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Cántico 8.
¿Cuáles son las pautas a seguir para esta ocasión tan especial?
El texto leído nos ayuda, nos indica que fue una celebración
sencilla, libre de complicaciones y ritos.
Lo mismo ocurre con esta cena, debe hacerse una vez al año. Esta
cena conmemora la muerte de nuestro Señor Jesucristo, y que
constituye un recordatorio de la amorosa dádiva del rescate, que es
el medio que Jehová utiliza para librar, o salvar, a la humanidad del
pecado y la muerte.
Jehová realizó los arreglos para pagar dicho rescate, pues mediante
el rescate, y a través de Jesucristo, Dios otorga el don de la vida
eterna a la humanidad (Romano 6:23)
Verdad ¿Qué no? Lo más seguro es que después de oír esa noticia
salgamos corriendo.
¿Dónde servirá usted y donde serviré yo? Bueno, eso no es algo que usted o
yo podamos decidir.
¿Cómo sabe el cristiano si es partícipe del nuevo pacto y si, por tanto, va a
recibir la vida celestial?
Bueno are lo mismo: Cierto joven encuentra una carta y decide abrirla, al
abrirla pudo identificar que era una carta que expresaba sentimientos entre
una pareja, la leyó completamente y noto que la carta no estaba dirigida
hacia él, así que sin decir nada la metió de nuevo en su sobre y decidió en
buscar y entregar a su destinatario.
¿Por qué estos dos jóvenes que leyeron la misma carta, leyeron las mismas
palabras actuaron de forma distinta?
Para el primero, aquella carta solo fue expresiones normales entre dos
personas. Pero para el segundo joven, aquella carta era algo, muy propio,
muy personal que transmitían fuertes sentimientos para esa persona en
particular y así fue percibido.
Asimismo, las personas escogidas para vivir en los cielos, al leer pasajes
bíblicos que hablan de esa esperanza, entienden, al igual que nuestro joven
de la ilustración, que esas palabras fueron escritas para ellos y pueden
percibir los sentimientos transmitidos.
Habrá “otras ovejas” que disfrutarán de vida eterna en la tierra Juan 10:16
Esta noche vamos a celebrar la Cena del Señor siguiendo el patrón que
Jesús fijó.
Si usted, a un, no se ha bautizado, siga dando paso para alcanzar esa meta.
Fortalezca su fe adquiriendo conocimiento. Al crecer su fe, usted tendrá la
fortaleza necesaria para cumplir con otros requisitos: arrepentirse,
convertirse, dedicarse y bautizarse.
Una vez bautizado, debe permanecer fiel.
No hay nada más valioso para nosotros, que ser objeto del amor de Jehová
y su Hijo, Cristo Jesús.
Ahora bien, para tener y sentir este amor, debemos hacer algo. Aquella
última noche con sus discípulos, Jesús dijo: “El que tiene mis
mandamientos y los observa, ese es el que me ama. A su vez, el que me
ama será amado por mi Padre, y yo lo amaré y me mostraré a él
claramente” (Juan 14:21).
Dado que apreciamos mucho nuestra relación con Dios y con su Hijo,
obedecemos alegres sus preceptos, entre ellos el nuevo mandamiento de
tener amor abnegado y la orden que Cristo dio tras su resurrección:
‘predicar al pueblo y dar testimonio cabal’, así como esforzarse por ‘hacer
discípulos’ de aquellos que acepten las buenas nuevas.