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INTRODUCCIÓN

En el Perú, la lucha por el derecho al voto de las mujeres se remonta al


siglo XIX, cuando las primeras feministas comenzaron a organizarse y a
demandar una mayor participación política. Sin embargo, no fue sino
hasta 1955 que las mujeres peruanas obtuvieron el derecho al voto en
igualdad de condiciones que los hombres.

Desde entonces, las mujeres han participado activamente en las


elecciones en el Perú. En las últimas décadas, se ha observado un
aumento gradual en la representación femenina en cargos públicos,
aunque aún queda mucho por hacer para alcanzar la paridad de género.
DESARROLLO

En las elecciones presidenciales de 2021, por ejemplo, se presentaron tres


candidatas mujeres, lo que fue un hito histórico en la política peruana.
Estas candidatas, Verónika Mendoza, Keiko Fujimori y Yonhy Lescano,
representaron a partidos políticos de diferentes ideologías y tuvieron
propuestas diversas para abordar los problemas del país.

Si bien ninguna de las candidatas mujeres logró llegar a la segunda vuelta,


su presencia en la contienda electoral fue significativa y simbólica. Esto
demuestra que, a pesar de los avances, aún existen barreras culturales y
políticas que limitan la participación plena de las mujeres en la política
peruana.

Además, es importante señalar que la representación femenina no se


limita únicamente a la presidencia o a los cargos políticos más visibles. Las
mujeres también han logrado avances en la representación en otros
espacios, como en el Congreso y en las alcaldías.

En el Congreso, por ejemplo, la presencia de mujeres ha ido aumentando


gradualmente en las últimas décadas. En las elecciones de 2021, el
Congreso peruano registró un récord histórico de mujeres elegidas, con un
total de 42 escaños, lo que representa el 29% del total. Aunque esto aún
está lejos de ser una representación paritaria, es un paso importante hacia
la igualdad de género en la política peruana.
En cuanto a las alcaldías, aunque aún hay un largo camino por recorrer, se
han visto avances significativos en la representación femenina. En las
elecciones municipales de 2018, por ejemplo, se eligieron un total de 399
alcaldesas en todo el país, lo que representa el 11% del total de alcaldías.
Aunque esto aún es insuficiente, demuestra que las mujeres están
ganando terreno en la política local.

CONCLUSIÓN

En resumen, la participación política de las mujeres en el Perú ha


evolucionado significativamente desde el siglo XIX hasta el presente.
Aunque aún hay desafíos por enfrentar en la lucha por la igualdad de
género en la política, se han logrado importantes avances que indican un
camino hacia una mayor participación y representación femenina en todos
los niveles de gobierno. Es fundamental continuar trabajando para lograr
una representación paritaria en la política peruana y asegurar que las
mujeres tengan un papel

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