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UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

(UNIVERSIDAD DEL PERÚ, DECANA DE AMÉRICA)

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES


ESCUELA DE HISTORIA
HISTORIA DE LAS RELIGIONES

Las celebraciones de San Pedro y San Pablo en Chorrillos

Docente:
Carcelén Reluz, Carlos Guillermo

Alumnos: Códigos:
Dorado Huanay, Alfredo 17150001
Manrique Palomino, Rafael 17150010
Pala Arroyo, Victor Manuel 17150134
Toro Fustamante, Ronaldiño 17150135

Ciudad Universitaria, abril del 2019


PROBLEMA DE INVESTIGACIÓN

Perú es un país que cuenta con una gran variedad de fiestas y


celebraciones durante todo el año. La mayoría de estas fiestas están
relacionadas con la religión y con las raíces indígenas, en las cuales los
peruanos practican rituales que conmemoran a los santos patronos (fiestas
patronales) o directamente a la vida de Jesús (las liturgias).

Los 29 de junio de cada año se celebra en la cristiandad el día de San


Pedro y San Pablo. Esa fecha conmemora el martirio en Roma de los
Apóstoles Simón Pedro y Pablo de Tarso. En el Perú, como veremos más
adelante en el marco teórico, las celebraciones en honor a Santos surgieron
como fenómenos emergentes cargados de especificidad (Díaz, Galdames, &
Muñoz, 2012, pág. 23).

Teniendo esto en cuenta, en el presente trabajo nos proponemos como


problema de investigación explicar por qué las celebraciones de en honor a
San Pedro y San Pablo en el distrito de Chorrillos se siguen practicando hasta
hoy. Para lograrlo nos hemos planteado los siguientes objetivos:

Objetivo general:

1. Comprender la evolución de las fiestas se San Pedro y San Pablo en


Lima, de manera general, y en Chorrillos de manera específica, a
través del tiempo.

Objetivos específicos:

1. Identificar los distintos elementos rituales que componen las


celebraciones de San Pero y San Pablo en Chorrillos.
2. Explicar como confluyen los aspectos cívico-patrióticos, la
religiosidad, lo cultural y lo social en las celebraciones por el día de
San Pedro y San Pablo en Chorrillos.

MARCO TEÓRICO

La vida social está relacionada a estas fiestas y tradiciones. Cada fase


está asociada al ejercicio lúdico, festivo, ritual que desfoga, desahoga, revive,
renueva y reanima a las personas de muchas maneras. Es por ello que existen
festividades para cada tipo de ocasión o acontecimiento.

Como aclara (Miranda & Aragon, 2006)

En las sociedades con culturas cosmovisionales, como la andina, el


cosmos en su conjunto está concebido como un ente con vida y es más con
dimensión humana. En consecuencia, todos los componentes del cosmos
tienen vida y, por ende, tienen una estructura orgánica y perciben y sienten la
influencia de los agentes internos y externos que actúan en el desenvolvimiento
del ser. Si el mundo es concebido como un ente que tiene vida, entonces como
todo ser vivo está sujeto a procesos reproductivos que se sintetizan en las
capacidades de nacimiento y muerte, surgimiento y extinción que definen ciclos
de existencia cuyos pasos de una fase a otra o de una condición a otra genera
situaciones de espera y angustia en el hombre y en las colectividades
organizadas al culminar una fase e iniciar otra. Estas situaciones angustiosas
son los momentos liminares que son resueltos con el ejercicio del talante
creativo-fantástico, lúdico-competitivo, festivo-celebrante, ceremonial-ritual,
técnico-empírico. (pág. 14)

Continua diciendo, “Al llegar los europeos hacia América andina


encontraron pueblos hospitalarios y festivos pero que desde la visión
grecorromana y judeocristiana que trajeron fueron considerados como
idolatrías que había que extirpar” (Miranda & Aragon, 2006) . Asimismo, las
formas de celebración en el Perú era cotidiana porque la vida productiva
cotidiana era festiva porque cantando y bailando se sembraban los campos,
cantando y bailando se construían los caminos, cantando y bailando se
construían los locales públicos y las viviendas, cantando y bailando se recibía y
despedía a los viajeros, cantando y bailando se recibía al que nace y también a
los que mueren, cantando y bailando se vivía la vida. La conquista inició “la
transformación de los sistemas sociales y culturales que los indígenas habían
cimentado…la evangelización jugó un rol clave en la construcción de una
arquitectura religiosa que colisionó con el fervor a las waka” (huacas).(Díaz,
Galdames, & Muñoz, 2012, pág. 24).

Entre los siglos XVI-XVII la iglesia manejaba dos tiempos o ciclos del
culto claramente diferenciados: el ciclo santoral y el ciclo litúrgico. El primero da
cuenta de la vida de cristo para la redención de los hombres. De otro lado la
celebración a los santos se vinculaba a los nacimientos, muerte, hagiografía,
etc. de estos. El objetivo era ponerlos como ejemplos a seguir y también como
intermediadores de Dios. Por esto “las aldeas y los pueblos fueron
consagrados a un santo protector o patrono” (Díaz, Galdames, & Muñoz, 2012,
pág. 29).

Las fiestas patronales actuales reflejan una larga tradición cultural


producto del sincretismo realizado entre la cultura indígena y el catolicismo
hace siglos. En ellas “la figura del santo es la que ha asegurado su eficacia
simbólico ritual, permitiendo la coexistencia de una diversidad de significados e
inventivas populares” (Díaz, Galdames, & Muñoz, 2012, págs. 23-24).
En este sentido, los concilios de Lima (1551, 1556, 1582). Establecieron
pautas para evangelización de las nuevas almas. En el caso del primer concilio
la evangelización se realizó usando las lenguas vernáculas y la difusión de los
sacramentos a través de las parroquias fueron instituyendo celebraciones que
formarían un nuevo orden sociorreligioso en el que la dimensión ritual de las
celebraciones pasaría a ser el centro desde donde se debía adoctrinar a los
indios (Díaz, Galdames, & Muñoz, 2012, pág. 25).
Con el segundo concilio los dogmas del concilio de Trento se intentarían
contextualizar a la realidad de la colonia. Entre las disposiciones tenemos la
participación obligatoria de los indígenas en las festividades como parte de la
dimensión ritual de la evangelización. “La política de sustitución en el
tratamiento de los Taki… (cantos y danzas indígenas practicadas desde el
Tawantinsuyo) -por ejemplo- …evidencia la relectura en clave local del mensaje
evangelizador” (Díaz, Galdames, & Muñoz, 2012, pág. 26).
El tercer concilio proveía de pautas para el adoctrinamiento de los
indígenas. La música, en este sentido, fue un dispositivo de carácter
catequético pues era una práctica asentada en lo andino. Es desde este
momento en el que las ceremonias empiezan a tomar un lugar central en las
catequesis. La difusión de imágenes fueron eficaces simbólicamente para los
ritos. Poco a poco las imágenes de santos en altares se iban convirtiendo en el
centro de la devoción indígena. Estos no eran vistos como símbolos aislados
sino que “operaban como verdaderos íconos, en tanto la representación de la
realidad cristalizada e la imaginería es simultáneamente la realidad en si misma
que representa: es el santo, la virgen o el Cristo encarnado” (Díaz, Galdames,
& Muñoz, 2012, pág. 28).
Estas características de la religiosidad en la Colonia se han mantenido
hasta hoy pues el cosmos, el hombre, la producción humana y todos sus
componentes tienen sus propios ciclos de vida y existencia, es por ellos que el
conjunto de actos y ceremonias para resolver los estados de angustia
producidos por la rutina, el mecanicismo, la tensa espera o la repentina acción;
la acumulación o ausencia de sucesos, fenómenos o hechos; que producidos
generan nuevas rutinas (Miranda & Aragon, 2006).

Cada momento inicial significa licencia a la rutina que se hace con


fiestas y celebraciones con organizaciones, jerarquías y maneras de
administrar los recursos, que con esta finalidad acumulan basándose en la
solidaridad recíproca, para redistribuirlo durante las fiestas entre los
participantes y asistentes. Estas organizaciones, por lo general, están
asociadas a las parroquias y desde que han adquirido un nuevo significado de
fuente de ingresos como “producto turístico” que han sido asumidos por
entidades estatales, gobiernos locales, comisiones específicas.

En la tradición popular religiosa católica los santos no son meras


imágenes, representaciones, ni metáforas. El “signo católico de los santos es
una radicalización de la iconicidad del mismo pues su peculiaridad radica en
que, efectivamente, no representa los que significa, sino que lo ejecuta” (Díaz,
Galdames, & Muñoz, 2012, pág. 31). En otras palabras la imagen del santo es
también el santo en si mismo. Es por esto que durante la festividad las
imágenes son tratadas como seres existentes, humanizándolas, vistiéndolas,
adornándolas, cuidándolas, etc. “Mediante todo el despliegue ritual realmente
re-vive su ser, como si a través de estas pomposas procesiones el santo
estuviera realmente presente en la fiesta y literalmente “anduviera” por las
calles del pueblo, visitando los distintos lugares que sacraliza a su paso” (Díaz,
Galdames, & Muñoz, 2012, pág. 37)
En las fiestas patronales siempre encontraremos actores y agentes
partícipes de estos rituales que crean vínculos de identidad entre ellas y su
cultura, lo cual es heredado de generación en generación. Sin embargo, estas
prácticas rituales siempre recibirán influencia de acuerdo al contexto en el cual
viven o de otras culturas a su alrededor sin perder esa esencia con la cual se
identifican. El significado de los rituales siempre es susceptible de
resemantizaciones agenciadas por la comunidad local.
Esto nos lleva a que estos rituales no se pierdan a través del tiempo e
incluso, lo que es más paradójico, que los actores y los agentes no les den
mucha importancia a sus orígenes históricos, sino que se enfocan más en la
práctica de ese ritual que se ha realizado por mucho tiempo convirtiéndose así
en una práctica cotidiana. Por ende, hay un factor más importante en esta
fiesta patronal y Marcelo Naranjo nos menciona:
[…] En este sentido, la expresión reiterativa de “así hacemos porque
desde siempre se lo ha hecho de esa forma” no es exclusivamente una excusa
o un pretexto, sino una realidad. Lo más importante es continuar con la
tradición, ya que, en función de ella se va adquiriendo una identidad. (Naranjo,
2002, p. 58)
La fiesta de San Pedro y San Pablo se realiza a través de varios días
comenzando desde la víspera. Cada actor que forma parte de esta fiesta
patronal, la comida que es servida, el licor y hasta la celebración o
entretenimiento son partes importantes y fundamentales para que sea exitoso.
Y todas esas actividades programadas terminan en el día central de la
procesión, en la cual los santos patrones San Pedro y San Pablo son llevados
en un anda recorriendo todo el pueblo o la localidad donde se celebre hasta su
regreso a casa donde da por culminado la fiesta hasta el siguiente año, así
formando un ciclo año tras año.
Este proceso de identidad formada destaca e impresiona debido al gasto
que los mayordomos o patrocinadores realizan y la participación por supuesto
de cada persona presente cumpliendo un rol dentro de ese ritual. Más allá de
eso existe algo mucho más complejo que muchas personas no comprende a
simple vista y es el motivo o la razón por la cual estas personas lo practican sin
saber el porqué de su participación en esta.
Ý la Cultura Popular, en ciertas ocasiones no solamente que se
constituye en la representación cultural más genuina de un pueblo, sino que,
como en el caso estudiado, es un excelente escenario en donde se puede
reivindicar la Identidad de un colectivo social determinado. Siendo así, surge un
nuevo elemento a tomarse en cuenta en los estudios relativos al tema de la
Cultura Popular, cual es, la relación que existe entre esta entidad el concepto y
praxis de la Identidad. (Naranjo, 2002, p. 66).
- Fiesta Patronal

Con todo lo anterior podemos decir que las fiestas patronales y sus
diversos espacios ceremoniales son el reflejo de la expresión de los
pobladores, herencia y creencia que caracteriza a esta comunidad en su
hábitat, ligando aspectos de índole mítico-religioso. Asimismo, menciona Pasuy
Arciniegas, “las fiestas patronales abren espacios para reconocer y divulgar
expresiones de fe” (Pasuy, 2012). Es por ello que en una fiesta patronal se
puede identificar la presencia de elementos simbólicos en la cual los
pobladores se encuentran imbuidos; asimismo, estos (pobladores) ven a la
fiesta patronal como un proceso continuo y colectivo, lleno de creencias
expresadas a través de prácticas identitarias en una construcción sincrética de
una sociedad, procedente de experiencias socio-culturales o profano, es decir,
de lo católico y lo andino, además la fiesta subyace en el espacio ceremonial, o
sea, en el lugar donde se llevará a cabo dicha festividad religiosa (San Pedro y
San Pablo).

En consecuencia, “la fiesta patronal puede ser considerada una


manifestación cultural, sincrética, colectiva, mixta, participativa y evolutiva”
(Pasuy, 2012). Asimismo, la fiesta puede representarse como una dualidad de
tiempo- espacio, ya que requiere de una fecha específica y un lugar donde
practicar el ritual religioso.

- Espacio ceremonial

[…] La práctica simbólica que abarca lo divino, lo sagrado, lo popular y


lo profano se apropia de las múltiples formas materialmente visibles, vivificando
y potencializando la topografía: caminos, tramas, inmuebles y espacio público
en el marco de un gran entorno natural con identidades específicas, es
entonces cuando el lugar adopta múltiples lecturas, sublime y con acreditación
sagrada. (Pasuy, 2012)

Por lo tanto, el espacio ceremonial no es otra cosa que el lugar donde se


desarrolla, vivifica, comparte y experimenta una realidad posible denominada
fiesta patronal. En el caso de San Pedro y San Pablo se convierten en los
santos protagonistas de la fiesta patronal que rigió la devoción de sus
pobladores desde una fecha origen aún sin determinar y que ahora es el
epicentro del fervor religioso a finales del mes de junio.
Por otro lado, Pasuy identifica dos visiones, una que es la teológica y la
otra que puede identificar es la antropológica sobre la fiesta patronal de San
Pedro y San Pablo ya que equilibra desde su representatividad católica, es por
ello que menciona que:

Las manifestaciones andinas, desde la espacialidad de su


representación, donde el epicentro no solo es la eucaristía en la capilla, sino
también de las vísperas, la procesión, el recorrido de los santos que salen al
territorio que cambian de actividad transformando lo público en escenario
sagrado y lo privado en espacio participativo donde la música, la danza y las
ofrendas ingresan a la capilla. (Pasuy, 2012).

Es así como la fiesta patronal y el espacio ceremonial son


manifestaciones y bien cultural a la vez, cuyos contenidos se complementan y
identifican como un espacio participativo donde la comunidad concurre cada
año para llevar a cabo la festividad sagrada. Por ello, la fiesta patronal y su
espacio ceremonial tiene que ver con la organización espacial, individual y
colectiva, es decir al realizarse la festividad de San Pedro y San Pablo, los
pobladores se organizan para realizarla en un determinado espacio, con el cual
cada uno demuestre su devoción ante las imágenes de dichos santos. Por otro
lado, lo colectivo tiene que ver con realización de la fiesta donde los pobladores
se reúnen para llevarla a cabo.

El propósito de buscar nuevas publicaciones se dirige a autores que


hablen de temas pertinentes a la práctica religiosa en nuestro país, el
significado de las fiestas populares sobre todo las que encontremos en

Lima y de cómo estas se asemejan o diferencian según su lugar de


origen. Las fiestas patronales como tal son aquellas manifestaciones de un
grupo de personas o población determinada que expresan su vínculo con la
religión a través de sus costumbres y tradiciones hacían un santo que los
representa. No obstante, estas fiestas sufren cambios a lo largo del tiempo, es
decir, evolucionan paulatinamente, y eso lo veremos en la fiesta patronal de
San Pedro y San Pablo y como muchas otras fiestas patronales que existen en
nuestro país, estos cambios que se efectúan puede ser por influencia de
migrantes que se integran a la población local, generando así un vínculo y
mezcla de culturas que llamamos sincretismo, entonces, desde un inicio que
dicha fiesta tradicional tenía un rito determinado y practicado por años
comienzan a añadirse otras formas de celebraciones, en este caso, se añade
una celebración cívica que se realiza en homenaje a José Olaya Balandra.

Al respecto, Marzal (1988), menciona que “la religión popular campesina


se va a transformando paulatinamente en una religión popular urbana y este
parece ser el camino más transitado numéricamente por los migrantes, aunque
en algunos la expresión religiosa puede disminuir tanto, con ocasión del cambio
del universo social, que se llegue en la práctica a una indiferencia religiosa
total” (Citado en Lecaros, 2015, p. 44)

Las fiestas patronales van a presentar estos dos tipos de cambios,


prevalecer o quedar olvidados por la indiferencia de las personas, que por
distintas razones no practican el ritual y al final se pierde, lamentablemente no
se transmite de generación en generación generando un problema para la
institución católica para poder difundir la religión.

Por otro lado, existen fiestas patronales que no sufren cambios drásticos
a lo largo del tiempo o simplemente aparentan un cambio menor no tan notorio,
un ejemplo claro es del Señor de los Milagros, que año tras año se celebra de
la misma manera como en años anteriores.

Por ende, en la fiesta de San Pedro y San Pablo en Chorrillos vamos a


observar cambios de acuerdo a su situación geográfica y tiempo en el que se
encuentra, cabe resaltar que también se celebra en otras partes del mundo y
dentro de nuestro país de manera distinta o similar, siempre y cuando
manteniendo sus costumbres y tradiciones locales.

Otro punto es comprender el rol que tiene la religión en nuestra


sociedad. El rol de la religión en una cultura es esencial ya que es un elemento
por el cual se puede entender los diversos fenómenos sociales que pueden
suceder en el transcurso del tiempo. Además, que mediante esta (la religión),
se dan los llamados fenómenos religiosos, entendiendo a ello como el sistema
de creencias y prácticas en las que el ser humano cree y a la vez que se
sienten identificados. La religiosidad es parte de la actividad interpretativa, es
decir, del esfuerzo que hace por darle sentido a la vida. Para ello, utiliza el
símbolo, o sea, que mediante esto buscan una relación de identidad abstracta
con la cual se sientan vinculados unos a otros. Asimismo, utilizan el lenguaje
como manera de expresar dicha experiencia religiosa. Es así, que se dice que
la religiosidad es, por lo tanto, un encuentro con lo sagrado, con lo divino, a ello
se llama experiencia religiosa y está a la vez modifica a la persona ya que
despierta sentimientos de admiración, temor, veneración, etc.

Esta relación de lo religioso con lo sagrado en última instancia, es la


razón por la cual la experiencia religiosa se produce por los inciertos caminos
de la subjetividad emocional, y nos abre hacia el entendimiento de las causas
del creciente impacto de confesiones religiosas que hacen hincapié en lo
emocional de la experiencia. (Vega & Centeno, 2009, pág. 6).

Para entender las fiestas populares en el Perú, se tiene que analizar


cómo son influenciadas por el catolicismo para su reproducción, es decir, cómo
mediante este, el catolicismo, se puede entender el sistema religioso y el
conjunto de creencias, de ritos, de sentimientos, de formas de organización,
hacia la devoción de los santos.

El catolicismo popular no es la religión de los pobres, sino de las masas


poco cultivadas religiosamente, aunque sean pobres la mayoría de sus adeptos
y aunque los pobres encuentren en dicho catolicismo popular un modo propio
de vivir su fe y de expresar su solidaridad social. (Marzal, 1989)

Además, agregar a ello que, mediante el catolicismo popular, se puede


celebrar a los santos como ya se mencionó. Es así, que Marzal menciona:

El pueblo es fiel a los ritos de transición, como el bautismo de los niños,


el matrimonio religioso y los ritos fúnebres, celebra las fiestas de los santos
patronos y organiza peregrinaciones a los santuarios y, además, practica una
gran variedad de ritos impetratorios para solucionar sus problemas cotidianos.
(1989)

El catolicismo popular, al ser catalogada dentro de las creencias de las


personas que no tienen la devoción por adorar religiosamente, aparece este
(catolicismo popular) como símbolo de vivir su propia fe y expresar de la
manera que desea la persona. Ello (devoción), lo puede hacer mediante lo que
describe Marzal en sus escritos sobre Claves de interpretación para el
catolicismo peruano:
La devoción al santo es una forma de fe-confianza, por la que se
establece una relación profunda entre el santo y el devoto y por la que éste
sabe que puede contar con aquél y que nunca se verá defraudado. Esta
relación nace casi siempre por motivos culturales, por ser el «santo» el patrono
del propio pueblo o una tradición familiar, pero se convierte en una relación
cada vez más personal, que exige su cuota de aceptación del misterio, porque
el «santo» pertenece al mundo sagrado, pero que es favorecida por el carácter
visible y tangible del «santo» y alimentada por los milagros de éste y que es
expresada por el devoto con términos de cariño. (1989).

FUENTES DE INFORMACIÓN

Pueden contener tanto físicas como virtuales.

- Primarias:
Entrevistas a los participantes del ritual a estudiar.
Testimonios documentados sobre el ritual.
También se está considerando visitar el archivo arzobispal para obtener
fuentes que contengan información sobre las celebraciones por San
Pedro y San Pablo en Lima, y si es que existe, en Chorrillos.
La información obtenida de la observación participante del ritual.
- Secundarias:
Libros, artículos, monografías, material de internet, etc. sobre las
celebraciones por San Pedro y San Pablo.
Libros, artículos, monografías, material de internet, etc. sobre las
prácticas rituales religiosas en general.

MÉTODOS Y TÉCNICAS PARA LA INVESTIGACIÓN

1. Análisis documental
2. La entrevista estructurada, pero no estricta. Es decir, que el entrevistado
pueda explayarse.
3. Observación no participante y registro estructurado de la observación.
4. Observación participante y diario de campo.
Análisis Documental

Dentro de este aspecto comprenderemos la revisión de las fuentes


documentales escritas para lograr un mayor conocimiento. Como sabemos esto
es una operación de tratamiento procedimental el cual es necesario el
seguimiento de pasos para llevarse a cabo. En nuestro caso, las principales
fuentes que usaremos se vincularan a la fiesta de San Pedro y San Pablo en la
localidad de Chorrillos. La búsqueda de documentos tendrá como criterio la
relación entre la festividad y la comunidad chorrillana que asiste a dicha fiesta.
Objetos como invitaciones, volantes o folletos que hagan mención de la fiesta,
reportajes de semanarios escritos, etc. Esto es importante ya que, por
ejemplo, en las invitaciones encontramos la programación de la festividad, los
principales eventos que sucederán en el curso del día y que por lo tanto esto
nos permitiría de una u otra forma hacer la comparación con respecto a otros
años si es que determinada actividad ha sido suplantada o en todo caso ya ha
sido soslayado. Conocer la programación también nos ayuda a ver como la
festividad puede diferenciarse de alguna práctica homóloga en otro distrito o
región, así como los elementos comunes.

Observación no participante

En este presente trabajo se empleará una parte al estudio y búsqueda de


documentos relacionados con la fiesta en cuestión que será investigada sin
tener algún contacto con el objeto de estudio por el momento. Se enfatizará la
revisión de material gráfico relacionado con la fiesta que nos permita tener un
análisis objetivo, contrastando incluso con investigaciones previas realizadas
en otras partes del mundo con esta fiesta. Es fundamental precisar:

Contar con un registro estructurado sobre ciertos elementos básicos para


comprender la realidad humana, objeto de análisis, permite focalizar la atención
de la etapa de observación participante o de análisis en profundidad, sólo o
prioritariamente, sobre los aspectos más relevantes, lo que resulta muy
conveniente, cuando el tiempo disponible para el trabajo de campo no es muy
amplio. (Carcelén, p. 14)
Por ende, debemos realizar una investigación a fondo sobre el objeto en
cuestión que vamos a estudiar con el fin de tener una idea concreta del ritual
que se llevará a cabo sin hacer algún contacto de momento con este.

Esto nos permitirá prepararnos para entrar en contacto más adelante con el
objeto de estudio, se realizará un plan estratégico o parámetros establecidos
para el momento de entrar en contacto tomando en cuenta elementos claves
para su desarrollo.

Observación participante

En esta parte del trabajo será clave para la investigación, ya que aquí se
realizará contacto con los actores y elementos fundamentales que forman parte
de este ritual en cuestión. No obstante, esto nos permitirá formar parte de dicho
ritual para un mejor análisis desde adentro durante toda la ceremonia de inicio
a fin, se realizará una descripción mejor detallada y trabajar con lo investigado
previamente en los documentos o material gráfico revisado. Cabe resaltar que:

De esta manera, el etnógrafo logra, sin minimizar su capacidad de asombro por


efecto de la habituación, un acercamiento tanto a los elementos invariables y
constantes como a los elementos eventuales o novedosos que tienen lugar en
esa realidad sociocultural que busca conocer y comprender. (Carcelén, p. 15)

Sin embargo, se observará de manera previa al evento principal la preparación


u organización de la fiesta patronal a fin de tener un trabajo mejor estructurado
y tener un acercamiento a los organizadores del evento para tener acceso a
ella para no tener ninguna dificultad en el desarrollo del trabajo.

Aplicando las entrevistas en el trabajo de campo

En cuanto a las entrevistas que se aplicarán al contenido del trabajo. En primer


lugar, se menciona que hay tres tipos de entrevistas y estas se pueden definir
como individual estructurada o la individual en profundidad o, por último, la
entrevista de grupo focal. Pero, mediante lo dicho se pretende realizar las
preguntas a través de la entrevista individual estructurada de una manera no
estricta, es decir, que el entrevistado pueda explayarse al momento que se le
realiza el cuestionario. Por ello, es preciso mencionar:
En resumen, el cuestionario busca proteger la estructura y objetivos de la
entrevista en una forma tal que el entrevistador pueda atender, de manera
inmediata y sin perder el "hilo de la conversación", tareas que surjan de
manera espontánea en el desarrollo de la entrevista, tales como revisar el
funcionamiento de la grabadora o resolver algún asunto breve ajeno a la charla
en curso, las cuales requieren de la atención momentánea del investigador.
(Carcelén, pág. 16)

Para realizar dicha entrevista a través de un cuestionario, es preciso mencionar


que este debe realizarse de una forma sencilla, para que a la persona hacia la
que te diriges, pueda entender y responder con facilidad a las interrogantes o
preguntas que se les pueda plantear.

Para la elaboración de las preguntas debemos tener presente que, primero


deben suficientemente sencillas para que sean comprendidas con facilidad, y
segundo, deben ser claras y precisas a fin de que se refiera directa e
inequívocamente al punto de información deseado. (Carcelén, pág. 16)

En cuanto, al trabajo que se realizará, lo mencionado ayudará a no ser estrictos


con las preguntas ya que las personas tienen que entender lo que tratamos de
decirles para que nos puedan con ello responder de una manera sencilla y
precisa, para poder contrastar con los documentos y las fuentes que se
encuentren en el transcurso de la investigación de campo.
Historia de la fiesta chorrillana

La fiesta chorrillana se realiza los 29 de junio, en la cual se reúnen los


pobladores del mismo distrito y de los diferentes que hay en Lima. Al realizarse
la fiesta, se puede notar que existen tres componentes: cívico-patriótico,
religioso y el estatal ya que hay participación de la municipalidad de Chorrillos.
Lo mencionado, data de hace muchos años, es decir, lo mostrado líneas arriba,
se practica desde hace mucho tiempo. La tradición data aproximadamente de
mediados del siglo XX y, ello se da debido a la conmemoración de la
inmolación de José Olaya. Además, la organización de San Pedro, porque
consideran a dicha imagen como sagrada y que ayudará a los pescadores en
su día a día, es más involucran a este a la reproducción de las especies al
darle un recorrido en bote. Antes, de sacar a la imagen se realiza una misa
recordando a San Pedro y a José Olaya como patrono de los pescadores.

A mediados del siglo XX, la misa del 29 de junio estuvo consagrada


especialmente a Pedro (Pablo tenía una propia misa el 30 de junio), quien,
como base fundamental de la Iglesia de Cristo, pasó a ser el Día del Papa, es
decir, del “Sumo Pontífice Romano”. La celebración sampedrana en Lima tenía
un centro: el balneario de Chorrillos, tradicionalmente conocido como “Villa de
Pescadores de Chorrillos”. En los años 50, también se recordaba la figura del
héroe de la independencia peruana, el humilde pescador José Olaya Balandra,
quien se inmoló por la patria dos años después de proclamarse la
independencia, en 1823. (Batalla, 2019, párr. 2-3).

En consecuencia, se puede decir que, si bien en un primer momento se


realizaba una misa, especialmente, para recordar a San Pedro, luego se irá
adaptando para que el día de la fiesta chorrillana se dé una misa tanto para
recordar a San Pedro y, la inmolación de José Olaya. Esta tradición, como ya
se dijo, viene desde hace muchos años ya que, esta indica que al darse la
fiesta chorrillana que, en parte es organizada por la asociación de pescadores,
se debe de recordar a José Olaya. Pero, a la vez, según la tradición debe
sacarse la imagen de San Pedro y llevar a la bahía y pasear a la imagen
sagrada en bote, pidiendo que se les ayude. Para ello, se trae a la imagen
desde la parroquia, que lleva el nombre del santo mencionado, en anda y
alrededor la gente con fervor acompaña hasta llegar a la bahía. Esta es
cargada por los pescadores y vecinos que la pasean por las calles aledañas,
dando paradas como parte de la tradición ya que, en los lugares que se hace lo
mencionado, el poblador que recibe la imagen, se puede decir, que es para
pedir paz y prosperidad para su hogar o negocio. Esto se hace, debido a la
consideración de San Pedro como un santo que trae abundancia para las
personas, especialmente, para los pescadores.

San Pedro traía abundancia pesquera a toda Lima y alegría a los


vecinos chorrillanos. Olaya y San Pedro iban de la mano desde hacía décadas;
fervor patriótico y fe religiosa eran las piezas que fortalecían la voluntad de la
gente. Por eso, uno de los momentos más intensos era escuchar la “oración
patriótica” que se imponía en la misa de San Pedro. (Batalla, 2019, párr. 7)

El Comercio (1955). Imagen sagrada de San Pedro, recorre las calles del
distrito. (Citado en Batalla, 2019).

Al describir la fiesta chorrillana, no se debe olvidar que en 1940


Chorrillos estaba golpeado por los estragos del terremoto y, sus calles aún
depredadas tras la guerra con Chile (1879-1883). Tras lo ocurrido, durante el
gobierno de Odría el balneario estaba en reconstrucción, pero, este obstruía
medianamente la participación de los ciudadanos y se vieron relegados de la
tradición. A pesar de ello, consecutivamente, las calles se están
reestructurando, para poder seguir con la tradición. “Una crónica de El
Comercio de esa jornada señalaba que el pueblo chorrillano era “pintoresco” y
que “muchos vecinos son pescadores de oficio, como San Pedro”. (Batalla,
2019, párr. 4). Al cambiar de gobierno y, pasar de Odría en (1948-1956), a
Manuel Prado (1956-1962), se da mejores esperanzas para el balneario de
Chorrillos y la fiesta de San Pedro.

Por eso, en 1957 ya había más participación ciudadana, en medio de un


entusiasmo cívico-militar: miembros de las Fuerzas Armadas, autoridades
políticas, efectivos bomberiles, escolares, el pueblo de todas las edades se
aglomeraba entorno al malecón chorrillano para rendir tributo a José Olaya,
principalmente, pero todos se quedaban para presenciar el paseo marítimo de
San Pedro, como todos los años cada 29 de junio. (Batalla, 2019, párr. 8).

El Comercio (1957). Desde muy temprano, pescadores y fieles se


congregaban en la playa Agua Dulce para acompañar a la imagen de San
Pedro. (Citado en Batalla, 2019).

Para los años 60’ se continuó con la tradición de la fiesta, albergando


grandes cantidades de personas fieles a San Pedro. Durante esa época, se
sigue aún la tradición de pasear al santo en un bote y detrás de este vecinos en
otros botes siguiendo el recorrido que se le da a la imagen sagrada de San
Pedro.

En 1964, el presidente Fernando Belaunde Terry presidía la comitiva


oficial del gobierno en la ceremonia religioso por el Día del Papa; y, en 1965,
en medio de las celebraciones por el Día de San Pedro, y en un boom de la
pesca, los pesqueros artesanales chorrillanos no solo rezaron por su santo
patrón, sino también por la defensa de viveros de peces en el litoral del
balneario. El proyecto ya había localizado varios lugares en Chorrillos donde
podrían implementarse criaderos para miles de corvinas, chitas y hasta
lenguados. (Batalla, 2019, párr. 10).

Para los años 80, se piensa en un mayor desarrollo para la zona


pesquera de Chorrillos. Para ello, con el apoyo del Ministerio de Pesquería se
crea el nuevo mercado, el cual fue equipado con tecnología de la época.
Además, de la colaboración de las autoridades de Chorrillos, juntamente, con el
sindicato de pescadores de dicha zona. “Belaunde aseguró que un mercado
como el inaugurado ese día en Chorrillos mejoraría “la oferta de productos del
mar para el consumo popular”. (Batalla, 2019, párr. 13). Esto ocurría, ya que
con las propias palabras de Belaunde que confesó que, “había frecuentado
muy a menudo Chorrillos antes de volver a ocupar la presidencia, y que,

El Comercio (1982). El presidente Fernando Belaunde inauguró el mercado


pesquero en Chorrillos. (Citado en Batalla, 2019).
además, “tenía amigos cerca del muelle, los pescadores”. (Batalla, 2019, párr.
14).

Entrevista al pescador (Rolando Aguilar- exvicepresidente de la


asociación)

¿Cómo se vive la fiesta chorrillana?

La fiesta central se da el día 29 de junio y comienza a las 6 de la


mañana. Para dar apertura, primero, se revienta cohetones como símbolo de
inicio ya que, esto siempre nos ha identificado, se realiza como una tradición.
Además, de confraternizar los pescadores con las personas que llegan, debido
a que se hace un desayuno para luego pasar a la parroquia, donde se realizará
una misa. Aproximadamente, hace 20 años la tradición era distinta porque
venían los del ejército y traían cañones para realizar disparos de salva, pero
dicha característica se ha perdido en la actualidad. Asimismo, se realiza la
fiesta en conmemoración de la inmolación de José Olaya que es el patrón de
nosotros los pescadores y, la fiesta de San Pedro. Estos dos acontecimientos
se unen y, el primero da razón de ser al segundo.

¿Desde cuándo usted es partícipe de la tradición?


Antes de venir a Chorrillos, vivía en el norte, específicamente, en
tumbes. Donde aprendo a pescar y, desde muy joven vine a este lugar ya que
mi abuelo para que trabajar con él. Desde mi llegada a Lima, me inserté con los
que son mis compañeros (pescadores), llevando la tarea que mi abuelo me
designaba, que era la de pescar. Es así como, me veo inmerso en la tradición
que realizamos los pescadores todos los 29 de junio, donde se hace partícipe a
los diferentes pobladores de los diversos distritos que hay en Lima.

¿Existe alguna entidad que represente a los pescadores de la bahía de


Chorrillos?

En este caso, sí existe una asociación que nos representa, en la cual todos nos
vemos inmersos a colaborar ya que, por medio de este, nosotros; los
pescadores recibimos atención ante algún accidente que podamos sufrir
durante nuestra salida para ir a pescar. Es más, la asociación cumple este año
100 años de creación y, los representantes de este ente pueden facilitarles una
entrevista para que puedan ver cómo va la organización de lo que será la fiesta
chorrillana. Además, el gremio lleva el nombre de un mártir de la
Independencia, que es José Olaya ya que, consideramos a este personaje
como un emblema porque fue un pescador al igual que nosotros que se inmoló
en la independencia y lo consideramos nuestro patrono.

¿Cuál es su organización como asociación? ¿Se recibe algún donativo?

La organización para el día central, que viene a ser la fiesta de San


Pedro y la conmemoración de José Olaya. Los gastos que se hagan son por
parte de nosotros los pescadores, la municipalidad no nos da dinero para llevar
a cabo nuestra actividad, es decir, el recorrido que hacemos a la imagen
sagrada de San Pedro es con los fondos que se tiene ya que, realizamos
actividades para obtener lo que les menciono. Aunque, el mismo día que se
realiza la fiesta se organiza un desfile que se da en la parte de arriba, frente al
monumento Olaya, eso sí está hecho por la municipalidad ya que, se encarga
de comunicarse con todos los organismos que salen ese día (instituciones
educativas, la marina del Perú, asociación de taxistas, ejército, los pescadores,
etc.), como parte de lo que será la fiesta chorrillana.

¿Existen comisiones dentro de la entidad que representa a los


pescadores chorrillanos?

Desde la fundación del gremio de los pescadores que lleva el nombre de


nuestro patrono José Olaya, se ha llevado a cabo, a través de comisiones ya
que, para cualquier actividad por medio de estos se organiza. Sin embargo,
dentro del gremio el 80% de pescadores participamos, porque nos gusta
agruparnos para que las cosas salgan bien. Si bien, nuestro gremio está
organizado por diferentes comisiones que está compuesta por un presidente,
uno de economía (tesorero), un vicepresidente, prensa y propaganda, etc., los
cuales sirven para que esté más ordenado. Pero, siempre con la participación
de todos nosotros, los pescadores.

¿Qué función tiene la parroquia de San Pedro?


Bueno en este caso, la parroquia es parte de la tradición ya que, aquí
también interviene el tema religioso. Debido, a que se nos ha inculcado desde
pequeños. Estos intervienen realizando una misa en honor a San Pedro y San
Pablo y, a la inmolación de José Olaya nuestro patrono, muy aparte de
ayudarnos. Aunque, de igual manera el párroco nos cobra la misa, además, de
dejarnos sacar a la imagen de San Pedro y pasearlo por el mar en bote. Aquí
interviene a la vez el fervor religioso, es lo que se inculca al trasladar la imagen
por los alrededores de nuestra caleta.

¿Reciben algún tipo de capacitación por parte de la asociación o algún


ente?

En este caso, no recibimos algún tipo de capacitación, por parte del


Estado. Esto se debe a que es un ente burocrático y ve a las grandes industrias
de pescado, como una salida para la inversión ya que, ahí se verá favorecido.
En el caso nuestro, no ocurre eso, como les expliqué, el estado invierte donde
hay ganancias. Como en el caso de Pucusana, donde si hay apoyo de este
ente, debido a que en este puerto si se aprecia grandes ganancias. Porque
producen toneladas, en cambio, acá solo podemos hablar de kilos, por esa
cuestión seguramente somos relegados por parte de un Estado que es
indiferente a las necesidades de muchos peruanos. Nosotros como pescadores
artesanales, nos arriesgamos a que nos pase algo en el trayecto ya que, no
existe capacitaciones o apoyo de las entidades estatales, porque al salir a
altamar, uno no sabe lo que le puede ocurrir, por ese motivo, es que se formó
la asociación de pescadores ante la falta de atención del Estado.

¿Los pescadores inculcan a sus generaciones venideras a seguir con la


tradición?

Muchos de los pescadores, participan con sus hijos, esposas, sobrinos


ya que, así se podrá seguir con la tradición de nosotros los pescadores. En mi
caso, inculco a mis hijos a seguir con la tradición para que no se llegue a
perder, por lo que se les hace participar en la festividad que se realiza todos los
29 de junio. Además, de hablarles en casa que se debe conservar dicho
acontecimiento, debido a que esto viene desde siglos pasados. Asimismo, se
les hace recordar que celebramos el día de nuestro patrono José Olaya y de
San Pedro que nos protege ante las adversidades que puedan ocurrir en el
transcurso del tiempo.

Entrevista a la Familia Cuya

Para llegar a conocer un poco más sobre la festividad se realizó una entrevista a la
familia de una pescadora local, Pascuala Cuya. La conocimos gracias a una referencia
que nos brindó una investigadora de caleta de Chorrillos: Carmen Cazorla Sen. En su
artículo “Pescadores de la Caleta de Chorrillos” ella detalla la situación de estas mujeres
y las peculiaridades que supone para las féminas realizar un trabajo que mayormente es
ejercido por varones.

Entrevistada: Doña Pascuala

Usted, en todo el tiempo que ha vivido aquí ¿Cómo es que les ha enseñado a sus
hijos toda esta tradición?

Mirando, mirando. Hemos crecido acá, con uno de mis hijos siempre hemos trabajado
como pescadores. Otros con negocios similares en el restaurante o en los mercados,
pero siempre hemos estado aquí. En los inviernos es más jodido, porque hace frío y no
sacas tanto pescado, por eso siempre agradecemos lo que hay. Yo he sido pescadora
desde chiquilla y desde ahí siempre hemos participado.

En cuanto a la asociación de pescadores, ¿Siempre han realizado la festividad a lo


largo de los años?

Sí, sí siempre, todos los años por ley, es una tradición, Por Olaya pues.

Entonces se puede decir que ¿Olaya también es un motivo para que ustedes
celebren la fiesta?

Sí, claro Olaya es chorrillano y tiene un nieto que sale a marchar, tiene mi edad y
siempre sale a marchar.

¿Siente usted que con los años se está perdiendo esta tradición?
No la tradición no, es la playa, la gente sigue viniendo todos los años por San Pedro o
por el desfile y eso siempre es bueno, en invierno es más duro acá, no hay tanta gente
como verano por eso el 29 nos ayuda mucho a los negociantes. Mi otro hijo tiene su
restaurante por aquí cerca, y el día de San Pedro vende bien. La playa es bien bonita,
pobre pero bonita.

Entrevistado: Carlos Barraza Cuya - hijo

Ustedes como es que ven a San Pedro, ¿qué es lo que este santo representa para los
pescadores chorrillanos?

Como todo cristiano que somos, como católicos, pues la devoción al Santo patrón viene
a raíz de la biblia, porque Jesús eligió a un pescador que es San Pedro. A raíz hizo la
pesca milagrosa por medio de él, nosotros lo tenemos como un Santo en todos los
puertos que hay en el litoral, es una tradición celebrarlo todos los 29.

¿Cómo ustedes ven a la iglesia? ¿Sienten que se preocupan por la festividad?

No la iglesia hace muy poco, la municipalidad es la que se encarga de casi todo. El


padre es el que baja, para la fiesta; también bajan cuando se celebra el día de los
muertos o el día de los pescadores caídos del mar.

¿Dentro de su familia alguna vez ocuparon algún cargo en la asociación?

No ninguna vez.

Puede contarnos más sobre esta, algo de su historia o cómo se organiza.

Antes éramos gremio, después fue sindicato ahora somos una asociación, tenemos
nuestro estatuto. Nos demoramos dos meses para realizarlo, para hacer nuestras normas
y elementos que es como una biblia para nosotros que tenemos que respetar.

Nuestros dirigentes son elegidos con el voto de todos los asociados, los elegimos cada
dos años en una asamblea general. Antes podía haber revocatoria ahora ya no, una
directiva que entra solo puede gobernar 4 años como máximo, ya que se tiene que dar la
oportunidad para que los demás participen.
La procesión de San Pedro en Chorrillos

La fiesta chorrillana es realizada los 29 de junio, para llevar a cabo la


conmemoración de José Olaya, el aniversario de la villa y la fiesta a San Pedro.
En este punto, nos abocaremos a describir cómo se lleva a cabo la procesión
de San Pedro y la reacción de los ciudadanos de los diversos lugares de Lima
ya que, en esta fiesta se reúnen diversas personas de distintos distritos y
participan dentro de ella. “La celebración sampedrana en Lima tenía un centro:
el balneario de Chorrillos, tradicionalmente conocido como “Villa de Pescadores
de Chorrillos”. En los años 50, también se recordaba la figura del héroe de la
independencia peruana, el humilde pescador José Olaya”. (Batalla, 2019, párr.
3). La fiesta chorrilana se caracteriza por tener dos componentes: uno de ellos
es el componente religioso y el político-cívico-estatal.

San Pedro traía abundancia pesquera a toda Lima y alegría a los vecinos
chorrillanos. Olaya y San Pedro iban de la mano desde hacía décadas; fervor
patriótico y fe religiosa eran las piezas que fortalecían la voluntad de la gente.
Por eso, uno de los momentos más intensos era escuchar la “oración patriótica”
que se imponía en la misa de San Pedro. (Batalla, 2019, párr. 7).

Por ello, se abordará el componente religioso ya que, se analizará el recorrido


de la imagen de San Pedro en anda por parte de los pobladores, y así ver el
fervor-comportamiento de estos al trasladar la imagen desde la parroquia hasta
la caleta de los pescadores.
Siguiendo los parámetros establecidos por parte de la directiva de los
pescadores. Una vez culminada la misa, se procedería a trasladar la imagen de
San Pedro hacia la caleta de los pescadores y, junto con esta los pobladores.
Ahí se observa el fervor de la gente, y esto se puede apreciar, debido a que le
tiran diversos objetos, como dinero. Este indicaría respeto o al arrojar dicho
objeto se estaría pidiendo deseos para que se lleve a cabo su pedido que
hacen a la imagen de San Pedro. A lo largo del recorrido, este sistema se
repite, debido al fervor de los pobladores. Una vez que se llega a la caleta, lo
primero que se realiza es una parada en la que se realiza un pequeño rosario
como respeto a San Pedro, seguidamente, los que reciben a la imagen,
reparten bocaditos y reciben un ramo de flores bendecido. Luego alzan el anda
para conducirlo hacia el lugar central de la caleta, es decir, al lugar donde se
acentúa el gremio, donde se procede a reventar un cohete como respeto y
presencia del santo. Los que reciben a la imagen son el presidente (Cristian
Palacios) del gremio de pescadores y el sobrino tataranieto de José Olaya
(como símbolo de los pescadores). Después, se procederá a llevar la imagen
de San Pedro hacia una embarcación, donde se realizará un desplazamiento
de esta por el mar, como símbolo de respeto y seguramente, piden por la
reproducción de las especies para que puedan tener qué pescar para el
sustento de los diversos pesacadores.

La tradición […], es que la figura de San Pedro debía ser transportada


por la bahía, muy temprano, en un bote de vela y que debía traer consigo
peces vivos. El desembarco solía ser tan emocionante como su embarque en
el viejo muelle. Y luego venía la procesión al mediodía, con la efigie sagrada de
San Pedro cargada sobre los hombros de los pescadores vecinos, entre la rada
del puerto y algunas calles adornadas para la ocasión. (Batalla, 2019, párr. 5).

Una vez realizado el paseo de la imagen de San Pedro con el vote, es


transportada hacia la parroquia, y en el transcurso del desplazamiento de la
imagen, se vuelve a observar el fervor de los pobladores al arrojar dinero a la
imagen, este como se mencionó líneas arriba, representaría un símbolo de
petición hacia San Pedro, para que se logre concretar sus deseos. Por ello, se
llega a la conclusión que “el mar de Chorrillos como fuente nutricia, material y
espiritual, el Día de San Pedro y San Pablo, el Día del Papa y el homenaje a
José Olaya han marcado, en cada 29 de junio, un día de paz, prosperidad”
(Batalla, 2019, párr. 15).

El
fervor religioso que ha calado en los pobladores es notable, debido a la unión
que se da durante ese día. La misa cumple un rol importante para la población
ya que, mediante esta se puede dar la reunión y la confraternidad porque
encuentran un mismo significado para lo que están vivenciando. Es así como,
resulta resaltar la esperanza ya que, mediante esta se puede ver el fervor de la
población; y ello se puede describir como un acto de solemnidad popular. En
síntesis, se puede notar arraigo de los pobladores hacia la sagrada imagen de
San Pedro ya que, consideran a dicha imagen como su santo patrón que los
protege y que para los pescadores es símbolo de reproducción de las especies
en el mar. Estos consideran que, al trasladar la sagrada imagen en un bote,
ayuda y a la vez bendice su búsqueda de alimento al salir al mar a realizar
dicha actividad.
Municipalidad (organización del desfile)
La festividad de San Pedro y San Pablo se encuentra englobada dentro de lo que se
conoce como “Semana Chorrillana”. A diferencia de otros distritos donde usualmente la
fiesta principal corresponde al aniversario de la fundación del mismo, en Chorrillos
observamos que la fiesta principal es la celebrada a los Santos patronos Pedro y Pablo,
así como al aniversario de la muerte del prócer José Olaya Balandra.

La Semana Chorrillana empieza desde diez días antes del 29 de junio, transcurso en el
cual se realizan múltiples actividades culturales para su comunidad. La actividad más
importante y que es organizada por la Municipalidad comprende el desfile cívico-
patriota ya que la importancia de dicha actividad es reflejo del trabajo que realiza la
autoridad edil. El desfile no se diferencia de muchos otros que se realizan, sigue la
misma dinámica de todos: comprender un espacio para la práctica ritual. Pero sus
particularidades son interesantes ya que el distrito Chorrillos posee elementos propios
que han podido brindarles un sentimiento de identidad a sus miembros. Por ejemplo en
distritos o pueblos jóvenes que son producto de una reciente inmigración difícilmente se
encuentra un llámese símbolo, objeto cualquier otro elemento que permita unificar a
todos sus miembros. Chorrillos principalmente posee dos: Su devoción religiosa a sus
santos y su admiración a José Olaya. Este último es el paradigma chorrillano, el modelo
que todo miembro de esta comunidad tiene presente y no por nada se realizan estos
rituales. Este trabajo está dirigido conocer la festividad de San Pedro y San Pablo, pero
si se quiere analizar este ritual en Chorrillos es muy difícil desligarlo a la celebración
que se realiza en paralelo a esta.
La celebración sigue exactamente el parámetro que encontramos en todos los desfiles,
la apertura está a cargo de los pescadores, a quienes se considera la asociación más
importante, seguidamente de los colegios que mandan a sus delegaciones para la
marcha, luego con otras instituciones tanto públicas como privadas del distrito. Cual
desfile del 28 de Julio, el Municipio hace alarde de todos sus bienes a disposición de la
comunidad así como ser un espacio para el discurso político del alcalde ante sus
votantes.

Lo que se produce alrededor antes y durante el evento también es rescatable de


mencionar, ya que la Parroquia al igual que muchas realiza una “Tómbola”, actividad
cuya finalidad es recaudar fondos para asuntos que la parroquia dirija.
Pero no es lo único que se encuentra, ya que desde muy temprano pudimos notar
que vendedores ambulantes ya se encontraban segmentando los espacios públicos para
poder ofrecer sus productos. Pudimos averiguar que estos vendedores contaban con la
autorización de la Municipalidad, pero desconocemos el tipo de acuerdo al que llegaron.
BIBLIOGRAFÍA BÁSICA

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los Andes. Imagen, símbolo y ritual en las fiestas religiosas del mundo
andino colonial (siglos XVI-XVII). ALPHA: revista de Artes, Letras y
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Miranda, J. J., & Aragon, K. T. (2006). Fiestas populares tradicionales del Perú.
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Naranjo, M. (2002). Cultura popular e identidad: La Fiesta de San Pedro y San


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Pasuy, W. (enero-junio de 2012). Jongovito (Pasto, Colombia) y la Fiesta de


San Pedro y San Pablo: sincretismo andino y católico. Pontificia
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