La deuda externa ha sido un problema recurrente en la historia económica de Argentina, y ha

contribuido a la inestabilidad económica y financiera del país. Durante la última dictadura cívico-
militar (1976-1983), la deuda externa del país aumentó significativamente
Pero, ¿qué es la deuda externa?
La deuda externa es la suma de las deudas que tiene un país con entidades extranjeras, como
gobiernos, bancos y empresas privadas y esta se puede dividir en dos: deuda publica y deuda
privada
La deuda pública es aquella que contrae el Estado para financiar su gasto público, como la
construcción de infraestructuras, programas de asistencia social, la adquisición de bienes y
servicios, entre otros. Esta deuda se emite mediante la venta de bonos y otros instrumentos
financieros a inversores extranjeros, y generalmente está garantizada por la capacidad del Estado
para recaudar impuestos y recursos naturales.
Por otro lado, la deuda privada es aquella que contraen empresas y particulares con entidades
extranjeras para financiar sus operaciones comerciales o personales. Esta deuda se puede adquirir a
través de préstamos bancarios, emisión de bonos corporativos, entre otros.
Durante la dictadura militar se llevó a cabo la llamada “bicicleta financiera”; la cual consistía en
aprovechar las bajas tasas de interés en los mercados internacionales para hacer préstamos en
dólares y utilizarlos para invertir en el mercado interno, donde las tasas de interés eran mucho más
altas. Esto les daba, a corto plazo, una ganancia significativa, pero luego terminó por generar un
aumento exponencial de la deuda externa.
Durante dictaruda militar la deuda exterena se multiplico por seis pasando de 7.8 mil millones de
dolares a 46.5 mil millones durante los siete años que duro la dictadura, lo que dejo una deuda per
capita[1]de 1500 dolares
aunque esta sifra no es del todo clara ya que habia discrepancias con respecto al valor real de la
deuda publica y privada
la deuda publica debia de aprobarse previamente por el Ministerio de Economia y el BCRA (Banco
Central de la Republica Argentina) pero este ultimo tenia diferencias inexplicables con todos los
demas registros
estas discrepansias eran tan grandes que no se podian conciderar errores o diferencias
metodologicas, sino que en las estadisticas de la deuda faltaba entradas y salidas importantes que, o
no fueron declaradas o no se registraron
Por ejemplo, el ex ministro de Economía (29/03/1976-29/03/1980) José Alfredo Martínez de Hoz
afirmó que la deuda externa incluía 4.000 millones de dólares ya pagados, que seguían apareciendo
como pendientes.
A raiz de esto el periodista Alejandro Olmos impulzo una denuncia, que se llamo caso Olmos por el,
en donde denunciaba las iregularidades en torno a la deuda contraida durante la dictadura. La
investigación judicial, que contó con numerosos peritos de organismos oficiales y privados, locales
y extranjeros, comprometió seriamente a las autoridades civiles y militares de entonces
el caso se abrio en 1982 y fue cerrado en el año 2000.
La operatoria se valió principalmente de tres pilares: la reforma financiera y la pauta cambiaria
(devaluación progresiva del peso); la apertura económica y la desindustrialización; y el
desmantelamiento estatal y la represión de la resistencia. Para implementar estas reformas, fue
necesaria la modificación del marco legal, para revestir de legalidad una acción ilegítima. Alejandro
Olmos concluyó: “Primero se modificó la ley, después se hipotecó al país”. Cuando no alcanzó, se
recurrió simplemente a la trasgresión de las normativas vigentes.
El endeudamiento del país se llevó a cabo a través de un proceso en el cual las empresas públicas
tomaban préstamos en el extranjero para obtener dólares que no necesitaban realmente. Estos
dólares eran luego utilizados para beneficiar a empresas privadas a través del Banco Central. Por
ejemplo, la compañía YPF fue obligada a tomar préstamos cada tres meses sin necesidad real de
hacerlo. Sin embargo, los dólares obtenidos no llegaban a la compañía, sino que se quedaban en el
Banco Central. Con el tiempo, la deuda de YPF creció enormemente, alcanzando los 6.000 millones
de dólares, lo que representaba una décima parte de la deuda total del país. Los grupos privados
utilizaban estos dólares para jugar y ganar con los tipos de cambio y la fuga de divisas.
Préstamos pagados que no se descargaron, fuga de capitales a través de autopréstamos que
quedaron registrados como deudas, transferencias camufladas entre compañías extranjeras y sus
filiales, compras militares secretas, exportaciones subfacturadas, importaciones sobrefacturadas, son
algunas de las posibles causas señaladas de las discrepancias de las entradas y salidas de divisas por
deuda y otros conceptos del balance de pagos, que nunca se aclararon.

[1] Per capita: significa “por persona” osea que si la deuda se la divide por cada ciudadano a cada
uno le toca 1500 US