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I. INTRODUCCION
El Sistema Previsional, busca dar cobertura y amparo a través de las jubilaciones y
pensiones al sector más vulnerable de la sociedad. . Está inserto dentro del gran
universo del Sistema de la Seguridad Social. El mismo debe ser garantizado por el
Estado. En el contexto social que vive nuestro país, ocasionado por la pandemia del
COVID19, el acceso a los derechos que él garantiza, se ha transformado en casi una
misión imposible, para aquellos que más protección necesitan. Con medidas que no
alcanzan, con el Organismo que tiene a su cargo la Administración de la Seguridad
Social cerrado y con la Justicia Federal que hasta hoy sigue de feria, el sistema
previsional ha quedado subsumido en una total parálisis que trajo como consecuencia el
avasallamiento de derechos fundamentales de los ciudadanos.
1
Abogada, egresada de la Universidad Nacional de Córdoba. Diplomada en Derecho del Trabajo y la
Seguridad Social de la Universidad Nacional de Córdoba . Secretaria Académica de la Sala de Derecho
Previsional del Colegio de Abogados de Córdoba. Delegada del Colegio de Abogados de Córdoba en la
Federación Argentina de Colegios de Abogados en materia previsional.
.
II. SEGURIDAD SOCIAL Y DERECHO PREVISIONAL ARGENTINO.
1. Antecedentes
Este convenio trata nueve directrices específicas que dan sustento a la materia:
asistencia médica; prestaciones por enfermedad; prestaciones de desempleo; de vejez;
en caso de accidentes de trabajo y enfermedad; profesional; familiares; de maternidad;
de invalidez y de sobrevivientes.
Como venimos diciendo, puede darse de distintas maneras, según sea la respuesta que
quiera dar a las diferentes necesidades de acuerdo a las características particulares de
los países en donde se aplique, sean estos en vías de desarrollo o industrializados, con
mayor o menor participación estatal en sus gobiernos.4
El 10 de mayo de 2011 fue publicada en el Boletín Oficial la ley 26678 por medio de la
cual se aprobó en nuestro país, el convenio 102 de la OIT relativa a las normas mínimas
sobre Seguridad Social adhiriendo a las nueve ramas establecidas por éste.
2
https://www.ilo.org/secsoc/areas-of-work/legal-advice/WCMS_222058/lang--es/index.htm
3
Manual de Diplomatura Internacional de Seguridad Social dictado por la Organización Interamericana
de la Seguridad Social (OISS). Capítulo Seguridad Social y Seguros Sociales página 23.
4
Manual de Diplomatura Internacional de Seguridad Social dictado por la Organización Interamericana
de la Seguridad Social (OISS). Capítulo Seguridad Social y Seguros Sociales página 23.
En concordancia con esto, es muy significativo que la Declaración Universal de
Derechos Humanos reconozca en su artículo 22 “que toda persona como miembro de la
sociedad tiene derecho a la Seguridad Social.” Sumamos a esto, la Declaración
Americana de Derechos y Deberes del Hombre que reitera en su artículo XVI “que toda
persona tiene derecho a la Seguridad Social, que le proteja contra las consecuencias de
la desocupación, de la vejez y de la incapacidad que, proveniente de cualquier otra
causa ajena a su voluntad, la imposibilite física o mentalmente para obtener los medios
de subsistencia”
Nuestro país asimila estas declaraciones dándoles un carácter supra legal a través de la
C N en su art. 75 inc 22.
La normativa en materia previsional que nos rige actualmente es una legislación joven,
pero desde finales del Siglo XIX ya avizoramos antecedentes normativos.
Durante la Presidencia de Nicolás Avellaneda, se dictó la ley Nº 870 de 1877 que creó
un Sistema de Jubilación para Magistrados Judiciales la cual tuvo un financiamiento
estatal puro.
Durante las Presidencias de General Roca se sancionaron las leyes Nº 1909 que
establecían un Sistema de Jubilación para Maestros (año 1886) y la Nº 4349 (año 1904)
que creó la Caja de Jubilación de Funcionarios, Empleados y Agentes Civiles. El
régimen era de capitalización pública colectiva, es decir que se sometían a inversiones
productivas los aportes de los trabajadores en una cuenta colectiva.
En 1915, siendo presidente Victorino de la Plaza se sancionó la Ley 9653 que creó la
Caja de Jubilación de Ferroviarios.
Entre 1943 y 1954 se crearon varias Cajas que nucleaban a trabajadores de acuerdo a su
actividad. Entre ellas Cajas de Comercio y Actividades Civiles; Caja de Jubilación de
Personal de la Industria y Caja de Jubilación de Trabajadores Rurales e Independientes,
Profesionales y Empresarios.
Recién en 1954 se sanciona la primera ley en materia previsional de aplicación general,
la Nº 14370. La misma buscaba incluir a todas las franjas de trabajadores, con el único
requisito de encontrarse en el mercado formal.
En 1958 se sanciono la ley Nº 14499, cuyo aporte más importante es haber incluido por
primera vez la movilidad jubilatoria. La misma estableció un 82% móvil para el
jubilado, de la última remuneración del cargo al momento de cesar en la actividad. Esta
ley era aplicable a los trabajadores de las distintas Cajas.
A raíz de ello fue inminente una reforma legislativa que realice una transformación
estructural del sistema. Así, en 1968 se sancionaron las leyes Nª 18037 y 18038 que
establecieron por primera vez un Sistema Nacional de Previsión Social
Pero fue recién en la década del 90, durante el gobierno de Carlos Menem cuando la
reforma fue aún más profunda.
En el año 2008 se sanciono la ley 26425 que unifico el sistema, en un único régimen
denominado Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA) que es el que nos rige
actualmente. El mismo se caracteriza por ser un sistema solidario de reparto. Con esta
unificación, el estado garantizó a los afiliados y beneficiarios del régimen de
capitalización, idéntica cobertura y tratamiento que la brindada por el régimen
previsional público.
Esto fue así hasta Diciembre de 2019, ya que el Sistema Previsional pasó a estar bajo la
órbita del Ministerio de Desarrollo Social.
III. CONTINGENCIAS CUBIERTAS POR EL SISTEMA PREVISIONAL ARGENTINO
(SIPA) PREVISTAS EN LA LEY Nº 24241. PRESTACIONES.
PAP: Prestación Adicional por Permanencia: Se aplica a afiliados que acrediten derecho
a PBU y se calcula multiplicando 1,5% por cada año de servicio posterior al 15 de Julio
de 1994 sobre el promedio mensual de remuneraciones o rentas actualizadas según la
ley de movilidad jubilatoria Nº 26417.
Se requieren solo 10 años de servicios y 70 años de edad para ambos sexos. El monto
del haber es equivalente al 70% de la PBU y lo que le corresponda por PC y PAP.
1. Contexto
Con fecha 30 de enero de 2020, la Organización Mundial de la Salud OMS declaro “el
brote del nuevo coronavirus COVID 19 como una emergencia de Salud Pública de
importancia internacional (ESPII) en el Marco del Reglamento Sanitario Internacional,
para la que los países deben estar preparados en cuanto a la contención, vigilancia
activa, detección temprana, aislamiento, manejo de casos, rastreo de contactos y
prevención de la propagación de la infección.”
Con fecha 11 de Marzo del 2020, la OMS declara al brote como una pandemia, y a
través del DNU Nº 260/2020 del 12 de marzo del mismo año se amplía en nuestro país
la Emergencia Pública Sanitaria establecida en la ley Nº 27541 de Diciembre de 2019
por el plazo de un año.
El más importante de ellos y el que opera como marco para toda la normativa
sancionada con posterioridad fue el Decreto de Necesidad y Urgencia Nº 297/2020. El
mismo establece el Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio, el cual a lo largo de
estos meses se ha ido prorrogando a través de la sanción de sucesivas normas que así lo
establecen.
El último DNU hasta la fecha que prorrogó el ASPO fue el Decreto Nª 493/2020 que
establece una prórroga hasta el 28 de Junio de 2020, debido al agravamiento de la
situación epidemiológica en la zona metropolitana. Este decreto rige para todo el país
pero con ciertas particularidades y flexibilizaciones en aquellas provincias que no han
evidenciado casos en el último tiempo.
Tal como se dispone en los considerandos de los sucesivos decretos , estas normas se
dictan “ con el fin de contener y mitigar la propagación de la epidemia de COVID-19 y
con su aplicación se pretende preservar la Salud Pública, adoptándose en tal sentido
medidas proporcionadas a la amenaza que se enfrenta, en forma razonable y temporaria.
La restricción a la libertad ambulatoria tiende a la preservación del derecho colectivo a
la Salud Publica y del derecho subjetivo a la vida. En efecto no se trata solo de la salud
de cada una de las personas obligadas a cumplir la medida de aislamiento dispuesta en
forma temporaria, sino de todas y todos los habitantes en su conjunto, ya que la salud
pública, por las características de contagio de COVID-19, depende de cada una y cada
uno de nosotros y nosotras cumpla con el aislamiento, como la forma más eficaz para
cuidarnos como sociedad.”
Podemos agregar a esto que desde fines de Diciembre de 2019 con la asunción del
nuevo gobierno nacional, en la mayoría de las dependencias de ANSeS de nuestra
provincia fueron desafectadas los cargos gerenciales, por lo cual fue imposible plantear
desde ningún sector un plan para manejar la crisis ocasionada por la pandemia. Esto
también sucedió en el resto del país.
La nueva Directora Ejecutiva del Organismo, Licenciada Fernanda Raverta, ha
manifestado a distintos medios periodísticos que las oficinas de las distintas Udai
(Unidad de Atención Integral) de todo el país, mantendrán sus puertas cerradas al
público y solo recibirán trámites presenciales cuando “se aplique el protocolo
sanitario”. Esta suerte de protocolo a que hace referencia la licenciada, no tiene fecha
cierta en ningún punto del país, generando un total estado de incertidumbre en el
conjunto de los administrados. ,
Ante esta total falta de atención respecto de los sectores más vulnerables de la sociedad
y con un mapa epidemiológico que fue creciendo, se tomaron algunas medidas con el
fin de refuncionalizar servicios que son primordiales, aunque los mismos no fueron
suficientes.
La situación se tornó tan especialísima, que se dispuso que los canales remotos fueran
los medios más idóneos para asesorar a los ciudadanos y que estos puedan acceder a las
prestaciones que brinda el Organismo. .
Este sistema de atención telefónica cuenta con dos modalidades de atención: una
automática y otra personalizada.
La automática funcionará los 365 días del año las 24 horas y la personalizada de lunes a
viernes de 8 a 16 horas mientras dure el ASPO.
En la opción de trámites en línea, las consultas son resueltas de manera inmediata. Con
esta modalidad los afiliados pueden realizar las siguientes gestiones: Cambios de boca
de pago de beneficios y de planes sociales; tramites referidos a Obra Social; Reclamos
de beneficios impagos; Pensión Derivada Automática, tramites referidos a asignaciones
familiares, etc.
La otra medida tomada por el Organismo para hacer frente a este flagelo y mientras
dure el estado de aislamiento, fue la implementación de un sistema de ATENCION
VIRTUAL. Esta se plasmó el 21 de Abril de 2020, a través de la Resolución Nº
94/2020, y se la declaró como “servicio esencial e indispensable para la comunidad”
Esta Resolución determina que los tramites que se podrán desarrollar a través de ella
serán: los de Asignación Familiar por Maternidad y Maternidad Down, Repago y
Rehabilitación de haberes previsionales del SIPA.
Que con fecha 8 de junio de 2020 se dicta la Resolución de ANSeS Nº192/2020, por la
cual se implementa nuevas acciones que se podrán realizar a través de Atención Virtual.
En su artículo 2 dispone: “…que mientras dure el aislamiento social, preventivo y
obligatorio, se recepcionarán los tramites referentes a jubilaciones ordinarias, pensiones
directas con servicios de carácter ordinario, pensiones derivadas, prestación por
desempleo y otorgamiento de poderes con certificación de firma domiciliaria de ANSeS
a través de la Plataforma Atención Virtual en el marco de lo establecido en la resolución
Nº 94/2020”.
Merece mención especial el tema referido a los poderes para tramitar o percibir
beneficios, ya que la obtención del mismo es casi una utopía y un contrasentido dentro
del contexto social que se vive. La formalización del mismo está establecido en la
Circular Nº 29/2020 de Anses, la cual establece que el poderdante y apoderado deben
encontrarse en el domicilio del solicitante y allí deberá asistir un empleado de la UDAI
del domicilio a efectuar la certificación de firmas. Previo a esto se debe realizar un
engorroso trámite en Atención Virtual el cual debe ser aprobado con anterioridad. A
todas luces esto va en contra de lo dispuesto en el DNU 297/2020 cuando en la mayoria
de los casos de las prestaciones del SIPA los poderdante son adultos mayores que tienen
un factor de riesgo superior frente al COVID 19 y por lo tanto tendrían que ser los mas
protegidos.
Con el simple análisis de las medidas, podemos aseverar que tanto los beneficiarios del
SIPA como los que tienen beneficios en trámite, no se ven alcanzados por ellas. Ni
telefónicamente ni de manera virtual, se puede acceder al inicio de nuevos beneficios ni
tampoco realizar ninguna gestión para que los que están en trámite y quedaron
paralizados por el cierre de las oficinas puedan ser resueltos. Habrá que seguir
esperando que el sistema se normalice y que las prestaciones que ofrece puedan
concretarse.
Esta situación continúa de manera incierta, pese a que el 4 de mayo de 2020 se dictó la
Resolución Nº 99/2020 que declaraba como “servicios críticos, esenciales e
indispensables” a las actividades de ANSeS, las cuales se prestarán de manera remota o
presencial.
Pese a todo lo descripto, y a que a simple vista parece que con esto el problema está
solucionado, la realidad de los hechos nos muestra que no es así.
Lo que se puede decir a favor es que en algunas localidades del país incluso en Córdoba
algunos empleados han retomado sus tareas a puertas cerradas en su lugar de trabajo,
pero esto no se ve reflejado en los movimientos de los expedientes.
La cruel realidad muestra que las plantas de empleados se ven diezmadas en razón de
que el mismo decreto 297/2020 exime a muchos de ellos de su obligación de trabajar en
razón de ser personas de riesgo, tener menores a cargo o ser mayores de 60 años.
En cuanto a las escasas actividades que sí desarrolló ANSeS podemos destacar el pago
de beneficios previsionales Sin embargo, ante la casi nula planificación y política de
contingencia ante los acontecimientos, el desarrollo de los mismos fue caótico.
Los depósitos se realizaron con normalidad en la cuenta de los pasivos, pero durante
los primeros 14 días de aislamiento social, las entidades bancarias mantuvieron sus
puertas cerradas, motivo por el cual solo era posible de acceder a los mismos a través de
tarjetas de débito en cajeros automáticos, en algunos casos con huella dactilar. Muchos
jubilados y pensionados no contaban con la tarjeta o teniéndola no la sabían utilizar.
Otra posibilidad era realizar pagos y/o compras electrónicas por home banking. Esta
modalidad virtual, es muy compleja de realizar para muchos adultos mayores que no
están familiarizados con las formas y medios digitales actuales.
La apertura de los bancos, recién se realizó el 3 de Abril del corriente año, lo que
provocó que cientos de miles de personas salieran a la calle despavoridas, en busca de
efectivo, atestando las puertas de las entidades bancarias. Sumado a ello que se habilito
también el mismo día, para el cobro del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) para
desempleados y algunos autónomos.
En este contexto, otra medida tomada fue la suspensión del trámite de actualización de
fe de vida hasta el 30 de junio 2020, de los beneficiarios de jubilaciones y pensiones del
Sistema Previsional Argentino y Pensiones no Contributivas. Esto fue dispuesto por la
resolución Nº 79/2020 del 19 de Marzo de 2020 y prorrogada después por la Resolución
Nº 95/2020. El objeto de esto es coadyuvar a que el grupo de vulnerables de adultos
mayores jubilados y pensionados permanezcan en sus hogares y se ha instado a todos
los agentes pagadores de jubilaciones y pensiones a tener por cumplido el trámite de fe
de vida con las modalidades hasta ahora vigentes. Esto quiere decir que ningún banco
podrá requerir el certificado de supervivencia a ningún jubilado durante este periodo de
tiempo. Consecuentemente, pese a que éstos no retiren sus haberes de las cajas de
ahorro, los fondos quedarán depositados ahí y no serán devueltos a ANSeS.
Por otra parte es muy importante destacar, que desde el inicio del aislamiento
obligatorio hasta el día 6 de Abril de 2020 no existía la posibilidad que un jubilado o
pensionado pudiera otorgar un poder para el cobro de sus haberes a un familiar, y
muchos afiliados quedaron totalmente desprotegidos ante esta situación y sin un
sustento para su vida. Esto era así, ya que este trámite se realizaba en ANSeS y la
entidad como venimos diciendo mantiene sus puertas cerradas.
Ante tal situación, con fecha 6 Abril de 2020 se dictó la Decisión Administrativa Nº
467/2020 la cual amplía el listado de actividades esenciales e incorpora la actividad
Notarial. En su artículo 2 la misma se manifiesta de la siguiente manera: “Todo
requerimiento de servicio notarial, tendiente a evitar el traslado o circulación de
personas consideradas de riesgo por la normativa vigente, efectuado por los titulares y
las titulares de un beneficio de la ADMINISTRACION NACIONAL DE LA
SEGURIDAD SOCIAL para el cobro de Jubilaciones, Pensiones….será otorgado en
forma gratuita.” Cabe destacar que la resolución los habilitó exclusivamente para este
trámite.
Con el paso del tiempo, las continuas prorrogas del aislamiento obligatorio, y las
oficinas cerradas al público de ANSeS, todos los turnos, se fueron reprogramando en
forma indefinida y hasta hoy no sabemos cuándo los afiliados podrán hacer efectivo su
derecho a acceder a un beneficio jubilatorio, a reclamos por beneficios retenidos o
suspendidos y demás trámites que requieran atención presencial. . En ningún momento
se tuvo en cuenta por parte del gobierno nacional, el carácter alimentario de estas
prestaciones. Ninguna Política Pública tendió a regularizar la situación, ya que al día de
la fecha pese a haber sido declarada de carácter esencial la actividad de ANSeS con
fecha 4 de Abril de 2020 aún esta entidad sigue sin tener un plan cierto para atender
estas contingencias.
En esta situación se encuentran aquellas personas que cuentan con los requisitos
exigidos por la ley para acceder a los beneficio de previsionales y su concreción se
torna incierta por el modo de actuar de la Administración.
Toda persona que obtuvo su turno de atención con una fecha y que luego fue en
innumerables ocasiones reprogramada, cuando este estado de incertidumbre culmine,
¿será pasible de que sus haberes previsionales se devenguen desde la fecha en que
obtuvo el primer turno? ¿O también deberán ser solidarios por el estado de emergencia
sanitaria? ¿O deberán reclamar judicialmente por años para que sus derechos sean
respetados?
Otro es el problema, para aquellos casos en los que el titular del futuro beneficio no
sacó turno porque aún no cumplía con los requisitos o el hecho que da origen a la
cobertura de la contingencia como la enfermedad o la muerte acaeció en el medio del
aislamiento obligatorio y ya en este período estaba cerrada la línea de turnos.
Con respecto a los créditos otorgados por Anses a los pasivos, inclusive antes de la
pandemia, estos fueron reprogramados tanto en su forma de pago (refinanciación)
aumentando la cantidad de cuotas, como en el tiempo de pago ya que los mismos
fueron diferidos en su cumplimiento.
En el marco de la pandemia que se padece a nivel mundial y en sintonía con las medidas
que venimos describiendo, y con el objetivo de profundizar el acompañamiento y
protección de los sectores más necesitados de la sociedad, el estado nacional decidió
otorgar un Subsidio Extraordinario por única vez a todos aquellos beneficiarios de las
prestaciones del Sistema Previsional Argentino (SIPA), a todos aquellos beneficiarios
de la Pensión para el Adulto mayor ( PUAM) y de las Pensiones no Contributivas por
vejez invalidez y madres de siete hijos. También fueron beneficiarios de este subsidio
los titulares de asignación Universal por Hijo y Asignación por Embarazo.
Este subsidio solo fue para aquellos afiliados que cobran un solo beneficio. El máximo
del subsidio a otorgar es de $3000 y hasta llegar a un monto no superior a $18891,49,
es decir que para los que cobren la mínima establecida por el art 125 de la ley 24241,
percibirán el máximo del subsidio y los que cobren más, será proporcional hasta llegar
a este máximo. Este beneficio se liquidó en el mes de Abril de 2020.
Con respecto a este tema el estado Nacional sanciono el DNU Nº 376/2020 de fecha
19 de Abril de 2020 con el objeto de hacer frente al impacto económico que afecta a
empresas y al empleo, el Aislamiento Social.
Con respecto a afiliados que han iniciado su trámite jubilatorio antes de la pandemia y
estos están pendientes de resolución, los mismos quedaron paralizados, sin
movimiento, por lo que en muchos casos el individuo se quedó sin ingreso, sin acceso al
IFE (por tener abierto un trámite) y sin jubilación, es decir en un total estado de
desamparo y abandono por parte del estado.
Otra situación a tener en cuenta que pone en desventaja al futuro jubilado o pensionado,
es que los que ya lo habían ingresado su expediente al Organismo, al no haber
empleados resolviéndolos, el beneficio demorará mucho más tiempo que el normal en
estos casos. Tampoco tendrá la posibilidad de interponer, ningún recurso administrativo,
ya que los plazos están suspendidos y los haberes que percibirá al momento del cobro
no serán pasibles de ninguna actualización monetaria.
Situación similar sufren los que por el carácter de los servicios que prestaron en su vida
laboral, tal el caso de un chofer de transporte de larga distancia o un empleado de la
construcción entre otros, debieron cesar en su trabajo para acceder al beneficio
previsional, a requerimiento de ANSeS, y a la fecha no han podido presentar el cese
laboral a la Administración o habiéndolo presentado, su expediente aún no fue
resuelto. Es decir, cesó en su empleo y no cobra su jubilación.
En este orden de ideas es importante destacar que en muchos de estos casos además de
quedarse sin sustento económico, los afiliados también se quedaron sin obra social.
De igual modo se encuentran aquellos individuos que contando con los requisitos
necesarios para ser acreedores de la prestación por vejez, ya están cesados de sus
trabajos y no pueden acceder por sí o por apoderados al mismo ya que no hay
posibilidad alguna de obtener un turno.
Es muy preocupante lo que sucede con aquellos afiliados que iniciaron su expediente de
retiro por invalidez, y a raíz de la pandemia, vieron como su situación previsional y
laboral quedaron en una nebulosa sin resolución.
Existen casos en donde se inició el beneficio en las oficinas de ANSeS antes de que se
declare el Confinamiento Obligatorio por el COVID 19. Al afiliado se le realizó la
Pericia Médica en donde obtuvo el 66% de incapacidad para trabajar. Ante tal situación
cesó en sus tareas a solicitud del Organismo, y el tramite quedo pendiente de resolución
al cerrar las oficinas de ANSeS, debido al aislamiento obligatorio. Por lo que el
resultado de ello es una persona sin remuneración laboral, sin haber previsional, con
patologías que lo incapacitan para trabajar e incluso que requieren tratamiento. En
algunas situaciones sin obra social, sin poder tener acceso a IFE. Es decir con un Estado
que fue ciego ante aquellos más vulnerables, dejándolos en una situación desesperante,
ya que en este contexto el hambre y la incertidumbre matan más que el Covid 19.
De esta forma vemos de manera evidente que todos los futuros jubilados y pensionados
que no tienen resueltos sus expedientes, no son alcanzados por ninguna de las medidas
extraordinarias sancionadas por el Estado Nacional, no acceden al subsidio
extraordinario de $3000 porque no son jubilados, tampoco a Ingreso Familiar de
Emergencia por tener un beneficio en curso ni tampoco pueden acceder a los créditos
otorgados por ANSeS.
Otra situación particular es aquella, en las que ni siquiera pudo el afiliado tener la Junta
Médica para que se le realice el Dictamen pertinente a los fines de saber si es pasible de
obtener el beneficio. Sumado a esto la situación empeora si el trabajador se encontraba
con carpeta médica y las mismas se le agotaron durante la pandemia e ingresó en
Reserva de Puesto, tal cual lo establece la Ley de Contrato de Trabajo. En este supuesto
también se quedará sin remuneración, sin beneficio previsional y sin acceso a las
medidas de emergencia.
Cabe hacer una mención especial a aquellos beneficios de Retiro Transitorio por
Invalidez que se venían cobrando y que fueron suspendidos a la espera del Dictamen
Definitivo por Invalidez y éstos no pueden realizarse por encontrarse cerrada la SRT
( Superintendencia de Riesgos del Trabajo)
Lo mismo sucede en los casos de Pensión Derivada por Fallecimiento en los que el
causante ya era jubilado y sus derechohabientes tampoco pueden acceder al beneficio, si
no han acreditado previamente a la sanción del decreto Nº 297/2020 la relación que
ostentan
Esto pone en evidencia que estas personas también han quedado totalmente
abandonadas en razón que, esa prestación de su familiar fallecido dejó de ingresar en
ese hogar e impidió que sus derechohabientes puedan acceder a las asignaciones que le
pudieran corresponder, al haber prestacional y a la ayuda de emergencia.
Es inaceptable que ANSeS requiera en formato papel las partidas para digitalizarlas,
cuando este tipo de Organismo debería tener internamente un cruzamiento de datos con
el Registro Civil y Capacidad de las Personas a los fines de acreditar la muerte y las
relaciones con los derechohabientes y más en estos tiempos cuando todo es digital y esta
informatizado. Es un exceso de rigor formal, que lo único que hace es empeorar la
situación ya penosa de los individuos.
Esta total falta de previsión de políticas públicas orientadas a proteger, atender y dar
respuestas a este sector tan numeroso y vulnerable de la Sociedad, ha hecho que se vean
afectados numerosos derechos y garantías de raigambre constitucional. Más aún cuando
la situación que se vive es de una inusitada gravedad que hubiera requerido un mayor
esfuerzo por parte de aquellos que toman las decisiones en pos de salvaguardar a
aquellos que más lo necesitan.
El más importante de ellos es el art. 14 bis de la Constitución Nacional que asevera que
el Estado otorgará los beneficios de la Seguridad Social, jubilaciones y pensiones
móviles y dará una protección integral de la familia. Al cerrar intempestivamente el
Organismo, sin normas claras para acceder a los beneficios de forma alternativa, dejó a
los ciudadanos en una desprotección total frente a esta situación.
En lo que se refiere al art 18 de la misma normativa, también fue caótico solicitar una
habilitación de feria, que en muchos casos no fue otorgada, para poder acceder a la
justicia y defender sus derechos avasallados.
De esta manera podemos decir también que se omitió atender a lo que establecen los
Tratados Internacionales incorporados a nuestra legislación a través del art. 75 inc 22
de la Constitución Nacional en todo lo referido a Seguridad Social y Derechos
Humanos. Entre ellos podemos mencionar a la Declaración Americana de los Derechos
y Deberes del Hombre, Declaración Universal de los Derechos Humanos, Convención
Americana sobre Derechos Humanos, Convención Interamericana sobre la Protección
de los Derechos Humanos de los Adultos Mayores, el Pacto Internacional sobre
Derechos Civiles y Políticos y la Convención sobre los Derechos de las Personas con
Discapacidad
Estas pautas se dictaron con el fin de atender a causas que no admitan demora o
medidas que de no practicarse podrían causar perjuicio irreparable.
En cuanto a lo que atañe a este fuero, se dispuso que se pudiera habilitar Feria
Extraordinaria en materia no penal entre otras en cuestiones, a las de naturaleza
previsional. En igual sentido lo podrán hacer las Cámaras.
En Villa María para las materias señaladas en el anexo I punto IV de la Acordada CSJN
Nº 14 de 2020.
También tomamos conocimiento que fue habilitada la feria, en aquellas causas iniciadas
de amparos de renta vitalicia previsional en la que el objeto de los mismos es la
obtención del haber mínimo previsional.
Como algo novedoso en nuestra ciudad podemos destacar que se habilitó feria para
medidas autosatisfactivas, respecto de trámites previsionales en curso, tales como el
caso de docentes que habían cesado en sus tareas y que por el ASPO su trámite quedó
pendiente de resolución en las oficinas de ANSeS . En este orden de ideas también
tenemos otra medida autosatisfactiva, en este caso con sentencia favorable, en la cual el
actor tenía resuelto favorablemente su expediente previsional, pero su pago estaba
retenido por la ANSeS. Autos “CUSTO ESTHER INES c/ANSES s/MEDIDA
AUTOSATISFACTIVA” (Expte. 4863/2020)
En lo que se refiere a las causas en trámite es muy poco lo que se puede hacer, ya que
en razón de la Feria Judicial Extraordinaria todos los plazos están suspendidos. A lo
sumo presentar algún escrito, pero los mismos en muy pocas ocasiones son decretados.
Uno de los motivos, es que no son muchos los empleados realizando teletrabajo, otra
razón es que no se pueden llevar expedientes a sus domicilios y no todas las causas
están en su totalidad digitalizadas. Otra cuestión que impide que se trabajen
expedientes es que ANSeS solo está trabajando aquellos en los que se concedió
habilitación de feria judicial.
Pese que algunos referentes del Poder Judicial de la Nación han manifestado que se está
tratando de sacar trabajo atrasado, todo este tiempo de cuarentena, realmente ha sido un
tiempo inerte para los jubilados que ven cada vez más lejos llegar a buen puerto sus
pretensiones.
Movilidad Jubilatoria
En 1958 se sancionó la Ley 14499 y por primera vez se habló de movilidad. La misma
establecía en su artículo 2: “El haber de la jubilación ordinaria será equivalente al 82%
móvil, de la remuneración mensual asignada al cargo, oficio o función de que fuere
titular el afiliado, a la fecha de la cesación en el servicio o al momento de serle otorgada
la prestación, o bien al cargo, oficio o función de mayor jerarquía que hubiese
desempeñado”
Se requería haber ostentado como mínimo 12 meses consecutivos en el cargo, sino era
así, se promediaban los últimos tres años anteriores al cese.
Luego, con la sanción de las leyes números 18037 y 18038 esta modalidad de cálculo
cambió, pero su articulado siguió manteniendo el concepto de movilidad. Sin embargo
los haberes previsionales decrecieron en forma estrepitosa entre los años 1983 a 1989
(vuelta a la democracia), y en 1986 durante el Gobierno de Raúl Alfonsín se decretó la
Emergencia previsional y se Paralizaron las causas judiciales contra el Estado.
Por su parte en el año 2017 se sancionó la ley Nº 27426, la cual fue muy controvertida
y hasta tildada de regresiva del Sistema Previsional. La misma cambia la fórmula de
cálculo de movilidad.
Esta ley sustituyó el art 32 de la ley Nº 24241 y estableció que la movilidad se basará en
el setenta por ciento (70%) en la Variaciones del Nivel General del Índice de Precios al
Consumidor Nacional, elaborado por el INDEC y en un treinta por ciento (30%) por el
coeficiente que surja de la Variación de la Remuneración Imponible Promedio de los
trabajadores Estables (RIPTE). La misma se aplicará trimestralmente.
Cuando creíamos que lo peor ya había pasado, los jubilados y pensionados, nuevamente
deben ser solidarios con la sociedad, ya que independientemente del contexto social
sufrido por el Covid 19, en Diciembre de 2019 nuestro país sancionó la ley Nº 27541
la cual declaró la Emergencia Pública, en materia económica, financiera, fiscal,
administrativa, PREVISIONAL, tarifaria, energética y social hasta el 31 de Diciembre
de 2020.
Nuestra provincia tiene una de las 14 Cajas de jubilaciones no transferidas del país.
El 18 de marzo de 2020 se sanciono la resolución Nº 78/2020 en la que se dispone que
se transfieran a las provincias en concepto de anticipo para el ejercicio 2020 y a cuenta
del resultado definitivo del sistema previsional provincial el equivalente mensual a una
doceava parte del último monto del déficit. En razón de ello y de acuerdo al Anexo
establecido en la norma citada a Córdoba le corresponderá $ 7399425675,31
la cual se abonara de la siguiente manera: Primera cuota de $616618806,23 y once
cuotas iguales y consecutivas de $616618806,28.
De esta forma, el porcentaje del haber jubilatorio, se ve reducido al 67% del haber de
actividad, comparado al 82% que establecía la redacción original de la ley Nº 8024.
Recordemos que este haber del pasivo ya sufrió una quita con el dictado de la ley Nº
10333 que lo redujo a un 76% de la remuneración que le dio origen
En cuanto al haber inicial, se calculará sobre una base de un 4% del promedio de las
ultimas 120 remuneraciones sujetas al cálculo, multiplicado por cada año efectivamente
aportado. La ley establece un mínimo de un 45% del promedio y un máximo de un 82%
del promedio. Es decir que si el afiliado trabajó 10 años y tuvo la desgracia de
incapacitarse, la nueva ley lo castiga por esta situación, abonándole un exiguo haber
correspondiente al 45% del promedio de los últimos 10 años de los haberes de
actividad. Para que un jubilado por invalidez pueda cobrar un 82% del haber de
promedio, tiene que haber trabajado como mínimo un poquito más 20 años.
El beneficio se otorga de manera provisoria por tres años. Este puede ser prorrogable
por dos años más. Al cabo de este tiempo si el beneficiario se rehabilita, el beneficio
queda extinguido, y el empleador debe reintegrar a sus tareas habituales al trabajador.
La nueva normativa aumento la edad necesaria para acceder a esta prestación. Ahora es
70 años para ambos sexos y 10 años de aporte y no es necesario estar en actividad al
momento de solicitarla. La original 8024 requería contar con 65 años de edad
Ha sido muy amplia la reforma en esta prestación. Solo abordaré los ejes más
importantes.
Otro cambio importante, es para aquellos hijos beneficiarios que cursen estudios, ya
que para ellos no regirá el límite de edad de 18 años, sino que se pagará la pensión hasta
los 23 años de edad, siempre y cuando no hayan finalizado sus estudios.
El polémico art. 35
El aspecto conflictivo de este artículo versa entre otras cosas, sobre la acumulación de
beneficios en un solo titular y el Aporte Solidario que deberá realizar, derivado de esta
situación.
La normativa establece que no podrán acumularse más de dos beneficios. Estos pueden
ser ambos de la Caja Provincial o de otra caja que tenga reciprocidad con ésta, o de la
realización de actividad autónoma, ejercicio profesional o relación de dependencia.
En el supuesto que esta acumulación dé como resultado que el afiliado perciba más de
seis haberes mínimos, es decir pesos ciento dos mil ($102.000) se le hará una reducción
en concepto de Aporte Solidario” del 20 %.
También es importante en este punto que no sólo se aplicará a beneficios futuros, sino
también a los ya existentes, por lo que la norma se torna regresiva y ataca derechos
fundamentales de propiedad, no confiscatoriedad, intangibilidad, integralidad,
sustitutividad, los cuales están protegidos constitucionalmente. Además, en el caso
que el beneficiario haya aportados a dos sistemas previsionales, bajo el régimen de
reciprocidad, no se le tiene en cuenta su esfuerzo contributivo a lo largo de los años,
cambiándole las reglas de juego de manera intempestiva y arbitraria, con una sesión
legislativa prácticamente sin debate.
Respecto de este tema solo me detendré a decir que se aumentó la edad jubilatoria de
estos agentes. El mismo será en forma escalonada cada nueve meses, por lo que recién
en el año 2027 se podrá aplicar la norma tal cual lo establece la ley.
CONCLUSIONES:
Esta pandemia ha sido un antes y un después para todos los órdenes de la vida de los
individuos. Implica un adecuarse a vivir de manera diferente, reinventarse, y adaptarse a
las nuevas tecnologías que nos brinda la ciencia para poder acceder en muchos casos, a
los servicios esenciales que brinda el Estado, para dar cobertura y protección a derechos
fundamentales de los miembros de la Sociedad.
Han sido muchos los cambios que en estos casi tres meses, ha sufrido el acceso a la
Seguridad Social. En la faz administrativa con oficinas cerradas y un Sistema virtual
que prácticamente funciona en un 20 %, y que a cuentagotas se le incorporan servicios,
va a ser muy difícil y lento, que el conjunto de los administrados puedan ver satisfechas
sus necesidades en el corto plazo. Seguramente muchos deberán acudir a la justicia para
hacer valer sus derechos.
Resta decir, que para el gran universo de adultos mayores y sectores vulnerables, que
son los principales beneficiarios de la Seguridad Social, este tipo de herramientas los
alejará aún más del sistema, ya que por ignorancia o desconocimiento del manejo de
sistemas informáticos o por no contar con los medios tales como celulares
computadoras, o internet para acceder a ella, quedarán excluidos de las coberturas, si
no realiza un plan de contingencia para paliar estos inconvenientes.
No podemos obviar decir, que como está planteada la Atención Virtual, se puede
visualizar que ésta es muy compleja y tiene muchas dificultades de acceso. Para ilustrar
solo recepta 60000 trámites diarios los cuales tampoco son de manera absoluta, ya que
solo es una asistencia que requerirá luego un trámite posterior que hasta el día de hoy es
indefinido e incierto.
Que podemos decir de la faz judicial. No difiere mucho de lo hasta aquí manifestado.
Todas las causas paralizadas y los adultos mayores que ven cada vez más lejos que sus
derechos puedan ser convalidados. Con casi tres meses de feria judicial en tribunales
federales y con muy pocas habilitaciones en materia previsional en nuestra ciudad. El
panorama a futuro no es muy alentador.
Habrá que discurrir, si la misma afectó derechos adquiridos de los pasivos, fue
confiscatoria o si produjo un daño en el patrimonio de los afectados.
También se deberá evaluar si la norma es regresiva, ya que la jurisprudencia en la
materia siempre habla de derechos en progresión
Otro tema a analizar es el tema de la vulnerabilidad y de que siempre el hilo se corta por
la parte más delgada. Siempre son los adultos mayores los que deben ser solidarios.
El índice de movilidad nunca podrá ser un derecho absoluto. Siempre será un derecho
en expectativa. Pero habrá que analizar si por cuestiones especialísimas como las que
estamos transitando son razón suficiente para que la misma sea regresiva.
Solo el tiempo nos dirá si esto se transforma en un nuevo leading case como lo fue
Adolfo Badaro, no en cuanto a los fundamentos, pero si en lo referido al aumento de
litigiosidad
BIBLIOGRAFIA
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