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¿Qué es lo que veo aquí? Caos, puro y llano caos; una multitud de
neandertales que, a costa de su integridad física, llevan una pelotita de un
lado a otro ¿Para qué? Para obtener puntos y sentirse valedores por llevar a su
equipo al final del campeonato. En realidad, es una forma de mitigar la
violencia que existe en el interior del ser humano desde tiempos
inmemorables, porque claro, es mejor hacer un touchdown que darle una
golpiza a alguien en la calle. Lo que es irónico, ya que todos parecen querer
dejar la vida, con tal de obtener el balón, lastimando a otros para lograr su
objetivo ¿Cuál es la diferencia entonces? ¿Puedes partirle un hueso a alguien,
en medio del juego y no pasa nada, por "deportividad" pero en la calle si te
mandan a la cárcel?
¿A qué quiero llegar con esto? Nada, absolutamente nada, solo decir lo mucho
que odio este deporte (y el deporte en general) y que, me siento tan aburrido
que solo quería quejarme de algo para nivelar la balanza de mi frustración. En
este momento estaría haciendo algo mucho más interesante.
—No me voy a disculpar, sabes lo mucho que odio estas cosas— me asustó al
escuchar los gritos de nuevo—¿Recuérdame porqué vine a está mierda?
—Debo decir que esa fue la risa más patética que hayan visto mis ojos.
—Es que... ¿Qué le ven a esto? Son solo personas que van detrás de un balón
¿Qué tiene esto de interesante? —digo sintiendo como alguien a mi lado me
mira mal, yo lo ignoro eficazmente.
—Bueno... Son Alfas grandes y fuertes, sudados y agitados. No sé, Pietro usa tu
imaginación.
—¿Y? Qué sea un Alfa no significa que no pueda disfrutar de la vista... Mira otra
vez te está mirando sonríe.
Le sonrió de nuevo de esa forma de extraña y luego miro a Ororo con molestia.
—Solo un poco más Pietro, harás muy feliz a Warren por tu infinita paciencia—
tono sarcástico y empieza a cantar con los canticos que hacen las porristas
moviendo sus manos como si tuviera pompones sin dejar de mirarme.
En ese momento se escuchan los gritos por una anotación hecha por el equipo
de la escuela, esta vez, por el ‘Angel’ Worthington como dice la voz
estrambótica del comentador. Frunzo el ceño sin saber de que rayos esta
hablando hasta que Ororo me mira con una sonrisa.
—Es Warren
—¿Angel? —digo mirando hacia la cancha— Warren tiene todo, menos cara de
ángel.
Antes de que Ororo pudiera darle una respuesta, el tipo a su lado, quien al
parecer estaba cansado de escuchar mis habladurías me dice lo siguiente:
—¡Pero que dices! A Warren no se le dice ángel por su carita, sino por su
increíble patada que puede llevar el balón cerca al cielo. Como un ángel,
marcando Field goals para los dioses.