Profesor(a): ING MARCO JORGE ALBERTO RODRIGUEZ MARTINEZ Dilema en Harvard: ¿Es viable La Argentina como país?
La Argentina ya es un país objeto de estudio en los centros académicos más importantes
del mundo: ¿Cómo puede ser que una nación tan formidable a comienzos del siglo xx haya retrocedido tanto a comienzos del siglo xxi, pese a contar con enormes recursos naturales? La exposición que se publica llega a la conclusión, implícitamente, que la Argentina no es un país viable si no produce una revolución del conocimiento.
El desempeño económico argentino luego de la convertibilidad está caracterizado
por un sorprendente desempeño positivo. Desde entonces, la economía argentina ha experimentado un desempeño positivo que incluso aquéllos más optimistas no pudieron pronosticar, expresado en un acelerado crecimiento a una tasa acumulativa anual promedio del 8,2% entre 2002 y 2007. En términos macroeconómicos hoy existe un punto de partida que es totalmente distinto del que teníamos en la década pasada. Hemos podido dejar atrás la convertibilidad sin repudiar el uso de la moneda local y se reestructuró una parte mayoritaria de la deuda externa, con resultados muy beneficiosos para el país, asociados a la reducción de tasas, quitas y maduración de los plazos. La tendencia hacia la normalización económica permitió la recuperación de los niveles de actividad precrisis y la notable creación de puestos de trabajo. La evolución de empleo y de las remuneraciones indujo a una intensa reducción de los aún elevados índices de pobreza e indigencia. La cuenta corriente del balance de pagos y el saldo comercial son superavitarios. El contexto internacional de subas de las materias primas –asociado a la expansión de China e India bajas tasas de interés, ha sido muy favorable para el país en los últimos años, con previsiones de mantenerse esta situación en el mediano plazo, generando una ventana de oportunidad para el país. La Argentina es hoy una economía abierta, en la cual las exportaciones más las importaciones representan un 45% del PIB, esto es, más del doble que a principios de los noventa. La recomposición del proceso de inversión fue mayor de lo esperado y ya alcanza los valores picos de los noventa. La inversión en equipo durable de producción superó en 2006 los niveles máximos previos, si bien quedó algo por debajo de esos registros como fracción del PIB. Se observó una elevación apreciable en la capacidad de producción, en el sector manufacturero en particular. Por su parte, desde los años noventa las empresas transnacionales han incrementado su presencia inicialmente por las privatizaciones, después por la búsqueda de recursos naturales, luego en la concentración bancaria y al final en un notable proceso de adquisiciones -donde se vendieron alrededor de 800 posiciones de mercado de empresas nacionales. Uno de los fenómenos que se está produciendo en esta etapa es el creciente peso de Brasil como inversor en la economía argentina.