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UNIVERSIDAD NACIONAL JOSE FAUSTINO SANCHEZ CARRION

FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES

ESCUELA PROFESIONAL DE TRABAJO SOCIAL

CURSO

ESTRATEGIAS DE INTERVENCIÓN CON POBLACIONES EN RIESGO SOCIAL

ALUMNA:

NORABUENA SANCHEZ, Dyana Angela

TEMA:

RESILIENCIA FRENTE A LAS ENFERMEDADES CRONICAS

DOCENTE

M(A) Castillo alva margot albina

FECHA DE ENTREGA

25 – 05 - 2022

HUACHO

2021 – II
La presente investigación es realizada con la finalidad de comprender como las personas
que han sido diagnosticada con alguna enfermedad crónica, han respondido ante las
situaciones adversas como la llegada de una morbilidad inesperada, repentina y han
tenido el espíritu luchador, valentía, actitud de salir adelante por ellos, por los suyos.
También como estos factores protectores son la base para lograr adaptarse de mejor
manera a este problema de la salud.

En el Perú, según las cifras de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) más


del 50% de las enfermedades está asociada a las enfermedades no transmisibles que
afectan a todos los grupos de edad y representan un grupo heterogéneo de dolencias
tales como las enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes y enfermedades
respiratorias crónicas y que durante la pandemia de COVID-19, fueron y son
vulnerables.

Diversas investigaciones de resiliencia muestran que existen diversos procesos


adaptativos de las personas con enfermedades crónicas o graves y como su conducta
incide sobre la enfermedad, puesto que la persona que pasa por esta situación
experimenta una inestabilidad emocional en el que es fundamental presentar una serie
de factores que ayuden a salir adelante y afrontarlo de forma positiva a través de la
confianza y autonomía, la iniciativa y la capacidad de realizar una tarea de forma
efectiva, la independencia, la creatividad, el humor en todo momento, todas estas
potencialidades, fortalezas permitirán: Mitigar el impacto que generan las adversidades,
separar las conductas de riesgo y generar confianza en sí mismo para afrontar los
procesos de la enfermedad.

El mitigar el impacto no lo hacen solos, sino que influyen mucho los factores de
protección, el apoyo social (amigos, familiares), buena comunicación y un vínculo
afectivo fuerte promueven la adaptación a la enfermedad. Y en donde la familia será el
recurso para que el paciente crónico pueda afrontar con éxito los problemas que
surgirán. Este apoyo emocional que les brindan con tan solo estar presente en sus
tristezas, alegrías, provee a la persona sentimientos de estima, afecto, confianza,
seguridad; en el que pueda percibir que cuenta con alguien, a quien pueda expresarse
libremente sus sentimientos negativos o positivos, de tener un hombro donde llorar y
sentir que no está solo, que está acompañado.

La religión/ espiritualidad, son factores que ayudan a las personas a sobreponerse ante
situaciones difíciles, en los que las personas tienen una fuerte creencia en un poder más
alto y buscan compartir y practicar sus convicciones con otras personas que tienen
ideologías comunes, como medio para tener apoyo y consuelo en momentos difíciles de
la vida. Esto ha influido a tener autoconfianza en sus capacidades, son perseverantes, se
adaptan a los cambios y se recuperan fácilmente de las crisis y tienen aceptación tanto
de sí mismos como de la vida.

Las emociones, son factores de protección donde las personas que manifiestan
emociones positivas, como el sentido del propósito de la vida y el ver la enfermedad
como una oportunidad para crecer, tienen más probabilidades de presentar una actitud
resilientes ante la situación por la que pasan. Sin embargo hay evidencias que
demuestran que tras la llegada de un diagnóstico, las personas que lo padecen empiezan
a encontrar la enfermedad de una forma diferente, tanto que hasta le comienzan a
encontrar beneficios, mejorando así su calidad de vida y el bienestar general, tanto
propio como de su familia.

Todos los factores protectores mencionados influyen en ser resilientes, donde la


fortaleza se ve reflejada en las ganas de seguir hacia adelante afrontando la situación por
la que están o han pasado, mostrar esperanza y confianza en sí mismas, ocasionando
esta situación un cambio en las actitudes de cada una frente a sus hábitos y su estilo de
vida.

También lo que les ha permitido seguir adelante a esta población es tener un cambio de
pensamiento hacia su enfermedad “cambio de chip” que son demostrados en
expresiones como ¿por qué me voy a morir? a un ¿Cómo quiero vivir ahora?”; “No
pensar en el mañana sino en el hoy, logrando tener una visión optimista, tener un
espíritu luchador, de ver la enfermedad como un reto y no como un obstáculo, a tener
actitudes positivas y a empezar solucionar los problemas son factores de protección
individual. Así mismo los factores de protección familiar (pareja, hijos, familia extensa)
son pilares fundamentales para salir adelante, brindan apoyo emocional para luchar
contra la enfermedad. Por último los factores de protección de la comunidad (amigos,
compañeros trabajo, vecino) son fundamentales, para que puedan participar, conocer
otras personas que han pasado por el mismo tipo de enfermedad u otro y ayudarse
mutuamente.

Finalmente concluyo este análisis sobre una realidad que viven muchos peruanos y en
donde la resiliencia es un factor importante para salir adelante por él y por ellos. Desde
nuestra intervención de Trabajo Social hacia el enfoque de la resiliencia aportamos en
las personas un proceso de desarrollo y crecimiento propio, reforzar la importancia del
entorno social para luchar contra la adversidad de la enfermedad crónica y ayudarlos a
potencializar sus habilidades y actuar frente al problema.

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