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¿La vida buena o la buena vida?

Por Alina J. Bello Dotel

Para la generalidad de los seres humanos, la Vida Buena es una meta


deseada, pero también lo es la Buena Vida. Si bien es cierto que vivir
de tal manera que todas nuestras acciones estén apegadas a las
normas de la buena convivencia ha sido el ideal clásico, no menos
cierto es que en la sociedad industrial y post-industrial, ese ideal se ha
mezclado y confundido con el de la buena vida, entendida ésta como
acceso a riquezas, lujos, comodidades e influencias en la sociedad
que van más allá de lo razonable.
La Vida Buena es un estilo de vida marcado por la sencillez, la
honestidad, la frugalidad en el consumo, la solidaridad con los demás
congéneres y con el medio ambiente. Es también una vida de
dedicación al trabajo, el servicio a la sociedad, el cultivo de la
inteligencia espiritual y la alegría de vivir.
La Buena Vida, por su parte esta determinada por la sensualidad,
donde la satisfacción de las necesidades está sujeta al placer. Esta
forma de vivir eleva la percepción de los sentidos a categoría de placer
y es alimentada constantemente por la estructura de la sociedad de
consumo. Su lema es “todo vale con tal de vivir bien” y la norma que
sigue es la del placer por el placer.
Una persona, familia, institución, o sociedad debe detenerse a pensar
qué tipo de vida sigue: la Vida Buena o la Buena Vida. Porque
dependiendo en cual de las dos esté desarrollándose, será su
permanencia en el tiempo y su aporte a la construcción de una
sociedad mejor para todos.
Cualquiera que tenga como norte de sus acciones el aparentar ante
los demás, el afán por las marcas y los restaurantes de última moda,
está cifrando su vida en sensaciones pasajeras y superficiales.
Mientras que aquellas personas, familias e instituciones que fomentan
la solidaridad, la sencillez, la amistad y la frugalidad en sus vidas están
aportando a la construcción de sociedades fuertes, basadas en
prácticas axiológicas duraderas y por lo tanto están transformando el
mundo para que sea un mejor lugar para vivir la vida buena.
Vivir apegado a valores es una necesidad que debemos entender, en
especial en un mundo donde al parecer las prácticas individualistas y
hedonistas nos han sumido en una de las mayores crisis financieras
de todos los tiempos. Las especulaciones inmobiliarias, las
manipulaciones financieras y el desmedido afán de lucro de los CEO
(siglas en inglés de Chief Executive Officer o Director Ejecutivo en
español) de las grandes corporaciones del mundo, nos han obligado a
todos a repensar el mundo económico personal, local y global.
Los gobiernos de todo el mundo se han visto en la obligación de
socorrer a las grandes transnacionales financieras que
inescrupulosamente han jugado con el dinero de sus ahorrantes, para
beneficiar a sus ejecutivos.
El afán de lucro instalado en las instituciones de más alto nivel
económico del mundo, ha traído como consecuencia una crisis
mundial sin precedentes, cargada de desgracia para los que
componen la base de la pirámide social y de refuerzos para la mala
conducta de los grupos de poder, que siguen recibiendo apoyo
económico de los gobiernos, sin sanciones y normas que pongan
freno a las ambiciones desmedidas, que han sumido al mundo en una
espiral de pobreza y miseria.
Urge construir un mundo donde la Vida Buena prime sobre la Buena
Vida. Donde las personas sean reconocidas por sus valores morales,
no por sus valores económicos. Se hace perentorio crear estrategias
educativas, empresariales, comunitarias, etc. para que estructuremos
una mejor sociedad, menos depredadora de los bienes de todos y más
cuidadosa y solidaria a la hora de pensar en hacer negocios, con los
recursos de todos.
Sólo así garantizaremos la paz social, la ciudadanía de pleno derecho
y la democracia de la que tanto nos enorgullecemos.
Actividad:
1- Realiza una comparación entre lo que habías entendido sobre
buena vida y lo que plantea el texto. 
2- ¿Qué implica tener una vida buena según el texto leído? ¿Se
acerca alguna de tus idea y a la de tus familiares?
3- Teniendo en cuenta las necesidades básicas que satisfacemos para
tener una vida buena (alimentación, salud, educación, trabajo,
descanso, recreación, higiene, entre otras) ¿qué hábitos debemos
desarrollar? ¿Cuáles hábitos debemos considerar como peligrosos?
Realiza una lista con ellos y argumenta sobre los hábitos considerados
como amenazas para una vida buena. 

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