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JLA JJUS'll'A PlRlESCl!UPCKION COMO MODO DJE ADQUllliUJR T][JEJRJRAS lBAJLDli,As !IDUJ-
~AN'll'JE JLA JEPIOCA COJLONK.$..JL
En fallo de 5 de agosto de 1942 la Corte
estableció, siguiendo para esto el espíritu de
la legislación il')diana sobre la materia, espe-
cialmente la Real Cédula de San Lorenzo, qué
debía, entenderse por explotación económic~,
como medio de adquirir por prescripción el do-
minio privado de las tierras.
Allí se dijo que había que demostrar esa
explotación económica con actos inequívocos,
tales como plantaciones, cultivos, estancias de
· ganado, etc.
Y en fallo de 16 de julio de 1951, amplió el
anterior concepto, en los siguiente~ térm.inos:
"De conformidad con la aplicación que la
doctrina ha dado a los principios legislativos
que rigieron la adquisición del dominio terri-
torial por el modo de la justa prescripción
durante la Colonia, la posesión de las tierras
debía precisamente consistir en actos de ex-
p·lotación económica, o sea, en plantaciones
o cultivos, pastos, ganaderfa, etc., sobre las
tierras en que aquélla se ejercitaba", agre-
gando, además; que la ley de 11 de octubre
de 1821 no modificó ese principio, ya que al
reconocerle determinados derechos a •:tos que
poseyeren tierras baldías de tiempo inmemo-
rial o a/ pretexto de una justa prescripción"
(artículo 59), sin especificar el modo como di·
cha posesión debí;;t. ejecutarse, de hecho, la
subordinó a las condiciones establecidas en las
leyes españolas, cuyos mandatos continuaban
en todo su vigor, mieritars no resultaran opues-
tos a las disposiciones de la Carta, o a otras
leyes posteriores.
Corte .Sup.rema de Justicia .. - Sala de Negocios
Generales.-Bogotá, enero treinta y uno de mil
novecientos cincuenta y tres.
(Magistrado Ponente: Dr. Luis A. Flórez)
Darío Gutiérrez, por medio de memorial dirigido
al Ministerio de Minas y Petróleos, formuló pro-
puesta para explorar y explotar el petróleo de pro-
pieqad nacional que pudiera en~ontrarse en un glo-
bo de terreno de 49.999 hectáreas, con 9.999 :m.2
aproximadamente, situado en jurisdicción del mu-
nicipio de Riohacha, Departamento del Magdalena
y comprendido por los siguientes linderos:
"Como punto' de referencia del lote solicitado se
tomó un mojón de concreto de cemento, cuyas ;e()-
ordenadas geogr~ficas son:
Latitud ........... 119 23' 06"8 N.
Longitud ......... 739 04' 32"85 W de Gr.
19 00' 18"45 E de B
'!Partiendo del punto anterior, marcado en el
plano 'PR', con rumbo verdadero S. 279 07' 25"U
W, y una distancia de 3.1í71,631 metros, se llega al
punto 'A', que es el primer vértice del lote que se
solicita. De ese punto 'A' se continúa con rumbo
verdadero Sur cero grados Este (S. 09 00' 00" E.}
y una distancia de trece mil trescientos cincuenta
metros (13.350,00 metros) para llegar al punto 'B'-
De este punto 'B' se sigue· con rumbo verdadero
Norte noventa grados Oeste (N. 909 00' 00" W) y
una distancia de treinta y cinco mil trescientos
cincuenta y cinco metro:; con trescientos treinta y
ocho milímetros (35.355,338 metros) para Ueg;lll!'
al punto 'C'. De este punto 'C' se continúa con
rumbo verdadero Norte cero grados Este (N. ()Q
00' 00" E.) y una distancia de catorce mil ciento
cuarenta y dos metros con ciento treinta y sais
milímetros (14.142,136 metros) para llegar al pun-
to 'D'. 'De este punto '])' se sigue con rumbo Vtell:'-
dadero Sur noventa grados Este (S. 909 00' 00!' E)·
y una distancia de treinta y cinco mil ·trescientos
cin~uenta y cinco metros con tr.escientos treinU! ·.y¡-
ocho milímetros (35.355,338 metros) para llegar al
punto 'E'. De este punto 'E' se sigue con rumbo
verdader~ Sur cero grados Este (S. 09 00' 00"' E.}
y una distancia de setecientos noventa y dos me-
tros con ciento treinta y seis milímetros (792,136
metros) para llegar al punto 'A' o sea, al punto
de partida de esta alinderación".
El Ministerio por Resolución número 725, que
lleva fecha 31 de octubre de 1947 resolvió aceptar
la mencionada propuesta, marcada con el número

414 t'raspasada posteriormente a la Richmond Pa-
cific Company.
Con fecha 19 de julio de 1948, el doctor Roberto
Goenaga, obrando en su propio nombre, y como
apoderado de la señora Eva Rosa Goenaga de Ri-
veira Daza, se opuso a la celebración del contrato
de la referencia, alegando ser, tanto él, como la se-
ñora de Ri~eira Daza, condueños del globo de te-
rreno denominado "Barrando y Caricari", que se
halla comprendido dentro del lote de la :¡>ropuesta
del señor Gutiérrez, por los linderos allí señalados.
El Ministerio de Minas y Petróleos dispuso el
envío a esta Sala de la Corte del presente negocio,
para los fines de los artículos 10<? del Decreto Ex-
traordinario número 10 de 1950, y 23 del Decreto
Reglamentario 2169 del mismo año.
Aquí se. le .dio la tramitación correspondiente. El ·
señor Procurador Delegado e:iJ. lo Civil, en escrito
de 11 de junio de 1951 descorrió el traslado de la
- demanda, ordenado por auto de' fe?ha 23 de mayo
del mismo año.
Vino luego la apertura del asunto a pruebas. Du-
rante' el respectivo término probatorio, los oposito-
res, doctor Roberto Goenaga y Eva Rosa Goenaga
de Riveira Daza, allegaron al informativo las que
en seguida estudiará la Sala. Asimismo se llevó a
la práctica una insp~cción bcular en asocio de pe-
ritos, "s'obre los terrenos cuestionados.
De otro lado, ambas partes alegaron de conclu-
sión. De manera que se halla el negocio suficien-
temente preparado para recibir sentencia: defini-
tiva.
Debe definirse pues, si es o no fundada la pre-
tensión de la parte opositora; es decir, si los títu-
los en qut) se apoya sirven para demostrar que el
subsuelo petrolífero de las tierra·s conocidas con el
nombre de "Barranco y Caricari", sitas en juris-
dicciÓn del municipio de Riohacha es de propiedad
privada, o por el contrario éste pertenece a la Na-
ción. ·
Los opo:;itores, con el fin de probar el derecho
por ellos alegado sobre el- subsuelo, presentaron los
siguientes documentos:
1Q Titulación del globo de tierra ''Barranco y
Caricari" (91.836-1846). o títulos de origen a favor
de Manuel Antonio Barliza:. · Juez de Camarones, sobre la veracidad de los linde-
2Q .Copia de la escritura número 54 de 12 de ju-
lio de 1882, de la Notaría de Riohacha, por la cual
Isabel Lancero de· Barliza vende a José Manuel
Goenaga Villa y José Manuel Goenaga Gómez los
terrenos de "Barranco y· Caricari".
3<? Copia de la escritura núniero 4 de 19 de ~ne­
ro de 1917, por la cual José Manuel Goenaga Gó-
251
inez vende a José Manuel Goenaga Zapata y Ro-
berto Goenaga, Ía mitad del globo de tierra "Ba-
rranco y Caricari". .
4<? Copia de la escritura número 128 de 5 de' no-
viembre de 1947 de la Notaría de Riohacha, de pro-
tocolización del ~ucesorio. de José Manuel Goenaga
V. y Manuela Gómez de Goenaga. '"'-
5<? Certificado de la Oficina de Registro de Ins-
trumentos Públicos y Privados de Riocha de fecha
5 de julio de 1948.
Se observa: .
En ninguna parte del informativo aparece, como-
tam_bién lo afi-rma el ·servido Legal del Ministerio
de Minas y Petróleos, la prueba de rigor de que las.
.tierras, materia de este juicio, hubieran salido del
patrimonio nacional antes del 28 de octubre de
1873.
En efecto, en su alegato de conclusión el oposi-·
tor doctor Goenaga aduce como' título emanado del
Estado, requisito exigido por la ley del petróleo
para declarar como de propiedad privada un terre-
no petrolífero, el hecho de la ''justa preséripción"·
por medio de la explotación econ,ómica.
Pues bien; entre los documentos llevados a los
autos por los opositores, como tendientes a demos-J
trar es.e título figuran los siguientes:
a) Tres declaraciones rendidas ante el Juez 2<?'
Cantonal de Riohacha, en abril de 1836, relativas
a la fundación y posesión del "Hato de Barranco".
b) Cuatro declaraciones rendidas ante el Juez 'de
Camarones, a. solicitud de Manuel A. Barliza, sobre·
el mismo fundo.
e) Comunicación dirigida por Marcelo Mendoza,.
representante de Barliza, fechada el 21 de septiem-
bre del mismo año, en la, que le dá cuenta de sus
gestiones re!Jpecto al reclamo de "los terrenos bal-
díos que desde tiempo inmemorial ha poseído".
d) Solicitud de Rafael A. Barliza, hijo de Ma-
nuel Antonio, fechada en abril de 1845 para qqe se
practicara la mensura y deslinde del terreno, dilí-
gencia que se llevó a cabo en el mes de abril del
a_ño siguiente.
e) Tres declaraciones, en abril de 1846 y ante el
ros de la mensura:
Pasa pues a· ocuparse la Sála del análisis de las
declaraciones en cuestión, es decir a las que se alu-
de e,n los ordinales a). y b), ya que son éstas ver-
daderamente, las que dicen relación al problema
que se estudia.
Como lo anota el señor Procurador Delegado en
252 JI m JI]) • TI ·(() :n h IL

lo Civil, "Para demostrar esa lejana explotación "De conformidad con la aplicación, que la docta-i-
económica, acuden los interesados a la pruE)ba tes- na ha dado a los principios legislativos que rigie-
timonial recogida en las informaciones de que dan ron la adquisición del dominio territoria1 por •el
cuenta aquellos documentos, particularmente, a las modo de la justa preseripción durante la Colonia, la
practicadas en el año de 1836". posesión de las tierras . debía precisamente consis-
Un detenido estudio de ellas pone de presente, tir en actos de explotación económica, o sea, en
que son muy vagas e imprecisas, cuestión ésta que plantaciones o cultivos, pastos, ganadería, etc., so-
la Sala no puede aceptar en orden a demostrar esa bre las tierras en que aquélla se ejercitaba".
justa prescripción, ya que ha sido principio tan an-
tiguo, como universalmente aceptado, que en mate- ' En el presente ~aso no ocurre lo propio, pues los
ria de prueb.a testimonial, la precisión de los depo- testimonios y el interrogatorio, únicamente se re-
nentes ha de ser de tal naturaleza, que deje en el fieren a la ''explotaeión económica de tiempo in-
ánimo del Juzgador el pleno convéncimiento de lo memorial", pero no se hace referencia a los hechos
que se afirma. en que consiste esa explotación, ni al tiempo o lap-
En el caso sub judice el testimonio carece de la so en que se cumplieran. De otra parte se observa,
precisión necesaria en esta clase de pruebas, ya que el concepto "explotación económica" por ser
que de una parte, los declarantes Cotes, Gómez, una conch;¡sión de índole abstracta y jurídica, úni-
Daza, Brito, Manuel Suárez y Benito Brito se limi- camente compete al juzgador apreciarla.
taron a contestar en lo esencial ''ser cierto el inte- En el fallo citado agrega la Sala:
rrpgatorio", ser "exacto el contenido de la pregun- ;,La Ley de 11 de octubre de 1821, bajo cuyo im-
ta" y de otra, la más importante, el interrogatorio perio se recibía la anterior prueba testimonial, no
a ellos .sometido adolece del mismo vicio, por cuanto modificó ese principio, ya que al reconocerle dete.r-
no se formularon en él, con la· debida precisión, minados derechos a "los que poseyeren tierras bal-
las preguntas tendientes a demostrar los hechos días· de tiempo inmemorial, o a pretexto de una jus-
constitutivos de esa explotación económica que aho- ta prescripción" (artículo· 59) sin especificar el
l'a· se alega. modo ·como dicha posesión debía ejercitarse, de ha-
En efecto, el interrogatorio que en autos figura cho, la subordinó· a las condiciones establecidas en
a folio 2 del cuadernú número 3, está redactado en las leyes españolas, cuyos ".mandatos continuaban
los siguientes términos: en todo su vigor, mientras no resultaran opuestos
a las· disposiciones de la Carta, o a otras le;ves pos-
19 ............................... ·.......... . terfores".
29 Si saben o han .oído decú· (subraya la Sala) Del estudio de las anteriores piezas procesales se
si el hato de "Barranco" fue fundado de tiempo in- infiere que la prueba legal de haber salido el globo
memorial. de terreno, del patrimonio nacional, no ha sido de-
39 ......................................... . mostrada conforme a las exigencihs de lf!- ley y la
jurisprudencia. · .
49 Que igualmente de~aren si el dicho señor An- La dilige~cia de inspección ocular, practiéada so-
tonio Barros (difunto) mantuvo una perpetua po- bre los terrenos cuestionados, puso de manifiesto
sesión de los terrenos ... que efectivamente el globo de tierra conocido con
En fallo de 5 de agosto de 1942 se estableció, si- el nombre de ''Barranco y Caricari", por los lin-
guiendo para esto el espíritu de la legislación in- . deros allí señalados, se encontraba comprendido en
diana sobre la materia, especialmente la Real éé-
dula de San Lorenzo, qué debía entenderse por ex- ..
parte, dentro del lote materia del contrato.

plotación económica, como medio de adquirir pp1· Ahora bien, respecto de las declaraciones recibi-
prescripción el dominio privado de las tierras. das durante la práctica de la misma es de observar,
Allí se dijo en efecto, que había que demostrar que ellas nd sé ·refieren a actos de explotación eco-
esa explotáción económica con actos inequívocos, nómica con anterioridad al año de 1873. En efecto,
tales como plant,aciones, cultivos, estancias de ga- las declaraciones de Movil, Barros, Bermúdez y Mi-
nado, etc. randa se. concretaron al siguiente concepto: "Que
En fallo que aparece publicado en la GACETA esos terrenos han sido explotados económicamen-
.JUDICIAL número 2103-2104, de 16 de julio de · te", pero sin expresar qué clase de. explotación, ni
1951, se .amplía el anterior concepto en los siguien- por cuánto tiempo, etc., condición sine qua -non
tés términos: para poder aceptar tal afirmación.
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Conclusión FALLA:

De lo visto se infiere, que los opositores no de-
mostraron que las tierras de "Barranco y Carica-
ri", delimitadas como se indica en el escritEJ d~
oposición, hubieran salido del patrimonio nacional
antes de la vigencia .del Código Fiscal de 187a. En
éonsecuencia, el subsuelo petrolífero de dicho glo-
bo es de .propiedad nacional.
En vista de las anteriores consideraciones, la
Corte Suprema de Justicia -Sala de Negocios Ge-
nerales- administrando justicia en nombre de la
República y por autoridad qe la Ley,
Niégase la petición única '·de la demanda, y en
consecuencia absuvélvese a la. Nación.
Publíquese, cópiese, notifíquese, insértese en la
GACETA JUDICIAL y devuélvase al Ministerio'
de origen.
Rafael !Leiva Charry-!Luis A. IFRórez-Agus-
tín Gómez Jl>rada - !Luis Rafael Robles- Jorge
García Merlano, Secretario.