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Motor jaula de ardilla

Figura 1. Representación esquemática del motor jaula de ardilla.

¿Qué es un motor jaula de ardilla?

El motor jaula de ardilla es un motor eléctrico de inducción, cuya parte rotatoria o rotor está
constituido por un conjunto de barras conductoras paralelas a la dirección axial y dispuesta
en forma cilíndrica alrededor del eje.

Esta forma recuerda una jaula como las que se usaban para atrapar ardillas en el viejo oeste
norteamericano, de allí el nombre. Además son los más económicos, duraderos y de menor
mantenimiento, por carecer de carbones, escobillas o colectores en el rotor, que no necesita
conectarse eléctricamente a ninguna fuente de corriente externa.

Los primeros motores con campo rotatorio fueron ideados entre 1885 y 1886 en forma
independiente por dos grandes genios de la electricidad: Galileo Ferraris y Nikola Tesla.
Estos motores fueron los predecesores de los actuales motores jaula de ardilla.
El motor jaula de ardilla es de corriente alterna, la cual puede ser trifásica, bifásica o
monofásica. De acuerdo al tipo de alimentación puede variar un poco el diseño, pero el
principio de funcionamiento siempre es el mismo.

Funcionamiento del motor jaula de ardilla

El principio de funcionamiento se basa en la generación de un campo magnético rotatorio


en el centro del motor, por parte de un bobinado estático en su periferia, el cual se alimenta
con corriente alterna.

Dicho campo magnético rotatorio induce corrientes en las barras que conforman la jaula del
rotor, y estas corrientes a su vez producen un campo magnético secundario que interactúa
con el campo primario, produciendo un torque o momento sobre el rotor.

La clave del funcionamiento está en la producción de un campo magnético rotatorio


perpendicular al eje de rotación. Este campo rotatorio ejerce una fuerza magnética de
torsión sobre las barras longitudinales de la jaula cuando circula corriente.

Para generar la corriente en las barras conductoras paralelas al eje de rotación de la jaula,
no se precisa una fuente de corriente exterior, ya que el propio campo rotatorio, por
inducción magnética, es capaz de inducir una corriente sobre las barras de la jaula.

Eso siempre y cuando exista una diferencia entre la velocidad de rotación del campo
magnético y la velocidad de rotación del rotor

Campo magnético giratorio en un motor trifásico


Los motores de jaula de ardilla pueden ser trifásicos o monofásicos. En el caso del motor
trifásico, es decir el que funciona con corriente alterna de tres fases, cada fase adelanta a la
anterior en 120º, es decir un tercio de periodo.
Figura 2.- Animación mostrando el campo magnético rotatorio resultante de la superposición de los campos individuales
de las tres bobinas desfasadas 120º y alimentadas con corriente trifásica.

En todo motor eléctrico se distinguen dos partes:

 Estator, la parte periférica del motor que esta fija respecto a la carcasa del mismo.
 Rotor, parte central rotatoria del motor.

En el estator hay un paquete de láminas ranuradas y esmaltadas (para evitar corrientes


parásitas o de Foucault) y de alta permeabilidad magnética.

Por el ranurado pasan los cables cubiertos con barniz aislante que forman, como mínimo,
tres arrollamientos o bobinas, desfasadas en 120º. Las tres bobinas se alimentan con
corriente alterna trifásica y cada fase adelantada también en 120º respecto de la anterior.

En cada instante la superposición de los campos magnéticos da un campo resultante


perpendicular al eje de rotación del motor. A medida que avanza el tiempo, el campo
magnético combinado de las tres bobinas mantiene su amplitud, pero su dirección siempre
perpendicular al eje de rotación, rota con una frecuencia igual al de la corriente alterna,
generalmente entre 50 y 60 Hz.

Rotor jaula de ardilla

Consiste en dos aros conductores conectados por ocho o más barras conductoras
longitudinales, paralelas al eje de rotación.

Figura 3. Rotor jaula de ardilla.

Torque sobre el rotor


Para entender cómo el campo rotatorio produce torque sobre la jaula se puede imaginar una
jaula mínima, constituida por dos barras longitudinales diametralmente opuestas.

Cuando esta jaula está originalmente en reposo y gracias a la fuerza electromotriz, el campo
rotatorio que la atraviesa induce un movimiento de carga en cada barra. Sin embargo, como
las barras están cortocircuitadas en sus extremos por un aro conductor, se establece una
circulación de corriente entre las barras opuestas.
Por otra parte, como las barras tienen movimiento relativo al campo del estator, aparece
sobre las mismas una fuerza de origen magnético, conocida como fuerza de Lorentz, la cual
es perpendicular al campo radial del estator y a la dirección de la corriente en cada barra.

Para que exista corriente y torque sobre las barras, es necesario que las mismas tengan
movimiento relativo respecto al campo magnético radial producido en el estator.

Por ello la velocidad de rotación de la jaula siempre es menor que la del campo magnético.
Debido a esta falta de sincronía entre el rotor y el campo, este es un motor asincrónico.

Se produce por tanto un par de fuerzas opuestas en cada barra, que produce un torque sobre
la jaula simplificada, y de igual forma con jaulas de más de dos barras.

Rotor con núcleo de hierro


Una mejora consiste en colocar la jaula embebida en un conjunto discos laminados y
esmaltados, hechos de material de alta permeabilidad magnética, como el hierro.

La finalidad es multiplicar la intensidad de los campos magnéticos producidos tanto por el


estator como por el propio rotor. Es gracias a la interacción entre estos dos campos que se
produce el torque sobre el rotor.

La experiencia ha demostrado que, si las barras de la jaula tienen cierta oblicuidad respecto
al eje de rotación, el motor presenta un funcionamiento más suave y con menos
vibraciones.

A mayor carga en el rotor, la velocidad de deslizamiento del rotor respecto de la velocidad


de rotación del campo magnético del estator también crece. Por tanto, las máximas
corrientes y los máximos torques se producen cuando el rotor está trabado, razón por la cual
el motor sobrecargado puede sufrir recalentamiento y por tanto daño en los barnices y
esmaltes aislantes de las bobinas y de las chapas que conforman los núcleos del estator y
rotor.
Aplicaciones del motor jaula de ardilla

Los motores jaula de ardilla trifásicos son los preferidos para aplicaciones industriales. Son
menos recomendados para usos domésticos en los que se prefiere el motor monofásico
asincrónico, debido a que la corriente trifásica generalmente no llega a las residencias.

Bombas centrífugas
Los motores jaula de ardilla son los preferidos para las bombas centrífugas.

Tornos y fresadoras
También son ideales en los grandes tornos y fresadoras, así como en las industrias donde se
requiere de bandas transportadoras y sopladores.

Corte y troquelado de láminas 


Este tipo de motores son aptos para la industria pesada de troqueles y cizalladura de
láminas metálicas.

Ventajas

Los motores jaula de ardilla tienen numerosas ventajas respecto a otros tipos de motores
eléctricos:

1. En igualdad de potencia, los motores jaula de ardilla, son más compactos y de


menor peso que los motores síncronos.

2. Son completamente escalables, es decir se pueden construir desde pequeños hasta


muy grandes.

3. El torque o par de giro de los motores jaula de ardilla es generalmente mayor que el
de otro tipo de motores, muy apropiados para el uso pesado.
4. La eficiencia de los motores trifásicos de jaula de ardilla es superior al 70%. Los
motores monofásicos asíncronos tienen un rendimiento menor, pero siempre
superior a los motores de corriente continua.

5. Debido al desarrollo de la electrónica de potencia, es posible controlar la velocidad


de dichos motores en forma electrónica, variando la frecuencia de la corriente.

Desventajas

Entre las principales desventajas se pueden citar:

1. En el momento de arranque los motores de inducción tienen una alta demanda de


corriente, por lo que no son indicados para aplicaciones en las que el motor deba
arrancar y parar constantemente, ya que supondría una sobrecarga en el sistema
eléctrico.

2. Aun cuando la electrónica de potencia ha avanzado, su velocidad de rotación no es


tan controlable como la de los motores de paso.

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