Está en la página 1de 11

INTRODUCCION

Continuamente valoramos y somos valorados, valoramos las acciones de los


demás, valoramos a los integrantes de la familia, compañeros de trabajo y los
objetos que nos rodean; simultáneamente los otros valoran nuestras acciones y
valoran nuestra personalidad. Los seres humanos no tenemos
una actitud indiferente y pasiva frente a la realidad, sino que sentimos linda o fea,
mala o buena.

En ese contexto el concepto de los valores humanos abarca contenidos y


significados diferentes y ha sido abordado desde diversas perspectivas y teorías.
En sentido humanista, se entiende por valor lo que hace que un hombre sea tal,
sin lo cual perdería la humanidad o parte de ella. El valor se refiere a una
excelencia o a una perfección. Por ejemplo, se considera un valor decir la verdad y
ser honesto; ser sincero en vez de ser falso; es más valioso trabajar que robar. La
práctica del valor desarrolla la humanidad de la persona, mientras que el
contravalor lo despoja de esa cualidad.

¿Qué son los valores?


Los valores son las cualidades o virtudes que tiene un sujeto. Aquel que actúa
en base a los valores, obra de forma justa y positiva para sí mismo y para el
entorno.

Los valores tienen una connotación positiva y guían el actuar de individuos o


grupos ya que definen la manera en la que una persona se relaciona consigo
misma, con un tercero y con el entorno. Algunos de los valores más destacados
son la responsabilidad, la justicia, la lealtad y la paz.

IMPORTANCIA DE LOS VALORES

Permiten guiar la conducta humana en temas trascendentales, como qué es lo


bueno, lo malo, lo justo y lo injusto. Propician el sentido de comunidad, en la
medida en que las personas con valores similares tienden a agruparse, compartir
cometidos y actuar de manera conjunta.

CARACTERISTICAS DE LOS VALORES

La humanidad ha adoptado criterios a partir de los cuales se establece la


categoría o la jerarquía de los valores. Algunos de esos criterios son:
Durabilidad: los valores se reflejan en el curso de la vida. Hay valores que
perduran más en el tiempo que otros. Por ejemplo, el valor del placer es más
fugaz que el de la verdad.

Integralidad: cada valor es una abstracción íntegra en sí mismo, no es divisible.

Flexibilidad: los valores cambian con las necesidades y experiencias de las


personas.

Satisfacción: los valores generan satisfacción en las personas que los practican.

Polaridad: todo valor se presenta en sentido positivo y negativo; Todo valor


conlleva un contravalor.

Jerarquía: Hay valores que son considerados superiores (dignidad, libertad) y


otros como inferiores (los relacionados con las necesidades básicas o vitales). Las
jerarquías de valores no son rígidas ni predeterminadas; se van construyendo
progresivamente a lo largo de la vida de cada persona.

Trascendencia: Los valores trascienden el plano concreto; dan sentido y


significado a la vida humana y a la sociedad.

Dinamismo: Los valores se transforman con las épocas.

Aplicabilidad: Los valores se aplican en las diversas situaciones de la vida;


entrañan acciones prácticas que reflejan los principios valorativos de la persona.

Complejidad: Los valores obedecen a causas diversas, requieren complicados


juicios y decisiones.

¿Para qué sirven los valores?


Los valores sirven de guía en el accionar de los individuos y grupos dentro de una
sociedad. Fomentan el accionar positivo para la mejora interior de cada persona
y la convivencia y armonía social, por lo que es recomendable que se inculquen
desde la primera infancia, en el hogar y en la escuela, para criar niñas y niños
respetuosos/as de los valores fundamentales.

Se define a los valores como históricos, es decir, que su origen se relaciona con
un contexto social y cultural, que influye directamente en su concepción y
formación. De este modo, las sociedades tienen valores diferentes sobre los
modos de actuar, de comportamiento, morales y de convivencia.

A la vez que se da esta diferencia, también existen muchos valores llamados


“universales”, que se espera que sean respetados por todos los seres humanos,
como el valor de la paz, la solidaridad, la tolerancia y el respeto.

PROPIEDADES DE LOS VALORES

Los valores tienen propiedades comunes que es posible detallar, tales como:

 Son trascendentes. Le otorgan sentido a la existencia humana y por ende


se tienen como cometidos de la misma.
 Son abstractos y mentales. No se trata de objetos concretos y
comprobables, sino que interpretaciones mentales o culturales de cosas y
acciones.
 Son individuales y colectivos. Dependiendo del caso, los valores se
manifestarán más o menos colectivamente: algunos dependerán del modo
de pensar de cada quien, mientras que otros serán bastante universales.
 Son históricos. Es decir, no se originan de golpe, ni por decisión arbitraria,
sino como resultado de un proceso o un devenir histórico de
las sociedades. Además, cada momento histórico puede tener valores
diferentes.
 Son jerárquicos. No todos tienen la misma predominancia: unos serán
más centrales o principales, mientras que otros son secundarios.

TIPOS DE VALORES

No existe una clasificación única y finita de los valores de una sociedad. Se


aplican a prácticamente todas las áreas de la vida y del pensamiento.

Existen así valores éticos, morales, sociales, religiosos, culturales y un


variopinto etcétera. En cada caso, como veremos a continuación, se aplican los
juicios y la comprensión a distintos ámbitos de la vida humana.

 Valores Eticos: los valores éticos son aquellos que tienen que ver con el
comportamiento humano “correcto” y con la toma de decisiones. Como guía
de comportamiento, estos nos permiten saber cuándo y cómo actuar
responsablemente frente a diversas situaciones.
No se los debe confundir con los morales, que tienen que ver con lo
considerado bueno o malo per se. Por el contrario, los valores éticos tienen que
ver con el comportamiento humano y con la complejidad de la toma de decisiones,
en un mundo en que bien y mal son posiciones relativas.

#1. El respeto construye nuestras relaciones


El respeto es, ni más ni menos, que la base a través de la que se relacionan las
personas y la vía para compartir intereses y necesidades en cualquier contexto:
trabajo, familia, amistades, estudios, Es el valor bidireccional por excelencia,
pues solo se entiende en ambas direcciones: respeto a los padres u a otras
figuras de autoridad, a la naturaleza, a la ley.

#2. La justicia como marco de nuestras relaciones


A diferencia del respeto, la justicia se encarga de ser equitativa con las
personas de un modo imparcial y aplicando reglamentos aceptados por el
grueso de la sociedad y enfocados hacia el bien común.

#3. Responsabilidad y compromiso


Nuestras sociedades no podrían funcionar sin justicia ni respeto, pero tampoco sin
el establecimiento de compromisos y la asunción de responsabilidades. Las
personas asumimos, conscientemente, una serie de obligaciones y
respondemos ante las consecuencias derivadas en todos los ámbitos de la
vida: trabajo, familia, amigos… Desde adoptar a un perro como nuevo miembro
de la familia y cuidarlo toda su vida (comida, atenciones, paseos, gastos
veterinarios), hasta aceptar un trabajo y realizar esta labor con tenacidad y
estabilidad durante toda la duración del contrato. En los últimos años se han
popularizado mucho los documentales que denuncian la falta de
responsabilidad de entidades públicas o privadas, o de la sociedad en general,
como Super Size Me (Morgan Spurlock, 2004) sobre la comida basura en EE. UU.
o An Incovenient Truth (Davis Guggenheim, 2006) acerca del proceso de
denuncia de Al Gore en relación con las causas y consecuencias del cambio
climático.

#4. Honestidad: ser sincero con uno mismo y con los demás
Entre los valores éticos, la honestidad es la que más relacionado está con el resto:
con valores como la verdad, la justicia y el respeto. La honestidad es vivir de
acuerdo a como pensamos y sentimos, ser coherentes con nuestro
pensamiento y modo de vida, y relacionarnos de este modo con el mundo que nos
rodea, las cosas que nos suceden y el resto de los seres humanos. Algunos
buenos ejemplos son aceptar una equivocación propia o reconocer los méritos
ajenos, una película de dibujos como Shrek (Andrew Adamson y Vicky Jenson,
2001) es un buen ejemplo de esto, donde nuestro protagonista hace lo que debe y
es sincero con él mismo y con el resto incluso con el contexto en contra suyo.
#5. Libertad, el valor ético por antonomasia
Por último,si existe un valor ético del que hemos oído hablar más que del resto,
este es, sin lugar a dudas, la libertad. Desde superproducciones como Brave
Heart (Mel Gibson, 1995) a clásicos del cine como Doce hombres sin
piedad (Sidney Lumet, 1957) o El hombre que mató a Liberty Valance (John
Ford, 1962), o libros como Farenheit 451, de Ray Bradbury, que nos hablan de la
libertad de los pueblos, de la libertad individual, de cómo surge y se alcanza la
libertad de expresión; y de la búsqueda de la verdad o la libertad de prensa.
La libertad es esa capacidad que posee todo ser humano para poder actuar a
lo largo de su vida conforme a su propia voluntad, mediante una elección libre,
sin condicionantes personales o externos. Sin embargo, la libertad también es una
lucha constante, siempre relativa, porque las influencias que nos rodean nos
limitan esta capacidad y hacen imposible que podamos hablar en términos
absolutos. Quizá por esto último la libertad es, entre los valores éticos, por el que
más se ha luchado, pues sin ella, es difícil que puedan desarrollarse la honestidad,
la responsabilidad, la justicia o el respeto en nuestras sociedades.

 Valores morales: Los valores morales tienen que ver con el bien y el mal.
Estos son conceptos absolutos y a menudo inaplicables, que responden a un
marco cultural específico de una sociedad determinada. Sin embargo, permiten
juzgar las acciones y personas entre buenos y malos.

Los valores morales de una sociedad son cambiantes y tienen que ver con
su historia cultural y religiosa. Se asocian a lo que se considera aceptable, de
buen gusto, correcto o aceptable por el conjunto social, independientemente de las
razones y atenuantes del caso.

Existen cientos de valores morales que guían a los seres humanos —y, a menudo,
podemos comprender algunos de ellos como prolongaciones de otros, tales como
la crítica constructiva de la empatía o de la sensibilidad— por ello, si bien resulta
imposible establecer una lista jerárquica de todos ellos por su importancia,
sí podemos hablar de aquellos valores humanos a los que otorgamos más
importancia como sociedad.

1. Bondad
La bondad es uno de los valores humanos más generales de nuestro ser. Puede
traducirse en cientos y cientos de miles de acciones según cada contexto,
pero siempre recoge el deseo de hacer el bien, tener buenas intenciones con el
resto de las personas, ser amable o ayudar en la medida de nuestras
posibilidades.
2. Sinceridad
Como virtud, la sinceridad se traduce en vivir y relacionarse sin intenciones
ocultas a través de nuestros actos o palabras. Se trata de uno de los valores
morales por antonomasia, pues ser sincero con uno mismo nos lleva siempre a ser
sincero con los demás.

3. Empatía
Asimismo, la empatía está muy relacionada con la sinceridad. Quien busca la
bondad, la felicidad o la sinceridad con uno mismo, entiende que cualquier ser
humano también vive en búsqueda constante de lo mismo. Por ello, la empatía,
que nos ayuda a ponernos en la situación de nuestros semejantes, también
nos ayuda a entenderlos, apoyarlos y ayudarlos cuando es necesario, que es lo
mismo que nosotros deseamos, ¿o no?

4. Amor
Al igual que otros valores relacionados como la alegría u el optimismo, el amor es,
muy probablemente, uno de los sentimientos más fuertes de un ser humano:
¡amor por el arte!, ¡por nuestros seres queridos!, ¡amor por lo que hacemos! Como
valor humano, el amor es el motor que inicia el dar y el recibir, el convivir, el
compartir, el respetar o el confiar.

5. Paciencia
Contraria al aquí y al ahora, la paciencia nos enseña a luchar por aquello que
deseamos, a tolerar una incomodidad o una preocupación y a comprender que
hay días buenos y días malos, pero pocos problemas sin solución.

6. Gratitud
Podíamos haber elegido otros valores, como la amistad, pero en Ayuda en
Acción sabemos que la gratitud es, casi siempre, la mayor recompensa para
el que da y el gran gesto del que recibe. Es tan simple y tan compleja en sí misma
como agradecer a las personas que nos han ayudado o apoyado.

7. Perdón
A diferencia de la gratitud, el perdón no solo nos empodera como personas, sino
que nos permite mostrar el camino correcto a aquel individuo que ha obrado
mal con nosotros y quizá con terceros; con el perdón desistimos del castigo o la
venganza frente a una persona que se comportó injustamente con nosotros.

8. Humildad
La humildad se basa en el hecho de que nadie lo sabe todo. Como seres
humanos, nos movemos entre nuestros propios límites y debilidades; una
persona humilde sabe que juntos somos más, y, por ello, se preocupa por el
bien de todos los que le rodean.
9. Responsabilidad
A su vez, la responsabilidad adopta muchas facetas, desde aquella colectiva a la
individual vinculada a nuestros deberes, compromisos y obligaciones con
terceros. Quizá es uno de los valores humanos que más dificultad entraña, y para
el que os recomendamos recordar siempre que la responsabilidad empieza en uno
mismo.

10. Solidaridad
Por último, como ONG preocupada por principios como el esfuerzo colectivo, la
transparencia institucional y la dignidad de todas las personas, en Ayuda en
Acción creemos que la solidaridad es uno de los grandes valores
humanos de nuestro tiempo.
La solidaridad es el sentimiento y el principio que nos permite ayudar a
cualquier ser humano en cualquier momento, en especial, en situaciones de
desamparo, y creemos que recoge muchos de los valores humanos sobre los que
hemos podido hablar en este artículo, como la bondad, el amor, la humildad o la
empatía. Porque creemos que aprender sobre ellos es una buena forma de crecer
como personas, y ayudar a que otros puedan educarse en valores es la mejor
forma de construir un mundo mejor.

 Valores sociales: Los valores sociales son aquellos que emanan de la sociedad
o del conjunto humano que nos rodea. Son impuestos al individuo por la
colectividad y pueden incluso ser arbitrarios, contrarios a la moral o la ética.

Se deben a la apreciación que los demás ejercen sobre nosotros y nuestra
conducta. Por ende, los valores sociales cambian a medida que la sociedad lo
hace, y evolucionan con ella a medida que nuevas reglas de juego se imponen
con el tiempo.

Equidad: Se pretende que todas las personas tengan las mismas oportunidades y
puedan conseguir las mismas cosas sin tener en cuenta las condiciones
particulares de cada una. Para ello es de vital importancia valorar qué merece
cada una de las personas de forma justa.

Amistad: Es un valor social muy destacado. Se trata del vínculo que se genera
entre dos o más personas en cualquier ámbito. La amistad puede surgir entre los
niños en un colegio o entre compañeros de trabajo. Es un valor social muy
preciado y que además potencia las relaciones sociales.

Responsabilidad: El desempeño de una persona, la dedicación o las ganas que


pone a la hora de conseguir una meta. Este valor social es fundamental cuando se
quiere conseguir un propósito y hay que poner en práctica la perseverancia y las
fortalezas de uno mismo.
Tolerancia: Es un valor social muy importante para aplicarlo de forma personal y
social. Es un arma indispensable para ser comprender a ciertas personas y
situaciones que pueden llegar a ser crispantes. No perder la calma en
determinados momentos es un gran síntoma de autocontrol.

Honestidad: Este valor facilita que podamos ser sinceros con nosotros mismos y
con las personas que nos rodean. Es fundamental se transparentes e ir con la
verdad por delante. A largo plazo, siempre se valora la honestidad de las
personas.

 Valores religiosos

Los valores religiosos son aquellos derivados de la religión o la iglesia y que


tienen que ver con ella. Generalmente responden a un código de espiritualidad
contemplado por la religión y aceptado por sus practicantes, que puede coincidir
más o menos con otros valores sociales, éticos o morales.

Sin embargo, los valores religiosos a menudo operan dentro de cierta


metafísica religiosa. Es decir que sólo aplican si uno decide creer y practicar
dicha religión. Sin embargo, en países de gobierno fundamentalista religioso
dichos valores se convierten no en cuestiones subjetivas, sino en leyes ejercidas
desde el Estado.

Amor
El amor es un valor que transmite a través de acciones y sentimientos
desinteresados hacia alguien.

Es un valor que crea vínculos y lazos emocionales importantes. Amar a la familia,


a los amigos, los animales, entre otros. También implica el cuidado y cultivo por el
amor propio.

Vea también Amor.

Caridad
La caridad es una virtud muy importante, se refiere a amar a Dios sobre cualquier
cosa. Es un valor que invita a hacer el bien y ser fraternal. Es un valor que genera
paz, misericordia, amor, y generosidad. Las personas caritativas prestan su apoyo
cada vez que alguien necesita ayuda para superar alguna dificultad o problema.

Misericordia
La misericordia se refiere a la disposición que tienen las personas para
compadecerse de la situación de otro ante el sufrimiento o la pena. Las personas
misericordiosas son las que prestan ayuda e invitan a la reconciliación y al perdón.
Vea también Misericordia.

Obediencia
Se refiere a la capacidad y actitud que cada individuo posee para acatar con
respeto y responsabilidad la voluntad de otras personas que, por lo general,
poseen el mando o control sobre algo.

Por ejemplo, obedecer a los padres cuando toman una decisión con respecto a un
tema familiar.

Compasión
La compasión es la capacidad que tienen las personas para conectarse con lo que
el otro individuo está experimentando. Es el impulso de actuar y prestar ayuda
ante las necesidades de los demás.

Bondad
Es la actitud de responder y actuar haciendo el bien. Las personas bondadosas
procuran alcanzar el bienestar para el prójimo a través de buenas acciones a fin
de aliviar dolores, tristezas o penas. Los bondadosos ayudan a los demás sin
esperar nada a cambio.

 valores humanos: Por valores humanos o valores universales se entiende un


intento por construir categorías de apreciación de la conducta que sean
comunes a toda la especie. Contemplan aquellas apreciaciones que más se
repiten a lo largo de las culturas, religiones y sociedades.

Se trata de una categoría polémica, ya que imponer a otras culturas los valores
de la nuestra no la hace realmente universal, como tampoco lo hace aceptar de
buena gana los valores de otras culturas. En principio, ocurre con ello lo mismo
que con los derechos humanos: todos los aceptamos en principio, pero no
significan lo mismo para todos.

ANTIVALORES

Lo contrario a los valores son los antivalores, ya que estos últimos son actitudes
negativas que van en contra de algún valor porque promueven un accionar
inadecuado o peligroso.

Mientras los valores guían de forma positiva el obrar de un individuo, los


antivalores van en contra de aquello que es bueno para la persona o la
sociedad en su conjunto.
Algunos ejemplos de antivalores son: la irresponsabilidad, la intolerancia, la
impaciencia, la injusticia, la infidelidad, la deshonestidad, la incoherencia, el
egoísmo, entre otros.

Ejemplos de valores

 Valores éticos. Justicia, libertad, honestidad.


 Valores morales. Bien, mal, correcto, incorrecto.
 Valores sociales. Pespeto, cortesía, seducción.
 Valores religiosos. Salvación, pureza.
 Valores humanos. Vida, libertad, libre elección.

CONCLUSIÓN:

Los valores son construidos por cada uno de los individuos y en ese proceso de
adquisición son varios los factores que influyen desde la familia, la escuela, los
amigos, en el trabajo, etc. Puesto que hacemos nuestro ciertos valores y otros no.
Los valores reflejan el curso de la vida, porque hay algunos que son permanentes
en el tiempo que otros.

Los valores cambian con las necesidades y experiencias de las personas, es


decir: Hay valores de nuestra sociedad que dan importancia a la recompensa
monetaria y otros que dan importancia a la categoría o al servicio social. De modo
que estamos constantemente evaluados y evaluamos por la racionalidad de sí, y
de los otros de modo que podemos darnos cuenta que hay valores preferenciales
y valores universales. Gracias a ello captamos que hay cosas importantes a las
cuales no debemos renunciar y cosas poco importantes de las que podemos
prescindir.

BIBLIOGRAFIA
Fuente: https://concepto.de/que-es-un-valor-y-cuales-son-los-valores/
#ixzz7MwpeNieu

WWW.MONOGRAFIAS.COM
Fuente: https://www.caracteristicas.co/valores/#ixzz7Mx1ltwem

También podría gustarte