Ética personal y ética profesional: una no existe sin la otra.

Para abordar por qué la ética personal y profesional no puede existir una sin la
otra es importante definir que es cada una, teniendo en cuenta que la ética es la
disciplina que estudia el comportamiento humano y su noción del bien y mal a
través de los actos libres. Ahora bien, la ética profesional contribuye a saber qué
es lo que está bien y lo que está mal en el ejercicio de la profesión. Además, la
ética profesional persigue un bien común, es decir, contribuye a que el profesional
entienda que el beneficio colectivo, tanto social como de la empresa. Por otra
parte, la ética personal hace parte del actuar de las personas en cualquier campo
de su vida. Estas actuaciones hacen parte del compromiso que se adquiere tanto
en su familia, trabajo o socialmente.

Entendiendo, que la ética profesional se dedica al ámbito laboral y la ética

personal hace parte del individuo y de su vida privada, se plantea el siguiente
ejemplo:

Juanito trabaja en la construcción de un centro recreativo para niños. El

tiempo estimado de la construcción es para cinco años ya que se planea
que sea un lugar donde madres solteras tengan acceso a guarderías
públicas. Juanito es el director de la construcción, como ingeniero conoce
los costes de una obra de tal magnitud, también conoce cuales son los
mejores materiales, los cuales permitirán al centro longevidad y seguridad
para los asistentes. No obstante, a Juanito se le ofreció unos materiales
mas caros y de menor calidad para la obra. Con esto se espera reducir el
tiempo de la construcción de cinco a tres años. De igual forma, se espera
que por la baja calidad de los materiales el centro no estaría protegido de la
forma adecuada contra huracanes, sismos, vientos, o cualquier evento
fortuito, lo cual abriría paso a remodelaciones y reparaciones. De esa
manera, se necesitarían de nuevo los servicios de la constructora y de
Juanito, lo que generaría más ganancias para ambos.
En el caso de Juanito, él tiene dos opciones hacer lo que es verdaderamente
correcto desde el inicio: comprar los materiales de alta calidad y tardarse el tiempo
correcto de construcción para que el centro recreativo sea seguro para todos los
asistentes y no exista la necesidad de seguir invirtiendo en el constantemente, al
menos no en los próximos 30 años, ya que es una construcción sólida y bien
hecha.

Sin embargo, Juanito puede elegir lo opuesto y escoger materiales mas baratos,
acortar el tiempo de la obra para que en medio año después de finalizada sus
servicios sean solicitados de nuevo, ya sea para alguna remodelación o
reparación. Esto generaría ganancias para la empresa y para él.

Estudiando ambas opciones, es obvio que una es éticamente correcta y la otra no

a nivel profesional. No obstante, la decisión es completamente personal, ya que el
individuo profesional no es diferente del individuo normal y la decisión debe
hacerse en la conciencia personal del individuo, en este caso Juanito.

Tanto la ética profesional como personal van de la mano porque las decisiones
que tomamos como individuos están sujetas a ser juzgadas en blanco y negro,
buenas o malas. Como profesionales podemos saber que esta bien y que está
mal, que es una buena práctica y que es una mala práctica en nuestras labores,
que es conveniente solo para la empresa y que es conveniente para el bien
común. Pero como individuos pertenecientes a una sociedad tenemos dos
compromisos: ser buenos ciudadanos y ser buenos profesionales, somos ambos,
no podemos ser dos individuos separados dependiendo del contexto.

La decisión de Juanito de ser un buen profesional o no esta minada en su interior

como individuo, como ciudadano, como ser humano el hacer el bien o hacer el
mal. Por tal razón, es implausible que exista la ética profesional sin estar primero
la ética personal porque son los actos libres que como seres humanos que nos
planteamos cometer vienen primero del interior de nuestra conciencia, partiendo
de la meditación de estos, en lo personal, podemos definir si estos van a
perjudicar a terceros, en lo profesional, ya sea nuestros colaboradores en el
trabajo, a nuestros clientes o la sociedad en general.