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Iza Madelin
Figueroa Melania
Sacoto Mayra
Blacio Willie
Dra. Catalina López Chávez
Principales paradigmas acerca del espectro autista
21 de octubre de 2022

Análisis del Autismo desde el paradigma de la teoría Crítica: Escuela


de Frankfort, Erich Fromm 
A inicios de la década de 1930 surge una propuesta epistémica cuyos preceptos
dan relevancia al sujeto con pensamiento crítico, el cual empieza a cuestionar diversas
posturas de poder como: la religión, la política, culturalidad, economía y otros, para la
búsqueda de la verdad desde la comprensión de la realidad; es decir, enfatiza la
autonomía de la persona; estas premisas definieron lo que se denominó Teoría Crítica.
Siendo esta conocida como “Teoría Crítica de la Sociedad”, con bases
intelectuales y la más influyente durante el siglo XX; es así como estuvo organizada en
base a la resolución de problemas a través del análisis y la reflexión de manera
científica. Y dentro de esta postura se permite cuestionar la realidad de los hechos sin
llegar a esquematizarse en un pragmatismo absoluto; es decir, no se queda relegado a la
idea de causa – efecto.
Por lo tanto, basan su argumento en la idea de armonizar las necesidades
humanas y las necesidades sociales con la finalidad de acotar el conflicto entre la
naturaleza humana y el orden social, compartiendo una relación bidireccional con el
paradigma del materialismo histórico.
En este punto, surge el enlace entre la interpretación de la historia, sus sucesos y
el psicoanálisis con el objetivo de desarrollar una postura psicológica que compagine el
contexto social con la posición subjetiva de las personas, lo que permitió generar una
interrogante ¿Cuáles son los mecanismos psicológicos que coadyuvan al proceso de
dominación que regía la época?
Considerando los aspectos expuestos, en el presente ensayo se analizará la teoría
crítica desde la escuela de Frankfurt conformado por autores como Horkheimer,
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Adorno, Marcuse, Habermas y desde el psicoanálisis de Fromm, para argumentar cómo


el constructo epistémico de esta teoría afronta la visión del autismo.
La teoría crítica parte del vínculo que mantiene la persona con su medio
ambiente, por lo que se acoge al cuestionamiento de los pensadores de la Escuela de
Frankfurt en el que se indaga sobre el estilo de vida de las personas que apuntaba a una
respuesta automática de producción; dicha premisa se abordará relacionando en primera
instancia a Horkheimer y Adorno.
Estos autores plantean que, en la época de la Escuela de Frankfurt, la razón se
había vuelto tiránica, una metáfora dominante que monopolizaba todos los aspectos de
la vida social; por tal motivo ha estado asociada a una idea sobrellevada, donde el ser
humano no busca la reflexión de sus acciones, para poder alcanzar un control total de la
naturaleza convirtiéndose en un objeto y respondiendo a la idea del capitalismo.
(Horkheimer 1998).
Ambos autores plantean en sus obras La Dialéctica de la Ilustración y Dialéctica
negativa en las que respectivamente el ser humano puede ser dominado desde los
medios de comunicación masivos propios de la época, provocando que su actuar fuese
mecanizado, por lo tanto, el poder de manipulación no permitirá refutar una idea
determinada socialmente. (Horkheimer y Adorno 2006)
En relación con el texto Dialéctica negativa, se manifiesta que las relaciones de
poder contribuyen a que el ser humano pierda su esencia, sea anulado y quede
prisionero de una realidad donde su pensamiento se reduce a una rutina predeterminada.
(Horkheimer y Adorno 2006)
Habermas, no se circunscribe a situar a la persona en un elemento absorbido por
el mecanismo rutinario de una sociedad, por lo que, centra su argumento alrededor de la
racionalidad comunicativa (1981), este concepto se desarrolla a través de la
hermenéutica, es decir, centrar la interpretación del discurso social a partir del análisis
del contexto en el cual se desarrolla permitiéndole adquirir un significado. (Habermas
1981)
Por consiguiente, “plantea el irrestricto respeto a la racionalidad del interlocutor
en un proceso de comunicación ideal donde habla de personalidades; es decir, diversas
cualidades que los conforman”. (Fernández 1997, 16)
En base a lo estipulado en párrafos anteriores también se destaca a Marcuse, a
partir de la hermenéutica fenomenológica de la existencia humana; permitiendo plantear
las diversas problemáticas sociales y políticas, a través de críticas de transformación. De
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aquí que se mantiene la constitucionalidad del ser humano y de la sociedad, para


mejorar la calidad de vida. (Marcuse 1978)
Fromm, considerando las aportaciones de Marcuse desarrolló un programa que
se enfoca en elaborar una psicología capaz de analizar el ámbito social cuyo argumento
expone ideas del capitalismo como: el aspecto social es el enlace que otorga sentido al
ámbito socioeconómico y la ideología que rige en un grupo poblacional.
Acogiendo los preceptos de Fromm, la psicología social analítica se encamina en
dos horizontes, el psiquismo determinado por los factores presentes en la sociedad y,
por otra parte, el psiquismo como elemento transformador de los procesos que se
generan en la sociedad, es decir en una relación de convergencia y divergencia
absolutamente dinámica. (1964).
Estas pautas teóricas permiten cuestionar la premisa que primaba en la época, la
cual se enmarcaba en una sociedad en funcionamiento; por lo que, la persona era “sana
o normal” (Fromm 1964, 13) en tanto cumplía con un rol preestablecido que el sistema
le otorgaba o, caso contrario, se circunscribía a una “patología de la normalidad”
(Fromm 1964, 13), es decir, una imposibilidad de adaptarse a los parámetros de la
cultura.
Finalmente, la línea histórica de los acontecimientos relatados sobre la teoría
crítica y la escuela de Frankfurt, se denota que el ser humano debe buscar la libertad en
base a sus principios sin ser sugestionado por el entorno que lo rodea, el cual es hostil y
cambiante que ofrece formas triviales de satisfacción, premisa que puede contrastarse
con la “Dialéctica de la Ilustración” de Adorno y Horkheimer.
Con base a la idea anterior, se podría decir que el autismo se ha ido entrelazando
con un sistema económico capitalista; es decir, que logra generar una demanda
desenfrenada junto con la difusión masiva de los medios de comunicación, como
resultado provoca que se cree una amplia gama de planes terapéuticos que ofrecen
adaptar al niño autista dentro de su contexto.
La teoría de racionalidad comunicativa de Habermas considera que para
establecer mecanismos de acción comunicativa se debe generar un proceso
intersubjetivo en la interacción entre el oyente y el hablante; es decir, que cada una de
las partes aporte con formas de pensar, de significar lo que se expone y se llegue a un
proceso reflexivo.
Este aspecto también se visibiliza en el autismo ya que al igual que cualquier
otro sujeto tiene un modo de comunicación cuya diferencia radica en el valor que se le
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otorga a sus mecanismos de acción comunicativa; puesto que, el paradigma de


normalidad arraigado en la sociedad anula la singularidad de cada una de las personas lo
que impide que aquellas formas diferentes de relacionarse tengan un valor de
entendimiento.
Para finalizar, se considera que en la actualidad se define a una persona como
autista cuando cumple con criterios diagnósticos proporcionados desde la
interdisciplinariedad, que históricamente han sido construidos y es ahí donde la
sociedad estigmatiza a esta condición al trata de ir encasillando o etiquetando a personas
con ciertos rasgos que se escapan de los parámetros bases de su desarrollo normo-típico
en relación con lo que dictamina la sociedad.

Bibliografía

Fromm, Erich. 1962. Marx y su concepto de hombre. Primera edición de libro


electrónico, 2020. Ciudad de Mexico: Fondo de Cultura Económica.
https://portal1.uasb.edu.ec:2345/es/ereader/uasb/130932?
as_contributor=ERICH__FROMM&as_contributor_op=unaccent__iexact&prev
=as.
———. 1964. Psicoanalisis de la socioedad contemporanea. Sexta. México D.F.:
Fondo de Cultura Económica.
Fernández, Sergio Pablo. 1997 “Habermas y la Teoría Crítica de la Sociedad Legado y
diferencias en teoría de la comunicación”, 16.
Habermas, Jürgen. 1981. Teoría de la acción comunicativa. Racionalidad de la acción
y racionalización social. 3. Aufl. S.l.
Horkheimer, Max. 1998. Teoría crítica. 2. Aufl. Buenos Aires: Amorrortu Editores.
Horkheimer, Max, y Th W. Adorno. 2006. Dialéctica de la Ilustración: Fragmentos
filosóficos. 8. Aufl. Colección estructuras y procesos, serie filosofía. Madrid: Trotta.
MARCUSE, Herbert (1978), Cultura y sociedad, Sur, Buenos Aires. Título original:
Kultur und Gesellschaft I, 1965. Traducción de E. Bulygin y E. Garzón Valdés.
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