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COVID-19

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agregues datos especulativos y recuerda colocar referencias a fuentes fiables para
dar más detalles.

Este artículo trata sobre la descripción médica de la enfermedad. Para los


acontecimientos actuales, véase Pandemia de COVID-19.
COVID-19
Symptoms of coronavirus disease 2019 2.0-es.svg
Síntomas1
Especialidad Infectología
Complicaciones Neumonía, síndrome de dificultad respiratoria aguda,
insuficiencia renal aguda, COVID-19 persistente
Causas SARS-CoV-2
Diagnóstico RT-PCR cuantitativa, inmunoensayo, tomografía axial computarizada
Prevención
Ver lista2
Tasa de letalidad ~ 0.3% con la vacuna
Sinónimos
Enfermedad del coronavirus
Neumonía por coronavirus
La enfermedad por coronavirus de 2019,3 más conocida como COVID-19, covid-19nota 1
o covid, e incorrectamente llamada neumonía por coronavirus, coronavirusnota 2 o
corona, es una enfermedad infecciosa causada por el SARS-CoV-2.1112

Produce síntomas que incluyen fiebre, tos,13 disnea (dificultad respiratoria),


mialgia (dolor muscular)14 y fatiga.1516 En casos graves se caracteriza por
producir neumonía, síndrome de dificultad respiratoria aguda,17 sepsis18 y choque
circulatorio. El choque séptico es la forma más común en estos casos, pero los
otros tipos también pueden ocurrir. Por ejemplo, un choque obstructivo puede ser el
resultado de una embolia pulmonar, complicación también posible.19 Según la OMS, la
infección es mortal entre el 0,5 % y el 1 % de los casos.20 Se han autorizado
varios tratamientos antivirales por la FDA como pueden ser el paxlovid, remdesivir
o molnupiravir en pacientes con un curso de la enfermedad de leve a moderado, con
factores de riesgos en los que se quiera evitar una evolución grave de la
enfermedad.21

La transmisión del SARS-CoV-2 se produce mediante pequeñas gotas —microgotas de


Flügge22— que se emiten al hablar, estornudar, toser o espirar, que al ser
despedidas por un portador (que puede no tener síntomas de la enfermedad o estar
incubándola)23 pasan directamente a otra persona mediante la inhalación, o quedan
sobre los objetos y superficies que rodean al emisor, y luego, a través de las
manos, que lo recogen del ambiente contaminado, toman contacto con las membranas
mucosas orales, nasales y oculares, al tocarse la boca, la nariz o los ojos.2425
También está documentada la transmisión por aerosoles ( < 5μm).2627 La propagación
mediante superficies contaminadas o fómites (cualquier objeto carente de vida, o
sustancia, que si se contamina con algún patógeno es capaz de transferirlo de un
individuo a otro) no contribuye sustancialmente a nuevas infecciones.28

Los síntomas aparecen entre dos y catorce días (período de incubación), con un
promedio de cinco días, después de la exposición al virus.29303132 Existe evidencia
limitada que sugiere que el virus podría transmitirse uno o dos días antes de que
se tengan síntomas, ya que la viremia alcanza un pico al final del período de
incubación.3334El contagio se puede prevenir con el lavado de manos frecuente, o en
su defecto la desinfección de las mismas con alcohol en gel, cubriendo la boca al
toser o estornudar, ya sea con la sangradura (parte hundida del brazo opuesta al
codo) o con un pañuelo y evitando el contacto cercano con otras personas,24 entre
otras medidas profilácticas, como el uso de mascarillas. La OMS desaconsejaba en
marzo la utilización de máscara quirúrgica por la población sana,3536 en abril la
OMS consideró que era una medida aceptable en algunos países.37No obstante, ciertos
expertos recomiendan el uso de máscaras quirúrgicas basados en estudios sobre la
Influenza H1N1, donde muestran que podrían ayudar a reducir la exposición al
virus.38 Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados
Unidos recomiendan el uso de mascarillas de tela, no médicas.39 Recomendación de
los CDC (febrero de 2021)40

Índice
1 Nombre
2 Historia
2.1 Descubrimiento
2.2 Propagación de la enfermedad
2.2.1 Efectos sociales de la pandemia
3 Epidemiología
3.1 Transmisión
3.1.1 De persona a persona
3.1.2 Persistencia en superficies
3.1.3 Transmisión vertical
3.2 Ritmo reproductivo R0
3.3 Paciente cero
3.4 Paciente uno
4 Agente etiológico
5 Fisiopatología
6 Signos y síntomas
7 Complicaciones
8 Pronóstico
8.1 Tasa de letalidad
8.1.1 Diferencia entre sexos y géneros
8.2 Efecto según edad y patologías previas
8.3 Efecto socio-económico
8.4 Inmunidad
9 Diagnóstico
9.1 Detección de la infección
9.2 Diagnóstico sintomático
10 Prevención
10.1 Manejo del brote
10.2 Medidas preventivas
10.2.1 Lavado de manos
10.2.2 Higiene respiratoria y mascarillas
10.2.3 Autoaislamiento
10.2.4 Distanciamiento social
10.2.5 Dieta y estilo de vida saludables
10.2.6 Vacunas
10.2.7 Tras vacunarse
11 Tratamiento
11.1 Tratamientos en desarrollo
11.1.1 Antivirales
11.1.2 Contra la tormenta de citoquinas
11.2 Trasplante pulmonar
11.2.1 Terapia pasiva de anticuerpos
12 Véase también
13 Enlaces externos
14 Notas
15 Referencias
16 Enlaces externos
Nombre

Escultura de un coronavirus ubicada en el Instituto de Investigaciones Biomédicas


de la UNAM, México
El 12 de enero de 2020, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recibió el genoma
secuenciado41 del nuevo virus causante de la enfermedad y lo nombró temporalmente
2019-nCoV, del inglés 2019-novel coronavirus (nuevo coronavirus), mientras que la
enfermedad era llamada «infección por 2019-nCoV» en documentos médicos,4243 y SARS
de Wuhan o Wu Flu (gripe de Wu) en Internet.4445 El 30 de enero, la OMS recomendó
que el nombre provisorio de la enfermedad fuera "enfermedad respiratoria aguda por
2019-nCoV", hasta que la Clasificación Internacional de Enfermedades diera un
nombre oficial.46 A pesar de esta recomendación, los medios y agencias de noticias
continuaron usando la denominación neumonía de Wuhan para referirse a la
enfermedad.474849

La OMS anunció el 11 de febrero de 2020 que COVID-19 sería el nombre oficial de la


enfermedad.50 El nombre es un acrónimo de coronavirus disease 2019 (enfermedad por
coronavirus 2019, en español). Se procuró que la denominación no contuviera nombres
de personas o referencias a ningún lugar, especie animal, tipo de comida,
industria, cultura o grupo de personas, en línea con las recomendaciones
internacionales, para evitar que hubiera estigmatización contra algún colectivo.51
52

En español, el género de la denominación de la enfermedad puede ser tanto femenino


como masculino; sin embargo, el femenino fue desde un principio el preferido por la
Fundéu BBVA y, posteriormente, por la Real Academia Española (RAE): La COVID-19,
debido a que «COVID-19» es el acrónimo en inglés de enfermedad por coronavirus de
2019, donde enfermedad (palabra representada por la letra D, elemento principal del
acrónimo) solo puede ser femenino en la lengua española.6 Aunque es el femenino el
que utiliza la OMS en todos sus escritos, el uso del masculino se halla más
estandarizado en el discurso público, según la RAE, por influencia del género de
coronavirus y de otras enfermedades víricas: el dengue, el MERS, el SARS, el Zika,
y otras.53 La Fundéu BBVA también señala que se puede lexicalizar el nombre de la
enfermedad en textos generales, escribiéndolo todo en minúsculas (covid-19) por
tratarse de un sustantivo, en lugar de mayúscula inicial (Covid-19), como se usa en
algunos escritos;6 y que no es infrecuente ni incorrecto usar solo el primer lexema
de esta palabra compuesta (COVID en lugar de COVID-19). Esta simplificación se
explicaría por el fenómeno de la economía lingüística, especialmente en el registro
informal y discurso hablado.

Cuando se la escribe con dígitos («COVID-19» en vez de «COVID»), el uso del guion
es obligatorio en español (es incorrecto «COVID19» —todo junto— o «COVID 19» —con
espacio), ya que lo posee en la denominación oficial, y, además, la lengua española
tiene la costumbre de separar las palabras que se componen de letras y números.
Esto último lo lleva a cabo con un guion. 54

Respecto a su acentuación, ambas instituciones indican que el uso mayoritario del


primer lexema de la palabra es agudo /ko'βið/ (COVID-19) —y que la voz es, de
hecho, aguda en español—, por lo que solo una población minoritaria de
hispanohablantes la acentúan como llana /'ko.βið/, por influencia del inglés,
lengua de origen del término (COVID-19).5556El nombre completo de la enfermedad ha
de leerse preferentemente como: [ko'βið.dje.si'nwe.βe] en zonas de seseo, y como:
[ko'βið.dje.θi'nwe.βe] en zonas no seseantes.

Historia
Descubrimiento
Véase también: Pandemia de COVID-19 en República Popular China#Inicio de la
pandemia
El Mercado mayorista de mariscos del Sur de China en Wuhan, intervenido por las
autoridades al ser el primer lugar donde se registró el virus SARS-CoV-2 en
trabajadores y comerciantes del recinto.
En diciembre de 2019 hubo un brote epidémico de neumonía de causa desconocida en
Wuhan, provincia de Hubei, China; el cual, según afirmó más tarde Reporteros Sin
Fronteras, llegó a afectar a más de 60 personas el día 20 de ese mes.

Según el Centro Chino para el Control y Prevención de Enfermedades (CCDC), el 29 de


diciembre un hospital en Wuhan (Hospital Provincial de Medicina Integrada
Tradicional China y Occidental, también conocido como el hospital de Xinhua,)
admitió a 4 individuos con neumonía, quienes trabajaban en un mercado de esa
ciudad. El hospital informó esto al CCDC, cuyo equipo en la ciudad inició una
investigación. El equipo encontró más casos relacionados al mercado y el 30 de
diciembre las autoridades de salud de Wuhan comunicaron los casos al CCDC, que
envió expertos a Wuhan para apoyar la investigación. Se obtuvieron muestras de
estos pacientes para realizar análisis de laboratorio.57

El 31 de diciembre, el Comité de Salud Municipal de Wuhan informó a la Organización


Mundial de la Salud (OMS) que 27 personas habían sido diagnosticadas con neumonía
de causa desconocida, habiendo 7 en estado crítico; la mayoría de estos casos eran
trabajadores del mencionado mercado.58 Para el 1 de enero de 2020, el mercado había
sido cerrado y se había descartado que el causante de la neumonía fuera el SARS, el
MERS, gripe, gripe aviaria u otras enfermedades respiratorias comunes causadas por
virus.42

El 7 de enero de 2020 los científicos chinos habían aislado el virus causante de la


enfermedad, y realizaron la secuenciación del genoma. Esta secuenciación estuvo
disponible para la OMS el 12 de enero de 2020, permitiendo a los laboratorios de
diferentes países producir diagnósticos específicos vía pruebas de PCR.42

El 12 de enero de 2020, las autoridades chinas habían confirmado la existencia de


41 personas infectadas con el nuevo virus, quienes comenzaron a sentir síntomas
entre el 8 de diciembre de 2019 y el 2 de enero de 2020, los cuales incluían:
fiebre, malestar, tos seca, dificultad para respirar y fallos respiratorios;42
también se observaron infiltrados neumónicos invasivos en ambos pulmones
observables en las radiografías de tórax.43

Propagación de la enfermedad
Artículo principal: Pandemia de COVID-19
Véase también: Anexo:Cronología de la pandemia de COVID-19
Tras el primer brote de COVID-19 en Wuhan en diciembre de 2019, donde las
autoridades chinas confirmaron 41 casos detectados entre el 8 de diciembre y el 2
de enero de 2020,43 la ciudad dejó de informar casos hasta el 19 de enero, cuando
se confirmaron 17 casos más. Para ese entonces ya se habían comunicado los primeros
casos por COVID-19 fuera de China: dos en Tailandia y uno en Japón.59

La rápida expansión de la enfermedad hizo que la Organización Mundial de la Salud,


el 30 de enero de 2020, la declarara una emergencia sanitaria de preocupación
internacional, basándose en el impacto que el virus podría tener en países
subdesarrollados con menos infraestructuras sanitarias.60 En esa fecha, la
enfermedad se había detectado en todas las provincias de China continental,61 y se
diagnosticaban casos en otros 15 países.

El 11 de marzo la enfermedad se hallaba ya en más de 100 territorios a nivel


mundial, y fue reconocida como una pandemia por la OMS.62 El número de casos
confirmados continuó creciendo hasta alcanzar los 500 mil casos a nivel mundial el
26 de marzo de 2020.63

Para prevenir la expansión del virus, los gobiernos han impuesto restricciones de
viajes, cuarentenas, confinamientos, aislamiento social, cancelación de eventos, y
cierre de establecimientos. La pandemia está teniendo un efecto socioeconómico
disruptivo,64 y el miedo a la escasez de provisiones ha llevado a compras de
pánico. Ha habido desinformación y teorías conspirativas difundidas en línea sobre
el virus,6566 e incidentes de xenofobia y racismo contra los ciudadanos chinos y de
otros países del este y sudeste asiático.67

Efectos sociales de la pandemia


Artículos principales: Impacto socioeconómico de la pandemia de COVID-19 y
Cuarentena por la pandemia de COVID-19.
Se ha comprobado que las cuarentenas, restricciones al tráfico de personas y los
aislamientos que se están dando a causa de la pandemia tienen efectos psicológicos
negativos.68 A finales de enero, la Comisión Nacional de Salud de China publicó una
guía de manejo de las crisis psicológicas, en la que propugnaba la intervención de
las personas afectadas, contactos cercanos, los encerrados en sus hogares, los
familiares y amigos de los pacientes, personal sanitario y el público general que
lo requiriera.6970 Según estudios realizados en 2020, se confirma que ha afectado
en mayor medida a la salud mental de las mujeres que a la de los hombres. Entre los
motivos se encuentra el aumento de la violencia de género y su situación
socioeconómica más precaria. Buena parte de las mujeres trabajan en el sector de la
restauración y del turismo, de los más afectados por la pandemia, además de ser las
principales cuidadoras de personas enfermas, de niños y de personas de la tercera
edad.7172

El aislamiento ha provocado que muchos enfermos no puedan continuar con sus


tratamientos, agravando sus problemas de salud. En estos escenarios, las mujeres,
ya sean familiares o cuidadoras, suelen tener un papel fundamental.73

Epidemiología
En esta enfermedad se describe un "triángulo epidemiológico causal" que está
formado por: el medio ambiente, el agente etiológico (el virus SARS-CoV-2) y el
huésped.

Transmisión
Artículo principal: Transmisión de COVID-19
De persona a persona
Las rutas de transmisión de persona a persona del agente etiológico SARS-CoV-2
incluyen la transmisión directa por inhalación de microgotas y aerosoles liberadas
a través de tos, estornudos, la respiración, el habla, los gritos o el canto,227475
o por contacto de las manos con superficies contaminadas, que luego tocan las
membranas mucosas orales, nasales u oculares.76 También se puede transmitir a
través de la saliva, y posiblemente por la ruta fecal-oral.25

Un estudio con 2143 niños sugiere que este grupo de la población puede ser un
factor crítico en la rápida propagación de la enfermedad.77

La gente vacunada todavía puede transmitir la COVID, aunque es más difícil.78 Así
que los vacunados todavía deben realizar resoluciones preventivas (lavarse las
manos con jabón, ponerse mascarilla, mantener la distancia social, etc.) para que
la enfermedad no se propague, especialmente hacia gente vulnerable.

Persistencia en superficies
De acuerdo con los estudio publicados en las revistas científicas New England
Journal of Medicine (el 17 de marzo de 2020) y The Lancet Microbe (2 de abril), la
persistencia en las distintas superficies es la siguiente:79

Papel y pañuelos de papel**: 3 horas


Cobre: 4 horas
Cartón: 24 horas
Madera: 2 días
Tela: 2 días
Acero inoxidable: 2-3 días
Plástico de polipropileno: 3 días
Cristal: 4 días
Billetes: 4 días
La parte de fuera de una mascarilla: 7 días
(*) De 21º a 23º y a 40% de humedad relativa.
(**) A 71º y a 65% de humedad relativa.
La Organización Mundial de la Salud recomienda por este motivo que se desinfecten
las superficies, especialmente en el entorno sanitario. Fuera de este, el rol que
puede tener la transmisión por fómites es desconocido, pero menos importante que
cuando se produce por contacto estrecho con una persona infectada.80

Transmisión vertical
Actualmente, son muchos los estudios que se centran en evaluar la posible
transmisión vertical.81 Hasta el momento, las pruebas que se han realizado
descartan la presencia de SARS-CoV-2 en el líquido amniótico, en la sangre de
cordón umbilical y en la leche materna.81

Sin embargo, aún es muy temprano para saber con certeza si la transmisión vertical
puede presentarse o no, puesto que existen casos en los se ha demostrado la
presencia de anticuerpos en neonatos nacidos de madres portadoras del virus.81 Por
tanto, aunque es cierto que esta evidencia proviene de un número pequeño de casos,
esto demuestra aún más la posibilidad de transmisión vertical.81

En cuanto a la lactancia materna, no se ha conseguido evidenciar la presencia de


SARS-CoV-2 en la leche materna de pacientes infectadas.81 Por consiguiente, al no
existir riesgo de contagio a través de la leche materna, no se contraindica la
lactancia materna en las pacientes infectadas siempre que se tomen las medidas de
higiene necesarias, entre ellas, el lavado de manos y el uso correcto de la
mascarilla.81

Ritmo reproductivo R0
El número reproductivo R0 es el número promedio de nuevos contagios que una persona
infectada puede generar; cuanto mayor es este, mayor es el potencial pandémico de
una enfermedad. La Academia China de las Ciencias estimó en febrero de 2020 para la
COVID-19, un número reproductivo o R0=4, aunque existe incertidumbre sobre muchos
de los factores que se tomaron en consideración para calcular el R0. El Imperial
College de Londres calculó un R0=1,5 a 3,5.82

Paciente cero
Se llama caso índice o "paciente cero" al caso que da lugar a la atención del
investigador y origina acciones para conocer un foco de infección; corresponde al
primero caso confirmado por la autoridad sanitaria y conduce (indica) hacia un
brote localizado.838485

Paciente uno
A veces el primer caso de COVID-19 identificado por el sistema sanitario (caso
índice o paciente 0), no coincide con el caso que da origen a la epidemia. El "caso
índice auténtico" o "caso primario" sería el primero que inicia el brote
epidémico.86

Agente etiológico
Artículo principal: SARS-CoV-2
Video animado del virus SARS-CoV-2.
El agente causal del COVID-19 es el virus (SARS-CoV-2),1187 que es un tipo de
Orthocoronavirinae.611 Fue descubierto y aislado por primera vez en Wuhan, China,
tras provocar la epidemia de enfermedad por coronavirus de 2019-2020. Parece tener
un origen zoonótico, es decir, que pasó de un huésped animal (un murciélago) a uno
humano.88 El genoma del virus está formado por una sola cadena de ARN, y se
clasifica como virus ARN monocatenario positivo. Su secuencia genética se ha
aislado a partir de una muestra obtenida de un paciente afectado por neumonía en la
ciudad china de Wuhan.8990919293

Fisiopatología

Ciclo de multiplicación celular del SARS-CoV-2, virus causante de la enfermedad.

Diferencias entre la respuesta inmune leve y grave durante la infección por SARS-
CoV-2. Los casos leves y moderados muestran una respuesta controlada con mayor
expresión de IL-1β, IL-1RA, IL-2RA, IL-6, IL-7, IL-8, IL-9, IL-10, FGF básico, G-
CSF, GM-CSF, HGF, IFN-γ, IP-10, MCP-1, MIP-1a, MIP-1b, PDGF, TNF-α y VEGF. Por otra
parte, en los casos graves se ha observado un mecanismo inmunopatológico mediado
por un aumento de IL-2, IL-7, IL-17, IL-10, MCP-1, MIP-1a y TNF-α.94
El ARN del virus SARS-CoV-2 codifica 4 proteínas estructurales: la proteína S
(spike protein), la proteína E (envelope), la proteína M (membrane) y la proteína N
(nucleocapsid). La proteína N está en el interior del virión asociada al RNA viral,
y las otras cuatro proteínas están asociadas a la envoltura viral. La proteína S se
ensambla en homotrímeros, y forma estructuras que sobresalen de la envoltura del
virus. La proteína S contienen el dominio de unión al receptor celular y por lo
tanto es la proteína determinante del tropismo del virus y además es la proteína
que tiene la actividad de fusión de la membrana viral con la celular y de esta
manera permite liberar el genoma viral en el interior de la célula que va a
infectar.95

El SARS-CoV-2 penetra en la célula empleando como receptor a la enzima convertidora


de angiotensina 2 (ACE-2 por sus siglas en inglés), una exopeptidasa de membrana
presente fundamentalmente en el riñón, los pulmones y el corazón.96 Se ha observado
que los casos graves de COVID-19 presentan niveles de Angiotensina II muy altos. Y
el nivel de angiotensina II se ha correlacionado con la carga viral de SARS-CoV-2 y
el daño pulmonar. Este desequilibrio del sistema renina-angiotensina-aldosterona
podría estar en relación con la inhibición de la enzima convertidora de
angiotensina-2 por parte del virus. Este mismo mecanismo fue observado en el brote
producido por síndrome respiratorio agudo grave en 2003.95

La glicoproteína S de la envoltura del virus interacciona con el receptor celular


ECA2 (enzima convertidora de angiotensina 2), una proteína de la membrana celular
que cataliza la conversión de angiotensia I en el nonapéptido angiotensina 1-9 o de
angiotensia II en angiotensina 1-7. El virus entra por endocitosis. Una vez en el
endosoma ocurre una bajada de pH mediada por lisosomas, que promueve la fusión de
la membrana del endosoma con la envoltura del virus, lo que libera la nucleocápside
al citoplasma. Proteasas celulares degradan la cápside y el genoma del virus queda
libre en el citoplasma. A continuación, al ser un genoma ARN sentido positivo, la
maquinaria celular traduce directamente a poliproteínas que son procesadas y se
forma el complejo de replicación y transcripción. Luego se sintetiza la hebra
complementaria de ARN pre-genómico sentido negativo que servirá como molde para
replicar el genoma viral sentido positivo. Además, el complejo de replicación y
transcripción sintetizará a una serie de ARN subgenómicos sentido positivo, más
pequeños. Estos son los que se traducirán a las proteínas virales. Todo este
proceso ocurrirá en el citoplasma de la célula. Se irán sintetizando las proteínas
estructurales que se expresarán en la membrana del retículo endoplasmático. Ahí, en
el retículo, es donde ocurrirá el ensamblaje. De hecho la envoltura del virus
proviene de la membrana del retículo endoplasmático. La partícula viral viajará, a
través del sistema de transporte de vesículas celular en el que interviene el
aparato de Golgi, hasta la superficie. La partícula viral saldrá de la célula por
exocitosis. Tras una última fase de maduración, en la que intervienen proteasas
virales, todos los componentes del virus encajarán, la partícula será infecciosa y
podrá comenzar un nuevo ciclo celular.97

El virus puede pasar a través de las mucosas, especialmente la mucosa nasal y


laríngea, luego ingresa a los pulmones a través del tracto respiratorio. Entonces
el virus atacaría a los órganos objetivo que expresan ECA2, como los pulmones, el
corazón, el sistema renal y tracto gastrointestinal. El virus comienza un segundo
ataque, causando que la condición del paciente empeorar alrededor de 7 a 14 días
después del inicio. La reducción de linfocitos B puede ocurrir temprano en la
enfermedad, que puede afectar la producción de anticuerpos en el paciente. Además,
los factores inflamatorios asociados con las enfermedades que contienen
principalmente IL-6 aumentaron significativamente, lo que también contribuyó al
agravamiento de la enfermedad alrededor de 2 a 10 días después del inicio. El
espectro clínico de COVID-19 varía de formas asintomáticas98 a condiciones clínicas
caracterizadas por insuficiencia respiratoria severa que requiere ventilación
mecánica y apoyo en una unidad de cuidados intensivos (UCI), a manifestaciones en
varios órganos y sistemas produciendo sepsis, shock séptico y síndrome de
disfunción multiorgánica.95

El período de incubación, es decir el tiempo que transcurre desde que una persona
se infecta por el virus hasta que presenta síntomas, oscila en general entre los 4
y los 7 días, en el 95 % de las ocasiones es menor a 12.5 días. Los límites
extremos se han establecido entre 2 y 14 días después del contagio.99

A nivel inmunológico, se ha evidenciado niveles elevados de IL-6 y otras citoquinas


proinflamatorias en pacientes con COVID-19 grave. Esta observación, junto con otros
parámetros clínicos asociados a casos graves como linfopenia (disminución de
linfocitos en sangre) e hiperferritinemia ha llevado a hipotetizar que un subgrupo
de pacientes de COVID-19 puede sufrir un síndrome de liberación de citoquinas. El
síndrome de liberación de citoquinas (CRS por sus siglas en inglés), también
denominado tormenta de citoquinas, es un síndrome causado por una respuesta
inflamatoria sistémica mediada por citoquinas que puede desencadenarse por una
variedad de factores como infecciones y algunos medicamentos. Las citoquinas son
proteínas solubles que actúan sobre las células del sistema inmune y que regulan la
activación, proliferación y reclutamiento celular. El síndrome de liberación de
citoquinas se produce cuando se activan grandes cantidades de leucocitos
(neutrófilos, macrófagos y mastocitos) y liberan grandes cantidades de citoquinas
proinflamatorias. El CRS se describió inicialmente como un efecto adverso de
terapias con anticuerpos monoclonales, y es frecuente también en las terapias con
células CART (células T con receptor de antígeno quimérico). Las principales
citoquinas implicadas en la patogénesis del CRS incluyen la interleuquina (IL)-6,
la IL-10, el interferón (IFN), la proteína quimiotáctica de monocitos 1 (MCP1) y el
factor estimulante de las colonias de granulocitos-macrófagos (GM-CSF); otras
citoquinas como el factor de necrosis tumoral (TNF), IL-1, IL-2, IL-2-receptor- e
IL-8 también se han descrito durante el CRS. La patogénesis del CRS en pacientes
con COVID-19 es todavía desconocida. Sin embargo, las observaciones clínicas
apuntan a que cuando la repuesta inmune no es capaz de controlar eficazmente el
virus, como en personas mayores con un sistema inmune debilitado, el virus se
propagaría de forma más eficaz produciendo daño en el tejido pulmonar, lo que
activaría a los macrófagos y granulocitos y conduciría a la liberación masiva de
citoquinas proinflamatorias. Esta inflamación pulmonar aumentada estaría asociada
al síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA) que se ha descrito como la
principal causa de mortalidad por COVID-19.95

Respuesta en el embarazo

Hoy en día, son muchas las incógnitas acerca de la situación de las mujeres
embarazadas durante la pandemia del COVID-19. Debido a que son propensas a sufrir
complicaciones e infecciones graves por otros tipos de coronavirus, se les ha
considerado como grupo de riesgo y aconsejado que tomen una serie de medidas
preventivas adicionales.100

Algunas de las respuestas en el embarazo pueden ser:

- Inmunológica: Al igual que a la de otros virus, la respuesta inmunitaria a la


COVID-19 dependerá de si se dispone de un sistema inmunitario sano. Este se adapta
durante el embarazo para permitir el desarrollo de un feto cuya carga genética solo
comparte a medias con su madre, lo que conlleva a una reacción inmunitaria
diferente frente a las infecciones durante la etapa del embarazo.100

- Respiratoria: Existen numerosos factores que aumentan la vulnerabilidad de las


embarazadas a las infecciones respiratorias graves. Dos ejemplos de ello pueden ser
la disminución de la capacidad pulmonar y la incapacidad de eliminar las
secreciones.101

- Coagulación: Durante el embarazo, los niveles de coagulación en el sistema


circulatorio son elevados, y la patogénesis del SARS-CoV-2 puede guardar una
relación con ello. Los eventos tromboembólicos con mortalidad asociada son un
riesgo para las embarazadas.100

Sin embargo, partiendo de la base de las pruebas actuales, es difícil sacar


conclusiones definitivas sobre si las embarazadas corren un mayor riesgo de sufrir
consecuencias graves debido a este virus.100

Además, otros ensayos clínicos han demostrado que el SARS-CoV-2 puede afectar al
periodo del embarazo de diferentes formas. Por un lado, no existen muchas
evidencias acerca de su impacto durante las 12 primeras semanas de gestación. Por
otro lado, la infección por la COVID-19 puede ocasionar consecuencias negativas
durante el periodo de embarazo. Algunos ejemplos de ello pueden ser la restricción
del crecimiento del feto, el nacimiento prematuro y la mortalidad perinatal, es
decir, la muerte del feto después de las 22 o 28 semanas completas de embarazo, así
como a la muerte de niños recién nacidos con 7 días de vida.101

Signos y síntomas
Las personas infectadas pueden estar asintomáticas o presentar un cortejo de
síntomas que oscilan desde leves a muy graves, entre ellos fiebre, disnea102103104
y tos seca.13La COVID-19 afecta de distintas maneras en función de cada persona. La
mayoría de las personas que se contagian presentan síntomas de intensidad leve o
moderada, y se recuperan sin necesidad de hospitalización. La diarrea y otros
síntomas de rinofaringe, como estornudos, rinorrea y dolor de garganta, son menos
frecuentes.105 Aunque las personas de avanzada edad son más vulnerables a la
enfermedad, a mitad de marzo de 2020, la OMS recordó que los jóvenes también pueden
tener complicaciones e incluso llegar a la muerte por el virus.106

Los síntomas de la COVID-19 son inespecíficos y su presentación, según la OMS,


puede incluso carecer de síntomas (asintomático). En base a una muestra estadística
de 55 924 casos confirmados por laboratorio, la frecuencia de presentación de los
síntomas en la población china era la del cuadro adjunto.1

Síntomas.1

Rojeces parecidas a los sabañones que resultan ser un síntoma de la COVID-19 y que
aparece, sobre todo, en niños y adolescentes con leves o ningún síntoma.107

Exantema pruriginoso en COVID. Mujer de 61 años. Se observan pequeñas máculas


eritematosas.
Síntoma presente:
Fiebre 87,9
Tos seca 67,7
Fatiga 38,1
Producción de esputo 33,4
Disnea (dificultad respiratoria) 18,6
Dolor muscular o dolor en las articulaciones 14,8
Dolor de garganta 13,9
Dolor de cabeza 13,6
Escalofríos 11,4
Náuseas o vómitos 5,0
Congestión nasal 4,8
Diarrea 3,7
Hemoptisis 0,9
Congestión conjuntival 0,8
Hipoxia silenciosa108 ?
*(Hasta el 20 de febrero de 2020 y en base a 55 924 casos confirmados por
laboratorio).1

Se ha informado de la pérdida completa del olfato (anosmia) en un 80 % de los


diagnosticados, llegando a 88 % los que presentan algún grado de alteración en el
gusto.109 Otros han registrado la pérdida súbita del olfato y el gusto de forma
menos frecuente (sin que la mucosidad fuese la causa).110111

Al principio se informó que los síntomas incluían fiebre en el 90 % de los casos,


malestar y tos seca en el 80 % de los casos, y dificultades respiratorias en el 20
% de los casos.42112113114

La revista The Lancet publicó el 24 de enero de 2020 un estudio de los primeros 41


casos de pacientes ingresados (en hospital de Wuhan) con el diagnóstico confirmado,
desde el 16 de diciembre de 2019 al 2 de enero de 2020.105 De ellos, menos de la
mitad tenían enfermedades subyacentes, entre ellas diabetes, hipertensión y
enfermedad cardiovascular. Los síntomas comunes al inicio de la enfermedad fueron
fiebre, tos seca y mialgias o fatiga; los síntomas menos comunes fueron la
producción de esputo, cefalea, hemoptisis y diarrea. La disnea se desarrolló en 22
de 40 pacientes (55 %), con una mediana del tiempo desde el inicio de la enfermedad
hasta la disnea de ocho días. Presentaron linfopenia 26 de 41 pacientes (63 %).
Todos los pacientes tuvieron neumonía con hallazgos anormales en la TC de tórax.115

Algunos de los infectados pueden ser asintomáticos y mostrar resultados de la


prueba que confirman la infección, pero no muestran síntomas clínicos, por lo que
los investigadores han emitido consejos de que las personas con contacto cercano
con los pacientes infectados confirmados deben ser monitoreadas y examinadas de
cerca para descartar la infección.116 Se han descrito alteraciones cutáneas
asociadas a COVID-19.117

Complicaciones
Las complicaciones incluían el síndrome de dificultad respiratoria aguda (resultado
positivo para RT-PCR en tiempo real en la muestra de plasma), lesión cardíaca
aguda, e infección secundaria. En un estudio de serie de casos publicado en enero
de 2020, de 41 pacientes ingresados en un hospital en Wuhan por COVID-19, 13 fueron
ingresados en una UCI (32 %) y seis murieron (15 %). En un comentario clínico de la
misma revista, se presenta una comparación de la presentación clínica frente a
otros coronavirus emergentes (SARS y MERS); entre otros datos clínicos en los casos
estudiados por el momento, cabe destacar que los síntomas de las vías respiratorias
superiores son notablemente infrecuentes (por ejemplo, ningún paciente presentaba
dolor de garganta).115

Hay que mencionar que la COVID-19 ha tenido consecuencias más graves en los hombres
que en las mujeres debido a diferencias biológicas: el sistema inmunitario de la
mujer es más potente, algunas enfermedades crónicas son más frecuentes en hombres,
etc.71Las complicaciones más frecuentes son neumonía y fallo multiorgánico que en
ocasiones provocan la muerte.42118 En el caso de las mujeres embarazadas, resulta
importante destacar que, según los Centros para el Control y Prevención de
Enfermedades, las mujeres embarazadas tienen mayor riesgo de enfermarse gravemente
a causa de la COVID-19.81 Esto se debe a que las mujeres embarazadas que tienen la
COVID-19 parecen tener más probabilidad de desarrollar complicaciones respiratorias
y obstétricas que pueden provocar un aborto espontáneo, un parto prematuro y una
restricción del crecimiento intrauterino (RCIU).81

La investigación clínica encontró que se detecta una alta concentración de


citoquinas en el plasma de pacientes críticos infectados con SARS-CoV-2, lo que
sugiere que la tormenta de citocinas se asociaba con la gravedad de la
enfermedad.119

Además, el COVID-19 puede predisponer a la enfermedad tromboembólica arterial y


venosa debido a la inflamación excesiva, hipoxia, inmovilización y coagulación
intravascular diseminada (CID). Sorprendentemente, las complicaciones trombóticas
apenas se han descrito. El conocimiento preciso de la aparición de complicaciones
trombóticas en pacientes con COVID-19 es importante para la toma de decisiones con
respecto a la intensidad de la tromboprofilaxis, especialmente en pacientes
ingresados en la unidad de cuidados intensivos (UCI) que tienen un riesgo
trombótico más alto. En un estudio publicado el 11 de abril de 2020, se evidenció
que había un 31 % de complicaciones trombóticas en pacientes con COVID-19
hospitalizados en UCI.120 Frecuentemente se dan secuelas en forma de deterioro
físico, cognitivo y psicológico en pacientes de COVID-19 que han pasado por UCI,
que reciben a menudo tratamiento rehabilitador.121

Predispone a complicaciones en pacientes con fibrilación auricular122

Pronóstico
De entre los 41 primeros casos de COVID-19 que fueron tratados en hospitales de
Wuhan, trece (32 %) necesitaron cuidados intensivos y seis (15 %) murieron.105
Muchos de los que fallecieron presentaban patologías previas como hipertensión
arterial, diabetes o enfermedad cardiovascular que debilitaban sus sistemas
inmunológicos.123

En estos casos tempranos que acabaron en fallecimiento, la mediana de la duración


de la enfermedad fue de catorce días y el rango total fue de 6 a 41 días.124 De los
casos confirmados, 80,9 % fueron clasificados como casos leves.12592

Tasa de letalidad
Según un estudio de los fallecimientos por COVID-19 en la provincia china de Hubei,
sobre un total de 72 314 registros de pacientes, 44 672 (61,8 %) fueron confirmados
como casos de COVID-19. Entre ellos se registraron 1023 muertes, lo que supone un
índice de mortalidad del 2,3 %.125 Este dato, sin embargo, puede ser una
sobreestimación de la mortalidad real debido a que muchas personas pueden haber
sido infectados, pero no presentar síntomas, y por tanto no haber sido
contabilizados. Otros estudios indican que la mortalidad aparente fue mayor en las
primeras etapas del brote (17,3 % para casos sintomáticos entre el 1 y 10 de
enero), y que se fue reduciendo con el tiempo a 0,7 % para pacientes con aparición
de síntomas después del 1 de febrero de 2020.1

Corea del Sur, que es el único país del mundo donde se realizaron desde el
principio de la pandemia, análisis sistemáticos de grandes conjuntos de población
(unos 10 000 al día, con 210 000 contabilizados hasta el 10 de marzo), se constató
una tasa de mortalidad mucho más baja.126

Al 3 de marzo de 2020 a nivel global, 3 110 de los 90 892 casos comunicados de


COVID-19 habían muerto (3,4 %), según cifras indicadas por el director de la
OMS.127128

Diferencia entre sexos y géneros


Según datos mundiales, en la mayoría de los países, las tasas de mortalidad por
COVID-19 son más altas en hombres que en mujeres. Sin embargo, en algunos países
como la India, Nepal, Vietnam y Eslovenia son más altas en mujeres (llegando
incluso al 3,5 % en algunos países).129

Por ejemplo, en el primer país que se ha mencionado (en donde se había registrado
un total 6,4 millones de casos ya el 30 de septiembre de 2020), la tasa de
letalidad es mayor en mujeres (un 3,3 % de mujeres frente a un 2,9 % de hombres),
puesto que existe cierta desigualdad de género para acceder a la sanidad. No
obstante, los datos son ambiguos y hay otros aspectos que se deben tener en cuenta,
a saber: el menor grado de envejecimiento de la población femenina hace que las
mujeres sean menos propensas a fallecer, pero el escaso número de pruebas no
proporciona datos definitivos (se estima que el rango de mortalidad es elevado
especialmente en mujeres de entre 40 y 49 años). La ignorancia respecto a la COVID-
19 todavía se hace presente en numerosos ámbitos. Es primordial que se realicen
estudios respecto a la edad, el nivel socioeconómico y la raza de cada persona con
el fin de que se tomen medidas contundentes y efectivas para diferenciar
definitivamente los aspectos biológicos de los ambientales.129

Efecto según edad y patologías previas


En Italia al 31 de marzo de 2020, se constató que la edad mediana de los fallecidos
por COVID-19 fue de 79 años. El 69 % de los fallecidos eran hombres y solo un 2 %
se encontraba con buena salud (es decir, ausencia de patologías previas) antes de
la infección.130

En China se observó también que la mortalidad aumentaba con la edad y es más alta
entre los hombres que en las mujeres (4,7 % frente al 2,8 %). Mientras que los
pacientes sin patologías previas tenían una tasa de mortalidad del 1,4 %, aquellos
que sí tenían fallecían a tasas mucho más altas: 13,2 % para enfermedades
cardiovasculares, 9,2 % para diabetes, 8,4 % para hipertensión, 8,0 % para
enfermedad respiratoria crónica y 7,6 % para cáncer.1

En un estudio publicado en línea en la revista Pediatrics, unos investigadores


analizaron 2 143 casos de niños menores de 18 años que fueron comunicados al CCDC
hasta el 8 de febrero de 2020. Aproximadamente la mitad de los niños tenían
síntomas leves, como fiebre, fatiga, tos seca, congestión y posiblemente náuseas o
diarrea. Alrededor del 39 % se enfermó moderadamente, con síntomas adicionales que
incluyen neumonía o problemas pulmonares revelados por la tomografía computarizada,
pero sin dificultad respiratoria evidente. Cerca del 4 % no tenía síntomas en
absoluto. Pero 125 niños, casi el 6 %, desarrollaron una enfermedad muy grave y un
niño de 14 años con infección confirmada por coronavirus murió. Trece de ellos
fueron considerados «críticos», al borde de la insuficiencia respiratoria u
orgánica. Los otros fueron clasificados como «graves» porque tenían problemas
respiratorios graves. Más del 60 % de los 125 niños que se enfermaron gravemente o
tuvieron una enfermedad crítica, tenían 5 años o menos. Cuarenta de ellos eran
infantes, menores de 12 meses.77

Cabe destacar que, aunque el mayor riesgo de desarrollar enfermedad grave por
COVID-19 recae sobre personas de mayor edad, según estudios publicado en la revista
Nature, la probabilidad de desarrollar COVID crítico como consecuencia de
susceptibilidad genética es mayor en individuos menores de 60 años.131

Por tanto, los efectos de la pandemia tienen mayor repercusión en los grupos de
personas de edad avanzada y especialmente en las mujeres siendo la tasa de
contagios mayor entre mujeres, aunque el virus es más letal en los hombres. Así
mismo, el COVID persistente es más frecuente en mujeres132
Uno de los factores puede ser que los cuidados suelen recaer en las mujeres, y, por
lo tanto, su exposición al virus es mayor que en el caso de los hombres. Además,
dentro de la familia, los cuidados de las personas dependientes suelen recaer
también en las mujeres. Entre sanitarios, el porcentaje de contagios también es
mayor en mujeres (66%)

Según la OMS, en situaciones similares con otros virus, las mujeres también han
alcanzado un mayor índice de contagios. En el caso de los hombres, la OMS también
sugiere que estos tienen mayor riesgo de exposición en el ámbito laboral, mientras
que las mujeres son más propensas a contagiarse en las actividades diarias, tal y
como se indica anteriormente.

Conviene resaltar en este punto la cuestión de las residencias de mayores. La


mayoría de personas en las residencias son mujeres, que a su vez son atendidas
habitualmente por mujeres. Atendiendo a los datos del IMSERSO, las mujeres
representan el 70,4% de las personas que viven en residencias, por un 29,6% de
hombres.73

En conclusión, es necesario incorporar a las personas mayores al debate, para que


se haga efectiva la igualdad y se integre una mirada de género transversal que
incluya todos los ámbitos de participación social.

Aunque en China hay mayor número de casos en hombres, en otros países asiáticos
como Corea del Sur, hay mayor número de casos en mujeres. Además, hay otros países
como España y Bélgica que registran un número desigual entre hombres y mujeres
durante toda la pandemia. Al principio había más casos en hombres que en mujer,
pero a partir del 31 marzo se empezaron a igualar133 Sin embargo las mujeres son
menos susceptibles a las enfermedades víricas gracias a sus disposiciones
genéticas, los cromosomas X y hormonas sexuales.133 Por lo que, la mayoría de casos
reside en los hombres, según los datos recogido el 5 abril.133 Así, podemos ver
diferentes síntomas de COVID entre hombres y mujeres, manifestándose en hombres
mediante fiebre, disnea, neumonía, síndrome de distrés respiratorio agudo y fallo
renal ; mientras que en las mujeres, dolor de garganta, vómitos y diarrea133

Otra de las diferencias de género más importantes es la desigualdad en el trabajo


entre hombres y mujeres. En este caso, hay un mayor número de mujeres confinadas,
puesto que se encargan de trabajos como el cuidado de personas mayores o en los que
están más en contacto con los pacientes en los hospitales, ya que se registra un
mayor número de enfermeras que enfermeros. Además, aunque se registre un caso mayor
de hombres fallecidos y hospitalizados, hay una gran cantidad de casos no
registrados, como por ejemplo en las residencias, que podrían tratarse de muertes
de diferentes mujeres.133

Efecto socio-económico
Cabe destacar el análisis de las consecuencias socioeconómicas de la pandemia del
coronavirus desde una perspectiva de género. Las mujeres son las más afectadas en
el plano laboral y, como consecuencia, en el plano social.134 Se puede afirmar que
durante el primer confinamiento a nivel casi mundial las tareas del hogar
aumentaron en gran medida recayendo estas en las mujeres mayoritariamente, el 78,7
% de las mujeres europeas realizan las tareas del hogar, mientras que sólo un 33,7%
de hombres se encargan de esto.135 A esto le sumamos que debido al teletrabajo y
demanda de trabajos a tiempo parcial ha aumentado y está más solicitado por mujeres
que tienen que cuidar de sus hijos y hacer las tareas domésticas al mismo tiempo.
Así pues, las mujeres se enfrentan a una carga triple de trabajo que puede agravar
las desigualdades preexistentes.134

El sector del servicio, así como los trabajos de cara al público o en primera línea
contra la lucha del coronavirus son los más afectados en esta crisis, unos sectores
compuestos por un mayor número de mujeres que de hombres por lo que son estas las
que tienen que afrontar más pérdidas de empleo.134Sumándole que en los trabajos a
tiempo parcial se gana menos que en los de tiempo completo, una de las
consecuencias más graves en el plano socioeconómico es el aumento de la brecha
salarial que en términos globales constituye un 23% entre hombres y mujeres.136134

La situación de vulnerabilidad estructural del colectivo LGTBI también ha


incrementado a raíz de la pandemia. Las medidas en la economía han afectado
especialmente a este colectivo debido a que un elevado número de personas LGTBI
trabajan en sectores en los que las restricciones de contención del virus han
supuesto la pérdida de numerosos puestos de trabajo, y dependen en muchos casos de
fuentes de ingresos informales.137138

Por otro lado, la pandemia ha afectado a la salud mental, social y sexual de las
personas LGTBI por varios motivos. El cierre de locales y espacios de ocio
dirigidos al colectivo ha ocasionado una pérdida significativa de espacios de
socialización seguros para las personas LGTBI. Además, las medidas de aislamiento
han causado que muchas personas del colectivo hayan tenido que estar encerradas en
situaciones de hostilidad, con familiares u otros convivientes que no aceptan su
condición sexual e identidad,139 generando así situaciones de violencia psicológica
e incluso física,139 con evidentes consecuencias emocionales y de salud mental,
entre las que se encuentran un aumento o empeoramiento de trastornos de ansiedad y
depresión. Además, este tipo de medidas han agravado a situación de soledad en
miembros de la comunidad, particularmente en personas mayores LGTBI, ya que
frecuentemente viven solas y no tienen relaciones positivas con sus familias.140

Además, varios organismos de defensa de los derechos humanos (Human Rights Watch,
Amnistía Internacional, IESOGI) apelan al hecho de que varios gobiernos han hecho
uso del contexto de pandemia para criminalizar y demonizar a miembros de minorías
como el colectivo LGTBI.138 Estas personas han sufrido las consecuencias de la
promulgación de discursos de odio que las señalan como el foco de transmisión de la
enfermedad, e incluso, en casos más extremos, como responsables de la misma.138
Asimismo, la pandemia ha causado que la entrada en vigor de derechos para la
población LGTBI se haya aplazado o en algunos casos detenido.138

Inmunidad

Componentes de la respuesta del Sistema de inmunidad adquirida frente al SARS-CoV-2

Respuesta inmune frente al SARS-CoV-2


La respuesta inmunitaria natural de los seres humanos al virus SARS-CoV-2 se
produce como una combinación de la inmunidad mediada por células y la producción de
anticuerpos,141 igual que con casi todas las otras infecciones.142 Las células B
interactúan con las células T y comienzan a dividirse antes de la selección en la
célula plasmática, en parte sobre la base de su afinidad por el antígeno. La
presencia de anticuerpos neutralizantes en la sangre se considera una prueba de
inmunidad contra la infección, pero el nivel de anticuerpos neutralizantes
disminuye con el tiempo, llegando a desaparecer tras tres meses en el 1% de los
pacientes y tras seis meses en el 12%.143 Sin embargo, la ausencia de anticuerpos
en la sangre no significa que el sistema inmunitario no pueda producir nuevos
anticuerpos rápidamente en caso de reexposición al SARS-CoV-2. Las células B de
memoria específicas para las proteínas de la nucleocápside y el pico del SARS-CoV-2
duran al menos 6 meses después de la aparición de los síntomas.

Dado que el SARS-CoV-2 ha estado en la población humana solo desde diciembre de


2019, al principio de la pandemia se desconocía si la inmunidad era duradera en las
personas que se recuperan de la enfermedad. Se reportaron casos de reinfección en
pacientes que ya habían pasado la enfermedad y se temía que el SARS-CoV-2 se
comportase como algunos otros coronavirus, que son capaces de reinfectar después de
aproximadamente un año.144

En un estudio de enero de 2021 se encontró que la mayoría de los pacientes


infectados por el virus SARS-CoV-2 quedan inmunizados durante al menos cinco meses,
teniendo una probabilidad mucho más baja (el 83%) de infectarse de nuevo que
aquellos que no habían estado expuestos previamente al virus. Además, en caso de
reinfección los previamente infectados solían no presentar síntomas (78% de los
casos) mientras que la ausencia de síntomas solo se dio en un 34% de los no
infectados previamente.145146 En un estudio de marzo de 2021 se observó que solo un
0,65% de los pacientes infectados por SARS-CoV-2 volvieron a dar positivo en PCR al
menos tres meses más tarde y que ninguno se infectó una tercera vez. Se estima que
haber sido infectado reduce, de media, un 80% la probabilidad de infectarse una
segunda vez y que la protección dura al menos seis meses.147148 En otro estudio
publicado en mayo de 2021, se concluyó que la inmunidad natural contra el SARS-CoV-
2 dura años, probablemente toda la vida, incluso en personas que tuvieron síntomas
leves de covid o no tuvieron cuando fueron infectados.149150151152 Ello se debe a
la acción tanto de las células B como de las células plasmáticas de médula ósea de
larga vida.

En total, se estima que haber contraído el virus proporciona una inmunización


natural contra los síntomas de COVID-19 del 94%. Esta cifra es comparable a la que
se anunció inicialmente para las mejores vacunas. No obstante, al igual que las
vacunas, haber pasado el virus no garantiza que una persona no pueda volver a
contraerlo y a contagiarlo, por lo cual las autoridades sanitarias recomiendan que
todos los previamente infectados sigan aplicando los métodos de prevención
habituales.153

Un estudio israelí publicado en agosto de 2021 muestra que la inmunidad natural es


en realidad más robusta y más duradera que la obtenida mediante vacunación.154

Sistema inmune humoral humana frente a la infección por SARS-CoV-2


La inmunidad innata frente al SARS-CoV-2 se utilizan principalmente por macrófagos
y Células NK,en la inmunidad celular se utiliza por células dendriticas,linfocitos
T CD4+ y linfocito T CD8+, y también en la inmunidad humoral la primera línea de
defensa se utiliza la IgM y después la IgG, las citocinas implicadas en la
inmunidad es el balance entre proinflamatorio y antiinflamatorio (IL-1β, IL-1RA,
IL-2RA, IL-6, IL-7, IL-8, IL-9, IL-10, FGF básico, G-CSF, GM-CSF, HGF, Interferón
gamma, IP-10,MCP-1, MIP-1a, MIP-1b,PDGF, TNF-α, VEGF y TGF-beta), la duración es
alrededor de 2 semanas.155156157158 La presencia de algunas variantes en loci de
las secuencias del gen del interferón reduce la inmunidad natural y estimula la
susceptibilidad a enfermedades virales graves, incluida la COVID-19.159160

Diagnóstico
Detección de la infección
Esta sección es un extracto de Pruebas de COVID-19.[editar]

CDC 2019-Coronavirus (2019-nCoV) Panel de diagnóstico de transcriptasa inversa (RT)


en tiempo real -CRP.
Las pruebas de laboratorio para el diagnóstico de la COVID-19 (enfermedad causada
por el SARS-CoV-2) incluyen los métodos que detectan la presencia del propio virus
y aquellos que detectan los anticuerpos producidos por el cuerpo humano en
respuesta a la infección. Los tres tipos principales son:161

Pruebas moleculares,162 como la reacción en cadena de la polimerasa con


transcripción inversa (RT-PCR) en tiempo real. Es la prueba de referencia para
detectar la presencia del virus SARS-CoV-2. Esta metodología consiste en la
purificación del material genético (ARN) del virus a partir de la muestra y su
posterior detección por medio de la RT-PCR. Este tipo de análisis generalmente se
realiza en laboratorios de diagnóstico de alta complejidad equipados con
infraestructura y equipamiento requerido para realizar técnicas de biología
molecular. Si bien cuenta con una alta sensibilidad y especificidad, el
procesamiento de muestras y en consecuencia la emisión del resultado puede tardar
varias horas. La RT-PCR da positivo durante varias semanas después de la primera
infección (30 días de media, según algunos estudios),163 ya que detecta la
presencia del ARN del virus, aunque este ya no sea viable y el paciente haya
superado la infección y ya no sea contagioso.164 Entre los test moleculares también
se encuentra la amplificación mediada por transcripción (ATM). Los resultados
pueden tardar menos de 3,5 horas.165
La prueba de antígenos (RAT, por sus siglas en inglés) detecta el virus no por su
ARN, sino por algunas proteínas de su cubierta. Es más rápida y barata que la
PCR.166167
Las pruebas de serología no detectan la presencia del virus, sino de los
anticuerpos generados por el sistema inmunológico después de la infección, los
cuales persisten en el cuerpo entre pocas semanas y varios meses, quizás años. Por
lo tanto, son útiles para estudios epidemiológicos pero no son confiables para
identificar si una persona está infectada en ese momento.168
Debido a la complejidad y coste de las pruebas PCR, en los primeros meses de la
pandemia casi ningún país dispuso de datos confiables sobre la prevalencia del
virus en su población.169 Esta variabilidad también afectó las tasas de mortalidad
reportadas.

Las diferentes autoridades sanitarias han adoptado protocolos de prueba variados,


que incluyen a quién evaluar, con qué frecuencia, protocolos de análisis,
recolección de muestras y los usos de los resultados de las pruebas.170 Esta
variabilidad probablemente ha impactado significativamente en las estadísticas
informadas, incluidos los números de casos y pruebas, las tasas de mortalidad y la
demografía de los casos.
Diagnóstico sintomático

Imagen por tomografía computarizada de una neumonía en ambos pulmones provocada por
la COVID-19.
La radiología torácica (bien por radiografía, tomografía computerizada o ecografía)
puede ayudar al diagnóstico de COVID-19 e identificar o descartar complicaciones
pulmonares.171

Prevención

Impedir un pico agudo de infecciones, lo que se conoce como achatar la curva de


epidemia, reduce el riesgo de colapso de los sistemas de salud y proporciona más
tiempo para el desarrollo de un tratamiento o de una vacuna.172173
Manejo del brote
Una parte clave de las actuaciones en un brote de enfermedad infecciosa es tratar
de disminuir el pico epidémico, conocido como aplanamiento de la curva epidémica.
Esto ayuda a disminuir el riesgo de que los servicios de salud se vean sobrepasados
y proporciona más tiempo para desarrollar una vacuna y un tratamiento. El
distanciamiento social y el aislamiento de las poblaciones infectadas pueden
contener la epidemia.174

Medidas preventivas
Métodos de prevención del COVID-19.
Algunas organizaciones internacionales, como la OMS, han publicado medidas
preventivas para reducir la transmisión del virus. Son similares a las que se han
recomendado para prevenir la infección por otros coronavirus e incluyen:

Si va a estornudar siga estas recomendaciones.


Lavarse frecuentemente las manos con agua y jabón.
Al toser o estornudar, cubrirse la boca y la nariz con la sangría o fosa cubital
(la concavidad que forma la cara interna del brazo al flexionarlo por el codo).
Mantener al menos un metro de distancia de otras personas, «particularmente
aquellas que tosan, estornuden y tengan fiebre».
Utilizar mascarillas faciales.175
Evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca.
Ir al médico en caso de fiebre, tos y dificultad para respirar, llamando con
antelación si se encuentra en zonas donde se está propagando el virus o si se las
han visitado en los últimos 14 días.
Permanecer en casa si empieza a encontrarse mal, aunque se trate de síntomas leves
como cefalea y rinorrea leve, hasta que se recupere si se encuentra en zonas donde
se está propagando el virus o si se han visitado en los últimos 14 días.29
Para reducir las posibilidades de infectarse, las organizaciones sanitarias
recomiendan evitar el contacto cercano con personas enfermas; lavarse las manos
frecuentemente con agua y jabón; no tocarse los ojos, la nariz o la boca con las
manos sin lavar; y practicar una buena higiene respiratoria.17629

A las personas que ya estén infectadas, se les recomienda que se queden en casa,
excepto para recibir atención médica, llamar con antelación antes de visitar a un
proveedor de atención médica, usar una mascarilla facial (especialmente en
público), tapar la tos y los estornudos con un pañuelo desechable, lavarse las
manos regularmente con agua y jabón, y evitar compartir artículos personales del
hogar.177 Dependiendo de la legislación de cada país, el contagio intencionado del
virus está penado de acuerdo al ordenamiento jurídico de donde ocurra el hecho.178

El gobierno de Hong Kong advirtió a cualquiera que viaje fuera de la ciudad que no
toque animales; no coma carne de caza; y evite visitar mercados húmedos, mercados
de aves vivas y granjas.179 No hay evidencia de que las mascotas, como perros y
gatos, puedan infectarse.180 El gobierno de China ha prohibido el comercio y el
consumo de animales salvajes.181

Para los proveedores de atención médica que cuidan a alguien que pueda estar
infectado, se recomiendan precauciones estándar, precauciones de contacto y
precauciones contra los virus transmitidos por el aire así como llevar protección
ocular.182

Lavado de manos
Artículo principal: Lavado de manos
Cómo lavarse las manos
Se recomienda lavarse las manos para evitar la propagación del coronavirus. Los CDC
recomiendan:176

Lavarse las manos a menudo con agua y jabón durante al menos 20 segundos,
especialmente después de ir al baño; antes de comer; y después de sonarse la nariz,
toser o estornudar.
Si no hay agua y jabón disponibles, usar un desinfectante de manos a base de
alcohol con al menos un 60 % de concentración. Siempre lavarse las manos con agua y
jabón si las manos están visiblemente sucias.
Las personas deben evitar tocarse los ojos, la nariz o la boca con las manos sin
lavar.29

El SARS-CoV-2 puede sobrevivir y permanecer contagioso en superficies inanimadas


como metal, vidrio o plástico por varios días. Los métodos para eliminar el virus
de las superficies incluyen desinfectantes a base de cloro, etanol al 75 %, ácido
peracético y cloroformo.180

Higiene respiratoria y mascarillas

Personas que llevan máscaras quirúrgicas en Guangzhou.


Póster sobre 'Estilos de pelo en la cara y respiradores con máscara filtrante'
publicado por los Centros para el Control de Enfermedades de EE.UU.
Las organizaciones de salud recomiendan cubrirse la boca y la nariz con el codo
flexionado al toser o estornudar o cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo
desechable (que luego debe desecharse de inmediato) y a continuación lavarse las
manos con un desinfectante de manos a base de alcohol o con agua y jabón.29183

Los gobiernos han ordenado el uso general de mascarillas para contener la pandemia.
Las máscarillas benefician la salud pública al reducir los contagios.

Aquellos que sospechan que están infectados deben llamar a un médico para recibir
asesoramiento y usar una mascarilla (especialmente cuando están con más gente).179
184 Las máscaras limitan el volumen y la distancia de viaje de las gotas
respiratorias dispersas al hablar, estornudar y toser. No obstante, varios estudios
han concluido que, dado que las mascarillas están diseñadas según los rasgos
prototípicos masculinos, no suelen adaptarse bien a la cara de las mujeres, lo que
las deja más expuesta al virus.185

Si no hay una máscara disponible, cualquier persona que experimente síntomas


respiratorios debe cubrirse con un pañuelo al toser o estornudar, desecharlo
rápidamente en la basura y lavarse las manos. Si no está disponible un tejido, las
personas pueden cubrirse la boca o la nariz con el codo flexionado.29

Las máscaras también se recomiendan para quienes cuidan a alguien que pueda tener
la enfermedad.184 Enjuagar la nariz, hacer gárgaras con enjuague bucal y comer ajo
no son métodos efectivos.180 Algunos estudios han demostrado la eficacia de los
enjugues bucales en la reducción del SARS Cov-2.186

Mascarillas con válvula de salida. Sus válvulas expulsan el aire sin filtrar,
pudiendo así transmitir el virus.
La OMS aconseja usar las mascarillas así:184

Coloque la máscara con cuidado para cubrir la boca y la nariz y átela de forma
segura para minimizar cualquier espacio entre la cara y la máscara; mientras esté
en uso, evite tocar la máscara;
Quítese la máscara usando la técnica apropiada (es decir, no toque la parte
delantera sino que quite el encaje por detrás);
Después de retirarla o cada vez que toque inadvertidamente una máscara usada,
limpie las manos con un desinfectante para manos a base de alcohol o jabón y agua
si está visiblemente sucia;
Reemplace las máscaras con una nueva máscara limpia y seca tan pronto como se
humedezcan;
No reutilice máscaras de un solo uso; deseche las máscaras de un solo uso después
de cada uso y deséchelas inmediatamente después de retirarlas.
Las máscarillas normales buscan principalmente reducir la propagación de la
enfermedad evitando contagiar a otros, así que pueden dar una falsa sensación de
seguridad a quienes las lleven. En cambio, los respiradores certificados también
dan una gran protección a su portador.

Se recomienda a los profesionales de la salud que interactúan directamente con


personas que tienen la enfermedad que usen respiradores con una protección tan alta
como el grado N95 certificado por NIOSH, o el grado FFP2 de la UE, o equivalente,
además de otros posibles equipos de protección personal.184187

Hay mascarillas que llevan alguna válvula de exhalación (es decir, de salida), la
cual expulsa el aire de la respiración sin filtrar. Si su portador está infectado
(y puede estarlo sin saberlo), transmitiría el virus a través de la válvula,
incluso estando la mascarilla certificada. Así que las mascarillas con válvula de
salida no están recomendadas para controlar la pandemia.

Las máscaras quirúrgicas (normales) son utilizadas desde hace tiempo por personas
sanas en Hong Kong,188 Japón,189 Singapur190191 y Malasia.192

Autoaislamiento

Transmisión del Covid y la reducción por distanciamiento social.


Además de la guía mencionada anteriormente sobre el lavado de manos y la higiene
respiratoria, los organismos de salud pública aconsejan que las personas enfermas
que sospechan que pueden tener COVID-19 deben restringir las actividades fuera del
hogar, excepto para obtener atención médica:177193194

No ir al trabajo, la escuela o las áreas públicas. Evitar el uso de transporte


público, viajes compartidos o taxis.
Llamar con antelación antes de visitar a un médico.
Separarse de otras personas y animales en el hogar; no compartir artículos
personales; usar un baño separado si está disponible.
Usar un limpiador doméstico para limpiar todas las superficies que se tocan con
frecuencia (mostradores, inodoros, perillas de puertas, etc.) todos los días.
Medidas de prevención recomendadas por la OMS incluyen el lavado regular de manos
con agua y jabón, cubrirse la boca y la nariz con el codo flexionado cuando se va a
toser o estornudar y evitar el contacto directo con personas que muestren síntomas
de enfermedad respiratoria sin medidas de protección adecuadas.29195 Además se ha
recomendado evitar el contacto con animales, tanto vivos como muertos, en las zonas
donde se está propagando el virus196 y, una recomendación para reducir también el
riesgo de otras enfermedades infecciosas, solamente comer carne o huevos si están
bien asados o cocinados.195

Distanciamiento social
Artículo principal: Distanciamiento social

Las personas se distancian en la cola ante un establecimiento de alimentación.


El distanciamiento social incluye acciones de control de infecciones destinadas a
retrasar la propagación de la enfermedad al minimizar el contacto cercano entre las
personas. Los métodos incluyen cuarentenas, restricciones de viaje y cierre de
escuelas, lugares de trabajo, estadios, teatros o centros comerciales. Las personas
también pueden aplicar métodos de distanciamiento social limitando los viajes,
evitando áreas llenas de gente y alejándose físicamente de las personas enfermas.29
197 Muchos gobiernos ahora exigen o recomiendan el distanciamiento social en las
regiones afectadas por el brote.198199200

Los adultos mayores y aquellos con afecciones crónicas graves se enfrentan a un


mayor riesgo de enfermedades graves y complicaciones por COVID-19 y los CDC de
Estados Unidos les han aconsejado que eviten las multitudes y se queden en casa
tanto como sea posible en áreas de brote comunitario.201

Algunos países, como Canadá o Estados Unidos, emitieron directrices para no darse
la mano, abrazarse o besarse.202 Algunos países como India han recomendado a sus
ciudadanos que se debe evitar escupir en lugares públicos.203 La Organización
Mundial de la Salud (OMS) ahora recomienda para la población en general mantener
«al menos 1 metro (3 pies) de distancia entre usted y las demás personas,
particularmente aquellas que tosan, estornuden y tengan fiebre».29

Dieta y estilo de vida saludables


El Harvard T.H. La Escuela de Salud Pública Chan recomienda una dieta saludable,
estar físicamente activo,204 manejar el estrés psicológico y dormir lo
suficiente.205
No hay pruebas sólidas de que el estado de la vitamina D tenga alguna relación con
los resultados de salud de COVID-19.206 Recientemente (diciembre 2021), se ha
publicado una revisión sistemática en la que estudios observacionales en los que
participaron casi dos millones de adultos sugieren que la deficiencia /
insuficiencia de vitamina D aumenta la susceptibilidad al COVID-19 y al COVID-19
grave. Existiendo un alto riego de heterogeneidad, por lo que no se pudo hacer el
metaanálisis.207

Vacunas
Esta sección es un extracto de Vacuna contra la COVID-19.[editar]

Proporción de personas que recibieron al menos una dosis de las vacunas contra la
COVID-19.

Una adulta mayor recibiendo una vacuna contra la COVID-19 en diciembre de 2020.
Las vacunas contra la COVID-19 comprenden al conjunto de vacunas que tratan de
prevenir la enfermedad provocada por el SARS-CoV-2, virus responsable de la
pandemia de coronavirus iniciado en diciembre de 2019 y actualmente en curso. Según
un artículo publicado por la BBC en 2022, «las vacunas no son muy efectivas para
evitar la infección de personas vacunadas o que propaguen la infección».208 El
mismo año, un estudio de The Lancet de una variante del virus concluyó que si bien
la vacuna disminuía la probabilidad y severidad de la infección de los vacunados,
los vacunados podían «eficientemente contagiar en hogares, incluyendo a los
vacunados» 209Para contrarrestar la caída aparente de eficacia de las vacunas con
el tiempo, los fabricantes propusieron la inyección de dosis de refuerzo regulares.

Para febrero de 2021, diez vacunas han sido autorizadas para uso público por al
menos una autoridad reguladora competente. Además, hay unas 70 vacunas candidatas
en investigación clínica, de las cuales 17 en ensayos de fase I, 23 en ensayos de
fase I-II, 6 en ensayos de fase II y 20 en ensayos de fase III.210 Las vacunas
contra la COVID-19, se pueden clasificar según el vector que utilizan para
introducir el material del SARS-CoV-2. El vector puede ser una versión inactivada
del propio coronavirus, otro virus (generalmente un adenovirus) al que se le ha
insertado ARN del SARS-CoV-2, o bien ARN mensajero solo.

Las vacunas que se encuentran en uso en la actualidad son las:

Vacunas de ARN mensajero: el tozinamerán de Pfizer-BioNTech y el elasomerán de


Moderna.
Vacunas de coronavirus inactivado: BBIBP-CorV/Vero Cell de Sinopharm, Covaxin de
Bharat Biotech, CoronaVac de Sinovac Biotech y WIBP-CorV de Sinopharm.
Vacunas de otros vectores virales: Sputnik V del Instituto Gamaleya,
Covishield/Vaxzevria de Oxford-AstraZeneca, Convidecia/PakVak de CanSino Biologics
y Jcovden de Janssen-J&J.
Vacunas de subunidades o vacuna de antígenos peptídicos: EpiVacCorona del Instituto
Vector, Abdala del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba y Soberana
02 del Instituto Finlay de Vacunas.
No es posible comparar directamente estas vacunas entre sí porque las
características de los respectivos estudios son distintas, pero, en general, todas
las vacunas incluidas en la lista OMS de uso en emergencias son muy eficaces para
prevenir los cuadros clínicos graves y la hospitalización por COVID-19.211
Las diferentes vacunas precisan de diferentes temperaturas de conservación.
Mientras que las vacunas de adenovirus o coronavirus inactivados se conservan en
refrigeradores, las de ARN mensajero requieren congeladores a -20 °C (Moderna) o
incluso a -80 °C (Pfizer), lo cual complica su distribución.212213209 En 2021,
debido a la capacidad de producción inicialmente limitada de los fabricantes de
vacunas, los Estados tuvieron que implementar planes de distribución por etapas que
daban prioridad a la población de riesgo, como los ancianos, y a las personas con
alto grado de exposición y transmisión, como los trabajadores sanitarios.214215Para
finales de 2022, la expansión de la capacidad de producción industrial y la caída
en la demanda llevó por el contrario a disputas para deshacerse de lotes de
vacunas.216

Hasta diciembre de 2020, los países habían comprado por adelantado más de 10 mil
millones de dosis de vacunas;217 de ellas, aproximadamente, la mitad habían sido
adquiridas por países de ingresos altos que representaban el 14% de la población
mundial.218 En el consejo del Acuerdo sobre los ADPIC, que regula la propiedad
intelectual y patentes dentro de la OMC, la India y Sudáfrica presentaron, en
octubre de 2020, una propuesta para la suspensión temporal — mientras dure la
pandemia — de los medicamentos, vacunas e instrumentación médica de uso en el
tratamiento contra la COVID-19. A esta propuesta se opusieron principalmente los
países ricos, entre ellos estados miembros de la Unión Europea, los Estados Unidos,
el Reino Unido y Brasil.219220221213222 En mayo de 2021, la propuesta alcanzó el
apoyo de más de cien países, y el 5 de mayo los Estados Unidos dieron la sorpresa
al anunciar que apoyaban la propuesta de suspensión de patentes, si bien solo en
relación con la vacunas.223

Para el 6 de enero de 2022, se habían administrado 9 370 millones de dosis de las


vacunas contra la COVID-19, distribuidas entre el 59% de la población mundial.224

A fecha de marzo de 2023, la Organización Mundial de la Salud aconseja priorizar la


administración de dosis de refuerzo a las personas de riesgo, principalmente
personas ancianas, inmunodeprimidas o con comorbilidades graves. Por el contrario,
para los menores de 17 años sanos la OMS insta a los estados a que reconsideren la
necesidad de vacunarlos dado el escaso beneficio sanitario que les aporta la
vacuna.225
Tras vacunarse
Cuando alguien ha sido vacunado contra la COVID (ha recibido todas las dosis
necesarias de la vacuna, y ha pasado un tiempo establecido), todavía es posible
transmitir la enfermedad, aunque las posibilidades quedan bastante reducidas (según
algunas investigaciones).78226 Además, las vacunas fallan en una pequeña proporción
de la gente vacunada.

Así que se recomienda que la población siga realizando resoluciones preventivas


(lavarse las manos con jabón, ponerse mascarilla, mantener la distancia social,
etc.) para evitar los contagios, especialmente hacia gente vulnerable. Las
precauciones acabarían cuando los peligros de la pandemia estén oficialmente
terminados.

En lo referente al embarazo, aunque no se han hecho pruebas suficientes, 23 mujeres


quedaron embarazadas durante el ensayo clínico de la vacuna Pfizer y ninguna de
ellas mostró ningún efecto adverso. Sin embargo, la Food and Drug Administration
(FDA) recomienda que las mujeres embarazadas o lactantes consulten con sus
respectivos médicos a la hora de decidir si deben vacunarse. Es importante recalcar
que, si una mujer está en proceso de búsqueda del embarazo, la vacuna no afectará a
su fertilidad en ningún caso.227

Actualmente (agosto 2021), existe la recomendación de vacunar a toda mujer


embarazada.228

Tratamiento
Varios tratamientos experimentales contra el covid-19 están actualmente en
desarrollo o han sido aprobados en al menos un país:

la fluvoxamina, un antidepresivo barato y abundante;229


antivirales como el remdesivir (de Gilead),230 el molnupiravir (desarrollado por
Merck),231 y el PF-07321332 (desarrollado por Pfizer).232 233
la transfusión de plasma sanguíneo de donantes que ya han pasado la enfermedad.234
Otros tratamientos que se consideraron prometedores durante los primeros meses de
la pandemia, como la hidroxicloroquina y el lopinavir/ritonavir, resultaron después
ser inefectivos o incluso perjudiciales.235 La colchicina, un antiinflamatorio, ha
dado resultados inciertos.236

Tratamientos en desarrollo
La investigación para encontrar un tratamiento eficaz comenzó en enero de 2020.237
El Centro Chino para el Control y Prevención de Enfermedades empezó a comprobar, a
finales de enero, la eficacia de algunos tratamientos eficaces preexistentes contra
la neumonía en pacientes con COVID-19.238 Se han hecho pruebas también con
medicamentos como el Remdesivir, un inhibidor de la ARN polimerasa,239240241242 y
con interferón beta.242

Recientes estudios han revelado moléculas de adhesión intercelulares (como E-


Selectina) implicadas en el reclutamiento de células inmunes en el COVID crítico,
de manera que se están estudiando como posibles dianas terapéuticas.243

Antivirales

Este artículo o sección se encuentra desactualizado.


La información suministrada ha quedado obsoleta o es insuficiente.
Este aviso fue puesto el 9 de enero de 2021.
El 23 de enero de 2020 Gilead Sciences estaba en comunicación con investigadores y
médicos en los Estados Unidos y China sobre el brote en curso de coronavirus de
Wuhan y el uso potencial del Remdesivir como tratamiento de investigación.244

A fines de enero de 2020, investigadores médicos chinos expresaron su intención de


comenzar las pruebas clínicas con remdesivir, cloroquina y lopinavir / ritonavir,
que parecían tener efectos inhibitorios sobre el SARS-CoV-2 a nivel celular en
experimentos exploratorios in vitro.245 La nitazoxanida se ha recomendado para
estudios posteriores in vivo luego de demostrar una inhibición de baja
concentración de SARS-CoV-2.246 El 2 de febrero de 2020, médicos de Tailandia
afirmaron haber tratado a un paciente con éxito con una combinación de lopinavir /
ritonavir y el medicamento contra la influenza oseltamivir.247248 El 5 de febrero,
China comenzó a patentar el uso de remdesivir contra la enfermedad.249250251252250
249 En marzo se están llevando a cabo ensayos clínicos de fase 3 en los Estados
Unidos, China e Italia con remdesivir.253254255 En abril, se anunció que la
ivermectina inhibe la replicación del SARS-CoV-2 in vitro256 Los metanálisis
basados en 18 ensayos de tratamiento controlados aleatorios de ivermectina en
COVID-19 han encontrado reducciones grandes y estadísticamente significativas en la
mortalidad, el tiempo hasta la recuperación clínica y el tiempo hasta la
eliminación viral.257

A finales de enero, el Ministerio de Salud de Rusia identificó tres medicamentos


para adultos que podrían ayudar a tratar la enfermedad. Son ribavirina,
lopinavir/ritonavir e interferón beta-1b. Estos fármacos se usan habitualmente para
tratar la hepatitis C, infección por VIH y la esclerosis múltiple, respectivamente.
El ministerio ofreció a los hospitales rusos descripciones y guías sobre el
mecanismo de acción del tratamiento y las dosis recomendadas.258 En febrero, China
comenzó a usar triazavirin, un fármaco de 2014 desarrollado en Rusia, con el
objetivo de comprobar si es efectivo en el control de la enfermedad. Este fármaco
fue creado en la Universidad Federal de los Urales en Ekaterimburgo para tratar la
gripe H5N1 (gripe aviar). Se ha utilizado contra COVID-19 debido a la similitud
entre las dos enfermedades. El fármaco también parece ser efectivo contra la fiebre
del valle del Rift y el virus del Nilo Occidental, entre otras.259

El 18 de marzo un artículo informa que el tratamiento con lopinavir/ritonavir da


negativo en pruebas clínicas con 199 pacientes en China. No hay beneficios.260
Investigadores chinos descubrieron que Arbidol, un medicamento antiviral utilizado
para tratar la gripe, podría combinarse con Darunavir, un medicamento empleado en
el tratamiento del VIH, para el tratamiento de pacientes con coronavirus.261262

El fosfato de cloroquina ha demostrado una eficacia aparente en el tratamiento de


la neumonía asociada a COVID-19. En pruebas clínicas con 100 pacientes se encontró
que es superior al tratamiento de control para inhibir la exacerbación de la
neumonía, mejorar los hallazgos de las imágenes pulmonares, promover una conversión
negativa al virus y acortar la enfermedad. Resultados de investigación mostraron
que la proteína ORF8 del SARS-CoV-2 y la glicoproteína de superficie podrían unirse
a la porfirina, respectivamente, mientras que las proteínas del SARS-CoV-2 orf1ab,
ORF10 y ORF3a podrían atacar de forma coordinada el hemo para disociar el hierro
para formar la porfirina. El mecanismo interfirió seriamente con la vía anabólica
normal del hemo en el cuerpo humano y esto produce una enfermedad humana. Según el
análisis de validación de estos hallazgos, la cloroquina podría evitar que orf1ab,
ORF3a y ORF10 ataquen el hemo para formar la porfirina, e inhibir la unión de ORF8
y glucoproteínas de superficie a las porfirinas en cierta medida.263264265

Investigadores de la Universidad Noruega de Ciencia y Tecnología (NTNU) han creado


una base de datos con 120 agentes antivirales de amplio espectro seguros para las
personas e identificaron 31 candidatos a fármacos para el tratamiento de SARS-CoV-
2.266

El Centro Nacional de Desarrollo Biotecnológico de China afirmó el 17 de marzo que


el antiviral Favipiravir, un inhibidor de la ARN polimerasa,267 mostró resultados
positivos en un estudio de casos y controles con 80 pacientes en el Hospital
Popular n.º 3 de Shenzhen, los que recibieron tratamiento con Favipiravir dieron
negativo dentro de un periodo más reducido de tiempo en comparación con los del
grupo de control, y recomienda que se incluya en el tratamiento.268269

Estudios recientes han demostrado que el cebado inicial de la proteína de pico por
la proteasa transmembrana serina 2 (TMPRSS2) es esencial para la entrada de SARS-
CoV-2, SARS-CoV y MERS-CoV a través de la interacción con el receptor ACE2.270271
Estos hallazgos sugieren que el inhibidor de TMPRSS2 Camostat aprobado para uso
clínico en Japón para inhibir la fibrosis en la enfermedad hepática y renal, la
esofagitis por reflujo postoperatorio y la pancreatitis podrían constituir una
opción de tratamiento eficaz fuera de etiqueta.

La hidroxicloroquina, un derivado menos tóxico de cloroquina, sería más potente


para inhibir la infección por SARS-CoV-2 in vitro.272273 El 16 de marzo de 2020,
una importante autoridad francesa y asesor del Gobierno francés sobre COVID-19, el
profesor Didier Raoult del Instituto Universitario Hospitalario de Enfermedades
Infecciosas (IHU-Méditerranée infection) en Marsella (Bouches-du-Rhône, Provenza-
Alpes-Côte d 'Azur), anunció que un ensayo con 24 pacientes del sureste de Francia
había demostrado que la cloroquina es un tratamiento efectivo para COVID-19.274275
Se administraron 600 mg de hidroxicloroquina (marca Plaquenil) a estos pacientes
todos los días durante 10 días. Esto condujo a una «aceleración rápida y efectiva
de su proceso de curación, y una fuerte disminución en la cantidad de tiempo que
permanecieron contagiosos».274 Si bien la cloroquina tiene un largo historial de
seguridad, los pacientes fueron monitorizados de cerca para detectar interacciones
farmacológicas y posibles efectos secundarios graves. El profesor Raoult dijo:
«Incluimos a todos los que estaban de acuerdo [para ser tratados], que era casi
todos. Dos ciudades en el protocolo, Niza y Aviñón, nos dieron pacientes
[infectados] que aún no habían recibido tratamiento... Pudimos determinar que los
pacientes que no habían recibido Plaquenil (el medicamento que contiene
hidroxicloroquina) seguían siendo contagiosos después de seis días, pero de los que
habían recibido Plaquenil, después de seis días, solo el 25% seguía siendo
contagioso».274 En Australia, el director del Centro de Investigación Clínica de la
Universidad de Queensland, el profesor David Paterson, anunció su intención de
realizar una gran investigación clínica. ensayo de la eficacia de la cloroquina y
remedesivir como tratamientos para COVID-19.276 El ensayo compararía una droga,
contra la otra droga, contra la combinación de las dos drogas. El profesor Paterson
esperaba comenzar a inscribir pacientes a fines de marzo de 2020.276

Un estudio limitado francés muestra que la hidroxicloroquina combinada con la


azitromicina es más rápida que la hidroxicloroquina sola para transformar a los
pacientes con COVID-19 a negativo.277 Esta combinación no está indicada para el
tratamiento del COVID-19 y ha demostrado tener efectos secundarios graves.278

El mesilato de nafamostat (nombre de marca: Fusan), medicamento utilizado para


tratar la pancreatitis aguda, puede bloquear efectivamente el proceso de entrada
viral requerido que el nuevo coronavirus (SARS-CoV-2) usa para propagarse y causar
enfermedad (COVID-19). La Universidad de Tokio planea lanzar ensayos clínicos en
abril de 2020 para evaluar la efectividad de estos dos medicamentos para tratar
COVID-19.279

Fujifilm anuncia el inicio de un ensayo clínico de fase III del medicamento


antiviral contra la influenza "Avigan Tablet" (nombre genérico: favipiravir).280

Contra la tormenta de citoquinas


El tocilizumab (un anticuerpo monoclonal) ha sido incluido en las pautas de
tratamiento por la Comisión Nacional de Salud de China después de que se completó
un pequeño estudio.281282 Se está sometiendo a una prueba no aleatoria de fase 2 a
nivel nacional en Italia después de mostrar resultados positivos en personas con
enfermedad grave.283284 En combinación con un análisis de sangre de ferritina en
suero para identificar tormentas de citoquinas, está destinado a contrarrestar
tales desarrollos, que se cree que son la causa de la muerte en algunas personas
afectadas.285286 El antagonista del receptor de interleucina-6 fue aprobado por la
FDA para el tratamiento contra el síndrome de liberación de citoquinas inducido por
una causa diferente, la terapia con células CAR T, en 2017.287

El Instituto Feinstein de Northwell Health anunció en marzo un estudio sobre "un


anticuerpo humano que puede prevenir la actividad" de IL-6. Llamado sarilumab
desarrollado en conjunto por Regeneron Pharmaceuticals y Sanofi.288

El NIH tiene unas directrices sobre el uso del tocilizumab en el tratamiento de


COVID-19:289
El Panel recomienda el uso de tocilizumab a (dosis única intravenosa de 8 mg / kg
de peso corporal real, hasta 800 mg) en combinación con dexametasona (6 mg al día
durante un máximo de 10 días) b en ciertos pacientes hospitalizados que presentan
síntomas rápidos. descompensación respiratoria por COVID-19. c Los pacientes
incluidos en esta población son:
Pacientes recientemente hospitalizados que han sido ingresados en la unidad de
cuidados intensivos (UCI) dentro de las 24 horas anteriores y que requieren
ventilación mecánica invasiva, ventilación mecánica no invasiva (VNI), u oxígeno a
alto flujo por cánula nasal de (HFNC) (> 0,4 FiO 2 / 30 L / min de flujo de
oxígeno) (BIIa) ; o Pacientes hospitalizados recientemente (no en la UCI) con
necesidades de oxígeno en rápido aumento que requieren VNI o HFNC y tienen
marcadores de inflamación significativamente aumentados (BIIa) ( Nota : el criterio
de inclusión del ensayo RECOVERY para la inflamación fue proteína C reactiva [PCR]
≥75 mg / L; consulte los detalles a continuación). Para los pacientes
hospitalizados con hipoxemia que requieren un suplemento de oxígeno convencional,
el Panel recomienda usar una de las siguientes opciones: remdesivir (BIIa),
dexametasona más remdesivir (BIII) o dexametasona sola (BI) (ver Manejo terapéutico
de adultos con COVID-19).

No hay pruebas suficientes para especificar cuál de estos pacientes se beneficiaría


de la adición de tocilizumab. Algunos miembros del Panel también darían tocilizumab
a pacientes que exhiben necesidades de oxígeno en rápido aumento mientras toman
dexametasona y tienen una PCR ≥ 75 mg / L pero que aún no requieren VNI o HFNC,
como se describió anteriormente.
En marzo de 2021 la Cochrane Library publicó una revisión sistemática sobre el
tocilizumad en el tratamiento del COVID19290

Trasplante pulmonar
En pacientes con síndrome respiratorio agudo severo, que no responden a tratamiento
y con criterios de afectación pulmonar con fibrosis, ya se ha publicado resultados
sobre trasplante pulmonar291 Los hallazgos de este informe muestran que el
trasplante de pulmón es la única opción para la supervivencia en algunos pacientes
con SDRA asociado a COVID-19 grave que no se resuelve, y que el procedimiento se
puede realizar con éxito, con buenos resultados tempranos después del trasplante,
en pacientes cuidadosamente seleccionados.

Terapia pasiva de anticuerpos

Esquema histórico de uso de plasma convaleciente


Se está investigando el uso de donaciones de plasma sanguíneo de personas que ya se
han recuperado de la COVID-19,292 una estrategia que se aplicó con éxito contra la
gripe de 1918 y que se ha probado para el SARS, un primo anterior de COVID-19292 y
otras enfermedades como la fiebre hemorrágica argentina. El mecanismo de acción es
que los anticuerpos producidos naturalmente ("suero convaleciente") en el sistema
inmune de aquellos que ya se han recuperado, se transfieren directamente a las
personas que los necesitan.292 Se proporciona así una forma de inmunización no
basada en vacuna. Esta terapia fue autorizada por la FDA estadounidense en agosto
de 2020 como tratamiento de emergencia contra la COVID-19.293 El primer ensayo
clínico completo, publicado en enero de 2021, concluyó que la aplicación de
transfusiones de plasma durante la fase inicial de síntomas leves redujo la
gravedad de la enfermedad en un 60% de los casos.294234

Una versión más compleja de esta terapia consiste en sintetizar en laboratorio los
anticuerpos contra la COVID-19, llamados "monoclonales", para después inyectárselos
a los pacientes.,292295 Varias empresas farmacéuticas, como Vir Biotechnology, han
evaluado la efectividad contra el virus SARS-Cov-2 de anticuerpos monoclonales
previamente identificados contra otros virus.296 En marzo de 2020, se halló un
anticuerpo monoclonal humano que bloquea la infección por SARS-CoV-2.297298
Mientras que las transfusiones de plasma son muy baratas y sencillas de realizar,
el tratamiento con anticuerpos monoclonales costaría decenas de miles de euros por
paciente.299

Posición de los NIH sobre el uso de los anticuerpos monoclonales en el tratamiento


de la infección por SARS-CoV-2300

Véase también
Pandemia de COVID-19
Síndrome respiratorio agudo grave (SARS)
Síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS)
Orthocoronavirinae
Enlaces externos
Base de datos en Clinical Trials
Datos SAR-COV-2
COVID-19 Pubmed (118.397 artículos a fecha 31-03-2021)
Novedades en tratamiento
Manejo terapéutico de adulto con COVID-19
Base de datos de los NIH estadounidenses sobre tratamientos en desarrollo contra el
COVID-19
Línea de tiempo de conocimiento inmunlógico
Recursos COVI-19 en la Cochrane
Notas
Acrónimo proveniente del inglés coronavirus disease 20194 (‘enfermedad por
coronavirus de 2019’). Según la Real Academia Española, aunque el uso en femenino
(«la COVID-19») está justificado por la formación del acrónimo, que se refiere a
una enfermedad, el uso mayoritario en masculino («el COVID-19») se considera
plenamente válido.5 Por otro lado, la Fundéu señala que se puede lexicalizar el
nombre en textos generales pasándolo a minúsculas como «covid-19» —no «Covid-19»,
con mayúscula inicial, pues se trata de un nombre común—, y prefiere el uso del
femenino.6
Si bien tal denominación es ampliamente usada,67 padecer la COVID-19, como sucede
con otras infecciones por coronavirus, no implicaría necesariamente desarrollar
neumonía.8910
Referencias
WHO-China Joint Mission on Coronavirus Disease 2019 (COVID-19), ed. (28 de febrero
de 2020). «Report of the WHO-China Joint Mission on Coronavirus Disease 2019
(COVID-19)» (en inglés). pp. 11-12. Archivado desde el original el 28 de febrero de
2020. Consultado el 23 de marzo de 2020.
«Enfermedad por nuevo coronavirus, COVID-19. Información para la ciudadanía. ¿Qué
puedo hacer para protegerme del nuevo coronavirus y otros virus respiratorios?».
Ministerio de Sanidad (España). Archivado desde el original el 10 de marzo de 2020.
Consultado el 4 de marzo de 2020.
«Los nombres de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) y del virus que la
causa». who.int. Organización Mundial de la Salud. Consultado el 3 de noviembre de
2020.
Organización Mundial de la Salud (OMS), ed. (11 de febrero de 2020). «Intervención
del Director General de la OMS en la conferencia de prensa sobre el 2019-nCoV del
11 de febrero de 2020». who.int. Archivado desde el original el 20 de febrero de
2020. Consultado el 11 de febrero de 2020.
«Crisis del COVID-19: sobre la escritura de «coronavirus»». Real Academia
Española. 19 de marzo de 2020.
«Coronavirus, claves de escritura». Fundéu BBVA. 29 de enero de 2020. Consultado
el 20 de marzo de 2020.
Comisión Nacional de la Salud (China), ed. (7 de febrero de 2020). «国家卫生健康委关
于新型冠状病毒肺炎暂命名事宜的通知通知» (en chino). Archivado desde el original el 16 de
febrero de 2020. Consultado el 11 de febrero de 2020.
«Infecciones por coronavirus». Medline Plus (Biblioteca Nacional de Medicina de
los Estados Unidos). 2 de marzo de 2020. Archivado desde el original el 5 de marzo
de 2020. Consultado el 4 de marzo de 2020. «Muchas de las personas con COVID-19
tienen neumonía en ambos pulmones. [...] Generalmente [los coronavirus] causan
infecciones leves a moderadas en las vías respiratorias superiores, como el
resfriado común. Pero también pueden causar enfermedades más graves, como
bronquitis y neumonía. »
«¿Qué se sabe sobre el coronavirus? Síntomas, diagnóstico, letalidad...». El País.
27 de febrero de 2020. Archivado desde el original el 28 de febrero de 2020.
Consultado el 4 de marzo de 2020. «El virus infecta las vías respiratorias y causa
síntomas que van desde un cuadro leve (tos seca, fiebre...) a insuficiencia
respiratoria aguda y neumonías potencialmente mortales. La enfermedad asociada se
ha denominado Covid-19. »
«¿Cuáles son las diferencias entre el coronavirus y una gripe?». The New York
Times. 2 de marzo de 2020. Archivado desde el original el 3 de marzo de 2020.
Consultado el 4 de marzo de 2020. «La neumonía es común entre los pacientes con
coronavirus, incluso entre aquellos cuyos casos no son graves. »
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