Introducción

Entre 1964 y 1990 Texaco mantuvo operaciones de extracción petrolera en nuestra Amazonía, de
una forma indiscriminada y sin importarle absolutamente nada con lo referente al medio
ambiente. Unos de los aspectos más detestables de losucedido en nuestra Amazonía, es que en
aquella época la petrolera Texaco era uno de los líderes mundiales en tecnología de extracción
petrolera, al mismo tiempo que destruía la Amazonía ecuatoriana, Texaco operaba en Estados
Unidos con la mejor tecnología ambiental de extracción petrolera de todo el mundo. Todo esto con el
único objetivo de obtener más ganancias. En 1990 Texaco termina sus operaciones deextracción
petrolera en el país y en 1992 consciente del desastre ecológico que había dejado,abandona nuestro
país. 

Desarrollo

Este fue considerado el mayor desastre ecológico de la historia en una de las zonas más bio diversas
del planeta, Texaco-Chevron arrojo más de 19 millones de galones con residuos tóxicos de la
explotación petrolera, a estos se sumaron otros 17 millones de galones de crudo arrojados en nuestra
Amazonía. El área total afectada por la explotación petrolera irresponsable de la Texaco-Chevron
llega a 2 millones de hectáreas, para poder dimensionar y tener una idea sobre el espacio real
afectado,se podría decir que equivale a la superficie de nuestro país hermano El Salvador y si bienes
obvio que el responsable material y legal de estos daños es la Texaco-Chevron, no podemos olvidar
que fueron los gobiernos oligarcas y vende patrias los que permitieron que esto suceda.

Con tanto apoyo político Texaco-Chevron luchó con todo su peso para que el juicio seatransferido
desde Nueva York a las Cortes ecuatorianas, creyendo que aquí el juicio lo ganaría muy fácilmente y
es aquí justamente que en el año 2002 donde la multinacional obtuvo dicha transferencia y se inicia
el caso llamado «Lago Agrio», el mismo que se demoró 9 años en dictar un veredicto.De esta forma
en el año 2011 la Corte de Justicia de Lago Agrio dictó una sentencia favorable a los
demandantes, la misma que condenaba a Texaco-Chevron a pagar los daños efectuados en nuestra
Amazonía. Kaplan, quien trató de suspender la sentencia ecuatoriana mediante leyes
estadounidenses, violando de esta forma el principio de soberanía de nuestro país,realmente tiene
inversiones en uno de los principales inversionistas de Texaco-Chevron,es por esto por lo que actuó
de manera ilegítima.

Posteriormente Texaco-Chevron trató de atacar al estado ecuatoriano queriendo hacerlos parecer

como el único responsable del desastre que la multinacional causó. 

usiona, es así como Chevron

heredó la responsabilidad legal
de los daños efectuados
por Texaco en nuestra
Amazonía.
Desarrollo- argumento
Este fue considerado el mayor
desastre ecológico de la historia
en una de las zonas
más bio diversas del planeta,
Texaco-Chevron arrojo más de
19 millones de galones
con residuos tóxicos de la
explotación petrolera, a estos se
sumaron otros 17 millones
de galones de crudo arrojados
en nuestra Amazonía. El área
total afectada por la
explotación petrolera
irresponsable de la Texaco-
Chevron llega a 2 millones de
hectáreas, para poder
dimensionar y tener una idea
sobre el espacio real afectado,
se
podría decir que equivale a la
superficie de nuestro país
hermano El Salvador y si bien
es obvio que el responsable
material y legal de estos daños
es la Texaco-Chevron, no
podemos olvidar que fueron los
gobiernos oligarcas y vende
patrias los que
permitieron que esto suceda. De
esta manera fue así que en 1995
el presidente de
entonces Sixto Durán Ballén
firmó un acta en la cual se
indicaba que Texaco-Chevron
había cumplido con la
remediación ambiental en la
Amazonía, adicionalmente en
1998, el gobierno de Jamil
Mahuad firma un acta de
finiquito, en la cual se
establecía
que el gobierno ecuatoriano se
comprometía a nunca atacar en
justicia a Texaco-
Chevron, sin embargo, esto no
detuvo a todos los afectados por
la contaminación de la
multinacional y es de esta
manera que mediante la unión
del frente de defensa por la
Amazonía se motivó para exigir
una reparación ambiental a
Texaco-Chevron.
Con respecto a las
consecuencias legales que ha
tenido todo este desastre
ambiental,
se inicia en el año 1993 con el
caso Aguinda, donde los
afectados ecuatorianos
presentaron una demanda ante
la Corte Federal de Nueva York
acusando a Texaco de
haber contaminado el ambiente
y el haber afectado la salud de
los habitantes de la
Amazonía ecuatoriana,
considerando que esta no iba a
ser una tarea fácil, ya que