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JUICIO: Berarducci, Walter Fabián vs. Provincia de Tucumán y otro s/amparo.

Expte. N°351/15.
Sentencia Nº542

San Miguel de Tucumán, Agosto 21 de 2015, 23.55.

VISTO: los autos caratulados “Berarducci,


Walter Fabian vs. Provincia de Tucumán y
otro, s/amparo” y reunidos los señores Vocales
de la Sala IIIª de la Excma. Cámara en lo
Contencioso Administrativo, con la integración
que surge de la sentencia N°516/15 (fs. 73)
proceden a la siguiente consideración y decisión:

RESULTA:

Que el Sr. Walter Fabián Berarducci interpone demanda de amparo


en contra de la Provincia de Tucumán -Junta Electoral Provincial- a fin que se
declare la inconstitucionalidad de las Resoluciones HJEP nº955/15 del 24/07/2015
y nº 958/15 del 29/07/2015 que habilitan al Sr. Sergio Francisco Mansilla como
candidato a legislador provincial en 1º término por la sección electoral oeste del
partido “Frente para la Victoria” (482) en las elecciones generales provinciales a
realizarse el día 23 de agosto de 2015; y además que se deje sin efecto la misma
y se declare la inhabilidad legal del Sr Mansilla para ser candidato en las referidas
elecciones.
A fs. 13/18, el actor Walter Fabián Berarducci, con patrocinio letrado,
invocando la calidad de candidato oficializado a legislador provincial a segundo
término por la Sección Oeste por el Partido Tucumán para Todos (Nº 430)
interpuso demanda en fecha 4/08/2015 contra la Provincia de Tucumán -Junta
Electoral Provincial- pretendiendo se declare la inconstitucionalidad de las
Resoluciones nº 955/15 del 24/07/2015 y nº958/15 del 29/07/2015.
Alegó que por dichos actos la Junta Electoral Provincial (en adelante
J.E.P.) habilitó al sr. Sergio Francisco Mansilla DNI Nº17.927.470 como candidato
a legislador provincial en primer término por la Sección Oeste del Partido Frente
para la Victoria (Nº482), para las elecciones generales provinciales, municipales y
comunales a realizarse el 23-08-2015.
Requirió se deje sin efecto las mismas y se declare la inhabilidad
legal del citado Mansilla para ser candidato a legislador Provincial en las
elecciones generales provinciales, municipales y comunales convocadas para el
día 23-08-2015.
Impetró como medida cautelar que la JEP excluya o tenga por
excluído al sr. Sergio Francisco Mansilla a candidato a legislador provincial en
primer término por la sección electoral oeste frente para la Victoria Nº482 para las
elecciones generales provinciales municipales, municipales y comunales
convocadas para el 23-08-2015.
Describió la situación planteada como correspondiente al ámbito del
derecho público provincial y específicamente al derecho electoral y por lo tanto
que este Tribunal es el competente para ello.
Consideró que su legitimación activa radica en virtud de su calidad
de candidato oficializado por la misma sección electoral y por lo tanto como
contrincante directo con un interés legítimo y actual.
Afirmó que es la única vía idónea y expedita para resolver la
cuestión planteada y que la citada Resolución Nº955/15 HJEP y su confirmatoria
constituyen actos arbitrarios, irrazonables de ilegalidad manifiesta en violación
repugnante al art. 45 de la Constitución Provincial.
En cuanto a los hechos destacó que el art. 45 de la Constitución
provincial establece que los legisladores duran cuatro años y podrán ser
reelegidos por un nuevo período consecutivo, previendo la posibilidad de ser
elegidos nuevamente con un intervalo de un período.
Señaló que tal restricción es, por un lado, evitar el enquistamiento
en los cargos es decir que se aferren a toda costa a un poder político, y por otro,
favorecer la renovación de los cuadros políticos, citando jurisprudencia.
Afirmó que el sr. Sergio Mansilla fue candidato electo a legislador
provincial tanto en las elecciones provinciales de 2007 como en las del año 2011 y
esta circunstancia impide que sea candidato para ese cargo nuevamente, de
acuerdo a lo establecido en el citado art. 45.
Destacó que si bien es cierto que en el año 2011 el sr. Mansilla no
asumió a su banca de legislador eso no impide que se encuentre imposibilitado
constitucionalmente para postularse, citando jurisprudencia.
Relató la actuación de la Junta Electoral Provincial, destacando que
por Resolución nº955/15 del 24-07-2015 se oficializaron las candidaturas, con
excepción del nombrado Mansilla que se encontraba impugnado y que por
Resolución nº958/15 del 29-07-2015 se rechazaron las impugnaciones,
oficializando de esta manera su candidatura.
Recalcó que en el último acto de la Junta Electoral se dijo que el sr.
Mansilla no había asumido, ni tomado posesión del cargo de legislador en el
período 2011-2015 lo que le marcaría el comienzo del ejercicio de la función a
todos los efectos, vulnerando con este criterio la jurisprudencia que indica que
basta haber sido electo.
Entendió que es una resolución insólita, irrazonable, arbitraria,
ilegítima, ilegal e infundada con argumentaciones de índole sofística que no
pueden ser tenidas como argumentaciones de tipo jurídico.
Citó que los arts. 90 in fine y 133 se encuentran en concordancia
con el art. 45 de la Constitución de la Provincia, que la norma constitucional utiliza
el término elegido sin condición ni aditamento alguno y la circunstancia de asumir
o no, no cambia haber sido elegido, de lo contrario el constituyente lo hubiera
consignado expresamente.
Destacó que el acta de escrutinio definitivo y la proclamación de
candidaturas de la JEP tiene el carácter de instrumento público y que en ese
carácter se lo consignó en las elecciones de 2007 y 2011 al sr. Mansilla.
Concluyó que el Sr. Mansilla fue elegido como legislador provincial
en forma consecutiva en las elecciones de los años 2007 y 2011 y en
consecuencia por aplicación del art. 45 in fine de la Constitución provincial se
encuentra incurso en la causal de inhabilidad para ser candidato a legislador
provincial en las elecciones provinciales del 23-08-2015.
Ofreció prueba, citó el derecho que consideró aplicable, impetró el
dictado de la medida cautelar arriba señalada y solicitó se haga lugar a la
demanda con costas en los términos ut supra mencionados.
Por providencia de fs. 20 se dispuso requerir a la Junta Electoral
Provincial el informe previsto en el art. 21 del C.P.C., el que fue contestado a fs.
66 y puesto a conocimiento por providencia de fs. 67.
Corrido traslado de ley por providencia de fs. 71 (cédula de fs.), la
Provincia de Tucumán, mediante apoderado letrado, planteó en primer término
incompetencia en razón de la materia y del grado (fs. 87/90 vta.) considerando
que a tenor del art. 4 del C.P.C., la CSJT es la competente para entender en esta
litis, destacando, entre otras consideraciones, que la disputa impacta de manera
directa e inmediata en la oferta electoral.
Contestó demanda, formulando una negativa general de los hechos
y del derecho invocados por el actor (fs. 90 vta./92 vta.), reconociendo como
verdad de los hechos que la Junta Electoral Provincial dictó las citadas
Resoluciones Nº955/15 del 24/07/2015 y la Resolución Nº958 del 29/07/2015, a
las que citó en sus considerandos y parte resolutiva (fs. 92 vta.).
Expresó que ninguno de los supuestos agravios que se tratan en la
acción planteada se refieren, aplican ni verifican en el primero de dichos actos, ya
que éste sólo ordenó el registro de los candidatos presentados “en la medida que
cumplan con el total de los requisitos establecidos en la normativa y con exclusión
de aquellos sobre los que recayeron impugnaciones” y que se encuentren
pendientes de resolución como era el caso del sr. Sergio Mansilla.
Afirmó que la resolución no oficializa al candidato que se cuestiona
en autos (Sergio Mansilla), postergando dicha condición para el momento de
resolución de las impugnaciones pendientes. Solicitó que en relación puntual con
la Resolución nº955/15, que se rechace la acción.
En lo que hace al cuestionamiento de la Resolución nº958/15,
consideró que la parte actora pretende fundamentar la inconstitucionalidad en el
supuesto perfeccionamiento de la inhabilidad prevista en el art. 45 de la
Constitución Provincial por la eventual condición de “elegido” en las elecciones
celebradas en los dos períodos anteriores, es decir años 2007 y 2011 (fs. 93 vta.).
Expresó que de este modo el actor realizó una interpretación literal
de la norma sin considerar ninguno de los restantes y numerosos extremos que
surgen de los considerandos de la resolución cuestionada, afirmando que existe
una manifiesta “inconsistencia” del planteo si nos atenemos al alcance del acto, el
que transcribió en su parte que consideró pertinente.
Puso especial énfasis en lo relativo a que el Sr. Mansilla presentaba
una situación particular y distintiva toda vez que si bien fue candidato a legislador
electo en las elecciones provinciales en el año 2011, nunca abandonó interrumpió
o suspendió el ejercicio del cargo de senador nacional, que asumió el 9 de
diciembre de 2009 con mandato hasta el 9 de diciembre de 2015, de donde se
desprende que “jamás asumió el cargo de legislador para el que fue electo en el
año 2011 encontrándose ausente también el juramento correspondiente para
asumir” (fs. 94).
De este modo, continuó citando el acto de la JEP, en cuanto
considera la situación del sr. Mansilla “distinta” de las personas involucradas en lo
precedentes jurisprudenciales, los que “habían aceptado el cargo y prestado
juramento correspondiente a ambos períodos consecutivos”. Afirmó que estos
actos “desatan los efectos jurídicos previstos en la Constitución de Tucumán y las
leyes correspondientes”, continuando con la cita de la Resolución de la J.E.P. (fs.
95).
Remarcó finalmente, citando al acto cuestionado, que no se
observa cómo un candidato puede “enquistarse” en el cargo que no asume, por lo
que entendió que la claridad y el tratamiento completo que realizada el acto de
estos aspectos puntuales, le exime de otras argumentaciones. Consideró por lo
tanto que lo expuesto en la demanda se trata de “meras discrepancias con el
criterio del juzgador”, pero nunca una situación de “arbitrariedad o ilegitimidad
manifiesta” (95 vta.).
Afirmó que la mecánica interpretativa completa y exhaustiva que
realiza la JEP con un pormenorizado análisis del caso, es la única que se
compadece con el espíritu de la norma, según se señaló en el Diario de Sesiones
de la Convención Constituyente en la reforma de la constitución provincial en el
año 2006.
Consideró por lo tanto que no puede alegarse afectación de la
”igualdad ante la ley y no discriminación” ya que a la igualdad de trato debe
realizarse frente a aquellos que se encuentren en igualdad de condiciones y, en el
caso, destacó que “surge palmaria la asimetría de situaciones, tornando
imperativo que la resolución analice las diferencias jurídicas” (fs. 96 vta.).
Expuso que en la demanda nada se dice de estos aspectos que sí
consideró el acto de la JEP, limitándose a una interpretación “fría y literal de la
norma”, incluso consideró que la interpretación propuesta en la demanda es
“deformante” (fs. 97). Planteó una interpretación “de y desde la constitución” que
atienda su vocación de “futuro y continuidad”, citando doctrina y jurisprudencia que
entendió aplicable (fs. 97 vta.).
Recalcó que el sr. Mansilla nunca asumió el cargo de legislador
provincial, al no haber abandonado su cargo de senador nacional vigente a iguales
fechas (fs. 98 vta.).
Ofreció pruebas (fs. 99 vta.), hizo reserva del caso federal e impetró
se declare la incompetencia de este Tribunal (fs. 100) y se rechace la demanda
(fs. 110 vta.).
Corrido traslado de ley de la citada providencia de fs. 71, se
apersonó Sergio F. Mansilla, mediante apoderado letrado, planteó recusación con
causa (fs. 103/109) e incompetencia material (fs. 110/118).
Al contestar demanda, señaló que la interpretación que realiza la
Junta Electoral Provincial en los actos cuestionados es más amplia y medulosa
que el mezquino resumen que se realiza en al demanda.
Destacó que la Junta al resolver entrelaza el art. 45 con el art. 66 de
la Constitución Provincial analizando la falta de juramento y toma de posesión del
cargo para el período 2011-2015 (fs. 119).
Consideró que debe leerse correctamente la voluntad del
constituyente al redactar el art. 45 de la Constitución Provincial, destacando que
tampoco observa cómo un candidato que no asume el cargo puede a raíz de ello,
enquistarse en el cargo.
Destacó que la Resolución cuestionada se encuentra debidamente
fundada en un análisis completo exhaustivo del citado artículo constitucional, negó
y rechazó que la interpretación propuesta por el amparista sea la que deba
aplicarse y que sólo fijar el quicio de la interpretación o aplicación gramatical de la
palabra elegido importe una adecuación justa a la voluntad expresada en la
norma.
Precisó que no juró ni asumió el cargo de legislador provincial en el
año 2011 por su ejercicio ininterrumpido como senador de la Nación mandato
2009-2015, planteándolo como un hecho notorio fuera de discusión.
Consideró que según la lectura de la parte actora la cuestión del
triunfo electoral en las lecciones del año 2011 define la elegibilidad o inhabilidad
para la postulación en pugna lo que es una interpretación parcial y equivocada del
texto constitucional y leyes aplicables (fs. 120).
Entendió que la cláusula relacionada al ejercicio real y efectivo a la
realidad del cargo e indica período legislativo como plazo de espera para una
nueva postulación por eso para que se torne operativa la cláusula de ineligibilidad
es necesario ser “legislador” en dos períodos legislativos consecutivos y para ello
es ineludible que sea aprobado por el título por quienes serán sus pares, jurar,
asumir su mandato y en definitiva incorporarse al cuerpo. Destacó que nada de
eso sucedió en su caso (fs. 121).
Estimó que la cita efectuada en el art 45 hace referencia al ejercicio,
permanencia en el cargo, y no solamente a su elección (fs. 122), considerando
que en una interpretación más amplia, en una hermenéutica pro homine y
jerarquía de valores, entre la limitación pretendida por la parte actora, debe
inclinarse por la libertad de la oferta electoral, recayendo en definitiva la decisión
de la elección en los votantes (fs. 123).
Recalcó que las interpretaciones restrictivas como la postulada por
los rivales políticos, responden más a sus propios intereses que a una imperiosa
necesidad de la sociedad lo que se prueba con la burda omisión de impugnar
todas las candidaturas en situación idéntica.
Solicitó se resuelva ratificando las resoluciones de la JEP y ofreció
pruebas (fs. 124).
Por providencia de fs. 126 se habilitaron en la presente causa días y
horas inhábiles, a tenor de lo dispuesto en el 2º párrafo del art. 11 del CPC.
Por otro lado, la parte actora impetró el dictado de una medida
cautelar que fue acogida por Resolución de Presidencia de la Sala Nº 51 del 13-
08-2015 (fs. 78/79), disponiéndose suspender la ejecutoriedad de la Resolución
N°958/15 H.J.E.P del 29-7-2015 y disponer cautelarmente que la H. Junta
Electoral Provincial excluya en forma inmediata al Sr. Sergio Francisco Mansilla
D.N.I. 17.927.470 de la lista de candidatos a legisladores provinciales por la
Sección Electoral Oeste del partido “Frente Para la Victoria” (482) para las
elecciones provinciales generales a realizarse el día 23 de Agosto del corriente
año, hasta tanto se dicte sentencia definitiva en la presente causa.
Por providencia del 20-08-2015 a fs. 139 se dispuso como
producción probatoria ofrecida por las partes requerir a la Legislatura de Tucumán
para que en el plazo de dos horas, informe si el Sr. Sergio Francisco Mansilla,
como candidato electo a Legislador Provincial en las elecciones provinciales
celebradas el 28/08/11, asumió su banca, prestando el juramento de ley, indicando
en éste último caso en que fecha se realizó, y remitiendo los antecedentes
respectivos.
A fs. 161/164 obra la contestación de la H. Legislatura de Tucumán.
Mediante oficio del 20-08-2015 la CSJT comunicó a este Tribunal el
dictado de la Sentencia Nº879/2015 del 19/08/2015 (copia a fs. 141/147) recaída
en los autos caratulados “Berarducci Walter Fabián vs. Provincia de Tucumán s/
Amparo. Recursos Per Saltum interpuestos por los demandados, expte. N°
100/2015”, por la que se dispuso: I.- declarar la incompetencia de la Corte
Suprema de Justicia para entender en este proceso de amparo y declarar la
competencia de la Sala III de la Excma. Cámara en lo Contencioso Administrativo
para continuar entendiendo; II.- Rechazar los pedidos de avocación directa
formulados por el señor Sergio Francisco Mansilla y por Superior Gobierno de la
Provincia referidos al dictado de la sentencia de fondo en la presente causa y III.-
Hacer lugar al pedido de avocación directa efectuado por el señor Sergio Mansilla
en relación a la Resolución de la Sala IIIª de la Excma. Cámara Contencioso
Administrativa del 13 de Agosto de 2015 que ordenó suspender la ejecutoriedad
de la Resolución N° 958/15 H.J.E.P, del 29-7-2015, que había dispuesto
cautelarmente que la H. Junta Electoral Provincial excluya en forma inmediata al
Sr. Sergio Francisco Mansilla de la lista de candidatos a legisladores provinciales
por la Sección Electoral Oeste del partido “Frente Para la Victoria” (482) para las
elecciones provinciales generales a realizarse el día 23 de Agosto del corriente
año, hasta tanto se dicte sentencia definitiva en la presente causa.
En consecuencia, la CSJT modificó aquella resolución, y dispuso no
innovar en relación al estado de hecho y de derecho existente a la fecha de
promoción de la demanda, y hasta tanto recaiga resolución firme en la causa
respecto a las impugnaciones efectuadas a la candidatura de Sergio Francisco
Mansilla y en particular, llegado el caso, la Junta Electoral de la Provincia se
abstendrá de proclamar como electo al demandado y de entregarle el pertinente
diploma que así lo acreditare, hasta tanto tenga lugar aquella resolución firme.
A fs. 128/130 dictaminó la Sra. Fiscal de Cámara en el sentido que
corresponde declarar la competencia de esta Cámara para entender en este juicio.
Una vez resuelta las cuestiones sobre integración del Tribunal en
sentencias Nº526 del 19-08-15 (fs.137/138) y Nº538 del 21-08-2015 (fs. 179) y
notificadas, por providencia de fs. 170 se llamaron los autos para sentencia
(puesto en la oficina el día 21-08-15), quedando este proceso en estado de
resolver.

CONSIDERANDO:

I. Competencia contencioso administrativa:


Atento a la excepción de incompetencia opuesta por la parte
demandada, cabe señalar que en todos los casos anteriores en que fue
impugnada la validez de resoluciones de la Junta Electoral Provincial viene siendo
reiterada –sin excepciones- la declaración de competencia contencioso
administrativa por parte de la Excma. Corte Suprema de Justicia de Tucumán
desde hace aproximadamente veintitrés años (casi desde la integración de ésta
Cámara en el Poder Judicial de Tucumán como tribunal especializado en la esfera
del derecho público (ley 6238 del 05/09/1991).

En el año 1992 la Corte Suprema declaró que “las pretensiones


anulatorias de resoluciones adoptadas por la Junta Electoral Provincial en relación
a la integración de los candidatos electos como concejales…no cabe duda que
por la “materia” corresponden a la actuación de un órgano del Estado local en el
ámbito del derecho público” (…) y “corresponde en principio entender –salvo
mandato legal expreso en contrario- al órgano judicial con competencia en lo
contencioso administrativo” (CSJT, sent. nº 60/1992, “Lahitte Salvador vs Junta
Electoral Provincial”; idem: sent. nº 85/1992, en “Jimenez Luis Roberto”).
En el año 1999 y a raíz de la entrada en vigencia del Código
Procesal Constitucional, la Corte Suprema advirtió con relación a la impugnación
de resoluciones de la JEP sobre el derecho a ser elegido como candidato que “los
actos que se estiman lesivos no provienen ni del Poder Ejecutivo, ni del
Legislativo, ni tampoco de las cámaras de apelaciones y cámaras de instancia
única” (…), sino de la “Junta Electoral Provincial, es decir, de un órgano del
Estado provincial no comprendido en los supuestos del art. 4º, segundo párrafo de
la ley 6.944 (…); por lo que, “el tema en estudio pertenece en forma exclusiva y
excluyente al campo del derecho electoral provincial” y “resulta inherente a la
materia del derecho público –específicamente administrativo” (CSJT, sent. nº
347/1999, en “Juárez Babiano vs. Provincia de Tucumán -Junta Electoral
Provincial-”).
En el año 2002, la Corte Suprema incluyó en la atribución de
competencia a la Cámara en lo Contencioso Administrativo a la impugnación por
inconstitucionalidad del sistema electoral consagrado en la Constitución de 1990 y
de la ley de lemas dictada en su consecuencia, por considerar que estas normas
electorales no configuraban ninguno de los supuestos de excepción previstos en el
art. 4 segunda parte del Código Procesal Constitucional (CSJT, sent. nº 884/2002,
en “Piossek Prebisch vs. Provincia de Tucumán”). Y la misma doctrina fue
reiteradamente aplicada por la Corte Suprema en el año 2006 con relación a la
impugnación por inconstitucionalidad de la incorporación del Fiscal de Estado a la
Junta Electoral de la Provincia en la última reforma al artículo 43 de la Constitución
de Tucumán (CSJT, sent. nº 692/2006, en “Movimiento Popular Tres Banderas”; y
sent. nº 667/2006, en “Defensa Provincial Bandera Blanca”).
En el año 2003, la Corte Suprema consideró que “de la actuación
lesiva denunciada que se imputa a la Junta Electoral, como causativa de la
pretensión de amparo, resulta manifiesto que en la especie no se configura
ninguno de los supuestos previstos en el artículo 4, segunda parte del CPC (Ley
nº 6944) que prevé la competencia excepcional de esta Corte. Tratándose de un
juicio de amparo promovido contra la Provincia por la actuación de uno de sus
órganos en el ámbito del derecho público, resulta competente para conocer del
mismo en razón de la materia, a la Excma. Cámara en lo Contencioso
Administrativo” (CSJT, sent. nº 525/2003, en “Gimenez Lascano Raúl Santiago
José vs. Provincia de Tucumán s/Amparo”).
En el año 2007, la Corte Suprema reiteró con relación a “los
cuestionamientos al funcionamiento y actuación de la Junta Electoral de la
Provincia, especialmente al rechazo mediante resolución nº 89/07 HJEP de la
recusación con causa deducida por el actor contra dos de sus integrantes fundada
en su pertenencia al Poder Ejecutivo (…), que “al no emanar el comportamiento
reputado lesivo de uno de los poderes mentados en el artículo 4 del CPC, el caso
de autos no queda aprehendido en dicha norma de excepción y no se verifica el
aludido mandato legal expreso en contrario. Por consiguiente, resulta competente
la Cámara en lo Contencioso Administrativo por tratarse en la especie de la
actuación de un órgano estatal provincial en la esfera del derecho público” (CSJT,
sent. nº 810/2007, en “Avila Gallo Exequiel vs. Prov. de Tucumán”).
Y por último, el día 19 de agosto de 2015, en correspondencia con
el dictamen concordante de la Fiscalía de Cámara (fs. 128/130), la Corte Suprema
reiteró aquí su pacífica jurisprudencia y declaró la competencia de esta Sala III de
esta Cámara en lo Contencioso Administrativo para entender en la presente
acción de amparo.

II. Admisibilidad de la vía procesal.


Dado que en autos se impugna por inconstitucionalidad en grado
manifiesto a la resolución de la H. Junta Electoral que oficializó la candidatura del
Sr. Sergio Francisco Mansilla a legislador provincial por la Sección Electoral oeste
del partido “Frente para la Victoria”, y se persigue la invalidación de su postulación
como candidato en las elecciones generales provinciales a realizarse el próximo
domingo 23 de agosto de 2015, resulta claro que la acción de amparo es la única
vía idónea y oportuna –desde la perspectiva de la admisibilidad procesal- para
hacer efectiva la garantía constitucional de tutela judicial efectiva en las elecciones
en ciernes.

III. Procedencia.
A modo de abreviada aproximación al núcleo central de este litigio,
puede decirse que la posición procesal de la parte actora se asienta en la
alegación de que la oficialización de la candidatura a legislador del Sr. Sergio
Francisco Mansilla comporta una violación manifiesta de la prohibición
constitucional de ser reelecto por más de dos períodos consecutivos establecida
por el artículo 45 de la Constitución de Tucumán (dado que él ya fue reelecto con
ese alcance como legislador en las elecciones provinciales de los años 2007 y
2011); mientras que la posición procesal de la parte demandada se asienta en la
alegación de que la nueva candidatura oficializada del Sr. Sergio Francisco
Mansilla para la elección provincial del 23/08/2015 no está comprendida en
aquella limitación constitucional o, dicho de otro modo, está singularmente
exceptuada de la prohibición del artículo 45 de la Constitución de Tucumán (dado
que él no asumió ni prestó juramento ni tomó posesión del cargo de legislador
provincial en el período legislativo 2011/2015).
Así las cosas, la clave dirimente del litigio está en identificar las
condiciones de aplicación o el presupuesto de hecho del impedimento jurídico
establecido por el artículo 45 de la Constitución de Tucumán.
La cuestión es simple. Para reducirla a dos palabras, la clave está en
identificar cuál es el hecho que está impedido por el referido art. 45: ¿es la
“reelección” pura y simple?, ¿o es la “reelección” seguida por la “reasunción”
efectiva en el cargo de legislador?.
A nuestro leal saber y entender, es suficiente una simple lectura del
artículo 45 de la Constitución de Tucumán para alcanzar a ver que el significado
es clarísimo y está al alcance del sentido común de todos.
No se necesita ser jurista para entender que la formulación
normativa que establece: Los legisladores durarán cuatro años y podrán ser
“reelegidos” por un nuevo período consecutivo. No podrán ser “elegidos” nuevamente
sino con un intervalo de un período”; ha significado la institución en forma explícita y
reiterativa de una condición de elegibilidad para los legisladores en la
Constitución de Tucumán, tanto en sentido afirmativo como negativo, al consagrar
textualmente primero la posibilidad constitucional de ser “reelegido” por un nuevo
período consecutivo” y al acotar después la imposibilidad o el impedimento
constitucional de “ser elegido nuevamente”.
Para que no quepa ninguna duda, la formulación normativa ha
entrelazado en forma textualmente explícita y reiterativa los significados del primer
y segundo párrafo del artículo 45 de la Constitución de Tucumán. Al límite trazado
en los cuatro años de duración de cada mandato o período legislativo y al énfasis
puesto en precisar que los legisladores cuentan con una única posibilidad de ser
reelegidos por un nuevo período consecutivo, la parte final del art. 45 las ha
reforzado con una formulación negativa igualmente explícita de que en la
Constitución de Tucumán no es posible jurídicamente postular que -después de
haber sido reelectos por dos períodos- los legisladores puedan ser elegidos
nuevamente sin solución de continuidad.
Salta a la vista que los términos “elegidos” y “reelegidos” no solo no
padecen de indeterminación o vaguedad (no se puede ser más o menos electo)
sino que refieren en forma explícita coincidente e inequívoca al hecho de la
“elección”.
El término “electo” connota que un candidato ha sido seleccionado
mediante el procedimiento electoral prefijado en la Constitución a través del voto
universal, secreto y obligatorio de la población de la provincia. No hay ambigüedad
posible: el término “electo” se aplica sólo y excluyentemente a quienes han sido
seleccionados mediante el procedimiento de la elección popular.
Suponer entonces que el término “electo” exige también que el
candidato en cuestión “asuma” efectivamente el desempeño del cargo y cumpla
con requisitos ulteriores, implica forzar las cosas y ampliar el radio connotativo de
aquella voz para avanzar sobre los dominios de otros términos que tienen otros
significados particulares y específicos en nuestro diseño institucional, tales como
por ejemplo “juramento”, “toma de posesión” y “desempeño” del cargo.
La pretensión de que el art. 45 de la Constitución necesita ser
“interpretado” en el sentido de que la voz “reelegido” debe entenderse aplicable
sólo a aquéllos legisladores que habiendo sido electos, además desempeñaron
efectivamente el cargo, intenta asestar un aguijón de duda en una norma que
sobresale por su diafanidad.
Ergo, dado que la voz “electo” resulta claramente aplicable a todos
aquellos que fueron elegidos para el cargo de legislador provincial según un
determinado método de selección, comporta un sofisma argüir que, por la vía de
una supuesta homonimia con la voz “asunción”, queden excluidos aquellos que,
habiendo sido electos, posteriormente no asumieron o no tomaron posesión del
cargo por una circunstancia en la que ellos mismos se colocaron voluntariamente
(vgr. renuncia).
Así como es posible distinguir los casos claros de los casos oscuros,
también es plausible distinguir entre captar el significado de una regla explícita y
tener que ahondar hermenéuticamente en la interpretación.
Como enseña la jurista Claudina Orunesu “captar o comprender el
significado de un término implicaría la capacidad de especificar sus condiciones de
uso. La interpretación sólo sería necesaria cuando tenemos problemas en
especificar esas condiciones de uso, y ellos nos obligarían a sustituir la regla
formulada por otra para eliminar la indeterminación. De esta manera podría
decirse que, mientras en los casos claros se puede captar o comprender con
facilidad el significado de una expresión, en los casos indeterminados es
necesaria la interpretación.”
Es esa pretensión de vaguedad la que aquí se persigue introducir
cuando se arguye que el artículo 45 de la Constitución necesita ser “interpretado”,
en el sentido que la voz “elegido” debe entenderse aplicable sólo a aquel
candidato que, habiendo sido electo, además “asumió” y desempeñó
efectivamente el cargo o función.
Desde esta tesitura, se forzaría la creación artificiosa de tres
categorías de candidatos donde -en buen derecho- sólo existen dos: 1) la de los
candidatos que pueden aspirar a un cargo legislativo en virtud del voto popular; 2)
la de los candidatos que ya habiendo sido elegidos y reelegidos para un
determinado cargo de legislador, no pueden aspirar a postularse para un tercer
período legislativo y 3) la de los candidatos que, encontrándose en la situación de
hecho descripta en el punto 2), pretenden estar incluidos en la situación prevista
en el punto 1), arguyendo no haber asumido o no haber tomado posesión del
cargo legislativo para el cual fueron elegidos o reelegidos.
Esto pondría a los candidatos comprendidos en esta tercera
categoría en una situación inicuamente ventajosa y manifiestamente desigual
respecto de quienes están incluidos en 1) y en 2), ya que siempre serían
potencialmente elegibles y nunca se encontrarían suficientemente alcanzados por
la limitación a la reelección consagrada en el artículo 45 de la Constitución de la
Provincia.
Es oportuno reiterar, en otro orden de ideas, que concurre en este
caso la muy singular circunstancia de que la aplicación constitucional del artículo
45 de la Constitución de Tucumán ya ha sido juzgada por esta Sala IIIª el día 23
de abril de 2015 en “Zurita Marta Elena s/acción meramente declarativa”, exp.
658/14; y en “Partido de los Trabajadores, s/acción meramente declarativa”, exp.
364/14, y en estos casos ella aparece munida de la máxima certeza procesal e
indiscutibilidad por la autoridad de cosa juzgada que adquirieron las sentencias
nº219 y nº220 dictadas por esta Sala IIIª, con el contenido que ha sido difundido
ampliamente y resulta de público y notorio conocimiento.
Vale decir que esta Sala IIIª ya abrió juicio y se pronunció con
máxima certidumbre constitucional con relación al artículo 45 de la Constitución de
Tucumán en el sentido que “los valores que se persiguieron con la restricción de
la reelección, conforme fuera sancionada, consistían en impedir el
enquistamiento en los cargos, desalentar el empeño de permanecer a toda
costa en una posición de poder político, no favorecer la posibilidad de que
se promuevan tendencias oligárquicas de los partidos políticos y el
consecuente abuso de prácticas clientelares” (argumentos contenidos en
proyecto presentado en reunión del 20-03-06 de la H. Convención Constituyente –
Diario de Sesiones nº 2, página 144 ), a favorecer la renovación de los mandos
políticos que se frustra con la adopción de una reelección indefinida que, al
decir de María Angélica Gelli, “favorece cacicazgos regionales que suelen
bloquear el acceso a la legislatura, impidiendo la renovación de los cuadros
políticos”. Y esta Sala reiteró ya en aquellos dos casos la consideración
sentencial de que “A los fines de tener derecho a una nueva candidatura no es
necesario haber cumplido efectivas funciones durante dos períodos
constitucionales consecutivos, ya que el texto constitucional no exige tiempo
mínimo de ejercicio de la función, bastando haber sido electo”.
Salta a la vista en este último párrafo la connatural significación del
artículo 45 C.P. al sólo hecho de “haber sido electo”.
Ahora bien, en este público y notorio contexto circunstancial
precedente, en el que concurrían la máxima jerarquía normativa de la regla de
rango constitucional, el carácter textual explícito de la referencia reiterada a la
elegibilidad en el art. 45 de la Constitución de Tucumán, y la máxima certeza de la
autoridad de cosa juzgada de las sentencias que elaboraron una doctrina judicial
en aquellos dos precedentes, surge con evidencia que el Sr. Sergio Francisco
Mansilla podía considerarse inhabilitado -con certeza constitucional suficiente-
para solicitar hasta el 17-7-2015 la registración como candidato oficializado
directamente ante la Junta Electoral (conforme cronograma electoral establecido
por Resolución N°16/15 HJEP, artículo 3°), habida cuenta que tal solicitud exigía la
inaplicación a su respecto del artículo 45 de la Constitución o, dicho de otro modo,
la creación de una excepción individual que en su caso sólo haber sido pretendida
con anterioridad en vía de amparo “ante los jueces” o por “el medio judicial más
idóneo”, en el lenguaje del artículo 37 de la Constitución Provincial y del artículo
43 de la Constitución Nacional, tal como lo hicieron los sres. Marta Zurita y
Roberto Arnaldo Palina.
Contrariamente a ello, y a pesar de que el Sr. Mansilla había omitido
instar la necesaria dilucidación de su caso por el Poder Judicial, que es el único
que tiene a su cargo el control de constitucionalidad en nuestro sistema
republicano, tanto cuando lleva a declarar la inconstitucionalidad de una norma
como cuando conduce a formular una “interpretación conforme” a la constitución
(C.S.J.N., Ingenio y Refinería San Martín del Tabacal c/ Provincia de Salta”, 8-11-
67. Idem.: Bidart Campos Tratado Elemental del Derecho Constitucional
Argentino, Tomo I-A, págs. 442 y 462), mediante la Resolución N°958/15 la HJEP
rechazó todas las impugnaciones formuladas, jurídicamente sustentadas, e hizo
lugar al pedido de oficialización de su candidatura, aún cuando este Organismo
electoral no estaba legalmente habilitado para enjuiciar una “interpretación
conforme” del artículo 45 de la Constitución de la Provincia, habida cuenta que,
además de que dicha atribución jurisdiccional no le ha sido adjudicada por norma
específica alguna de la ley vigente, tampoco los funcionarios que integran su
mayoría (reemplazante del Vicegobernador y Ministro Fiscal) están dotados de la
potestad de juzgar, interpretar y declarar la inconstitucionalidad de las normas, con
la necesaria imparcialidad e independencia que indispensablemente se requiere a
tal efecto, conforme a la Constitución Nacional y a los Tratados Internacionales de
Derechos Humanos que integran el bloque de constitucionalidad.
Sabido es que la función esencial del Poder Judicial es dirimir
conflictos y desempeñar especialmente una "jurisdicción constitucional”
establecida para tutelar, mantener, controlar la supremacía e interpretar las
normas consagradas en la Constitución como Ley Suprema. Excepcionalmente los
tribunales administrativos, cuando están dotados de independencia e
imparcialidad, pueden llegar a ejercer ese control y emitir declaraciones de
inconstitucionalidad desaplicativas de las normas que descalifiquen, pese a no
formar parte del Poder Judicial, sólo y únicamente cuando una ley los habilita
específicamente (Bidart Campos, ob. cit., pág. 443).
Desde esta última perspectiva, se concluye entonces en que la
Resolución N°958/15 adolece por añadidura de una carencia grave y absoluta de
atribución legal de competencia y jurisdicción para resolver este caso, además de
que básicamente y por sobre todas las cosas la “interpretación conforme” que
hizo la HJEP configura en sí misma una violación en grado manifiesto del artículo
45 de la Constitución de Tucumán.
Por lo tanto, es procedente declarar la invalidez insanable y absoluta,
por manifiesta inconstitucionalidad, de la Resolución N°958/15 de la HJEP del 29-
7-2015 y en consecuencia dejar sin efecto alguno la oficialización de la
candidatura del Sr. Sergio Francisco Mansilla, D.N.I. 17.927.470, como candidato
a legislador provincial en primer término por la Sección Electoral Oeste del Partido
Frente para la Victoria, y declarar a su respecto la imposibilidad constitucional de
ser elegido legislador provincial.

Dado la forma en que se decide la presente causa, resulta


inconducente el tratamiento de las demás alegaciones planteadas.

COSTAS: atento el resultado arribado en esta causa, corresponde


imponer las costas a la demandada y al Sr. Sergio Francisco Mansilla (artículo 26
del C.P.C.).

Reservar regulación de honorarios para su oportunidad.


Por ello, la Sala IIIª de la Excma. Cámara en lo Contencioso
Administrativo,

RESUELVE:
I- HACER LUGAR, por lo considerado, a la acción de amparo
promovida en autos por Walter Fabián Berarducci contra la Provincia de Tucumán.
En consecuencia, DECLARAR la invalidez insanable y absoluta, por manifiesta
inconstitucionalidad, de la Resolución N°958/15 de la HJEP del 29-7-2015,
dejando sin efecto alguno la oficialización de la candidatura del Sr. Sergio
Francisco Mansilla, D.N.I. 17.927.470, como candidato a legislador provincial en
primer término por la Sección Electoral Oeste del Partido Frente para la Victoria.
Asimismo DECLARAR la imposibilidad constitucional de que el Sr. Sergio
Francisco Mansilla sea candidato a legislador provincial en las elecciones a
realizarse el 23 de Agosto de 2015.
II- COSTAS como se consideran.

III- RESERVAR pronunciamiento sobre honorarios.


HÁGASE SABER.-

EBE LÓPEZ PIOSSEK RODOLFO NOVILLO

ANTE MÍ: JOSÉ ERNESTO SORAIRE.

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