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EL PRCC EN EL NUEVO TESTAMENTO

Ana Isabel Ramírez Leyva

Jueves, 20 de Abril del 2023

Liturgia

Para: Josias Ramirez

Licenciatura en Teología

SEBANO-UMAD
EL PRCC EN EL NUEVO TESTAMENTO

Jesucristo es el fundamento

En Mateo 28:18-20 vemos lo siguiente: “Toda autoridad me ha sido dada en el cielo


y en la tierra. Id, pues, y haced discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el
nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a guardar todo lo que os
he mandado; y he aquí, yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo.".

Jesús les mando a los apóstoles a hacer discípulos, bautizarlos en el nombre de las
tres Personas de la Trinidad y a enseñarles lo que Él les había mandado, y ellos solo
enseñaron doctrinas que recibieron del Jesús.

Pablo siempre tuvo cuidado de enseñar lo que recibió del Señor.

A lo largo del Nuevo Testamento encontramos un problema recurrente y es que el


hombre tiende a desviarse de las ordenanzas del Señor, para hacer su voluntad, volviéndose
a las cosas débiles, inútiles, elementales, ineficaces y sin valor del culto ceremonial del
Antiguo Testamento. Pablo nos hablo de estas cosas en 1 Corintios 14:27-32 y Gálatas 4:9,
10. También en Colosenses 2:22-23 vemos que muchos estuviesen dispuestos a someterse a
ordenanzas “según los preceptos y enseñanzas de los hombres”, en lo que el apóstol
singularmente denominó " la apariencia de sabiduría en una religión humana”.

Podemos ver en 1 Corintios 3:10-17 que el fundamento de la iglesia es Cristo, y


debemos tener cuidado en no desviarnos y cualquiera que quiera participar en la
construcción del Templo deberá hacerlo sobre la base de este fundamento apostólico, y
siguiendo las instrucciones del arquitecto.

Los fariseos y la vana adoración

Las tradiciones judías eran interpretaciones rabínicas de la ley del Antiguo


Testamento, conocidas como la Halakha ( ‫)הכלה‬. En la época de Jesús, estas tradiciones se
transmitían en forma oral, pero luego fueron recopiladas en la Mishnah ( ‫)הנשמ‬. Para el
partido de los fariseos, estas tradiciones tenían una autoridad igual y hasta mayor que la ley
misma. En el Talmud (‫ )מּודְ ַּלת‬podemos encontrar este pasaje. Estar contra las palabras de los
escribas es más punible que estar en contra de las palabras de las Escrituras.
En Mateo 15:2 Jesús llama hipócritas a los fariseos por condenar a los discípulos por
trabajar durante el día de reposo, y Jesús cita a Isaías 29:13. Calvino escribe lo siguiente
acerca de Isaías 29:13; pues quiere significar que sostener como regla los "mandamientos
de los hombres" y no la Palabra de Dios, es subvertir todo orden. Pero es la voluntad de
Dios que nuestro temor y reverencia con el cual le adoramos sea regulado por la regla de
su palabra; y que no demanda nada más que simplemente nuestra obediencia, mediante la
cual nosotros y nuestras acciones serán conformadas a la Palabra, y no nos desviaremos
hacia la derecha o la izquierda. Los fariseos se guiaban más por sus reglas que por la ley
que Dios le dio a Moisés y cuando el corazón del hombre se encuentra alejado de Dios, la
Palabra de Dios se cambia por los preceptos de hombres o por tradiciones humanas.

Adorar en espíritu y en verdad

Juan 4:21-26 nos relata sobre la mujer samaritana, Jesús le dice que los verdaderos
adoradores serán los que adoran en espíritu y verdad. El Dr. Tomas Constable dice lo
siguiente de esta frase. el texto griego tiene una preposición (en) que gobierna ambos
sustantivos (espíritu, verdad) unidos por la conjunción (y). Esto significa que Jesús estaba
describiendo una característica con dos sustantivos, no dos características diferentes de
adoración. Podríamos traducir la frase como "verdaderamente espiritual". Esta es una
“endíadis”, o figura retórica en el que el autor expresa una única idea compleja uniendo
dos sustantivos con "y", como alternativa al uso de un adjetivo y un sustantivo. Si bien es
una la idea, dos son los que la componen.

Podemos interpretar esta frase como que la adoración es espiritual es todo aspecto. en
su origen, mediador, sujeto, base y método. Surge del espíritu del adorador, y no solo de
sus labios: surge del corazón. La adoración es posible solo desde una persona que es nacida
de nuevo y también involucra una interacción entre el espíritu del hombre con el espíritu
divino. Resulta evidente que Dios es un espíritu y siendo espíritu debemos adorarle en
espíritu, o sea desde el espíritu de quien ha nacido de nuevo, es imposible que un no
creyente le adore.

Enseñar solo lo ordenado


Regresemos a Mateo 28 solo que ahora desde el versículo 16-20. Jesús dio
autorización a los apóstoles a hacer discípulos y a enseñarles a obedecer todo lo que les ha
ordenado esto significa a no dejar nada fuera ni a agregar a lo que Cristo ha ordenado en su
palabra, por lo tanto, el principio es el siguiente deberán enseñar TODO lo que él ha
ORDENADO. TODO.

el teólogo nonconformista Matthew Henry (1662-1714) comentaba lo siguiente: "Los


así bautizados quedan alistados en la escuela de Cristo y es menester enseñarles:
Enseñándoles a guardar todas las cosas que os he mandado (v. 20). Esto denota dos cosas:
(a) Los creyentes deben estar dispuestos a ser enseñados. (b) Los ministros de Dios han de
estar dispuestos a enseñar; (c) El bautismo nos liga a Cristo; por consiguiente, debemos
obedecerle, guardando todas las cosas que él mandó, sin quitar ni añadir nada.".

el legalismo de los judaizantes

podemos ver el Colosenses 2:11-23 que Pablo condena el formalismo, el legalismo en


todas sus formas, y el ritualismo, diciendo que son religión humana. Según William
Hendriksen, en el contexto presente, la palabra utilizada por Pablo posiblemente también
signifique adoración autoelegida, culto o ritual autoimpuesto, religión inventada, o, en otras
palabras, religión ficticia, no verdadera. También podemos ver en esta parte de las
escrituras la frase “pero carecen de valor alguno contra los apetitos de la carne”, esto solo
sirve para la satisfacción de la carne y no para la mortificación de la carne, pero todo lo que
goza de gran estima entre los hombres es abominación a los ojos de Dios por tanto no
debemos inventar reglas y ordenanzas para someter nuestra conciencia, si no poner los
mandamientos y Palabra de Dios en nuestra mente y caminos y obedecer los mandamientos
inmutables de Dios.

La suficiencia de la Escritura

El Articulo 7 de la confesión Belga resume de forma perfecta 2 Timoteo 3:16

"Creemos, que esta Santa Escritura contiene de un modo completo la voluntad de


Dios, y que todo lo que el hombre está obligado a creer para ser salvo se enseña
suficientemente en ella. Pues, ya que toda norma de culto que Dios exige de nosotros se
halla allí extensamente descrita..."
Tenemos a la Palabra de Dios como nuestra regla de fe y práctica, y no se escapa la
adoración de esta regla. Juan Calvino nos dice en su comentario de 2 Timoteo 3:16 que la
Palabra ha sido dada para nuestra edificación y si la usamos de forma correcta produce
satisfacción en el hombre y Dios, pero su utilización incorrecta hace al hombre un sacrílego
que profana la Palabra de Dios, y es culpable de profanar una cosa extremadamente santa.

Y esto pasa tanto en iglesias falsas como en iglesias verdaderas donde surge el
legalismo o se implementan elementos de culto que enfatizan los sentimientos y emociones
sobre la Palabra de Dios. No debemos dejar que ningún elemento nos aleje de la Palabra de
Dios, no necesitamos agregarle nada a la Biblia para que la adoración se mas adecuada o
interesante, Dios merece ser adorado solo como nos lo ha marcado en su Palabra.

Escuchar la voz celestial

En Hebreos 12, Dios nos dice que no rechacemos a Aquel que habla pues quienes
rechazaron la ley de Dios en el Antiguo Testamento fueron castigados y así ¿cuánto más los
que escuchan el Evangelio y no lo respetan serán castigados? Debemos vivir vidas de
gratitud, adorando y dando gracias en todo, pues estas son dos caras de una misma moneda.

Siguiendo con Hebreos 12:28 Calvino dice: Al afirmar que debemos servir a Dios
agradándole (εὐαρέστως) con temor y reverencia, insinúa que, aunque demanda que le
sirvamos con prontitud y deleite, no hay, sin embargo, ningún servicio que sea aprobado
por él, sino aquel que se caracterice por su humildad y reverencia. En esta forma el autor
desaprueba la insolente confianza de la carne, así como la pereza que también emana de
ella.

Para tener una absoluta certeza y seguridad de que nuestra adoración es aceptable a
Dios, debemos cotejarla con la Escritura, por que no debe de haber alguna duda de que esta
es aceptable a Dios. Si tenemos alguna diferencia en nuestra adoración con la adoración de
la Escritura podemos corregir este error, porque un error en este aspecto nos hace
merecedores del castigo y la ira de Dios. Recordemos las consecuencias de los que
desobedecieron al adorar a Dios en el Antiguo Testamento, debemos tener conciencia de la
Santidad de Dios, y el jamás va a admitir una adoración que este en contra de su voluntad.

Un orden cósmico
Dios es un Dios de orden, en 1 Corintios 14:33 nos dice: porque Dios no es un Dios
de desorden sino de paz. En los versículos 27 y 28 de 1 Corintios 14 nos muestra que los
profetas deberían de controlar sus impulsos al expresarse, no debían de asemejarse a las
actitudes del pasado, y los paganos recibían revelaciones demoniacas en medio de los
ataques de descontrol. Cuando algún profeta hablaba sin tener control de el mismo solo
evidenciaba que esa palabra no era Palabra de Dios, porque Dios produce paz y no
confusión. Si aplicamos este principio a nuestra adoración, podemos decir que el desorden
y toda confusión no refleja el carácter de Dios y esto lo deshonra, y lo que lo deshonra es
pecado.

Y este principio es universal, lo podemos ver en 1 Corintios 1:2, 4:17, 7:17, 11:16 y
14:36.

Debemos tener un temor reverente cuando adoramos a Dios y sobre la forma en que
lo adoramos, no quiero que mi adoración sea algo que deshonre a mi Señor, por eso debo
de ocuparme en estudiar las Escrituras para darle lo que Él únicamente se merece, de la
forma en que él lo ha ordenado. me da miedo pensar que le hemos dado tan poca
importancia a esto, y lo hemos visto de una manera tan superficial en las iglesias que
realmente deberíamos estar asustados por hacer las cosas de esta forma, hemos olvidado
que Jesucristo es el fundamento de toda adoración.
Bibliografía
Scharenberg, M. (2010). Conceptos Fundamentales De La Adoracion. En M. Scharenberg,
El PRCC En El Nuevo Testamento (págs. 53-68). Buenos Aires: Rama De
Almendro.

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