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RESUMEN

ASIGNATURA:
BIOFÍSICA

INTEGRANTES
Camilo Vergel Mendoza
Breiner Suarez Rivera
Pedro Niño montero
Natalia Claro García
Carlos Mario Bacca

Docente
Elizabeth Escorcia

UNIVERSIDAD DEL MAGDALENA


PROGRAMA: Profesional en Deporte

2020
Resumen del Aparato Locomotor

El aparato locomotor es el conjunto de estructuras que permite a nuestro cuerpo


realizar cualquier tipo de movimiento. El aparato locomotor está formado por
el esqueleto o sistema óseo (huesos) y el sistema muscular (músculos). 

El Sistema óseo

El esqueleto o sistema óseo está formado por los huesos, los cartílagos y
las articulaciones. 
 
Los huesos son órganos duros y resistentes que forman el esqueleto. Los huesos
tienen las siguientes funciones: dan forma al cuerpo, protegen algunos órganos
vitales y permiten el movimiento gracias a los músculos que se unen a ellos a
través de los tendones.
 
Según su forma los huesos pueden ser de tres tipos:
 
Huesos largos
Huesos cortos
Huesos planos
 
 
- Huesos largos: tienen forma alargada. Su parte media se denomina diáfisis y
sus extremos epífisis. Actúan como palancas para el movimiento (Ej.: fémur, tibia,
etc.). 
 
- Huesos cortos: son más o menos cúbicos (Ej.: vértebras, huesos de la muñeca,
etc.). 
 
- Huesos planos: tienen forma aplanada. Actúan como protectores de órganos o
para la inserción de 
Músculos (Ej.: los huesos del cráneo). 
 

 
El esqueleto de un humano adulto está formado por 206 huesos. Algunos de los
huesos del cuerpo humano que debes conocer son los que están señalados en la
siguiente figura: 
 
 
 

Los huesos están unidos entre sí gracias a unas estructuras


llamadas articulaciones. Hay que tener en cuenta que los huesos no son
estructuras inmóviles, se mueven unos respecto a otros. Las articulaciones
posibilitan el movimiento de los huesos. Dependiendo del grado de movimiento
que permiten hay tres de articulaciones:
 
Articulaciones móviles
Articulaciones semimóviles
Articulaciones fijas
 
 
- Las articulaciones móviles son aquellas que permiten un movimiento amplio de
los huesos (Ej.: las articulaciones de la rodilla, el codo, la cadera y el hombro).  
 
- Las articulaciones semimóviles son aquellas que permiten un movimiento
escaso de los huesos (Ej.: las articulaciones que existen entre las vértebras que
forman la columna vertebral). 
 
- Las articulaciones fijas son aquellas que no permiten el movimiento de los
huesos (Ej.: las articulaciones de los huesos del cráneo). Su función suele ser
proteger los órganos internos a los que rodean.
 
Gracias a las articulaciones podemos movernos y nuestros órganos están
protegidos.
 
 
Ligamentos y cartílagos
 
- Los ligamentos son unas tiras de tejido muy resistente que unen los huesos en
las articulaciones móviles y semimóviles. Por ejemplo, el húmero se une mediante
un ligamento al radio y mediante otro ligamento al cúbito.
 
- Los cartílagos son piezas más blandas y elásticas que los huesos. Podemos
encontrar cartílagos en las articulaciones (facilitando el movimiento de los huesos),
en las orejas, en la nariz, en la tráquea, etc. 

1.2- El sistema muscular


Los músculos son órganos elásticos, es decir, se contraen y se relajan sin
romperse. Los músculos están formados por células musculares de forma
alargada llamadas fibras musculares. 
 
Cuando los músculos se contraen se acortan y producen el movimiento de alguna
parte del cuerpo.
 
La función principal de los músculos es mover las distintas partes del cuerpo
apoyándose en los huesos. Para ello, los músculos están unidos a los huesos a
través de un conjunto de fibras llamado tendón.
 
Por ejemplo, el tendón del bíceps une el músculo con el radio, y el tendón del
tríceps une el músculo con el cúbito.
 
Los músculos más importantes del cuerpo son los que están señalados en las
siguientes figuras: 
 
 

 
Según su forma los músculos pueden ser clasificados en:
 
- Músculos fusiformes
- Músculos orbiculares
- Músculos aplanados 
- Esfínteres
 
- Los músculos fusiformes tienen forma alargada. La mayoría de los músculos
de las extremidades son músculos fusiformes (Ej.: bíceps, cuádriceps,
abductores). 
 
- Los músculos orbiculares tienen forma de anillo y se encuentran rodeando
orificios del cuerpo. (Ej.: músculos orbiculares de la boca).
 
- Los músculos aplanados tienen forma plana (Ej.: frontal, pectorales,
abdominales). 
 
- Esfínteres: Tienen forma de anillo y cierran conductos corporales. Por ejemplo:
el esfínter anal.
 
 
Según el movimiento que realizan los músculos pueden ser de dos tipos:
 
- Músculos voluntarios
- Músculos involuntarios 
 
 - Los músculos voluntarios o esqueléticos son aquellos que se contraen de
forma voluntaria, es decir, de forma consciente. Son los músculos que forman
parte del aparato locomotor (Ej.: bíceps, tríceps, dorsal). Están adheridos a los
huesos por tendones, parte no contráctil del músculo, pero muy firme y resistente.
 
- Los músculos involuntarios son aquellos que se contraen de forma
involuntaria, es decir, se contraen sin que nos demos cuenta de ello. Estos
músculos están presentes en los órganos internos de nuestro cuerpo (estómago,
intestino, vasos sanguíneos, corazón, etc.). Sin ellos, tendrías que decirle al
corazón cuándo tiene que latir y a tu estómago cuando triturar la comida. 

Como puedes darte cuenta, para lograr el movimiento, tanto el sistema óseo como
el muscular trabajan en conjunto, pero ¿cómo se coordinan?
 
Para realizar los movimientos, el sistema nervioso analiza cada situación y
coordina al sistema muscular. Esto sucede porque entre el cerebro y el resto del
cuerpo hay una comunicación constante; cuando queremos mover parte de
nuestro cuerpo, el cerebro envía señales a los músculos, a través de los nervios,
para que actúen.
 
Entonces, un simple movimiento involucra tres sistemas: óseo, muscular y
nervioso. Al conjunto de los sistemas muscular y óseo se le llama aparato
locomotor, y lo coordina el sistema nervioso.
 
Sistemas de Palancas y Componentes

Las palancas se forman cuando los músculos y los huesos actúan juntos para crearlas,
también se pueden tomar como barras rígidas que giran alrededor de un fulcro, es decir,
el largo de un hueso que gira alrededor de una articulación. Cuando le aplicamos fuerza a
una de estas palancas, estamos realizando acciones como mover o vencer una
resistencia.

Estas se dividen en partes como los huesos que actúan como los brazos de la palanca,
las articulaciones que actúan como el fulcro, los músculos que proveen la fuerza para
mover las cargas y las resistencias que son a menudo los pesos de las partes del cuerpo.

También se componen de dos componentes: brazo de fuerza y brazo de resistencia, en el


brazo de fuerza la distancia perpendicular va desde la línea de acción de la fuerza de
potencia hasta el fulcro y en el brazo de resistencia la distancia perpendicular va desde la
línea de acción de la fuerza de resistencia hasta el fulcro.

Si queremos medir la eficiencia de una palanca utilizamos una fórmula donde se relaciona
el brazo de fuerza y el brazo de resistencia.

Existen cuatro leyes de las palancas: Cuando el brazo de fuerza es mayor que el brazo de
resistencia, la eficiencia de la palanca es > 1 y la función de la palanca es magnificar la
fuerza. Cuando el brazo de fuerza es menor que el brazo de resistencia, la eficiencia de la
palanca es < 1 y la función de la palanca es de magnificar la velocidad del movimiento.
Una palanca opera con ventaja mecánica cuando la fuerza está más lejos del fulcro que
de la carga. Una palanca opera con desventaja mecánica cuando la fuerza se encuentra
más cerca al fulcro que a la carga.

Las palancas se dividen en tres grados:


Las palancas de primer grado son aquellas en donde la fuerza es aplicada en un extremo
y la resistencia en el otro extremo, con el fulcro en algún lugar entre los dos. Se dice que
estas tienen una eficiencia igual a 1 y se observa la acción de los músculos agonistas,
que proporcionan la fuerza aplicada y antagonistas, que proporcionan la resistencia, en
lados opuestos del eje de la articulación.

Las palancas de segundo grado las encontramos cuando la fuerza es aplicada en un


extremo y el fulcro está en el otro extremo, con la resistencia en algún lugar entre los dos,
cabe aclarar que esta no es común en el cuerpo, no proporciona velocidad o amplitud de
movimiento y tiene una eficiencia o ventaja mecánica mayor a 1, ya que, la inserción del
músculo o la fuerza está más lejos del fulcro que de la resistencia. Las articulaciones
están en el metatarso del pie, siendo estas el fulcro, la resistencia es el peso total del
cuerpo y los músculos gastrocnemios y sóleo ejercen la fuerza, elevando el talón,
teniendo funciones como aumentar la fuerza y conservar la energía.

Las palancas de tercer grado son aquellas en donde la fuerza es aplicada entre el fulcro y
la resistencia, suceden en el cuerpo, funcionan siempre en desventaja mecánica, es decir
eficiencia menor a 1, ya que, la inserción del músculo o la fuerza está más cerca del fulcro
que de la resistencia. Se aplica un gran esfuerzo para vencer una resistencia moderada
proporcionando una mayor velocidad y amplitud de movimiento, nos permite mover
nuestros miembros rápidamente, como cuando corremos o lanzamos algo. La mayoría de
los músculos esqueléticos se insertan cerca de las articulaciones alrededor de las cuales
ocurre el movimiento, esto les permite movimientos rápidos con relativamente poco
acortamiento muscular.

Pero para diferenciar estos tres grados de movimiento en las palancas, hay que observar
como la fuerza, la resistencia y el fulcro modifican la actividad de los músculos respecto a
la velocidad de contracción, el rango de movimiento y el peso de la carga que puede ser
levantada, teniendo en cuenta que en los sistemas de palancas que opera la desventaja
mecánica se pierde fuerza, pero se gana velocidad y rango de movimiento. En los
sistemas de palancas que opera la ventaja mecánica se utiliza cuando se necesita fuerza
y se tiende a ser más lenta y estable.

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