Acuerdo Escolar de Convivencia

Ciclo Lectivo 2022

“Cuando un corazón se vacía de sí

mismo, Dios lo llena”.
 PRESENTACIÓN

A la comunidad educativa del Instituto D-88 “San Vicente de Paúl”:

El Acuerdo Escolar de convivencia (AEC) es un proceso de permanente

construcción, que debe ser internalizado y asumido por cada uno de los miembros de la
comunidad educativa, dado que refleja las consideraciones acerca de cómo convivir en
el espacio escolar en forma responsable y comprometida. Nuestro Instituto convoca al
consenso sobre sus formas de convivencia y lo propicia generando espacios de
reflexión, con sus docentes, estudiantes y familias.

Somos un Instituto forjado por muchas voluntades, resultado de grandes

esfuerzos, de mucha fe y entusiasmo. Comprendemos a la persona humana creada a
imagen de Dios, llamada a la plenitud a través del desarrollo de todas las
potencialidades, siendo notas constitutivas del ser humano la apertura y la relación con
otros. Ello nos compromete a mantener aquellos valores y características que nos
identifican como Colegio dependiente de la Diócesis de Gualeguaychú, perteneciente a
la Parroquia “San Vicente de Paúl”: “Honrar a Nuestro Señor como modelo y a su Santa
Madre, para asistir a los pobres enfermos, corporal y espiritualmente”, es el modelo que
nos propone San Vicente.

Al presentar este documento sobre Acuerdos de Convivencia necesitamos hacer

referencia a la Trinidad como modelo perfecto de toda relación humana, donde cada
una de las personas se entrega por el bien de los demás, es el amor gratuito el que
hace surgir la comunidad de personas para que se establezcan vínculos indestructibles.
La comunidad educativa del Instituto “San Vicente de Paúl”, está llamada a tener los
mismos sentimientos que nos permitan profundizar la identidad y el sentido de
pertenencia. Como comunidad aspiramos a llevar a cabo el ideal de fraternidad que nos
propone Cristo: “Ámense los unos a los otros como yo los he amado”. Para llevar a
cabo este ideal necesitamos contar con la ayuda de la gracia de Dios.
El ideal de nuestra libertad está en el marco de la búsqueda sincera de la verdad
y la realización del bien. En nuestra Comunidad Educativa el AEC ocupa un papel de
marcada importancia ya que permite establecer criterios de acción por parte de sus
integrantes sobre la base de una convivencia fundada en el amor y el respeto mutuo, la
reflexión crítica, la responsabilidad personal y comunitaria. Nuestros jóvenes y
adolescentes como sujetos activos y de derecho, deben ver la escuela como algo que
les pertenece y a la que deben respetar y valorar en todas sus dimensiones. Aun así,
entendemos que, al tratarse de personas, los conflictos forman parte del accionar diario.

Finalmente, agradecemos a toda la Comunidad Educativa el compromiso que

asumió a la hora de la revisión y elaboración de este Acuerdo Escolar de Convivencia.
 PROCESOS DE PRODUCCIÓN

Según lo establecido por el Calendario Escolar vigente, Res. 4600/21 del

Consejo General de Educación, se realizaron distintas instancias de Sensibilización. Se
llevaron a cabo reuniones con los miembros del Equipo Directivo y de Conducción,
personal docente y no docente, preceptores, estudiantes y padres/tutores. Asimismo, se
dio intervención al Apoderado Legal y al Párroco, en cuanto son miembros de la
comunidad escolar y representantes autorizados de la Diócesis de Gualeguaychú,
entidad propietaria de nuestro Instituto.
La Asamblea Anual Ordinaria con los estudiantes, docentes y preceptores, se
llevó adelante de manera presencial en las instalaciones del instituto. Junto a esto se
valoró el aporte e intervención del Centro de Estudiantes del presente año.

Los objetivos de las diferentes asambleas fueron:

✔ Enunciar y difundir los propósitos del AEC a los estudiantes.

✔ Abordar los consensos realizados a partir de la educación en valores,

habilidades sociales y la Educación para la Paz.

✔ Realizar aportes a partir de la dinámica de taller, con actividades de lectura,

intercambio de opiniones y el análisis de estrategias de mediación, en relación
con la aceptación del pensamiento divergente.

✔ Revisar desde el rol de los docentes, el lugar de los adultos frente a los jóvenes.

✔ Desde los padres, realizar aportes y sugerencias, comprometiéndose con el

cumplimiento de los acuerdos establecidos.
 FUNDAMENTACIÓN

“Prevenir la violencia, educando la convivencia”.

“Para construir una convivencia los límites son necesarios, recuperando el lugar de la
palabra y poniendo el acento en lo educativo.”

Desde esta afirmación, escuela y familia, deberán concertar códigos comunes y

acciones conjuntas que permitan desarrollar las cualidades, valores y convicciones que
demanda la preparación de una persona que deberá vivir en sociedad. Convivir puede
tener muchas connotaciones, en nuestro caso el marco teórico del modelo de
convivencia al que aspiramos está plasmado en el Ideario Educativo Cristiano, que
constituye el fundamento de la acción educativa de nuestra institución.

La heterogeneidad de los múltiples integrantes del Instituto representa un

auténtico desafío a la hora de unificar criterios, y asumir compromisos desde el rol que
a cada uno le cabe desempeñar. Se hace necesario, entonces, consensuar pautas
precisas surgidas del diálogo y conocidas por todos, que marquen los límites y los
alcances de los derechos y de las obligaciones, de lo admisible y de lo no admisible.

El bien común implica la paz, es decir, la estabilidad y la seguridad de un orden

justo. Sin el debido orden sería muy difícil llevar a la práctica la misión educadora y
evangelizadora del Instituto, y el camino más fecundo para el logro de ese clima es la
aplicación libre y responsable de una normativa clara, que propicie el logro de una sana
convivencia.
 Por ello debemos entender y valorar las Normas de Convivencia como un medio
necesario para la vivencia de relaciones, el diálogo, la colaboración activa y el
compromiso constante hacia la construcción de una vida escolar democrática.

Considerando que nuestro Proyecto Educativo Institucional, tiene un marcado

perfil como escuela inclusiva, formula sus objetivos con la finalidad de promover en
nuestros jóvenes, el desarrollo de sus habilidades y capacidades, la aprehensión de
saberes y competencias, integrados en un fecundo aporte desde la Formación Cristiana
y la Educación en Valores. La educación inclusiva tiene un recorrido extenso por
nuestra Institución, por lo cual forma parte de la identidad institucional y empapa todos
los ambientes de convivencia. Se trata de una mirada que reconozca, en la otra
persona, el derecho a una educación como ser único y, cuyo enfoque pedagógico,
tenga como propósito la valoración y el desarrollo de las capacidades y habilidades de
cada estudiante. (Convención Internacional de las Personas con Discapacidad Ley
Nacional Nº 26.378 “…se hagan ajustes razonables en función de las necesidades
individuales”·….”se faciliten las medidas de apoyo personalizadas…con el objetivo de
plena inclusión…”

• Fundamentos legales:

Las normas legales que enmarcan estas reglamentaciones son, entre otras:

- La Constitución Nacional (Derechos del niño). Ley de Educación Nacional

26.206/06 (Capítulo VI Art. 126 – Capítulo VII Art. 128, referidos a los alumnos y a
los padres). Leyes y reglamentos de cada jurisdicción. Declaración Universal de los
Derechos Humanos (ONU 1948). Ley N° 26378, “Convención sobre los derechos
de las personas con Discapacidad y Protocolo Facultativo”.

- La resolución 1692/09 del Consejo General de Educación de la Provincia.

- La Ley de Educación Provincial 9890/2008 CGE.

• Fundamentos pedagógicos institucionales:

- Proyecto Educativo Institucional.

- Ideario Institucional.

- AEC de Convivencia anteriores, que se utilizaron como antecedentes y puntos de

partida para el trabajo colectivo.

• Principios ético – antropológicos de la convivencia escolar:

Tenemos presente que el lema de nuestro Patrono San Vicente de Paúl es: “Saber,
Amar y Evangelizar”

SABER

La sociedad del conocimiento en la que vivimos y la Iglesia exigen a la Escuela

Católica de hoy, ofrecer a la juventud una preparación intelectual adecuada y propiciar
sensibilidad social en los estudiantes, que los comprometa con su comunidad, con los
demás, y que sean capaces de desenvolverse con eficiencia y competencia profesional
en esta sociedad plural y compleja, a quien debe mirarse con sentido crítico y con
entrañas de humanidad. “Es necesario la ciencia hermanos”. ¡Pobres de nosotros si no
tenemos ciencia! ¡Ay de los misioneros que no estudian por tenerla! (XI, 436), decía
Vicente a sus misioneros, a sus discípulos, y por ende nos exhorta también a nosotros.

Reafirmamos que no hay oposición entre fe y ciencia. Cada uno de estos

saberes, en la medida que respete el ámbito específico de su competencia, tiene
mucho que aportar al hombre y al mundo de hoy, a través de un diálogo serio, profundo
y honesto. El creyente formado en su fe auténtica está abierto a considerar todos los
aportes de las ciencias y a tomar como válidos aquellos que estén en armonía con la
verdad de la dignidad humana.
 AMAR

“Aunque tuviera del don de profecía y descubriera todos los misterios, el saber
más elevado y toda la ciencia... si me falta el amor nada soy” (I Cor. 13, 2).

En la prédica de Vicente el amor a Dios exigía la práctica de la caridad con el

prójimo por amor a Él. Dios no es sólo motivo de contemplación con las manos
cruzadas, sino es un Dios ACCIÓN, un Dios que no permanece impávido ante la
pobreza y miseria humana, es un Dios que sale al encuentro de sus hijos, es un Dios
ENVÍO, un Dios que abre sus brazos a los demás, especialmente a sus hijos menos
favorecidos (sus preferidos) que sufren sobre todo nuestra indiferencia e insensibilidad.
“Amemos a Dios, hermanos míos, amemos a Dios pero que sea a costa de nuestros
brazos, que sea con el sudor de nuestra frente” (XI, 733), afirmaba Vicente.

Esta es la espiritualidad de la acción de nuestro carisma vicentino que se va

sembrando e inculcando desde el nivel inicial hasta el último año de educación
secundaria, a través de las diferentes áreas del saber y especialmente a través de
programas de formación cristiana y vicentina, tanto en los retiros y jornadas espirituales
durante el año, como en las acciones cotidianas, con el fin de formar alumnos no sólo
competentes académicamente, sino también sensibles a los demás con el espíritu de
Jesucristo en su corazón.

EVANGELIZAR

“Si preguntamos a nuestro Señor qué ha venido a hacer a la tierra ¿qué nos
responde? – A evangelizar preferencialmente a los pobres, he ahí el mandato del
Padre” (XI, 390) decía San Vicente.

Para nuestra Institución, Evangelizar es ser signo visible de Dios en el mundo y

ámbito para recuperar la confianza en el poder transformador de la FÉ, que abre al
hombre a nuevos y promisorios horizontes. Es un medio privilegiado para la formación
integral del hombre, en cuanto que ella es un centro donde se elabora y transmite una
concepción específica del mundo, del hombre y de la historia.

La MISIÓN DEL HIJO ÚNICO DE DIOS, se convierte en el centro de la

espiritualidad VICENTINA y por ende en el centro del carisma de todos los jóvenes que
se forman en el Instituto. Todo miembro de la comunidad vicentina está llamado a ser
discípulo y misionero de Cristo.
 DEBERES Y DERECHOS DE LOS ACTORES INSTITUCIONALES

DOCENTES

“El buen ejemplo es la enseñanza más eficaz” Jeanne Chezard de Matel

Derechos

✔ Solicitar la intervención del Equipo Directivo y de Conducción, el Equipo de

Orientación y Tutoría o del Consejo Escolar de Convivencia, para abordar en
forma integral problemas de aprendizajes y/o disciplinarios de los estudiantes.

✔ Utilizar los canales de comunicaciones, cuantas veces se considere necesario.

✔ Favorecer un trato cordial y amable.

✔ Ser informado sobre situaciones particulares de los estudiantes en relación a su

desempeño académico y/o disciplinario.

Deberes

✔ Generar un espacio donde el estudiante se encuentre seguro, respetado y

valorado en igual dignidad.

✔ Propiciar el diálogo en situación de igualdad y respeto con todos los actores

institucionales, en especial para con los estudiantes. Esto implica reconocer el
conflicto como oportunidad de diálogo y construcción común.

✔ Mantener una comunicación ágil y constructiva hacia todos los sectores de la

Comunidad Educativa.
 ✔ Velar por el cumplimiento de los acuerdos establecidos para la convivencia.

PARTICIPACIÓN Y COMPROMISO DE LOS PADRES

Considerando que la educación es un proceso que exige la participación y un

compromiso asumido entre todos, la familia debe colaborar directamente con el
cumplimiento del Acuerdo Escolar de Convivencia.

Citando al Papa Francisco, “la familia es el lugar donde se aprende a convivir en

la diferencia”.1

Derechos

✔ A solicitar informes a los docentes a través de Asesoría Pedagógica, sobre el

desempeño de su hijo/a.

✔ Ante cualquier duda respecto al proceso de enseñanza y aprendizaje o normas

destinadas a favorecer la disciplina, respetar las instancias de comunicación
establecidas: solicitar una reunión con el Equipo Directivo y/o de Conducción, el
cuál requerirá la presencia del Docente Tutor, el Preceptor y/o el Docente de la
cátedra en caso de ser necesario; si no se llega al consenso, se dará
intervención al Apoderado Legal del Instituto.

Deberes

✔ Participar activamente y con compromiso en todas las propuestas pedagógicas

y pastorales del Instituto.

✔ Colaborar con el Instituto, haciendo que su hijo/a cumpla con lo acordado en la

presente norma.

http://www.archivioradiovaticana.va/storico/2015/01/27/en_la_familia_se_aprende_a_convivir_en_la_diferencia/e
s-1120121
 ✔ Notificarse de toda comunicación enviada desde la Institución.

✔ Controlar y justificar las inasistencias de su hijo/a.

✔ Asumir la responsabilidad en la reparación o reposición de elementos dañados

en el caso que sea necesario.

✔ Concurrir a las reuniones informativas convocadas por la Rectoría.

ESTUDIANTES

Derechos

✔ Ser respetados en su integridad, identidad, dignidad de personas y en su forma

de expresarse.

✔ Recibir una educación integral completa, que no se reserve sólo a los recorridos
académicos sino también jornadas de trabajo, aprendizaje, interacción con
profesionales de acuerdo a las inquietudes y situaciones de los estudiantes
(nutricionistas, psicólogos, médicos, entre otros).

✔ Conocer las estructuras del Plan de Estudios, los contenidos de los programas y
las formas y los criterios de evaluación.

✔ Participar en actividades deportivas, culturales, sociales, recreativas y religiosas,

y recibir la atención de las personas responsables de dirigirlas.

✔ A ser escuchado y a participar activamente en el funcionamiento y en la vida del

Instituto, realizando sus reclamos con una actitud respetuosa y constructiva ante
las autoridades.

✔ A retirarse del Instituto antes de finalizar la jornada escolar, sólo bajo la

presencia de su tutor en el establecimiento y con un motivo justificado.

✔ Derecho a un uniforme cómodo.

✔ A ser representado en el Consejo Escolar de Convivencia (CEC).

 Deberes

✔ Respetar las normas vigentes y asistir a clases presenciales regularmente y con

puntualidad.

✔ Respetar a los docentes, directivos, compañeros y personal no docente.

✔ Conocer, respetar y cumplir las pautas de trabajo acordadas en los distintos

espacios curriculares y/o asignaturas.

✔ Participar en las actividades desarrolladas y propuestas desde el Instituto.

✔ Realizar un uso y cuidado responsable de la infraestructura y el equipamiento

del Colegio.

✔ Utilizar el uniforme escolar acordado.

✔ Respetar los símbolos patrios, en especial durante los actos escolares y el arrío
de la enseña patria. Respetar los momentos de oración y reflexión espiritual,
propios del ideario institucional cristiano.
 CAMPO NORMATIVO

Sección 1

Normas de convivencia

Vivir los valores de la autenticidad, la coherencia y la fidelidad a nuestros

compromisos, nos manifiesta conforme con la verdad y la denuncia de todo aquello que
es mentira y doblez, valores que nuestro Patrono nos pone como modelos de conducta.

Cuando hablamos de Comunidad Educativa, lo hacemos refiriéndonos a todos

aquellos que, ejerciendo roles distintos, tenemos una relación directa con la tarea del
Instituto. En este sentido nos corresponde una función de protección y promoción del
crecimiento autónomo.

Uno de los objetivos centrales que tenemos como Comunidad Educativa es

proponer la mediación y la negociación para la resolución de conflictos, lo cual,
creemos, colabora en gran medida para mejorar los climas institucionales, legitimados
por los acuerdos escolares de convivencia.

1) – Ámbito de aplicación.

Los AEC son estrategias de uso cotidiano y dinámica de prevención, intervención

y reflexión que pretenden ordenar la vida institucional educativa cotidiana; su aplicación
se extiende a conductas desarrolladas fuera de ese ámbito, siempre y cuando dichas
inconductas comprometan al Instituto en su relación con la sociedad2.

2
Res. 1692/09 CGE. “(…) Establecer que los AEC tienen incumbencia en el ámbito educativo o cuando se actúe en
su nombre, representación o exista expresa identidad con la institución (…)”.
2) – Tiempos de aplicación.

El régimen normativo del presente acuerdo será de aplicación en los lugares

previstos en el Art. 1 (Ámbito de aplicación) durante las 24 horas del día, todos los días
del año escolar.

3) – Principio de autoridad.

Toda comunidad humana necesita una autoridad que la organice y la acompañe,

su misión consiste en asegurar, en cuanto sea posible, el bien común.

La Institución escolar tiene una estructura jerárquica necesaria para la unidad de

la misma y su correcto funcionamiento. Está compuesta por personas que desempeñan
roles diferentes con derechos y obligaciones específicas.

Enseñar a convivir es ante todo enseñar a conocer las reglas de la convivencia,

a tener actitudes racionales, afectivas, cognitivas y críticas, frente a esas reglas.

Quienes ejercen la autoridad reafirmarán los valores que engendran confianza

en los miembros del grupo y los estimularan a ponerse al servicio de sus semejantes.

4) – Trato personal.

Considerando que convivir implica estar con los otros, cumplir deberes,
obligaciones y aceptar diferencias, la cortesía estará presente en el trato cotidiano de
los integrantes de nuestro colegio; como expresión concreta de caridad cristiana y
sustento de la formación de las personas que participan de una comunidad
heterogénea.

5) – Actitudes violentas.
 En el caso de los jóvenes y adolescentes, la violencia siempre será un reflejo de
la palabra no dicha, de la acción que sustituye al diálogo, constituye en definitiva un
intento primitivo de imponerse, en sustitución del debate y el análisis racional de los
puntos de vista diferentes. La violencia nunca será independiente del contexto social,
cultural y político en que se genera.

Rechazamos toda forma de violencia por ser contraria a la dignidad humana y a

la caridad cristiana, y promovemos la paz sustentada en el diálogo pacífico, la
aceptación del otro y el perdón mutuo.

6) – Actitudes que atentan contra la gestión de la clase y la organización del Colegio.

La escuela tiene como función social la distribución equitativa de conocimientos

socialmente válidos, necesarios para una buena integración de la personalidad y para
un buen desempeño en los diferentes contextos de la vida social. Conjugar el logro de
una “buena inclusión” con un “buen desempeño” en los futuros egresados, implica que
el proceso de enseñanza y aprendizaje se desarrolle en un clima adecuado de orden y
respeto mutuos, de búsqueda de saberes y el desarrollo de capacidades y
competencias que fundamentan la labor educativa de la escuela. Se espera que, entre
los integrantes de la comunidad educativa se mantenga un trato cordial, sincero y
respetuoso en todo momento.

En relación al uso del celular se acuerda que puede ser utilizado dentro de la
Institución reservándose para el recreo o algún cambio de actividades; quedando
establecido que toda comunicación por parte del tutor debe ser a través del teléfono del
establecimiento. En las aulas o en alguna actividad escolar, tanto el celular como
cualquier otro elemento tecnológico pueden ser utilizados con fines pedagógicos y
didácticos, con el consentimiento del docente para una tarea específica.

Es necesario respetar la privacidad e integridad de todos los actores

institucionales, por lo tanto, no está permitido subir imágenes, videos, escritos, etc. a las
redes sociales sin el consentimiento del docente y de los involucrados. Las actividades
que se realizan dentro del ámbito educativo institucional (actos, conmemoraciones
religiosas, colaciones, etc.) podrán ser difundidas desde las redes institucionales y en el
marco del respeto a cada uno de los actores institucionales.

7) – Cuidado de las instalaciones.

La escuela, en tanto espacio comunitario de uso compartido por todos, debe ser
respetada en su infraestructura, mobiliario y equipos. El daño a las instalaciones afecta
la posibilidad de compartir un espacio común; la Institución escolar es un espacio
compartido del cual obtienen provecho, en su uso, todos y cada uno de los miembros
de la comunidad. Su preservación y cuidado, redunda en la oportunidad de que cada
uno pueda hacer efectivo su derecho a la educación. Esto mismo se aplica a los bienes
personales de cada miembro de la comunidad.

Entendemos, que la actitud respetuosa y responsable que deseamos observar

en las personas de este Colegio, también debe manifestarse en el cuidado y la
limpieza.

8) – Presentación personal.

La presentación personal forma parte del respeto debido a las personas con las
que se convive, y a uno mismo. Por eso, es voluntad de nuestra comunidad educativa,
que sus integrantes asistan al Instituto bien presentados, contemplando la higiene, la
prolijidad y la moderación; además, en el caso de los estudiantes, el correcto uso del
uniforme; para ello el Instituto ratifica el uso obligatorio de la indumentaria establecida.
Sólo los/as estudiantes de quinto y sexto año, podrán incorporar al uniforme habitual,
las modificaciones consensuadas previamente con el Equipo Directivo, por encontrarse
en el último año de cursado.
 En relación a los días de lluvia, se contemplará el uso del uniforme de Educación
Física.

9) – Presentación de la documentación.

La documentación es el elemento por el cual se ordena la Administración, para el

cumplimiento de las exigencias legales e institucionales, como así también del personal
docente para establecer comunicación con los estudiantes y sus padres. En este
sentido, los docentes y estudiantes deberán presentar en tiempo y forma la
documentación requerida por las autoridades educativas de la jurisdicción y/o del
Instituto.

10) – Asistencia y puntualidad.

Los estudiantes deberán adoptar un comportamiento responsable. Dicha actitud,

no sólo se evidencia en la eficacia con la cual cada uno desempeña su rol, sino también
en el estricto cumplimiento de los horarios de inicio y finalización de cada tarea.

11) – Discriminación.

La Institución admite entre sus integrantes a toda persona respetuosa de sus

ideales, de su estilo educativo y de sus normas de convivencia. Por ello, no acepta
ningún tipo de discriminación fundamentada en el sexo, nacionalidad, las creencias
religiosas o condiciones físicas de las personas.

12) – Convivencia en los recreos.

En los recreos, el volumen de la música no deberá perturbar el normal

funcionamiento del resto de las actividades. La incorporación de la misma se ha
anexado atendiendo a las propuestas estudiantiles. Asimismo, se consensuará el
contenido de las letras que conforman a cada tema musical.

13) - Protocolo institucional 2022.

Las normas de higiene y seguridad establecidas en el Protocolo Institucional de

regreso a la presencialidad, deben ser cumplidas por todos los miembros de la
comunidad educativa (docentes y no docentes, preceptores, estudiantes y
padres/tutores); quienes tomaron conocimiento en tiempo y forma del Protocolo
mencionado.
 Sección 2

Sanciones

Uno de los resultados importantes del proceso de análisis y debates del presente
Acuerdo de Convivencia, deberá ser el conocimiento, por parte de todos los padres,
docentes y estudiantes, de las medidas que correspondan a las transgresiones de las
normas que contempla. El cumplimiento de las normas de convivencia y la aplicación de
las medidas correspondientes, constituirá el fundamento de una educación encaminada
al crecimiento personal, y la formación de valores y convicciones que demanda la
formación de los futuros ciudadanos.

14) – Será pasible de sanciones, todo estudiante que infrinja alguna de las normas
establecidas.

15) – Ante la transgresión a la norma, una sanción puede ser solicitada por cualquier
persona que pertenezca a la comunidad educativa, y la aplicación de la misma quedará
reservada a la Rectoría quien, para ello podrá consultar al Consejo Escolar de
Convivencia.

16) – A los efectos de determinar la medida adecuada, se tendrán en cuenta factores

tales como:

1. El contexto.

2. La gradualidad, dado que la sanción se aplicará posteriormente a los procesos

previos de advertencia y llamados a la reflexión.
 3. La proporcionalidad en la medida de la sanción, que deberá tener relación con la
transgresión a la norma.

4. El compromiso realizado por el estudiante y sus padres en la modificación de

conductas inapropiadas.

Evaluados dichos criterios y el grado de transgresión realizada que puede ser leve,
grave o muy grave, se intervendrá según corresponda.

17) – El diálogo, las advertencias verbales y las exhortaciones reiteradas (llamados a la

reflexión) configuran una actitud habitual y forman parte del estilo educativo del
Instituto. No obstante, cuando dichas instancias se agotan, se considera necesaria la
aplicación de alguna medida acorde a la gravedad de la falta, ello, con la finalidad de
reafirmar los límites establecidos, obrar con justicia, propiciar la reflexión y reparar –en
lo posible- el daño causado.

Este Instituto considera, de acuerdo con la Res. 1692/09 C.G.E. las siguientes
medidas de sanción, graduales y proporcionales:

a) Llamados de atención verbal: la corrección y llamado de atención, busca la

reflexión del estudiante y un cambio positivo en su actitud.

b) Llamados de atención escritos: a los efectos de favorecer la concientización y

compromiso del/los involucrados.

c) Acciones reparadoras:

Ejemplo: El estudiante deberá concurrir al establecimiento y realizar una

actividad reflexiva y/o acción solidaria reparadora, que deberá presentar a las
autoridades educativas y si la situación lo requiere ante sus compañeros.

d) Advertencia con acta acuerdo: se labrarán oportunamente las actuaciones

correspondientes a fin de comunicarle al Tutor quien, como responsable
directo de su formación, debe tener conocimiento sobre el desempeño del
 estudiante, comprometiéndose los actores intervinientes a modificar actitudes
contrarias a lo acordado.

e) El alumno podrá ser cambiado de división (si la situación así lo requiera), a

los efectos de una modificación de su conducta. Tal decisión será
consensuada con los docentes de ambas divisiones y justificando a través de
un acta acuerdo dicho cambio.

f) Pedido de pase: agotadas todas las instancias institucionales, el Consejo

escolar de Convivencia podrá analizar la necesidad de que el estudiante
continúe sus estudios en otro establecimiento. El supervisor tendrá la
posibilidad de interiorizarse acerca del accionar tanto del estudiante como del
Consejo, a los efectos de consensuar la medida adoptada; dicha medida se
efectivizará con el acuerdo de los padres.

Todas las actuaciones referidas al incumplimiento de los AEC serán archivadas

en el legajo del estudiante.

18) – El estudiante que incurriera en alguna transgresión grave a la norma, tendrá

derecho a un descargo, en presencia de sus padres o tutores. El Equipo Directivo y de
Conducción, una vez labrada el acta con todos los elementos según Res. 1692/09, dará
conocimiento al Consejo Escolar de Convivencia, quien brindará su punto de vista
sobre las medidas que considere apropiadas. Las mismas serán comunicadas al
mencionado y a sus padres.

19) – La presente normativa tiene la claridad suficiente como para posibilitar una
objetiva interpretación. No obstante, en caso de dudas sobre los alcances de lo
estipulado, o si surgiera un hecho conflictivo de difícil encuadre dentro de los artículos
precedentes, el criterio a adoptar será el que surja del Equipo Directivo y de
Conducción, quien podrá convocar previamente al Consejo Escolar de Convivencia con
el propósito de que realice una valoración integral del estudiante, que elevará a la
Rectoría para ser tenida en cuenta en la medida o sanción que determine sobre el
particular.
 Sección 3

Consejo Escolar de Convivencia

Para garantizar la funcionalidad, representatividad y participación de todos, los

estamentos tendrán una conformación permanente de cuatro miembros, según lo
establecido por resolución 1692/09 C.G.E.: un representante del cuerpo directivo, un
representante del cuerpo de preceptores, un representante del personal docente, un
representante de los estudiantes, un representante de la pastoral de catequesis y
padres.

El docente será elegido por un período de un año por su grupo de pares y

siguiendo este criterio, se nombrarán un (1) docente suplente, quien tomará
automáticamente el lugar del titular si éste no se encontrara presente en el momento de
la convocatoria. El estudiante será elegido por sus pares por un período de un año
contemplándose también la designación de dos (2) suplentes. Se tendrán en cuenta
aquellos que conforman el Centro de Estudiantes y a los delegados de curso.

El Consejo Escolar de Convivencia tendrá las siguientes obligaciones, funciones

y facultades:

1. Informarse sobre las cuestiones pertinentes para conocer y aclarar el hecho en

cuestión.

2. Sugerir a la Rectoría, constituyéndose en un órgano asesor y de consulta, en el

marco de un espacio de diálogo, intercambio, reflexión y participación, de
carácter fundamentalmente preventivo y propositivo.

3. Acompañar con su firma en un Acta toda medida que la rectoría tome con su
apoyo y conformidad.

4. Reducir las diferencias entre sus integrantes, cuando estas surjan, mediante el
análisis cuidadoso de la situación, buscando la verdad y tratando de llegar a
resoluciones consensuadas. Cuando esto no se logre, las diferencias deberán
formar parte del informe que se eleve a Rectoría.
 Sección 4

Evaluación y modificación

El presente Acuerdo deberá ser evaluado por el Consejo Escolar de

Convivencia, con la presencia del Equipo Directivo y de Conducción, en una instancia
intermedia y al finalizar el ciclo lectivo respectivo. En este marco serán considerados los
aportes presentados por cualquiera de los integrantes de la comunidad educativa y, de
ser necesario, se implementarán los cambios o modificaciones que se consideren
beneficiosos para la convivencia escolar.

Las modificaciones podrán efectuarse cada año en la Asamblea Anual Ordinaria.

Este Acuerdo será elevado para la evaluación, modificación y aprobación al

Supervisor de Zona, y al Supervisor de Educación de Gestión Privada, según lo
establecido por la Res. 1692/09 C.G.E. que lo enmarca.

El mismo se aprobará por las autoridades mencionadas, mediante la emisión de

la disposición correspondiente.