¿Ser persona es ser sujeto de derechos? la relación entre el derecho, la moral y la justicia.

Diaz aborda en su escrito Filosofía del derecho, un enfoque analítico y reflexivo acerca del

derecho desde una perspectiva filosófica. En el primer eje del libro, titulado "Conceptualicemos",

Díaz aborda el tema de la definición del derecho y su relación con la moral y la justicia. El autor

plantea que el derecho es un conjunto de normas que regulan la conducta humana y establecen un

orden social, y que esta regulación debe estar basada en principios morales y en una idea de justicia.

A lo largo del eje, Díaz examina diversas teorías filosóficas del derecho y plantea una hipótesis

sobre la naturaleza del derecho y su relación con la moral y la justicia. Según su hipótesis, el

derecho es una construcción social que se basa en una idea de justicia, que a su vez está

fundamentada en una serie de valores morales que son compartidos por la sociedad. En este sentido,

el derecho y la moral se entrelazan de manera estrecha, ya que el primero está basado en la segunda

y es un instrumento para su realización.

Para Díaz, el derecho es un conjunto de normas y principios que establecen obligaciones y

derechos para los miembros de una comunidad. Estas normas pueden ser de origen legislativo,

como las leyes y los reglamentos, o de origen jurisprudencial, como las sentencias judiciales y los

precedentes. En este sentido, el autor destaca la importancia del sistema jurídico y de las

instituciones que lo conforman para garantizar la aplicación efectiva del derecho. El autor también

hace hincapié en que el derecho no es estático, sino que está en constante evolución y

transformación. En este sentido, el derecho debe adaptarse a los cambios sociales y culturales, y

debe responder a las necesidades y demandas de la sociedad en la que se aplica. Para Díaz, esto

implica que el derecho no es algo dado o inmutable, sino que es un proceso dinámico y cambiante

que refleja las transformaciones y tensiones de la sociedad.

 Con esto podemos decir que sí es cierto que ser persona implica ser sujeto de derechos. Los

derechos son un conjunto de normas y principios que reconocen y protegen las necesidades y

dignidad de los seres humanos. Todas las personas, independientemente de su origen, raza, género,

orientación sexual, religión o cualquier otra condición, tienen derechos fundamentales que les

corresponden simplemente por el hecho de ser seres humanos, un debate que sigue transcendiendo

y evolucionando el derecho y la responsabilidad del estado para como garante de la ley y la justicia.

En este sentido, la existencia de un Estado de derecho que respete y proteja los derechos

humanos es fundamental para garantizar que las personas puedan disfrutar plenamente de sus

derechos. Esto incluye la existencia de sistemas judiciales independientes, que puedan hacer

cumplir los derechos y responsabilizar a los infractores de la ley. Además, los Estados tienen la

responsabilidad de proporcionar servicios públicos de calidad, como educación y atención médica,

que son fundamentales para el disfrute de los derechos económicos, sociales y culturales.

Sin embargo, en mi opinión también es importante destacar que la protección y promoción

de los derechos humanos no depende exclusivamente del Estado. Las organizaciones de la sociedad

civil, los medios de comunicación y otros actores sociales también tienen un papel importante en

la defensa y promoción de los derechos humanos. Es necesario un enfoque integral y colaborativo

para garantizar que los derechos humanos sean respetados y protegidos en todos los ámbitos.1

Nataly Sanchez.

1
Diaz, C. Filosofía de derecho. Arandina.