Escena 1 Narrador: después de haber ganado Jérica, Onda, Almenar, Burriana y murviedro, el cid decide acampa en el pueblo de Alucat alejándose de Zaragoza, Huesca y Montalban y así guerrear por las tierras cercanas al mar de ¨valencia¨ donde cundido mucho miedo y deciden cercar al cid, quien al darse cuenta, reúne en tres días a sus hombres y dice: Exterior en murviedro Cid: (el cid hablándole a sus hombres) hoy las gentes de valencia nos han venido a cercar; si en estas tierras nosotros nos quisiéramos quedar, muy firmemente a estos moros tenemos que escarmentar Minaya: Mío cid, lo que habéis hecho como os place se hará, dadme a mi cien caballeros, vos o los otros que quedan de frente iréis a atacar y fio en el Dios del cielo que el triunfo nuestro será. Narrador: y así empezaron a armar el plan de batalla y contra los moros se va y lograron vencer, haciendo grandes ganancias, miedo tienen en valencia la ama del cid ha hecho mucho ruido por esas tierras de moros. Exterior por las calles de las ciudades Pregonero: Quien quiera venir conmigo para cerca a valencia de voluntad ha de ser pero ninguno por fuerza les espere tres días allá en el canal de la celfa Narrador: Mucho corren los pregoneros y por todas partes van; mucha gente se les acoge. El campeador entonces ya no quiso esperar más, sobre valencia se encamina, el cerco por nueve meses y cuando el décimo llego la tuvieron que entregar. Acto 2 El rey de Sevilla quiere recobrar valencia Escena 2 Narrador: Cuando al rey de Sevilla la noticia le llegaba que tomaron Valencia; a atacarlos vino entonces con treinta mil hombres de armas derrotados Mío cid y aquel gran rey de Sevilla con treinta heridas escapa. A valencia torna el cid con toda aquella ganancia Rey de Sevilla: Aunque invencible se crea el cid, yo el rey de Sevilla no podrá vencer Acto 3 El cid se dispone nuevo presente para el rey Escena 3 Exterior en Valencia Cid: Si os place, Minaya y no os parece mal, mandaros quiero a castilla. A nuestro rey don Alfonso de estas ganancias quiero darle cien caballos, ídselos vos a llevar, por mi besadle la mano, y con empeño rogad que a mi mujer y a mis hijas, si a yanto alcanza su gracias, me las deje ya sacar. Minaya: ¨De muy buena voluntad¨ Acto 4 Minaya se dirige a Carrión en busca del Rey Escena 4 Exterior en castilla- afuera de la iglesia Minaya: (Don Alfonso sale de misa, Minaya se arrodilla delante de todo el pueblo, las dos manos le besa) merced, nuestro rey Alfonso, por amor del creador. Estas manos os las besa Mío cid el luchador, merced os pide que toméis para vos estos cien caballos que buenos corredores son y todos llevan guarnición. Rey Alfonso: (alza la mano derecha y se santigua) De estas ganancias tan grandes que logro el campeador, me alegro el corazón y recibo estos caballos que buenos corredores son y todos llevan guarnición Minaya: Merced os demanda el cid, que si os place, señor, a su esposa y a sus hijas deis vuestro permiso para salir del convento e ir a valencia a juntarse con el cid campeador. Rey Alfonso: Pláceme el corazón Entre la multitud Infantes de Carrión: mucho cunden las hazañas de ese cid campeador, casarnos con sus hijas ganaríamos los dos, pero vergüenza tenemos de decirlo, porque no es el suyo buen linaje para condes de Carrión. Rey Alfonso: Encamínese Minaya a la búsqueda de las mujeres, ¡Que gozo tan grande tienen cuando le ven asomar! Interior en convento San pedro Minaya: Humillándome a vos, Señora, que Dios os guarde del mal y también a vuestras hijas. Os saluda mío cid, por gracia del rey Alfonso ya quedáis en libertad de veniros a Valencia, que ahora es vuestra heredad. Doña Jimena: Si dios quiere, así será Sol y Elvira: Al fin de este convento salimos, para a nuestro padre y a nuestra libertad volvernos a y disfrutar Acto 5 Encuentro del Cid con esposa e hijas Escena 5 Narrador: Con grandes honras de todos son recibidas las damas, el obispo don Jerónimo se adelanta a esperar a las damas y al bueno de Minaya. Exterior en la entrada de valencia Doña Jimena: Merced, Cid aquí me tenéis, señor, vuestras hijas me acompañan, para Dios y para vos son buenas y bien criadas. Cid: Mucho tiempo ha pasado desde la última vez que nos vimos amada mía, y a nuestras hijas que tanto esperaba ver Narrador: A la madre y a las hijas el cid abraza y del gozo que tenían todos lloraban. Acto 6 El rey de marruecos cerca a valencia Escena 6 Narrador: Pésele al rey de marruecos el triunfo de Don Rodrigo y llama a 50 mil guerreros y se encaminan a valencia en busca de donde Rodrigo y en valencia sus tiendas plantaron, noticias estas llegan al cid. Rey de Marruecos: El cid ha conquistado mucho de nuestro territorio pero que no crea que nos rendiremos contra su pequeño ejército (a sus hombres) ¡hombres míos1 descansen esta noche y mañana a la guerra contra el cid iremos. Pregonero: Mío cid el rey de marruecos y los morros se aproximan son más de 50 mil guerreros. Cid: ¡Que buen día es hoy1 de esto saldremos ganando querido pedro no tengáis más miedo, no, porque antes de quince días, si así place al creador, esos tambores morunos en mi poder tendré yo. Narrador: Y así se arma la gente del Ruy Díaz y salen de la villa donde se topan con moros y de las huertas los echan con gran mancilla. Más de quinientos mataron los del cid en este día. Interior en iglesia Don jerónimo: (En misa) El que en la lucha muriere peleando cara a cara de sus pecados le absuelvo. A vos, cid campeador, pediros quiero que me otorguéis unas gracias, y es que los primeros golpes sean dados por mi espada. Narrador: De la batalla el cid sale vencedor y se vuelve muy alegre por el botín tan grande que han capturado. Exterior entrada al alcázar de valencia Cid: (entra el cid sobre babieca y con la espada en la mano, lo reciben esposa e hijas, ante ellas para y tira de las riendas al caballo) Ante vos me humillo, gran honor os he ganado, vos me aguardabais en Valencia y yo vencía en el campo. Esto Dios lo quiso así (baja el cid del caballo y las dos hijas y la esposa ante él se arrodillan) Narrador: De la batalla se reparten las ganancias Interior Valencia Cid: Minaya, Pedro mañana al romper el día habéis de marchar sin falta a castilla, con estos 200 caballos con sillas y frenos para el rey Don Alfonso por haberme mandado a mi mujer y a mis hijas adoradas, que no piense Don Alfonso mal del que en Valencia manda Acto 7 Minaya lleva presente a castilla Escena 7 Narrador: Salen de Valencia, muchas riquezas llevan. Andan de día y de noche, ningún reposo se dan y por el rey don Alfonso empiezan a preguntar. (Se baja de los caballos Minaya y pedro Bermúdez, se arrodillan delante del rey Alfonso, los dos besan el suelo y los pies del rey). Exterior Valladolid Minaya: Merced, merced, rey Alfonso señor nuestro honrado, en nombre de mío cid este suelo y pies besamos. Mucho aprecia mío cid la honra que le habéis dado, inmensas son las ganancias que en la lucha se sacaron. Estos caballos os mandan, rey, y os besa las manos. Rey Alfonso: Recíbolos de buen agrado. Agradezco a mío cid este donde que me ha enviado espero que llegue el día en que por mi sea premiado. Acto 8 Los infantes de Carrión piensan casar con las hijas del cid Escena 8 Exterior Valladolid Infante Don Diego: La prosperidad del cid muy para adelante va, le pediremos a sus hijas para con ellas casar. Infante Don Fernando: Se crecerá nuestra honra así podremos medrar. Narrador: y allí con estas razones al rey Alfonso se van. Los infantes logran que el rey trate el casamiento. Infantes: Esta merced os pedimos, a vos, rey y señor: queremos, si esta demanda tiene vuestra aprobación, que nos pidáis a las hijas de mío cid campeador, casar queremos con ellas, honra será de los dos. Rey Alfonso: (El rey un gran rato se queda meditando) yo he echado de esta tierra al buen cid campeador, trabaje yo por su mal y el por mi bien trabajo, y no sé si el casamiento querrá aceptármelo o no, mas ya que vos lo queréis hablemos de la cuestión, Minaya mándale esta noticia al cid, que los infantes de Carrión a sus hijas quieren desposar. Narrador: Minaya vuelve a valencia y entera al cid de todo. Cuando lo oyó el mío cid, un rato muy dilatado pensativo se quedó. Interior alcázar de valencia Minaya: Respetado mío cid os traigo noticias del rey, los infantes de Carrión a vuestras hijas quieren desposar y el rey ha pedido que vuestra respuesta le envié lo más pronto posible. Cid: echado fui de la tierra, me quitaron el honor, con gran trabajo gane esto que poseo yo, agradezco a Dios que el rey me haya vuelto a su favor y que me pidan a mis hijas para los dos de Carrión. Narrador: El cid elije como lugar las orillas del rio tajo y el rey fija tres semanas para el encuentro, ambas partes preparan la visita Un día antes que llegue el mío cid, el rey llego, cuando vieron que venía ese buen campeador, a recibirle salieron con grandes muestras de honor. Exterior rio tajo Rey Alfonso: (El cid de rodillas se echa al suelo y clava sus manos en él, muerde las hierbas y llora) Levantaos, levantaos, mi buen cid campeador, besar mis manos os dejo, pero besar mis pies no, si no lo hicieras así, no os vuelvo mi favor. Cid: (de rodillas) Merced os pido, buen rey, vos, mi natural señor, que ante vos arrodillado me devolváis vuestro amor, y puedan oírlo todos los que están alrededor. Rey Alfonso: Así lo hare con alma y con corazón, aquí os perdono, cid, y os vuelvo mi favor, desde hoy en todo mi reino acogida os doy. Cid: Gracias, el perdón acepto, Alfonso, rey y señor, al cielo le doy gracias (de rodillas las dos manos le beso, y se levanta). Rey Alfonso: Infanzones oíd con atención el fuego que voy a hacer a mío cid campeador: Vuestras hijas, cid, os pido, doña Elvira y doña sol, para que casen con ellas los infantes de Carrión. Me parece el casamiento honroso para los dos, los infantes os las piden y les recomiendo yo. Cid: No querría yo casarlas, no tienen mucha edad, las dos muy pequeñas son. Yo di vida a estas dos niñas, pero las criasteis vos; a lo que mandéis estamos. Rey Alfonso, ellas y yo. (Se levantan los infantes de Carrión y van a besar las manos de el cid, cambian sus espadas en señal de pacto) Acto 9 El cid anuncia a Jimena el casamiento Escena 9 Interior alcázar de valencia Cid: Gracias a nuestro señor aquí estoy, mujer honrada, conmigo traigo dos yernos que gran honra nos deparan: agradecédmelo hijas, porque estáis muy bien casadas. Doña Jimena: Gracias a Dios y a vos gracias cid, cosas que vos decidáis son cosas bien decididas. Nada les ha de faltar, mientras viváis, a mis hijas. Doña sol: padre cuando nos caséis seremos las dos muy ricas Doña Elvira: Con este casamiento ganaremos en honor, a nuestra familia. Cid: Pero sabed que estas bodas no las he arreglado yo: os ha pedido y rogado don Alfonso, mi señor, él os casa, más no yo. Acto 10 Preparativos de las bodas Escena 10 Interior alcázar de valencia Narrador: Entonces se comenzó a adornar todo el palacio, los suelos y las paredes con tapices los taparon, teñas de purpura y seda y muchos paños preciados. Cid (Llegan os infantes saludan al cid y a doña Jimena, todos prudentes tienen puesta la vista en el) venid acá, buen Minaya, a quien tanto quiero y amo, aquí tenéis mis dos hijas, póngalas en vuestras manos, dárselas a los infantes de Carrión Minaya: Yo lo hare de muy buen agrado Minaya: (las dos se ponen en pie, las coge de la mano, y las entrega a los de Carrión) ante Alvar Fañez estáis presentes los dos hermanos; por mano del rey Alfonso, que me lo tiene mandado, estas damas os entrego, tomadlas vos por mujeres para honra y bien de los cuatro. (Los infantes las reciben, al cid y a doña Jimena les van a besar la mano) (El obispo don jerónimo en la puerta de la iglesia ya los estaba esperando, celebra la misa y bendiciones les echa). Don jerónimo: Estamos aquí reunidos para unir en matrimonio a los infantes de Carrión diego y Fernando con las hijas del cid Elvira y sol. Así pues os pregunto, ¿Diego aceptas contraer matrimonio con Elvira? Diego: Si acepto Don jerónimo: Elvira, ¿aceptas contraer matrimonio con Diego? Elvira: Si acepto Don jerónimo: ¿Fernando aceptas contraer matrimonio con Sol? Fernando: Si acepto Don jerónimo: Sol, ¿aceptas contraer matrimonio con Fernando? Sol: Si acepto Don jerónimo: En virtud de los poderes que se me fueron concedidos yo os declaro marido y mujer, poder besaos.