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GRUPO 4

INTEGRANTES
Diego zamora
Rosa Canales
Alvaro Elias
Obed Abad
Martin Clendenes

En una primera etapa, históricamente, se reconoce al niño, niña y adolescente como


invisibilizado, históricamente se decía que los niños eran propiedad de los padres, lo que
actualmente sigue sucediendo ya que ellos no pueden decidir por sí solos hasta llegar a la
mayoría de edad. Por otro lado, se hace referencia al derecho Romano, la potestad del pater
donde antiguamente se privaba la vida al niño. Si bien eso cambió , la sociedad de hoy en día
los reconoce como sujetos de derechos pero no se les trata como tal. Muchos profesionales
mencionan que no sirve de nada ser titular de derecho si ese niño, niña y adolescente no lo
puede ejercer, esta situación sucede en América latina. Debido a esto las convenciones de los
derechos del niño buscan que de objeto pase a ser sujeto de derecho. En la actualidad toda
América latina ha firmado la convención de los niños. Estos son titulares de muchos
derechos. Los infantes necesitan protección y condición de defensa.

La historia comienza con la hambruna en alemania consecuencia de la derrota postguerra de


la primera y segunda guerra mundial. País bloqueado por mar por lo cual se encadenan
hambrunas. Inglaterra comenzó el derecho de los niños el de ser integral proteger a la
infancia en todo contexto, los ingleses se preocuparon en la infancia del país por solidaridad
comenzaron declaraciones que parecen como básicas como el derecho a la vida.

¿Realmente los niños son sujetos de derecho ante la visión de la sociedad occidental?
¿Realmente los hacemos partícipes de la interacción social como miembros de esta? ¿Se
cumple verdaderamente que los niños son titulares de derecho hoy en día?

El enfoque principal que tuvo la Convención de los Derechos del Niño era que haya esa
transición de ser considerados como objetos de derecho a sujetos de derecho. A partir de ahí
surge el interés superior del niño, adoptado como un principio, que a pesar de buscar el
bienestar de los infantes tiene un lado no muy favorecedor.

La ley 30466 “regula el interés superior del niño y lo define como un derecho, un principio y
una norma de procedimiento que otorga al niño el derecho a que se considere de manera
primordial su interés superior en todas las medidas que afecten directa o indirectamente a los
niños y adolescentes, garantizando sus derechos humanos” (Congreso de la Republica, 2016,
Articulo 2).

Por un lado, el hecho de que este principio tenga una gran amplitud nos permite que pueda
ser aplicado en numerosas situaciones. La flexibilidad que tiene es ventajosa también porque
no se encapsula a determinado territorio, sino que nos brindará distintas soluciones según lo
necesite el caso. Por otro lado, la parte negativa de tal principio es la incertidumbre que puede
llegar a tener y esto provocará también que surja una arbitrariedad al momento de afrontar
determinadas realidades, sin olvidar que es el juez el que al final tendrá un rol fundamental
para llevar el caso.

Dicho esto, surge otro principio, que es el de la autonomía progresiva, el cual hace referencia
a las capacidades y decisiones que todo niño, niña y adolescente pueda ir realizando
conforme vayan madurando y se desarrollen de tal manera que sean capaces de adquirir
responsabilidades por sí mismos. Tampoco se puede caer en el error de señalar una edad
determinada y pretender que ya está capacitado totalmente para tomar decisiones, como se
mencionó anteriormente, es un proceso paulatino de madurez. Otro punto importante, es el
derecho del niño o niña a ser oído y en el cual podemos darnos cuenta que es un aspecto que
se ve muy vulnerado a día de hoy en nuestra sociedad. Se ha visto que existen muchos casos
procesales donde de alguna u otra manera hay niños, niñas o adolescentes involucrados y
surge la pregunta si se les da la debida atención a ser tomados en cuenta dentro de dicho
proceso.

Cabe resaltar el que el artículo 9 del Código de los Niños y Adolescentes hace mención a que
en condiciones de formarse sus propios juicios tienen derecho a manifestar libremente su
opinión en todos los asuntos que les afectan y a que se consideren sus opiniones en función
de su edad y madurez. Además, según el artículo 85 del mismo código, nos indica que es un
rol y deber del juez el de escuchar la opinión del niño y que sea tomada en cuenta la del
adolescente. Asimismo, estas normas van de la mano y en concordancia con lo expresado por
parte del Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, quien es el máximo
órgano de interpretación de la Convención sobre los Derechos del Niño. Este Comité hace
alusión a que los Estados Partes deben garantizar el derecho a ser escuchado a todo niño que
esté en condiciones de formarse un juicio propio.
Por lo tanto, podemos llegar a una primera conclusión y es que sería incorrecto adoptar una
postura que suponga que un niño es incapaz de poder manifestar sus propias opiniones.
Debería ser todo lo opuesto, sostener que el niño tiene la capacidad de formar sus propias
opiniones y reconocer el derecho que tiene para expresarlas.

Las sentencias- tribunales de los especializados en familia mencionan que hay sentencias que
se contradicen porque se basan en los mismos principios donde prima más el interés superior
del niño, al ser este un principio amplio tiene una ventaja y desventaja. Al ser amplio nos
ayuda a que se pueda aplicar a un sinfín numero de situaciones. Por lo tanto, no se puede
precisar con el interés superior porque varía de acuerdo con el caso o situación.

Existe el derecho del niño o niña sin ser odio, este pilar pega con la sociedad ya que no se
toma en cuenta la opinión de los menores a pesar de ser sujetos de derechos, no cuenta su
participación. Existe un típico conflicto en la sociedad, ocurre por ejemplo que por
condiciones de la vida, una madre con la patria potestad de sus niños, encuentra un trabajo
con un mejor sueldo en otra provincia de Lima, a raíz de esta propuesta sucede un conflicto
por parte del padre ya que en la mayoría de casos estos no están de acuerdo con separarse de
sus menores hijos.

Existe por otro lado , una doctrina donde menciona que la custodia de la madre pase a
pertenecer a la del padre cuando ella decida salir fuera del país ya sea los motivos que tenga ,
pero se sabe y no está permitido que ella se lleve consigo a sus menores hijos.

Al hablar de la autonomía progresiva tenemos el caso, por ejemplo, de unos padres que tenían
inclinación comunista, ellos obligaron a su mejor hija a seguir su religión , en este caso ser
atea, pero no se logró ya que la niña no compartía la misma religión con sus padres y optó por
ser católica. En este caso, la autonomía progresiva juega por ejemplo en que el niño a raíz de
los principios tendría que tener el derecho de elegir de manera libre a que religión desea
integrar.

Finalmente, muchos profesionales menciona que la convención de el niño, niña y


adolescente se centra en que al ejercer su derecho, ellos lo hacen en función de su edad y
madurez, lo cual la edad inicia un cuestionamiento , ya que una persona de 25 años podría
seguir teniendo el pensamiento de uno de 12 años, entonces lo discutible es el concepto de la
madurez.
En conclusión es un tema a discutir que se debe desarrollar y trabajar de forma eficaz para
lograr la correcta aplicación de los derechos del niño así como la ponderación del interés
superior del mismo. Sera nuestro trabajo como futura generación buscar la protección de los
derechos del niño y lograr que puedan ejercer sus propios derechos, que sean totalmente
conscientes de la facultad que tienen como sujetos de derecho. La lucha por los derechos del
niño y alzar la voz parar romper con los estereotipos minimizadores hacia lo que uno siente o
piensa no termina cuando se cumple dieciocho años de edad.

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