El método comparativo es una herramienta que, a partir de una serie de pasos
estructurados, permite comparar y analizar dos o más elementos, con el objetivo de probar una hipótesis o alcanzar un conocimiento novedoso. ¿Cómo funciona el método comparativo? Este consiste en hacer comparaciones sistemáticas entre variables (dos o más), que permitan determinar relaciones en términos matemáticos. Por supuesto, busca comprender las semejanzas y diferencias, causas y consecuencias de la interacción entre las variables. En este sentido, podemos hablar de una función heurística, es decir, que busca generar conocimientos nuevos, y una comprobatoria de hipótesis existentes. ¿Cuáles son las características del método comparativo? Requiere un diseño de investigación sencillo: esto se debe a que trabaja con muestras pequeñas (entre 2 y 50) y se busca comprender las causas de sus diferencias, desde las similitudes. Comprueba hipótesis y alcanza nuevos conocimientos: recuperamos aquí la doble función mencionada anteriormente, que hacer referencia a la creación de conocimientos nuevos, y a la comprobación o refutación de hipótesis. Podemos decir que estos son los principales objetivos de emplear el método comparativo. El análisis parte de las diferencias: al momento de utilizar el método comparativo, debes saber que su función es analizar las diferencias, mas no las semejanzas. Aprovecha la observación: la principal técnica de análisis de datos que se utiliza aquí es la observación. Es decir, se observan las diferencias y, así, se llega a conclusiones. Cómo aplicar el método comparativo Al igual que el método científico, el método comparativo debe seguir una serie de pasos para que los conocimientos alcanzados sean válidos. 1. Detección del problema Como cualquier investigación, el primer paso es encontrar un problema que merezca la pena ser estudiado minuciosamente. Para nuestro ejemplo de método comparativo, tomaremos “como problema” la baja retención de conocimientos en las clases universitarias. 2. Desarrollo del estado del arte El siguiente paso es profundizar en el problema a través de la investigación de estudios que otros autores hayan realizado. Es decir, debes construir un estado del arte para conocer a fondo en qué situación se encuentra el tema a estudiar. Esto te servirá, en primer término, para conocer en qué bibliografía apoyarte para sostener tu investigación. Por otro lado, también tendrás una idea de qué camino seguir al momento de investigar. Claramente, esta información será clave para establecer la o las hipótesis iniciales y las variables que serán comparadas. 3. Delimitación del problema Este paso implica tomar el problema encontrado y elegir un área específica para desarrollar la investigación. Continuando con el ejemplo de método comparativo propuesto al principio, “aquí” analizaremos la tasa de retención de conocimientos comparada entre las clases virtuales y las presenciales. 4. Selección de la muestra Como bien dijimos, la muestra debe ser pequeña, por lo tanto, lo recomendable para continuar con el ejemplo será elegir a estudiantes que cursen la misma asignatura, tanto en modalidad virtual como presencial y determinar la variación en la tasa de retención de conocimientos. Para ello, se realizarán pequeñas tesis sobre la temática desarrollada al finalizar cada clase. 5. Análisis y comparación de los resultados Esta etapa implica la comparación propiamente dicha, donde todas las muestras serán tomadas en consideración y se buscará detectar cuáles son las diferencias que han aparecido. A su vez, se buscará determinar si la hipótesis se comprueba o se rechaza, o bien, si se ha llegado a nuevos conocimientos. 6. Conclusión y explicación Hemos llegado al último de los pasos y este consiste en explicar los resultados a los que se ha llegado a través de la comparación. Esto implica desarrollar si la hipótesis fue verificada o rechazada y por qué. También se pueden vincular los resultados con la información recabada en el estado del arte, es decir, con estudios previos. Al finalizar el proceso, el investigador estará aportando a la comunidad un conocimiento que permita hacer predicciones, en función de las variables analizadas en la investigación.