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Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo

Instituto de Ciencias Agropecuarias


Área Académica de Medicina Veterinaria y Zootecnia

Inmunobiología de la Relación Hospedero- Parásito

Práctica No. 3
Análisis de Células de la Respuesta Inmune en
Frotis Sanguíneo

Equipo 6
Cruz Aguilar Felix David
Evaristto Dominguez Abigail
Gálvez Calderón Sofía
Hernández Briones David
Pastrana Soriano Francisco Daniel

Semestre 3º Grupo 4

Dra. Nallely Rivero Perez

29 de septiembre del 2022


Introducción

En la sangre existen poblaciones celulares de la respuesta inmune innata y adaptativa, que en


condiciones de salud y homeostasis, conservan un número y morfología determinada. Las
infecciones por microorganismos, padecimientos crónico-degenerativos y el cáncer, provocan
alteraciones en la morfología y cantidad de células, que al ser analizadas por el veterinario
clínico, contribuyen al diagnóstico de la enfermedad y la elección del tratamiento más
adecuado.
En las aves, existen diferencias marcadas en las células de la sangre, con respecto a los
mamíferos, por lo que es indispensable identificar y contabilizar células de la respuesta inmune
en individuos clínicamente sanos.

Objetivo general

El estudiante analizará e identificará morfológicamente las poblaciones celulares de la


respuesta inmune a partir de sangre periférica en el ratón y el ave.

Objetivo específico

Identificar y describir las diferentes poblaciones celulares de la respuesta inmune innata y


adaptativa en un frotis sanguíneo a partir de sangre periférica de ratón y ave clínicamente sanos.
Desarrollo de la práctica

Toma de Muestra de sangre en Animales domésticos.


En los casos donde sea necesaria la punción con aguja para la toma de sangre, se recomienda
que el área esté libre de la mayor cantidad de patógenos y suciedad, para lo cual deberá
realizarse una limpieza con jabón quirúrgico o solución yodada, repitiendo la operación en dos
ocasiones y después realizar la última limpieza con alcohol. Después de la punción el sitio debe
dejarse seco, limpio y libre de sangre.
Ave: La vena radial (del ala), es el sitio de punción más comúnmente utilizado. Se emplea
aguja de calibre 21 y se inserta en un ángulo de 15o. El procedimiento debe realizarse con
cuidado para evitar la formación de hematomas que impiden la toma de muestra una vez que
se forman. La cantidad de sangre que se puede obtener de un ave adulta es de 1-2 ml, mientras
que en aves pequeñas es de 0.5 ml.

Ratón: El volumen de sangre en el ratón adulto es sólo de 2-2.75 ml., y las venas periféricas
son demasiado pequeñas, por lo que no puede obtenerse cantidades grandes de sangre y la toma
de la misma debe realizarse sin lastimar al ratón. El método que permite la toma de muestra de
sangre de manera repetida es la punción del seno retro-orbital. La técnica se basa en que una
vez anestesiado el ratón, se sujeta en el plano dorsal, a la altura del cuello, estirando la piel
hacia atrás asegurándose de no dificultar la respiración. Se inserta un capilar en el ángulo
externo del ojo (2mm aproximadamente), girar suavemente hasta que la sangre fluya por el
mismo, se retira el capilar y la muestra puede depositarse en un portaobjeto para realizar el
frotis sanguíneo.
Técnica de realización de frotis sanguíneo.

1. Se coloca una gota de sangre al centro del portaobjeto, que previamente se ha


limpiado, desengrasado y rotulado con una identificación.
2. Con un segundo portaobjetos de borde esmerilado, se coloca en un ángulo aproximado
de 30o con respecto al otro portaobjetos en posición horizontal, permitiendo el contacto
con la gota de sangre, la cual se distribuirá por capilaridad a lo largo del borde del
portaobjeto extensor.
3. El portaobjeto extensor se desliza en un sólo movimiento continuo, ininterrumpido y
sin ejercer presión, lo más perfectamente adherido al borde contra la superficie
horizontal del otro portaobjeto. Se recomienda realizar el frotis por duplicado en cada
muestra con el fin de seleccionar la mejor.
4. Dejar secar el frotis al aire, para agilizar el proceso se pueden realizar movimientos en
forma de abanico, nunca soplando o por calor. Una desecación rápida provoca la
deformación de las células sanguíneas.
5. Fijar la preparación con unas gotas de metanol y esperar que el alcohol se evapore. Este
procedimiento, además de fijar las células en el portaobjetos, las permeabiliza,
permitiendo la entrada del o los colorantes.
6. Teñir con el método de Wright-Giemsa. El reactivo de Wright contiene una mezcla de
colorantes rojos y azules que son acidófilos (reaccionan con sustancias ácidas) y
basofílicos (reaccionan con sustancias básicas), respectivamente.

7. Lavar la preparación con cuidado, sosteniendo por un extremo el portaobjetos a 45o


bajo un chorro suave de agua destilada y dejando que ésta pase sobre la extensión hasta
que arrastre todo el colorante.
8. Secar el portaobjeto aireándolo, por último observar al microscopio.
Resultados

Logramos extraer la muestra del ave (codorniz) de manera correcta para posteriormente llevar
a cabo la elaboración del frotis sanguíneo. De manera microscópica pudimos identificar las
distintas poblaciones celulares con las que contaba. Dentro de las distintas células con las que
contaba se encontraban neutrófilos, linfocitos, monoblastocitos y eritrocitos. Notamos algunas
de l

Discusión

De acuerdo a lo visto en clase previamente y a lo que establece la práctica el equipo realizó una
investigación a cerca de las células de las respuesta inmune que se observan en un frotis
sanguíneo. Gálvez Martínez, Carlos Fernando, Ramírez Benavides, Ginés Fernando, & Osorio,
José Henry. (2009)

Hay tres tipos de las células que se evalúan en el hemograma; los glóbulos rojos o eritrocitos,
los glóbulos blancos o leucocitos, y los trombocitos o plaquetas que son estructuras producidas
en la médula ósea mediante el proceso de fragmentación citoplasmática y que juegan un papel
muy importante en la homeostasis. Además, el plasma (la parte no-celular de sangre) es
examinado para determinar color, proteína, y la presencia de parásitos.
La serie roja proporciona el valor del hematocrito, es decir, el porcentaje de eritrocitos en la
sangre, así como la concentración de hemoglobina expresada en g/dl. Además aporta el
recuento total de eritrocitos, es decir, la cantidad total de eritrocitos circulantes por microlitro
de sangre.

Los índices eritrocitarios son determinados según cálculos matemáticos: al dividir el


hematocrito por el recuento eritrocitario, multiplicarlo por 10 y expresarlo en fentolitros,
obtenemos el volumen corpuscular medio de eritrocitos, si el valor está aumentado se denomina
macrocito, si está disminuido es microcito y si está en el rango normal se denomina normocito.

El peso de la cantidad de hemoglobina que en promedio tiene un eritrocito, se determina


dividiendo la hemoglobina por el recuento de eritrocitos y multiplicándolo por 10, expresado
en picogramos; y la concentración de hemoglobina por unidad de volumen de eritrocitos, se
determina dividiendo el valor de la hemoglobina por el hematocrito y multiplicándolo por 100,
se expresa en gramos por decilitros, e indica si el contenido de hemoglobina es reducido
(hipocrómico) o normal (normocrómico) ya que es imposible tener una elevación verdadera de
hemoglobina.

La serie blanca, nos muestra el recuento total de leucocitos y el recuento diferencial de


leucocitos; hay cinco leucocitos básicos en todas las especies: neutrófilos (mamíferos) o
heterófilos (no mamíferos), eosinófilos, basófilos, linfocitos y monocitos. En no mamíferos
puede ser difícil ocasionalmente distinguir entre los heterófilos y los eosinófilos. Además, los
linfocitos pueden ser confundidos con los trombocitos. Sin embargo, al hacer el examen de la
película de sangre periférica reducirá al mínimo esta confusión.

Dado que todas las células sanguíneas de las aves son nucleadas, los contadores electrónicos
de células sanguíneas no pueden emplearse en el estudio del leucograma en hematología aviar,
aunque ya existen contadores automatizados (equipo de conteo de impedancia standard) con
limitaciones por sus altos costos. Entre los anticoagulantes usados en hematología aviar se
encuentra el EDTA, quien afecta poco la morfología celular, a diferencia de la heparina y
produce menos artefactos en la tinción. Es el anticoagulante de elección en hematología si el
almacenamiento de la muestra no es prolongado y se mezcla a razón de 1-2 mg por ml de
sangre. No obstante, en aves muy pequeñas o muestras insuficientes el EDTA produce
hemólisis y en estos casos es preferible el envío de capilares heparinizados junto con una
extensión de sangre para el estudio hematológico.
Cuestionario

Indique las características morfológicas de cada tipo de célula de la respuesta inmune que
permiten diferenciarla en un frotis sanguíneo, teñidas con la técnica de Wright.

Frotis sanguíneo de cabra, vista en microscopio óptico 40x

Imágenes de referencia:
Frotis sanguíneo codorniz, vista en microscopio óptico 100x

Imágenes de referencia:
Referencias

● Caicedo Álvarez, Camilo Ándres. (20016). Hematología y química sanguínea de la


codorniz japonesa (Coturnix coturnix japonica). Rev Sist Prod Agroecol. 7 (1), 2.
● Gálvez Martínez, Carlos Fernando, Ramírez Benavides, Ginés Fernando, & Osorio,
José Henry. (2009). EL LABORATORIO CLÍNICO EN HEMATOLOGÍA DE AVES
EXÓTICAS. Biosalud, 8(1), 178-188. Retrieved September 29, 2022, from
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1657-
95502009000100020&lng=en&tlng=es.
● Vidal Millan, Patricia; Júarez De Los Santos, Pablo. (2020). Manual de Laboratorio de
Hmeatología. Facultad Nacional Autónoma de México. Facultad de Estudios
Superiores Zaragoza. Código de Identificación: SGC-FESZ-ML25. pp. 103 - 119.

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