147.
G.S 50, 29.
88
 Aparecida 99 (f)
COMUNIDADES – LUCES 3 Acción privilegiada y primordial. Imitar a Material catequético de formación con visión
La Misión como herramienta de evangeliza- Jesús y copiar sus actitudes. hacia la DSI, acordes a la realidad actual,
ción.- AP.170-28-29. CATIC173 partiendo del modelo Trinitario Cristocentri-
co.-
CONVERSIÓN PASTORAL – LUCES 1 Cristo nos invita a un PROCESO DE CON- Volver a afianzar, catequizar y remarcar el
1-Los Sacramentos como camino de GRA- VERSIÓN. sentido salvifico de los sacramentos, que no
CIA, comunicación de DIOS con el HOM- C.V 54. son un acto social.-
BRE e invitación en Cristo a la Comunión S.C 7.
Trinitaria. N.M.A 50, 54, 73, 74.
C.T 23.
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUCES 2 La acción desarrollada por la Iglesia, fijando Incorporar en actividades concretas la fami-
- El esfuerzo de la Pastoral Social, para cons- los principios de Dignidad Humana, Bien lia en su conjunto como primer grupo social,
truir CIUDADANOS comprometidos. Común, Subsidiaridad, Participación, Solida- haciéndole participe como tal en su evange-
ridad y Justicia. lización tratando que no esté fragmentada.-
D.S.I 189, 147.
G.S 50, 29.
Aparecida 99 (f)
NUEVO CATEQUISTA – LUCES 3 CONOCIMIENTO. FIDELIDAD Que los programas de formación de catequis-
Los centros de formación y difusión incorpo- AP 99 a tas, incluyan a la DSI como eje transversal
rando nuevas formas de impulsar la difusión DSI 528 porque allí se presentan los principios de
de la catequesis y la DSI.- CFL 60 reflexión, los criterios de juicio y las accio-
nes para promover un humanismo integral y
solidario.
SIGNO DE LOS TIEMPOS – SOMBRA 3 Fe y Razón dualidad inseparables, destacan- Presentar distintas instancias de formación a
Desconocimiento de la Doctrina Social en la do la Centralidad de Cristo. Es escandaloso todos los agentes de pastoral sobre DSI, en
propia Iglesia.- frente a una sociedad mayoritariamente de su historia, contenido y metodología para
bautizados.- que ella oriente el análisis y resolución a
COMUNIDADES – SOMBRA 2 D.S.I 7, 38, 75. situaciones concretas.
2- Falta de entendimiento de Pastores y Co-
munidades, que la DSI es parte del mensaje COMPENDIO DE DSI. 7-11. SOLLICI-
evangélico. TUDO REI SOCIALIS 41 PENULTIMO
PARRAFO. AP.193
CONVERSIÓN PASTORAL – BASTA YA Secularismo del mensaje de muchos cate- Un estado de misión permanente de todas las
89
2y quistas. areas pastorales para el conocimiento de
3 Aparecida 100 h) LPNE 12, AP 136 nuestra comunidad abocada a la búsqueda
De una catequesis que se percibe indiferente CIC 2422. del bien común.
e Incoherente con el mensaje evangélico.-
Cuidado con el doble discurso.
3-Del desconocimiento y Falta de Compro- AP 366. CDSI 11
miso con la DSI de Obispos, Sacerdotes,
Catequistas y Agentes Pastorales. COMPENDIO DE DSI. 7-11. SOLLICI-
TUDO REI SOCIALIS 41 PENULTIMO
COMUNIDADES BASTA YA 2 PARRAFO. AP.193
Falta de entendimiento de Pastores y Comu-
nidades, que la DSI es parte del mensaje
evangélico.
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUCES 2 La acción desarrollada por la Iglesia, fijando Promover espacios evangelizadores en am-
El esfuerzo de la Pastoral Social, para cons- los principios de Dignidad Humana, Bien bientes secularizados como Partidos Políti-
truir CIUDADANOS comprometidos. Común, Subsidiaridad, Participación, Solida- cos, Sociedades de fomento, grupos juveni-
ridad y Justicia. les, para hacer oir la DSI
D.S.I 189, 147.
G.S 50, 29.
Aparecida 99 (f)
BASTA YA 3
Desconocimiento de la Doctrina Social en la Fe y Razón dualidad inseparables, destacan-
propia Iglesia.- do la Centralidad de Cristo. Es escandaloso
frente a una sociedad mayoritariamente de
bautizados.-
D.S.I 7, 38, 75.
NUEVO CATEQUESIS – LUCES 3 CONOCIMIENTO. FIDELIDAD Que los catequistas se interioricen de la im-
Los centros de formación y difusión incorpo- AP 99 a portancia que tiene la DSI en su formación.-
rando nuevas formas de impulsar la difusión DSI 528
de la catequesis y la DSI.- CFL 60
COMUNIDADES – BASTA YA 2 COMPENDIO DE DSI. 7-11. SOLLICI- Necesidad de tener catequistas que se intere-
Falta de entendimiento de Pastores y Comu- TUDO REI SOCIALIS 41 PENULTIMO sen por la situación socioeconómico de las
nidades, que la DSI es parte del mensaje PARRAFO. AP.193 familias, realizando censos utilizando los
evangélico. momentos litúrgico fuertes de la iglesia, pa-
90

SIGNO DE LOS TIEMPOS LUCES 3
La realidad nos interpela y hay ganas de
cambio.
SIGNO DE LOS TIEMPOS – LUCES 1
- La importancia de la familia como célula de
la sociedad, capaz de comprometerse con los
valores y con la Sociedad.-
SIGNO DE LOS TIEMPO – LUCES 1
- La importancia de la familia como célula de
la sociedad, capaz de comprometerse con los
valores y con la Sociedad.-
ra luego, utilizarlo con las otras instituciones
de respuesta social.-
Aparecida 22. E.N Pablo VI. No tener miedo al cambio y salir de nuestras
Aparecida 400. seguridades. Salir del YO, ME, MI CON-
MIGO, PARA MI. Y enseñar desde la cate-
quesis, desde la Iglesia la importancia de
involucrarnos en las cuestiones sociales, da-
do que cristo vino a salvar al hombre entero
– CUERPO Y ALMA.-
Tesoro de nuestro Pueblo, Imagen de la Tri- La formación y capacitación de las familias,
nidad y Vital de nuestro pueblo. Modelo de según la DSI.
Iniciación en la Vida Social. Modelo de Ini-
ciación Cristiana Domestico.
Gn. 1, 28
c.ic 2207
D.S.I 14-147- Dignidad de la mujer. J. P II
Aparecida 432-436
Tesoro de nuestro Pueblo, Imagen de la Tri- Una pastoral familiar que incluya los valores
nidad y Vital de nuestro pueblo. Modelo de de la DSI
Iniciación en la Vida Social. Modelo de Ini-
ciación Cristiana Domestico.
Gn. 1, 28
c.ic 2207
D.S.I 14-147- Dignidad de la mujer. J. P II
Aparecida 432-436.
91
COMISIÓN 15: ICP y Educación Religiosa Escolar
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN PROPUESTA
1 nadie cree en Dios sino cree en El fin definitivo de 1. Proponemos profundizaren una
Identidad del cate- alguien que lo anuncie y comparta la catequesis es poner a uno no s espiritualidad de encuentro con Cristo y
quista ólo en contacto sino desde allí con todos los hombres.
en comunión,
en intimidad con Jesucristo »
DGC n° 80,
Visto que a los docentes catequis- “La vocación y el compromiso de 2. Proponemos generar espacios de
tas nos falta formación e instruc- ser hoy discípulos y misioneros estudio - reflexión y oración dentro de
ción de Jesucristo en América Latina las comunidades catequizadoras.
y El Caribe, requieren una clara
y decidida opción por la forma-
ción de los miembros de nuestras
comunidades” (Ap 276…)
Visto que a los catequistas escola- Con la certeza que la misión de la 3. Proponemos que las escuelas
res nos falta formación catequísti- escuela católica es evangelizar generen espacios de formación INTE-
ca en algunos casos y pedagógica educando GRAL -específica (doctrinaria,
en otros. humanística espiritual, pedagogía, me-
todología catequística, didáctica, etc.)

Visto que contamos con muchos Con la certeza que la vocación es 4. Proponemos crear y recrear
catequistas que viven su ser voca- un llamado de Dios que nos ple- espacios de encuentro, e intercambio,
cionado en la escuela. nifica como personas tendiendo a la generación de comuni-
dades.

La demanda de formación perma-
nente por parte de los docentes
catequistas resuena en las distintas
regiones de nuestro país.
Tantos catequistas enamorados de
la Pascua que cumplen su misión
La adecuada formación de los
catequistas debe ser prioritaria
para garantizar el itinerario cate-
quístico permanente. (DCG)
Formar discípulos misioneros, de
forma que puedan desarrollar
5. Qué los catequistas docentes
escolares compartan su experiencia de
fe con los miembros de la comunidad
educativa.
6. Qué los catequistas tengan in-
quietud de formación, recurriendo a los

92
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN
de bautizados en las escuelas cató- mejor su ministerio.(DA)
licas de nuestro país recogiendo
frutos por la gracia de Dios, con-
tagien su alegría cristiana a todos
los miembros de la comunidad
educativa
43. Vista la necesidad de gene- 243: El acontecimiento de Cristo
rar espacios donde se pueda es, por lo tanto, el inicio de ese
construir, reconstruir y afianzar sujeto nuevo que surge en la his-
la identidad del catequista es- toria y al que llamamos discípu-
colar… lo: “No se comienza a ser cristia-
no por una decisión ética o una
gran idea, sino por el encuentro
con un acontecimiento, con una
Persona, que da un nuevo hori-
zonte a la vida, y, con ello, una
orientación decisiva” (ibid.1).
Esto es justamente lo que, con
presentaciones diferentes, nos
han conservado todos los evange-
lios como el inicio del cristianis-
mo: un encuentro de fe con la
Persona de Jesús (cf. Jn. 1, 35-
39).
PROPUESTA
medios que tiene a su alcance.
7. Qué los catequistas siendo fieles
a la Palabra tengan una intensa vida de
oración y sacramental.
8. Que se puedan articular espacios
escolares donde el docente catequista
plantee sus problemáticas específicas.
9. Promover la realización de un
Congreso Nacional de Pastoral Edu-
cativa, que implique previamente
espacios diocesanos y regionales y
que permita sentar las bases de un
proyecto de carácter nacional.
10. Generar equipos diocesanos que
trabajen en la actualización de los con-
tenidos para todos los niveles escolares
y que luego estas

DA 334 La Iglesia está llamada a

promover en sus escuelas una
educación centrada en la persona
humana que es capaz de vivir en
la comunidad, aportando lo suyo
para su bien. Ante el hecho de
que
muchos se encuentran excluidos,
93
 TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN PROPUESTA
la Iglesia deberá impulsar una
educación de calidad para todos,
formal y no-formal, especialmen-
te para los más pobres. Educa-
ción que ofrezca a los niños, a
los jóvenes y a los adultos el en-
cuentro con los valores culturales
del propio país, descubriendo o
integrando en ellos la dimensión
religiosa y trascendente. Para
ello, necesitamos una pastoral de
la educación dinámica y que
acompañe los procesos educati-
vos, que sea voz que legitime y
salvaguarde la libertad de educa-
ción ante el Estado y el derecho a
una educación de calidad de los
más desposeídos.
el catequista necesita profundizar como educadores católicos debe- 11. Proponemos que los esfuerzos
en su relación con Cristo y tam- mos estar preparados para saber no sean aislados sino mancomunados a
bién en el conocimiento de los dar respuesta de fe frente a las nivel nacional/regional y que cada dió-
contenidos de fe. realidades que nos interpelan. cesis sea la que resguarde y garantice la
formación. Articulen los medios para
que los catequistas reciban la formación
que requieren según la necesidad pasto-
ral a través de institutos de formación
catequético-pastoral, seminarios, con-
gresos.
valoramos la importancia para no- “298. La catequesis no debe ser 12. proponemos crear donde no
2
sotros catequistas docentes de sólo ocasional, reducida a los exista o adecuar un itinerario que facili-
La actividad del
trasmitir la fe desde pequeños y momentos previos a los sacra- te la madurez en la fe, conocido por
docente catequista
acompañarlo a lo largo la etapa de mentos o a la iniciación cristiana, toda la comunidad educativa y sus fa-

94
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN
su vida sino más bien “un itinerario cate-
quético permanente Ap. 298”;
La educación permanente de
la fe se dirige no sólo a ca-
da cristiano, para acompañarle en
su camino hacia la santidad, sino
también a
la comunidad cristiana como tal,
para que vaya madurando tanto
en
su vida interna de amor a Dios y
de amor fraterno, cuanto en
su apertura al mundo como comu
nidad misionera…(DGC n° 70)
Visto que muchos alumnos ingre- Con la certeza que la escuela es
san a la escuela sin la iniciación ámbito de Evangelización.
cristiana.
44. Visto la falta coordinación, Con la certeza de la catequesis es
planificación y adecuación de sistemática, orgánica, procesual y
los contenidos en la Cateque- comunitaria
sis Escolar.
Visto la falta de acompañamiento Con la certeza que tomos por el
de los sacerdotes a las escuelas Bautismo somos sacerdotes
PROPUESTA
milias
13. Proponemos que se asuma esta
realidad y se generen espacios para re-
pensar la iniciación sacramental en la
escuela y su relación con la parroquia.
14. Pensar y crear propuestas crea-
tivas kerigmáticas que inicien los itine-
rarios catequísticos anuales
15. Proponemos creación de espa-
cios eclesiales en donde se reflexione,
trabaje, acompañe la construcción de
itinerarios catequísticos que revisen
contenidos y criterios de evaluación
que reconozcan realidades, procesos
y contextos actuales.
16. Proponemos revalorización de
los Ministerios Laicales, a través de la
confirmación de equipos de pastoral,
formación específica, animación litúr-

95
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN PROPUESTA
gica, etc
Hay falta de acompañamiento de -…porque la función propia del 17. Animar a los Sacerdotes a parti-
los Sacerdotes a las escuelas presbítero en la tarea catequiza- cipar activamente en la Catequesis Es-
dora brota del Sacramento del colar para que organicen eventos que
Orden que han recibido “por el faciliten la actualización y formación de
Sacramento del orden, los presbí- los catequistas escolares y asesoren en
tero se configuran con Cristo el proyecto de formación.
Sacerdote, como Ministro de la
Cabeza, para construir y edificar
todo su Cuerpo, que es la Iglesia,
como cooperadores del Orden
Episcopal…
El Sacramento del Orden consti-
tuye a los presbíteros en educa-
dores en la Fe (DCG 224)
Visto que es complejo hacernos Aparecida 337: La escuela católi- 18. Una mirada amplia (familia, do-
cargo de la diversidad cultural en ca está llamada a una profunda centes, empobrecidos) que se haga car-
la que vivimos y nos cuesta ver el renovación. Debemos rescatar la go de la diversidad en la que el Reino
Reino presente… identidad católica de nuestros vive ya.
centros educativos por medio de
un impulso misionero valiente y 19. Una disposición a leer interdis-
audaz, de modo que llegue a ser ciplinariamente la presencia de Dios
una opción profética plasmada en
una pastoral de la educación par-
ticipativa. Dichos proyectos de-
ben promover la formación inte-
gral de la persona teniendo su
fundamento en Cristo con identi-
dad eclesial y cultural, y con ex-
celencia académica. Además, han
de generar solidaridad y caridad
con los más pobres. El acompa-
ñamiento de los procesos educa-
96
 TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN
tivos, la participación en ellos de
los padres de familia, y la forma-
ción de docentes son tareas prio-
ritarias de la pastoral educativa.
los lineamientos curriculares para es necesario contar con un plan
la enseñanza religiosa no han sido orgánico, sistemático, procesual
debidamente socializados ni actua- que sirva como marco para la
lizados. unificación de contenidos.
3 Visto que en nuestras escuelas los la Enseñanza Religiosa Escolar
ESCUELA EN docentes de otras disciplinas no debe ser un eje que atraviese toda
PASTORAL adhieren complemente a la cos- la curricular y que impregne de
movisión cristiana y cargan todo el fe la mirada de las distintas dis-
peso y la responsabilidad de ser ciplinas a fin de ser fiel a la mi-
referente de fe únicamente al do- sión de la escuela católica de
cente catequista. llevar a sus alumnos a la síntesis
fe-cultura.
Visto que se percibe un difusa es necesario una clara definición
comprensión de la visión y misión de estos conceptos para afianzar
de la escuela católica. la identidad de la escuela católi-
ca.
concebimos a la escuela como cen- “La Escuela católica está llama-
tro de evangelización necesitamos da a una profunda renovación y
actualizar nuestra visión respecto a debemos rescatar la identidad
su misión católica de nuestros centros edu-
cativos por medio de un impulso
misionero valiente y audaz, de
modo que llegue a ser una op-
ción profética plasmada en una
pastoral de la educación partici-
pativa. Dichos proyectos deben
promover la formación integral
97
PROPUESTA
20. la revisión y actualización de los
Lineamientos Curriculares y la pronta
puesta en práctica de los mismos en el
ámbito escolar.
21. Proponemos incluir efectiva-
mente la Enseñanza Religiosa como eje
transversal en el PEI.
22. generar proyectos pastorales in-
tegradores y articulados con la parro-
quia, la familia y otras instituciones
que permitan la realización de acciones
solidarias concretas.
23. proponemos revisar, adaptar y
elaborar los proyectos pastorales en
comunión con la pastoral parroquial y
Diocesana, también proponemos que
sean escuelas inclusivas, abiertas, para
todos, una comunidad que se haga ex-
presión a lo largo del camino de sus
destinatarios
TEMA SITUACIÓN
Ante la existencia de acciones pas-
torales educativas descoordina-
das…
Visto que la escuela es un espacio
privilegiado de evangelización, de
modo que la catequesis tiene que
tener un lugar destacado en el en
PCI….
ILUMINACIÓN PROPUESTA
de la persona teniendo su funda-
mento en Cristo, con identidad
eclesial y cultural, y con excelen-
cia académica. Además, han de
generar solidaridad y caridad
con los más pobres. El acompa-
ñamiento de los procesos educa-
tivos, la participación en ellos de
los padres de familia, y la forma-
ción de docentes, son tareas
prioritarias de la pastoral educa-
tiva”. Ap n° 337
la necesidad de optimizar las 24. Propiciar la formación de orga-
acciones para trabajar en una nismos (vicarías, juntas de catequesis,
pastoral de conjunto que genere etc) que nucleen y coordinen las accio-
un espíritu de comunión- nes pastorales educativas.
comunidad.
CT 67: La Escuela como espacio 25. Nos parece prudente revisar la
favorable para la evangelización. carga horaria del área como así también
DCG 259. La escuela católica (Cf la franja de la caja curricular en la que
CONGREGACIÓN PARA LA se ubican estas horas.
EDUCACIÓN CATÓLICA, La
Escuela Católica: l.c.) es un lu- 26. Necesitamos que los espacios
gar muy relevante para la forma- curriculares sean reconocidos, el docen-
ción humana y cristiana. La de- te sea un actor educativo y se establez-
claración Gravissimum Educa- can criterios de equidad entre las distin-
tionis del Concilio Vaticano II tas diócesis del país en relación a estas
«marca un cambio decisivo en la cuestiones.
historia de la escuela católica: el
paso de la escuela-institución al
de la escuela-comunidad». (Cf
Congregación Para la Educación
Católica, Dimensión religiosa de
98
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN PROPUESTA
la educación en la Escuela cató-
lica, n. 31: l.c.)
La escuela católica busca, en no
menor grado que las demás es-
cuelas, los fines culturales y la
formación humana de la juven-
tud. Su nota distintiva es:
«crear un ambiente de la comu-
nidad escolar animado por el
espíritu evangélico de libertad y
caridad,
ayudar a los adolescentes para
que, en el desarrollo de la propia
persona, crezcan a un tiempo
según la nueva criatura que han
sido hechos por el bautismo,
y ordenar últimamente toda la
cultura humana según el mensaje
de la salvación».(GE 8.)
El proyecto educativo de la es-
cuela católica tiene que elabo-
rarse en base a esta concepción
propuesta por el Concilio Vati-
cano II.
Este proyecto educativo se realiza
en la comunidad educativa esco-
lar, de la que forman parte todos
los que están directamente com-
prometidos en ella: «profesores,
personal directivo, administrati-
vo y auxiliar; los padres, figura
central en cuanto naturales e
insustituibles educadores de sus
99
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN
hijos; y los alumnos, copartícipes
y responsables como verdaderos
protagonistas y sujetos activos
del proceso educativo». (Con-
gregación para la educación
católica, Dimensión religiosa de
la educación..., n. 32: l.c.)
La escuela está llamada a ser una La comunidad educativa debe
Comunidad de fe, sin olvidar que aspirar a constituirse en la Escue-
es Comunidad Eclesial. la Católica en Comunidad Cris-
tiana, en verdadera comunidad de
fe. Esto se logra construyendo
una escuela en clave pastoral.
(El laico católico, testigo de fe en
la escuela)
Visto que la pastoral no está re- Con la certeza de que Se debe
presentada en la gestión educativa. concebir a la escuela como centro
de evangelización.
Visto que hay escuelas que no tie- -Con la certeza de que es necesa-
nen equipo de pastoral. rio actualizar su visión y misión
en clave de pastoral.
100
PROPUESTA
27. -Impulsar y propiciar la partici-
pación en la comunidad desde cada uno
de los roles para lograr el respeto, el
trabajo conjunto, la confrontación y la
tolerancia, entendiendo que aún pen-
sando distintos, siendo distintos,
haciendo distintos se puede colaborar
para el bien común.
28. Qué desde la Junta Nacional de
Catequesis se brinden cursos virtuales
de formación que apunten al ser, al sa-
ber y al saber hacer, para ser realizados
en comunidad.
29. -Qué las parroquias y los equi-
pos de conducción de los colegios ani-
men, promuevan, organicen, acompa-
ñen la formación de sus docentes para
fortalecer la espiritualidad.
a.
30. Proponemos que el catequista
coordinador (o encargado) forme parte
del equipo de conducción.
31. Proponemos promover la forma-
ción de equipos de pastoral en los cua-
les estén representados todos los actores
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN
Visto que hay instituciones que Con la certeza de que debemos
están trabajando en post de una crear : un ambiente en la comu-
escuela en clave de pastoral nidad escolar animado por el
espíritu evangélico de libertad y
caridad,… y ordenar últimamente
toda la cultura humana según el
mensaje de la salvación. G et
spes 8.
Visto que hay muchísimas iniciati- Con la certeza de que formamos
vas solidarias, comunitarias y mi- un solo cuerpo, que precisa la
sioneras en las escuelas con parti- funcionalidad de cada uno de sus
cipación de alumnos, docentes y miembros.
familias.
Visto que muchas escuelas abor- La declaración Gravissimum
dan el acompañamiento en la Fe educationis del C.V.II marca un
solo desde la hora de formación cambio desicivo en la historia de
religiosa. la escuela católica: el paso de la
escuela – institución a la de es-
cuela- comunidad.
Visto que las familias se acercan a Con la certeza de que en la es-
la escuela por motivos diversos cuela católica prima la calidad de
la enseñanza religiosa integrada
en la educación de los alumnos.
45. Concebimos a la escuela “La Escuela católica está llama-
como centro de evangelización da a una profunda renovación y
necesitamos actualizar nuestra debemos rescatar la identidad
visión respecto a su misión católica de nuestros centros edu-
cativos por medio de un impulso
misionero valiente y audaz, de
modo que llegue a ser una op-
ción profética plasmada en una
101
PROPUESTA
de la comunidad educativa.
32. Proponemos ser generadores de
intercambio para el diseño curricular
desde la cosmovisión cristiana,( ya sea
con los equipos de gestión, como con
los profesores de las distintas discipli-
nas.)
33. Proponemos que estas acciones
no sean aisladas sino que se trabaje en
conjunto con los itinerarios pastorales y
catequísticos, de modo coordinado y
procesual.
34. Proponemos una escuela en cla-
ve de pastoral que genere proyectos
interdisciplinarios, curriculares y extra-
curriculares para el acompañamiento en
la Fe de los alumnos.
35. Proponemos asumir esta realidad
como desafío para la evangelización.
36. Generación de proyectos de pas-
toral, y celebrativos para la participa-
ción de las familias
37. proponemos revisar, adaptar
y elaborar los proyectos pastorales en
comunión con la pastoral parroquial
y Diocesana, también proponemos
que sean escuelas inclusivas, abiertas,
para todos, una comunidad que se
haga expresión a lo largo del camino
de sus destinatarios
 TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN PROPUESTA
pastoral de la educación partici-
pativa. Dichos proyectos deben
promover la formación integral
de la persona teniendo su funda-
mento en Cristo, con identidad
eclesial y cultural, y con excelen-
cia académica. Además, han de
generar solidaridad y caridad
con los más pobres. El acompa-
ñamiento de los procesos educa-
tivos, la participación en ellos de
los padres de familia, y la forma-
ción de docentes, son tareas
prioritarias de la pastoral educa-
tiva”. Ap n° 337
muchos eligen la escuela católica las semillas del reino están sem- 38. proponemos ver esto como una
por la cuota, o por el nivel acadé- bradas también en todos los cora- oportunidad de propiciar el encuentro
mico, por la contención, por el zones (cfr Puebla), con Cristo reconociendo la acción del
prestigio; por la enseñanza en va- Espíritu Santo en los corazones de esos
lores; por la gestión institucional; papas
entre otros motivos
el educador catequista, aún cuan- “ La remuneración es el instru- 39. proponemos que en los distintos
do se le exigen todos los deberes mento más importante para prac- organismos competentes, tales como:
4 como el resto de los docentes, no ticar la justicia en las relaciones Ministerio de Educación, CECs, sus
La escuela en re- es considerado en relación a sus laborales.659 El « salario justo es equivalentes en las demás provincias y
lación con el sí derechos el fruto legítimo del trabajo regiones eclesiásticas, congregaciones
mismo y con los »; 660 comete una grave injusticia religiosas, trabajen arduamente para
demás. quien lo niega o no lo da a su encontrar las respuestas a esta necesi-
debido tiempo y en la justa pro- dad que clama justicia
porción al trabajo realizado
(cf. Lv 19,13; Dt 24,14-
15; St 5,4). El salario es el ins-
trumento que permite al trabaja-
102
TEMA SITUACIÓN
Visto que la formación de quienes
trabajamos en escuela muchas ve-
ces está disociada (seminarios,
profesorados, etc.) y que los títulos
que se expiden y lo que luego se
exigen son muy variados.
ILUMINACIÓN PROPUESTA
dor acceder a los bienes de la
tierra: « La remuneración del
trabajo debe ser tal que permita
al hombre y a su familia una vida
digna en el plano material, so-
cial, cultural y espiritual, tenien-
do presentes el puesto de trabajo
y la productividad de cada uno,
así como las condiciones de la
empresa y el bien común ».661 El
simple acuerdo entre el trabaja-
dor y el patrono acerca de la
remuneración, no basta para
calificar de « justa » la remune-
ración acordada, porque ésta «
no debe ser en manera alguna
insuficiente » 662 para el sustento
del trabajador: la justicia natu-
ral es anterior y superior a la
libertad del contrato. (Compen-
dio Doctrina Social de la Iglesia
n° 302)
Con la certeza de que se debe 40. Proponemos que se creen y re-
cuidar de que los catequistas se creen (en las Diócesis) más centros es-
preparen en la forma debida para pecíficos de formación de docentes ca-
su función, de suerte que conozca tequistas con la debida validación ofi-
con claridad la doctrina de la cial.
Iglesia y aprendan teórica y
prácticamente las leyes sicológi- 41. Proponemos que como Iglesias
cas y las disciplinas pedagógicas. Diocesanas y a Nivel Nacional, en co-
munión con los consejos escolares de
educación católica, se replanten estos
temas, revitalizando y actualizando la
103
TEMA SITUACIÓN ILUMINACIÓN
Visto que las escuelas católicasCon la certeza de que es la clave
muchas veces van perdiendo su y punto de partida de la razón de
identidad y misión. ser de la escuela católica.
Visto que hay una gran diversidad
Con la certeza que el que trabaja
en las formas de contratación y merece su salario y que la justica
retribución salarial de los catequis-
es un principio fundamental del
tas en las escuelas Evangelio.
I Tes. 5, 12-13: “Hermanos les
Vistas la situación de precariedad
jurídica de los docentes catequistas
rogamos que tengan respeto a los
y de la falta de claridad del encua-
que trabajan entre ustedes y los
dre legal… dirigen y aconsejan en el Señor.
Deben estimarlos y amarlos mu-
cho, por el trabajo que hacen.
Vivan en paz unos con otros.”
Mt. 10, 10b “El que trabaja mere-
ce su sustento”
Vista también la incomunicación Medellin cap 8, 1. Frente a un
entre CONSUDEC, CEC y JUREC mundo que cambia y frente al
…. actual proceso de maduración de
la iglesia en AL, el movimiento
catequístico siente la necesidad
de una profunda renovación. Que
manifieste la voluntad de la igle-
sia y sus responsables, de llevar
adelante su misión fundamental:
educar eficazmente a la fe de los
jóvenes y de los adultos en todos
los ambientes.
Visto que se constata un mayor DA 194 “…Este desafío incluye
104
PROPUESTA
misión de la escuela.
42. Realizar congresos y encuentros
de educación católica y pastoral educa-
tiva
43. Proponemos que se gestionen las
medidas necesarias a nivel Eclesial y
ministerial, para regularizar estas situa-
ciones.
44. Establecer con claridad una polí-
tica común en toda la Iglesia que permi-
ta, en el marco de la ley, la igualdad de
condiciones laborales de todos los do-
centes catequistas del país, a la par de
cualquier docente.
45. Promover el trabajo conjunto de
todas las juntas catequísticas con las
distintas JUREC diocesanas en la
búsqueda de una tarea integrada de
evangelización entre los colegios cató-
licos y las parroquias, congregaciones y
movimientos.
46. Revisar cómo están trabajando
las Juntas de Educación y su vínculo
con la Junta de Catequesis de cada dió-
cesis o arquidiócesis.
47. Proponemos que el CONSU-
DEC tenga una oferta educativa, que
promueva profesores del área de For-
mación cristiana-religiosa.
48. Establecer dentro de la forma-
TEMA SITUACIÓN
empobrecimiento en el acompa-
ñamiento pastoral y espiritual de
los colegios, por parte de los sa-
cerdotes…
ILUMINACIÓN
la necesidad de potenciar ade-
cuadamente la formación inicial
y permanente de los presbíte-
ros…”
PDV 72 Ti 1,9
PROPUESTA
ción sacerdotal un espacio que capacite
en la pastoral educativa y en la com-
prensión de la importancia que tiene la
misma en un proceso de evangelización
en la Argentina

105
COMISIÓN 16: ICP y Núcleos Temáticos del Mensaje Cristiano
Desde la Situación
Visto que…
46. Visto que…
muchos catequistas no han tenido una
experiencia de encuentro con el Señor o
ésta no ha sido decisiva, aún persisten en
nuestras catequesis:
Situaciones de individualismo (catequis-
tas islas).
Catequesis segmentadas
Resistencia a la formación (humana, doc-
trinal, espiritual, comunitaria), aún cuan-
do siempre se está solicitando esta for-
mación, y se la ofrece.
Y de parte de los catequizandos, estas
situaciones se convierten en favorables
para quienes no aceptan las exigencias de
una catequesis que apunte a la vida, a la
conversión y a la comunidad.
Visto que…
muchos catequistas no han tenido una
experiencia de encuentro con el Señor o
ésta no ha sido decisiva, aún persisten en
nuestras catequesis:
Situaciones de individualismo (catequis-
tas islas).
Catequesis segmentadas
Resistencia a la formación (humana, doc-
trinal, espiritual, comunitaria), aún cuan-
do siempre se está solicitando esta for-
mación, y se la ofrece.
Desde la Iluminación
Con la certeza que…
Con la certeza que…
Hay que desarrollar un proceso de inicia-
ción en la vida cristiana que comienza por
el kerigma, guiado por la Palabra que
conduce al encuentro personal con Jesu-
cristo, que lleve a la conversión a la co-
munidad eclesial, y a la maduración de fe
en tres dimensiones: sacramento, servicio
y misión. Cfr D A 289
(…) Que se extienda desde la niñez a la
ancianidad
SENAC N° 44
Con la certeza que…
Hay que desarrollar un proceso de inicia-
ción en la vida cristiana que comienza por
el kerigma, guiado por la Palabra que
conduce al encuentro personal con Jesu-
cristo, que lleve a la conversión a la co-
munidad eclesial, y a la maduración de fe
tres dimensiones: sacramento, servicio y
misión.
Cfr D A 289
“…La catequesis privilegia el encuentro
106
Desde los anhelos
Proponemos…
Proponemos
Una catequesis tomada como camino de
vida espiritual, de talante kerygmático,
inmersa y atenta a las distintas realidades,
que revitalice la acción misionera, forta-
lezca la fe, para afrontar el contexto socio-
cultural en el que estamos viviendo, una
catequesis encarnada y pascual que inserte
en la vida comunitaria.
Proponemos
1. La formación permanente de los cate-
quistas apunten a que sean sensibles al
querer de Dios y a las necesidades del
pueblo y respondan con caridad y ser-
vicio.
2. Una catequesis tomada como camino
de vida espiritual con acompañamien-
to e hitos que marquen momentos
fuertes para ser vividos como comu-
nidad (primeras comuniones, confir-
maciones, bautismos) y no como
Y de parte de los catequizandos, estas
situaciones se convierten en favorables
para quienes no aceptan las exigencias de
una catequesis que apunte a la vida, a la
conversión y a la comunidad.
Somos expertos en realizar diagnósticos
pero con dificultad de pasar a las accio-
nes que modifiquen o transformen las
realidades.
con la persona de Jesús en la comunidad.
Una catequesis samaritana, que sale al
encuentro de cada persona, escucha y con-
templa su realidad, la recibe y se detiene
acercándola a Jesús para que él la tras-
forme”. SENAC 46
Evangelizar significa para la Iglesia llevar
la Buena Nueva a todos los ambientes de
la humanidad y, con su influjo, transfor-
mar desde dentro, renovar a la misma
humanidad. EN 18 (Ustedes son sal de la
tierra)LC..
107
“proyectos concluidos” en forma in-
dividual que no insertan en la vida
comunitaria parroquial.
3. Una Catequesis inmersa en las distin-
tas realidades, que se adecue a la di-
versidad y exprese una mayor cercan-
ía plasmada en gestos de caridad (sa-
ludo, visita a los enfermos, acogida y
bienvenida).
4. Una catequesis que revitalice la acción
misionera, porque todos tenemos que
ser de nuevo evangelizados y trans-
formarnos en fieles discípulos. Forta-
leciendo la fe para afrontar, este con-
texto socio-cultural en el que estamos
viviendo, que pone en juego el desa-
rrollo armónico de la sociedad y la
identidad católica, de sus pueblos.
5. Una catequesis que anuncie e imite a
un Cristo, que obra e impulsa a trans-
formar la realidad
COMISIÓN 17: ICP y contenido del primer anuncio (Kergma y Pascua)
Desde la Situación
Visto que…
47. Muchas veces la proclamación del
kerigma no lleva al encuentro con Cris-
to Vivo y hay comunidades que no
acompañan al proceso de fe de los bau-
tizados
48. Muchas veces la catequesis se ha
transformado en una clase, en un encuentro
enciclopedista, porque los catequistas se ha
aferrado a los libros, a los cuentos, a las
dinámicas, olvidándose que el centro es la
Palabra
Desde la situación
Visto que…..
Muchas veces la proclamación del kerigma
no suscita la fe no lleva a la conversión ini-
cial ni al encuentro con Cristo Vivo
Existe comunidades cerradas que no acom-
pañan al proceso de fe de los bautizados
El catequista acompaña, crea vínculos, está
Desde la Iluminación
Con la certeza que…
con la certeza que…
 Es nuestra misión ofrecer un anun-
cio kerigmatico y el testimonio personal que
lleve a la conversión y un cambio de vida
integral (DA 226ª) y somos enviados a
anunciar (Mc 16, 15) a Jesucristo, camino
verdad y vida.
 somos enviados por Dios a anunciar
la Palabra de Dios (Jn3, 34); y que Jesús
nos dice “Felices los escuchan la Palabra de
Dios y la practican” (Lc11, 27-28)
Desde la iluminación
con la certeza que…
“El es el Camino, la Verdad y la Vida”
(Jn14, 6) y que solo desde el kerigma se da
la posibilidad de una I.C. verdadera (cf.DA
278)
El modelo de la renovación comunitaria lo
encontramos en la vida de las primeras co-
munidades cristianas. Estamos invitados
a una espiritualidad de comunión (cf. Hch2,
42-47; DA 369; NMI 42)
En la realidad social concreta el discípulo
hace la experiencia del encuentro con Jesu-
cristo Vivo y madura su vocación cristiana.
108
Desde los anhelos
Proponemos…
proponemos….
Una catequesis kerigmatica que lleve al
encuentro íntimo y personal con Cristo
Vivo Y Que acompañe la vida de las per-
sonas en sus situaciones, experiencias
personales y procesos de fe.
Que la Palabra, escuchada, rumiada,
gustada, proclamada y celebrada, se haga
Vida en la vida de cada catequista y cada
comunidad.
Desde los anhelos
proponemos….
Una catequesis kerigmatica que lleve al
encuentro íntimo y personal con Cristo Vi-
vo que enamore y fascine.
Que la catequesis acompañe la vida de las
personas en sus situaciones y experiencias
personales y en sus procesos de fe.
Una Pastoral que acompañe efectiva y afec-
atento a las necesidades de los demás, ayu-
da a crecer en la fe, reconoce al Señor en
los hermanos, especialmente en los más
débiles, pero a su vez se siente solo, no
acompañado no cuidado ni fortalecido en
sus propios procesos de fe por sus pastores
Los niños, los adultos no perseveran, las
familias no se comprometen, pero hay
búsqueda y sed de Dios.
Nuestras comunidades se ven afectadas por
el individualismo, la intolerancia, la falta de
autenticidad.
Muchas veces la catequesis se ha transfor-
mado en una clase, en un encuentro enci-
clopedista, porque los catequistas se ha afe-
rrado a los libros, a los cuentos, a las diná-
micas, olvidándose que el centro es la Pala-
bra
La iglesia no siempre favorece el encuentro
personal con Cristo Vivo
Hay comunidades cerradas que no acompa-
ñan el camino de los bautizados
Nuestra catequesis es sacramentalista y es-
colarizada
(cf. DA 167) tivamente al catequista en su vocación y
misión.
El Señor nos dice “Vayan y hagan que to-
dos los pueblos sean mis discípulos… y Yo Que los catequistas se formen y transfor-
estaré siempre con ustedes hasta el fin del men por Cristo permanentemente, que vi-
mundo” (Mt28, 19-20) Y van la fiesta del encuentro con Jesús, e invi-
que nuestros Obispos reconocen “cada sec- ten a otros a compartir la alegría del resuci-
tor del Pueblo de Dios pide ser acompañado tado conviden la vida nueva.
y formado de acuerdo con la vocación y
ministerio al que ha sido llamado” (DA Una iglesia dócil a la corrección fraterna,
282) donde todos nos sintamos parte de una
Es nuestra misión ofrecer un anuncio ke- misma familia, donde se viva la comunión y
rigmatico y el testimonio personal que lleve el servicio, abiertos al dialogo
a la conversión y un cambio de vida integral Que la Palabra se haga Vida en la vida de
(DA 226ª) y somos enviados a anunciar cada catequista y cada comunidad.
(Mc 16, 15) Que la Palabra de Dios sea escuchada, ru-
miada, gustada, proclamada, celebrada
El Señor cada día acrecienta la comunidad
(Hch2, 42.46-47) que siendo fieles al Espí- Crear espacios donde el catequista pueda
ritu El nos sostendrá unidos (JEP 136) madurar su vocación, formarse, profundizar
su espiritualidad para favorecer el encuentro
La formación catequística es promover la con Cristo Vivo
actitud y habilidad para comunicar el Men-
saje Evangélico, no bastan los conocimien- Construir una cordial y sincera fraternidad
tos doctrinales; y que el catequista puede en la comunidad para reconocer al otro co-
ser capaz de vivenciar, proponer y aplicar la mo mi hermano
pedagogía original de Dios. (JEP102) y que
somos enviados por Dios a decir la Palabra Recrear el ambiente, el contenido, la forma
de Dios (Jn3, 34); y que Jesús nos dice “Fe- de comunicar el kerigma para lograr el en-
lices los escuchan la Palabra de Dios y la cuentro y la conversión personal y pastoral.
practican” (Lc11, 27-28)
El fin definitivo de la catequesis es poner a
uno no solo en contacto con Jesucristo, sino
en comunión e intimidad con el (CT 5; Jn1,
109
14)
Si las comunidades son discípulas y misio-
neras en torno a Jesucristo serán comunida-
des abiertas al dialogo, a la disponibilidad y
al amor. (DA 368)
La persona madura constantemente en el
conocimiento y seguimiento de Jesús maes-
tro, por eso es fundamental importancia la
catequesis permanente y la vida sacramental
(DA 278)

110
COMISIÓN 18: ICP y Comunicación y Lenguajes

Desde la Situación
Visto que…
49. El lenguaje de la Palabra es el mismo
aunque se presenta en diversos idiomas
 Que todos tenemos necesidad de per-
tenecer, anhelo de vínculos… a alguien, a
una familia, una comunidad, nuevas tribus…
 Que se dijo “basta ya” de tartamude-
os, especulaciones y miedos, sumisión y
falsa obediencia.
Tesoros
Desde la Iluminación
Con la certeza que…
La Iglesia es Madre, experta en humanidad,
y debe comunicarse con un lenguaje expe-
riencial, orante, fraterno, valiente, afectivo,
maternal, misionero, respetuoso de los silen-
cios.
Is. 49, 15
Mensaje de Benedicto XVI en la Jornada
Mundial de las Comunicaciones 2012
D. A. 480
Desde los anhelos
Proponemos…
Vivir el lenguaje del vínculo, que es escucha, diá-
logo, respeto a la diversidad de carismas y proce-
sos, creando nuevos espacios de comunicación
donde compartir la vida y expresar los vínculos
fraternos, valorando y apropiándose de los diver-
sos lenguajes con que comunica nuestro pueblo
(inculturación del Evangelio).

50. Existe una creciente y crecida red de La Iglesia está en el mundo. No puede dejar Proponemos:
comunicacines a partir de las TICs. de usar las nuevas tecnologías de la comuni-  Que no podemos omitir ninguno de los
cación como instrumento válido y valioso canales de comunicación.
para evangelizar.
Jn. 17, 20 ss  La necesidad de formarnos en el manejo
DCG (1971) nr. 8 de las nuevas TICs (mensajes, redes sociales,
CT 59
mmcs, recursos multimediales), y humanizar su
D.A. 100, d); nr. 35; Cap. 10, 3
uso.

 Diversificar los lenguajes de la catequesis:

lo visual – artístico, musical, expresión corporal,
litúrgico, gestual.

 Discernir críticamente en nuestra comuni-

111

Visto que…
 La comunidad es catequista que cul-
tiva Ansias de unidad en el Espíritu, en
Jesús Resucitado, en el filial amor al Padre,
necesidad de autenticidad en los lazos de la
COMUNIDAD -primera CATEQUISTA-
que anuncia, proclama y Celebra la Vida
nueva, fundada en Su Amor…!!!
 Que dice Basta ya de catequistas que
no hablan, por miedo, sumisión, falsa obe-
diencia… El dialogo es construcción de to-
dos, y el anuncio su luminoso reflejo!!!
 La comunidad catequista tiene
Sentido de pertenencia; vale pertene-
cer y estar, anhelo de vínculos… a alguien, a
una familia, a una comunidad, a nuevas tri-
bus… la Palabra es la misma aunque hay
que aprender nuevos dialectos
Con la certeza que…
 La Iglesia es comunión, la interferen-
cia en la comunicación, trae como conse-
cuencia decisiones asimétricas y unilaterales
que atropellan procesos de vida.
Mateo 12, 34
Hechos 2, 41-47
D.A. 55
 La Iglesia es madre. Necesitamos
comunicarnos con un lenguaje experiencial,
orante, fraterno, valiente, que se juega por la
verdad, significativo, gestual, afectivo, vi-
vencial, que ama, conoce y dialoga con su
Dios, un lenguaje maternal, misionero, que
respeta los silencios.
112
cación actual:
 La utilización del llamado “lenguaje inclu-
sivo” (la presión por decir “todos y todas”, “her-
manos y hermanas”, “catequistos y catequistas”),
que muchas veces oculta la imposición de la
“ideología de género”
 Ambigüedad en los términos que ocultan
significados profundos contrarios al Evangelio
(por ejemplo, “salud reproductiva”, que incluye
“aborto”)
Proponemos…
 Que la comunidad como catequista viva el
Lenguaje de la comunión. Es decir:
o Desterrar los lenguajes autoritarios y de no
respeto al proceso de los hermanos
o Incorporar los lenguajes en plural.
o Ejercitar el discernimiento y la decisión co-
lectiva.
 Del “padre dijo” “el catequista dice” al no-
sotros decidimos.
 Del yo al nosotros. (Colgarnos el yo-yo)
 Del mío al nuestro.
 Que la comunidad como catequista viva el
Lenguaje del vínculo. Es decir:
o Desarrollar la actitud de escucha, de diálogo,
de respeto a la diversidad de carismas y procesos.
o Crear espacios de comunicación donde com-
partir la vida y expresar los vínculos fraternos.
o Mirar como la madre guaraní, que se inclina
 Que dice Basta ya de tartamudeos, Isaías 49,15 para encontrarse con la mirada de su hijo.
especulaciones y miedos… La Iglesia es Mensaje de B. XVI en la jornada mundial de
«experta en humanidad» porque habla la las comunicaciones 2012
lengua materna de la Pascua, porque es da- D.A. 480
dora de vida, porque amamanta… Empece-
mos dialogando, a comunicar eso!!!
Basta ya de despachar el ICP en algunos y
por un tiempo… La Comunidad es la Cate-
quista, Gestora, Nodriza, Todo el Tiempo!!!
Búsqueda de lenguajes, en el que hable La  La Iglesia está en el mundo. No pue-  Que la comunidad como catequista se haga
Palabra (Jesús), contemplación, rescate del de dejar de usar las nuevas tecnologías de la presente con el Lenguaje de las Nuevas Tecnologías
silencio, de lo gestual (para-lingüístico) y comunicación como instrumento válido y de la comunicación. Es decir:
desde el eco de La Palabra Divina que re- valioso para evangelizar. o Redescubrir que AQUEL A QUIEN está
suena en los testigos de la Biblia, tanto en la llamada a anunciar es tan importante que no pode-
Creación como en la Historia, así como en Juan 17, 20 y ss. mos omitir ninguno de los canales de comunicación.
los desaciertos. DCG 8 (1971) “No podemos callar lo que hemos visto y oído…”
CT 59 o Descubrir la necesidad de formarnos en el
Necesidad de formarse también en las cien- D.A. 100.d - 35- manejo de las nuevas tecnologías de la comunica-
cias del lenguaje para poder desentrañar Cap. 10.3 – N° 485 -490 ción (mensajes, redes sociales, mmcs, recursos mul-
primero lo que se anuncia y ser fiel a lo que timediales)
resuena… al final, todo es eco de Su Pala- o Diversificar los lenguajes de la catequesis:
bra; solo eso y todo eso… visual – artístico, musical, expresión corporal, litúr-
gico, gestual
El Mensaje: es lo suficientemente dinámico o Discernir críticamente en nuestro comunica-
como para generar empatía, el contenido ción actual:
está claro, pero no la forma de hacerlo llegar  la utilización del llamado “lenguaje inclusi-
al otro, por lo que la red comunicacional vo” (la presión por decir “todos y todas” “hermanos
debe incorporar a muchos más de los que y hermanas” que muchas veces oculta la imposición
están ahora, y hacerlo comunitariamente de la “ideología de género”
para generar mayor eficiencia a través del  Ambigüedad en los términos que ocultan
intercambio, por el resultado, sino mas bien significados profundos contrarios al Evangelio (“sa-
por el proceso… lud reproductiva” que incluye el aborto)
Necesidad de cambio, de conversión perso-
nal, comunitaria y pastoral, no
113
como barniz superficial o cambio periférico,  Que la catequesis viva el Lenguaje de la Mi-
sino cambio interior, transformación, meta- sión. Es decir:
noia, es decir, desde adentro… Evangelizar
desde los nuevos medios no es una táctica,
 La Iglesia existe para evangelizar. No
habrá nunca comunicación de la Buena
 Pasar de una catequesis de oyentes creyentes
a una catequesis que forme discípulos misioneros,
una estrategia… solo un nuevo escenario, Noticia si no nos dejamos conducir por el
cambiar el “vengan a la Parroquia” nuestro por el
Jesús sigue siendo el método… de nosotros Espíritu Santo que habla en nosotros.
“Vayan y anuncien” de Jesús.
se exige fidelidad a la partitura, al libreto, Mateo 10, 19 - 21
aunque cambie el instrumento… Mateo 28, 16 – 20  Incentivar encuentros personales y comunita-
rios para profundizar la experiencia de comunica-
Basta ya de Iglesia atada a modelos de co- EN 75 ción con el Padre, alimentados por La Palabra y
municación y lenguaje que no logran afectar animados por el Espíritu para que nuestra catequesis
a los centros vitales de sus interlocutores. comunique por ardor y no por proselitismo.
Catequistas-anunciadores que se saben lla-
mados, se reconocen ungidos y enviados a
anunciar lo que han visto y oído, lo que han
tocado y comulgado, los pies mojados y la
toalla lista para seguir actuando en su me-
moria…
Basta ya de predicadores… Dios habla y se
encarna, se hace otro y resuena, habla y
habita entre nosotros; mete las manos en el
barro, lava pies, sopla su alma, pone el cuer-
po!!!
Basta ya de desencuentros… Escuchemos,
Hablemos, Miremos!!!

114