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MAESTRIA EN GESTION PUBLICA

GESTION DE PARTICIPACION Y CONTROL CIUDADANO

TEMA:
Resumen Analítico de la Carta Iberoamericana de participación
ciudadana de la Gestion Publica

ALUMNO:
Frank Aníbal Córdova Rojas

DOCENTE:
Dr. Adolfo Alberto Clement García
FECHA:
14 de abril del 2023
CARTA IBEROAMERICANA DE PARTICIPACION CIUDADANA DE LA GESTION PÚBLICA

La carta habla sobre la importancia de una gestión pública eficiente y democrática, que cumpla con ciertos
parámetros como la integridad, la eficacia, la efectividad, la igualdad y la equidad, y que tenga un impacto
positivo en el desarrollo social y la calidad de vida de las personas. La democracia plena y la participación
ciudadana en la gestión pública son fundamentales para lograr una mejora en la gestión pública y para la
ampliación y profundización de la democracia como sistema político. El derecho de participación
ciudadana en la gestión pública es un derecho que deben tener todos los habitantes de Iberoamérica con
respecto a la gestión pública del país en que residen, y esto debe establecer mecanismos para ello. La
gestión pública participativa contribuye al desarrollo de los países, favoreciendo la inclusión y la cohesión
social. El mayor desafío de la participación ciudadana en la gestión pública es lograr su universalización
para que todos los sectores de la población, incluidos los más vulnerables, puedan acceder a ella y
defender y exigir sus derechos, convirtiéndose en un medio para la transformación social

La Carta tiene como objetivo establecer las bases conceptuales y los componentes que constituyen la
participación ciudadana en la gestión pública para mejorar la calidad de las democracias en Iberoamérica.
Define los contenidos básicos del derecho de los ciudadanos a participar en la gestión pública, establece un
marco de principios rectores e instrumentos que contribuyen a lograr un lenguaje común en relación a la
participación ciudadana en la gestión pública y sirve como guía para el desarrollo y consolidación de
modelos nacionales de participación ciudadana en la gestión pública.

La participación ciudadana en la gestión pública se entiende como el proceso de construcción social de


políticas públicas que responde a los derechos económicos, sociales, culturales, políticos y civiles de las
personas y organizaciones. La participación ciudadana es esencial para la democracia, complementa los
principios democráticos de representación política, refuerza la posición activa de los ciudadanos como
miembros de sus comunidades y fomenta una nueva cultura de entendimiento intercultural y cooperación.

La participación ciudadana es un derecho y responsabilidad cívica de los ciudadanos y requiere recursos


públicos para establecer y garantizar los canales para su ejercicio, incluyendo aquellos sectores en
situación de exclusión social y vulnerabilidad. El Estado debe adoptar políticas para promover la educación,
conciencia e información para los ciudadanos sobre su derecho a participar en la gestión pública y apoyar
los esfuerzos autónomos de las organizaciones sociales y ciudadanos para llevar a cabo acciones de
educación ciudadana. La participación ciudadana se basa en los principios de constitucionalizarían,
descentralización, legalidad, transparencia, rendición de cuentas, eficiencia y eficacia.

El Capítulo dos menciona la importancia de la participación ciudadana en la formación de las políticas


públicas. Se enfatiza que esta participación debe ser un elemento transversal y continuo en todo el proceso
de formulación, planificación, ejecución, seguimiento, evaluación y control de las políticas públicas,
programas sociales y servicios públicos. Además, se establecen mecanismos para garantizar la participación
ciudadana en todos los ámbitos sectoriales y niveles territoriales.

Se hace hincapié en la implementación participativa de políticas públicas y se planifican mecanismos


destinados a involucrar a las comunidades y beneficiarios en todo el proceso de implementación. Además,
se destaca la importancia de la participación ciudadana en la gestión privada o social de bienes y servicios
públicos transferidos por el Estado.
Finalmente, se mencionan los ámbitos de participación reforzada, como la defensa de los derechos de los
pueblos indígenas, afrodescendientes, personas con discapacidad, migrantes, niños, niñas, jóvenes, adultos
mayores, acceso a la justicia, inclusión social, igualdad de género, protección del medio ambiente y otros
derechos humanos.

El capítulo 3 indica como incide la participación ciudadana en la gestión pública y cómo puede adoptar
distintas formas, ya sea sobre la toma de decisiones públicas, la actividad administrativa o la evaluación de
sus resultados.

Se destaca la importancia de garantizar la participación individual y colectiva, para lo cual las


Administraciones Públicas deben propiciar el acceso a información de interés general, la difusión pública
de los canales de comunicación, la invitación a la ciudadanía a vincularse sin requisitos y la aplicación de los
principios de rendición de cuentas y transparencia en la gestión.

El Capítulo cuarto del texto trata sobre la participación ciudadana como organización y proceso. En primer
lugar, se menciona que los Estados iberoamericanos deben desarrollar medios de participación que
permitan la incidencia ciudadana en las políticas públicas, independientemente del nivel en que se
desarrolle la participación (ya sea a través de la información, la comunicación, la consulta, la deliberación o
la participación en la toma de decisiones).

En segundo lugar, se hace hincapié en la importancia de la articulación de los mecanismos de participación


ciudadana con los órganos estatales encargados del control y fiscalización, con el fin de potenciar el
ejercicio de control social y combatir la corrupción.

Por último, se enfatiza que la participación ciudadana es un proceso de doble vía que requiere que los
entes y órganos públicos sean receptivos a las opiniones y propuestas de la sociedad, y que los ciudadanos
y colectivos sociales estén informados y puedan incidir en las competencias de las instituciones estatales.
Además, se menciona la importancia de que los Estados adopten las medidas necesarias para que los
procesos de participación ciudadana puedan incidir de manera efectiva en las políticas y la gestión
públicas.

El Capítulo 5 de la Carta Iberoamericana de Participación Ciudadana en la Gestión Pública establece el


derecho de acceso a la información como un derecho fundamental para garantizar la participación
ciudadana en la gestión pública. Los ciudadanos tienen derecho a acceder a la información pública sin
necesidad de declarar un interés determinado, a ser asistidos en su búsqueda de información, a recibir la
información en un plazo máximo y en un formato accesible para ellos. El principio de transparencia debe
guiar la relación de la Administración con los ciudadanos y la información debe ser relevante, veraz,
comprensible y de fácil acceso. Además, se promueve la transparencia activa por parte del Estado en la
ejecución y resultados de las políticas públicas.

El Capítulo 6 se establece la necesidad de evaluar el proceso de participación ciudadana en la gestión


pública para promover una mayor incidencia de la ciudadanía en la gestión pública. Los Estados deben
generar mecanismos de evaluación de la participación ciudadana con la intervención y consideración de los
puntos de vista de la sociedad y deben evaluarse las políticas públicas en cada una de sus fases para
comprobar su efectividad, eficacia, eficiencia, equidad y calidad de la etapa de la política que se evalúa y de
la participación en particular.

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