“La Era de Acuario”

Hay un periodo que comienza con el verano del amor (Love Summer) de 1967 en San Francisco y
que se extiende hasta el festival de Woodstock en agosto de 1969, considerado como el de mayor
creatividad y difusión de la cultura generada alrededor del rock y el pop.

El verano del amor comenzó en el Golden Gate Park de San Francisco con un festival de poesía y
música, fue el primer happening masivo de los hippies. Deambulaban y consumían marihuana,
hachís, LSD y heroína. Por todos lados sonaba la música de varios álbumes que hicieron historia
como Are You Experienced? De Jimmy Hendrix, Piper at the Gates of Dawn de Pink Floyd, Disraeli
Gears de Cream y The Doors. Al mismo tiempo surgían grupos como Deep Purple, Led Zeppelin o
Black Sabbath. Los Rolling Stone, ya consagrados, estaban ocupados con algunos problemas por
posesión de drogas. El gobierno británico quería dar una lección a los consumidores de drogas, y el
vehículo eran los Stone.

Lo que estaba pasando, definido por el historiador Theodore Roszak, se trataba de una
contracultura, el rechazo manifestado a través de la actitud por parte de la juventud urbana de los
países desarrollados a buena parte de los valores dominantes, esta nueva corriente se manifestaba a
través de la llamada psicodelia o desorden mental.

A mediados de 1968, surgieron los álbumes mas populares de las bandas relevantes en ese
momento, algunos de ellos fueron The White Album de Los Beatles, Beggars Banquet (El Banquete
de los Mendigos) de The Rolling Stone, The Doors saco a la venta su tercer LP, Waiting for the Sun
(Esperando por el sol), Pink Floyd con A Saurcerful of Secrets (Un platillo de secretos) considerado
unos de los primeros discos del rock progresivo; y otros trascendentales sencillos que marcaron una
nueva etapa en la música.

En ese momento se vivía la “Era de Acuario”, una de las doce eras astrológicas, donde el cine
estadounidense y las obras musicales venían a representarla. Al mismo tiempo, surgió la llamada
“generación de la televisión” con directores como Stanley Kramer, Robert Altman y Rober Mulligan,
que trabajaban con la cadena CBS. Estos realizadores aportaron al cine el nuevo sistema de
producción de la televisión y un mayor énfasis en la presentación de las historias reales, alejadas de
la fantasia Hollywoodense del “american way of life” (tipo de vida americana).

Este año fue marcado por El Graduado de Mike Nichols, que desnuda la hipocresía de la sociedad de
la época. Los Beatles tuvieron su película de animación, Yellow Submarine, la cual fue la muestra
acabada de la psicodelia. Ese mismo año llego a los cines Un León en invierno, del director británico
Anthony Harvey, un cuento histórico, dramático de intriga familiar en la corte del rey Henry II.
Muchas de estas películas pasarían en los siguientes años a tener también un gran éxito en la
pantalla chica. Pero la televisión, salvo en los noticieros y algún documental, permanecía aislada de
lo que estaba sucediendo en el país. La mayoría de los estadounidenses no participaban ni estaban
interesados en las protestas y seguían utilizando “la caja boba” para relajarse. En 60 Minutes se
revelaron algunos de los escándalos más graves que sacudieron a Estados Unidos y el mundo en los
últimos cincuenta años.

En los sesenta, el epicentro del arte y las vanguardias artísticas se traslado de Parias a Nueva York. Se
impuso la primera tendencia, el “expresionismo abstracto”, definido como “una forma de expresar
sentimientos, emociones, lo que hay dentro del artista y no lo que queda fuera de él”. Entre los
artistas más destacados de este movimiento están Jackson Pollock, Willem de Kooning, Mark Rothko
y Franz Kline. En forma paralela, se desarrollo el Art Pop, abreviatura de arte popular y, dentro de
este, aparecieron el hiperrealismo, photorealism o superrealismo.

Hacia 1968 comenzó a notarse en la pintura el clima revoltoso de la calles, las cuales incluían
frecuentemente fotos de John Kennedy, soldados y equipo militar mezclados con ídolos del deporte
mostrando una resonancia política. Para entonces, el arte había caído en el hechizo de la filosofía
desconstruccionista, con redefiniciones teóricas, símbolos y signos, espectáculos y medios de
comunicación. Tanto como el Art Pop, el Minimalismo creó un nuevo espacio para que las ideas
teóricas, más refinadas, prosperaran. De esta manera “el concepto reemplazo al sujeto”.

El mundo del arte estadounidense seguía siendo, todavía, predominantemente blanco y masculino.
A pesar del apoyo de los artistas al movimiento por los derechos civiles, para los pintores negros era
muy difícil encontrar un buen lugar de exposición. Y si bien el movimiento social y político influyo
enormemente el arte estadounidense, hasta 1967-1968 el mundo del arte dominante siguió siendo
apolítico.

La escultura fue el medio dominante de las nuevas tecnologías, el arte pop, el arte cinético y la
escultura de luz proyectaban un glamour de la tecnología con gran optimismo. La vitalidad, la
inventiva técnica y la gran cantidad de trabajos producidos a fines de los años sesenta por estos y
otros editores provocaron una revolución en el grabado.

Así terminaba una era la cual dejaba una escena en plena ebullición que hicieron del 68 uno de los
años más prolíficos de las artes de todos los tiempos.
Institución: Instituto Secundario Padre Respuela.

Cátedra: Taller de historia.

Curso: 5to Sociales.

Docente: Juan José Molins.

Grupo: Hippies, drogas y rock and roll.

Bibliografia: Sierra, Gustavo – “El 68” (2018) Planeta.

Capitulo: “La era de acuario”.

Fecha: 27/10/2022.