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Derecho Internacional Del Trabajo

El derecho internacional del trabajo esta deviniendo uno de los factores más
importantes para conseguir la unidad de los distintos Estados: la uniformidad
del derecho del trabajo está creando conciencia universal de la dignidad de la
persona humana y de la necesidad de su respeto en cualquier lugar en que se
encuentre y se vea obliga a prestar servicios personales, o expresando en
otras palabras, dice De La Cueva, el ideal del derecho del trabajo de asegurar
a cada hombre una existencia digna, se universaliza y al extenderse, dice a los
hombres de los diversos Continentes y Estados que el problema humano es
idéntico en todos los lugares y que, en esa virtud, la paz y la tranquilidad
universales solamente podrán obtenerse si todos los Estados colaboran para
logar condiciones justas y humanas de vida.

Antecedentes Históricos. El Tratado de Versalles.


La idea de una organización internacional capaz de crear un derecho
internacional del trabajo no es nueva nació al mismo tiempo que el derecho del
trabajo, pero es el tratado de Versalles donde adquirió su primer esplendo. La
conferencia de paz reunida en Versalles a la terminación de la primera guerra
mundial, creo una organización permanente cuya misión descrita en el
preámbulo de la parte XIII del Tratado de Versalles, seria procurar la formación
de un derecho internacional del trabajo, apoyado en los principios de la justicia
social y el cual el derecho del trabajo serviría a su vez de base a las
legislaciones nacionales y constituiría las primeras garantías internacionales
para la protección del trabajo. Sería una organización permanente de
naturaleza técnica y tendría como miembros a los componentes de la sociedad
de las naciones, creada en el mismo Tratado de Versalles y, según decisiones
posteriores, a todos los Estados que voluntariamente entraran en ella. Desde el
principio, la organización se bautizó a si misma con el nombre de
ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL DEL TRABAJO; y así es conocida en
nuestros días.

La Carta de las Naciones Unidas


En octubre y noviembre de 1945 sesiono en Paris la O.I.T y fue preciso
reformar algunas de las ases constitutivas: la sociedad de las Naciones; creada
en el Tratado de Versalles, había sido substituida por la Organización de las
Naciones Unidas (ONU) y, en consecuencia, fue indispensable acomodar la
O.I.T. a la nueva situación.
LA CARTA DE LAS NACIONES UNIDAS se firmó en San Francisco, el 26 de
junio de 1945. La ONU no es del tipo de las viejas organizaciones
internacionales cuyo único propósito era regular las relaciones políticas
externas entre los Estados; el nuevo derecho internacional, cuya iniciación
correspondió al derecho del trabajo, es su finalidad procurar la colaboración
entre los pueblos para conseguir un régimen justicia social aplicable a todos los
hombres. Además de las finalidad políticas la O.N.U. se propuso una acción
cultural, económica, y social. En el preámbulo de la carta consta que “los
pueblos de las Naciones Unidas están resueltos a promover el progreso social
y a elevar el nivel de vida dentro de un concepto más amplio de la libertad” y se
agrega que “los mismos pueblos reafirman la fe en los derechos fundamentales
el hombre y en la dignidad y el valor de la persona humana”.
Después de la aprobación de la Carta de las N.U., se dividieron las opiniones
acerca de la subsistencia de la O.I.T., llegándose a la conclusión de que
subsiste como un organismo especializado, en el cuadro general de la O.N.U.,
condición que le hizo perder la autonomía plena que había conquistado.
La O.I.T., en la conferencia de Paris de 1945, autorizo a su consejo de
administración para celebrar los acuerdos necesarios con los órganos
competentes de la N.U. por el acuerdo de 1945 los representantes de las N.U.
son invitados a asistir a las sesiones de la O.I.T. y los miembros de esta
organización son también invitados a concurrir a las sesiones del Consejo
Económico y Social. La O.I.T. y el consejo económico y Social cambiaran la
documentación e información necesarias para el mejor desarrollo de sus
labores.

La Conferencia de Chapultepec
En la Conferencia Internacional sobre problemas de la guerra y de la Paz,
celebrada en Chapultepec en febrero y marzo de 1945, se aprobó la
Declaración Americana de los Derechos y Garantías Sociales. Constituye una
declaración de principios e instituciones siendo además una muy extensa
declaración internacional de los DERECHOS EL TRABAJO y sirve para los
Estados miembros de la Organización de los Estados Americanos (OEA); sigue
la línea del Tratado de Versalles también reitera y amplía la Declaración de
Filadelfia de 1944 que contempla los postulados fundamentales del Derecho
Internacional Del Trabajo es decir se reconoció que el Derecho del Trabajo
tiene un fundamento y una razón idénticos en todos los pueblos ósea que el
derecho laboral realiza en todas artes su ideal fundamental que es proporcionar
a todos los hombres la seguridad de una existencia digna de la persona
humana.
La Declaración de la Conferencia de Chapultepec contiene dos partes 1)
Principios Generales. 2) Enumeración y alcance de las instituciones concretas
del Derecho del Trabajo, derecho individual del trabajo, derecho protector de
las mujeres y menores, reglamentaciones especiales, derecho electivo del
trabajo, previsión y seguridad social, autoridades del trabajo, declaración sobre
la justicia social.

La Conferencia de Bogotá
En Bogotá, en la Novena Conferencia Internacional American, en 1948, fue
suscripta la Declaración American de los Derechos y Deberes del Hombre.
Como primer documento intergubernamental de su clase en la historia es
precursora de la Declaración Universal de los Derechos del Hombre de mismo
año 1948. Fue suscripto por el Paraguay.
Una de sus normas sobre el Derecho de Asociación, dispone: Toda persona
tiene derecho de asociarse con otras para promover, ejercer y proteger sus
interese legítimos de orden político, económico, religioso, social, cultural,
profesional, SINDICAL o de cualquier otro orden.

Declaración Universal de los Derechos Humanos


Considerando que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por base el
reconocimiento de la dignidad intrínseca y de los derechos iguales e
inalienables de todos los miembros de la familia humana.
Considerando que el desconocimiento y el menosprecio de los derechos
humanos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la
humanidad y que se ha proclamado como la aspiración más elevada del
hombre, el advenimiento de un mundo en que los seres humanos liberados del
temor y de la miseria disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de
creencias.
Considerando esencial que los derechos humanos sean protegidos por un
régimen de Derecho, a fin de que el hombre no se vea competido al supremo
recursos de la rebelión contra la tiranía y la, opresión.
Considerando también esencial promover el desarrollo de las relaciones
amistosas entre las naciones.
Considerando que los pueblos de las Naciones Unidas han reafirmado en la
carta su fe en los derechos fundamentales del hombre en la dignidad y el valor
de la persona humana y en la igualdad de derechos de hombre y mujer y se
han declarado resueltos a promover el progreso social y a elevar el nivel de
vida dentro de un concepto más amplio de la libertad.
Considerando que los Estados miembros se han comprometido a asegurar en
cooperación con la Organización de las Naciones Unidas, el respeto universal y
efectivo de los derechos y libertades fundamentales del hombre.

La Asamblea General Proclama


LA PRESENTE DECLARACION UNIVERSAL DE LOS DERECHOS
HUMANOS, como ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben
esforzarse a fin que tanto los individuos como las instituciones inspirándose
constantemente en ella promuevan mediante la enseñanza y la educación el
respeto a estos derechos y libertades y aseguren por medidas progresivas de
carácter nacional e internacional su reconocimiento y aplicación universales y
efectivos tanto entre los pueblos de los Estados miembros como entre los de
los territorios colocados bajo su jurisdicción.

La Organización Internacional del Trabajo. Órganos de la O.I.T.


Las Convenciones. Convenios de la O.I.T. del Paraguay.
La O.I.T. es la institución permanente con sede en Ginebra creada por la parte
XIII del Tratado de Versalles de 1919 tienen como misión fundamental formular
normas internacionales mínimas de trabajo cimentadas en la idea de justicia
social para promover así la paz universal.
Son sus órganos:
a) El Consejo de Administración con funciones directivas;
b) La Conferencia Internacional que el Cuerpo legislativo;
c) La Oficina Internacional del Trabajo, entidad ejecutiva.
Convenciones de la O.I.T.
La Conferencia Internacional, órgano legislativo destinado a crear el Derecho
Universal del Trabajo adopta para esta finalidad CONVENCIONES Y
RECOMENDACIONES.
Las Convenciones votadas son proyectos de tratados internacionales, que una
vez ratificados e incorporados a la legislación nacional establecen normas con
carácter de ley y permiten elevar las condiciones de trabajo a un mismo nivel
en todos los países adherentes.
La palabra convención se utiliza aquí como acuerdo de voluntades para
establecer normas con carácter de ley si los miembros de la OIT las ratifican.
Tales convenciones no son instrumentos suscriptos sino votados
individualmente por cada delegado a la conferencia tanto de los gobiernos
como de las organizaciones profesionales de trabajadores y de empleadores.
La solución de las cuestiones derivadas de la ratificación de las convenciones
depende del Derecho público interno de cada estado. El derecho internacional
del trabajo fue concebido como un derecho autónomo en su formación pero
requiere para cobrar vigencia nacional ser aprobado por cada estado según su
procedimiento constitucional. En nuestro país ratificada una convención de la
OIT por el congreso adquiere fuerza de ley en consecuencia deroga o modifica
las leyes anteriores que opongan a la misma pero si la ley nacional es más
favorable a los trabajadores que la convención ratificada la ley tiene preferencia
en virtud del principio pro operario.

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