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TIPOS DE FRAUDE

Si bien el fraude es un concepto legal amplio, en el contexto de la auditoría de


estados financieros el fraude se define como un error intencional en los estados
financieros. Las dos principales categorías de fraude son: informes financieros
fraudulentos y malversación de activos.
Los informes financieros fraudulentos son un error u omisión intencional en las
cantidades o revelaciones con la intención de engañar a los usuarios. La mayoría
de los casos de informes financiaos fraudulentos implican errores intencionales
de cantidades, no revelaciones. Por ejemplo, se informó que WorldCom había
capitalizado como activos fijos, miles de millones de dólares que debían haber
sido gastados. Las omisiones de cantidades son menos comunes, pero una
compañía puede sobrevaluar los ingresos al omitir las cuentas por pagar y otros
pasivos financieros.
Aunque la mayoría de los casos de informes financieros fraudulentos
comprenden la sobrestimación de activos e ingresos u omisión de pasivos
financieros y gastos en un intento por sobrevaluar los ingresos, es importante
observar que las compañías con frecuencia sobrevaluan sus ingresos. Para las
compañías que no cotizan sus acciones públicamente, esto se puede hacer con el
propósito de reducir los impuestos sobre la renta. Las compañías también pueden
sobrevaluar los ingresos cuando las entradas son altas, para crear una reserva de
entradas o “reservas de colchón” que se pueden utilizar para incrementar los
ingresos en periodos futuros. A esta práctica se le conoce como manejo del ingreso
o administración de ingresos. La administración de ingresos comprende las acciones
deliberadas que implemento la administración para cumplir con los objetivos de
ingresos. El manejo de ingresos es una forma de administración de ingresos en la cual

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los ingresos y egresos se cambian entre periodos para reducir la fluctuación de las
entradas. Una técnica para el manejo de ingresos reducir el valor del inventario y
demás activos de una compañía adquirida al momento de la adquisición, lo que
generará entradas altas cuando se vendan los activos posteriormente. Las
compañías también pueden sobrevaluar de manera deliberada las reservas para
obsolescencia de inventario y las estimaciones para cuentas dudosas en periodos
de ingresos más altos.
Aunque con menos frecuencia, varios casos notables de informes financieros
fraudulentos; aplican la revelación inadecuada. La malversación de activos es el
fraude que involucra el robo de los activos de una entidad. En varios casos, las
cantidades involucradas no son materiales para los estados financieros. Sin
embargo la pérdida de los activos de la compañía es una preocupación importante
de la administración para el fraude, sea mucho menor que el origen de materialidad
utilizado por el auditor para los fines de los informes.

El término de malversación de activos, por lo general se utiliza para referirse al


robo que involucra a empleados y otras personas dentro de la organización. Por
ejemplo, un estudio expreso que el promedio que la compañía pierde por fraude es
de 6 % de sus ingresos. Sin embargo, gran parte de este fraude involucra a partes
externas, como el robo de mercancías en tiendas y engaños por parte de los
proveedores.

La malversación de activos normalmente se perpetra a niveles inferiores en la


jerarquía de la organización. Sin embargo, en algunos casos excepcionales, la alta
administración está implicada en el robo de activos de la compañía. Debido a la
gran autoridad de la administración y control sobre los activos de la organización,
los desfalcos en los que la alta administración está involucrada pueden implicar
cantidades importantes. En un ejemplo extremo, una empresa presentó cargos

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contra el ex director ejecutivo de Tyco International por el robo de $100 millones
en activos. En una encuesta referente al fraude que llevó a cabo la Association of
Certified Fraud Examiners, la pérdida promedio en fraudes que implicaban a la alta
administración era tres veces más cuantiosa que los fraudes que implicaban a otros
empleados.

Una consideración esencial del auditor para descubrir el fraude es la identificación


de los factores que aumentan el riesgo de que se presente. Éstos se denominan
factores de riesgo de fraude. A pesar de que las tres condiciones en el triángulo de
fraude son las mismas para los informes financieros fraudulentos y malversación
de activos, factores de riesgo son diferentes. Primero, se analizan los factores de
riesgo para los informes financieros fraudulentos, seguidos por aquéllos para la
malversación de activos.

Condiciones para que se genere un fraude

1) Incentivos/presiones. La administración u otros empleados tienen incentivos


o presiones para cometer fraudes.
2) Oportunidades. Las circunstancias proporcionan oportunidades para que la
administración o empleados cometan fraudes.
3) Actitudes/racionalización. Existe una actitud, carácter o conjunto de valores
éticos que per- mite a la administración o empleados cometer un acto
deshonesto, o se encuentran en un ambiente que ejerce suficiente presión
como para hacerlos pensar en cometer un acto deshonesto.

Incentivos/presiones Un incentivo común para que las compañías manipulen los

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estados financieros es una disminución en los prospectos financieros de la
compañía. Una disminución en los ingresos puede amenazar la capacidad de la
compañía para conseguir financiamiento y continuar como un negocio en marcha.
Las compañías también pueden manipular los ingresos para cumplir con los
pronósticos de los analistas o evaluaciones comparativas como los ingresos del año
anterior; para satisfacer las restricciones de los pactos de adeudo, o para inflar de
manera artificial los precios de las acciones. En algunos casos, la administración
puede manipular los ingresos sólo para conservar su reputación.
Oportunidades Los estados financieros de todas las compañías están
potencialmente sujetos a la manipulación. Sin embargo, el riesgo de informes
financieros fraudulentos es mayor para compañías en industrias donde se
encuentran implicados criterios y estimaciones importantes. Por ejemplo, la va-
luación de inventarios está sujeta a un riesgo mayor de errores para las compañías
con inventarios diversos en varias ubicaciones. El riesgo de errores de inventarios
aumenta más si esos inventarios son potencialmente obsoletos.
Las oportunidades para los errores son mayores si se presenta rotación en el
personal de contabilidad u otra debilidad en el proceso de contabilidad e
información. En varios casos de informes financieros fraudulentos, la compañía
tenía un comité de auditoría ineficiente y el consejo directivo Paso por alto los
informes financieros.
Actitudes/racionalización La actitud de la alta administración con respecto a los
informes financieros es Un factor de riesgo crítico en la evaluación de la probabilidad
de estados financieros fraudulentos. Si el director ejecutivo u otro alto directivo
muestra un descuido importante en el proceso de los informes financieros, por
ejemplo, cuando se emiten de manera congruente pronósticos abiertamente
optimistas cuando se está claramente preocupado por cumplir con los pronósticos de
ingresos de los analistas, existe
más probabilidad de que se susciten informes

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financieros fraudulentos. También, el carácter de administración o conjunto de
valores éticos puede facilitarles pensar en un acto fraudulento.

EVALUACIÓN DEL RIESGO DE FRAUDE

La SAS 99 proporciona directrices para los auditores cuando se evalúa el riesgo de


fraude. Los auditores deben mantener un nivel de escepticismo profesional
mientras consideran un conjunto amplio de información, incluyendo los factores de
riesgo, para identificar y responder al riesgo de fraude. Como se analizó en el
capítulo 6, el auditor tiene la responsabilidad de responder al riesgo de fraude
mediante la planeación y realización de la auditoría con el fin de lograr una
seguridad razonable de que se detectarán errores de importancia, ya sea debido a
errores o fraude.

La SAS 1 indica que, al ejercer el escepticismo profesional, un auditor “no asume


que la administración es deshonesta o una honestidad indiscutible”. En la práctica,
mantener esta actitud de escepticismo profesional puede ser difícil porque, a pesar
de algunos notorios ejemplos recientes relativos a los estados financieros
fraudulentos, los fraudes materiales son poco frecuentes en comparación con el
número de auditorías de los estados financieros que se lleva a cabo cada año. La
mayoría de los auditores nunca encontrarán fraudes materiales durante sus carreras.
También, por medio de la aceptación del cliente y procedimientos de evaluación
continua, los auditores rechazan la mayoría de los dientes potenciales en los que
perciben una falta de honestidad e integridad. La SAS 99 enfatiza la consideración
de la susceptibilidad de un cliente al fraude, a pesar de las creencias del auditor
acerca de la propensión al fraude y la honestidad e integridad de la administración.

Consulta con la administración La SAS 99 requiere que el auditor haga

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preguntas específicas en cada auditoría relativas al fraude. Las consultas con la
administración y otros dentro de la compañía son importantes debido a que la
probabilidad del fraude se manifiesta a menudo a través de la información recibida
en respuesta a las preguntas del auditor. Las consultas proporcionan a los
empleados una oportunidad para dar al auditor información que de otra manera no
se comunicaría.
Las consultas del auditor con la administración deben incluir si la administración
tiene conocimiento de cualquier fraude o sospecha de fraude dentro de la
compañía. El auditor hace preguntas acerca del proceso de la administración para
evaluar los riesgos de fraude, la naturaleza de los riesgos defraude que la
administración identifica, y cualquier control interno aplicado para tratar esos
riesgos, lo que proporciona información útil. El auditor también debe formular
preguntas acerca de cualquier información que la administración haya informado al
comité de auditoría en lo tocante a los riesgos de fraude y controles relacionados.
El comité de auditoría con frecuencia asume una parte activa en la vigilancia de la
evaluación de riesgo de fraude de la administración y proceso de respuesta. La
SAS 99 requiere que el auditor consulte con el comité de auditoría acerca de su
punto de vista de los riesgos de fraude y si el comité de auditoría tiene
conocimiento de cualquier fraude o sospecha de fraude. Para entidades con una
función de auditoría interna, el auditor interroga en cuanto a los puntos de vista de
la auditoría interna de los riesgos de fraude y si han realizado cualquier
procedimiento para identificar o detectar el fraude durante el año.
La SAS 99 también requiere que el auditor interrogue a otros dentro de la entidad
cuyas obligaciones sean independientes de las líneas de responsabilidad de
informes financieros normales. Cuando se tiene contacto con personal de la
compañía a lo largo de la auditoría, como el gerente del almacén de inventario o
representantes de compras, el auditor puede averiguar la existencia o sospecha de

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fraude. Las consultas con ejecutivos y una gran variedad de diferentes empleados
representan oportunidades para que el auditor conozca de los riesgos de fraude.
Cuando las respuestas sean incongruentes, el auditor deberá conseguir evidencia de
auditoría adicional para resolver la inconsistencia y respaldar o refutar la
evaluación de riesgo original.

Factores de riesgo La SAS 99 requiere que el auditor evalúe si existen los factores
de riesgo de fraude que indiquen incentivos o presiones para perpetrarlo,
oportunidades para llevarlo a cabo, o actitudes o racionalizaciones utilizadas para
justificar una acción fraudulenta.

Procedimientos analíticos Los auditores deben realizar procedimientos analíticos


durante las fases de planeación y terminación de la auditoría. Los procedimientos
analíticos ayudan al auditor a identificar operaciones inusuales o eventos que
pueden indicar la pretenda de errores materiales en los estados financieros.

Los procedimientos analíticos realizados durante la planeación pueden ser útiles


para identificar riesgos de fraude. Cuando los resultados de procedimientos
analíticos difieren de las expectativas del auditor, el auditor evalúa esos resultados
junto con información diferente para evaluar si existe un riesgo elevado de fraude.

Debido a que la incidencia de informes financieros fraudulentos a menudo implica


la manipulación de ingresos, la SAS 99 requiere que el auditor realice
procedimientos analíticos en las cuentas 'k ingresos. El objetivo es identificar las
relaciones inusuales o inesperadas que involucren las cuentas de ingresos que
puedan indicar informes financieros fraudulentos. Por ejemplo, la comparación entre
el volumen de ventas basado en ingresos registrados y una capacidad de producción

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real puede revelar ingresos que sobrepasan la capacidad de producción de la entidad.

TRABAJAR EL CONTROL INTERNO PARA EVITAR EL FRAUDE.

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