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Trabajo practico N°2

Materia: introducción a la economía


Trabajo practico: N°2
Escuela: E.T. N°24
Curso: 4°5°
Alumno: Losa Facundo Martin
Comencemos con las actividades:

1.- busquen y copien un cuadro que dé cuenta de las distintas necesidades y otro de los distintos
bienes que existen para la economía.

2.- elijan una necesidad a nivel familia, empresa, provincia o país que pueda ser analizado en la realidad:

a) Buscar un recorte periodístico que dé cuenta de ello.

Por qué hay hambre en Argentina si se produce comida para 440 millones de personas (10 veces su
población)

En Argentina, el mayor productor de alimentos per cápita de la región, tiene índices de hambre tan altos
como México o Trinidad y Tobago.

El tercer productor mundial de miel, soja, ajo y limones; el cuarto de pera, maíz y carne; el quinto de
manzanas; el séptimo de trigo y aceites; el octavo de maní.

Sí, Argentina produce muchos alimentos.

Y, sin embargo, entre uno y tres millones de argentinos sufren hambre.

Puede verse como una paradoja o como una injusticia o como una apreciación técnicamente fallida que
pasa en muchos otros países, como China, el mayor productor mundial de alimentos, o Brasil, el más
grande exportador de comida de América Latina.

¿Cuántos alimentos se desperdician en América Latina?

Pero en ninguna otra nación la brecha parece ser tan grande como en Argentina, donde hoy una nueva
crisis económica -hubo diez graves en 70 años- probablemente se traduzca, según el presidente,
Mauricio Macri, en un nuevo aumento de la pobreza.

La indigencia en Argentina, parecido al resto de la región, es común. Con un agravante: las constantes
crisis económicas en el país perjudican, sobre todo, a los más pobres.

En un dato oficial que muchos argentinos saben de memoria, Argentina produce alimentos para
abastecer a casi 440 millones de personas.
Y su población, según varios estudios, apenas pasa los 44 millones.

Es difícil saber cuántos de los 13 millones de pobres (30%) que se registran en Argentina sufren hambre;
las dos variables no van necesariamente de la mano.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) de Naciones Unidas reporta poco más de
2 millones de argentinos con déficit alimentario.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO) habla de 1,5 millones y el
Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (ODS-UCA) estima 3 millones.

La desnutrición está matando a niños argentinos

Se trata de entre un 3% y 4% de la población, muy cerca de la media de la región.

Pero de nuevo: no hay país en este continente que se jacte de ser, o haber sido, "el granero del mundo",
como Argentina.

¿Qué es, entonces, lo que pasa? ¿Para dónde va toda esa comida? ¿Por qué no llega al sector más
vulnerable?

Una de las quejas más frecuentes de los pequeños agricultores en Argentina es que la propiedad de la
tierra es muy desigual.

Los grandes problemas

El hambre en Argentina, coincidieron varios expertos en conversación con BBC Mundo, no se debe a
escasez de alimentos, sino a falta de ingresos, distribución desigual de la riqueza o ausencia de
generosidad.

Aunque hay países más desiguales que Argentina, la economía de este país es una de las más frágiles de
la región, azotada por años de políticas de Estado ambivalentes que han resultado en traumáticas
etapas de inflación, devaluación y recesión.
Hoy gran parte de la producción, sobre todo de granos, se exporta, pero hay rubros como la carne, el
vino y el trigo que en su mayoría se quedan y abastecen el mercado local.

"El problema de Argentina no es que falten alimentos", dice Iván Ordoñez, economista especializado en
el campo. "No somos India ni Haití ni Venezuela; nosotros no importamos alimentos, todo lo que
comemos es industria local".

"Lo que debería pasar, y no ha pasado, es que el mercado interno compita con el mercado externo, que
se exporte más, se genere más riqueza y eso genere más empleo", asegura.

Los analistas coinciden en que la relación entre los gobiernos argentinos y el campo, marcada por el alza
y la reducción de impuestos, es una historia de amor y odio que ha impedido la planificación y ha
exacerbado la concentración de la propiedad y la producción.

Por qué es tan polémico que Macri vuelva a poner "retenciones", los impuestos a la exportación
asociados al kirchnerismo

Los 5 países de América Latina en los que creció el hambre desde 2014

Cultivo de soja en Argentina

El boom sojero en Argentina sacó a muchos de la pobreza, pero cuando pasó la bonanza y volvieron los
problemas económicos, se vio que no era una solución a largo plazo.

"Los beneficios de la producción —explica Agustín Salvia, director del ODS-UCA— solo llegan al primer
segmento de la sociedad, que es un 30% integrado al mundo, desarrollado, con altos estándares de
consumo".

"Eso permite un derrame de ingresos al sector medio, que es el 40%, que vive de la prestación de
servicios, pero apenas gotea al 30% más pobre, que depende de las asistencias".

"No solo hay que tener mejores programas sociales, sino una economía menos informal y más
participativa, con pequeños centros de producción, de reciclaje y de cuidado", concluye el especialista
en pobreza.
Como en casi toda América Latina, la tasa de informalidad en Argentina roza el 50% del empleo, una
problemática que golpea a los más vulnerables, sobre todo en momentos de inflación y recesión.

Francisco Yofre, director de la FAO Argentina, atribuye una parte del problema a la falta de educación.

"Argentina es uno de los países que más desperdicia alimentos y uno de los de mayor consumo de
azúcar y bebidas azucaradas", advierte.

Según números de la FAO, el 12% de la producción de alimentos en Argentina es desperdiciada y el 45%


de eso es frutas y hortalizas, el rubro más caro y nutritivo.

"Estamos trabajando con el actual gobierno para concientizar a los hogares en estos aspectos, pero esto
solo se soluciona con una política de Estado de corto, mediano y largo plazo", asegura.

Argentina es uno de los mayores productores del mundo de aceites vegetales.

"Vocación de generosidad"

Juan Carr es un porteño de ojos azules, bajito y risueño que a sus 56 años ha sido siete veces postulado
al Nobel de la Paz.

A través de su Red Solidaria, un "hecho cultural" que organiza gente en 23 países para ayudar a
poblaciones vulnerables, Carr es probablemente el argentino que más tiempo le ha dedicado a luchar y
pensar el fenómeno del hambre.

Sentado en su oficina de Red/acción, un recién lanzado medio de comunicación enfocado en lo social,


Carr le dice a BBC Mundo que hay dos razones para ser optimista.

Una, que el hambre ha bajado: "A finales de los años 90 morían 25 niños por día por desnutrición y hacia
2010 esa cifra, que hoy debe estar por ahí, era de 4 al día".

"Es un logro tremendo, que, en mi intuición, se logró gracias a una alianza entre el Estado, (la fundación
católica) Cáritas y el campo", asegura.
En segundo lugar, Carr celebra que el hambre ya no solo es una preocupación de las organizaciones
sociales o la izquierda: "Es un éxito cultural que los sectores conservadores también se preocupen por
esto".

Ahora: ¿por qué sigue habiendo hambre en el país de la abundancia? Carr tiene una mirada distinta a los
especialistas.

"Puede ser una razón económica o puede ser una razón técnica, pero desde mi intuición de no
especialista creo que esto pasa, primero, por una cuestión cultural".

El problema con el hambre, explica, es que parece invisible: la gente que la padece es marginal dentro
de la marginalidad.

"El hambre no necesariamente habla de la pobreza, sino de la invisibilidad, de la dispersión, de la


marginación".

"Lo que se necesita —concluye— es levantar la mirada de los 43 millones (de argentinos) que sí comen
(…) para comprender, entender y abrazar a una de esas personas que está entre el millón de gente con
hambre".

"El argentino es muy reactivo, muy solidario. Pero solo voltea a mirar cuando el problema está ante sus
ojos. Y en el hambre falta una maquinaria de visibilización".

Carr, graduado en veterinaria, se preocupa por no sonar prepotente, por no jugar de especialista, por no
criticar a 43 millones de argentinos que no sufren hambre.

Pero lanza una pincelada: "Yo no sé por qué no le llega comida a ese millón, pero creo que tiene que ver
con una falta de vocación por la generosidad".

b) Leer y determinar las cuestiones relevantes para la economía

El informe presenta varios análisis que indica que la falta de alimentación en una parte de la población
argentina no se debe a la escases de alimentos, sino que se debe a la falta de ingresos, a la distribución
desigual de la riqueza o a la ausencia de generosidad.
Otro de los análisis indica que el mercado interno debe competir con el mercado externo y se debe
exportar más, lo cual generara más riqueza y empleo. Aunque la relación entre el estado y el campo se
afectada por la alza y reducción de impuestos, lo cual ha impedido la planificación y la producción.

Además, también se plantea la falta de generosidad, la cual expresa la población debería ayudar a cubrir
la falta de alimentación de una parte de la población.

c) Fundamentar con ideas propias que les pareció el informe.

El informe presenta información acerca de las necesidades básicas que se necesitan para sobrevivir,
como la alimentación, la cual debería estar satisfecha en el país en su totalidad, aunque en este caso no
es así, sabiendo que una parte de la población sufre de una falta de alimentación debido a la falta de
ingresos, lo cual debe ser solucionado. En el caso de este informe se presenta soluciones y ayudas que
son positivas en su mayoría, como el crecimiento de riqueza y empleo a través de las importaciones o la
ayuda generosa de la parte de la población que poseen sus necesidades básicas satisfechas. Por
ejemplo, a través de donativos.

3.- Responder:

a) En qué sentido podemos decir que la escasez está presente tanto en países ricos como en países
pobres?

La escasez se puede encontrar tanto en países ricos como en países pobres debido a que los recursos
sean escasos no quiere decir que sean pocos, sino que no alcanzan para todas nuestras necesidades y
deseos ya que contamos con recursos limitados y siempre pensaremos la manera de que esa necesidad
pueda estar satisfecha más a pleno. Además, un país puede tener más necesidades que otro. Por
ejemplo, un país pobre puede contar con escases en servicios, mientras que un país rico puede contar
con escases en materias primas.

b) Un regalo de cumpleaños, es un ejemplo de bien libre?

Un regalo de cumpleaños no es un bien libre, debido a que estos se encuentran de manera casi ilimitada
en cuanto a las necesidades que existen de el, no tiene costo, precio, dueño o mercado, porque es
abundante. No requiere un proceso productivo para su obtención. No registra un costo de oportunidad,
debido a que no implica renunciar a otro bien para consumirlo. Se utiliza para satisfacer necesidades.
Por ejemplo: el aire.

Además, un regalo de cumpleaños no tiene costo para el receptor, pero si para el emisor por ende no es
un bien libre.

Un regalo de cumpleaños se puede clasificar como un bien económico, los cuales se adquieren en un
mercado, en el cual se paga un precio y satisface una necesidad. Estos, son bienes materiales e
inmateriales que poseen un valor económico.

c) Porque el concepto de escasez es un término relativo?

El concepto de escases es relativo debido a que no quiere decir que los recursos sean pocos, sino que no
alcanzan para satisfacer todas nuestras necesidades, por lo cual decimos que son limitados. Además, los
seres humanos siempre encontraremos una manera de pensar como una necesidad puede estar
satisfecha de manera mas plena.

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