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ANATOMIA PULMONAR

MARIA PAOLA QUINTERO SOTO


MARIA CAMILA VERGARA PEREZ
CLAUDIA FERNANDA BRANGO MENDOZA
MARIA CAMILA MORALES GARCIA.

ENTREGADO A:
FERNANDO DE JESUS LARIOS.

UNIVERSIDAD DEL SINU.


ANATOMIA II
MEDICINA II
MONTERIA-CORDOBA.
TALLER GRUPAL.
A. Explicar desde el punto de vista anatómico las ramificaciones de las vías
aéreas, especificando la segmentación pulmonar.
B. Estructuras Oseas de la caja torácica.
C. Estructuras anatómicas mediestinales anterior, medio y posterior.
D. Anatomía pulmonar completa.
E. Anatomía cardiaca completa.
SOLUCION.
A. Anatomía de la vía aérea.
BOCA: La cavidad oral se extiende desde los labios anteriormente hasta los
pliegues palatoglosos posteriormente. La boca tiene cuatro lados: techo, piso
y paredes laterales. El techo está formado por el paladar duro y el paladar
blando. El paladar duro lo conforman el hueso palatino y el hueso maxilar. El
paladar duro forma a su vez el lado interno del piso de la cavidad nasal. El
paladar blando está formado por el músculo esquelético que interviene en el
cierre de la cavidad nasal al deglutir y ayuda a mantener abierta la faringe al
respirar. Los músculos palatoglosos (X par) y palatofaríngeo (X par) tensan el
paladar blando junto con el músculo de la úvula (X par) y el tensor del velo del
paladar (V par). El músculo palatogloso también ayuda a levantar la lengua
mientras levanta la laringe durante la deglución. El piso de la boca está
formado por la mandíbula, la articulación temporomandibular y la lengua. La
mandíbula forma el marco estructural del piso de la boca.
La articulación temporomandibular es la única articulación móvil en la cabeza. Posée
dos compartimentos sinoviales que están separados por un disco articular
fibrocartilaginoso.
Esta organización le permite movimientos de apertura, cierre, protrusión, retracción y
laterales. La protrusión la realizan los músculos pterigoideos laterales, la
retracción los músculos temporales y el cierre, los músculos pterigoideos
medio, maseteros y temporales. De especial importancia son los músculos
maseteros los cuales tienen un tipo especial de fibras que a ciertos estímulos
pueden responder con contracciones lentas y tónicas precipitando espasmo o
trismus. El trauma, el dolor, la inflamación debida a infección o a irradiación
pueden desencadenar el trismus de los maseteros haciendo la manipulación
de la vía aérea muy difícil y a veces imposible.

La lengua: es un órgano muscular que se inserta en la mandíbula, el hueso hioides,


apófisis estiloides y paredes de la faringe. La lengua la forman varios
músculos inervados por el Xll par, el geniogloso que protruye la lengua y
ayuda a que la vía aérea esté patente. El hipogloso que se origina en el
hueso hioides. El músculo estilogloso se origina en la apófisis estiloides del
hueso temporal. Por su tamaño, movilidad y unión a la mandíbula, hueso
hiodes y epiglotis, la lengua juega una parte importante en mantener
permeable la vía aérea. Protruyendo la mandíbula (subluxación anterior), la
base de la lengua se mueve anteriormente facilitando la ventilación
espontanea o asistida con mascarilla facial en el paciente inconsciente. La
membrana mucosa de la lengua la conecta lateralmente a la pared faríngea y
posteriormente a la epiglotis a través de los pliegues glosoepiglóticos. Su
inervación sensitiva procede de cinco fuentes diferentes. El nervio lingual
provee las fibras sensitivas a los dos tercios anteriores de la lengua. La
cuerda del tímpano, rama del nervio facial, proporciona la inervación
gustativa. La base de la lengua recibe fibras sensitivas del nervio laríngeo
superior, rama del nervio vago. La parte posterior de la lengua esta inervada
por el nervio glosofaringeo. Este último se encuentra por debajo del arco
palatogloso (pilar faucial anterior) adyacente a la lengua y es de fácil acceso
para bloqueos regionales. El tamaño de la lengua en relación con el espacio
orofaríngeo es un determinante importante de la facilidad o dificultad para
practicar la laringoscopia directa e intubación. Los dientes permiten una
correcta aproximación de la maxilar y la mandíbula. Si el tono de la lengua
está intacto, los dientes crean un espacio entre la lengua y el paladar. La
forma y estado de la dentadura del paciente son factores importantes a
considerar durante una laringoscopia rígida. Los incisivos maxilares
protuberantes pueden limitar la visibilidad de la laringe durante la
laringoscopia directa. La ausencia de dientes hace difícil colocar una
mascarilla facial especialmente si la encías están retraídas.

NARIZ: Es la estructura más fija del tracto respiratorio. Las dos cavidades nasales
son dos cámaras paralelas separadas entre sí por un cartílago septal o pared
medial. Consta cada una de narina y coana, además de piso y techo. Los
orificios externos de la nariz se llaman vestíbulos nasales o narinas y los
orificios posteriores que se continúan con la nasofaringe se denominan las
coanas.1 El tamaño de las narinas puede servir de guía para seleccionar el
tubo naso-traqueal apropiado. La distancia entre las narinas y la carina es en
promedio 32 cm en el hombre y 27 cm en la mujer.
El tabique nasal está formado por el hueso vómer, la lámina perpendicular del
etmoides y el cartílago septal. El piso de la nariz está compuesto por el
proceso palatino del maxilar superior y la lámina horizontal del hueso palatino.
Cuando el paciente está en posición decúbito supina y con la cabeza en
posición neutra, el piso de la nariz tiene una orientación vertical con un
angulamiento anterior final de la misma.
El techo de la nariz es la estructura cribiforme del hueso etmoides a través del cual
pasa el nervio olfatorio en ruta hacia el cerebro.
Las paredes laterales son irregulares y están formadas por partes adicionales del
hueso etmoides (cornetes nasales superior y medio). El cornete nasal inferior
es un hueso separado que se articula con el hueso maxilar. Cada cornete
cubre un meato que sirve de drenaje de los senos paranasales y de los
conductos lacrimales. La inervación sensorial de la mucosa nasal está dada
por la rama primera u oftálmica y la rama segunda o maxilar del nervio
trigémino. Aunque estos nervios pueden ser bloqueados separadamente, la
forma usual de producir anestesia en las cavidades nasales es pulverizando
con una solución de anestésico local o taponando las fosas nasales con
gasas impregnadas con cocaína o anestésico local y adrenalina.
La inervación simpática de la nariz proviene del ganglio cervical superior. Si la
actividad simpática aumenta se producirá espasmo vascular de la membrana
mucosa. La anestesia general deprime la actividad del sistema nervioso
autónomo incluyendo la actividad simpática causando vasodilatación y
congestión de la membrana mucosa, aumentando la incidencia de sangrado
durante la manipulación nasal. Se ha reportado menos sangrado en
intubación naso-traqueal con el paciente despierto en contraste con el
paciente bajo anestesia general.
El aporte de sangre a la mucosa nasal es abundante y está provista por la arteria
esfenopalatina, rama de la arteria maxilar y por la rama septal de la arteria
facial. Estas dos arterias se anastomosan entre sí formando la red o plexo de
Kiesselbach en la pared anterior medial de la nariz que es sitio común de
sangrado nasal. Si se aplica cocaína y vasoconstrictores la membrana
mucosa se contrae, aumentando el diámetro del pasaje nasal y disminuyendo
la incidencia de sangrado.

Faringe: Es un tubo muscular amplio con paredes laterales y posteriores y


recubierto por mucosa y submucosa. La faringe representa un tracto común
para la vía aérea superior y el esófago. Mide de 12 a 15 cm de largo y se
extiende desde la base del cráneo hasta el cartílago cricoides a nivel de sexta
vértebra cervical donde se continúa con el esófago. Consta de nasofaringe,
orofaringe e hipofaringe.
Los músculos faríngeos incluyen los constrictores superior, medio e inferior. Durante
la deglución estos músculos se contraen y avanzan el bolo alimenticio hacia
el tubo digestivo. La parte más baja del músculo constrictor inferior se origina
en el cartílago cricoides y se le llama músculo cricofaríngeo el cual actúa
como un esfínter a la entrada del esófago. Su función es evitar la
regurgitación del contenido gástrico. Aunque con el inicio de inconsciencia,
este músculo pierde su tono y cualquier fluido del esófago puede entrar a la
orofaringe, aumentando el riesgo de aspiración pulmonar.
Los músculos constrictores están inervados por el plexo faríngeo que transmite las
fibras del nervio accesorio a la rama faríngea del vago. Adicionalmente el
constrictor inferior recibe filamentos de las ramas externa y recurrente
laríngea del nervio vago.
La trompa de Eustaquio es un tubo cartilaginoso que equilibra la presión entre el
oído medio y el medio ambiente. Su apertura descansa en la pared lateral de
la nasofaringe debajo del cornete inferior. Tres músculos, el tensor del velo
del paladar, el elevador del velo del paladar y el estilofaríngeo ayudan a abrir
la trompa de Eustaquio a la nasofaringe. Las amígdalas nasofaríngeas
conocidas también como adenoides son tejido linfoide cubierto de epitelio
ciliado. Las amígdalas descansan en el techo y pared posterior de la
nasofaringe, contra el músculo constrictor superior. Se atrofian cerca de la
pubertad. Cuando están hipertrofiadas pueden causar obstrucción aérea
parcial y dificultar el paso de un tubo naso-traqueal. La punta del tubo naso-
traqueal puede también entrar al receso faríngeo y si se usa la fuerza para
avanzarlo puede penetrar la mucosa y crear una falsa ruta. El seno
esfenoidal, ubicado en el arrea postero-superior a la nasofaringe, separa la
faringe de la silla turca. Por esta vía transnasal se aborda quirúrgicamente la
hipófisis.
Las amígdalas palatinas son tejido linfoide situado a ambos lados de un triángulo
formado por los arcos palatoglosos y palatofaríngeo (pilares de las fauces)
que conectan la orofarínge anteriormente a la base de la lengua.
El anillo linfático faríngeo de Waldeyer se encuentra a la entrada de la orofaringe.
Está formado por tejidos linfoepiteliales procedentes de las amígdalas
palatinas, faríngeas y linguales.6 Las paredes orofaríngeas no son rígidas y
están sujetas a colapsarse si se ejerce presión transmural negativa.
Normalmente es mínima la presión negativa orofaríngea transmural que se
genera durante los esfuerzos inspiratorios regulares. Pero, en presencia de
obstrucción parcial de la vía aérea y de aumento del esfuerzo inspiratorio, la
presión negativa transmural aumenta y puede causar colapso de los tejidos
blandos al punto de aumentar o causar una completa obstrucción de la vía
aérea.
La faringe está inervada por los nervios trigémino, vago y glosofaríngeo. El nervio
laríngeo superior, rama del nervio vago, transmite impulsos aferentes de la
base de la lengua y la valécula. El reflejo nauseoso es desencadenado al
estimular la pared posterior de la faringe. El estimulo precipita contracción de
los músculos constrictores de la faringe. La vía aferente de este reflejo es el
nervio glosofaríngeo y la eferente es el nervio vago. Estos nervios también
forman un arco reflejo con fibras simpáticas que se dirigen al corazón y vasos
sanguíneos que cuando se estimulan producen hipertensión y taquicardia.
La hipofaringe descansa a nivel de la cuarta a la sexta vértebra cervical, entre el
borde superior de la epiglotis y el borde inferior del cartílago cricoides.
La fosa piriforme constituye la parte más baja de la hipofaringe y descansa lateral a
la laringe. La submucosa de esta fosa está inervada por el nervio laríngeo
interno, rama del nervio vago.

LARINGE: La laringe es esencialmente una válvula protectora situada en la parte


superior del tracto respiratorio. En el adulto la laringe mide cerca de 5 a 7 cm
(es más corta en las mujeres) y descansa opuesta a la cuarta, quinta y sexta
vértebras cervicales. Además de tener propiedades de esfínter, la laringe
también contiene al órgano de la fonación. La laringe se continua
inferiormente con la parte superior de la traquea y en su parte superior con la
faringe.
El Vestíbulo es la porción de la cavidad de la laringe sobre las cuerdas vocales y
está limitada anteriormente por la epiglotis, posteriormente por el cartílago
aritenoides y el músculo interaritenoide y a cada lado por los pliegues
ariepiglóticos. Los dos tercios anteriores de la rima glotidis o glotis están
limitados por las cuerdas vocales y el tercio posterior por el aritenoides. Los
dos tercios anteriores de la glotis tiene forma triangular y el tercio posterior es
rectangular debido a la anatomía de los cartílagos aritenoides.
El tubo endotraqueal redondo no ocupa la dimensión antero-posterior de la glotis en
forma completa, a menudo ensancha la apertura glótica en la dimensión
transversa. El tubo endotraqueal hace contacto principalmente con los
procesos vocales derechos e izquierdos de los cartílagos aritenoides y el
cartílago cricoides. La presión constante sobre estos sitios puede llevar a
isquemia y ulceración de la mucosa y a el riesgo de estenosis subglótica.

Cartilagos y ligamentos.
La laringe esta formada por nueve cartílagos, tres impares, el tiroides, la epiglotis, y
el cricoides, y tres pares los aritenoides, los corniculados y los cuneiformes.
El Cartílago tiroides tiene forma de concha y es el más largo. Consta de dos láminas
de 3 cm de largo que se fusionan anteriormente para formar la prominencia
laríngea o manzana de Adán. Los bordes libres posteriores se proyectan en
los cuernos superiores e inferiores. Los cuernos superiores del cartílago
tiroides son punto de referencia anatómica para el bloqueo de los nervios
laríngeos superiores. Los cuernos inferiores se articulan con el cartílago
cricoides.
La epiglotis, un cartílago único de forma oval, descansa detrás de la base de la
lengua y el hueso hioides. La margen inferior más angosta se une por medio
del ligamento tiroepiglótico a la base del cartílago tiroides. La epiglotis
también se une a la lengua mediante los pliegues (lateral y medial)
glosoepliglóticos. La depresión a ambos lados de los pliegues
glosoepiglóticos se denomina vallecula. El ligamento hioepiglótico conecta la
superficie anterior de la epiglotis a la superficie posterior del cuerpo del hueso
hioides.
El cartílago cricoides tiene forma de anillo de sello. El arco anterior mide 5 a 7 mm
de alto, mientras que en su segmento posterior, la lámina, mide de 20 a 30
mm. El cricoides se puede palpar con facilidad inmediatamente por debajo del
cartilago tiroides al cual se une por medio de la membrana cricotiroidea, punto
de referencia para la cricotiroidotomia, ventilación transtraqueal, intubación
retrograda, así como para la inyección translaríngea de anestésicos locales.
El borde superior del cricoides se encuentra a aproximadamente 15 mm de
las cuerdas vocales verdaderas. El margen inferior del cricoides está a nivel
de la sexta vértebra cervical, se une a la traquea por medio del ligamento
cricotraqueal, sitio opcional para intubaciones retrógradas. El cricoides,
gracias a su forma de anillo completo, sirve para comprimir posteriormente el
esófago contra los cuerpos vertebrales (maniobra de Sellick) disminuyendo el
riesgo de regurgitación y de aspiración pulmonar.
El hueso hioides se localiza entre la mandíbula y la laringe a nivel de la tercera
vértebra cervical. El hueso hiodes no hace parte de la laringe pero ayuda a
mantenerla en posición y la eleva durante la deglución y la fonación.
Los cartílagos aritenoides tienen forma de pirámide y se articulan con el aspecto
superior del cartílago cricoides. Los cartílagos corniculados y cuneiformes se
articulan con la parte superior del aritenoides en continuidad con el pliegue
ariepiglótico para formar dos prominencias en la parte posterior de la rima
glotidis.
Las cuerdas vocales verdaderas son pliegues de membrana mucosa que se
extienden desde la mitad anterior del cartílago tiroides hasta los procesos
vocales de los cartílagos aritenoides. Las cuerdas vocales falsas se unen
ligeramente superior a las anteriores en las zonas verticales de los
aritenoides.
La membrana tirohioidea se encuentra entre la margen superior del cartílago tiroides
y el hueso hioides. Esta membrana está perforada bilateralmente por la rama
interna del nervio laríngeo superior y por los vasos laríngeos superiores.

Músculos Intrínsecos:
Los músculos laríngeos intrínsecos a menudo se catalogan según sus acciones
principales. Sin embargo las acciones individuales de estos músculos se
sobreponen para producir las tres acciones principales de la laringe, abrir la
glotis, cerrar la glotis y tensionar las cuerdas vocales. Algunas de estas
funciones, en relación a cada músculo en particular, se describen a
continuación:
El músculo cricoaretinoideo lateral mueve las cuerdas vocales hacia adentro
cerrando la glotis. Los músculos tiroaretinoideos interno y externo forman el
cuerpo de la cuerda vocal y sirven de tensor interno de la misma, aunque
también poseen función adductora. El músculo interaritinoideo
(ariaritenoideo), el único músculo impar, al contraerse aproxima los
aritenoides cerrando la comisura posterior. El músculo cricotiroideo, cuya
contraccion imprime al cartílago tiroides un movimiento de báscula hacia
adelante sobre el cricoides, es tensor de las cuerdas vocales. Los músculos
aritenoepigloticos van del vértice del aritenoides a los bordes laterales de la
epiglotis. Son depresores de la epiglotis. El musculo cricoaretinoideo posterior
se inserta en la cara posterior del cricoides y en la apófisis muscular del
aritenoides. Al contraerse mueve hacia abajo y hacia atrás esta apófisis. Este
músculo es el único abductor de la glotis.

Músculos extrínsecos:
Los músculos laríngeos extrínsecos se dividen en dos grupos: suprahioideos e
infrahiodeos. Los músculos suprahioideos elevan la laringe y la lengua. Este
grupo de músculos se extiende desde el hueso hioides y apófisis estiloides
hasta la mandíbula e incluye el digástrico, estilohioideo, milohioideo y
genihioideo.
Los músculos depresores de la laringe, el grupo infrahioideo, incluye el
esternohioideo, esternotiroideo, tirohioideo y omohioideo. Sus acciones
consisten en hacer bajar al cartilago tiroides y al hueso hioides al final de la
deglución. También ayudan a controlar la posición de la laringe durante la
respiración y la fonación. A las calcificaciones del ligamento estilohioideo se
le ha atribuido la limitada exposición de la laringe durante laringoscopia rígida
e intubación traqueal en algunos pacientes con vía aérea difícil.

Inervación y función.
La laringe esta inervada por los nervios laríngeos superiores y laríngeos recurrentes,
ambos ramas del vago. El nervio laríngeo superior, a la altura del hueso
hioides, se divide en dos ramas, una rama interna sensitiva y una rama
externa motora. La rama interna sensitiva perfora la membrana tirohiodea a
nivel del asta mayor de cartilago tiroides para luego dividirse en ramas
superiores e inferiores. Las ramas superiores del nervio laríngeo superior
interno inervan la vallécula, la superficie posterior de la epiglotis y los senos
piriformes. Las ramas inferiores suplen la sensibilidad de las cuerdas
verdaderas. Algunas de sus ramas terminales se unen con ramas
ascendentes del nervio laríngeo recurrente ipsilateral.
La rama externa motora del nervio laríngeo superior inerva el musculo cricotiroideo.
La inervación sensitiva de la superficie anterior de la epiglotis está dada por el
nervio glosofaríngeo. El nervio laríngeo recurrente inerva todos los músculos
intrínsecos a excepción del cricotiroideo. El laríngeo recurrente también suple
la sensibilidad de la membrana mucosa debajo de las cuerdas vocales y la
mucosa traqueal. Los nervios laríngeos recurrentes envían ramas
anastomóticas a los plexos cardiacos y aórticos. Estas anastomosis explican
en parte los cambios hemodinámicos que se producen durante la
manipulación de la vía aérea.
La abertura de la glotis ocurre solo a nivel de las cuerdas vocales verdaderas.
Durante la inspiración normal, las cuerdas vocales están abducidas y la rima
glotidis tiene forma triangular. El diámetro sagital promedio de la glotis es de
23 mm en el hombre adulto y de 17 mm en la mujer adulta. La distancia entre
el proceso vocal cuando las cuerdas están abducidas es de cerca de 19 mm
en el hombre y 12 mm en las mujeres. En inspiración forzada las cuerdas
vocales están abducidas al máximo y la forma triangular de la glotis se
convierte en una forma de diamante. Así la intubación con el paciente
despierto se facilita cuando el paciente inspira profundamente. En expiración
las cuerdas vocales están adducidas, dejando una abertura pequeña entre
ellas facilitando así la fonación.
El cierre de la glotis puede ocurrir en tres niveles diferentes: a nivel de las cuerdas
vocales verdaderas (cierre de la rima glotidis), a nivel de las cuerdas vocales
falsas (cierre del surco vestibular) y a nivel de los pliegues ariepiglóticos
(cierre de la apertura laríngea). El reflejo del cierre glótico protege el árbol
bronquial del paso de sólidos y líquidos. Este reflejo ocurre por estimulación
de los nervios laríngeos superiores.
El laringoespasmo es un reflejo potencialmente fatal, en el cual la estimulación
intensa de los nervios laríngeos superiores desencadena una reacción
adductora prolongada que persiste hasta después de haberse interrumpido el
estimulo. Durante el laringoespasmo se cierran las cuerdas vocales
verdaderas, las cuerdas vocales falsas y los pliegues ariepiglóticos.

TRAQUEA Y BRONQUIOS.
La tráquea se extiende desde en el borde inferior del cartílago cricoides hasta la
bifurcación bronquial, en la carina, a nivel de la 5a vértebra torácica. En el
adulto la tráquea mide aproximadamente 10 a 15 cm de longitud y 2.5 cm de
diámetro. Se compone de 18 a 24 cartílagos, en forma de herradura, unidos
anteriormente por tejido fibroelástico y conectados posteriormente por un
músculo liso (músculo traqueal). La porción posterior se le conoce como zona
membranosa, estructura en donde frecuentemente se presentan lesiones
iatrogénicas durante la instrumentación de la vía aérea.
La porción cervical de la tráquea ocupa la línea media, la parte inferior es
desplazada a la derecha por el arco aórtico. Los nódulos linfáticos se
encuentran a cada lado del árbol traqueobronquial y debajo de la carina. Un
arco aórtico prominente y nódulos linfáticos bronquiales y paratraqueales
aumentados de tamaño pueden causar compresión externa con
estrechamiento y desplazamiento de la tráquea y de los bronquios
principales. Esto puede interferir con la adecuada colocación de un tubo
endotraqueal o endobronquial.
El bronquio principal derecho deja la tráquea a un ángulo de 25 a 30 grados. Su
lumen es de aproximadamente 16 mm de diámetro y su longitud de 18 mm en
promedio (8-32 mm). El bronquio principal derecho de subdivide en tres
bronquios lobares, superior, medio, e inferior respectivamente. El bronquio del
lóbulo superior derecho sale del aspecto lateral del bronquio principal que a
su vez se ramifica en el bronquio segmentario apical, bronquio segmentario
anterior y bronquio segmentario posterior. El bronquio del lóbulo medio da
origen al bronquio segmentario medial, anterointerno o medial y al bronquio
segmentario lateral o posteroexterno. El bronquio del lóbulo inferior es la
continuación del bronquio intermedio y da origen a cinco ramificaciones. El
bronquio segmentario superior o apical, bronquio segmentario basal medial,
bronquio segmentario basal anterior, bronquio segmentario basal lateral y el
bronquio segmentario basal posterior.
El bronquio principal izquierdo deja la tráquea en un ángulo aproximado de 45
grados. Es ligeramente pero sustancialmente l cm más largo que el bronquio
principal derecho con una longitud promedio de 5 cm (3-7cm). Se divide en
bronquios lobares superior e inferior. El bronquio lobar superior da origen a
tres bronquios segmentarios, el apicoposterior, el anterior y el lingular. El
bronquio lobar inferior se divide en cuatro bronquios segmentarios, apical
inferior, basal anterior, basal lateral y basal posterior. La inervación simpatica
del árbol traqueobronquial se origina de los cinco primeros ganglios torácicos.
El nervio vago suple las fibras parasimpáticas. El sistema parasimpático es el
de mayor influencia en el control del tono broncomotor. En ultimas, el tono
broncomotor es un estado continuo y variable de contracción de la
musculatura bronquial que está presente en ambas fases de la respiración
pero la constricción de los bronquiolos es mayor durante la espiración que
durante la inspiración.

La caja torácica tiene forma de un tronco de cono, con una cara anterior, una
posterior, dos laterales, un orificio superior o vértice y otro inferior o base.
Está constituida por una serie de elementos óseos articulados entre sí
(porción torácica de la columna vertebral, las costillas, los cartílagos costales
y el esternón) que le confieren cierta rigidez, la cual servirá de protección a
las vísceras torácicas a la vez que permite movimientos de elevación y
descenso, esenciales para la mecánica respiratoria.

B. Estructura ósea de la caja torácica:

Manubrio: Parte superior del esternón donde las costillas se terminan.


Acromion: Excrecencia del omoplato en forma de espátula.
Apófisis coracoides: Excrecencia del borde superior del omoplato.
Escápula /omoplato: Hueso triangular, llano y par, situado en la espalda.
Costillas: Hueso que forma la caja torácica.
Lugar del corazón: Donde está el corazón.
Apófisis xifoides: Excrecencia inferior del esternón.
Cartílago costal: Tejido flexible y elástico de las costillas.
Riñón: Órgano filtra las impurezas corpóreas.
Estómago: Parte del conducto digestivo en forma de bolsa, y en él se
transforman los alimentos.
Duodeno (al principal): Comienzo del intestino delgado.
Uréter: Conducto de la orina del riñón a la vejiga.
Pilar: Hueco que hace comunicar el estómago con el duodeno.
Hígado: Glándula digestiva que hace la bilis.
Esternón: Hueso que une al antebrazo las costillas de la caja torácica.
Pulmón: Órgano en forme de bolsa, lugar de la respiración.
Cartílago costocondral: Cartílago situado entre las costillas y el esternón.
Cavidad glenoidea: Puente de articulación de la pierna.
Clavícula: Hueso de la cintura escapular situada entre el esternón y el
omoplato.
Columna vertebral o raquis: Conjunto de las vértebras que contiene la
médula espinal en su medio.
C.
Mediastino anterior

● Timo
● Ganglios linfáticos
● Tejido adiposo
● Vasos mamarios internos
● Tiroides

Mediastino Medio
● Corazón
● Pericardio
● Ao ascendente
● Vasos braquiocefálicos
● Vasos pulmonares
● Tráquea
● Bronquios principales
● Ganglios linfáticos
● Nervio laríngeo recurrente izquierdo
● Nervio frénico
● Nervio vago

Mediastino posterior

● Esófago
● Ao descendente
● Venas ácigos y hemiácigos
● Conducto torácico
● Nervio vago
● Ganglios linfáticos
● Cadenas simpáticas
● Grasa

D. Anatomía del pulmón.


Los pulmones intervienen en la oxigenación de la sangre, participando así en el
ciclo respiratorio humano. Están formados por bronquios unidos por tejido
conectivo que se bifurcan hasta la altura de los alvéolos, así como por un
sistema vascular paralelo.
Los pulmones están formados por tejido conectivo que encierran unas estructuras
tubulares (los bronquios), que se van bifurcando progresivamente desde la
tráquea, hasta formar unos túbulos mucho más finos (alveolos).
Paralelamente a estas estructuras tubulares, discurren un sistema vascular.
El hombre toma aire a través de la nariz o, con menos frecuencia, a través de
la boca. El interior de la nariz está recubierto por una membrana mucosa
que humedece el aire que se inhala, lo calienta y lo limpia de
contaminantes. La nariz y la boca están conectados a través de la faringe y
la laringe con la tráquea. A través de la laringe, el aire llega en primer lugar
a la tráquea, que tiene una longitud de entre 10 y 12 centímetros. La
tráquea tiene forma tubular y desciende hasta la cuarta vértebra torácica
donde se bifurca para dar lugar a los dos bronquios principales: el
del pulmón derecho y el del pulmón izquierdo.
Presentación de los pulmones: bronquios y lóbulos.
Los pulmones están conformados por lóbulos, tres en el pulmón derecho y
dos en el izquierdo. Estos lóbulos a su vez se subdividen en segmentos
más pequeños (por ejemplo, segmento inferior, superior o medio). A su vez
dentro de los lóbulos pulmonares discurre un sistema tubular bronquial. Es
decir, los bronquios principales izquierdo y derecho, se van subdividiendo,
disminuyendo progresivamente su diámetro,
en bronquios, bronquiolos y alveolos.
Los alveolos están recubiertos por
una pared capilar. Un tejido
extremadamente fino de algunos
micrómetros de espesor entre los
alvéolos y los capilares llenos de sangre realiza el intercambio, es decir, el
proceso de difusión, entre el aire que se toma y la sangre. Cuando la
sangre fluye a través de los capilares pulmonares, los glóbulos rojos se
unen al oxígeno y desprenden la dióxido de carbono.

Anatomía del pulmón: Los bronquios.


Los pulmones ocupan la mayor parte de la caja torácica. Debajo de estos se
encuentra el diafragma. Los pulmones se sitúan a los lados del corazón.
El pulmón derecho cuenta con un lóbulo superior, otro medio y otro inferior.
El pulmón izquierdo sólo tiene un lóbulo superior y otro inferior y es menos
voluminoso que el pulmón derecho. Cada lóbulo se divide en varios
segmentos.
Los bronquios y todo el sistema tubular pulmonar se encargan de transportar el
aire desde la tráquea hasta los alveolos. La tráquea se extiende paralela a
la columna vertebral hasta la altura del corazón, aproximadamente. Aquí la
tráquea se bifurca para formar el bronquio principal derecho y el izquierdo.
Cada bronquio tiene ramificaciones progresivas arboriformes que llegan
al pulmón derecho y al izquierdo. Con una radiografía, se puede observar el
comienzo de la ramificación central de los bronquios y los vasos
sanguíneos que se encuentran encima del corazón. Esto se conoce como
hilo pulmonar. De forma paralela a los bronquios, los vasos sanguíneos se
ramifican también en el “árbol bronquial”.
El bronquio derecho se divide en tres lóbulos más pequeños: uno se sitúa arriba,
otro en el medio y otro abajo. El bronquio izquierdo se divide en
dos lóbulos: el superior y el inferior. Cada lóbulo tiene también su
propio bronquio, que avanza por el interior del lóbulo y se divide en
segmentos. El sistema conductor de aire se ramifica cada vez más. Los
bronquios tienen la misma estructura que en un árbol, cuyas ramas son
cada vez más delgadas. La ramificación más pequeña desemboca en
los alveolos pulmonares, que forman una protuberancia en forma de uva en
el extremo exterior del árbol bronquial.
Los alveolos pulmonares.
Los alveolos están cubiertos por un tejido elástico conectivo y por un sistema de
vasos sanguíneos. En estos se produce el intercambio de gases. A través de las
pequeñas ramificaciones que no superan los 100-300 µm (1 µm = 10-3 mm) de
dimensión, se crea una gran superficie en la que se puede realizar el intercambio
de gases. La superficie total que se puede crear en el pulmón alcanza los 70 a 80
m2.

Anatomía del pulmón: pleura (pleura


visceral)
Los pulmones están rodeados de forma
individual por la pleura (pleura visceral).
La pleura tiene una enorme importancia
para la respiración. Cada pulmón está totalmente cubierto por pleura. Solo
se interrumpe en el hilo pulmonar, donde los vasos sanguíneos y
los bronquios principales entran en los pulmones.
La capa externa de la pleura se llama pleura parietal y recubre la parte interior de
la caja torácica. Además, la pleura parietal separa los pulmones hacia la
mitad de la caja torácica (con el llamado mediastino). En el mediastino se
encuentra el corazón y por él pasan la aorta, las venas y arterias
pulmonares, la tráquea y el esófago. La pleura visceral recubre la superficie
de los pulmones mientras que la pleura parietal forma recubre la cara
interna de la caja torácica en la que se encuentran éstos.
Las dos capas de pleura se encuentran próximas entre sí, pero entre ellas se halla
un líquido en pequeña cantidad, que amortigua y permite que los pulmones
puedan expandirse durante la inspiración.
Anatomía de los pulmonares.
Por el mismo principio, el pulmón se expande gracias a la acción
del diafragma. El diafragma es una ancha capa muscular que separa el
tórax del abdomen. Está ligeramente curvado hacia arriba. Cuando la capa
muscular se contrae, el diafragma se aplana. Mediante esta tracción,
los pulmones se expanden y el aire puede entrar.
Anatomía del pulmón: respiración.
La respiración humana abarca todos los procesos en los que interviene
la absorción de oxígeno del aire y la expulsión de dióxido de carbono. En
la respiración se distinguen tres pasos principales divididos en ciclos:
El ciclo pulmonar implica el intercambio de gases entre las estructuras del sistema
respiratorio, es decir, el aire y la superficie respiratoria (el tejido pulmonar).
El ciclo circulatorio implica el transporte de gases a través de los fluidos corporales
y la absorción de oxígeno de las células así como la expulsión de dióxido
de carbono por parte de éstas.
El ciclo celular consiste en las reacciones bioquímicas que se dan en el interior de
las células.

Ciclo pulmonar.
En la inhalación, el pecho se levanta y se expande. Esto se logra mediante
la contracción del diafragma y la contracción de los músculos intercostales
y los respiratorios gracias a los cuales las costillas y el esternón se
levantan. Como consecuencia, el pulmón se dilata y se llena de aire. Con la
exhalación, la caja torácica disminuye debido a la relajación de los
músculos, el diafragma se abulta, asciende y el aire sale.
Los pulmones realizan este movimiento gracias a su elasticidad. El aire
inhalado contiene cerca de un 21% de oxígeno, un 79% de nitrógeno y un
0,04% de dióxido de carbono. En la última fase de la exhalación, el aire de
los alveolos contiene sólo un 14% de oxígeno y 5,6% de dióxido de
carbono.
Ciclo circulatorio
La respiración interna consiste en el transporte de oxígeno y dióxido de carbono
de la sangre a las células. Las células toman oxígeno de la sangre y
desprenden dióxido de carbono hacia ésta. Este intercambio de gases
depende de la presión parcial. La presión parcial del oxígeno en
los alveolos es mayor que en la sangre de los pulmones, por ello los
alveolos son capaces de absorber el oxígeno. En el pulmón existen
diferencias de presión. La sangre en el tejido y la sangre en los alvéolos
corren en diferentes direcciones y permite así que se desprenda dióxido de
carbono. El proceso de la respiración obedece al control consciente e
inconsciente del centro respiratorio del cerebro. Todo el proceso
respiratorio está regulado por el sistema nervioso central, pero existe un
control consciente e inconsciente del ciclo respiratorio.
Anatomía del pulmón: volumen respiratorio.
Unos receptores específicos regulan la necesidad de oxigeno (O2). La frecuencia
respiratoria de un adulto suele estar entre las 10 y las 16 respiraciones por
minuto. El volumen de aire se conoce como volumen respiratorio. En una
frecuencia respiratoria media se da un volumen respiratorio por
minuto (VRM) se llama volumen corriente de entre 5 y 8 litros de aire por
minuto. Cuando se realiza mucho esfuerzo físico o en situaciones de
pánico, este volumen puede aumentar hasta los 150 l por minuto.
A veces, voluntariamente, las personas pueden utilizar su volumen de reserva
inspiratorio (respiración profunda). Este volumen alcanza una media de 2,5l.
Este volumen no puede sobrepasarse, aunque se fuerce la respiración.
Al exhalar, tras una respiración normal, se pueden exhalar hasta alrededor de 1,5 l
voluntariamente. Este volumen se denomina volumen de reserva
espiratoria. Una exhalación más profunda no es posible.
Capacidad pulmonar

El volumen que queda en


los pulmones se
denomina volumen residual. La
suma del volumen corriente,
el volumen de reserva
inspiratoria y el de reserva
espiratoria se conoce
como capacidad vital. Ésta
alcanza una media de 4,5 l. La
capacidad vital más el volumen
residual constituyen la capacidad vital forzada.
Los deportistas profesionales tienen un mayor volumen que las personas no
deportistas. Además, el volumen depende de la edad y el sexo, teniendo las
mujeres de promedio un menor volumen que los hombres.
Presión
En la atmósfera, la presión disminuye con la altitud y por lo tanto la cantidad de
oxígeno inhalado.
La disminución de la presión no es lineal. La presión del aire es únicamente de
0,62 bar a 4.000 m de altura. Esta altura es aproximadamente el límite en el
que alguien que no está acostumbrado a esta presión puede sufrir el mal de
altura.
El mal de altura es un grave peligro que puede causar un edema
pulmonar o cerebral, en ocasiones mortal.
En estos casos, se le deberá administrar oxígeno al paciente o trasladarlo a
altitudes más bajas.
Presión en diferentes altitudes.
Composición del aire
El aire inhalado se calienta sobre todo en la nariz y la garganta hasta alcanzar
aproximadamente los 37ºC y casi el 100% se satura en forma de vapor de
agua.
El oxígeno en el cuerpo se utiliza transformándose en dióxido de carbono que se
desprende a través de la exhalación.
Por eso el aire inhalado y el exhalado tienen composiciones diferentes.
Composición del aire inhalado y exhalado en porcentajes.

E. Anatomía cardiaca
completa.

Localización: El corazón es un órgano musculoso formado por 4 cavidades. Su


tamaño es parecido al de un puño cerrado y tiene un peso aproximado de 250
y 300 g, en mujeres y varones adultos, respectivamente. Está situado en el
interior del tórax, por encima del diafragma, en la región denominada
mediastino, que es La parte media de la cavidad torácica localizada entre las
dos cavidades pleurales. Casi dos terceras partes del corazón se sitúan en el
hemitórax Izquierdo. El corazón tiene forma de cono apoyado sobre su lado,
con un extremo puntiagudo, el vértice, de dirección antero inferior izquierda y
la porción más ancha, la base, dirigida en sentido postero superior.
1 vena cava superior
2 arco aórtico
3 tronco pulmonar
4 base del corazón
5 borde derecho
6 pulmón derecho
7 pleura (cortada para revelar el
pulmón en su Interior)
8 cara inferior
9 diafragma
10 pulmón izquierdo
11 borde izquierdo
12 vértice cardiaco (ápex)

Pericardio.
La membrana que rodea al corazón y lo protege es el pericardio, el cual impide
que el corazón se desplace de su posición en el mediastino, al mismo tiempo que
permite libertad para que el corazón se pueda contraer. El pericardio consta de
dos partes principales, el pericardio fibroso y el seroso.
1. El pericardio fibroso, más externo, es un saco de tejido conjuntivo fibroso duro
no elástico. Descansa sobre el diafragma y se continúa con el centro tendinoso del
mismo. Las superficies laterales se continúan con las pleuras parietales. La
función del pericardio fibroso es evitar el excesivo estiramiento del corazón
durante la diástole, proporcionarle protección y fijarlo al mediastino.
2. El pericardio seroso, más interno, es una fina membrana formada por dos
capas:
a. La capa más interna visceral o epicardio, que está adherida al miocardio.
b. capa más externa parietal, que se fusiona con el pericardio fibroso. Entre
las hojas parietal y visceral hay un espacio virtual, la cavidad Pericárdica,
que contiene una fina capa de líquido seroso, el líquido pericárdico, que
reduce la fricción entre las capas visceral y parietal durante los
movimientos del corazón.

Pared
La pared del corazón está formada por tres capas:

● Una capa externa, denominada epicardio, que corresponde a la capa


visceral del pericardio seroso.
● Una capa intermedia, llamada miocardio, formada por tejido muscular
cardíaco.
● Una capa interna, denominada endocardio, la cual recubre el interior del
corazón y las válvulas cardíacas y se continúa con el endotelio de los
Granos vasos torácicos que llegan al corazón o nacen de él.
Cavidades
El corazón está formato por 4 cavidades: dos superiores, las aurículas y dos
Inferiores, los ventrículos. En la superficie anterior de cada aurícula se observa
una estructura arrugada a manera de bolsa, la orejuela, la cual incrementa
Levemente la capacidad de la aurícula.

1. Aurícula derecha: Es una cavidad estrecha, de paredes delgadas, que


forma el borde derecho del corazón y está separada de la aurícula izquierda
por el tabique interauricular. Recibe sangre de tres vasos, la vena cava
superior e inferior, y el seno coronario. La sangre fluye de la aurícula
derecha al ventrículo derecho por el orificio aurículoventricular derecho,
donde se sitúa la válvula tricúspide, que recibe este nombre porque tiene
tres cúspides.
2. Ventrículo derecho: Es una cavidad alargada de paredes gruesas, que
forma la cara anterior del corazón. El tabique interventricular lo separa del
ventrículo izquierdo. El interior del ventrículo derecha presenta unas
elevaciones musculares denominadas trabéculas carnosas. Las cúspides
de la válvula tricúspide están conectadas entre sí por las cuerdas
tendinosas que se unen a los músculos papilares. Las cuerdas tendinosas
impiden que las valvas sean arrastradas al interior de la aurícula cuando
aumenta la presión ventricular. La sangre fluye del ventrículo derecho a
través de la válvula semilunar pulmonar hacia el tronco de la arteria
pulmonar. El tronco pulmonar se divide en arteria pulmonar derecha y
arteria pulmonar izquierda.
3. Aurícula izquierda: Es una cavidad rectangular de paredes delgadas, que
se sitúa por detrás de la aurícula derecha y forma la mayor parte de la base
del corazón. Recibe sangre de los pulmones a través de las cuatro venas
pulmonares, que se sitúan a la cara posterior, dos a cada lado. La cara
anterior y posterior de la pared de la aurícula izquierda es lisa debido a que
los músculos pectíneos se sitúan exclusivamente en la orejuela. La sangre
pasa de esta cavidad al ventrículo izquierdo a través del orificio aurículo-
ventricular izquierdo, recubierto por una válvula que tiene dos cúspides
válvula mitral (o Bicúspide).

4. Ventrículo izquierdo: Esta cavidad constituye el vértice del corazón, casi


toda su cara y borde izquierdo y la cara diafragmática. Su pared es gruesa
y presenta trabéculas carnosas y cuerdas tendinosas, que fijan las cúspides
de la válvula a los músculos papilares. La sangre fluye del ventrículo
izquierdo a través de la válvula semilunar aórtica hacia la arteria aorta. El
grosor de las paredes de las 4 cavidades varía en función de su acción. Las
aurículas tienen unas paredes delgadas debido a que solo transfieren la
sangre a los ventrículos adyacentes. El ventrículo derecho tiene una pared
más delgada que el ventrículo izquierdo debido a que bombea la sangre a
los pulmones, mientras que el ventrículo izquierdo la bombea a todo el
organismo. La pared muscular del ventrículo izquierdo es entre 2-4 veces
más gruesa que la del ventrículo derecho. Entre el miocardio auricular y
ventricular existe una capa de tejido conjuntivo denso que constituye el
esqueleto fibroso del corazón. Cuatro anillos fibrosos, donde se unen las
válvulas cardiacas, están fusionados entre si y constituyen una barrera
eléctrica entre el miocardio auricular y ventricular.

Inervación
El corazón está inervado por fibras nerviosas autónomas, tanto del sistema
parasimpático como del sistema simpático, que forman el plexo cardíaco. Las
ramas del plexo cardiaco inervan el tejido de conducción, los vasos sanguíneos
coronarios y el miocardio auricular y ventricular. Las fibras simpáticas proceden de
los segmentos medulares cervical y torácico. La inervación parasimpática deriva
de los nervios vagos o X par craneal.

Irrigación
En la parte inicial de la aorta ascendente nacen las dos arterias coronarias
principales, la arteria coronaria derecha y la arteria coronaria izquierda. Estas
arterias se ramifican para poder distribuir la sangre oxigenada a través de Todo el
miocardio. La sangre no oxigenada es drenada por venas que Desembocan el
seno coronario, la cual desemboca en la aurícula derecha. El seno coronario se
sitúa en la parte posterior del surco auriculoventricular.

ANATOMÍA MICROSCÓPICA
Músculo cardíaco
El miocardio o músculo cardíaco está formado por fibras musculares estriadas
más cortas y menos circulares que las fibras del músculo esquelético. Presentan
ramificaciones, que se conectan con las fibras vecinas a través de engrosamientos
transversales de la membrana celular o sarcolema, denominados discos
intercalares. Estos discos contienen uniones intercelulares que permiten la
conducción de potenciales de acción de una fibra muscular a las otras vecinas.
Sistema de conducción cardíaco
Cada latido cardíaco se produce gracias a la actividad eléctrica inherente y rítmica
de un 1% de las fibras musculares miocárdicas, las fibras autorrítmicas o de
conducción. Estas fibras son capaces de generar impulsos de una forma repetida
y rítmica, y actúan como marcapasos estableciendo el ritmo de todo el corazón, y
forman el sistema de conducción cardíaco. El sistema de conducción garantiza la
contracción coordinada de las cavidades cardíacas y de esta forma el corazón
actúa como una bomba eficaz. Los componentes del sistema de conducción son:
1. El nódulo sinusal o nódulo sino auricular, localizado en la pared de la
aurícula derecha, por debajo de desembocadura de la vena cava superior.
cada potencial de acción generado en este nódulo se propaga a las fibras
miocárdicas de las aurículas.
2. El nódulo auriculoventricular (AV) se localiza en el tabique interauricular.
Los impulsos de las fibras musculares cardíacas de ambas aurículas
convergen en el nódulo AV, el cual los distribuye a los ventrículos a través
del
3. Haz de His o fascículo auriculoventricular, que es la única conexión
eléctrica entre las aurículas y los ventrículos. En el resto del corazón el
esqueleto fibroso aísla eléctricamente las aurículas de los ventrículos.
4. El fascículo aurículoventricular se dirige hacia la porción muscular del
tabique interventricular y se divide en sus ramas derecha e izquierda del
haz de His, las cuales a través del tabique interventricular siguen en
dirección hacia el vértice cardíaco y se distribuyen a lo largo de toda la
musculatura ventricular.
5. Por último, el plexo subendocárdico terminal o fibras de Purkinje conducen
rápidamente el potencial de acción a través de todo el miocardio ventricular.
VASOS SANGUÍNEOS
GENERALIDADES
Los vasos sanguíneos forman una red de conductos que transportan la sangre
desde el corazón a los tejidos y desde los tejidos al corazón. Las arterias son
vasos que distribuyen la sangre del corazón a los tejidos. Las arterias se ramifican
y progresivamente en cada ramificación disminuye su calibre y se forman las
arteriolas. En el interior de los tejidos las arteriolas se ramifican en múltiples vasos
microscópicos, los capilares que se distribuyen entre las células. Los capilares se
unen en grupos formando venas pequeñas, llamadas vénulas, que se fusionan
para dar lugar a venas de mayor calibre. Las venas retornan la sangre al corazón.
Las paredes de los grandes vasos, arterias y venas, están constituidos por tres
Capas:
1. La capa interna está constituida por un endotelio (epitelio escamoso
simple), su membrana basal y una capa de fibras elásticas.
2. La capa media está compuesta por tejido muscular liso y fibras elásticas.
esta capa es la que difiere más, en cuanto a la proporción de fibras
musculares y elásticas y su grosor entre venas y arterias.
3. La capa externa o adventicia se compone principalmente tejido conjuntivo.
ARTERIAS
Las arterias son vasos cuyas paredes están formadas por tres capas (capa interna
o endotelio, capa media y capa externa o adventicia), con un predominio de fibras
musculares y fibras elásticas en la capa media. Ello explica las principales
características de las arterias: la elasticidad y la contractilidad. Según la
proporción de fibras elásticas y musculares de esta capa se pueden diferenciar
dos tipos de

● Arterias: arterias elásticas y arterias musculares.


● Las arterias elásticas: son las de mayor calibre, la aorta y sus ramas,
tienen una mayor proporción de fibras elásticas en su capa media y sus
paredes son relativamente delgadas en relación con su diámetro. La
principal función de estas arterias es la conducción de la sangre del
corazón a las arterias de mediano calibre.
● Las arterias musculares: son las de calibre intermedio y su capa media
contiene más músculo liso y menos fibras elásticas. Gracias a la
contracción (vasoconstricción) o dilatación (vasodilatación) de las fibras
musculares se regula el flujo sanguíneo en las distintas partes del cuerpo.
ARTERIOLAS
Las arteriolas son arterias de pequeño calibre cuya función es regular el flujo a los
capilares. La pared de las arteriolas tiene una gran cantidad de fibras musculares
que permiten variar su calibre y, por tanto, el aporte sanguíneo al lecho capilar.
CAPILARES
Los capilares son vasos microscópicos que comunican las arteriolas con las
vénulas. Se sitúan entre las células del organismo en el espacio intersticial para
poder facilitar el intercambio de sustancias entre la sangre y las células. Las
paredes de los capilares son muy finas para permitir este intercambio. Están
formadas por un endotelio y una membrana basal. Los capilares forman redes
extensas y ramificadas, que incrementan el área de superficie para el intercambio
rápido de materiales. Los capilares nacen de las arteriolas terminales y en el sitio
de origen presentan un anillo de fibras de músculo liso llamado esfínter pre capilar,
cuya función es regular el flujo sanguíneo hacia los capilares.
VENAS Y VÉNULAS
La unión de varios capilares forma pequeñas venas denominadas vénulas.
Cuando la vénula aumenta de calibre, se denomina vena. Las venas son
estructuralmente muy similares a las arterias aunque sus capas interna y media
son más delgadas. La capa muscular y elástica es mucho más fina que en las
arterias porqué presentan una menor cantidad de fibras tanto elásticas como
musculares. La capa externa (adventicia) es más gruesa y contiene más tejido
conjuntivo. Las venas de las extremidades inferiores presentan válvulas en su
pared, que es una proyección interna del endotelio. La función de estas válvulas
es impedir el reflujo de sangre y ayudar a dirigir la sangre hacia el corazón.
ANASTOMOSIS
Se llama anastomosis a la unión de dos o más vasos. Existen distintos tipos de
Anastomosis:

● Anastomosis arteriales: es la unión de dos ramas arteriales que irrigan


una misma región. Las anastomosis arteriales constituyen rutas alternas
para que llegue sangre a un tejido u órgano.
● Anastomosis arteriovenosa: es la comunicación directa entre una
arteriola y una vénula de manera que la sangre no pasa a través de la red
capilar.
CICLO CARDIACO
Un ciclo cardiaco incluye todos los fenómenos eléctricos (potencial de acción y su
propagación) y mecánicos (sístole: contracción; diástole: relajación) que tienen
lugar durante cada latido cardiaco. El término sístole hace referencia a la fase de
contracción y el término diástole a la fase de relajación. Cada ciclo cardíaco
consta de una sístole y una diástole auricular, y una sístole y una diástole
ventricular. En cada ciclo, las aurículas y los ventrículos se contraen y se relajan
de forma alternada, moviendo la sangre de las áreas de menor presión hacia las
de mayor presión. Los fenómenos que tienen lugar durante cada ciclo cardiaco
pueden esquematizarse de la siguiente forma:
1. Sístole auricular: durante la sístole auricular las aurículas se contraen y
facilitan el paso de un pequeño volumen de sangre a los ventrículos. La
despolarización auricular determina la sístole auricular. En este momento
los ventrículos están relajados.
2. Sístole ventricular: tiene una duración de 0,3 segundos durante los cuales
los ventrículos se contraen y al mismo tiempo las aurículas están relajadas.
Al final de la sístole auricular, el impulso eléctrico llega a los ventrículos y
ocasiona primero la despolarización y posteriormente la contracción
ventricular. La contracción del ventrículo ocasiona un aumento de la presión
intraventricular que provoca el cierre de las válvulas auriculoventriculares
(AV). El cierre de estas válvulas genera un ruido audible en la superficie del
tórax y que constituye el primer ruido cardiaco. Durante unos 0,05
segundos, tanto las válvulas semilunares (SL) como las AV se encuentran
cerradas. Este es el periodo de contracción isovolumétrica. Al continuar la
contracción ventricular provoca un rápido aumento de la presión en el
interior de las cavidades ventriculares. Cuando la presión de los ventrículos
es mayor que la presión de las arterias, se abren las válvulas SL y tienen
lugar la fase de eyección ventricular, con una duración aproximada de
0,250 Segundos.
3. Diástole ventricular: el inicio de la diástole ventricular es debido a la
repolarización ventricular. La velocidad de eyección de la sangre va
disminuyendo de forma progresiva, disminuye la presión intraventricular y
se cierran las válvulas SL. El cierre de las válvulas aórtica y pulmonar
genera el segundo ruido cardiaco. Las válvulas semilunares impiden que la
sangre refluya hacia las arterias cuando cesa la contracción de miocardio
ventricular. El ventrículo es una cavidad cerrada, con las válvulas AV y SL
cerradas. El ventrículo tiene un volumen constante, se relaja de forma
progresiva y disminuye la presión intraventricular. Cuando la presión
ventricular disminuye por debajo de la presión auricular, se obren las
válvulas auriculoventriculars y se inicia la fase de llenado ventricular. La
sangre fluye desde las aurículas a los ventrículos siguiendo un gradiente de
Presión.

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