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Ocaso del orden colonial. Página 119.

1. ¿Qué grupos sociales integraban las milicias defensoras de buenos aires en 1806-
1807?
2. ¿La militarización de la sociedad porteña puede explicar el triunfo de la Revolución?
3. ¿Cuál es la relación de los esclavos con la militarización?
4. Sintetiza las acciones de San Martín al frente del cuerpo de Granaderos a Caballo.
5. ¿Quiénes integraban ese ejército?

Desarrollo

España estaba en guerra con Francia.

Los franceses invaden el último virreinato que se había creado (el virreinato del río de la plata,
con capital en bs as).

Los españoles combatiendo en la península, no podían enviar tropa, por lo que Buenos Aires se
veía indefenso. Y el Virrey se fue a Córdoba.

Es por eso que lo defienden los pocos militares españoles 3000 hombres (los que podían hacer
la carrera militar) al virreinato del río de la plata, que comprendía la actual república argentina,
Paraguay, Bolivia y Uruguay.

Los criollos, buscan la manera de intervenir la política, buscan ayudar a combatir y ser
militares. En la primera guerra pierden.

En la segunda 1807, logran repeler el dominio británico, formando un cuerpo militar


denominado "regimiento de patricios" con Linier a la cabeza.

Entonces ya con un cuerpo militar, y el peso de las armas, se dan cuenta que la soberanía les
pertenece al pueblo. No al rey que solo daba mejoras parciales y no se interesaba por el
pueblo.

Cuando se produce la revolución de mayo, todos aquellos que no se adhieren a la causa


patriota, van a ser, en algunos casos fusilados, como ser Linier (creador de la fuerza militar de
Buenos Aires) en córdoba en el primer enfrentamiento de patriotas contra españoles.

De esta manera van ganado apreción y van hacia la banda oriental, alto Perú donde les
comunican a los indígenas que, si se adhieren a la causa revolucionaria, no deberán pagar más
impuestos, y trabajar de esclavos. Pero ellos, no creen a los porteños, por lo que los españoles
aprovechan esta situación para seguir sosteniendo ese territorio.

Si bien las tropas regulares puestas a disposición por el Gobernador de Montevideo jugaron un
rol importante en la lucha, la contribución de la población local resultó también muy
significativa.

Los comerciantes ricos, los funcionarios del gobierno, los tenderos y los artesanos se
precipitaron a la milicia creada bajo las órdenes de Linier.

El héroe de la Reconquista organizó las unidades más grandes (las de infantería urbana) con
elementos regionales: dos de ellas compuestas por patricios (nativos de la intendencia de
Buenos Aires), una de arribeños (los nacidos en el interior de las provincias del Virreinato), una
de negros libres, mulatos e indios y una cada una de catalanes, vascos, gallegos, cantábricos y
andaluces. Se esperaba de esta manera crear una “competencia entusiasta” entre los
defensores del honor militar de sus respectivas provincias, lo cual, a su vez aumentaba el
espíritu de combate de la ciudad amenazada.

la creación de las milicias cambió irreversiblemente el equilibrio de poder en Buenos Aires de


varias maneras. Antes que alentar la igualdad entre la élite urbana y las clases populares, la
militarización impuso una nueva igualdad dentro de la élite misma. En especial, los criollos
ganaron status como resultado de su superioridad numérica en las filas. Ejemplo de ello es la
carrera de Cornelio de Saavedra, comerciante que surgió como líder militar de los patricios. La
Corona lo nombró interinamente Virrey. Esto marca el fin de la cooperación durante la cual
Linier y los capitulares no sólo derrotaron a dos invasiones, sino que pasaron por alto y
socavaron la autoridad del Virrey Sobremonte.

Los capitulares y el gobernador de Montevideo, se aprovecharon de este giro de los eventos


para tratar de restituir su autoridad y lanzaron una campaña injuriosa ante Linier. Este
conflicto abrió nuevas posibilidades para las unidades de la milicia urbana. El Cabildo no había
prescindido de su apoyo y no parecía atribuir mucha importancia al rol dominante de los
criollos. Por el contrario, trató de lograr un mayor apoyo introduciendo después de la elección
de 1808 una regla tácita por la cual las candidaturas se repartirían entre 4 peninsulares y 4
criollos cuidadosamente seleccionados. También había nombrado como su representante en
Madrid a un rico y popular criollo, don Juan Martín de Pueyrredón.

El 1 de enero de 1809, gracias a la decidida acción armada de las unidades criollas con las de
andaluces y cantábricos quienes ocuparon la plaza, impidió la caída de Linier. Las autoridades
metropolitanas se apresuraron a terminar con estas peligrosas novedades. En lugar de Linier,
demasiado popular, se nombró a un nuevo virrey: Baltazar Hidalgo de Cisneros, experto y
capaz oficial naval.

Sin embargo, Cisneros, apoyado por un gobierno metropolitano debilitado, no pudo hacer gran
cosa para cambiar la situación militar en el Río de la Plata.

La formación de una milicia urbana no sólo había dado a los criollos la fuerza militar que
obligaba a todos los contendientes por el poder en Buenos Aires a tomarlos en cuenta: les
había dado por primera vez una organización que, si bien no era necesariamente hostil, sin
embargo, era peligrosamente independiente del viejo sistema administrativo y militar.

En mayo de 1810 la Revolución mostró la fuerza de este nuevo liderazgo y la pérdida de la


función gubernamental de los representantes del poder español.

Y comenzaba aquí una nueva época, donde toda clase social podía ser parte de la milicia.

En 1812 José de san Martín comenzó a organizar el regimiento de granaderos a caballo y el


nuevo texto de tácticas de infantería de Carlos María de Alvear. Ambos venían directamente
de España, donde habían interrumpido para ello sus promisorias carreras militares. Ellos
forzaron una profesionalización aún más rápida en el ejército, dado que podían ofrecer el
conocimiento y la experiencia que el ejército patriota necesitaba.

Ellos adherían al ejército, negros, mulatos, zambos.

A fines de 1813 el ejército revolucionario se había reorganizado con pautas menos locales y
más profesionales y totalizaba unos 8 mil hombres. Otros seis mil más fueron organizados en
milicias locales y distribuidos en todo el territorio.
Ocaso del orden colonial. Página 197

1. ¿Quiénes integraban el cabildo mexicano hacia 1810?


2. ¿Quiénes integran las masas y quienes forman parte de las otras clases sociales y que
características tienen?
3. ¿Por qué el movimiento de Hidalgo y Morelos no fue apoyado por los “criollos
mexicanos”?
4. ¿La implementación de la economía liberal generó una inestabilidad social?

Desarrollo

Primera década del siglo XIX


En México los que inician los procesos revolucionarios son las clases bajas, conformado por los
pueblos originarios o descendientes de pueblos originarios.
Cuando inician este proceso, hay dos figuras importantes, como el padre Mórelo y el padre
Hidalgo ayuda (grito de dolor, se levantan las ciudades y van ganando adhesión) quien muere
por mandato del rey. lo que hacen mal ellos es que no se contienen. Cuando toman las armas,
o el poder, arrasan con todo, matan.
Lo que provoca es que las clases poderosas de México se unan a los españoles para contener
esa revuelta. Por lo que se genera una guerra civil e interna en ese territorio con EE. UU, hasta
1821 aproximadamente, cuando puede lograr una independencia, un estado pacífico.

Libro:
en 1810 se produjo un levantamiento en una ciudad provincial, Dolores, perteneciente a la
intendencia predominantemente minera de Guanajuato. Bajo la dirección del cura Hidalgo y
del militar Allende se nuclearon enseguida grandes masas campesinas e indígenas (también
quienes trabajaban en minas mayormente) que atacaron la ciudad de
Guanajuato, venciendo la resistencia de los españoles y realizando una gran masacre entre los
elementos dominantes de la sociedad. Incapaz de organizarse adecuadamente, la rebelión fue
vencida y su jefe Hidalgo fusilado al año siguiente.
Pero inmediatamente resurgió en otra zona periférica del virreinato, hacia el sur de la ciudad
de México, y dirigida también por un sacerdote, Morelos, que
en su juventud había trabajado como arriero. Quien perdió la vida en 1815.
La independencia del país recién debería llegar el año 1821, esta vez bajo la dirección de
fuerzas muy 'distintas. Fueron los sectores conservadores —españoles y criollos— de la
sociedad mexicana los que, bajo la dirección de Agustín de Iturbide, declararon la
independencia, con el objetivo de impedir la aplicación de las medidas liberales que estaban
viniendo de España desde el triunfo de pronunciamiento de Riego de comienzos de 1820.
Extrañamente, estos sectores conservadores se aliaron con lo que quedaba de los viejos
insurgentes, para doblegar el poderío español, y fácilmente lo consiguieron. Con esto se inicia
una serie de insólitas alianzas de opuestos
que caracterizan la política mexicana de las primeras décadas de su vida independiente.
El pasaje de la economía mercantilista colonial a una liberal con predominio de la inversión
extranjera tenía que significar una serie de enfrentamientos entre sectores de las clases altas.
El régimen español, por medio de sus múltiples prohibiciones y reglamentaciones, daba, en la
práctica, gran protección a muchas actividades que no podían sobrevivir bajo el nuevo
régimen. Durante la última parte del siglo XIX, sin embargo, el nuevo sistema terminó por
imponerse, con las clases altas sobrevivientes una vez más unificadas y por lo tanto en
condiciones de proporcionar estabilidad política. Pero mientras habían estado desgarradas por
rupturas internas, Ies había resultado imposible poner orden en su propia casa, y con más
razón por lo tanto en el país. La Iglesia, el Ejército y hombres ambiciosos individualmente
actuaban todos sin un centro unificante de lealtades.

LA REVOLUCION DE MAYO EN CATAMARCA

Impacto de la revolución en la vida política de Catamarca: La constitución de la junta


provisional gubernativa ocurrida en Bs As, significó asumir la responsabilidad del gobierno
propio por los criollos rioplatenses subrogando la autoridad del virrey designado por la
Metrópoli.
La decisión de formar una junta, había sido adoptada por Bs As (hermana mayor) con el voto
de las demás ciudades del virreinato del Rio de La Plata. Por ese motivo fue preciso consultar
su opinión y solicitar el reconocimiento del nuevo gobierno. Con esa intención, tanto la Junta
presidida por Cornelio Saavedra como el cabildo de Bs As, cursaron circulares a los cabildos del
interior pidiéndoles su adhesión al nuevo orden político y solicitando la designación de
diputados para organizar un congreso.
Esas comunicaciones llegaron a las ciudades del norte en diferentes fechas, según las
distancias y las facilidades del servicio de correo de la época. El 22 de junio llegó a Catamarca
por correo ordinario. Todas las provincias subalternas estimaron prudentes conocer la decisión
de Salta, cabeza de la intendencia.
En Salta se convocó a un cabildo abierto, estuvieron presentes el gobernador intendente
Nicolás Severo de Isasmendi, el obispo diocesano Dr. Nicolás Videla del Pino, el cabildo
eclesiástico, los jefes de los cuerpos militares y vecinos caracterizados.
El cabildo catamarqueño, donde gravitaba la autoridad de Francisco de Acuña, comandante de
armas y teniente tesorero, resolvió esperar ordenes de la capital de la intendencia.
El 23 de Julio cuando ya se sabía el reconocimiento de Salta al nuevo gobierno, se convocó al
vecindario para elegir representante, donde se llevó la mayoría de votos el comandante de
armas (Acuña).
El 25 de agosto, se comunicó desde Salta, que él no podía tomar el puesto de diputado ya que
no era americano de nacimiento.
Por lo que fue elegido José Antonio Olmos. El 8 de diciembre asistieron a Bs As los diputados
elegidos del interior. Desde este momento, Catamarca tiene una nueva política.

El experimento de las juntas principales y subalternas: A partir de la junta de provisional


gubernativa de Buenos Aires, en el interior se continuaron rigiendo por corto tiempo, las
instituciones del viejo régimen. Los cargos políticos y administrativos, fueron cubiertos con
gente decidida en favor de la revolución. En Catamarca, la primera designación del nuevo
gobierno favoreció a Feliciano de la Mota Botello, quien, desde el primer momento, demostró
una firme adhesión a la causa revolucionaria.
La junta subalterna de real hacienda guerra y ramo de correos se constituyó en Catamarca a
tenor de lo ordenado por el reglamento. Fue elegido presidente Feliciano de la Mota Botello,
teniente coronel y comandante de armas.
Catamarca de cierta manera, colabora con los ejércitos emancipadores, tanto el de Belgrano,
como el de San Martin, con hombres, con animales para los distintos frentes de guerra que se
estaban desarrollando en todo el territorio de las provincias unidas del Rio de La Plata.
El primer triunvirato, formado por Feliciano Chiclana; Manuel de Sarratea y Juan José Paso, a
quien la junta grande transmitió el Poder Ejecutivo Nacional que ella ejercía el 12 septiembre
de 1911, dio un golpe de estado el 7 de noviembre y disolvió al poder legislativo. A fines de
diciembre, las juntas provisionales fueron disueltas, ahogándose así el primer intento de
democratizar la revolución. Ya que Bs As, no quería compartir el puerto ni el dinero recaudado
en la aduana.

Restitución al cargo de teniente gobernador: El 29 de enero de 1812 se creó la tenencia de


gobierno de la ciudad de Catamarca, en reemplazo de la junta subalterna. Como primer
teniente gobernador, fue designado el coronel de milicias Domingo Ortiz de Ocampo. Su
gestión fue eficiente, promovió la mayor colaboración de Catamarca con hombres y recursos a
la causa de Revolución. A mediados de 1813 fue reemplazado por el coronel Francisco Pico. A
este lo sucedió el 26 de septiembre de 1814 el Teniente coronel Feliciano de la Mota Botello.

Papel del cabildo en la nueva etapa institucional:

División de la Intendencia de Salta. Catamarca subordinada a Tucumán: El 8 de octubre de


1814, Gervasio Posadas resolvió dividir la intendencia de Salta, para crear una nueva provincia:
la de Tucumán.
Dicha provincia se formaba con los pueblos de Tucumán, Santiago del Estero y Catamarca.

Participación de Catamarca en las asambleas políticas nacionales: El 31 de enero de 1813 se


constituyó en Bs As la llamada asamblea general constituyente, si bien no se dicto la
constitución, adoptó medidas transcendentales para institucionalizar el sistema de libertad:
acuñación de moneda nacional, símbolo de soberanía, adopción de la bandera y escarapela
nacional, himno, servicios personales de la época colonial, etc.
En mayo de 1815, se elige a la ciudad de Tucumán como nuevo congreso, sacándolo a Bs As.
En Catamarca, el 21 de agosto de 1815 se elige a el cura párroco de Belén, el Dr. Manuel
Antonio de Acevedo y José Antonio Olmos.
José Antonio Olmos, alegó impedimento para asistir a Tucumán y esto obligó a subrogar su
mandato a el cura párroco de Piedra Blanca Dr. José Eusebio Colombres.
El 24 de marzo, pudo reunirse el congreso. La ceremonia de instalación fue solemnizada con
una misa, el sermón inicial de ese congreso, fue el Dr. Manuel Antonio Acevedo. Este tuvo
actuación destacada en las deliberaciones que condujeron a la elección del director supremo,
el 3 de mayo, en la persona de Juan Martin de Pueyrredón, a la declaración de la
independencia de las provincias unidas de Sud América.
Desde marzo a julio se debate la forma de gobierno, proponían y coincidían con Belgrano, con
la idea monárquica de los incas y la idea de los ingleses, pero de una manera constitucional,
por una cuestión lógica, ya que la mayoría de la población era india.
El 9 de julio con la declaración de la independencia, nos independizamos del rey español y toda
su descendencia, de la Metrópolis de España.

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