Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
OM
GENERAL
.C
Cátedra C: “Dr. González”
DD
~
Segovia Aldana
ThiagoRosselli
LA
FI
BIBLIOGRAFÍA:
Zaffaroni – Tratado y Manual de Derecho Penal, Parte General.
El derecho penal es un saber normativo; sirve para estructurar un derecho penal operado por
varias agencias o corporaciones que declaran tener por objeto la represión y prevención de
delitos y en algunas ocasiones consiguen algún objetivo.
La función del derecho penal no es legitimar al poder punitivo sino acotarlo, contenerlo y
reducirlo. Esto es indispensable para que el estado de derecho subsista y no sea reemplazado
brutalmente por un estado totalitario. No hay certeza sobre el objeto del poder punitivo. El poder
OM
punitivo no agota ni mucho menos la totalidad del poder coercitivo jurídico del estado. Los
penalistas darán dispares justificaciones del poder punitivo estatal, parece que los penalistas no
saben para que sirve el poder punitivo.
.C
directa. La primera corresponde al derecho privado y la segunda al derecho administrativo.
En el modelo punitivo no hay dos partes como en el modelo reparador o restitutivo. En el proceso
DD
civil hay dos partes (demandante y demandado), pero en el proceso penal no, porque en éste el
estado (señor, soberano, rey, república) usurpa o confisca el derecho de la víctima. En el proceso
penal el estado dice que el lesionado es él, y que la victima por más que demuestre que la lesión
la sufre en su cuerpo, o que el robo lo sufre en su patrimonio es ignorada. Solo
LA
excepcionalmente la víctima dispone del derecho a mover el aparato punitivo, porque la regla es
que esta confiscado su derecho como lesionado, que lo usurpa completamente el estado aún
contra su voluntad expresa. El modelo punitivo, no es un modelo de solución de controversias
sino de suspensión de conflictos.
FI
Hay diversos motivos de solución de los conflictos: modelo punitivo, modelo reparatorio, modelo
terapéutico, modelo conciliatorio. El inconveniente del modelo punitivo es que impide la
aplicación de los restantes en tanto que los otros modelos pueden combinarse y aplicar
conjuntamente.
Por otra parte, la función del derecho penal y la delimitación del poder punitivo respecto de otras
formas de coerción jurídica estatal, chocan con la visión que del sistema penal impera en el
imaginario social. Lo penal comienza recién después que el sujeto ha sido detenido y el peligro
para nosotros ha pasado.
El sistema penal es el conjunto de agencias que coinciden en la cuestión criminal. Algunas son
exclusivamente penales (política, servicio penitenciario, tribunales penales, órganos políticos,
Cada una de las agencias tiene sus propios intereses sectoriales y sus propios controles de
calidad de sus operaciones. Por ello tiene discursos hacia fuera, que resaltan sus fines
manifiestos (oficiales) más nobles, y discursos hacia dentro, que justifican para sus miembros la
disparidad entre sus fines manifiestos y lo que realmente hacen (fines latentes).
OM
Como resultado de esta disparidad de intereses, cada agencia o conjunto de agencias ocupa un
comportamiento separado de las restantes y actúa en él de la forma que más le convenga a sus
intereses sectoriales, sin importarle mucho lo que sucede en los restantes compartimentos.
.C
primaria y secundaria. Criminalización primaria es la formalización penal de una conducta en una
ley, o sea que es un acto legislativo de prohibición bajo amenaza de pena, más claramente, una
DD
conducta esta criminalizada primariamente cuando esta descripta en una ley como delito. Es un
programa abstracto, un deber ser llevado a cabo por la legislación. Criminalización secundaria es
la acción punitiva ejercida sobre personas concretas. Es el acto del poder punitivo por el que éste
recae sobre una persona como autora de un delito. Es imposible llevar a cabo toda la
LA
poder selectivo sobre personas y criminalizan a quienes tiene más a mano (derecho penal de
autor; peligrosidad). Todos nos vamos haciendo un poco como nos ven y nos demandan los
demás, es decir, no solo tenemos una apariencia externa sino que la internalizamos o asumimos
y actuamos conforme a ella. No es difícil que buena parte de los portadores del estereotipo
criminal realmente comente delitos que, como corresponde a su pertenencia de clase, grado de
instrucción y entrenamiento, son obras toscas de la delincuencia, fáciles de descubrir.
El poder punitivo se reparte en la sociedad como una enfermedad infecciosa que alcanza a los
que son vulnerables por: 1) portación de estereotipos y comisión de hechos grotescos y poco
sofisticados; 2) grotescos; 3) trágicos y 4) pérdida de cobertura. El resto de la delincuencia
prácticamente no se registra.
OM
podrían hacer en la práctica y hasta cierto punto es contenerlo.
No sólo es selectiva la criminalización que lleva a cavo el sistema penal, sino que este opera de
modo que la victimización también se hace selectiva y va recayendo sobre los de menores rentas.
Los servicios de seguridad se deterioran y en los últimos años se privatizan, de modo que goza
.C
de mayor seguridad quien puede pagarla o vivir en barrios de más alta renta en que el servicio es
mejor.
DD
La vulnerabilidad a la victimización no es solo clasista sino también de genero, étnica, racista y
por supuesto prejuiciosa.
Selección policizante:
policizante la selección con que se recluta policía es tremendamente injusta. La policía
es el segmento que corre mayores riesgos de vida en el sistema penal y, además, carga con un
LA
estereotipo casi tan negativo como el propio estereotipo criminal, teñido de racismo, clasismo, y
además pésimos prejuicios. Se trata de otro estereotipo que produce el deterioro personal; puede
decirse que todo lo que el sistema penal toca y a todas las personas que involucra, de una o de
otra manera, las deteriora.
FI
Buena parte de la comunicación masiva y de los operadores del sistema penal tratan de proyectar
el poder punitivo como una guerra de delincuentes. Si se tiene en cuenta que los criminalizados,
los victimizados y los policizados son seleccionados de los sectores subordinados de la sociedad,
cabe deducir que el ejercicio del poder punitivo aumenta y reproduce los antagonismos entre las
personas de esos sectores débiles.
Hay que tener en cuenta que hay dos figuras ideales de estado o modelos puros: el estado
(liberal democrático) de derecho y el estado de policía (totalitario, autoritario). En el estado de
derecho ideal todos estaríamos sometidos por igual ante la ley; en el estado de policía ideal
todos estaríamos sometidos a la voluntad de los que mandan.
OM
que presupuestos se habilita el ejercicio del poder punitivo. Esta segunda pregunta la responde
la teoría del delito. Por último, debe ocuparse de la pena, no como concepto, sino como
respuesta que la agencia jurídica debe proporcionar, responsabilizándose por la filtración de
poder punitivo es una manifestación concreta y en cierta cantidad. Ésta tercera pregunta la
.C
responde la teoría de la responsabilidad penal.
Podemos trazar una idea de derecho penal, diciendo que es la rama del saber jurídico que,
DD
mediante la interpretación de leyes penales, propone a los jueces un sistema orientador de
decisiones que contiene y reduce el poder punitivo, para impulsar el progreso del estado
constitucional de derecho.
El derecho penal requiere, pues, un concepto de pena que le permita delimitar su universo. Por
ello, el derecho penal interpreta leyes penales siempre en el marco de las otras leyes que las
FI
El sistema orientador que le propone a los jueces, debe tener por objeto conocer y reducir el
poder punitivo. La función mas obvia de los jueces penales y del derecho penal es la contención
del poder punitivo. Sin la contención jurídica (penal), el poder punitivo quedaría librado al puro
impulso de las agencia ejecutivas y política y, por ende, desaparecería el estado de derecho y la
república misma. La contención y reducción del poder punitivo, planificada para uso judicial por
el derecho penal impulsa el progreso del estado de derecho. El volumen de conflictos, sus
pérdidas por un estado, será el indicador de su vocación de proveedor de paz social y por ende
de su fortaleza como estado de derecho.
En todos los saberes es necesario distinguir entre su definición actual y su concepto histórico, en
el caso de derecho penal, es indispensable establecer la diferencia entre 1) derecho penal
OM
.C
DD
LA
FI
OM
a un conjunto de preceptos normativos y, por otro, al sistema de comprensión de estos
preceptos. En otras palabras: con “derecho penal” suele designarse indistintamente a la
legislación penal y a la ciencia que la interpreta.
.C
1. El Derecho Penal es un conjunto de leyes
leyes que traducen normas tuitivas
tuitivas de
de bienes jurídicos
y que precisan su alcance, cuya violación se llama delito e importa una coerción jurídica
DD
particularmente grave, que procura evitar nuevas violaciones por parte del autor.
Decimos que la coerción penal es una coerción jurídica particularmente grave. Esta gravedad no
se evidencia en que la pena pueda ser siempre más grave que una sanción de carácter no penal,
sino en que las otras sanciones tienen por fin inmediato una reparación del perjuicio sufrido, sea
LA
por un particular, sea por la administración pública. En lugar, la pena excede este marco
reparador, porque persigue –directa e inmediatamente- impedir la comisión de nuevas
violaciones.
FI
Hablamos de coerción jurídico-penal y no de pena, porque el derecho penal puede ser entendido
en sentido estricto y en sentido amplio.
nuevos delitos. En lo materialmente penal, esto es, en el derecho penal estricto sensu, éste
opera con la pena como única vía de coerción penal.
• amplio coincide con lo formalmente penal, donde el juez dispone también de las
Sentido amplio:
medidas administrativas que le autoriza el Inc. 1° del Art. 34 del Código Penal, porque así
lo exige la seguridad jurídica, es decir, a efectos de rodear de amplias garantías su
aplicación, por las consecuencias que ésta puede tener, tanto para el sujeto como para
terceros, pero no son manifestación de coerción penal ni tienen el carácter de “sanciones”.
2. Conforme a lo aclarado previamente, también cabe entender por derecho penal al sistema
OM
de comprensión de ese conjunto de leyes.
.C
La ley penal es un acto de poder político, mientras que el saber o ciencia del Derecho Penal
Penal,
nal es
un saber jurídico, es el discurso de los penalistas, quienes vierten tales discursos en libros de
DD
derecho penal.
Entonces, podemos decir que el derecho penal es el discurso del saber jurídico que, como todo
saber o ciencia, se ocupa de un cierto ámbito de cosas o entes del mundo. Ese ámbito son las
leyes penales, que se distinguen de las restantes por habilitar la imposición de penas.
LA
FI
OM
desaparecería el Estado de derecho y la República misma.
5. Progreso del Estado de derecho:
derecho la función de contención y reducción del poder punitivo
impulsa el progreso del estado de derecho, esta función es fundamental.
El carácter diferenciador del Derecho penal con relación a otras ramas del
Derecho.
Derecho.
.C
El derecho penal, solo por ser una rama del derecho tiene carácter “cultural, normativo y
DD
valorativo”, estas son las características que posee solo por ser “derecho”, y no por ser “penal”,
por lo que sería redundante mencionarlas.Cabe aclarar, además, que el derecho penal es un
derecho “público”.
Pero ¿qué distingue al Derecho Penal de las demás ramas del derecho? La respuesta es: la
LA
coerción penal. El derecho penal provee a la seguridad jurídica mediante la coerción penal.
La seguridad jurídica es buscada por todo el orden jurídico, pero el derecho penal se diferencia
de las demás ramas porque lo hace por medio de la coerción penal, que se manifiesta con la
FI
pena.
Ahora, ¿qué caracteriza a la coerción penal? ¿Qué la distingue de otras coerciones jurídicas? La
coerción penal tiene un carácter específicamente preventivo, y no reparador. No se busca reparar
Inevitablemente, la coerción penal también posee una “función represiva”, porque priva de bienes
jurídicos, pero hoy en día ya no se sostiene que esta “represión” satisfaga por sí misma un
sentimiento de justicia.
Si bien la coerción penal a veces cumple los deseos irracionales de los integrantes del grupo
social, pues satisface sus ansias reivindicativas, el derecho penal, como parte del orden jurídico,
no puede renunciar al objeto educador que siempre ha cumplido en nuestra tradición cultural. No
Zaffaroni el derecho
En síntesis, para Zaffaroni, derecho penal tiene, como carácter diferenciador el de cumplir la
función de proveer a la seguridad jurídica mediante la coerción penal, y ésta, por su parte, se
distingue de las restantes coerciones jurídicas, porque tiene carácter específicamente preventivo
preventivo
y no reparador.
OM
El Derecho Penal es un medio o mecanismo de control social formal, racional y altamente
organizado. Este mecanismo tiene por finalidad evitar la realización de conductas que la sociedad
considera indeseables. El Derecho penal debería ser el último recurso alcual debe acceder la
sociedad para el control social, pues hay otros mecanismos informales para el control social: el
grupo de amigos, el club, la familia y sobre todo la escuela y la universidad. En este caso las
.C
sanciones son distintas a las del Derecho Penal, son informales, espontáneas e irracionales,
mientras que la sanción del Derecho Penal es formal y racional (debe cumplir un procedimiento y
ser fundada).
DD
b) Fundamentos del Derecho Penal.
Penal.
El Ius Puniendi del Estado y su legitimación política: Las Teorías delas Penas.
Penas.
LA
La pena:
pena:
El tema de las consecuencias jurídicas propias del derecho penal se puede caracterizar como la
teorización en esta rama del derecho de dos puntos de vista:
FI
• Unos consideran al derecho penal como un instrumento al servicio del valor justicia. Esta
concepción guarda relación con la moral.
•
Mientras otros entienden que el derecho penal es un instrumento que debe servir
prioritariamente al valor utilidad. Esta concepción se vincula con la política social.
El enfrentamiento entre estas concepciones dio lugar a la llamada “lucha de escuelas”, una
disputa en torno a los principios legitimantes del derecho penal.
Mientras que la Escuela Clásica mantuvo el criterio legitimante de la justicia a través de las
“teorías” absolutas de la pena, la Escuela Positiva proponía como único criterio el de la utilidad,
expresándolo por medio de las “teorías” relativas modernas de la pena.
En la actualidad hay un intento de sintetizar estos dos puntos de vista. El Criterio Utilitario es
aceptado en lo que mitiga el rigor del principio de la justicia (por ejemplo, en la condena
condicional y en la libertad condicional) y sólo en parte en lo que resulta ser más riguroso que
este (por ejemplo, mientras admite con diferente intensidad, según los ordenamientos jurídicos,
la agravación de penas para el reincidente y habitual, no se da cabida, en general, al a sentencia
indeterminada).
OM
Desde hace más de dos mil años se ha intentado responder a la pregunta por la naturaleza de la
pena con un gran número de puntos de vista. Estas respuestas han sido formuladas como teorías
de la pena, entendiéndose la expresión “teoría” en sentido amplio, porque en realidad no se trata
de teorías, sino de principios o axiomas legitimantes, cuya función en la ciencia del derecho
.C
penal es la de limitar el poder punitivo.
Por lo tanto, las “teorías” de la pena no responden a la pregunta ¿qué es la pena?, sino a la
DD
pregunta: ¿bajo qué condiciones es legítima la aplicación de la pena?
que produzca al autor un mal (disminución de sus derechos) que compense el mal que él ha
causado libremente.
La utilidad de la pena no importa, solo es legítima la pena justa, aunque no sea útil. Así como
El único fundamento de la pena, según este autor, es la retribución a la culpabilidad del sujeto.
La pena es una retribución por el mal uso de la libertad ejercida por un hombre con capacidad de
decidir entre el bien y el mal.
La aplicación de la pena es, para Kant, una necesidad ética, una exigencia de la justicia, un
imperativo categórico, por tanto, los posibles efectos preventivos que se pretendan atribuir a la
pena son artificiales y ajenos a su esencia. La pena no es concebida como un instrumento para la
consecución de otros fines, distintos, que no sean la justicia o el mantenimiento del derecho.
OM
Así, la dignidad del hombre impide, precisamente, que éste sea utilizado con fines de utilidad
social, como una cosa,ya que el hombre “es un fin en sí mismo” y no un instrumento en beneficio
de la sociedad.
Respecto del sistema para apreciar las penas y establecer su justicia, en cuanto cualidad y
.C
cantidad del castigo, Kant critica el sistema basado en el principio de la igualdad y adopta el
sistema talional, en virtud del cual se acepta incluso la pena de muerte como legítima retribución
para el caso que corresponda.
DD
Al respecto, Kant expresa: "Pero ¿cuál es el tipo y el grado de castigo que la justicia pública
adopta como principio y como patrón? Ninguno más que el principio de igualdad. Por tanto,
cualquier daño inmerecido que ocasionas a otro en el pueblo, te lo haces a ti mismo. Si le
LA
Al respecto Kant señala expresamente que si una persona "ha cometido un asesinato, tiene
que morir. No hay ningún equivalente que satisfaga a la justicia. No existe equivalencia entre una
vida, por penosa que sea, y la muerte, por tanto, tampoco hay igualdad entre el crimen y la
represalia, si no es matando al culpable por disposición judicial, aunque ciertamente con una
muerte libre de cualquier ultraje que convierta en un espantajo la humanidad en la persona que
la sufre".
Para remarcar más aún el sentido que la pena de muerte tiene en su sistema filosófico, Kant
señala a continuación su famosísimo ejemplo de la isla, tantas veces citado en contextos
distintos, según el cual, "aun cuando se disolviera la sociedad civil con el consentimiento de
todos sus miembros (por ejemplo, decidiera disgregarse y diseminarse por todo el mundo el
Hegel
OM
• Síntesis: por lo tanto, la pena es la afirmación del derecho.
El derecho cumple, entonces, un papel restaurador o retributivo y con la pena se busca “afirmar
la vigencia del derecho”. En otras palabras, mediante la dialéctica se fundamenta la imposición de
una pena a fin de restituir la vigencia de la norma que fuera violentada.
.C
Hegel se diferencia de Kant al sustituir la “ley del Talión” por la idea de la equivalencia de delito y
pena. Sin embargo, concuerda con Kant al no reconocer metas preventivas, como la intimidación
DD
y la corrección, como fines de la pena. Al respecto declara: “Si se fundamenta la pena de esa
manera, es como cuando se levanta un palo contra un perro: y al hombre no se le trata según su
honor y libertad, sino como a un perro”.
En esta teoría la pena es definida como una reacción, un instrumento que establece el orden
LA
jurídico sin tener fines utilitarios posteriores. Las críticas a esta posición se centraron en afirmar
que, como para Hegel la pena no tiene ninguna utilidad social, la pena “no sirve para nada”.
c) Si la pena se aplica en razón de la culpabilidad del autor, toda culpa debería ser castigada,
no existirían la prescriptibilidad ni las penas “preventivas”.
d) Es una ficción, confunde el derecho con la moral, asimilando el delito al pecado. La idea de
que se puede compensar o suprimir un mal (el delito) causando otro mal adicional (el del
sufrimiento de la pena), sólo es susceptible de una creencia o fe, a la que el Estado no
puede obligar a nadie, puesto que el Estado no recibe su poder de Dios, sino del pueblo.
e) Resulta claro que la pena es un acto de justicia, pero no de simple justicia absoluta, sino
de justicia social. (Jellinek)
Se puede sostener que impiden la utilización del condenado para fines preventivos generales, es
decir, para intimidar a la generalidad mediante la aplicación de penas al que ha cometido un
delito. En otras palabras, impide sacrificar al individuo a favor de la generalidad.
Teoríasrela
Teoríasrelativas
relativas de la pena
Procuran legitimar la pena mediante la obtención de o la tendencia a obtener un determinado fin.
Su criterio legitimante es la utilidad de la pena. Si este fin consiste en la intimidación de la
generalidad, es decir, en inhibir los impulsos delictivos de autores potenciales indeterminados,
OM
se tratará de una teoría preventivo-general de la pena. Si por el contrario, el fin consiste en obrar
sobre el autor del delito cometido para que no reitere su hecho, estaremos ante una teoría
preventivo-especial o individual de la pena.
.C
que cometió el delito. Ambas tienen subdivisiones, prevención positiva o negativa, dependiendo
del enfoque que tenga.
DD
Prevención general de la pena
Las teorías de la prevención general son las que sostienen que las penas actúan sobre los que no
han delinquido, para que en un futuro no lo hagan. Se subdividen en “negativas” (disuasorias,
provocan miedo) y “positivas” (reforzadoras, generan confianza).
LA
como consecuencia de sus actos obtendrá una insatisfacción (pena) mayor a la insatisfacción de
no haber cometido el hecho delictivo.
Según esta teoría, así como alguien hace un cálculo antes de hacer una operación comercial, se
supone que consultaría un código penal antes de cometer algún crimen, para saber cuánto le
costará.
Críticas:
Críticas:
OM
circunstancias patológicas, además de autores que, por diversas razones, no se detuvieron
a “pensar” antes de cometer el crimen.
Las únicas experiencias de efecto disuasivo del poder punitivo que se pueden verificar son
los estados de terror, que suprimen toda libertad y aplican penas crueles e
.C
indiscriminadas.
• Solo vale para algunos ilícitos menores: es verdad que en delitos de menor gravedad y de
contravenciones y faltas administrativas, la criminalización primaria puede tener un efecto
DD
disuasivo sobre alguna persona, pero esta excepción no autoriza a generalizar su efecto,
extendiéndolo arbitrariamente a toda la criminalidad grave, donde es muy excepcional.
• Consecuencias prácticas degradantes: en la práctica, la ilusión de prevención general
negativa hace que las agencias políticas eleven los mínimos y máximos de las escalas
LA
penales, en tanto que las judiciales impongan penas irracionales a unas personas pocos
hábiles, que resultan cargando con todo el mal social.
• Conduce a la pena de muerte: la lógica de esta teoría conduce a la pena de muerte para
todos los delitos, pero no porque con ella se logre la disuasión, sino porque agota el
FI
catálogo de males crecientes con que se puede amenazar. Por otra parte, el grado de dolor
que debe infringirse a una persona para que otra sienta miedo no depende de la tolerancia
del que lo padece sino de la capacidad de atemorizar a los otros.La persona humana
queda convertida en una cosa a la que se hace sufrir para atemorizar a otras.
Se reconoce que el poder punitivo hace “mal” al autor, pero se afirma que este mal debe
entenderse como parte de un proceso comunicativo (o ideológico, porque impone la creencia de
que la pena es un bien para la estabilidad social o del derecho).
Esta teoría se apoya en datosreales (en comparación con la Prevención General Negativa). Una
persona sería criminalizada porque de ese modo tranquiliza la opinión pública. No ignora (dicha
teoría) completamente la realidad social: la pena no sirve pero debe hacerse creer que si lo hace
para el bien de la sociedad y la sociedad cree esto como resultado de un perjuicio intimidatorio.
OM
positiva como el ejercicio en el reconocimiento de la norma, que se divide en un triple aspecto:
ejercicio de la confianza en la norma, ejercicio de la fidelidad en el derecho, y ejercicio en la
aceptación de las consecuencias.
La sociedad SON las normas, una sociedad sin normas no es una sociedad, y dentro de la
•
.C
sociedad uno puede orientarse de dos maneras:
Orientación comnitiva: uno se orienta a partir de las normas del entorno físico. Ej: la ley de
DD
la gravedad. Quien no se orienta con las normas del entorno físico sufre una pena natural,
por lo tanto estas normas no necesitan estabilización, se estabilizan por sí mismas. Ej:
quien ignora la ley de la gravedad y se tira de un edificio sufrirá graves heridas o incluso la
muerte.
LA
• Orientación en base a normas sociales: las normas sociales no se estabilizan por sí solas,
porque varían según la sociedad. En una sociedad puede estar mal visto un acto que en
otra está bien visto. Por ello, las normas sociales necesitan ser estabilizadas a través de
una sanción. ¿Cómo sabemos que algo está prohibido? Porque tiene una sanción.
FI
Críticas:
Críticas:
• La función de la pena sería sostener una ilusión: Crímenes como los de cuello blanco no
alteran el consenso mientras no sean percibidos como conflicto delictivo, por lo tanto su
criminalización no tendría sentido. En la práctica, se trataría de una ilusión que se
mantiene porque la opinión pública la sustenta, y que conviene seguir sosteniendo y
reforzando porque con ella se sostiene el sistema social (y el poder).
• Produce consenso pero garantiza la impunidad de los corruptos:No
corruptos: es posible afirmar que
la criminalización del más torpe, mostrada como tutela de los derechos de todos, refuerce
los valores jurídicos: es verdad que provoca consenso (en la medida en que el público la
crea; pero no porque robustezca los valores de quienes siguen cometiendo ilícitos
impunes en razón de su invulnerabilidad al poder punitivo, sino porque les garantiza que
OM
porque debe priorizar el sistema a la persona, sea el autor o la víctima (el sistema sería el
único bien jurídico realmente protegido).
La medida de la pena para este derecho penal sería la que resulte adecuada para
renormalizar el sistema produciendo consenso (tranquilizando a la gente), aunque el
.C
grado de su desequilibrio no dependa de la conducta del penado ni de su contenido
injusto o culpable, sino de la credulidad del resto.
• Legitima la realidad para que nada cambie: Las teorías acerca de la prevención general
DD
positiva describen datos que corresponden a lo que sucede en la realidad, por lo cual su
falla más notoria es ética, porque legitiman lo que sucede por el mero hecho de lo que
consideran positivo para que nada cambie, llamando sistema al status quo y asignándole
valor supremo.
LA
• La llamada etización del derecho penal: La prevención general positiva a que nos referimos
ha sido sostenida con base en la sociología o concepción sistemática de la sociedad, pero
fue precedida por otra, en el marco de una etización del discurso penal.
Esta versión etizante de la prevención general positiva pretende que el poder punitivo
FI
refuerce los valores ético-sociales (actual conforme al derecho) mediante el castigo a sus
violaciones.
La función básica es el fortalecimiento de la conciencia jurídica de la población.
Podemos decir entonces que el fin de la pena apunta a la prevención que va dirigida al autor
individual (especial), el fin de la pena es la “prevención especial”.
OM
Prevención especial positiva (Franz Von Litsz)
Según este autor, la prevención especial puede actuar de tres formas: asegurando a la comunidad
frente a los delincuentes, mediante el encierro de éstos; intimidando al autor; mediante la pena,
para que no cometa futuros delitos; y preservándole de la reincidencia mediante su corrección.
.C
Conforme a esto, Liszt propone un tratamiento para “curar” a los diferentes tipos de
delincuentes. Los métodos eran los siguientes:
DD
• Intimidación: para el mero delincuente ocasional, la pena actúa como un recordatorio y la
sanción penal es pequeña.
• Corrección o resocialización: para el autor corregible.
•
LA
(prevención general), sino el propio penado. La finalidad u objetivo primario de este mensaje es
evitar la recaída o reincidencia en el delito y el medio para lograrlo es la ejecución de la pena
impuesta. Las sanciones han de buscar la resocialización, para lo que resulta necesaria la
Críticas:
Críticas:
Puig:
Críticas de Santiago Mir Puig:
• No es lícita: puede llevar a penas indeterminadas, o penas que no tengan que ver con el
OM
injusto o la causa.
• No es necesaria:
necesaria: hay personas perfectamente socializadas que cometen delitos y esta
teoría no resuelve el “qué hacer con ellos”. Tal es el caso de autores imprudentes y de
autores ocasionales de delitos de poca gravedad, o en el caso de autores de delitos graves
que no volverían a cometerlos, pues el hecho fue cometido en una situación de conflicto
.C
irrepetible. ¿Cómo se podría justificar desde una perspectiva preventivo-especial, por
ejemplo, la punición de criminales nazis que hoy no son peligrosos y viven pasando
DD
inadvertidos en la sociedad?
• No es posible: Los altos índices de reincidencia indican que en algunos casos la condena
no cumple con el fin de la resocialización. Ejemplo: un cleptómano no puede resocializarse
por medio de una condena penal, ni los delincuentes por convicción (como los terroristas
LA
fundamentalistas) pueden ser forzados a abandonar sus creencias por estos medios.
efectos de su inferioridad, a costa de un mal para la persona, pero que es un bien para el cuerpo
social. En general se la promueve con la prevención especial positiva; cuando la intimidación y
corrección “re” fracasan, se apela a la neutralización y eliminación de los incorregibles. Se trataría
Se afirma que la inocuización es efectiva cuando mediante la pena se anula totalmente la causa
del delito: pena de muerte, en el caso de un asesino reincidente; la castración en el caso de los
violadores; la cadena perpetua, para los delincuentes terroristas o narcotraficantes, etc.
Crítica:
Crítica:
Esta teoría no es aplicable en un sistema democrático, pues implica penas extremas como la
amputación de las manos para ladrones reincidentes, pena de muerte para los asesinos y
castración para los violadores.
OM
Teorías de la Unión
Estas teorías tratan de combinar los principios legitimantes de las teorías absolutas y de las
relativas en una teoría unificadora. Por lo tanto, se trata de teorías que procuran justificar la pena
en su capacidad para reprimir (retribución) y prevenir (protección) al mismo tiempo.
.C
En otras palabras, la pena será legítima, para estas teorías, en la medida en que sea a la vez justa
y útil.
DD
Los valores justicia y utilidad que en las teorías absolutas resultan excluyentes y en las relativas
son contempladas sólo a través de la preponderancia de la utilidad (social), resultan unidos en las
“teorías” de la unión.
Sin embargo, el fin represivo y el preventivo pueden no coincidir e inclusive ser antinómicos. La
LA
pena justa con respecto al hecho cometido puede ser insuficiente con referencia al autor del
mismo y las necesidades preventivas que este plantea a la sociedad. Este conflicto de fines y de
criterios legitimantes debe resolverse optando por uno de ellos, al que se le otorga
FI
preponderancia sobre el otro. Esto permite configurar dos orientaciones de las teorías de la
unión, según se dé:
por sobre la prevención. Según esta posición, la utilidad de la pena puede contemplarse
legítimamente siempre y cuando no se requiera ni exceder ni atenuar la pena justa.
• Limitación mutua de la utilidad y la justicia: La utilidad es el fundamento de la pena y, por
lo tanto, solo es legítima la pena que opere preventivamente. Pero la utilidad está sujeta a
un límite: por consiguiente, solo es legítima mientras no supere el límite de la pena justa.
Esto significa que la pena legítima será siempre la pena necesaria según un criterio de
utilidad y que la utilidad dejará de ser legitimante cuando la pena necesaria para la
prevención supere el límite de la pena justa.Esta orientación es preferible, pues tiene
mejores perspectivas desde el punto de vista de la política social.
Lo ideal, según este autor, es trabajar con la pena teniendo en cuenta los distintos modos en que
opera, el momento en que nos encontramos del “proceso penal” y a quién va dirigida. Analicemos
las tres etapas:
OM
con la protección de los bienes jurídicos y el aseguramiento del cumplimiento de las
prestaciones públicas primarias. Va dirigida al legislador. El fin de la pena es la prevención
general, positiva o negativa, según sea el caso.
La determinación judicial de la pena: es la etapa de la individualización de la pena ante un
.C
concreto hecho delictivo, dirigido al juez que condena en la medida de la culpabilidad del
autor. Está dirigida al juez. Los fines preventivos son limitados por la medida de la
gravedad de la culpabilidad (teorías retributivas).
DD
La ejecución de la pena: la misma solo puede estar justificada “si se tiene como objetivo la
reincorporación del delincuente a la comunidad”. Está dirigida a los encargados de hacer
cumplir la sentencia. Adquieren preponderancia los fines resocializadores (prevención
especial positiva).
LA
El derecho penal, como parte del orden jurídico, guarda relación con todas las disciplinas
jurídicas, pero antes que con cualquier otra, se vincula con la ciencia del derecho constitucional,
que abarca los principios fundamentales del Estado y del Derecho, y especialmente con el
Estatuto político del Estado, que es la primera manifestación legal de la política penal.
Hay una relación concreta entre estas dos ciencias, que deriva de la necesaria adaptación del
derecho penal a los preceptos del derecho constitucional, dado elprincipio de supremacía
constitucional, establecido en el Art. 31 C.N.
Conforme al mismo, entendemos que los principales puntos de contacto entre ambos son los
siguientes:
OM
medios que puede arbitrar para promover la seguridad jurídica dentro de nuestro sistema.
3. Art. 17: establece que “la confiscación de bienes queda borrada para siempre del código
.C
penal argentino”. Por confiscación de bienes se entiende a la confiscación general de
bienes y no a la medida prevista en el Art. 23 del código penal.
4. Disposiciones constitucionales referidas a delitos en particular.
cular.
DD
15 “Todo contrato de compra y venta de personas es un crimen del que serán
Art. 15:
responsables los que lo celebrasen, y el escribano o funcionario que lo autorice”.
22 “Toda fuerza armada o reunión de personas que se atribuyan los derechos
Art. 22:
del pueblo y peticione a nombre de éste, comete delito de sedición”.
LA
alguna. Actos de esta naturaleza llevan consigo una nulidad insanable y sujetarán a
los que los formulen, consientan o firmen, a la responsabilidad y pena de los
infames traidores de la patria”.
OM
argumento doctrinario.
.C
supuesto jus puniendi o derecho subjetivo de punir, cuyo titular sería el estado.
No existe, en realidad, aquel derecho subjetivo de punir, sino que existe un poder de punir por
DD
parte del estado, que necesita una contención y una reducción.
• Los que excluyen toda pretensión punitiva sea incompatible o viole los DDHH; y
• Los que limitan la criminalización, derivándose en forma directa del principio del estado
de derecho o del principio republicano de gobierno.
FI
OM
(c) Trascendencia mínima.
(d) Prohibición de doble punición.
(e) Buena fe y pro homine.
.C
C. Límites derivados del principio republicano de gobierno.
(a) Principios de acotamiento material:
Proscripción de grosera inidoneidad de la criminalización.
DD
Proscripción de la grosera inidoneidad del poder punitivo.
Limitación máxima de la respuesta contingente.
(b) Principio de superioridad ética del Estado.
(c) Principio de saneamiento genealógico.
(d) Principio de culpabilidad.
LA
Legalidad formal.
formal.
La única ley penal es la ley formal, emitida por los órganos políticos habilitados por la
Constitución. En esto consiste el principio de legalidad.
En sentido práctico este principio tiene 4 consecuencias dirigidas al juez y al legislador. Estas
consecuencias, a su vez, pueden tener excepciones (que operan siempre a favor del imputado).
OM
sentido material (Código Penal) y formal (sancionada por los medios previstos en la
Constitución). Quedan excluidas las disposiciones administrativas, las cuales no pueden
ser tenidas en cuenta como “ley penal”. La sanción de la materia penal está reservada al
Congreso.
.C
2. La ley debe ser previa:
previa el comportamiento considerado como delictivo y la sanción penal
deben estar previstos de antemano en una ley penal. Se prohíbe la aplicación de leyes
posteriores al hecho (ex post facto) salvo que las mismas sean beneficiosas para el reo.
DD
3. La ley debe ser estricta
estricta: estricto apego del juez a la ley penal. El juez no puede crear tipos
penales o “crear derecho” a fin de condenar a un sujeto. Se prohíbe la analogía in malam
partem (en contra del inculpado), pero se permite la analogía in buona partem (en favor
del inculpado).
LA
4. La ley debe ser cierta: tanto el comportamiento prohibido como la pena deben estar
establecidas con la mayor precisión posible, evitándose ambigüedades, imprevisiones,
inseguridades, etc.
FI
Las leyes de facto sancionadas por gobiernos que usurparon el poder constitucional, son una
forma particular de violación a la legalidad formal. Se las denomino erróneamente leyes-
decretos, y desde el golpe de estado de 1966 sus autores las llamaron leyes y fueron
enumeradas en orden correlativo con las sancionadas constitucionalmente.
Se afirma que la ley penal en blanco tiene vigencia independiente de la norma que la completa,
como resultado de la “teoría de las normas de Binding”, quien afirmaba que el tipo de estas leyes
no repite la definición de la conducta prohibida por la norma, sino que por el contrario es un
blanco cuyo contenido lo dará la norma.
OM
La ley penal en blanco constituye una delegación legislativa constitucionalmente prohibida y por
lo que el legislador penal está incurriendo en el abandono de la cláusula de última ratio, propia
del estado de derecho.
•
•
.C
Cuando las leyes que las completan se hallan vigentes al tiempo de su sanción;
Cuando la ley penal se completa con otra norma perteneciente a otro ámbito jurídico que
admite la analogía, lo que la hace inconstitucional; y
DD
• Cuando hay sucesivas leyes complementarias, y en general cuando dejan de considerar
prohibida una acción.
Las únicas leyes penales en blanco cuya constitucionalidad es tolerable son las leyes en blanco
LA
impropias, aquellas que reenvían a otra norma emanada de la misma fuente. Este reenvío puede
ser interno, cuando es a otra disposición de la misma ley, o externo, cuando es a otra ley de igual
jerarquía que la penal. Ej. Ley de estupefacientes y ley de tenencia.
FI
Interpretativa..
Principio de Máxima Taxatividad Legal e Interpretativa
Conforme al principio de máxima taxatividad, la criminalización primaria debe ser formalizada en
una ley en forma taxativa y con la mayor precisión técnica posible, para evitar malentendidos al
momento de su interpretación.
Los jueces deben exigir siempre la máxima precisión legal, pero cuando los legisladores
establecen una escala penal muy amplia, o cuando remiten a conceptos vagos de dudosa
precisión, el juez tiene dos opciones:
La analogía queda absolutamente vedada en materia penal, porque la norma tiene un límite
lingüísticamente insuperable, que es la máxima capacidad de la palabra.
OM
legalidad..
Principio de Irretroactividad de la ley Penal como Principio derivado de la legalidad
Este principio tiene carácter constitucional, de modo que la ley penal debe interpretarse como
aplicable a hechos que tengan lugar solo después de su vigencia. La ley penal rige para el futuro,
debe ser previa a la comisión del hecho, que es el momento de la acción y no el del resultado,
.C
porque una vez realizada la conducta, el resultado puede no depender de la voluntad del agente.
Como consecuencia del principio de legalidad quedan eliminadas las llamadas leyes ex post
DD
facto. La garantía de legalidad (Art. 18 CN) tiene por objeto que nadie pueda ser penado por un
hecho que, al tiempo de su comisión, no era delito o no era punible, y de prohibir que a quien
cometa un delito se le aplique una pena más gravosa que la legalmente prevista al tiempo de
comisión.
LA
principio de irretroactividad en el caso de la ley más benigna, sea que se haya sancionado antes
de la sentencia o bien durante la ejecución de la misma, por lo que se aplicara siempre la más
benigna.
La ley penal más benigna no solo es la que establece pena menor, pues puede tratarse de la
creación de una nueva causa de justificación, de inculpabilidad, o puede provenir también de
otras circunstancias como el menor tiempo de prescripción, una distinta clase de pena, la
provation, la libertad condicional, etc. Los efectos de la ley más benigna operan de pl
pleno
derecho.
Los límites temporales que se toman en cuenta en el Art. 2 del Código Penal para determinar cuál
es la ley más benigna y los constitucionales para prohibir la retroactividad más gravosa, son los
de la comisión del hecho y de la extinción de la condena.
OM
tiempo de su realización, es decir la ley del momento en que se cometió el hecho.
Ultractividad de la ley más benigna: significa que una ley tiene vigencia después de su
derogación tácita o expresa siempre que sea en beneficio del imputado.
Ley intermedia: Es la que, entrando en vigencia después de realizado el hecho, resulta derogada
.C
antes de que recaiga sentencia en el proceso, consagrando mayores beneficios en la situación
jurídica del imputado, tanto con referencia a aquélla como a ésta. Razones de equidad justifican
la consideración de la ley intermedia y su eventual aplicación como la más benigna, ya que el
DD
imputado no puede ser perjudicado por la demora del proceso.
Puede suceder que entre la época de comisión del delito y la de la sentencia se hayan sucedido
tres o más leyes, es decir, una ley en el momento de comisión del delito, otra en el intermedio y
LA
otra en la sentencia. El Código penal en el art. 2 resuelve claramente este problema estableciendo
que si la ley vigente al tiempo de comisión del delito fuere distinta de la que exista al
pronunciarse el fallo o en el tiempo intermedio, se aplicará siempre la más benigna.
FI
inusitado respecto del imaginado por la agencia política que criminalizó la conducta (Ej: hoy no
se puede criminalizar a todos aquellos que afectan la propiedad intelectual al fotocopiar libros,
como en el pasado sí se hubiera pensado).
Por ello, el juez y el intérprete deben mantener el ámbito de lo prohibido dentro de lo abarcado
originariamente.
Según el principio de lesividad, ningún derecho puede legitimar una intervención punitiva cuando
no media por lo menos un conflicto jurídico, entendido como la afectación de un bien jurídico
OM
total o parcialmente ajeno, individual o colectivo. No puede admitirse que alguien pretenda
imponer penas cuando no hay un derecho afectado, dado que con ello no solo esta lesionando el
derecho del penado sino también el del resto de los habitantes.
En derecho penal, no se debe identificar el concepto de bien jurídico tutelado con el de bien
.C
jurídico lesionado o afectado. Todo delito presupone la lesión a un bien jurídico.
Así, no se legitima la pena como retribución, pues sigue siendo una intervención selectiva del
poder que se limita a suspender el conflicto sin resolverlo. Simplemente se afirma que el derecho
penal debe escoger entre irracionalidades, para impedir el paso de las de mayor importancia.
Esto obliga a jerarquizar las lesiones y a establecer un grado de mínima coherencia entre las
FI
magnitudes de penas asociadas a cada conflicto criminalizado, por lo que no se podría tolerar,
por ejemplo, que las lesiones a la propiedad tengan mayor pena que las lesiones a la vida.
Sin embargo, de hecho en la práctica esa trascendencia del poder punitivo a terceros es
inevitable, pues la comunicación, el conocimiento, el efecto estigmatizante, la perdida de nivel de
ingresos, etc. son todos efectos que trascienden a la familia y a otras personas cercanas o
dependientes, no ya del condenado, sino del mero imputado.
En función del principio de humanidad es cruel toda pena que resulte brutal en sus
consecuencias, como las que crean un impedimento que corresponde a la vida del sujeto, como
por ejemplo, muerte, castración, mutilación, etc.
Igualmente crueles son las consecuencias jurídicas que se pretenden mantener hasta la muere de
OM
la persona, puesto que importa asignarle una “marca jurídica” que la convierte en una persona de
inferior dignidad ante la sociedad.
.C
principio “non bis in ídem”. Este principio no entra en juego cuando la administración impone
penas, que no tienen carácter reparador ni restitutivo y que no son consideradas penas (Ej.
DD
multas).
interpretativos.
El principio de buena fe y su concreta aplicación, pro homine, impide que el discurso penal
invoque las disposiciones de la CN y los Tratados para violar los límites del derecho penal de
garantías.
Por lo menos hay tres principios de limitación material que las agencias jurídicas debieran oponer
a las políticas:
OM
intervención del poder punitivo nunca resuelve ningún conflicto, sino que, en algunos
casos seleccionados se limita a suspenderlos, hay supuestos en que su intervención no
sólo es inadecuada sino burda. Ej: si se quisiera suspender el problema del alcoholismo
con una nueva ley seca, o prohibir la venta de aceites y fiambres para evitar la
.C
arteriosclerosis o la venta de banderas y escudos para evitar riñas.
• Grosera inidoneidad de la criminalización: pese a existir un modelo efectivo de solución
del conflicto se pretende introducir un modelo punitivo. El inútil reemplazo de un modelo
DD
eficaz de solución por otro que por definición no lo es, tiende solo a reforzar el
verticalismo corporativo de la sociedad. Ej: no se puede criminalizar el no pago de las
deudas de telefonía argumentando que si todos hicieran lo mismo la empresa quebraría.
• Limitación máxima de la respuesta contingente: es casi inevitable reconocer que la
LA
legislación penal se mueve con dos velocidades: una viene desde el siglo 19, con un
número más omenos limitado de tipos penales, relativamente respetado durante la mayor
parte del siglo 20, pero desde los años ‘80 pasó a funcionar con un asegunda velocidad,
impulsada en buena medida por políticos empeñados en hacer clientela y por grupos
FI
confesables. Ante ellas debe extremarse la aplicación de los principios limitadores del
poder punitivo. Ej: la primera ley penal argentina contingente y manifiesta fue la ley anti
anarquista de 1910 llamada “ley de defensa social”, y desde entonces hubieron muchas
más.
Las agencias jurídicas no deben tolerar que el estado se degrade y deteriore su superioridad
ética, lo que depara el camino hacia la guerra civil. Cuando la ley autoriza formas de ejercicio del
poder punitivo realmente inquisitorias y al margen de toda ética, deben ser descalificadas en
función de su incompatibilidad con el principio republicano y declaradas inconstitucionales. Las
negociaciones con delincuentes para que delaten a sus cómplices o coautores, los testigos
secretos, etc. Son innovaciones que rebajan el nivel ético del estado al de los delincuentes.
OM
PRINCIPIO DE CULPABILIDAD:
CULPABILIDAD:
En relación al principio de culpabilidad deben determinarse dos aspectos esenciales:
A. Alcances de su contenido;
B. Jerarquía normativa de su reconocimiento en el ordenamiento positivo.
.C
contenido.
Alcances de su contenido.
Con respecto al contenido del principio, puede decirse que predomina en doctrina la concepción
DD
que exige para la aplicación de una pena, ciertos presupuestos sin los cuales la punición
carecería de legitimidad, y que tienen que ver con las condiciones requeridas para reprochar por
su hecho al autor. En este sentido, la culpabilidad -fundamento y límite de la legitimidad de la
pena- puede entenderse válidamente como sinónimo de reprochabilidad.
LA
Entre los presupuestos básicos requeridos para la formulación del reproche, se encuentra el
reconocimiento en el hombre del libre albedrío. Una fundamentación antropológica que parta de
una concepción determinista, quita toda posibilidad de aplicación al principio de culpabilidad,
FI
pues a quien no tiene libertad para elegir, no se le podrá cuestionar lo hecho. En el determinismo
no hay lugar para el premio ni tampoco para el castigo, pues el mérito o demérito del
comportamiento presupone la posibilidad de elección, entre adecuar su acción al mandato
1. Por aplicarse pena sin que se den las condiciones que permitan formular al autor un
reproche por lo que hizo.
OM
De lo expuesto, se pueden inferir las consecuencias de reconocer a la culpabilidad como uno de
los principios rectores en al ámbito del derecho penal:
a. Para poder comprender la criminalidad del acto, el sujeto deberá tener la posibilidad de
.C
saber lo que está materialmente haciendo. Conforme a ello los errores invencibles que
impidan al sujeto conocer los riesgos que genera su acción (no sabe lo que hace), serán un
impedimento para la imputación subjetiva del hecho (error de tipo invencible).
DD
En el ámbito penal no es admisible la responsabilidad objetiva: No se puede responsabilizar
penalmente a un sujeto por la mera causación de resultados lesivos, si al menos no ha existido
un comportamiento imprudente o negligente de su parte. (No hay pena sin culpa).
LA
Para ello, será necesario-por una parte- que exista una ley que en forma clara y precisa delimite
el comportamiento prohibido y la pena que corresponderá a su autor (exigencia de ley previa al
hecho). Por tal razón la pretensión de aplicar retroactivamente una ley penal más gravosa o
De todas formas, aun cuando existiera una ley previa al hecho que individualice la acción
prohibida y la pena correspondiente, la comprensión de la criminalidad podrá faltar por alguna
de estas razones:
En primer lugar puede quecarezca en el momento del hecho de la capacidad psíquica necesaria
para poder motivarse en la norma. La ausencia de tal capacidad, que puede o no tener un
carácter patológico, exime de responsabilidad penal a quien la padece (inimputabilidad). Por otra
c. También se requerirá que el autor hayatenido la posibilidad de evitar la comisión del delito
o de haber dado cumplimiento a un mandato de acción. Ello pude estar ausente por
distintas razones (fuerza física irresistible, involuntabilidad, etc.).
d. Finalmente, habrán circunstancias en el que, aun cuando se den todas las condiciones
precedentemente expuestas (ley previa, posibilidad psíquica de comprensión, efectivo
conocimiento de la prohibición, capacidad de acción) igualmente no se le pueda reprochar
al autor por lo que hizo, si no gozó de un cierto ámbito que le haya permitido
OM
autodeterminarse libremente (estado de necesidad exculpante).
Antes de analizar en forma sucinta la segunda forma de lesionar el principio de culpabilidad (por
falta de proporcionalidad entre el injusto cometido y la pena a aplicar), es necesario realizar una
importante advertencia. El principio de culpabilidad le da una fisonomía al derecho penal,
.C
fijándole límites al descartar lapunición en todos aquellos supuestos en los que no estén
presentes los presupuestos del reproche. Desde tal perspectiva, la consecuencia siempre es la
misma, en el sentido de que no podrán considerarse delictivas tales conductassiendo por lo tanto
DD
inaplicable su consecuencia-la pena- al autor del hecho. Sin embargo, los efectossistemáticos
que producirá la ausencia de los distintos presupuestos del reproche, no siempre serán los
mismos. Como se verá en su momento, no produce las mismas consecuencias dogmáticas la
falta de capacidad de acción en el autor que, por ejemplo, el desconocimiento de la relevancia
LA
estudien las categorías individuales de la teoría del delito (acción, tipicidad, antijuridicidad y
culpabilidad).
Esta proporción también debe respetarse teniendo en cuenta una segunda dimensión: en la
comparación de pena en relación a la magnitud de sanción prevista para los otros delitos. Así,
OM
postulado esencial de un Estado de Derecho. Se respeta la dignidad humana al reconocer la
racionalidad del hombre y con ello aptitud para decidir cauces de acción en función dedecisiones
valorativas.
Por otra parte, se dice que el principio de culpabilidad estaría implícitamente consagrado en el
.C
art. 18 de la constitución nacional: “Ningún habitante de la nación puede ser penado sin juicio
previo fundado en ley anterior al hecho del proceso.”
DD
DERECHO PENAL DE ACTO Y NO DE AUTOR:
AUTOR:
En verdad, el derecho penal de acto no deja de ser una derivación del principio de culpabilidad,
no obstante lo cual, y para definir claramente sus alcances resulta conveniente tratarlo en forma
LA
específica.
Este principio, al igual que el de culpabilidad, tiene raigambre constitucional y define una de las
características esenciales del derecho penal, el cual por ser normativa infra-constitucional, debe
adecuar sus disposiciones a las de mayorjerarquía. El artículo 18 de la C.N., establece que nadie
FI
puede ser penado sin juicio previo fundado en ley anterior al hechodel proceso. De esta
disposición surge claramente que la pena sólo puede tener su razón de ser en lo hechopor el
sujeto y no en su personalidad o forma de ser.
Esta es la diferencia que existe entre un derecho penal de acto-como el nuestro- y un derecho
penal de autor -consecuencia del positivismo criminológico- en virtud del cual se castigan
personalidades criminales y no hechos delictivos. Una somera lectura del código penal y de las
leyes especiales es suficiente para advertir que los distintos tipos penales captan
comportamientos delictivos que se consideran disvaliosos y no personalidades criminales: los
distintos delitos (homicidio, lesiones, hurto, robo, violación, injuria, etc.) parten siempre de la
base de un autor que ha realizado alguna de tales acciones y la pena que está prevista tiene
relación con la gravedad del hecho (derecho penal de acto) y no con la peligrosidad del autor
OM
cometer delitos en el futuro.
Sin embargo, debe advertirse que la personalidad del sujeto no es intrascendente a la hora de
determinar la pena debido a que lapropia ley impone-en algunos casos- tomarlo en
consideración. Ejemplo: El art. 41 del C.P., lo establece como uno de los parámetros para
.C
determinar el quantum de la pena; pero esta consideración de la peligrosidad no determina la
configuración del delito, como sílo sería en un derecho penal de autor. No obstante, cualquier
DD
agravamiento en la situación del sujeto por su sola peligrosidad, no deja de ser cuestionable
existiendo un importante debate sobre la legitimidad de algunos institutos basados en ella.
Ejemplo: El instituto de la reincidencia (art. 50 del C.P.), es actualmente muy discutido por esta
razón.
LA
fondo y derecho penal de forma (que sería el procesal). Esta denominación conduce al error,
puesto que da la sensación de que el derecho procesal penal es una rama del derecho penal,
cuando en realidad es una rama del derecho procesal, que se subdivide en derecho procesal civil,
penal, comercial, administrativo, laboral, etc.
Es importante defender el campo de acción de cada uno debido a que nuestro sistema
constitucional es función del congreso de la nación dictar el Código Penal (Art. 75 inc. 12), pero
conforme a los artículos 5, 105 y 106 CN la legislación procesal penal corresponde a las
legislaturas provinciales, pero como poder NO delegado. En principio, pues, el Código penal no
podría contener disposiciones procesales porque tratándose de un poder no delegado al
congreso nacional por la provincias, serían inconstitucionales. No obstante el Código penal
legisla en matera de acciones penales (Arts. 71 a 76 CP) como en otras procesales (Arts. 26, 42
1. El derecho penal impone sanción cuando hay delito, el derecho procesal penal pone en
funcionamiento la acción penal cuando solo media una apariencia del delito.
2. Cuando por el derecho penal una conducta no puede sancionarse, procede la absolución,
cuando por el derecho procesal penal no puede ejercerse la acción por un delito no hay
proceso.
3. La sanción penal es la pena y la procesal la nulidad.
Si tomamos en cuenta las distinciones entre ambos “derechos” resulta claro que las disposiciones
OM
de nuestro Código Penal, cuya naturaleza es problemática son disposiciones procesales, ninguna
disposición constitucional dice que las provincias se han reservado todas las facultades
legislativas procesales, es decir, que la retención de la potestad legislativa procesal tiene lugar en
la medida en que no afecte el principio de igualdad ante la ley. Por ende, tales disposiciones a
.C
pesar de ser procesales las legisla el congreso nacional en el Código Penal, y no son
inconstitucionales.
DD
El derecho penal y el derecho
derecho administrativo
El ámbito sancionatorio de la administración tiene un estrecho vínculo con el ámbito del derecho
penal, esta se divide en:
LA
Derecho disciplinario:
disciplinario sanciones para empleados públicos, miembros de órganos estatales
o paraestatales. El ámbito disciplinario del derecho administrativo se diferencia del
derecho penal por la sanción. La sanción disciplinaria es reparatoria mientras que la pena
es preventiva. La aplicación de ambas sanciones no va en contra del principio “non bis in
FI
ídem”. Las sanciones administrativas graves, sin embargo, deben estar bajo el control
judicial.
Derecho administrativo sancionador:
sancionador permite la clausura, coacción directa, multas
Hay dos aspectos esenciales que tienen que ver con el derecho contravencional y que son objeto
de controversias:
Es mayoritaria, en la doctrina penal, la posición que sostiene el carácter penal del derecho
contravencional afirmando que entre el delito y la contravención no existe una diferencia en la
naturaleza sino sólo, en la magnitud del injusto. Conforme a ello, entre el delito y la
contravención habría sólo una diferencia cuantitativa y no cualitativa. La opinión contraria fue
mantenida por Ricardo Núñez, quien siguiendo a autores italianos como Carrara y Carmignani
sostenía la diferenciación en su sustancia, entre el delito y la contravención. Consideraba Núñez
correcta la diferenciación de Carmignani entre los objetos de tutela de la ley penal y los de la ley
contravencional: Los delitos afectan a la seguridad a diferencia de las contravenciones que sólo
OM
afectan a la prosperidad. Precisando que en lo que atañe a las contravenciones, si bien
reconociéndose siempre que sus ofensas tienen por objeto el ámbito de la prosperidad social, el
enfoque exacto sólo se logró cuando en el círculo de esa prosperidad se distinguieron los
intereses que ella comprende y la actividad estatal que los tiene por objeto. El resguardo penal
de esa actividad-concluía Núñez- señala el campo propio del Derecho contravencional.
.C
“El derecho contravencional reprime porque determinadas acciones trasgreden, al no cooperar
con ella, la actividad administrativa, cuyo objeto es la prosperidad social o el bienestar colectivo.”
DD
La discusión tiene una significativa trascendencia. De considerarse al derecho contravencional
como parte del derecho penal, todas las garantías y principios que rigen en el ámbito penal
serían de aplicación en el derecho contravencional. Conforme a ello no podría aplicarse
LA
retroactivamente una ley contravencional más gravosa o incriminante (principio de legalidad, art.
18 C.N.); no cabría la integración analógica ni por vía de los principios generales del derecho (art.
18- principio de legalidad- y 19, segunda parte de la C.N.-principio de reserva-.); la
contravención debe estar contenida en ley no admitiéndose la configuración por vía de la
FI
costumbre; la ley que contemple la conducta contravencional debe ser estricta y debe contemplar
tanto la conducta prohibida como la sanción; regirá la aplicación retroactiva de la ley
contravencional más benigna; habría un límite a la injerencia estatal no pudiéndose considerar
como contravención las llamadas “acciones privadas” de los hombres (art. 19, primera parte, de
la C.N.); tendría plena vigencia el principio de culpabilidad (no se podría sostener la
responsabilidad objetiva, esto es, por la mera causación de un resultado, si al menos no hay
imprudencia o negligencia en el obrar del contraventor); regiría el principio del “non bis in ídem”
(es decir no podría haber más de una sanción porel mismo hecho; por lo tanto si ya se aplicó a
suautor una sanción contravencional no podría ser además pasible de pena, o viceversa),
intrascendencia de la pena(la sanción contravencional sólo puede recaer sobre el infractor sin
que pueda trascender su persona, etc.
El otro aspecto controvertido tiene que ver con la fuente de producción del derecho
contravencional existiendo al menos dos posiciones encontradas: quienes entienden que
corresponde al Congreso de la Nación dictar un código contravencional para todo el país, por ser
una facultad delegada por las provincias; por el contrario, están quienes reconocen esta facultad
OM
a las legislaturas provinciales y concejos municipales.
.C
d) El Derecho Penal Internacional(García Ramírez)
DD
Según Cheriff Bassiouni, esta rama del derecho es producto de la convergencia de los aspectos
internacionales del Derecho penal, por una parte, y los aspectos penales del Derecho
internacional, por la otra.
La primera vertiente, que abarca los aspectos internacionales del Derecho penal,
penal supone un
LA
desarrollo creciente de ciertos espacios del Derecho punitivo, que trasciende fronteras nacionales
y proyecta sus pretensiones más allá de éstas. Se trata de llevar a buen término la lucha contra la
impunidad y asegurarse de que no haya lugar en la tierra que pueda servir de abrigo a los
delincuentes. En consecuencia, vienen al caso los medios de colaboración persecutoria entre los
FI
Estados, que se integran sobre todo con reglas y tareas de carácter procesal: colaboración
investigadora, extradición, transferencia de procesos, etcétera.
Esto significa que son las propias normas internacionales las que describen las conductas
punibles y fijan las penas consecuentes, que no provienen de la legislación nacional ni se
subordinan a las jurisdicciones estatales.
La construcción de estas normas se haría a partir de las fuentes del Derecho internacional
público, que son:
OM
expresamente reconocidas por los Estados litigantes.
• La costumbre internacional:como prueba de una práctica generalmente aceptada como
derecho.
• Los principios generales del derecho:reconocidos por todas las naciones civilizadas.
• Las decisiones judiciales y las doctrinas:de los publicistas de mayor competencia de las
.C
distintas naciones, como medio auxiliar para la determinación de las reglas de derecho.
Es fácil advertir que la construcción del Derecho penal internacional suscita problemas de diverso
DD
género.
hora de avanzar en el derecho penal internacional, por temor a perder la soberanía o control
sobre su territorio.
desenvolvimientos del derecho internacional público que en este campo son mucho más “sueltos
y flexibles”.
Esta exigencia solo llevó a frustraciones judiciales, pues el ex káiser, que debía ser juzgado por
un tribunal de cinco magistrados designados por Francia, Gran Bretaña, Estados Unidos, Italia y
Japón, se refugió en Holanda, y este país negó la extradición solicitada. La negativa se fundó en
El intento por juzgar a otros perseguidos en los tribunales de los vencedores también falló, pues,
como declaró Alemania: “ningún oficial alemán querría intervenir en la detención de un alemán
para librarlo a la justicia de la Entente”.
Finalmente, Alemania misma asumió el enjuiciamiento de los inculpados en Leipzig, 1921. Esto,
sin embargo, no dio buenos resultados y fue juzgado hasta por el mismo Glueck como una
“tragicomedia”.
OM
En 1920, a raíz del atentado terrorista contra el Rey de Yugoslavia, surgió el deseo de crear una
corte internacional. De este impulso resultaron dos proyectos de convenio que nunca alcanzaron
el número necesario de ratificaciones para adquirir vigencia. Uno de estos convenios tenía como
objeto la lucha internacional contra el terrorismo; el otro, perseguía la creación de un tribunal
.C
internacional para juzgar estos crímenes.
pueden hacerse cumplir las disposiciones del Derecho Internacional”. Basándose en este tribunal,
el Tribunal de Tokio también emitió sentencia contra veintiocho inculpados.
Delitos, penas y tribunales, todos establecidos ex post facto y ad hoc. Esto alentó la creación de
un verdadero derecho penal internacional.
Sin embargo, aún en los años ’80 no existía un estatuto para la creación de un tribunal
internacional, por más que algunos tratados mencionaran que el juzgamiento se haría “por un
tribunal competente del Estado en cuyo territorio el acto fue cometido, o ante la corte penal
internacional que sea competente respecto a aquellas de las Partes Contratantes que hayan
reconocido su jurisdicción”.(Convención para la prevención y sanción del delito de Genocidio).
Yugoslavia estaba destrozada por contiendas incontenibles que hicieron estallar en pedazos la
república, y Ruanda era escenario de la matanza inmisericorde de centenares de millares de seres
humanos aniquilados en unos cuantos meses.
OM
1. Tienen primacía sobre los tribunales nacionales.
2. Son regionales o especiales en atención al territorio, la categoría de las personas y el
tiempo de comisión de los delitos, así como al funcionamiento de los propios órganos.
3. Han sido creados por decisión vertical, externa, no por el consenso en el que participen
los Estados cuya jurisdicción natural se verá afectada por la tarea jurisdiccional
internacional.
.C
La decisión creadora provino del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Unidas
DD
La Corte Penal Internacional
La convención de Roma
Tras una larga marcha se arribó al establecimiento de la Corte Penal Internacional, regida por el
LA
La convención estatuye:
FI
OM
1. Se crea una corte, un tribunal, y con ello se admite la garantía jurisdiccional para la
solución de controversias en este campo y la realización de los altos fines que pretende la
comunidad internacional.
2. Esa jurisdicción será permanente.
.C
3. La corte será independiente en el ejercicio de su jurisdicción, como ha de serlo cualquier
tribunal –nacional o internacional- que verdaderamente represente la garantía de legalidad
DD
y seguridad jurídica.
4. El tribunal ejercerá su competencia punitiva sobre personas físicas, no sobre Estados o
personas colectivas.
5. El órgano jurisdiccional estará vinculado a la Organización de las Naciones Unidas, aunque
LA
7. Se requiere que esos graves delitos revistan trascendencia para la comunidad internacional
en su conjunto, y constituyan temas de importancia universal.
8. La jurisdicción internacional no releva a la jurisdicción nacional, ni se anticipa a ésta, sino
Es evidente que están vinculados los Estados partes en la convención, que han pactado libre y
soberanamente y que aceptan la competencia de la Corte Penal Internacional respecto a los
crímenes sujetos a la competencia material de ésta.
Puede intervenir:
Derecho aplicable
En primer término, la Corte debe atenerse a las disposiciones del Estatuto.
En segundo término, la Corte debe aplicar los tratados, principios y normas del derecho
OM
internacional, “incluidos los principios establecidos del derecho internacional de los conflictos
armados”.
Finalmente, son aplicables también los principios generales del derecho derivados “del derecho
interno de los sistemas jurídicos del mundo, incluido, cuando proceda, el derecho interno de los
.C
Estados que normalmente ejercerían jurisdicción sobre el crimen, siempre que estos principios
no sean incompatibles con el presente Estatuto ni con el derecho internacional ni las normas y
DD
principios internacionalmente reconocidos”.
caso de la multa hay dos fuentes por considerar: la Convención y las Reglas de Procedimiento y
Prueba.
OM
funcionarios. Las inmunidades nacionales carecen de eficacia en el plano penal internacional.
Imprescriptibilidad
Se enuncia en términos absolutos la ineficacia de esta causa regular de extinción de la pretensión
penal y de la potestad ejecutiva, lo cual implica la conveniencia de ajustar las leyes nacionales a
.C
la norma internacional para evitar cuestiones a propósito del régimen de subsidiariedad y
complementariedad.
DD
Elemento de intencionalidad
La disposición genérica resuelve que habrá responsabilidad y procederá, en su caso, la sanción
del inculpado “únicamente si éste actúa con intención y conocimiento de los elementos
materiales del crimen”. La intención se analiza en dos vertientes: la conducta y la consecuencia.
LA
Excluyentes de incriminación
Inimputabilidad
Que la convención vincula a enfermedad o deficiencia mental o a estado de intoxicación.
El cumplimiento de una orden tiene eficacia excluyente cuando se cumplen tres elementos:
Que el infractor estuviese obligado por la ley a obedecer la orden del gobierno o del
superior.
Que no supiera que la orden era ilícita.
OM
Que la orden no fuera manifiestamente ilícita.
.C
DD
LA
FI
OM
esto provoca confusiones cuando se habla de las fuentes. Por lo tanto, hay que concentrarse en
las siguientes categorías:
.C
2. Fuentes de conocimiento de la legislación penal:
penal significa los elementos legislativos que el
saber jurídico penal debe interpretar y explicar (leyes nacionales, provinciales, etc.)
3. Fuentes de conocimiento de la ciencia (o saber) jurídico penal:
penal son la legislación como
DD
cualquier otro dato o información que el saber jurídico penal debe interpretar y explicar
(legislación, datos históricos, jurisprudencia, información fáctica, etc.)
4. Fuentes de información de la ciencia (o saber) jurídico penal:
penal se obtiene la información
acerca del estado pasado o presente de nuestra disciplina (tratados, monografías, etc.)
LA
Dichas fuentes, en Argentina se hallan limitadas por el Art. 18 CN, en la parte que dice: “Ningún
FI
habitante de la nación puede ser penado sin juicio previo fundado en el anterior al hecho del
proceso”. Esta disposición consagra el llamado principio de legalidad penal.
El principio de legalidad implica la prohibición de la ley ex post facto, es decir que una ley
posterior pene una conducta anterior. Se cree que el Art. 18 CN consagra tanto los principios de
legalidad penal como de legalidad procesal.
El principio de legalidad penal se complementa con el llamado principio de reserva que establece
el Art. 19 CN in fine “Ningún habitante de la nación será obligado a hacer lo que la ley no manda
ni privado de lo que ella no prohíbe”.
La ley es pues, por imperio de los Arts. 18 y 19, la única fuente de conocimiento de la legislación
penal.
Por ley puede entenderse un concepto estricto o formal (ley en este sentido es la que emana de
un parlamento, sea el congreso de la nación o de las legislaturas provinciales) o bien un concepto
amplio o material (en éste sentido ley es toda disposición normativa de carácter general, que
emana de un parlamento, del poder ejecutivo, de los municipios).
OM
• Fuentes de conocimiento del saber jurídico penal
penal.
enal.
El jurista o investigador tiene que tratar de agotar la totalidad de los datos para poder explicitar
un área de la realidad que forma parte de un ámbito mayor como cualquier saber.
.C
actos políticos y económicos, de todo lo que pueda aclarar el efecto real de la norma en la
práctica del sistema penal, de cuanto pueda contribuir al esclarecimiento, particularmente de la
DD
historia de las ideas, etc.
El saber penal no se nutre únicamente del conocimiento de la ley penal porque nadie puede
interpretar el objeto que un orden del saber pone dentro de su horizonte de proyección sin
valerse de datos y someterse a condicionamiento de su saber que provienen de ámbito que no
LA
solo están fuera de esos límites, sino incluso insospechadamente alejados del mismo.
Las fuentes de información de la ciencia del derecho penal es la bibliografía. La bibliografía del
FI
Fuente inmediata es la que tiene fuerza obligatoria normativa por sí misma, en tanto que la
mediata la recibe de otra. Así, la ley es una fuente inmediata del derecho penal y la ética social es
En nuestro sistema penal vigente, la única fuente del derecho penal (o la única fuente inmediata,
si se acepta esa clasificación) es la ley en sentido material.
Otras fuentes.
fuentes.
La costumbre
La costumbre no es “fuente del derecho penal”, o bien, puede admitirse que tiene sólo carácter
de fuente “mediata”, en caso de aceptarse esta clasificación. Esta posición asignada a la
OM
costumbre tiene vigencia para todo el derecho, en función de lo dispuesto por el Art. 17 del
Código Civil, al que no hay motivo alguno para negarle vigencia respecto del Derecho Penal, sino
que por el contrario, cobra primordial importancia en éste, por la necesaria limitación que sufre
la costumbre en nuestro campo en virtud del principio de legalidad constitucional del Art. 18.
.C
De allí que la disposición del Art. 17 del Código Civil sea perfectamente aplicable a la legislación
penal: “Los usos y costumbres no pueden crear derechos sino cuando las leyes se refieran a ellos
o en situaciones no regladas legalmente”.
DD
La jurisprudencia
Tampoco la jurisprudencia es “fuente” del derecho penal en sentido estricto, aunque se trate de
jurisprudencia plenaria, la jurisprudencia plenaria no puede ser fuente del derecho, porque se
LA
dirigiría a particulares, sin que nadie le exija llenar los requisitos de la ley, es decir, sin la
publicidad requerida.
Por otra parte, darle a la jurisprudencia plenaria el carácter de una ley interpretativa implica una
FI
lesión al principio de división de los poderes del Estado, puesto que el Poder Legislativo no
puede delegar sus funciones en el Poder Judicial.
No obstante, una cosa es tener en cuenta estos principios para interpretar la ley, y otra bien
distinta es pretender pasar por sobre el principio de legalidad llevando como estandarte estos
principios.
En el primer sentido, tienen plena vigencia para el derecho penal, pues sería absurdo pretender
que la ley penal no debe interpretarse de acuerdo con los “principios generales del derecho”. En
el segundo sentido, estos principios no pueden esgrimirse como argumentos para arrasar el
La doctrina
La doctrina constituye un valioso instrumento esclarecedor del sentido de la ley, pero no puede
considerárselo fuente del derecho. Es auxiliar de la interpretación y puede suministrar bases y
elementos para la reforma de las instituciones penales, viniendo a ser un eficaz instrumento de la
política criminal.
OM
Si el derecho penal es una rama del saber jurídico, su conocimiento debe ser alcanzado por el
método jurídico, que es básicamente de interpretación de la ley, que se expresa en palabras
(lenguaje escrito). Su saber consiste en análisis, interpretación y comprensión de textos legales.
El saber jurídico tiene como objetivo orientar las decisiones de la jurisdicción (sentencias) de
modo racional y previsible. Para eso no baste el puro análisis gramatical de las leyes, que solo
.C
proporciona datos aislados, aunque es correcto que se comience por eso, y también recogiendo
datos históricos y genealógicos (de dónde proviene la norma), pero luego debe formularse una
DD
construcción explicativa.
El celo por evitar la extensión de la ley penal hizo afirmar a algunos clásicos que ella no debía ser
interpretada. Ello en parte se explica a partir de que el libre arbitrio judicial y la aplicación de
analogía eran, hasta el siglo XVIII, expresiones del ejercicio de la soberanía sin límites.
LA
representaciones intelectuales, las que deben derivarse de la propia ley pero sin embargo, cabe
la aclaración, como fenómeno psicológico, no son la misma ley.
Negar la necesidad de interpretar la ley es como negarle aplicación o como creer que la ley actúa
por sí misma o como afirmar que el acto de la persona que la aplica no es psíquico sino
mecánico (el Juez como “boca de ley”).
Para finalizar el punto resulta conveniente resaltar, desde ahora, que la interpretación es una
tarea que consiste en ir despejando ambigüedades, otorgando para ello preferencia a un posible
significado frente a otros. Ésta resulta una ardua tarea que de ningún modo debe quedar librada
a la arbitrariedad o al simple decisionismo del intérprete, por ello, la dogmática jurídico penal ha
formulado múltiples clases y métodos de interpretación.
OM
Métodos
.C
interpretativa que debe responder a tres reglas básicas:
a. Completividad lógica.
lógica O sea, no ser interiormente contradictoria. No cumple esta regla,
DD
por ejemplo, una teoría que considera una misma circunstancia eximente y atenuante, sin
compatibilizar los criterios (precisar en qué casos exime y en cuales atenía), porque
equivale a decir que algo es y no es al mismo tiempo.
b. Compatibilidad legal.
legal No puede postular decisiones contrarias a la ley. La ley que se debe
LA
Pero el método dogmático requiere una decisión previa, pre-metódica, anterior a la selección de
la vía de acceso al conocimiento. Se necesita conocer a dónde se quiere llegar y con qué objetivo.
Si bien el saber jurídico pretende orientar las decisiones de la jurisdicción (sentencias) de modo
racional y previsible, siempre lo hará para que esas decisiones tengan cierto sentido y objetivo
político. Esto es inevitable en el fenómeno jurídico, porque los actos de los jueces son actos de
gobierno, y por ende, actos políticos.
La utilidad del método dogmático (o jurídico) y del sistema que con él se construye, para el
reforzamiento del estado de derecho, dependerá del objetivo político que lo oriente.
OM
necesario, pero no suele ser suficiente, por ello usualmente se combina con otros métodos de
interpretación, ello en una primera aproximación, debido a que la ley no debe interpretarse
formalmente, es decir considerando solo su aspecto exterior. Sin embargo, por imperativo del
principio de legalidad, la interpretación literal opera como límite de los otros métodos que la
complementan, que no pueden desbordar el tenor gramatical de los términos legales. Al respecto
.C
Zaffaroni, Alagia y Slokar, citando a Gallo destacan que la norma tiene un límite lingüísticamente
insuperable que es la máxima capacidad de la palabra.
DD
Interpretación sistemática
Busca el sentido de la ley a partir de su ubicación (es importante para determinar el bien jurídico
protegido que por lo general se expresa en el título o capítulo donde está legislado) y la relación
con otros preceptos legales, teniendo en cuenta la necesaria coherencia que debe tener el
LA
Este método puede tener tanto una función integradora como correctiva; la primera por cuanto,
frecuentemente, se puede extraer el contenido significativo de un concepto a partir del contexto
y la correctiva en tanto al conglobar las normas se define su verdadero alcance.
Interpretación teleológica
Este método de interpretación atiende a la finalidad perseguida por la norma (idea griega de
“telos” que significa finalidad). Objeto o núcleo de la ley penal (razón de ser de la misma), lo
constituye “un fin”, este fin es la tutela de un bien jurídico (elemento teleológico).
Interpretación histórica
Atiende a los antecedentes de las normas y a las circunstancias en que tuvieron su origen.
Propone para establecer la voluntad del legislador tener en cuenta tanto el contexto histórico, en
cuyo marco tuvo lugar la ley, como la génesis legislativa. Debiendo para ello tenerse
especialmente en consideración el material legislativo (proyectos de leyes, actas parlamentarias,
diario de sesiones y exposiciones de motivos). De todas formas, este método histórico de
OM
interpretación ha recibido críticas en la medida que como es sabido, en la creación de las leyes
intervienen una pluralidad de personas, entonces cabría preguntarse: ¿cuál será la opinión
orientativa o que llevó a que se sancionara la misma? (¿la de los redactores del proyecto?, ¿la de
los miembros de las distintas Cámaras? y en su caso, ¿cuáles? ¿La de los Diputados? ¿La de los
Senadores?).
.C
Analogía e interpretación analógica
Las disposiciones penales son exhaustivas, un código penal no es un producto sino una suma de
DD
incriminaciones cerradas, incomunicadas. La zona entre una y otra incriminación es zona de
libertad (art.19 de la C.N.), las acciones que en ellas recaigan son acciones penalmente
irrelevantes.
LA
El problema de las “lagunas de la legislación” no es tal para el derecho penal que es al decir de
Soler un sistema discontinuo de ilicitudes, a diferencia del derecho civil que es un sistema
continuo en la medida que el Juez de esa rama jurídica está obligado a dar respuesta en todos los
casos y por ello puede y debe valerse de la analogía, también de los principios generales del
FI
derecho, etc.
Analogía, según Roxin, es trasladar una regla jurídica a otro caso no regulado en la ley por la vía
del argumento de la semejanza entre supuestos.
Al respecto,Justo Laje Anaya analiza gráfica y elocuentemente el siguiente caso: “si la ley a
previsto que el secuestro extorsivo consiste en privar de la libertad a una persona para sacar
rescate, y en la realidad ocurre que se ha sustraído un cadáver para hacerse pagar su devolución,
es evidente que este último hecho es distinto, porque el cadáver no es una persona”. Esto fue lo
que ocurrió en el país, cuando se hallaba vigente en Buenos Aires, el Código de Tejedor, que
ciertamente, no había previsto la sustracción de un cadáver para sacar rescate.
Por ello, fueron necesarias dos cosas: la primera, absolver a los acusados por falta de ley previa,
OM
y la segunda, sancionar una ley que previera expresamente ese hecho. No obstante, el art. 171
del Código, puede a su vez crear problemas con respecto a la analogía, porque la figura exige
que el cadáver sea sustraído para hacerse pagar su devolución.¿Qué ocurrirá si el cadáver es
simplemente sustraído y nada se exige? Resulta evidente que para este hecho, no se podrá
.C
aplicar el art.171, sin hacer analogía. ¿Será que la sustracción de un cadáver conduce al hurto?
Podría entenderse que ello es posible, porque se trata de una cosa, y entonces la sustracción
conduciría al hurto. Pero, ¿a quién pertenece en propiedad un cadáver? ¿Quién es el dueño? ¿No
DD
es cierto que el hurto exige que la cosa sea ajena, que por ello tenga dueño y reconozca
entonces, la propiedad en otro? Todo esto, ¿ocurre con los cadáveres?
Del caso expuesto cabe colegir, a la luz del principio de legalidad y la prohibición de analogía,
LA
que por más que pueda encuadrarse el supuesto en el sentido o en el espíritu de una
formulación legal determinada, ésta subsunción no puede violar nunca el sentido literal posible
de los términos gramaticales redactados en la ley. Con otro giro, todo lo que excede este sentido
literal posible es analogía e infringe el principio de legalidad en la medida que sea contra reo.
FI
rechazan por violatorio del principio de legalidad la llamada analogía “in malam partem”, dado
que integra la ley extendiendo la punibilidad, en cambio aceptan la aplicación de la llamada
analogía “in bonam partem”, toda vez que restringe más allá de la letra de la ley pero siempre
que la misma no sea arbitraria, destacando éstos autores, que ésta última versión (in bonam
partem) suele admitírsela en las causas de justificación y que el código penal uruguayo las
consagra expresamente en materia de atenuantes, alegando como motivo la doctrina de ese país
que “la realidad no puede ser agotada”.
OM
Las leyes penales manifiestas son:
a. Sancionarias.
b. Habilitan poder punitivo de modo fragmentado y discontinuo.
El poder punitivo:
-
.C
Muestra una constante vocación de continuidad o totalidad.
DD
• El derecho penal es:
Parte del derecho público. Es una rama del derecho público y, puede ser considerado también un
LA
apéndice del derecho constitucional, ya que halla en éste sus primeros y más importantes
fundamentos.
Continuo y fragmentador.
fragmentador No todo acto antijurídico es delito y no todo acto antijurídico
determina sanciones. La ley penal manifiesta recorta algunas conductas y las criminaliza en
forma discontinua, a diferencia de la ley civil que, por regular relaciones de la vida de todos los
habitantes, se presenta como un sistema continuo (sin lagunas).
Normativo.
Normativo Pero no por estar constituido por normas ni por ocuparse solo del deber ser y
desentenderse del ser, sino, simplemente, porque es un saber que tiene por objeto el estudio de
normas (porque se ocupa de normas). Así como la biología se ocupa de los seres vivos y la
botánica de las plantas, el derecho se ocupa de normas.
OM
• Las leyes penales manifiestas son:
Sancionarias.
Sancionarias Establece las consecuencias de realizar algún acto delictivo. El derecho penal no
crea la ilicitud sino que, aplica penas a conductas ya ilícitas, establecidas por otras ramas del
derecho. Si por arte de magia derogáramos el código penal, igualmente esas acciones seguirían
.C
siendo antijurídicas, pues las demás ramas del derecho las han declarado ilícitas.
• El poder punitivo:
correspondiente al Estado. El derecho penal subjetivo se opone, de esta manera, al derecho penal
objetivo, es decir, al constituido por las manifestaciones concretas de aquél, contenidas en las
leyes penales.
El derecho penal objetivo sería la manifestación concreta del derecho penal subjetivo, del
derecho de sancionar del Estado, contenido en las leyes penales. El derecho penal objetivo
expresa el uso concreto del poder sancionador que hace el Estado dentro del marco que le fija la
Constitución del Estado, es decir, conforme con los principios legitimantes del derecho penal.
OM
intervención estatal de tipo represivo.
La norma penal
Concepción tradicional.
tradicional Las leyes penales, según se ha entendido tradicionalmente, contienen
dos partes: el precepto y la sanción. El precepto prohíbe o manda algún comportamiento y la
.C
sanción se prevé para el incumplimiento del mismo.
“La pena puede dictarse sólo porque la acción descrita en la ley y la cometida por el ladrón se
superponen conceptualmente. El delincuente no contraviene la ley penal, según la cual se lo
LA
sanciona; por lo contrario, para que se lo pueda sancionar, el delincuente tendrá que haber
obrado en consonancia, de acuerdo, con la primera parte de esa ley”.
Mientras la norma que prohíbe el hurto dice: “No debes apoderarte de cosas muebles ajenas”, la
ley penal reza, por ejemplo, “El que se apodere de una cosa mueble ajena será sancionado de tal
FI
forma”.
Esta teoría concibe la norma jurídica como un imperativo o como una orden. La orden como tal, y
Ley penal
Núñez se entiende por ley "el total organismo jurídico que regula la imputación y
Como indica Núñez,
sus consecuencias a un caso concreto", aspecto que significa que en el artículo 2° del Código
OM
Penal la expresión ley no se puede concebir en el sentido de ley formalmente penal, sino que el
concepto se extiende a todas aquellas disposiciones que vienen a integrarse, completándolo u
otorgándole contenido jurídico, al tipo penal como figura, incluyendo la de la determinación de la
sanción, sea por aplicación del principio de plenitud organizada del sistema jurídico general, sea
.C
por remisiones expresas o implícitas de la misma ley penal, así como a todas las que en el caso
habilitan el ejercicio del ius puniendo que permite la aplicación efectiva de la sanción.
DD
Las leyes penales, de acuerdo con Bacigalupo,
Bacigalupo contienen dos partes: el precepto y la sanción. El
precepto prohíbe o manda algún comportamiento y la sanción se prevé para el incumplimiento
del mismo, agregando Zaffaroni que la ley penal señala un ámbito dentro del cual el sistema
penal del que forma parte puede seleccionar y criminalizar personas.
LA
Es decir que la ley penal se estructura sobre la base del precepto y de la sanción. Si se dan los
requisitos establecidos en el precepto, entonces procede la aplicación de la sanción. Por ejemplo,
en el artículo 79° del Código Penal se reprime con reclusión de ocho a veinticinco años al que
matare a otro. En este caso, el precepto está constituido por la acción de matar a otro y la
FI
¿En base a qué criterios se determina el ámbito material de vigencia de la ley penal de los
distintos estados? Al ser diferente la legislación penal de los diversos países, surge el
interrogante respecto a la ley que habrá de aplicarse al caso.
En teoría existen cuatro grandes principios en base a los cuales se determina el ámbito espacial
de validez de la ley penal:
• Principio de territorialidad;
• Principio real o de defensa
defensa;
A ellos se agrega un principio subsidiario que se conoce como “principio del derecho penal por
representación”. No todos ellos son seguidos por los distintos estados, por lo tanto se hará una
pequeña referencia a su contenido para luego analizar cuál de estos principios fueron receptados
por nuestro ordenamiento jurídico.
A. Principio de la territorialidad.
Conforme a este principio la ley penal de un estado será aplicable a todos aquellos delitos que
OM
han sido cometidos en su territorio. El de territorialidad es un principio al que no puede
renunciar ningún estado si pretende mantener la soberanía sobre su territorio. A pesar de su
sencilla enunciación existen importantes problemas sobre los alcances del mismo.
En primer lugar, cuando se habla del territorio no se está haciendo alusión al ámbito geográfico
.C
sino al territorio en un sentido jurídico. Por lo tanto, conforme a este principio la ley penal de un
estado se aplicará a todos los delitos cometidos en ámbitos sobre los cuales el mismo ejerce
soberanía, ya sea en el espacio terrestre, aéreo o marítimo.
DD
Esta aclaración, con ser cierta, no es suficiente para terminar con las dificultades de
interpretación del principio, debido a que no hay acuerdo sobre qué se entiende por lugar de
comisión del delito. Los problemas surgen cuando se produce una separación espacial entre el
LA
Ejemplo:
Ejemplo Una persona, en el territorio de un país, agrega una sustancia venenosa en la comida
FI
que se va a servir en el avión a uno de los pasajeros. Éste muere intoxicado en el territorio de un
estado diferente a aquél en el que se puso el veneno. ¿Dónde se cometió el delito: en el país en el
que se desplegó la acción criminal o en el estado en que se produjo el resultado muerte?
Como se ve, dilucidar la cuestión resulta esencial para saber cuál es la ley aplicable al caso ya
que, conforme al principio de territorialidad, deberá ser aquella que rija en el estado en cuyo
territorio se cometió la infracción. Pero es el caso que, para algunos, lugar de comisión es aquél
en el que se llevó a cabo la acción delictiva, mientras que otros, por el contrario, consideran
como lugar de comisión al territorio en que se produjo el resultado típico. Esta situación puede
generar, según los casos, diferentes situaciones que se conocen con el nombre de “conflicto
positivo de leyes” y “conflicto negativo de leyes”.
leyes”
Ejemplo: Si por vía de hipótesis imaginamos que-para seguir con el mismo caso-el estado en
cuyo territorio se envenenó la comida considera que lugar de comisión es aquél en que se
desplegó la acción; mientras que el estado en el que se produjo la muerte entiende por lugar de
comisión al de producción del resultado, se advertirá que estamos ante una situación en el que
dos países pretenden aplicar su ley al caso habiéndose originado un “conflicto positivo de leyes”.
En verdad, si no existen tratados bilaterales o multilaterales entre los estados fijando las pautas
OM
en base a las cuales definir el concepto de “comisión del delito”, este conflicto positivo no tiene
una solución legal. En los hechos, será el estado que primeramente logre apresar al delincuente
elque aplicará su ley al caso, pero esto no es una solución jurídica, sino puramente fáctica,
pudiendo generar tensiones entre los países implicados en el conflicto positivo de leyes.
.C
La situación podría ser aún más compleja. Imaginemos que el delincuente huye antes de ser
descubierto, a un tercer estado (que no es ni aquél en que se llevó a cabo la acción delictiva ni
DD
donde se produjo la muerte). En tal caso, cada uno de los estados que se considere con derecho
a aplicar su ley penal,debería solicitar al estado en cuyo territorio se encuentre el delincuente que
le conceda su extradición su juzgamiento. Por una parte, el estado requerido considerará la
entrega en base al propio concepto que tenga del lugar de comisión, pero a su vez pueden surgir
LA
complicaciones tiene tratado de ex-tradición sólo con uno de ellos y con el otrono. La situación
más problemática se dará si justamente no lo tiene con aquél en cuyo territorio -conforme al
criterio que tenga el estado requerido-se habría “cometido” el delito.
Así, refiriéndome siempre al mismo caso, si el estado en cuyo territorio se llevó a cabo el
Para evitar esta situación, se ha creado un subprincipio (llamado así porque sirve para solucionar
un problema de interpretación del principio de territorialidad) denominado de “ubicuidad”.
El sub principio de ubicuidad es también útil para resolver algunos problemas que presentan los
llamados “delitos en tránsito”. Se da esta denominación a aquellos delitos en los que su proceso
ejecutivo se realiza recorriendo varias jurisdicciones diferentes mientras ese proceso se
desarrolla.
Ejemplo:Alguien
Ejemplo traslada estupefacientes en un bolso y cruza por varios estados hasta llegar al
OM
lugar de destino, siendo que en cada estado está penado el transporte de estupefaciente.
Conforme a la ubicuidad, el delito se entenderá cometido en cada uno de ellos.
.C
solución por vía de celebración de tratados entre los estados.
Ejemplos:
Ejemplos La falsificación de moneda, aunque la acción de falsificar y los billetes falsificados se
produzcan en territorio de otro país, terminan afectando a la economía del estado al que
pertenece la moneda falsificada; por las mismas razones se dice aplicable el principio real o de
defensa en los casos de menosprecio a los símbolos patrios de un país; a la conspiración para
derrocar al gobierno de un estado, etc., cuando la comisión de tales delitos se produjo en
territorio de otro estado, por ser aquél el titular del bien jurídico público afectado por tales
acciones.
Este principio también sostiene la aplicación de la ley de un estado para delitos cometidos fuera
de su territorio tomando en consideración la nacionalidad del autor o bien de la víctima del
Ejemplos:
OM
b. Igualmente, si la víctima es un ciudadano sueco, y lo matan en Argentina, Suecia
pretendería aplicar su ley en base al principio de la nacionalidad pasiva.
.C
bien en la protección del ciudadano independientemente del país en el que se halle (nacionalidad
pasiva).
DD
LA
FI
Conforme a este principio cualquier estado en el que no se cometió el delito puede aplicar su ley
en la medida en que se trate de “delitos internacionales”. Lo decisivo es que el delito por el que
se persiga sea de aquellos en los que la comunidad internacional en su conjunto tienen interés
en reprimir, por afectar bienes supranacionales.
Ejemplos:
Ejemplos Genocidios; piratería; trata de blanca; tráfico internacional de armas; tráfico
internacional de estupefacientes, etc.
OM
en los que se establecen los alcances del principio.
Este principio, como lo advierte Bacigalupo, tiene un carácter subsidiario y se aplica cuando el
estado requerido no concede, por la razón que sea, la extradición del delincuente que se
.C
encuentra en su territorio. En tal caso, puede el estado requirente autorizar al estado requerido a
que juzgue al sujeto por representación, pero aplicándole la ley del estado que lo va a juzgar,
DD
aunque allí no se haya cometido el delito, ni se haya afectado un bien jurídico público protegido
por ese estado, ni se trate de un delito internacional.
El principio del derecho penal por representación halla su fundamento en la solidaridad que debe
existir entre los diferentes estados.
LA
Debe quedar en claro que, con los mencionados principios, sólo se trata de determinar qué
estado podrá aplicar su ley penal al caso. Pero si el sujeto al que se pretende juzgar se encuentra
dentro del territorio de otro estado, no se puede avasallar su soberanía ingresando con
FI
pidió la extradición.
Los de nacionalidad o personalidad activa ni pasiva no fueron receptados por la ley argentina. Sí
lo fue -subsidiariamente- eldel derecho penal por representación.
En el inciso 1 del transcripto art.1 del código penal argentino, aparecen consa-grados dos
principios:
el de territorialidad,
territorialidad al establecer que la ley penal argentina se aplica a los delitos
OM
cometidos en el territorio de la Nación Argentina o en los lugares sometidos a su
jurisdicción. En el mismo inciso, al establecer “...o cuyos efectos...” se reconoce aplicación
al subprincipio de ubicuidad, por lo que, tanto si la acción se llevó a cabo en territorio
argentino, como si el resultado típico se produjo en nuestro territorio se aplicará la ley
penal argentina.;
.C
elprincipio realo de defensa,
defensa al decir “...o cuyos efectos...” Esta es la segunda significación
que tiene la expresión efectos en la mencionada ley, refiriendo al efecto lesivo de un bien
DD
jurídico público que se encuentra en el estado.
Se podría entender que también el inciso segundo refiere al principio real o de defensa, dado que
los delitos cometidos en el extranjero por agentes o empleados de autoridades en desempeño de
su cargo, dañan la imagen del estadonacional, por lo que la razón de la aplicación de la ley penal
LA
El principio de universalidad,rige
universalidad en ciertos tratados multilaterales celebrados por nuestro
FI
país.
El principio del derecho penal por representación, fue receptado, subsidiariamente a los demás
principios, en el art. 12 de la ley 24.767 (Ley de cooperación internacional en materia penal). En
Como se puede apreciar de la normativa transcripta, en el caso en que nuestro país deniegue la
extradición por haber optado elciudadano argentino a ser juzgado por los tribunales argentinos,
OM
Como se vio, tanto el art. 18 de la Constitución Nacional, como dos de los tratados
internacionales con jerarquía constitucional suscriptos por nuestro país (la Convención
Americana de Derechos Humanos art. 9; y el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos
art. 9, punto 1) consagran el principio de legalidad, una de cuyas manifestaciones esenciales es
.C
la prohibición de aplicación retroactiva de toda ley penal más gravosa o incriminante.
Si éstas fuesen la únicas normas el principio general sería el de aplicar siempre la ley del
DD
momento del hecho, que como ya sabemos,es la que rige al momento en que se realiza la acción.
Sin embargo, hay otras disposiciones, que ya no tienen como fundamento al principio de
legalidad, pero que, en forma complementaria con aquellas, definen los criterios que rigen la
determinación dela ley penal aplicable en la sucesión de leyes en el tiempo: Tales son las que
LA
establecen que siempre debe aplicarse la ley penal más benigna (Convención Americana de
Derechos Humanos, art. 9; Código Penal, art. 2).
Esta disposición adquirió rango constitucional con la incorporación a nuestro derecho positivo de
las disposiciones del Pacto de San José de Costa Rica, y en razón de lo dispuesto por el art. 75,
FI
común, podía ser modificado por otra ley posterior de igual jerarquía.
Del juego armónico de ambas disposiciones -irretroactividad de la ley penal más gravosa o
incriminante y aplicación de la ley más benigna-surgen los criterios que rigen el ámbito temporal
de validez de la ley penal, pudiendo darse alguna de las siguientes situaciones:
1) Puede ser que la ley penal vigente al momento de cometerse el hecho haya sido
reemplazada por otra ley, en cuyo caso, la ley aplicable se determina en función de las
siguientes consideraciones:
Si la ley vigente al tiempo de cometerse el delito fuere distinta de la que exista al pronunciarse el
fallo o en el tiempo intermedio, se aplicará siempre la más benigna. Si durante la condena se
dictare una ley más benigna, la pena se limitará a la establecida por esa ley. Los efectos de la
nueva ley operan de pleno derecho.
OM
B. Si, por el contrario, la ley derogada era la más beneficiosa para el autor del hecho, es
aquella la que se debe aplicar, dándose entonces elsupuesto de la ultraactividad de la ley
penal (una ley se sigue aplicando aun cuando ya ha sido derogada por otra ley posterior).
C. Puede ocurrir que la ley que corresponda aplicar no sea ni la que regía al momento en que
.C
se cometió el hecho, ni la que rige al momento en que se va a dictar sentencia, sino una
ley intermedia. Se denomina ley intermedia a aquella cuya vigencia comienza con
posterioridad a la fecha en que se cometió el delito pero pierde tal condición al ser
DD
reemplazada por otra ley antes de dictarse sentencia. En tal situación tenemos al menos
tres leyes: la que regía al momento de realizarse la acción delictiva; la intermedia y la que
rige al momento en que se debe dictar sentencia. En tal caso, si la ley intermedia, es la
más benigna, ésta es la que se debe aplicar, produciéndose así una circunstancia muy
LA
2) Puede ser que, luego de haberse dictado sentencia condenatoria,entre en vigencia una
nueva ley penal.
En este caso, si esa nueva ley es más benigna, debe aplicarse retroactivamente, cediendo el
principio de la cosa juzgada en aras de tal solución.
Ejemplo:Luego
Ejemplo de haber sido condenado y mientras está cumpliendo la condena se
descriminaliza (deja de ser delictiva) la acción por la que fue condenado.
En tal caso, la nueva ley debe aplicarse retroactivamente. Debe aclararse que el límite temporal
para aplicar retroactivamente la nueva ley penal más benigna no está dado por el cumplimiento
de la pena, sino que aún cuando ya se haya cumplido la condena corresponderá su aplicación en
la medida que perdure algún efecto jurídico de aquella.
En todos los casos, el tribunal sentenciante debe aplicar depleno derecho la nueva ley más
benigna, esto es, sin que sea necesaria una petición expresa del interesado o de su abogado
defensor. (Art. 2 del C.P.).
Hasta aquí, las reglas que rigen la sucesión de leyes en el tiempo. Corresponde ahora precisar los
parámetros en base a los cuales se determinan en qué casos una ley se considera más benigna
que otra.
OM
En primer lugar, al hablar de ley, y siendo que, normalmente ésta se integra con precepto (tipo
penal) y sanción, la mayor benignidad puede ser la consecuencia de una modificación de
cualquiera de ellos. Así, no sólo es más favorable la ley que establece pena menor o menos
grave. También lo es, obviamente, aquella que por alguna razón no contempla a la acción que se
.C
debe juzgar dentro de su materia de prohibición, es decir no la considera delictiva.
No siempre una ley penal está compuesta por un tipo penal y su correspondiente pena.
DD
Numerosas disposiciones jurídico-penales, como por ejemplo, todas las del Libro Primero del
Código Penal (arts. 1 a 78), al no contemplar a los delitos en particular, no responden a esta
estructura. Sin embargo, estas disposiciones también inciden de manera determinante en la
LA
Esto es lo que hace que frecuentemente no sea sencillo determinar qué ley es la más favorable,
ya que la nueva norma puede contemplar varios aspectos, alguno de los cuales pueden beneficiar
y otros perjudicar al sujeto. Piénsese por ejemplo, en la situación que se produciría si se
FI
reemplazase nuestro actual código penal por otro. En tal caso, las variaciones entre las
disposiciones de una y otra ley pueden darse en múltiples temas, como ser, respecto a las
acciones que se consideran típicas (penalmente relevantes), condiciones de justificación o de
Se debe tener presente, que la mayor benignidad de una ley no se puede determinar en
abstracto, esto es, de la simple lectura del contenido de las sucesivas leyes que han tenido
vigencia en el tiempo. La única forma de resolver correctamente la cuestión es analizarlas en su
Ejemplo:Tres
Ejemplo personas intervienen como coautores enun hecho delictivo. Al momento de
comisión del delito regía la ley “A”; ésta es luego derogada por la ley “B”, la cual pierde vigencia
antes de dictarse sentencia en la causa, al ser reemplazada por la ley “C”.
El procedimiento a seguir para determinar cuál es la ley penal aplicable, consiste en comparar los
efectos que producirían la aplicación de las distintas leyes en cada uno de los sujetos
intervinientes, y ver cuál de ellas resulta integralmente más favorable para cada partícipe.
OM
Si, por ejemplo, la ley “A” resulta ser la más benigna para uno de los autores, mientras que es la
ley “ B” la más favorable para el otro autor, siendo más ventajosa la ley “C” para el tercero de los
intervinientes en el hecho, la solución correcta será resolver el caso mediante la aplicación a cada
uno de los sujetos de aquella ley que le sea más favorable, con lo que queda claro que es posible
y legalmente admisible la aplicación de más de una ley penal a un mismo caso.
.C
Sin embargo, debe cuidarse de caer en el error de pretender aplicar parcialmente a cada sujeto
más de una ley mediante la selección deaquellas partes, de las distintas disposiciones jurídicas,
DD
que resulten más ventajosas, lo que sería incorrecto. La aplicación a cada partícipe de contenidos
parciales de las sucesivas leyes, sería inconstitucional, en razón de que el juez estaría usurpando
una facultad propia del poder legislativo al no aplicar al caso ninguna de las leyes que tuvieron
sucesiva vigencia en el tiempo (“A”, “B”, o “C”), sino otra distinta (que podríamos llamar la ley “D”)
LA
que se elaboró con las distintas partes seleccionadas de cada una de las leyes.
Por tal razón, luego de definir en base a los criterios expuestos cuáles la ley más benigna, ésta
deberá aplicarse integralmente sin que puedan reemplazarse ninguna de sus disposiciones por
FI
las de alguna de las otras leyes. Esto es siempre así, con una única excepción:
excepción las atinentes al
cómputo de la prisión preventiva.
En efecto, el artículo 3 del Código Penal dispone: “En el cómputo de la prisión preventiva se
Volviendo al análisis del artículo 3 del C.P., el mismo impone al juez el deber de seleccionar entre
OM
todas las leyes que han tenido vigencia en el tiempo-desde que se ejecutó el hecho y hasta el
momento en que perdure algún efecto jurídico de la condena- aquél cómputo de la prisión
preventiva que sea más favorable para el procesado, aunque esta disposición esté contemplada
en una ley distinta de la que se consideró-en los otros aspectos, claro está- como la más
beneficiosa para el sujeto. En esta situación el juez no se estaría convirtiendo en legislador al
.C
aplicar a un mismo sujeto disposiciones correspondientes a cuerpos legales diferentes, debido a
que es la propia ley la que establece este procedimiento a seguir.
DD
Ejemplo:
Ejemplo Si un sujeto cometió un delito durante la vigencia del actual código penal y luego se
modificara integralmente por un nuevo código, el que resulta aplicable por ser el más favorable
para el sujeto, se deberán, no obstante, considerar las disposiciones en algún efecto jurídico de
la sentencia condenatoria, que abarca el registro de la misma en el correspondiente organismo
LA
estatal, el cómputo de sus efectos para obtener cualquier beneficio o incluso las dificultades
materia de prisión preventiva del código derogado si el cómputo que éste establece es más
beneficioso para el procesado; en todo lo demás regiríanlas previsiones de la nueva ley.
FI
mismo podía ser reemplazado por otra ley posterior de igual jerarquía. Esto es lo que ocurría con
las denominadas leyes temporarias y transitorias a las que se les reconocía el efecto de contener
una implícita derogación del art. 2 del C. P.
Las leyes temporarias son aquellas que fijan su auto-abrogación señalando un tiempo de
vigencia de la misma, superado el cual deja de ser aplicable. Las transitorias, por el contrario, no
establecen un tiempo preciso de vigencia sino que lo condicionan a la permanencia de aquellas
circunstancias especiales que determinaron su sanción. Ejemplo de estas últimas son aquellas
que, tomando en consideración la mayor desprotección en que se encuentran ciertos bienes a
Se suele afirmar que estas leyes implican una derogación implícita del principio de aplicación de
la ley penal más benigna, argumentando que, de lo contrario, carecerían prácticamente de efecto,
pues al ser siempre estas leyes más gravosas, y teniendo consideración la duración de los
procesos penales en los que la sentencia se dicta frecuentemente varios meses, o en algunos
casosaños, después de la fecha en que se cometió el hecho, ello llevaría a que todos los ilícitos
cometidos en los últimos tiempos de vigencia de la ley-temporaria o transitoria-se terminarían
OM
resolviendo en base a la nueva legislación la cual al ser más benigna, se debería aplicar
retroactivamente en base a lo dispuesto por el art. 2 del C.P. Por ello, para evitar la pérdida de
eficacia, se sostiene el carácter ultraactivo de estas leyes.
Pero es el caso que, actualmente, el principio de la ley penal más benigna ya no tiene una base
.C
meramente legal, sino constitucional al estar contemplado tanto en la Convención Americana de
los Derechos Humanos (art.9, in fine), como en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos (art.15, punto 1) y ser éstos tratados a los que el art. 75, inc. 22 de nuestra carta magna
DD
reconoce tal jerarquía.
Esta nueva situación ha llevado a que se ponga en cuestión la afirmación de que aplicación de la
ley penal más benigna no rige respecto a las leyes temporarias y transitorias, con el sólido
LA
argumento de que una ley infra-constitucional (ley común), no puede limitar los alcances de una
disposición de superior rango (lo dispuesto en un tratado). Se sostiene así, que actualmente el
principio no admite excepciones legales.
En verdad, el problema es más general y su incidencia se percibe no sólo respecto a las leyes
FI
transitorias o excepcionales sino también a las leyes penales en blanco e inclusive, en los
elementos normativos del tipo,cuando se produce un cambio en la ley extrapenal-al cual remite
la ley penal en blanco o que delimita el concepto del elemento normativo del tipo- que influye
La cuestión centralpasapor una toma de posición respecto a si disposiciones que limitan los
alcances de la prohibición, justificación, o punibilidad son susceptibles de restricción mediante
una interpretación teleológica o, por el contrario debe estarse a su literalidad.
Una conclusión posible, en consonancia con la literalidad de la ley sería el no admitir excepciones
al principio de aplicación de la ley más benigna, por lo que las leyes temporarias o transitorias
OM
sólo serían aplicables durante su vigencia careciendo siempre del efecto ultraactivo que le asigna
cierta doctrina. Por otra parte, de seguirse el mencionado criterio se debería admitir que debería
aplicarse retroactivamente cualquier modificación en las leyes extrapenales o en ámbitos a los
que la ley penal en blanco o el elemento normativo remite para la delimitación dela conducta
prohibida, si incide favorablemente por descriminalización de la accióno menor severidad al ser
ley más benigna
.C
No obstante,es necesario hacer algunas distinciones, ya que la solución no siempre será la
DD
misma. El análisis de ciertas situaciones nos demostrará que el criterio de no admitir excepciones
al principio en cuestión puede llevar a soluciones muy discutibles.
Ejemplo:Un
Ejemplo sujeto falsifica australes en el momento en que los mismos constituían moneda de
LA
curso legal en el país. Se le inicia un proceso por falsificación de monedas (art. 282 del C. P.).
Durante el proceso y antes de dictarse sentencia cambia la ley que establece la moneda de curso
legal en el país reemplazando el austral por el peso.
De admitirse la posición que sostiene que debería aplicarse retroactivamente cualquier cambio en
FI
C.P., pues ahora el signo monetario es el peso, mientras que lo aquél falsificó fueron australes.
Esta solución no puede ser considerada satisfactoria. La modificación con el transcurso del
tiempo de ciertos aspectos, que no hacen al núcleo de la conducta prohibida no puede llevar a
eximir de responsabilidad, si el hecho se sigue considerando legalmente como una acción
delictiva: La conducta de falsificar monedas de curso legal, sigue siendo delictiva. No hubo una
descriminalización de esta acción.
En efecto, la prohibición de aplicar retroactivamente una ley penal incriminante o más gravosa,
encuentra su justificación, como ya sabemos, en el debido respeto al principio de culpabilidad al
ser condición para poder efectuar el reproche, que toda persona haya tenido al momento de
realizar la acción laposibilidad de conocer el carácter delictivo del hecho y la pena que le
corresponderá. Por otra parte, la necesidad de que la ley sea cronológicamente anterior al hecho
es la única forma de garantizar adecuadamente la objetividad en el juzgamiento (fundamentos
OM
del principio de legalidad).
.C
ninguna de las referidas garantías (culpabilidad y objetividad en el juzgamiento) por más que con
posterioridad entre en vigencia una ley que le resulte más favorable. Y ello en razón de que el
autor ha tenido la posibilidad de conocer con antelación a la comisión del delito, el carácter
DD
penalmente relevante del hecho y la pena que le corresponderá por su comisión. Todo ello
demuestra que la exigencia de aplicación de la ley más benigna se basa en un fundamento
diferente al del principio de legalidad, siendo necesario explicitarlo pues la adecuada
delimitación de los alcances del principio se deberá hacerlo teniendo en consideración el telos de
LA
esta disposición.
Cuando una modificación legal responde a un cambio de criterios valorativos, de manera tal que
lo que antes se consideraba como socialmente intolerable ya no lo es, o al menos ya no en igual
FI
magnitud, la sanción penal por tales hechos sin considerar estos cambios resulta inconveniente
por varias razones. Al respecto expresa Silva Sánchez que: “...la aplicación retroactiva de normas
que eliminan la punibilidad de un hecho o de normas que, al menos, la disminuyen no pueden
En el primer caso, a la apreciación, obvia, de que, para el ordenamiento de que se trate, la pena
impuesta anteriormente no cumple ya efecto alguno de prevención general ni de prevención
especial. Tal extremo se prueba porla exclusión del ámbito de lo punible del hecho cuya nueva
comisión en el futuroaquélla pretendía evitar. La previamente impuesta es, por tanto, una pena
que se revela innecesaria y, por ello, inadmisible.
En el segundo caso, la nueva norma, al proceder a una reducción de la sanción penal prueba que
la concreta intensidad de la pena impuesta bajo el régimen anterior no es precisa para mantener
Sin desconocer que existen importantes voces que propugnan la aplicación retroactiva de las
normas extrapenales que modificanfavorablemente la situación del acusado, el criterio rector que
adopta Henaínes el siguiente: si los cambios que se han producido en la ley extrapenal
responden a modificaciones valorativas jurídicas, ellas deberán aplicarse retroactivamente si
favorecen al partícipe deun hecho. Por el contrario si las modificaciones son sólo de
OM
circunstancias fácticas pero sin que sehaya alterado la concepción axiológica sobre el hecho en
sí, no corresponderá su aplicación a supuestos ocurridos con anterioridad.
Este criterio no es antojadizo sino que tieneque ver con la razón de ser del instituto y con la
función que se asignaa la pena. Silva Sánchez lo explica muy claramente: “...Resulta innegable
.C
que esta postura tiene argumentos en su favor, si se atiende exclusivamente a la ‘función’ de la
institución dela retroactividad de la ley más favorable.
DD
En efecto, si la morigeración introducida por la nueva normativa tiene como causa, no un cambio
de la valoración jurídica, sino una mera variación en las circunstancias, el rechazo de la
aplicación retroactiva de tal normativa más favorable al reo podría fundamentarse en que sigue
habiendo ‘necesidad (preventivo-general y preventivo-especial) de pena (o de esa medida de
LA
Para concluir, como ejemplo hay dos casos resueltos por la Corte Suprema de Justicia de la
Nación: Ellos son el caso “Santoro” y el caso “Frigorífico Yaguané”.
FI
En el caso “Santoro”
“Santoro”,
ntoro” la situación que debió resolver la Suprema Corte, tenía vinculación con lo
dispuesto por una ley penal en blanco. Se trataba de una venta de productos efectuada por un
comerciante a valores superiores a los precios máximos fijados por el Poder Ejecutivo Nacional
en uso de las facultades conferidas por la ley 12.830 (ley penal en blanco). Lo que estaba en
discusión era si la posterior abolición por parte del propio Poder Ejecutivo de aquel precio
máximo, ¿debía llevar a la impunidad del comerciante por aplicación del art. 2 del Código Penal?
El juez en lo penal entendió que sí. Por su parte, llegada la causa por vía del Recurso Federal
Extraordinario a conocimiento de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, nuestro máximo
tribunal revocó la decisión del inferior. Al no haberse producido una modificación del contenido
de injusto del hecho sino sólo cambios fácticos circunstanciales en aspectos no nucleares que
dejaban inalterado en su esencia el tipo penal -la conducta de vender por encima de los precios
máximos continuaba siendo una infracción punible- y sólo haber variado el quantum en razón
OM
pues,conforme con la nueva disposición (autorización de faenamiento desde las 15 horas),
laconducta realizada había sido desincriminada (ya no era ilícito faenar a las 18 horas).
Parecería que un simple cambio de circunstancias fácticas no podrían hacer aplicable el principio
de la ley más benigna, sin embargo, es importante tener presente ciertos aspectos cuya
.C
consideración podrían llevar a una solución diferente. Destaca al respecto en su dictamen el Dr.
Enrique Petracchi, por entonces Procurado General, que la mutación de la norma extrapenal
complementariano se debe a un cambio previsible en la situación regulada sino, como surge de
DD
los fundamentos de la resolución de la Junta Nacional de Carnes, “...a que el órgano competente
para su dictado advierte que la disposición anterior no sirve adecuadamente al interés que
determinó su sanción y por el contrario produce ‘situaciones de privilegio’ en el proceso de
comercialización que se busca regular con justicia...”. Estas razones llevaron al Procurador
LA
En verdad, esa era la solución que mi entender correspondía, pues al considerar el propio
organismo competente lo nocivo de las disposiciones anteriores por producir situaciones de
FI
privilegio, se había operado un cambio en la valoración jurídica de esas acciones que justificaban
la aplicación retroactiva de la ley más benigna. No obstante, el criterio de la C.S.J.N. fue otro.
Es de destacar que al momento de juzgarse los casos citados, la exigencia de aplicación de la ley
penal más benigna sólo estaba consagrada en la ley común (art. 2 del C. P.) por lo que podía ser
derogada por otra ley posterior, situación, como vemos, distinta a la actual.
Inmunidad.
Inmunidad Es la condición extraordinaria de procedibilidad: el desafuero, el juicio de
responsabilidad política, por ejemplo.
Indemnidad.
Indemnidad Los actos de una persona, o ciertos actos de una persona, quedan fuera de la
OM
responsabilidad penal.
Dada la disposición del Art. 16 constitucional, en la Argentina nadie puede ser excluido de la ley
penal en consideración a su persona, como sucede en las monarquías respecto de la persona del
monarca.
.C
No obstante, hay dos excepciones de carácter funcional que vienen impuestas por el derecho
constitucional y por el derecho internacional y son, como se ha visto, la indemnidad de que
DD
gozan las opiniones parlamentarias y la inmunidad de jurisdicción que en el derecho penal
argentino tienen los ministros, embajadores y jefes de Estados extranjeros.
Inmunidad diplomática
En la actualidad, la inmunidad diplomática se encuentra regulada por la Convención de Viena
LA
sobre relaciones diplomáticas. Esta Convención reconoce que las “inmunidades y privilegios se
conceden no en beneficio de las personas, sino con el fin de garantizar el desempeño eficaz de
las funciones de las misiones diplomáticas en calidad de representantes de los Estados”. Otras
FI
“La persona del agente diplomático es inviolable. No puede ser objeto de ninguna forma de
retención o arresto. El Estado receptor lo tratará con el debido respeto y adoptará todas las
“El agente diplomático gozará de inmunidad de la jurisdicción penal del Estado receptor”.
La inmunidad se extiende también a la familia del diplomático y a los miembros del personal
administrativo y técnico de la representación y su familia y aún al personal de servicio de la
representación.
Casos.
Casos.
OM
La Corte Suprema ha entendido que esta indemnidad no rige respecto al Art. 29 de la
Constitución (Traición a la Patria).
Por su parte, el Art. 69 contiene un privilegio procesal, una inmunidad que excluye el arresto de
diputados y senadores mientras dure su mandato, excepción hecha en el caso de delito
.C
sorprendido in fraganti.
A su vez, el Art. 70 prevé que los diputados y senadores contra los que se promueva querella no
DD
podrán ser procesados si previamente la respectiva Cámara no los suspende en sus funciones
por dos tercios de los votos.
El presidente argentino
No goza de impunidad penal alguna. Solo que su sometimiento a los tribunales está
LA
condicionado por un juicio político ante el Senado. Es claro que estas disposiciones de naturaleza
procesal solo se refieren al presidente constitucional, es decir, al designado en la forma prevista
en la Constitución.
FI
En la Argentina los textos no son totalmente claros. El Tratado de Montevideo se remite a los
principios del derecho internacional y el Código de Procedimientos de lo Criminal Federal
atribuye jurisdicción originaria a la Suprema Corte para que entienda en causas seguidas a
embajadores, ministros o agentes diplomáticos extranjeros, a las personas que compongan la
legación y a los individuos de su familia o servidumbre, pero remite en lo que respecta a la
actuación de la Corte también al derecho internacional. La Corte ha entendido que no es
competente para juzgar salvo que el Estado representado o el diplomático renuncien a sus
prerrogativas.
Tratándose de actos en el ejercicio de sus funciones, los cónsules no están sometidos nunca a la
jurisdicción del país receptor, salvo que renuncien a sus privilegios de manera expresa
(comunicada por escrito al Estado receptor).
Tropas extranjeras:
extranjeras Gozan de privilegio cuando pasan con consentimiento del Estado, mientras
OM
que cuando están ocupando territorio enemigo se aplican las leyes de guerra.
.C
de investigar a las personas prevenidas por la comisión o por haber ordenado cometer una u otra
de las infracciones graves y deberá remitirlas a sus propios tribunales, cualquiera sea su
DD
nacionalidad”.
LA
FI
OM
encargo un proyecto a un jurista francés. El control social punitivo durante muchos años se
ejerció en función de leyes especiales contra cuatreros, vagos y mal entretenidos, a los que se
incorporaba forzosamente al ejército.
.C
del Paraguay y la guerra civil en la región centro norte y Cuyo. Como resultado de esta última
guerra, en 1863 se sanciono la ley 49. Consistía en un listado de tipos de delitos federales sin
parte general, que junto con la ley 29 de 1862 y las leyes 48 y 50 (procesal), establecía la justicia
DD
federal.
código penal a Carlos Tejedor (1817-1903). El proyecto de Tejedor fue publicado en 1868 y el
Congreso lo sometió a la revisión de una comisión finalmente integrada por Sixto Villegas,
Andrés Ugarriza y Juan Agustín García que con trece años de demora, se expidió en 1881
elevando un proyecto completamente diferente al de Tejedor.
FI
Ante las dificultades que presentaba una ley penal prácticamente inexistente, el proyecto Tejedor
fue sancionado por varias provincias y en 1881 el Congreso lo sanciono como ley local de la
Capital. Córdoba, por su parte, sanciono el proyecto de Villegas, García y Ugarriza.
OM
El proyecto de 1891
En 1885 se había sancionado en Francia la segunda ley de deportación cuyo objetivo no eran los
delincuentes condenados por delitos graves sino los indisciplinados. Esta ley fue copiada por el
proyecto de 1891, que mantenía también la pena de muerte. Este proyecto fue elaborado por
Rodolfo Rivarola, Nicolás Matienzo y Norberto Piñero. El proyecto de 1891 fue el primero que
.C
proponía unificar la legislación penal. Tuvo la virtud de combinar la racionalidad y el sentido
liberal del código Tejedor con otros textos adelantados de la época.
DD
Proyecto Segovia; Ley Bermejo; Reforma de 1903; Ley de 1910
Lisandro Segovia público en 1895 un proyecto privado, sin alejarse sustancialmente del proyecto
de 1891. La más importante innovación era la incorporación de la condenación condicional. En
1895 se sanciono la llamada ley Bermejo, que fue la primera ley argentina de deportación que
LA
establecía que los reincidentes por segunda vez cumplieran su condena en el sur, pero no tuvo
resultado práctico, porque las condenas eran cortas. A instancias de la jefatura de policía de la
Capital, en 1903 se reformo el código de 1886 mediante la ley 4189 que introdujo la deportación
en la forma proyectada en 1891.
FI
La reforma de 1903 se enmarca en un general proyecto represivo del que formaron parte la
llamada ley de residencia y la ley de juegos de azar, ambas de 1902. La primera autorizaba al
El Proyecto de 1906
En 1904 el poder ejecutivo designo una comisión integrada por seis miembros: tres profesores
de Derecho Penal (Rivarola, Piñero, Gacitúa), un juez (Saavedra) y un abogado ex jefe de policía
(Beazley). El proyecto que elevo la comisión en 1906 fue remitido al Congreso, pero no fue
OM
septiembre de 1921, el Congreso Nacional sanciono la ley 11.179, que estableció el código penal
vigente: el 29 de octubre del mismo año, el Presidente Hipólito Irigoyen lo promulgo y casi dos
años después, la ley 11.221 declaro autentica la edición oficial, con las correcciones de fe de
erratas que el introdujo. El código penal entro en vigencia seis meses después de su
promulgación, es decir, el 29 de abril de 1922.
.C
Se puede afirmar que el código de Tejedor marco una línea orientadora, dentro de la que se
movió la codificación posterior, excepción hecha del proyecto de Villegas, García y Ugarriza. Los
DD
principales momentos de esta evolución lo marcan los proyectos de 1891 y de 1906. El autor a
quien cupo la mayor labor en los mismos fue Rodolfo Rivarola.
Como evaluación general del código vigente puede afirmarse que, además de abolir la pena de
LA
La reforma que culminó en el vigente código penal de 1921 no fue coronada por la sanción de la
legislación complementaria: no se sancionó un código procesal penal acorde al nuevo texto ni
tampoco la consiguiente ley de ejecución.
En 1932 el poder ejecutivo remitió al senado un proyecto que reiteraba los de estado peligroso
posdelictual de 1928 y reformaba represivamente varias disposiciones del código penal, fue
En 1936 el poder ejecutivo encomendó a Eusebio Gómez y a Jorge Eduardo Coll la redacción de
un proyecto integral de código penal, que éstos elevaron en 1937, con clara tendencia
peligrosista y que no fue considerado.
En 1941 José Peco presentó a la Cámara un proyecto que había elaborado sin comisión alguna y
que definía como neopositivista, acompañado de una extensa y documentada exposición.
En 1951 Isidoro de Benedetti elaboró un proyecto de marcado corte positivista, aunque mitigaba
OM
notoriamente la ortodoxia del proyecto de 1937. Tal orientación expresaba con claridad a la
personalidad del autor tanto para medir la significación del hecho delictuoso como a los fines de
individualizar la pena.
El proyecto de 1953 fue encomendado el año anterior a una comisión de tres miembros, aunque
.C
culminó su elaboración Ricardo Levene, dado que los otros integrantes se alejaron de la tarea por
diferentes motivos. En esos años tuvieron lugar importantes reformas penitenciarias, como el
cierre del penal de Ushuaia, la supresión de los grillos y trajes cebrados, y la creación de la
DD
Dirección Nacional de Institutos Penales, cuyo titular fue Roberto Pettinato.
codificación.
codificación
El siglo XVII es importante para la historia del derecho penal porque se produce su
secularización. Adquiere el carácter de derecho de policía, rigurosamente ordenancista. El
Las características del sistema penal de esa época, desencadenaron en los pensamientos de
estos, basados en el derecho natural y la razón, que combatieron la arbitrariedad y el
despotismo. Para darnos una idea general, estos autores vivieron en la época del absolutismo y
los caracteres del derecho penal eran los siguientes:
A partir de los enciclopedistas se busca introducir una visión más humanitaria de la pena.
OM
Colaboradores de ellos fueron Rosseau, Voltaire y Montesquieu, entre otros.
Montesquieu (1689-
(1689-1755)
Se había ocupado de cuestiones penales en sus Cartas Persas, al criticar las penas a los suicidas y
al sostener la necesidad de atenuar las penas y llegar a una justa proporción entre ellas y el
.C
delito. Pero fue en el “Espíritu de las leyes” donde se ponen de manifiesto sus ideas esenciales al
respecto.
DD
La pena no es hija del capricho del legislador, sino de la naturaleza del delito. Se opone a la idea
de los delitos de hechicería y herejía, porque las leyes no deben penar más que los hechos.
Manifiesta asimismo su oposición a las penas contrarias a la dignidad humana. En los Estados
republicanos es de rigor ajustarse a la letra de la ley. No se puede acudir a interpretaciones
LA
Rosseau (1712-
(1712-1778)
Señaló con toda claridad la naturaleza sancionatoria del derecho penal. En el Contrato Social
expone con toda claridad su posición acerca de la pena. Aunque en el pacto pueda justificarse la
FI
pena de muerte, considera que la frecuencia de los suplicios es signo de debilidad moral. No hay
derecho a hacer morir ni como ejemplo, sino a aquel que no pueda conservarse sin peligro.
Los soportes ideológicos del derecho penal codificado desde principios del siglo 19 constituyen
una redefinición de las relaciones entre los individuos y el Estado. Se puede afirmar que la base
del sistema legal está dada por:
Los autores de la época tenían una preocupación común por la superación de la arbitrariedad
reinante en la práctica penal y por la crueldad de las penas que se aplicaban (aunque muchas
penas crueles ya habían caído en desuso).
OM
de las lesiones o del valor en dinero de las cosas hurtadas o robadas en la legislación española) y
la máxima reducción del arbitrio judicial en las penas (caso extremo: el Código Francés de 1791
contenía penas fijas).
La idea de humanización no pudo impedir de todos modos, que se mantenga la pena de muerte
.C
que el Código Penal francés de 1810 previa frecuentemente. Pero, por lo demás, la pena privativa
de la libertad, configurada como reclusión o prisión, fue el núcleo central del sistema penal de
DD
aquellos tiempos. Los efectos infamantes de la reclusión y el grado extremo de aislamiento que
solía implicar dejan también mucho que desear respecto de la humanización del derecho penal,
aunque consistía en un progreso en relación al derecho penal anterior.
Sobre la base de la tradición iluminista se asienta a mediados del siglo 19 la influencia del
idealismo alemán. El punto de vista central de esta corriente es la teoría retributiva de la pena
que, apoyada en la idea del talión, procura establecer la medida justa de la pena y con ello el
FI
límite de la legitimidad de la misma (Kant). La pena debía despojarse, por lo tanto, de toda
finalidad preventiva o correccional.
Moralidad y penalidad limitada por la idea del talión constituyen los elementos fundamentales de
Sin embargo, no todos los idealistas alemanes profesaron una concepción retributiva o absoluta
de la pena. J.G. Fichte, por ejemplo, tendía a la prevención general. Esta línea de pensamiento se
percibe más tarde en otros autores. Krause, por ejemplo, concibió la pena como un medio
educativo y, por lo tanto, sostuvo que no había derecho de aplicar un mal sólo para producir un
dolor; el valor del individuo era el punto de partida de esta concepción.
La base ética del derecho penal y el significado correspondiente de la libertad de voluntad fueron
tan subrayados por el Idealismo alemán que la idea de culpabilidad adquirió un papel relevante
OM
La influencia del positivismo: utilidad social y penalidad
Desde mediados del siglo 19 las concepciones del idealismo alemán fueron cuestionadas por una
de las más influyentes corrientes del pensamiento moderno: el positivismo.
.C
Los positivistas pusieron en duda ante todo el punto de partida del Idealismo: la libertad de
voluntad. Consecuencia de este cuestionamiento es la nueva fundamentación de la pena sobre
bases deterministas y la propuesta de la reforma del derecho penal vigente, por parte de la
DD
Asociación Internacional de Criminalistas. Este programa de reforma reforzaba el significado del
derecho penal vigente como “Carta Magna del Delincuente”, es decir, subrayaban la importancia
del principio de legalidad.
LA
Las transformaciones que se impulsaban intentaron dar a la pena una función “finalista”, es decir,
“utilitaria”, por oposición a la concepción dominante de los clásicos. Con ello quería señalarse
que la pena debía proporcionarse no únicamente a la gravedad del delito (del hecho) sino a la
peligrosidad del autor.
FI
De esta manera podían fundamentarse por lo menos tres instituciones que eran desconocidas en
el siglo 19:
OM
prevención). Los habituales y reincidentes deberían tratarse mediante medidas de seguridad
consistentes en un verdadero tratamiento.
La idea de los institutos de terapia social concretó la concepción de una idea preventivo-especial
en la que la base de la ejecución penal debe ser el tratamiento. El acento de la reforma penal se
.C
puso en el fin resocializador de la pena.
Las reformas legislativas de los años 60 y comienzos de los 70 se han caracterizado por una
DD
considerable liberalización que se manifestó en el ámbito de los delitos sexuales (por ejemplo, la
despenalización de la homosexualidad en Alemania) y en las diversas tendencias a elastizar la
legislación penal sobre el aborto.
Asimismo, se ha puesto de manifiesto una fuerte tendencia racionalizadora del fenómeno penal
LA
que en primer lugar reserva el derecho penal a los casos en que el conflicto social no tienen
posibilidades de ser resuelto por otros medios de la política social (el derecho penal como ultima
ratio de la política social). Dentro de este marco, se inserta también la despenalización de hechos
FI
de poca trascendencia social (como los hurtos en supermercados) para reemplazar la represión
penal por formas más eficaces, menos costosas y de menos consecuencias desocializadoras que
las del derecho penal.
En materia de penas, cabe señalar en esta época la unificación de las penas privativas de la
libertad en una única especie despojada de los elementos desocializadores de la pena de
reclusión (sobre todo inhabilitación subsiguiente a la ejecución de la privación de la libertad). Al
mismo tiempo se observa una tendencia a incrementar los sustitutivos de la pena privativa de
OM
.C
DD
LA
FI
OM
Para eso, debe operar selectivamente, filtrando solo las aguas menos sucias y reduciendo su
turbulencia, valiéndose de un complejo sistema de contrapuertas, que impidan la perforación de
cualquiera de ellas y que, para el caso de producirse, disponga de otras que las reaseguren.
Como el poder punitivo ejerce su violencia selectivamente, la contención reductora que debe
.C
oponerle el derecho penal también debe ser selectiva.
La selectividad del derecho penal sebe ser de signo opuesto a la del poder punitivo, pues desde
DD
la perspectiva de éste debe configurar una contraselectividad.
Al final del camino (proceso) se llega a la criminalización secundaria formal de una persona (en
términos sociológicos), pero en términos jurídico-penales esto presupone dos grandes divisiones
de compuertas selectivas:
LA
1. Un primer orden de éstas sirve para verificar si están dados los presupuestos para requerir
de la agencia judicial una respuesta que habilite el ejercicio del poder punitivo. A este
sistema se lo denomina usualmente teoría del delito.
FI
2. Dados esos presupuestos, un segundo sistema pregunta cómo debe responder la agencia
jurídica a ese requerimiento. A este sistema se lo suele denominar teoría de la penao
teoría de la responsabilidad penal o punitiva de la agencia jurídica (no del criminalizado,
pues quien debe responder es la agencia, que debe hacerlo velando porque el poder
punitivo no sea ejercido sobre el procesado de modo intolerablemente irracional).
Así la teoría nos presenta un orden racional para estudiar yanalizar el delito.
Zaffaroni plantea que para dar respuesta a la pregunta de si algo es delito o nodebemos
hacernos una serie de preguntas. Estas preguntas y el orden en que debenser hechas es lo que
nos da la teoría del delito. Y lo sintetiza diciendo: “la teoría del delito es una construcción
dogmática que nos proporciona el camino lógico paraaveriguar si hay delito en cada caso
concreto.”
OM
Así la pregunta final de la teoría del delito es ¿cuál es la conducta criminal?, enqué consiste
finalmente ese delito y cuáles son los presupuestos jurídicos que debendarse para determinar la
punibilidad de la conducta.
.C
¿Cuál es la conducta prohibida y qué consecuencias conlleva su comisión?
Los tipos penales marcan que comportamientos están prohibidos, se ven por medio de uno
DD
o más verbos nucleares o rectores, que marcan la acción criminal.
Para que esa tarea pueda ser llevada a cargo es necesario un procedimiento por el cual la ley se
relaciona con el caso concreto, esto lo hace la teoría,
teoría que es un instrumento para la
interpretación de la ley penal y une lo más abstracto (ley) con lo más concreto (hecho). A través
FI
de este proceso de descomposición analítico de los conceptos y categorías que forman parte de
la teoría del delito, podremos establecer si un hecho llevado a cabo por una persona cualquiera,
coincide con el hecho previsto como delito en la norma penal.
La teoría:
Ante todo, para que esta perturbación pueda ser objeto de respuesta penal debe ser llevada a
cabo por un sujeto responsable. Las perturbaciones graves al orden social realizadas por autores
no responsables no tienen respuesta de pena, sino de meras medidas de seguridad.
OM
La extensión que debe darse a este elemento del delito depende de cómo se conciba la función
del derecho penal dentro de la sociedad. Esta función puede concebirse de dos maneras:
.C
derecho penal no obraría mientras no se hubiera producido por lo menos un peligro para
un bien jurídico protegido; las infracciones de una norma que no resultaren peligrosas
para un bien jurídico o no alcanzaran a lesionarlo, no serían relevantes como presupuesto
DD
de una pena.
concepción:: las infracciones de una norma, cuyo cumplimiento está amenazado
2. Segunda concepción
con una pena, son ya relevantes y justifican la intervención del derecho penal. La función
del derecho penal es la protección de bienes jurídicos pero reaccionando ya frente a las
LA
La diferencia entre ambas concepciones puede verse en los casos de las llamadas tentativas
inidóneas (cuando el autor quiere la realización de un delito que no podrá consumar porque el
FI
medio que utiliza o el objeto sobre el que dirige su acción harán imposible que se produzca el
resultado perseguido). Ej: “A” quiere matar a “B” poniéndole veneno en la sopa, pero sin querer
pone azúcar.
En estos casos, el bien jurídico protegido no ha sido lesionado y tampoco ha corrido peligro
alguno. Los partidarios de la primer concepción se inclinarían en estos casos por la no
punibilidad, mientras que los seguidores del segundo punto de vista admitirían la punibilidad, es
decir, la existencia de una perturbación grave del orden social.
Bacigalupo considera que el segundo punto de vista debe merecer preferencia, pues todo autor
de una tentativa exterioriza una voluntad criminal que no llega a lesionar un bien jurídico solo
por casualidad, y por ello no hay razón para que el derecho penal decline entrar en la acción a la
espera de que el autor tenga más suerte.
La infracción de las normas, además, puede ocurrir de forma voluntaria (el autor quiere realizar
el hecho que infringe la norma) o no voluntaria (el autor no se comporta con el cuidado exigido
para evitar la lesión de bienes jurídicos). En el primer caso se habla de delitos dolosos y en el
OM
segundo de delitos culposos.
.C
Ej: matar a otro es un comportamiento contrario a la norma que ordena no matar; sin embargo,
si la muerte del otro es necesaria para repeler una agresión antijurídica estará autorizada por la
DD
defensa legítima, también la autorización para realizar una acción prohibida o para omitir una
acción mandada puede provenir del estado de necesidad.
Por lo tanto, una perturbación grave del orden social se dará cuando se realice una acción
contraria a una norma y no autorizada, por un autor responsable.
LA
El tercer elemento ya no se refiere al hecho, sino al autor: este debe ser responsable.
Básicamente, ante el derecho penal es responsable el que pudo no cometer el delito porque sabía
del significado de su comportamiento (o podía saberlo) y tenía además la posibilidad de
FI
De todas formas, hay una serie de situaciones previstas en las leyes penales en las que se
excluye la responsabilidad del autor de una acción contraria a una norma y no autorizada, a
pesar de que éste hubiera podido motivarse de otra manera. En tales casos se tiene en cuenta
que las consecuencias que habrían derivado para el autor del cumplimiento de la norma, habrían
sido perjudiciales para él, y por ello no le es exigible el haberlas soportado. Ej: El náufrago que le
quita a otro más débil un madero que sólo puede salvar a una persona.
Resumiendo, puede afirmarse que la teoría del delito trata de responder tres preguntas, las dos
primeras referidas al hecho, y la tercera relacionada con el autor de la acción:
La respuesta a estas tres preguntas es el desarrollo de la teoría del delito. La primera pregunta se
contesta mediante la teoría del tipo penal y la tipicidad. La segunda, mediante la teoría de la
antijuridicidad. La última, mediante la teoría de la culpabilidad.
¿Qué es el delito?
delito? Concepto jurídico de delito.
delito. (Archivo: PJ de San Juan)
OM
El Código Penal argentino no contiene una definición de delito. No obstante, el concepto se ha
podido extraer, después de una larga evolución, desde las concepciones primitivas, pasando
finalmente por el derecho penal alemán moderno, del que se nutre el nuestro, en un proceso
largo de decantamiento, superación y selección de conceptos.
.C
Podemos decir, dejando de lado el análisis de muchas concepciones que ya quedaron superadas
en la historia y desde una perspectiva moderna, que:
DD
“Delito es toda acción típica, antijurídica y culpable”
culpable”.
Con la palabra "típica", se quiere significar que todos los elementos estructurales del delito
deben ser típicos. Si bien son cuatro los elementos de delito (la acción, tipicidad, antijuridicidad y
culpabilidad), la tipicidad es la que califica o cualifica los otros elementos. Consecuentemente, la
LA
acción debe ser típica, la antijuridicidad debe ser típica y también la culpabilidad debe ser típica.
Ya veremos que significa esto.
Podemos adelantar desde ya, que el delito siempre es acción y con ello arribamos a diversas
FI
conclusiones:
Nacional).
3) No se pena a nadie por lo que es, sino por lo que ha hecho.
Ej: el que mata a una persona, concreta una acción típica, por encuadrar la misma en la previsión
del art. 79 del C. Penal, "el que matare a otro", presumiéndose ilícita o antijurídica esa acción. No
obstante, puede ser lícita esa acción de matar si el que causa ese resultado, está amparado en
una situación de legítima defensa, como causal de justificación prevista por la ley (art. 34 inc. 6 °
C. Penal). En tal caso, este autor del ejemplo no habrá cometido ningún delito, porque su
OM
accionar si bien fue típico en lo material, en la acción de matar, no fue un accionar antijurídico o
contrario a derecho, sino lícito porque la ley lo autorizó a actuar de esa manera en esa particular
circunstancia. Tengamos siempre presente, como ya lo dijimos, que el delito es siempre una
acción antijurídica.
.C
También la culpabilidad debe ser típica; "típica… y culpable" dice la definición, en el sentido de
que cada delito requiere de su autor un ánimo determinado, una actitud espiritual determinada.
Esto está referido a la subjetividad del autor del delito al momento de cometerlo. Si damos por
DD
cierto que la culpabilidad es, según una escuela, la relación psicológica que liga al autor con el
hecho que consuma, o lo que es lo mismo conceptualmente, como sostiene otra, la aptitud
anímica, jurídicamente reprochable del autor respecto del mismo hecho, nos estamos refiriendo,
sin duda, al elemento interno del ser humano, a su estado espiritual con relación al hecho
LA
antijurídico que cometió. Cada delito, decimos, tiene su culpabilidad típica, en el sentido de que
requiere de su autor un estado de ánimo especial y particular en el caso concreto. Esos estados
anímicos a los que estamos haciendo referencia, son el dolo, la culpa y la preterintención, como
formas de la culpabilidad. Si estamos tratando el delito de Daño, previsto en al art. 183 del C.
FI
Penal, vemos que en su materialidad, se comete el mismo destruyendo o inutilizando una cosa,
pero una cosa es que la deteriore sin querer, por descuido, y otra muy distinta, que lo haga
deliberadamente, es decir, queriendo dañarla. Tanto el descuido como la actitud deliberada,
están referidos a estados espirituales del sujeto -culpa y dolo-. La ley requiere para que se
consume el delito de Daño, la acción deliberada del autor en querer dañar -dolo directo-. En
consecuencia, si el daño o deterioro se comete sin querer o por descuido, no hay delito de daño.
Es más, cada delito doloso, requiere su dolo. Hay varios tipos de dolo -directo, indirecto cierto y
eventual- que estudiaremos luego. El Daño requiere sólo de dolo directo, en cambio el Homicidio
Simple (Art. 79 C. Penal), se conforma con cualquier tipo de dolo. Entonces la culpabilidad es
típica cuando se corresponde con el particular delito.
OM
seguridad de los ciudadanos, resultante de un acto externo del hombre, positivo o negativo,
moralmente imputable y políticamente dañoso”. Un breve análisis:
la infracción de la ley del Estado... No es una conducta, sino el choque entre una conducta
y la ley; dicha ley es “del Estado”, y así no hay confusión posible entre delito, vicio y
.C
pecado: es pecado “la violación de la ley eterna”, y vicio “el abandono de la ley moral”.
... promulgada... Se reconoce el principio de legalidad: no hay crimen sin ley previa.
... para proteger la seguridad de los ciudadanos... Carrara sostiene un distingo cualitativo
DD
entre delito y contravención: el delito protegería la seguridad de los ciudadanos, mientras
la contravención estaría promoviendo la prosperidad del Estado.
... resultante de un acto externo del hombre... El hombre es único sujeto activo del delito;
además, “la tutela del orden interno no corresponde más que a Dios”.
LA
... moralmente imputable... Hay responsabilidad moral porque hay libre albedrío.
... políticamente dañoso. Debe lesionar un bien jurídico: lesividad (art. 19, C.N.).
Define el delito como una conducta humana que se opone a lo que la ley manda o prohíbe bajo la
amenaza de una pena. Es la ley la que establece que hechos son delitos, fija caracteres
delictuales a un hecho, si en algún momento esta ley es abrogada el delito desaparece. El delito
es artificial.
El concepto substancial o material del delito establece elementos del delito como presupuestos
para que un hecho humano se considerado como delito. El delito es un acto humano típicamente
antijurídico culpable y sancionado con una pena de carácter criminal. Sigue el método analítico.
De este concepto se obtienen los elementos constitutivos del delito.
OM
Zaffaroni en su manual de derecho penal, ocupa varias páginas explicando elconcepto de la
estratificación, de la atomización de la teoría y la necesidad oconveniencia de éste. El mejor
método para definir algo a quien no lo conoce esprimero dando un acercamiento a su carácter
genérico y luego los caracteresespecíficos, ya que si se definiera por el sistema unitario, se
.C
estaría en lo meramenteformal y no se podría comprender el concepto y su contenido hasta no
penetrar en él.
DD
Para los partidarios del sistema unitario el concepto de delito es una infracción punible. Claro
que es así, pero aún no se entiende qué hechos, qué actos, qué caracteres tiene una infracción
punible. Plantea Zaffaroni que estos conceptosunitarios se agotan en lo formal y que finalmente
no son ningún concepto, sonescasas sus consecuencias prácticas. De allí el poco uso de este
LA
sistema por partede los penalistas. Generalmente las usan los jusfilosofos (los keynesianos).
Los otros que abrazaban este sistema, aunque por razones políticas, fueron un sector
delpenalismo nacional socialista alemán, la Escuela de Kiel. En esto está muy claro elmal uso que
FI
se puede dar de este tipo de sistema que no deja abierta, clara laexplicación de la teoría; que
permita insertar en ella los principios del derecho penal.Cuando menos esto visto así para un
Estado de Derecho.
Conducta (acción):
(acción):
Sabemos que los delitos no pueden ser otra cosa que conductas humanas.
Afirmando que el delito es la conducta de un hombre, sabemos que entre una infinita cantidad
de conductas posibles, solo algunas son delitos.
Tipicidad:
Tipicidad:
OM
No habrá delito cuando la conducta de un hombre no se adecue a alguno de los dispositivos
legales.
Técnicamente llamamos tipos a estos elementos de la ley penal que sirven para individualizar la
conducta que se prohíbe con relevancia penal.
.C
Cuando una conducta se adecúa a alguno de los tipos legales, decimos que se trata de una
conducta típica o lo que es lo mismo, que la conducta presenta la característica de tipicidad.
DD
De este modo, hemos obtenido ya dos caracteres del delito: genérico uno (conducta) y específico
otro (tipicidad), es decir que la conducta típica es una especie del género conducta.
Antijuridicidad:
Antijuridicidad:
LA
Sin embargo, si reparamos en el enlistado del Art. 34 CP vemos que hay supuestos en que
operan permisos para realizar acciones típicas. Tales como los casos de estado de necesidad, de
FI
De esto resulta que a veces hay permiso para cometer conductas típicas. Cuando la conducta
típica no está permitida, diremos que, además de típica, será también contraria al orden jurídico
funcionando como unidad armónica, porque de ninguno de sus preceptos surge un permiso para
realizarla. A esta característica de contrariedad al orden jurídico funcionando como conjunto
armónico que se compraba por la ausencia de permisos) la llamaremos antijuridicidad y decimos
que la conduzca es, además de típica, antijurídica.
Culpabilidad
Culpabilidad:
En la doctrina, se llama a la conducta típica y antijurídica
antijur un “injusto penal”
penal , reconociendo que el
injusto penal no es aún delito sino que, para serlo, debe serle reprochable al autor en razón de
que tuvo la posibilidad exigible de actuar de otra manera.
manera. A esta característica de reprochabilidad
del injusto al autor es a lo que denominamos culpabilidad y constituye el tercer carácter
específico del delito.
OM
De esta forma esquemática habremos construido el concepto de delito como conducta típica,
antijurídica y culpable.
.C
DD
Graficación del proceder analítico
Como indica Zaffaroni, esta definición de delito nos indica el orden en que debemos formular las
preguntas
tas para determinar si hubo delito en un caso concreto:
LA
1. Debemos preguntar si hubo conducta, ya que si falta el carácter genérico del delito nos
encontramos ante el supuesto de falta de conducta y, consecuentemente, no corresponde
continuar con el estudio.
2. Luego debemos inquirir si la conducta está individualizada en un tipo penal, pues en caso
FI
c) Conducta.
Conducta.
La conducta humana (acción u omisión) es la base sobre la cual descansa toda la estructura del
delito. Si no hay acción humana, si no hay conducta, no hay delito.
El concepto de acción se refiere tanto a la realización de una acción en sentido estricto (como
comportamiento activo) como a la omisión de un comportamiento determinado.
OM
Una de las principales funciones del concepto de acción es servir de límite o filtro para
seleccionar previamente las acciones que pueden ser relevantes para el Derecho penal. El
concepto de acción ha experimentado una evolución en la que se han entremezclado puntos de
vista filosóficos, político-criminales y dogmáticos.
.C
Causalismo: concepto causal de acción (Von Liszt y Beling)
El concepto natural de acción es creación de von Liszt y Beling, quienes son los fundadores del
DD
"sistema clásico del delito".
Von Liszt define por primera vez el concepto de acción como “la producción, reconducible a una
voluntad humana, de una modificación en el mundo exterior”.
LA
En este concepto, para la modificación causal del mundo exterior debía bastar cualquier efecto
en el mismo, por mínimo que sea. Sin embargo, esta definición tenía un problema: no podía
explicar la omisión.
FI
Von Liszt fórmula más tarde una segunda descripción, diciendo que “acción es conducta
voluntaria hacia el mundo exterior; más exactamente: modificación, es decir, causación o no
evitación de una modificación (de un resultado) del mundo exterior mediante una conducta
voluntaria”.
OM
En efecto, si la conducta siempre tiene una finalidad, al no tomar en consideración la finalidad no
se está tomando en consideración la conducta, sino un proceso causal. Por ende, dentro de este
sistema el núcleo del injusto no será una conducta, sino un proceso causal. Esta afirmación es
sumamente grave, porque contradice la esencia del derecho: lo típico y antijurídico no serán
conductas, sino procesos causales. El derecho no será (para esta concepción) un orden regulador
.C
de conductas, sino de procesos causales, lo que es absurdo: el derecho no regula “hechos” sino
solo hechos humanos voluntarios, es decir, conductas. El derecho no prohíbe ni permite otra
DD
cosa que conductas humanas, pues de lo contrario deja de ser derecho, al menos en el sentido
que lo concebimos dentro del actual horizonte de proyección de nuestra ciencia.
Finalismo:
Finalismo: concepto finalista de la acción (Welzel)
Toda la vida comunitaria del hombre se estructura sobre la actividad final del hombre. Los
LA
miembros de la sociedad pueden actuar conscientes del fin, es decir, proponerse fines, elegir los
medios requeridos para su obtención y ponerlos en movimiento con conciencia del fin. Esta
actividad final se llama “acción”.
FI
Cuando el hombre es corporalmente causal sin que pueda dominar su movimiento corporal a
través de un posible acto de voluntad –sea que obre como simple masa mecánica o que ejecute
movimientos reflejos- tales movimientos corporales quedan excluidos de las normas del derecho
penal. Por eso se exige la voluntariedad de la conducta humana como presupuesto esencial del
juicio jurídico-penal. Voluntariedad es la posibilidad de dominio de la actividad o pasividad
corporal a través de la voluntad.
El objeto de las normas penales es la conducta humana, esto es, “la actividad o pasividad
corporal del hombre sometida a la capacidad de dirección final de la voluntad”. En otras palabras:
un comportamiento voluntario dirigido hacia un fin.
Esta conducta puede ser una acción (el ejercicio efectivo de actividad final), o la omisión de una
acción (el no ejercicio de una actividad final posible).
La naturaleza obra ciegamente, sin prever los resultados ni obrando en torno a una finalidad
determinada: la causalidad es ciega. Los humanos, por otra parte, obran de manera consciente,
anticipándose a los resultados y obrando de acuerdo a la finalidad que quieren conseguir: la
finalidad es vidente.
La acción humana es, entonces, ejercicio de actividad final. El hombre puede sobreponerse a sus
instintos, obrar con voluntad y, gracias a la capacidad que tiene de anticiparse a los resultados y
de saber qué causarán sus acciones, puede orientar su conducta de acuerdo al fin que quiere
OM
conseguir.
.C
anticipación (el proponerse) del fin, que el autor quiere realizar. De ello sigue la selección
de los medios de la acción para la consecución del fin. El autor determina los factores
causales que son requeridos para el logro del mismo.
DD
b) De acuerdo con la anticipación mental del fin y la elección de los medios, el actor efectúa
su acción en el mundo real. Pone en movimiento, conforme a su plan, los medios de
acción escogidos con anterioridad, cuyo resultado es el fin. La segunda etapa de la
dirección final se lleva a cabo en el mundo real.
LA
Entonces, según Welzel no vale la distinción entre lo objetivo para lo ilícito y lo subjetivo para la
culpabilidad, en el momento de realizarse la acción YA HAY un fin en ella y por lo tanto en el
ilícito también se analizan principios subjetivos, ya que hay una parte subjetiva en el FIN de la
FI
acción.
El dolo y la culpa aparecen como complementos del tipo, pasan a reforzar el costado subjetivo
del tipo, abandonando la culpabilidad, que ahora se entiende como reprochabilidad.
Solo pueden ser acciones con relevancia penal las que perturban el orden social.
El concepto social de acción, aparte de introducir en la conducta problemas que son propios de
la tipicidad, nada agrega al concepto finalista.
Para que una acción tenga relevancia social requiere, necesariamente, ser entendida
finalísticamente. Si lo social se caracteriza por el interaccionar psíquico, creemos que es claro
que cuando dos individuos que se conocen, pasan uno al lado del otro sin dirigirse la palabra, no
sabemos si hubo o no interaccionar psíquico.
OM
De cualquier manera, repetimos que el requisito de la relevancia social, como la necesidad de
que la conducta trascienda de la esfera meramente individual del autor a la de otro, es u
requisito de la tipicidad penal de la conducta, que es tal aunque no trascienda a nadie. Las
acciones privadas de los hombres del Art. 19 CN, son acciones.
.C
No hay delito sin conducta.
conducta.
El derecho pretende regular las conductas humanas, no pudiendo ser el delito otra cosa que una
conducta.
DD
El principio nullum crimen sine conducta es una elemental garantía jurídica. De rechazarse el
mismo, el delito podría ser cualquier cosa, abarcando la posibilidad de penalizar el pensamiento,
la forma de ser, las características personales, etc.
LA
Quien quiera defender la vigencia de un derecho penal que reconozca a la dignidad humana, no
puede menos que reafirmar que la base del delito es la conducta, reconocida en su estructura
óntico-ontológica.
FI
A toda acción corresponde un resultado y ambos están unidos por un nexo de causalidad. Nexo
de causalidad y resultado, si bien no forman parte de la conducta, la acompañan como una
sombra.
De toda forma, quedando claro que el resultado y el nexo causal no forman parte de la acción
pero la acompañan en forma irrescindible, y que los tres conceptos se pueden abarcar en el de
“pragma”, lo cierto es que la causalidad y el resultado en forma pre-típica no son un problema
del derecho penal.
Así, en el caso del homicidio, lo que interesa investigar a nuestra ciencia es que el tipo (Art. 79),
para considerar prohibida una conducta como típica de homicidio, requiere que como termino de
OM
una relación causal iniciada por la exteriorización de la conducta homicida del autor, se haya
producido el resultado de muerte de la víctima. La causalidad y el resultado en un ser (como
integrantes del pragma) no son un problema jurídico sino físico.
.C
Una de las principales clasificaciones estructurales de los tipos penales distingue entre tipos
dolosos y culposos. Los tipos dolosos prohíben conductas atendiendo a la prohibición de
DD
procurar por el fin de la conducta, es decir que lo prohibido es la puesta en marcha de la
causalidad en dirección al fin típico (muerte de un hombre, daño en la propiedad ajena, etc.).
Ninguna duda cabe de que aquí los tipos captan este concepto de conducta, que no ofrece en
ellos inconveniente alguno.
LA
Los tipos culposos son los que prohíben conducta atendiendo a la forma de seleccionar los
medios para obtener el fin, y no en razón del fin mismo. Queda claro que también aquí el tipo
prohíbe una conducta final, solo que en lugar de prohibirla por el fin, lo hace por la forma
defectuosa en que ese fin se procura.
FI
activos son aquellos que describen la conducta prohibida, en tanto que los tipos omisivos son los
que describen la conducta debida, quedando, por ende, prohibida toda conducta que no coincida
con la conducta debida.
Tan final es la conducta que prohíbe el tipo activo como la que prohíbe el tipo omisivo. La
circunstancia de que uno selecciones lo prohibido describiéndolo y el otro lo haga por
comparación con la descripción de lo debido, no altera para nada la estructura óntico-ontológica
de las conductas que prohíben.
OM
omisión impropia.
Elementos de la acción
1. ELEMENTO SUBJETIVO DE LA ACCION: LA VOLUNTAD
.C
entendida como nexo psicológico primario entre el sujeto y su aptitud corporal.
El resultado produce un cambio exterior que no forma parte del movimiento corporal con ser
FI
contenido de voluntad. El resultado está ligado mediante un nexo causal con la voluntad.
Caracteres de la acción
• Humanidad:
Humanidad debe ser llevada a cabo única y exclusivamente por un hombre, dado que solo
éste es sujeto de derecho.
• Externa:
Externa la acción debe exteriorizarse y no pertenecer al campo psíquico del sujeto.
Principio de reserva.
• Episodio concreto y determinado:
determinado el acto debe ser concreto y se debe reprimir por la ley
penal.
1º. El que no haya podido en el momento del hecho, ya sea por insuficiencia de
sus facultades, por alteraciones morbosas de las mismas o por su estado de
inconsciencia, error o ignorancia de hecho no imputables, comprender la
criminalidad del acto o dirigir sus acciones.
OM
En los demás casos en que se absolviere a un procesado por las causales del
presente inciso, el tribunal ordenará la reclusión del mismo en un establecimiento
adecuado hasta que se comprobase la desaparición de las condiciones que le
hicieren peligroso;
2º. El que obrare violentado por fuerza física irresistible o amenazas de sufrir un
.C
mal grave e inminente.”
Reducida, pues, nuestra consideración a los acontecimientos en que toma parte un hombre
(hechos humanos), se ha dicho que no todos ellos son conductas, sino únicamente los hechos
LA
humanos voluntarios.
Los supuestos en que no hay voluntad pese a participar un hombre son los siguientes:
•
FI
Por fuerza física irresistible deben entenderse aquellos supuestos en que opera sobre el hombre
una fuerza de tal entidad que le hace intervenir como una mera masa mecánica.
Hay fuerza física proveniente de la naturaleza cuando un sujeto es arrastrado por el viento, por
una corriente de agua, empujado por un árbol que cae, etc. Proviene de la acción de un tercero
OM
cuando, por ejemplo, alguien es empujado por otro.
Ejemplos prácticos:
prácticos:
1. Se produce un terremoto y las personas que viven en un edificio pugnan por salir, al llegar
.C
a las escaleras, una resbala y cae sobre otra produciéndole la muerte; en este caso el
sujeto que resbaló actuó con fuerza física irresistible - el temblor -, por lo que no hay
acción.
DD
2. Un caso diferente se da si fue una persona la que produjo la fuerza física irresistible, pues
ésta si responde, por ejemplo: si "A" empuja a "B" para que impulse a "C" que se encuentra
en el borde de un barco y, efectivamente "C" cae y muere, "A" responde por la muerte de
"C", mientras "B" sólo fue víctima de una fuerza irresistible - empujón - producido por "A".
LA
Por otra parte, se hace necesario distinguir lo siguiente: la ausencia de conducta se limita a la
causación del resultado, pero colocarse bajo los efectos de una fuerza física irresistible es una
FI
Pueden ser: espontáneos (estornudo) o provocados (como los producidos por un golpe en las
costillas).
Involuntabilidad.
Involuntabilidad.
Concepto y delimitación.
delimitación.
La Involuntabilidad es la incapacidad psíquica de conducta, es decir, el estadio en que se
encuentra el que no es psíquicamente capaz de voluntad.
En el curso de la exposición veremos que (en el aspecto positivo del delito) se requiere una
OM
capacidad psíquica de voluntad para que haya conducta (de la que nos ocuparemos aquí), una
cierta capacidad psíquica para que haya tipicidad y otra para que haya culpabilidad (llamada
imputabilidad). A la suma de las tres la llamamos capacidad psíquica del delito.
Involuntabilidad
Involuntabilidad por incapacidad para dirigir los movimientos.
.C
Entendemos que cuando la insuficiencia de las facultades o la alteración morbosa de las mismas,
da lugar a una incapacidad para dirigir los movimientos, habrá un caso de Involuntabilidad, es
decir de ausencia de conducta (al tiempo que, cuando de lugar a una incapacidad para dirigir sus
DD
acciones en forma adecuada a la comprensión de la antijuridicidad, habrá inculpabilidad).
Ejemplos de estos supuestos de Involuntabilidad son aquellos en que el sujeto tiene conciencia
pero se encuentra incapacitado psíquicamente para actuar. Tal sucede con el que sufre un
LA
accidente del que sale ileso y ve a su compañero desangrarse, sin poder acudir en su auxilio
como resultado de una parálisis histérica.
La Involuntabilidad procurada.
Involuntabilidad procurada.
El sujeto que se procura un estado de incapacidad psíquica de conducta realiza una conducta (la
FI
de procurarse ese estado), que puede ser típica, según las circunstancias. Así, el señalero que
toma un fuerte narcótico para dormirse y no hacer las señales, para provocar de este modo en
desastre, se vale de sí mismo en estado de ausencia de conducta. En estos casos la conducta de
Cuando hay inconsciencia no hay voluntad y, por ende, no hay conducta. La inconsciencia está
OM
expresamente prevista en el inc. 1 del Art. 34 del CP.
Para mantener la fórmula del inc. 1 del Art. 34 CP a la inimputabilidad suele sostenerse que la
inconsciencia de que se habla esa disposición no es una inconsciencia absoluta.
.C
Es sumamente importante distinguir los casos en que media ausencia de conducta, de aquellos
en que tampoco hay delito, debido a que falta alguno de los restantes caracteres. La ausencia de
conducta tiene unos efectos prácticos inmediatos, entre los que cabe mencionar específicamente
DD
los siguientes:
A. El que se vale de un sujeto que no realiza conducta para cometer un delito es, por lo
general, autor directo del delito; el que no realiza conducta nunca es autor.
LA
a) Tipicidad.
Tipicidad.
OM
sentido, el tipo es la descripción de la conducta prohibida por una norma. A esta descripción
deberá ajustarse un hecho concreto para que pueda sostenerse que es típico. En este caso
diremos que el hecho se subsume bajo el tipo penal que estemos considerando.
Este tipo penal de denomina tipo de la adecuación y se diferencia de otros conceptos de tipo por
.C
su amplitud. En efecto, el tipo garantía contiene todos los elementos que, der acuerdo al
principio de legalidad, condicionan la aplicación de una pena y que puedan no caber dentro del
tipo de la adecuación (por ejemplo: el desistimiento en la tentativa; la instancia privada en el
DD
estupro).
La finalidad práctica de la teoría del tipo penal consiste en permitir establecer que la acción
realizada es la acción prohibida por la norma y sancionada con pena por la ley. Para ello la teoría
LA
del tipo procede descomponiendo cada uno de los elementos que integran la descripción.
Junto a la acción, hay delitos en los que adquiere importancia el sujeto de la acción. En efecto, no
todos los delitos pueden ser cometidos por cualquiera que tenga capacidad de acción, como
ocurre, por ejemplo, con el hurto. En éste, cualquiera que se apodere de una cosa mueble ajena
es autor. Hay ciertos delitos que solamente puede cometerlos un número reducido de personas:
aquellas que tengan las características especiales del autor requeridas por el tipo penal. Tal es el
caso de los delitos de los funcionarios públicos (Ej: prevaricato, malversación, etc.). Estos sólo
Los delitos especiales pueden ser propios o impropios. Se los llama propios cuando la
característica especial del autor es el fundamento de la punibilidad (ej: el prevaricato); la acción
solo es delito si la realiza el sujeto específico. Por el contrario, son delitos especiales impropios
cuando la característica especial del autor no es el fundamento de la punibilidad, sino una
circunstancia que agrava o atenúa la pena (Ej: el parricidio. Todos pueden cometer un homicidio,
pero si la acción de matar es realizada por un ascendiente, descendiente o cónyuge de la víctima,
el hecho será más grave).
OM
Es muy discutido el problema de si los elementos que califican al autor en los delitos especiales
propios deben incluirse en el tipo penal o no. Dado que el error sobre este elemento puede
considerarse un error sobre la existencia del deber especial que incumbe al autor, se sostiene
que incluirlos en el tipo sería convertir un error de tipo lo que en verdad es un error sobre la
.C
existencia del deber (es decir, sobre la antijuridicidad). Para eliminar esta consecuencia se
propone distinguir entre el tipo del error y el tipo de la adecuación.
adecuación Este último contendría los
elementos de la autoría, mientras que el primero sólo estaría integrado por los elementos que
DD
son relevantes para el error de tipo. También se propone distinguir entre el aspecto descriptivo
de los elementos de la autoría y el deber que su posesión genera, de tal manera que el error
sobre el primer aspecto se rija con las reglas del error de tipo y el segundo por las del error de
prohibición. Naturalmente, no faltan las opiniones que consideran que los elementos especiales
LA
1. A los medios: el carácter criminal de una acción puede depender de que el autor haya
utilizado un medio determinado para la comisión del delito. Ej: en el delito estafa, el daño
patrimonial debe haber sido causado mediante engaño. En otros casos, la referencia a los
medios utilizados determina una agravación del delito. Ej: el hurto en el que se utilizare
ganzúa.
2. Al lugar: existen también referencias al lugar en el que debe haberse realizado la acción. Si
el lugar donde se comete el robo, por ejemplo, es un despoblado, el hecho es más grave –
Art. 167. Inc. 1°-.
3. Al momento de la acción: en ocasiones la acción debe haber sido realizada en un
momento determinado que tanto puede ser la razón de la incriminación, como de la
agravación o de la atenuación del hecho. Ej: esto tiene lugar en el infanticidio. También
OM
Características del tipo
• El tipo pertenece a la ley. Tipos son las fórmulas legales mismas, es decir, las formulas
legares que nos sirven para individualizar las conductas que la ley no prohíbe.
• El tipo es lógicamente necesario, porque sin el tipo nos pondríamos a averiguar la
antijuridicidad y la culpabilidad de una conducta que en la mayoría de los casos resultaría
•
.C
sin relevancia penal alguna.
El tipo es predominantemente descriptivo, porque los elementos descriptivos son los más
DD
importantes para individualizar una conducta y, entre ellos de especial significación es el
verbo, que es precisamente la palabra que sirve gramaticalmente para connotar una
acción.
Los tipos son a veces absolutamente descriptivos, porque en ocasiones acuden a conceptos que
LA
remiten o se sustentan en un juicio valorativo jurídico o ético. Cuando el Art. 85 inc. 1 del CP se
refiere a la mujer, precisar lo que es una mujer no requiere valoración alguna, porque el concepto
de mujer es descriptivo. Pero cuando el Art. 237 CP pena al que empleare intimidación o fuerza
FI
contra un funcionario público, el concepto de funcionario público con es descriptivo, sino que
depende de una valoración jurídica, es decir, que es el derecho el que nos dice quiénes son
funcionarios públicos.
En tanto que los elementos descriptivos son los que predominan en los tipos, a estos elementos
que aparecen eventualmente en los mismos se los denomina elementos normativos de los tipos
penales.
Tipo es la fórmula legal que dice “el que matare a otro”; tipicidad es la característica de
“adecuada al tipo” que tiene la conducta de un sujeto que dispara cinco balazos contra otro,
dándole muerte. La conducta del primero, por presentar la característica de tipicidad, decimos
que es una conducta típica. La conducta típica es entonces aquella que encuadra en el tipo penal.
OM
Conducta típica es aquella conducta que presenta la característica específica de tipicidad
(atípica la que no la presenta);
• Tipicidad es la adecuación de la conducta a un tipo;
• Tipo es la fórmula legal que permite averiguar la tipicidad de la conducta.
.C
Son el autor, la acción y la situación de hecho.
DD
b) Relaciones entre tipo y antijuridicidad. Teorías.
Teorías.
Las relaciones entre la tipicidad y la antijuridicidad no están consideradas en forma pacífica por
la doctrina. Hay tres posiciones fundamentales el respecto, una de las cuales reconoce dos sub-
variantes.
FI
Para una posición (que actualmente casi no se sostiene) la tipicidad no indica nada acerca de la
antijuridicidad, solo constituye un inevitable paso analítico previo a su averiguación, pero no
existe ningún género de relación entre ambas categorías. El tipo es neutro, cumple una función
meramente formal y por consiguiente, la tipicidad penal no indicaría ningún desvalor.
Las ideas de Beling respondían a una teoría donde había un injusto objetivo y una culpabilidad
subjetiva.
Decía que lo único que nos interesa es verificar si el sujeto ha realizado lo que el tipo, con su
verbo describe como acción y que no hay que dar más vueltas, no hay que fijarse en lo interno
sino solo en lo externo.
La antípoda del tipo avalorado. Se considera que la tipicidad es la ratio essendi (la razón de ser)
de la antijuridicidad.
OM
1. RATIO ESSENDI: Teoría
Teoría del tipo injusto (Bockelman).
(Bockelman).
La tipicidad implica también la antijuridicidad, pero esta última puede excluirse por una causa
de justificación en una etapa de análisis posterior.
Crítica:
.C
Crítica: La falta de coherencia de esta teoría es evidente, puesto que no se puede afirmar en un
estrato lo que en otro se niega, y es por ello que prácticamente carece de adeptos.
DD
2. RATIO ESSENDI: Teoría de los elementos negativos del tipo (Mezger).
(Mezger)
Identifica la tipicidad con la antijuridicidad tipificada. Para esta tesis, el juicio de antijuridicidad
de una conducta queda cerrado en forma definitiva con la afirmación de la tipicidad. El tipo se
LA
compondría de elementos positivos y negativos. Los elementos positivos son los que fundan la
antijuridicidad. Los elementos negativos del tipo serían las causas de justificación, para que una
conducta sea antijurídica no debe estar protegida por una causa de justificación.
Para sus partidarios, la teoría del delito, en cuanto a sus caracteres específicos, es bimembre
FI
(delito es injusto culpable), en tanto que para el resto es trimembre (tipicidad, antijuridicidad y
culpabilidad).
Críticas: si las causas de justificación devienen elementos negativos de la tipicidad, hacen que el
error sobre sus presupuestos tácitos se considere únicamente como errores de tipo (en caso de
vencibilidad dan lugar a culpa).
Para evitar que los errores vencibles sobre supuestos fácticos de prohibición se resuelvan como
casos de culpa, se hace necesario distinguir diferentes conceptos de tipo (tipo garantía, tipo de
error, tipo sistemático).
Crítica de Welzel:
Welzel: para esta teoría da lo mismo matar a un ser humano que a una mosca.¿Por
qué? Porque si uno mata un ser humano esta conducta ya está desvalorada por una norma que
Para la teoría de los elementos negativos del tipo en los dos casos la conducta no es típica, si yo
mato una mosca la conducta no es típica porque no se da el aspecto positivo, que prohíbe un
comportamiento de matar a otro, pero si yo mato a una persona en legítima defensa, tampoco es
típica, porque si bien se da el aspecto positivo, no se da el aspecto negativo, porque existe una
causa de justificación.
En definitiva, da lo mismo matar un ser humano en legítima defensa que matar una mosca, y
OM
pareciera que no es lo mismo, que el derecho penal tendría que separar lo que significa el juicio
de desvalor, que implica violar una norma, del carácter excepcional que pueda tener llevar a cabo
ese comportamiento bajo la autorización de una causa de justificación, porque en ese caso se
mantiene la prohibición general de que no se puede matar a otro y sólo excepcionalmente a X
.C
persona se le autoriza matar porque obró en legítima defensa, es decir, que solo de manera
excepcional se autoriza la infracción a una norma.
DD
Teoría del tipo total del injusto
injusto:: En 1959, en “Teoría del tipo penal. Tipos abiertos y elementos
del deber jurídico”, CLAUS ROXIN aceptó expresamente la teoría de los elementos negativos del
tipo bajo el rótulo de “tipo total de injusto”.
En dicha obra, de modo expreso y categórico, manifestó que el tipo total de injusto es
LA
“esencialmente correcto”, toda vez que “la idea según la cual el juicio de disvalor legislativo está
expresado en el tipo penal, es un fundamento por el cual las circunstancias excluyentes de lo
injusto corresponden sistemáticamente al tipo, dado que ellas aportan a la determinación del
injusto tanto como los elementos de la descripción particular del delito. Naturalmente llevan a
FI
cabo esta función de otra manera: mientras los tipos penales de la parte especial describen
directamente lo injusto jurídico-penal, los elementos de la justificación describen un
comportamiento que precisamente no es contrario a derecho”. Agrega que “parece ser totalmente
razonable concebir un tipo descriptivo de lo injusto frente a otro tipo excluyente de lo injusto, en
los que se agrupen ambas especies de elementos y proceder en la resolución de los casos
concretos comprobando primero el tipo fundamentador de lo injusto y luego el excluyente de lo
injusto”.
Sin embargo, en 1991, Roxín dejó de adherir a la estructura bipartita del delito basada en la
teoría de los elementos negativos del tipo fundándose en que: no obstante los beneficios que
ofrece la estructura bipartita edificada sobre el tipo global de injusto, hay razones de mayor peso
para preferir el tipo delictivo como una categoría autónoma frente a la antijuridicidad, pues cada
Para Roxín, el tipo y la antijuridicidad son -cada uno de ellos- una categoría propia del delito
porque son divergentes desde varios puntos de vista valorativos: el primero como tipo delictivo
cerrado y jurídico-penalmente específico y la segunda como causa de justificación en general,
cuyo alcance se extiende más allá del Derecho Penal y estructurada conforme a principios de
orden social (ponderación de bienes y autoprotección); el uno como objeto de aplicación del
principio de legalidad y la otra como lugar de desarrollo y plasmación de criterios de superior
rango; el tipo como juicio provisional de desvalor y la antijuridicidad como valoración negativa en
OM
el caso individual de la concreta dañosidad social de la conducta; o finalmente para la exclusión
de la punibilidad, bien como atipicidad jurídicamente indiferente o bien como justificación
jurídicamente permitida y que debe ser tolerada por el afectado. Concluye que tales diferencias
quedarían niveladas “si desde la perspectiva de un sistema del delito bipartito se considera como
atípica toda conducta justificada”.
.C
DD
LA
FI
En otras palabras, la tipicidad es un indicio o presunción iuris tantum (que admite prueba en
contrario) de la antijuridicidad.
OM
Teoría del tipo avalorado Antijuridicidad
Tipicidad
.C
Teoría del tipo injusto: la justificación elimina solo
la antijuridicidad.
DD
La anti-
anti-normatividad.
normatividad.
El tipo se gesta por el interés del legislador en proteger un bien jurídico, enunciando una norma
para tutelarlo, la que se manifiesta en un tipo que le agrega la tutela penal. La conducta que se
LA
adecue a un tipo penal será necesariamente contraria a la norma que esta antepuesta al tipo legal
y afectara el bien jurídico tutelado.
La conducta, por el hecho de ser penalmente típica necesariamente debe ser también anti-
normativa.
FI
Tipicidad legal y tipicidad penal no son la misma cosa: la tipicidad penal presupone la legal, pero
no la agota; la tipicidad penal requiere, además de la tipicidad legal, la anti-normatividad.
La tipicidad penal requiere que la conducta, además de encuadrarse en el tipo legal, viole la
norma y afecte el bien jurídico.
Lo primero que vemos es el tipo penal (“aquél que matare a otro…”), detrás del tipo vemos a la
norma (“no matarás”) y a través de ella llegamos al bien jurídico tutelado (la vida humana).
Por ello, si una conducta es típica esto supone que es adecuada a un tipo penal, contraria a la
norma y, por lo tanto, se entiende que afecta a un bien jurídico.
OM
El bien jurídico cumple una función interpretativa, permite interpretar cuál es el sentido y alcance
que tiene la prohibición.
.C
DD
LA
FI
OM
Es la individualización que de la conducta hace la ley
Tipicidad legal
mediante el conjunto de los elementos descriptivos y
(adecuación a la formulación legal del tipo)
valorativos (normativos) de que se vale el tipo legal.
.C
Tipicidad penal
(adecuación legal y anti-normatividad)
Es el resultado de la afirmación de las dos anteriores.
DD
Tipicidad legal + tipicidad conglobada = tipicidad penal.
LA
protegida por el estado, que revela su interés mediante la tipificación penal de conductas que le
afectan.
El “ente” que el orden jurídico tutela contra ciertas conductas que le afectan no es la cosa en sí
misma, sino la relación de disponibilidad del titular con la cosa. Dicho en otras palabras más
simples: los bienes jurídicos son los derechos que tenemos a disponer de ciertos objetos.
Cuando una conducta nos impide o perturba la disposición de esos objetos, esa conducta afecta
el bien jurídico, y algunas de esas conductas están prohibidas por la norma que genera el tipo
penal.
En cuanto a la afectación de los bienes jurídicos afectados, los tipos se dividen en tipos
OM
calificados o cualificados, que pueden ser agravados o calificados atenuados, siempre en relación
a un tipo básico o fundamental.
Uno de los caminos que sigue la ley para agravar o atenuar delitos es el que hemos expuesto, es
decir, atendiendo al mayor o menor grado de intensidad de afectación al bien jurídico.
.C
Otro de los caminos, que no debe confundirse con este, es agravar o atenuar el delito en rabón
de una mayor o menor culpabilidad.
DD
En cuanto al número de bienes jurídicos que tutela penalmente el tipo, se habla de tipos con bien
jurídico simple o complejo. Es tipo con bien jurídico simple el homicidio; es tipo con bien jurídico
complejo la extorsión, en que se afecta tanto la libertad de determinación como el patrimonio.
LA
FI
Básicos o fundamentales.
Por la intensidad de afectación
al bien jurídico Calificados agravados.
Simples
OM
Por el número de bienes jurídicos
Complejos
.C
Activos, tipos omisivos, tipos dolosos, tipos culposos.
Si la norma tiene un mandato de:
DD
PROHIBICIÓN (contenido activo: tipo activo o de comisión, o tipo
comisivo). Los tipos activos individualizan directamente las
acciones a las que asocia el poder punitivo (como las anteriores
de incendio doloso y culposo). El tipo asocia poder punitivo a la
LA
Resultado
FI
Pura actividad
Omisión propia
Omisión impropia
OM
Según el grado de afectación que tenga el bien jurídico tutelado. El bien puede ser afectado por:
.C Delitos de resultado.
El tipo, tanto de un delito doloso como de uno culposo, adopta dos estructuras diversas según se
trate de delitos de resultado (que producen una lesión o el peligro de la misma) o de actividad o
predominante actividad (que se agotan en el movimiento corporal del autor).
FI
• Delitos de resultado.
Están integrados básicamente por la acción, la imputación objetiva y el resultado. Este último
consiste, ante todo, en la lesión de un determinado objeto (ej: la cosa en el delito de daños). Este
objeto se denomina objeto de la acción y no se debe confundir con el objeto de protección o bien
jurídico; aun los delitos que no requieren un resultado material importan una lesión de un bien
jurídico (ej: el delito de la injuria o el de allanamiento de morada).
En otras palabras, todos los delitos importan, en principio, una lesión inmaterial (la del bien
jurídico); solo un número determinado de ellos requiere una lesión material (la del objeto de la
acción).
• Delitos de peligro.
Parte de la teoría excluye la tipicidad en los delitos de peligro abstracto cuando se comprueba
OM
una absoluta imposibilidad de surgimiento del peligro.
• Delitos de actividad.
Al contrario de los de resultado, el tipo se agota en la realización de una acción que, si bien tiene
.C
que ser (idealmente) lesiva de un bien jurídico, no necesita producir resultado material o peligro
alguno. La cuestión de la imputación objetiva de un resultado de la acción es, por consiguiente,
totalmente ajena a estos tipos penales, dado que no vinculan la acción con un resultado o con el
DD
peligro de su producción.
La distinción de los delitos de actividad y los de peligro abstracto es difícil. La clasificación de los
tipos penales en delitos de resultado y de actividad (según la existencia o no de un resultado o
LA
peligro sobre un objeto material) y en delitos de lesión o peligro (según el grado de intensidad
del resultado sobre el objeto) es cuestionable, ya que hay delitos de peligro abstracto que, en
verdad, difícilmente pueden diferenciarse de los de actividad.
FI
OM
Para que haya un conflicto, un pragma conflictivo, debe existir, entonces:
.C
Sin estos requisitos, el pragma no es conflictivo, y cuando no existe conflictividad, no puede
haber responsabilidad objetiva. La tipicidad objetiva conglobante debe responder tanto a un qué
como a un quién.
DD
En síntesis: no tiene sentido preguntarse por la imputación objetiva de un pragma que no es
lesivo, pero un pragma lesivo que no sea imputable a alguien como agente no será conflictivo
sino accidental. Por tanto, la conflictividad exige que haya lesión Y sujeto imputable.
LA
Lesividad e imputación son los ejes problemáticos de la tipicidad objetiva conglobante y, por
ende, las exigencias básicas del tipo conglobante.
• La lesividad se comprueba constatando la afectación (por daño o peligro cierto) del bien
FI
jurídico en forma significativa, pero también constatando que se trata de un bien jurídico,
o sea, que su afectación está prohibida por la norma, lo que no sucede cuando otras
normas recortan o limitan el alcance prohibitivo de la norma deducida del tipo aislado.
• La imputación se verifica con la comprobación de que el agente, si fue autor, tuvo la
dominabilidad del hecho y, si fue partícipe, hizo un aporte causal no banal ni inocuo.
El tipo doloso activo tiene dos aspectos: uno objetivo y otro subjetivo, es decir que la ley,
mediante el tipo, individualiza conductas atendiendo a circunstancias que se dan en el mundo
exterior y a circunstancias que están dadas en lo interno, en el psiquismo del autor.
El tipo doloso implica siempre la causación de un resultado (aspecto externo), pero se caracteriza
porque requiere también la voluntad de causarlo (aspecto interno). Esa voluntad del resultado, el
querer del resultado, es el dolo. Al aspecto externo del tipo doloso, es decir, a la manifestación
de la voluntad en el mundo físico requerida por el tipo, lo llamamos aspecto objetivo del tipo
OM
legal. Al aspecto interno, a la voluntad misma, lo llamamos aspecto subjetivo del tipo legal.
La problemática de estos delitos en lo referente a la adecuación típica, por otra parte, presenta
particularidades según se trate de delitos de lesión, de peligro o de pura actividad.
.C
b) Aspecto objetivo: Análisis de los componentes típicos.
típicos.
DD
La adecuación típica en los delitos de lesión.
El esquema básico de los delitos de lesión se compone de tres elementos: la acción,
acción la
imputación objetiva y el resultado.
El resultado consiste en la lesión del objeto de la acción. En las lesiones corporales, por ejemplo,
el resultado consiste en el daño en el cuerpo o en la salud; en el delito de aborto, en la muerte
del feto, etc.
FI
Las respuestas a este problema han variado en los últimos años. El punto de vista clásico
afirmaba que un resultado era el producto de la acción cuando ambos estaban unidos por una
relación de causalidad.
En la actualidad tiende a imponerse un punto de vista diferente. De acuerdo con éste, lo decisivo
no es la causalidad (en sentido natural), sino la relación causal que resulta relevante para lo ilícito
de acuerdo con criterios deducidos de la naturaleza de la norma y de su finalidad protectora de
bienes jurídicos (imputación objetiva).
OM
TEORIA DE LA EQUIVALENCIA DE CONDICIONES
Parte de la idea de que todo resultado es producto de varias condiciones. Para saber si un hecho
es condición, se lo elimina mentalmente y si el hecho no se produce, ese hecho no es condición
del resultado.
.C
El hecho de que todas las condiciones sean esenciales para el resultado y que todas tengan el
mismo valor hace creer que cualquier conducta es causa, es decir que a cualquiera que
DD
introduzca alguna de todas las condiciones le sería imputable el hecho.
Para quienes conciben al tipo en forma objetiva, es decir, como la causación de un resultado, no
queda otra alternativa que buscar una limitación a la relevancia penal de la causalidad, porque si
tomasen en cuenta la causalidad tal cual se da (como categoría del ser), sería típica la conducta
LA
La causalidad como categoría del ser es un proceso ciego, una cadena de causas y efectos. “Toda
condición que no puede ser mentalmente suprimida sin que con ello desaparezca el efecto, es
causa” (Welzel). Si mentalmente suprimimos el pecado original, desaparecen todos los delitos; si
suponemos que nunca hubiesen engendrado un hijo el padre y la madre del homicida,
desaparecería el resultado muerte; si no hubiese habido hotel no se hubiese podido cometer
adulterio en él. Esta es la teoría que se conoce como de la conditio sine quo non y es la única que
responde a la realidad, al ser de la causalidad como proceso físico.
Para quienes (respetan la estructura óntica de la conducta y de los fenómenos que la acompañan,
partiendo de un punto de vista realista), esta es la única concepción de la causalidad que nos
cabe admitir en la teoría del tipo.
OM
margen de la relación de causalidad.
En la década de los setenta, el Estado español permitía la importación de aceite de colza para la
industria, pero, para proteger la producción nacional de aceite de oliva, prohibía destinarlo a
usos alimenticios. Para evitarlo, el aceite de colza era obligatoriamente “desnaturalizado” con
.C
ricino.
Como éste resultaba bastante caro, en 1973, unos industriales del sector pidieron a la
DD
Administración que les autorizara sustituir el ricino por aceites minerales nafténicos, por Azul de
Ceres o por aceite de anilina, un producto tóxico, pero más barato que el ricino. El Laboratorio
Central de Aduanas informó que no veía inconvenientes en el cambio. Los nuevos
desnaturalizantes, indicó, podían identificarse fácilmente y hacían al aceite de colza inapropiado
LA
Nunca llegó a probarse la causalidad: solo se presumió a partir de indicios. Una Sentencia penal
condenó a los particulares responsables del criminal desvío, pero éstos eran insolventes.
Entonces, los herederos de las víctimas mortales y el resto de los afectados unieron sus fuerzas
Se toma como causa adecuada a la que puede producir el resultado de acuerdo con el curso
normal y ordinario de los hechos que en el caso concreto lo ha producido. Sirve para ver cuando
una culpa es atribuible a alguien.
CONCAUSA:
CONCAUSA:
OM
Además de la causa, hay otras externas independientes de la acción del autor. Por lo tanto al
existir estas causas la responsabilidad del autor se ve disminuida en proporción a la influencia de
este acontecimiento independiente de su obrar.
La causa humana:
humana hay que tener en consideración que el hombre es un ser dotado de voluntad e
inteligencia, lo cual le permite cuando quiere lograr algo valerse de las condiciones o fenómenos
LA
naturales.
Esta teoría parte de la idea de que el hombre es tanto más poderoso cuanto más sabe. Por
ejemplo Soler nombra algunos puntos a tener en cuenta:
FI
1. Las relaciones que no eran conocidas por nadie cuando la acción tuvo lugar, quedan
excluidas de la acción aún cuando sean causas. Ejemplo: soy diabético y me inyectan
azúcar; no hay homicidio si nadie sabia de mi enfermedad.
2. Las relaciones conocidas por una categoría de personas constituye acción para toda esa
categoría, pero no para la generalidad.
3. Las acciones conocidas por el imputado son acción solo para él.
4. Todas esas acciones deben ser consideradas con relación a la forma definitoria del verbo
típico.
INSTITUCIONES
(Jakobs) Riesgo permitido
Principio de confianza
Prohibición de regreso
Conformidad de la víctima.
OM
IMPUTACIÓN
OBJETIVA
.C
1. Fin de protección de la norma.
2. Resultados inadecuados.
3. Competencia de la víctima en el resultado.
DD
4. Concurrencia de riesgos.
5. Comportamiento alternativo conforme a derecho.
Esta teoría propone reemplazar la relación de causalidad por la imputación objetiva, es decir, por
LA
Esto significa que, a pesar de que exista un nexo de causalidad que una al autor con el resultado,
esto no será suficiente para que el mismo le sea imputable. La relación de causalidad no es sino
el límite mínimo pero no suficiente para atribuir un resultado. Comprobada la causalidad natural
Tenemos así, los dos niveles de la imputación objetiva: el primero, la calificación del
comportamiento como típico o imputación objetiva del comportamiento (creación de un riesgo
• Riesgo permitido:el
permitido: riego permitido es para Jakobs el estado normal de interacción, es
decir, el vigente status quo de libertad de actuación. El riesgo permitido está y siempre
estuvo presente en todos los ámbitos vitales, porque una sociedad en la que todos los
riesgos están prohibidos no puede avanzar. Ej: para que la revolución industrial triunfara,
tuvieron que aceptarse como permitidos los riesgos que importaban las máquinas. El
OM
riesgo permitido es el resultado de un cálculo entre costos y beneficios. La configuración
de la sociedad es el fundamento del riesgo permitido.Existe el riesgo no permitido cuando
el propio derecho lo define como tal, por su peligrosidad concreta o abstracta. Entonces,
si la conducta que produjo el resultado se encontraba dentro del riesgo permitido, el
.C
resultado es un infortunio, no un injusto, por lo tanto no puede ser atribuido
objetivamente a su autor.
• Principio de confianza: Jakobs sostiene que en los casos de la vida social en que
DD
intervienen varias personas cada una de las que participa debe poder confiar en que los
demás se comportarán de acuerdo al cuidado debido, ya que todos están sometidos al
orden jurídico y se presume que son personas responsables.Ej: un conductor confía en
que los demás automovilistas respetarán las reglas de tránsito. Cesa la confianza en tres
LA
supuestos:
Si el otro interviniente no es competente. Ej: es un inhabilitado, un menor,
un deficiente mental, etc.
Si el autor es garante.
FI
OM
Si existe un deber de garante que obliga a evitar eventuales daños
tampoco podrá operar la prohibición de regreso.
.C
víctima ha infringido determinados “deberes de autoprotección”, esto es, cuando en
ejercicio de su autonomía se desenvuelve de manera defectuosa, lo que ocasiona el riesgo
sobre sus bienes jurídicos. Ej: la víctima de un accidente automovilístico que iba
DD
alcoholizada. Además, hay cosas que no se pueden hacer salvo con el consentimiento de
la víctima. Ej: cortar el abdomen de una persona con un bisturí es un delito, sin embargo,
en las operaciones la víctima da su consentimiento para que se le realice este
procedimiento y eso no es un delito.
LA
asesino no será responsable por esta segunda muerte aunque sea consecuencia de la
primera, porque no estaba contemplada en el fin de la norma. Se excluyen de la
imputación objetiva los llamados resultados secundarios (muertes o daños posteriores a
un hecho que causa otro), ya que la norma sólo protege en estos casos, el daño inmediato,
y no lo que ocurra en días, meses o años plazo.
2. Resultados inadecuados: aquellos casos en los que el resultado no es una plasmación del
riesgo creado. Este criterio es aplicable en el campo de los delitos imprudentes. Ejemplo:
A, con intención de matar dispara contra B, ocasionándole una ligera herida. Sin embargo
este muere al ser trasladado al hospital, ya por un accidente de tráfico, por una
OM
será solo uno el que deba responder y el grado de respuesta dependerá del grado de
implicancia que cada uno tuviera en la creación del riesgo.
5. Comportamiento
Comportamiento alternativo conforme al derecho: hay casos en que se traspasan las
fronteras del riesgo permitido y, aun observando los cuidados exigidos, el resultado
.C
disvalioso podría haberse producido. Ej: un ciclista alcoholizado que queda atrapado bajo
las ruedas de un camión que se había adelantado de manera incorrecta. Los peritos
determinan que el ciclista hubiera muerto de todas formas, aunque el camión no se
DD
hubiera adelantado, porque dado su grado de alcohol en sangre, estaba haciendo “zigzag”
y hubiera terminado bajo el camión cuando este intentara pasarlo de manera legal.
Según Terán Lomas es de aplicación al ámbito de los delitos de comisión por omisión. En cuanto
a los delitos de omisión, no se plantea este problema, dado que se pena por el incumplimiento
de un específico deber jurídico.
Como es claro, en los tres casos que hemos analizado se requiere además la verificación de las
circunstancias del tipo que acompañan a la acción.
Por ejemplo: en la violación de domicilio (art. 150 CP), que es un delito de pura actividad, es
OM
preciso que el autor haya entrado en “morada ajena” y que lo haya hecho “contra la voluntad real
o presunta” de quien tenía derecho de “excluirlo”.
.C
Hay tipos penales que no sólo contienen elementos descriptivos, sino también elementos
normativos, es decir, elementos para cuya precisión se hace necesario acudir a una valoración
ética o jurídica.
DD
Se ha dicho que un derecho penal que abusa en sus tipos de los elementos normativos, lesiona la
seguridad jurídica, pues éstos (por depender de una valoración) carecerían de la precisión de los
elementos descriptivos.
LA
Hay elementos normativos, como el concepto de “funcionario público”, que está perfectamente
delimitado en el art. 77, en tanto que hay elementos descriptivos cuya determinación cuesta
considerable esfuerzo (como el concepto de “dejado en el campo” en el abigeato art. 163 inc. 1,
FI
Hay algunas expresiones genéricas que aparecen en las fórmulas legales y que son verdaderos
elementos normativos de los tipos legales, como sucede en la referencia a la ilegitimidad del
d) Aspecto subjetivo.
subjetivo.(Copy paste Henaín)
Para poder afirmar la subsunción de una conducta en un tipo activo doloso, no bastacon
comprobar en el caso de análisis la presencia de todos los elementos que hacen alaspecto
Recordemos que el aspecto subjetivo se integra con todos aquellos elementos quedeben darse
en cabeza del autor (o del sujeto respecto al cual se está averiguando su responsabilidad penal,
que bien puede ser un partícipe), independientemente de queontológicamente su naturaleza sea
física o psíquica.
Normalmente, el aspecto subjetivodel tipo activo doloso se agota en el dolo. En otros tipos
OM
penales, el tipo subjetivo requiere para su configuración, además del dolo, otros
componentes que reciben la denominación de “elementos subjetivos del tipo distintos del dolo”.
Constituyendo el dolo el núcleo del aspecto subjetivo de los delitos dolosos, ya que nunca puede
estar ausente en esta clase de delitos, conviene comenzar por su adecuada
.C
caracterización, advirtiendo desde ya la falta de acuerdo en doctrina y jurisprudencia sobre qué
es lo que debe entenderse por “dolo”. Debe destacarse que la ley penal argentina no define al
DD
dolo, por lo que corresponde a la dogmática la tarea de su conceptualización.
1. Teoría de la representación:
representación:
El factor determinante del comportamiento doloso, estádado, para este criterio, por la
FI
representación que tiene el autor de todos los elementos objetivos del correspondiente tipo
penal al momento de actuar. Es decir que, el dolo se integra básicamente con elementos
cognoscitivos, sin que influya en su configuración, la actitud subjetiva que adopte el sujeto ante
tal representación: Si el sujeto quiere o seconforma con la producción probable del resultado, o
si, por el contrario confía en queel mismo no se producirá, son aspectos que carecen-para esta
posición-de relevanciapara la configuración del dolo.
Esta es la coincidencia mínima que existe entre sus sostenedores. Pero las diferencias decriterios
se patentiza al momento de precisar cuáles son las chances de producción delresultado que
el sujeto debe representarse para afirmar que actuó con dolo. Al respectoexisten al menos tres
posiciones.
OM
meraposibilidad de lesionar un bien jurídico penalmente tutelado, e igualmente lleve a
cabo laacción riesgosa para el bien.
Finalmente, un tercer grupo de autores son menos exigentes para catalogar un
comportamiento como doloso, al decir que basta para el dolo con que el autor no haya
.C
considerado improbablela configuración típica.
Según cuál sea el criterio que se adopte en materia de dolo, ello incide en forma determinante en
DD
los límites del accionar culposo. En efecto, de considerarse requisito indispensable la
representación de unaprobabilidaddel suceso típico, cuando el autor considere que las chances
de que se produzca el resultado no son tan altas (simple posibilidad), tendrá la representación
suficiente para el accionar culposo (culpa con representación) pero no será suficiente para tildar
LA
acontecer típico.
Más allá de estas discrepancias, pude considerarse que, para los sotenedores de la teoría de la
representación, la mayor gravedad del delito doloso respecto al delito culposoradicaría en el
mayor disvalor de acción -el disvalor del resultado es idéntico en ambos-de quien,
representándose el riesgo que su accionar significa para un bien no se detieneen su realización,
desplegando igualmente la conducta peligrosa. Por contraposición, enel delito culposo el agente
causa un resultado no querido a consecuencia de haber desconocido el peligro que generaba con
su acción o por haberse equivocado sobre la magnitud del riesgo que provoca o sobre las
chances de concreción de tal peligro en lesión.
Ejemplo:Quien
Ejemplo: conoce los riesgos que genera para la vida de otras personas al transportar una
sustancia explosiva, e igualmente decide continuar con su acción, realiza un acto de mayor
OM
Obra con dolo “el que sabe lo que hace conociendo el peligro concreto que genera con su
acción”.
2. Teoría de la voluntad:
voluntad:
.C
Para la teoría de la voluntad, el dolo no se agota en el aspectocognoscitivo (conocimiento) sino
que requiere además un aspecto conativo, que va másallá del simple querer realizar la acción. La
DD
ausencia de cualquiera de estos componentes excluye el dolo.
Si para la “teoría de la representación” el disvalor del acto propio del dolo se manifiesta en actuar
a sabiendas del peligro (riesgo prohibido) que con su conducta está provocando, para la “teoría
de la voluntad” esto no es lo que caracteriza al dolo, en razónde que tal representación también
LA
se puede dar en el accionar culposo, al menos en unade sus formas, la llamada “culpa con
representación”. En consecuencia, para la “teoría de la voluntad”, la particular gravedad del hecho
que caracteriza al dolo estaría dada enla actitud que el sujeto asuma al representarse la (posible
o probable)afectación de un bien jurídico penalmente protegido:
FI
Si para la “teoría de la representación” hay dolo cuando el sujeto sabe lo que hace, para la “teoría
de la voluntad” el dolo se configura cuando el sujeto actuante sabe lo que hace y hace lo que
quiere.
OM
Veamos en el siguiente ejemplo, cómo la posición que sesiga (teoría de la voluntad o de la
representación) condicionará la solución que se dé almismo respecto a si estamos o no frente a
un accionar doloso.
Ejemplo: Dos personas salen a recorrer en canoa los Esteros del Ibera en Corrientes. En
.C
determinado momento una de ellas, “X”, cae al agua. Un yacaré se dirige hacia “X” y cuando está
a punto de comerla, su compañero “Z”, que quedó en la canoa, toma un rifle y apunta al yacaré.
“Z” es un muy mal tirador y por la proximidad en que se encuentran “X” y el yacaré le resulta muy
DD
difícil poder asegurarse de dar en el blanco al efectuar el disparo. “Z” se representa como
probable que en lugar de acertar al yacaré pueda matar a su compañero con el disparo. No
obstante ello, y como no le queda otra alternativa, se decide a efectuar el disparo. “Z”, en lugar
de matar al yacaré mata a su compañero “X”.
LA
Si se analiza el caso siguiendo los criterios de la teoría de la representación, habría que afirmar
que “Z” actuó con dolo de homicidio.
conocía (se representó en forma efectiva) todos aquellos elementos que integran el aspecto
objetivo del tipo penal del homicidio, esto es, sabía que lo que tiene en frente suyo (“X”), es
un ser humano, conocía también los procesos causales, en particular, que efectuar un disparo en
zonas vitales del organismo produce la muerte, y sabía también que lo que estaba accionando
era un arma de fuego.
Además, “Z” se representó la probable producción del resultado típico (la muerte de su
compañero) a pesar de lo cual, igualmente, llevó a cabo su acción. Conclusión: “Z” habría actuado
con dolo de homicidio.
En cambio, para la teoría de la voluntad, no habría dolo en razón de que, si bien “”Z”
se representó la muerte de “X” como probable, no la aceptó, al confiar en que daría en el blanco
(de estar seguro que fallaría no habría efectuado el disparo). “Z” no quiso la muerte de su
El dolo es el querer del resultado típico, la voluntad realizadora del tipo objetivo. Todo querer
presupone un conocer.
OM
Con el dolo sucede lo mismo, pues es un querer. El conocimiento que presupone este “querer” es
el de los elementos del tipo objetivo en el caso concreto.
Si queremos perfeccionar un tanto la definición del dolo que hemos dado sea conveniente
conceptuarlo como la voluntad realizadora del tipo objetivo, guiada por el conocimiento de los
.C
elementos de este en el caso concreto.
El dolo es una voluntad determinada que, como cualquier voluntad, presupone un conocimiento
DD
determinado. El dolo es representación y voluntad.
Aspecto cognoscitivo
Aspecto subjetivo
Aspecto volitivo
En definitiva, el dolo es actuar con conocimiento de los elementos objetivos del tipo
determinado. Es SABER lo que estoy haciendo y QUERER hacerlo.
OM
El conocimiento de los elementos del tipo objetivo.
objetivo.(Bacigalupo)
Para obrar con dolo el autor debe haber tenido conocimiento de los elementos del tipo objetivo.
Por lo tanto, al determinar cuáles son los elementos del tipo objetivo se define, al mismo tiempo,
qué elementos debe haber conocido el autor para afirmar que su obrar fue doloso. Ej: en el delito
.C
de hurto el autor debe haber tenido conocimiento de que se apoderaba de una cosa mueble
ajena.
DD
No se requiere para el dolo el conocimiento de la antijuridicidad de la acción (de la realización
del tipo), ni tampoco de la punibilidad del hecho. El autor que ignora la prohibición del hurto o
que supone una causa de justificación de su acción, obrará con dolo si tenía conocimiento de los
elementos del tipo objetivo. Lo mismo cabe decir del que ignora o supone falsamente la no
LA
¿Qué características debe tener el conocimiento de los elementos del tipo objetivo?
En primer lugar, debe ser actual; debe darse en el momento en que el autor ejecuta la acción. El
FI
conocimiento que el autor tuvo antes de realizar la acción y que luego olvidó no es suficiente a
estos fines, como tampoco lo es el que puede tener con posterioridad a la realización de la
acción.
En segundo lugar, debe extenderse también a las circunstancias agravantes y atenuantes, sea
que éstas estén incorporadas al tipo de la parte especial (como ocurre, en general, en nuestro
código) o que se trate de circunstancias contenidas en la parte general.
En tercer lugar, cabe señalar que no todos los elementos del tipo deben ser conocidos con la
misma intensidad, ni de la misma manera. Los elementos descriptivos se conocen por medio de
los sentidos; pero los elementos normativos requieren una valoración. Algunos elementos
normativos pueden ser conocidos de una manera técnico-jurídica o profana. Ej: un cheque o un
documento son conceptos jurídicos y el conocimiento que de ellos tenga un jurista no necesita
OM
“conocimiento potencial”) no pertenece al dolo. El “querer matar a un hombre” (dolo del tipo de
homicidio del art. 79) no se integra con la “posibilidad de conocer que se causa la muerte de un
hombre”, sino con el efectivo conocimiento de que se causa la muerte de un hombre.
El conocimiento efectivo puede ser actual o actualizable. Es conocimiento actual el que tenemos
.C
acerca de un objeto cuando focalizamos sobre él nuestra actividad consciente. Es conocimiento
actualizable; puede recordarlos, pensar en ellos, y entonces hará actual ese conocimiento que, en
tanto no focalice sobre él su actividad consciente (no piense en él) quedará en puramente
DD
actualizable. El dolo requiere siempre un cierto grado de actualización del conocimiento.
conocimiento
conocimiento actual, sino que puede también integrarse con algunos conocimientos
actualizables.
Existen algunos contenidos de conciencia que no pueden ser escindidos de otros que “se
FI
piensan”, es decir que cuando se focaliza la consciencia sobre algunos objetos, hay un co-pensar
en otros, que no pueden separarse de los anteriores, sin ninguna necesidad de que
expresamente “se piense” en los segundos. El que tiene acceso carnal típico del art. 120, no “está
pensando” en que la mujer es mayor de 12 o menos de 15 años. Todos esos contenidos de
conciencia (conocimientos efectivos) los está co-pensando y, de ese co-pensar, surge el co-
querer.
OM
b) Quienes entiende “comprensión” como conocimiento, no pueden negar que el
conocimiento de la antijuridicidad debe ser algo distinto a los conocimientos del
tipo objetivo; no pueden exigir que en el dolo un conocimiento efectivo de la
antijuridicidad, porque hay dolo cuando el sujeto conoce la antijuridicidad como
cuando le importa si su conducta es antijurídica. Tan dolosa es la conducta de
.C
quienes saben que está prohibido contraer matrimonio cuando existe impedimento
que cause su nulidad absoluta (Art. 134) como la de quienes lo sospechan y ni
siquiera tienen interés en averiguarlos o saberlos. El conocimiento e la
DD
antijuridicidad no sería un conocimiento efectivo, sino “potencial”, es decir, un “no
cocimiento”.
El dolo no pasa de ser el querer la realización del tipo objetivo, que surge de la fórmula legal de
la tentativa, y que para nada necesita del conocimiento de la antijuridicidad ni de su posibilidad.
LA
que haya tenido voluntad de realizarlo, es decir, de realizar el comportamiento prohibido por la
norma. Este problema presupone una respuesta a la pregunta siguiente: ¿cuándo se puede
afirmar que el autor ha querido la realización del tipo?
• Dolo directo
En primer lugar puede decirse que el autor ha querido o tenido voluntad para realizar el tipo
cuando esta realización era directamente perseguida por su voluntad y era la meta de su
voluntad. Ej: el autor quiere la muerte de B y dirige su acción a producirla, es decir, quiere matar
a B y lo mata. Cuando la realización del tipo es la meta del autor estamos en presencia del dolo
directo.
directo
En el dolo directo el autor quiere directamente la producción del resultado típico, sea como el fin
directamente propuesto o sea como uno de los medios para obtener ese fin. Cuando se trata del
Cuando el autor se representa la relación del tipo como necesaria se dará dolo indirecto o dolo
directo de segundo grado o dolo de consecuencias necesarias.
OM
Ej: el que quiere matar a otro poniendo una bomba en su automóvil y se presenta como necesaria
la muerte del acompañante, al que no desea matar; si, producida la explosión, mueren no solo
aquel a quien desea matar, sino también el acompañante, habrá dolo directo respecto del
primero y dolo indirecto respecto de este último (nótese la diferencia que existe entre tener
voluntad de realizar el tipo y desear su realización).
• Dolo eventual
.C
En el dolo directo, el resultado se quiere directamente (como fin o como consecuencia necesaria
DD
del medio querido), y esta forma de querer es diferente del querer un resultado concomitante
cuando se lo acepta como posibilidad: este es el dolo eventual.
Si el autor no se representa la realización más que como posible, la realización dolosa del tipo
LA
El dolo eventual,
eventual conceptuado en términos corrientes, es la conducta del que se dice “que se
aguante”, “que se fastidie”, “si pasa, mala suerte”, “que me importa”. Obsérvese que aquí no hay
una aceptación del resultado tal, sino su aceptación como posibilidad, como probabilidad.
Cuando un sujeto programa la causalidad para obtener una finalidad,se representa los posibles
resultados concomitantes de su conducta. En tal caso, si confía en que evitara o no sobrevendrán
esos resultados, nos hallamos con un supuesto de culpa con
con representación.
representación
OM
El límite entre el dolo eventual y la culpa con representación es un terreno resbaladizo, aunque
más en el campo procesal que en el penal. En nuestra ciencia, el limite lo da la aceptación o el
rechazo de la posibilidad de producción del resultado, y en el campo procesal lo que se plantea
es un problema de prueba que en cada caso de duda acerca de la aceptación o rechazo de la
posibilidad de producción del resultado, impondrá que el tribunal considere que hay culpa.
.C Directo
De primer grado: cuando el
resultado es querido directamente
como fin.
DD
De segundo grado: cuando el
Dolo resultado es la consecuencia necesaria
del medio elegido.
Cuando el sujeto se representa
Eventual la posibilidad del resultado
concomitante y la incluye como tal en
la voluntad realizadora
LA
Cabe aclarar que si bien la mayor parte de los tipos dolosos admite el dolo eventual, hay tipos
dolosos que solo pueden darse con dolo directo. Expresiones tales como “a sabiendas”,
“intencionalmente, maliciosamente, et.”.
FI
Todos los tipos dolosos exigen que haya una cierta congruencia entre sus aspectos objetivo y
subjetivo. Esta congruencia no siempre es de la misma entidad: hay tipos dolosos que requieren
únicamente que su aspecto subjetivo contenga el querer la realización del tipo objetivo (que es el
dolo).
• Todos los tipos dolosos exigen una congruencia entre sus aspectos objetivo y subjetivo.
• simétrica es decir, que el tipo
Hay tipos dolosos en que esta congruencia basta que sea simétrica,
subjetivo contenga solo el querer la realización del tipo objetivo (dolo).
OM
Estos requerimientos pueden ser de dos distintas naturalezas:
.C
A las ultra intenciones pertenece, por ejemplo, el propósito de evitar la deshonra, que puede
acompañar al dolo de homicidio en el tipo subjetivo del infanticidio.
DD
A las disposiciones internas pertenece, por ejemplo, la alevosía, que requiere que la muerte sea
cometida aprovechando la indefensión de la víctima y no solo conociéndola.
Conforme a las dos clases de elementos subjetivos que hemos aludido, en que unos se
LA
caracterizan por ser portadores de una intención que va más allá de obtener el resultado típico, y
en que otros se caracterizan por una particular disposición del ánimo del autor, consideramos
que hay tipos que contienen elementos subjetivos distintos del dolo, que pueden considerarse
FI
de tendencia interna
interna sobrante o trascendente y otros de tendencia interna peculiar.
peculiar
Cortados delitos de resultado: cuando el sujeto realiza la conducta para que se produzca
un resultado ulterior, ya sin su intervención. Por ejemplo, el infanticidio en que la madre
1. Llamamos tipos con tendencia interna trascendente a aquellos que requieren que la
conducta se dirija a la obtención de un objetivo que se halla más allá del puro resultado o
producción de la objetividad típica (por eso la expresión trascendente).
OM
que estamos haciendo referencia tuvo lugar en un momento en que a lo injusto (lo ilícito) solo
correspondían elementos objetivos.
La comprobación de que para la adecuación típica de algunos delitos era preciso tomar en cuenta
la tendencia subjetiva del autor al realizar la acción hizo pensar en que lo injusto debía
.C
introducirse en una categoría de elementos que hasta entonces habían pertenecido a la
culpabilidad por su carácter subjetivo. Al desarrollarse más esta nueva concepción de lo ilícito se
acabó trasladando también el dolo a lo ilícito. Esta tarea estuvo a cargo de la teoría finalista de la
DD
acción.
Los elementos especiales de la autoría se dan junto al dolo en los tipos penales que requieren
que el autor además de haber querido la realización del tipo haya perseguido con ella una
LA
finalidad ulterior (Ej: en el caso del delito de rapto, es preciso que el autor haya querido la
realización del tipo con miras deshonestas; lo mismo ocurre con el homicidio cometido para
preparar, facilitar u ocultar otro delito).
La diferencia entre estos elementos y el dolo es clara: mientras el dolo consiste en la voluntad de
FI
realizar el tipo, esta finalidad ulterior del autor trasciende la consumación del delito y se dirige a
un fin jurídicamente desaprobado.
Paralelamente, desaparecerá la voluntad de realización del tipo, pues como consecuencia del
error el autor no puede haber tenido voluntad de realizar un hecho que no es el típico según su
OM
conocimiento.
Así, el que no sabe que dispara sobre otro porque lo ha confundido en la oscuridad con un
animal, tampoco tiene la voluntad de matar a otro, ya que quiere un hecho que no es –de
acuerdo con su representación- matar a otro.
.C
En consecuencia, el error sobre los elementos del tipo objetivo excluye el dolo, o dicho de otra
forma, el error de tipo excluye el dolo.
DD
La exclusión del dolo, sin embargo, no significa también exclusión de la responsabilidad penal.
Si el autor ha incurrido en un error de tipo por falta de cuidado (por obrar negligente), la
realización del tipo no será dolosa, pero será
s una realización del tipo culposa. En estos casos el
autor será punible si el delito correspondiente está amenazado con pena en la ley para su
LA
realización culposa. Por lo tanto podemos resumir los efectos de las distintas formas de error de
tipo de la siguiente manera:
FI
Así, siguiendo con el ejemplo anterior, si el autor omitió las comprobaciones que el cuidado
debido exigía al disparar sobre otro al que confundió con un animal, habrá obrado sin dolo, pero
será responsable por la realización culposa (negligente)
(negligente) del tipo de homicidio (homicidio culposo.
Art. 84, Cód. Penal).
El error sobre los elementos del tipo puede recaer sobre un elemento sin el cual desaparece
totalmente la tipicidad (Ej: el autor cree apoderarse de una cosa de su propiedad) o bien sobre
OM
(culpable).
.C
Ejemplos de errores de tipo. Ejemplos de errores de prohibición.
DD
“A” acciona un arma que cree descargada, pero está “A” cree que le va a matar un ladrón y le dispara
cargada y causa la muerte de “B”. para defenderse. En realidad era su amigo “B” que estaba
bromeando.
Una mujer embarazada ingiere un tranquilizante Una mujer embarazada proveniente de un país en
LA
que resulta ser un abortivo y que le provoca un aborto. que no está penado el aborto, ingiere un abortivo creyendo
que no está prohibido hacerlo.
Un cliente toca un jarrón sin saber que sirve de Un indígena rompe un muñeco en un comercio
apoyo a una estantería que se desploma rompiendo un porque cree (conforme a las creencias del lugar de que
muñeco. proviene) que tiene poderes maléficos y que le causara la
muerte.
Un sujeto se lleva un abrigo ajeno, creyendo que es Un sujeto se lleva un abrigo ajeno porque piensa
el propio. usarlo y devolverlo al día siguiente, creyendo que eso no es
delito.
Por ejemplo: el autor quiere matar a otro, que no sabe nadar, arrojándolo desde un puente a un
río; la víctima muere, sin embargo, al dar con la cabeza en uno de los pilares del puente y antes
de llegar al agua.
En este caso el desarrollo del hecho que el autor se representó y el que realmente tuvo lugar no
coinciden totalmente. Sin embargo, la divergencia no es esencial y, por lo tanto, no hay razón
OM
para la exclusión del dolo.
Por ejemplo: el autor quiere abofetear a otro, quien para evitar los golpes se hecha bruscamente
hacia atrás, pierde el equilibrio y cae por una ventana muriendo. El autor se representó aquí una
.C
lesión leve y se produjo, en realidad, la muerte del otro.
En este caso, el desarrollo del suceso es totalmente diferente del que pensó el autor al obrar y,
DD
por lo tanto, deberá admitirse un error sobre el desarrollo del suceso o un error sobre el nexo
causal.
No elimina el dolo.
(Ejemplo: Si un sujeto quiere empujar a otro desde un puente para que muera ahogado y
cuando lo empuja la victima muere porque se fractura el cráneo con la piedra, se configura
una desviación no esencial del curso causal que no elimina de modo alguno el dolo)
Curso causal sufre un desvío se produce el resultado
(Esencial)
Elimina el dolo.
(Ejemplo: el autor quiere abofetear a otro, quien para evitar los golpes se hecha bruscamente
hacia atrás, pierde el equilibrio y cae por una ventana muriendo. El autor se representó aquí
Error in persona
persona
Por ejemplo: A paga a B para que mate a C; B confunde a D con C y mata a D, creyendo haber
matado a C.
En cuanto a las consecuencias que tiene el error in persona encontramos opiniones disidentes:
OM
• Bacigalupo:
Bacigalupo: El error sobre la identidad de la persona es típicamente irrelevante pues el tipo
penal del homicidio sólo exige que se mate a otro y B ha querido matar a otro. Si la
identidad es típicamente relevante(por ejemplo: en el parricidio) la ignorancia de la
identidad de la persona excluirá la agravación o, en su caso, la atenuación.
•
.C
Zaffaroni:
Zaffaroni:El error in persona se presenta cuando se cree dirigir la conducta contra un
objeto pero en realidad se la dirige a se afecta otro objeto. Cuando los objetos no son
equivalentes desaparecerá el dolo, como es el caso de alguien que tiene acceso carnal con
DD
su mujer creyendo que era la ajena, no presentándose entonces el dolo por adulterio; o
bien no hay dolo de hurto si alguien se apodera de una cosa propia creyendo que era
ajena. En estos casos desaparece el dolo porque éste es el querer la realización del tipo
objetivo con conocimiento de sus elementos, cuando en realidad están faltando esos
LA
elementos, que sólo existen en la imaginación del autor.Cuando los objetos son
equivalentes, la solución cambia porque la desviación resulta irrelevante para el dolo.
Quien confunde a su enemigo con su vecino y dirige su conducta a matar a su vecino y le
mata, cometerá homicidio.
FI
Objetos equivalentes:
equivalentes:
La diferencia fundamental que existe entre este supuesto y el de la Aberratio ictus es que en la
última, la acción se dirige contra una persona y afecta a otra, en tanto que en el error en la
persona
persona la conducta se dirige y consuma contra una determinada persona.
Objetos NO equivalentes:
equivalentes:
Es el caso en que una conducta se dirige contra un objeto, pero afecta a otro objeto, al que no se
quería ni se aceptaba la posibilidad de afectar.
Ejemplo: A quiere matar a B, que está sentado junto a C; apunta mal y en lugar de matar a B,
mata a C, a quien no quería matar.
OM
Para este caso se ofrece, en la teoría, dos soluciones.
• Bacigalupo:
Bacigalupo: este autor sostiene que no se diferencia del error in persona, y estima que
debe tratarse como un homicidio doloso consumado. El autor quiso matar a otro y el
resultado es una concreción del peligro representado por su acción.
•
.C
Zaffaroni:
Zaffaroni: piensa que el autor no logró consumar el hecho que quería (Matar a B) y que a
este respecto solo puede haber tentativa de homicidio, y que además mató a C, sin
quererlo, pero por falta de cuidado, lo que constituye un homicidio culposo, y que ambos
DD
hechos concurren idealmente.
Entonces, según Zaffaroni puede suceder que el objeto de la conducta y el ente que resulta
afectado no sean equivalentes, como cuando alguien dispara contra el dueño y lesiona al perro.
En este caso habrá una tentativa de homicidio, porque la lesión del pero constituye un daño y el
LA
Para este autor sucede lo mismo cuando los objetos son equivalentes, ya que si alguien dispara
contra otro matando a un tercero, tendremos un concurso ideal de tentativa de homicidio con
FI
homicidio culposo. No obstante un sector doctrinario afirma que en ese caso hay un homicidio
doloso consumado, porque el autor quería matar a un hombre y mató a un hombre (aunque
Zaffaroni no está de acuerdo con esta solución).
A dispara contra B, pero la bala se debía y mata a Cdesviación del curso causal y del resultado.
A con respecto de C = seria daño, pero como no existe el Daño Culposo, estaríamos frente a una
conducta atípica.
OM
.C
DD
LA
FI
Es un error sobre la causalidad en que el autor cree haber alcanzado el resultado, pero en
realidad éste sobreviene dentro del curso causal con posterioridad.
Ejemplo: A quiere matar a B a golpes con un bastón; luego de propinarle un número considerable
de golpes en el cuerpo y en la cabeza cree haberle producido la muerte; para ocultar el cadáver
lo arroja a un pozo con agua. Al descubrirse el hecho, los médicos comprueban que B murió
ahogado y que, por lo tanto, no estaba muerto, como creyó A, cuando éste lo arrojó al pozo. En
consecuencia, cuando el autor quiso matar no logró el resultado; cuando creyó que no estaba
matando (porque pensaba que arrojaba la pozo a un cadáver) produjo el resultado de muerte.
OM
Las opiniones se dividen en lo que respecta al tratamiento de estos casos:
• Bacigalupo:
Bacigalupo: se trata de un único hecho en el que debe admitirse un dolo general de matar
que se concretó en la obtención del resultado (es decir, homicidio doloso).
.C
• Zaffaroni:
Zaffaroni: deben admitirse dos acciones diferentes; en el primer tramo, tentativa de
homicidio, y, en el segundo, homicidio culposo (en concurso real). Esta teoría es la
preferible, siempre y cuando la decisión de realizar el “segundo tramo” del hecho sea
DD
sobreviniente. Si el autor desde el comienzo pensó ocultar el cadáver de la manera en que
lo hizo solo habrá una desviación no esencial del nexo causal.
1. Si hay una sola conducta, que la muerte se haya producido por los golpes o por el
entierro es irrelevante; pero para que haya una conducta es necesario que haya
un plan unitario, es decir, una unidad de decisión que implica matar y enterrar
para ocultar el cuerpo. En este caso es homicidio doloso consumado.
2. Si existen dos conductas, es decir, hay dos planteamientos sucesivos de la
FI
Ejemplo:
Ejemplo:
A golpea a B y creyéndolo muerto (pero en realidad esta desmayado), para simular suicidio lo
cuelga de un árbol, por lo que B muere de ahorcamiento.
A con respecto a B = Homicidio doloso Hay una conducta, que la muerte se haya
producido por los golpes o por el ahorcamiento es irrelevante (se trata de un error irrelevante
acerca de la causalidad)
Estructura.
Estructura.
Todas las acciones que tipifican los tipos dolosos son concebibles en la comisión por
OM
negligencia, pero sólo algunas están tipificadas.
La comisión culposa del hurto, del robo, de la violación, de la estafa, etc. Son atípicas. Las viejas
legislaciones tipificaban el llamado crimen culpae, penando la comisión culposa de cualquier
delito; hoy casi todas las legislaciones siguen el mismo criterio de la ley argentina, o sea, el del
.C
número cerrado de tipos culposos, también llamado de “numerus clausus”.
La acción culposa tiene finalidad, pues las acciones sin finalidad no son acciones. Además, la
DD
finalidad no es irrelevante en los tipos culposos, porque si bien no se individualiza la conducta
por la finalidad, es necesario conocer ésta para poder determinar la tipicidad imprudente. Sin la
finalidad no se puede conocer el deber de cuidado. Si no sabemos qué acción realizaba el agente
no podemos preguntarnos por el deber de cuidado que debe violar la acción.
LA
En tanto que el tipo doloso individualiza la acción prohibida por el fin perseguido por ella, el tipo
culposo lo hace en razón de que la programación de la causalidad, por violar un deber de
cuidado, produce el resultado típico.
FI
Ej: no se pena la acción final de conducir un vehículo, sino hacerlo a exceso de velocidad.
Solo son típicas las conductas culposas que así se tipifican en la parte especial y a ellas hay que
recurrir para construir el concepto general de culpa.
OM
del resultado (desvalor del resultado); asimismo, también habrá de analizarse dentro de este
último ítem el llamado principio de confianza, dada la importancia que reviste en este tema.
.C
Habiendo fracasado todas las tentativas de valerse de la causalidad para individualizar la
conducta culposa, pasó a desempeñar un primerísimo papel la violación del deber de cuidado.
DD
Resulta claro que el deber de cuidado debe ser violado por una conducta, porque es inadmisible
que haya procesos causales que violen deberes de cuidado.
El deber de cuidado debe determinarse conforme a la situación jurídica y social de cada hombre,
LA
Caso 2: Quien conduce por una carretera a excesiva velocidad, viola un deber de
cuidado, pero no habrá homicidio culposo si arrolla al suicida que diez metros antes
se arroja al paso del vehículo, porque aun en el caso en que no hubiese excedido la
velocidad prudente tampoco hubiese podido frenar ni esquivar al sujeto.
OM
Por ello, a veces, en vez de hablar de infracción de deberes de cuidado es mejor hablar de
creación de un riesgo jurídicamente desaprobado.
.C
imputable objetivamente a la acción que infringió el deber de cuidado, o si se quiere, a la que ha
creado un riesgo no permitido.
DD
Este requisito que vincula el resultado con el peligro creado o la infracción al deber de cuidado -
postulado de la teoría de la imputación objetiva- es denominado por la doctrina como “conexión
de antijuridicidad”, “causalidad de la evitabilidad”, “nexode determinación” o “concreción de la
creación de peligro no permitido”. Este concepto se basa en que no es suficiente la relación
LA
causal, sino que debe darse una relación de otro carácter, puramente normativa.
En este mismo sentido, cabe señalar que para que el resultado pueda ser imputado a la
imprudencia de la acción, se requiere una doble exigencia:
FI
OM
a que debía hacerlo, pelos de cabra cuyo empleo ocasionó la muerte de cuatro
trabajadores, pero después se comprobó que portaban gérmenes que probablemente no
habrían podido ser eliminados por la desinfección-); en estos casos de comportamiento
alternativo correcto, la doctrina dominante exige para la imputación del resultado, en
.C
virtud del principio in dubio pro reo, la seguridad –o una probabilidad rayana a la
seguridad- de que si la acción no hubiese sido imprudente no se hubiera producido el
resultado.
DD
Por otro lado, se ha sostenido con razón que en nuestro derecho la cuestión resulta clara en
virtud del uso de la preposición por en el Código Penal (v.gr. artículos 84, 94, 189, 262, 281 -
segundo párrafo-, entre otros, de dicho ordenamiento legal). Pero, también es cierto que aunque
LA
el Código Penal no lo expresase de esa forma y usara un giro gramatical distinto, la conexión
entre violación del deber de cuidado y el resultado tiene que considerarse implícita, evitando la
confusión entre lo puramente causal y lo normativo.
El principio de confianza
FI
contrario. Este principio tiene incidencia preponderante en el tema de los accidentes de tránsito,
en la cooperación con división de trabajo y respecto de delitos dolosos de otros.
En cuanto al derecho que regula la circulación de automotores -tomando este ítem como
ejemplo-, señala Roxin que mientras que las normas jurídicas en general y las normas de tránsito
en particular proporcionan indicios acerca de la existencia decreación de un peligro no permitido,
el principio de confianza sirve para la negación de un incremento del peligro inadmisible. Este
principio establece en su forma más general que, quien se comporta debidamente (por ejemplo,
en la circulación), puede confiar en que otros también lo hagan, siempre y cuando no existan
OM
Asimismo, es incorrecto negar el principio de confianza a quien a su vez se comporta
antijurídicamente, si la infracción de tránsito de éste no ha repercutido en el resultado (por
ejemplo, el caso del conductor que ha consumido alcohol y que, a pesar de ello, debe quedar
exento de responsabilidad penal invocando el principio de confianza cuando otro no respeta su
.C
prioridad de paso y el accidente tampoco habría sido evitable para el conductor sobrio).
éstos aparecen, desaparece la “confianza” para los otros integrantes del equipo. Además, en la
cooperación con división de trabajo, el principio de confianza puede retroceder cuando los
intervinientes poseen especiales deberes de vigilancia (por ejemplo, del médico jefe que dirige la
operación respecto del médico asistente aún inexperto).
FI
El principio de confianza también rige en cuanto por regla general se puede confiar en que otros
no cometan delitos dolosos, pues la venta o la transmisión de objetos que pueden causar peligro
(v. gr. cuchillos, martillos, etc.) no serían posibles si se hubiera de contar con la comisión de
delitos dolosos por los compradores o demás receptores. Ello así en la medida en que se trata de
un riesgo permitido, ya que los peligros inevitables se soportan en atención a las ventajas
individuales y sociales que el principio de confianza ofrece también en este terreno. En este
punto radica el núcleo de la teoría de la prohibición de regreso, según la cual la cooperación no
dolosa de delitos dolosos es impune. Conviene aclarar –siguiendo a Roxin- que no se trata de
que el hecho doloso del autor inmediato interrumpe el nexo causal, o de que en virtud de la
impunidad de la participación imprudente no pueda hacerse responsable en ningún caso al
tercero imprudente; pues no es posible concebir un nexo causal simultáneamente como
existente e “interrumpido”, y dado que en los delitos imprudentes rige el concepto unitario de
OM
.C
DD
LA
FI
Finalidad
Aspecto subjetivo
Previsibilidad = prever el resultado
OM
objetivo concretamente, la violación del deber de cuidado y la posibilidad de previsión del
resultado (previsibilidad).
Por otra parte en el aspecto cognoscitivo del tipo subjetivo culposo hay un conocimiento
potencial, es decir, una posibilidad de conocimiento, no requiriéndose un conocimiento efectivo,
Componentes subjetivos.
subjetivos.
.C
como sucede en el caso del dolo.
DD
El tipo subjetivo culposo se integra en un aspecto conativo y un aspecto intelectual o
cognoscitivo. El aspecto conativo es la voluntad de realizar la conducta final de que se trate con
os medios elegidos, cuya función dentro de la estructura típica culposa ya hemos visto.
LA
Es imprevisible el resultado para el albañil, que no puede prever que el ladrillo que coloca se
FI
En lugar, hay un error invencible de tipo, que también elimina la previsibilidad, cuando alguien
conduce por un camino sinuoso atendiendo todas las indicaciones, pero causa un accidente
porque circula en dirección prohibida, debido a que alguien había cambiado las originales
indicaciones de los carteles.
Se encuentra en error invencible de tipo quien descarga bultos de un camión, que cree que
contienen lana porque así están rotulados, y uno de ellos resulta conteniendo un explosivo que al
arrojarlo del vehículo estalla, causando lesiones.
El tipo culposo no individualiza la conducta por la finalidad sino porque en la forma en que se
obtiene esa finalidad se viola un deber de cuidado.
Asentado que el tipo culposo prohíbe una conducta que es tan final como cualquier otra, cabe
OM
precisar que, dada su forma de deslindar la conducta prohibida, el más importante elemento que
debemos tener en cuenta en esta forma de tipicidad es la violación de un deber de cuidado.
Solo son típicas las conductas culposas que así se tipifican en la parte especial y a ellas es a las
que hay que acudir para tratar de construir el concepto general de culpa.
.C
Si bien se ha dicho que la imprudencia es un exceso en el actuar y la negligencia es una falta en
el actuar, lo cierto es que uno y otro caso, hay un deber de cuidado violado, que es lo
DD
importante, como se deduce del mismo tipo cuando, en general, se refriere a los deberes a su
cargo.
disposición o norma de carácter general que se encuentra fuera del tipo. El tipo abierto, por sí
mismo, resulta insuficiente para individualizar la conducta prohibida. Esto es lo que sucede
siempre con los tipos culposos: no es posible individualizar la conducta prohibida si no se acude
FI
a otra norma que nos indique cual es el cuidado a su cargo que tenía el sujeto activo.
necesario un dato previo que viene dado por un momento subjetivo: el fin de la conducta. Si no
tenemos disponible el dato que nos informa cual era la finalidad que perseguía la conducta, no
sabremos de que conducta se trata y, por ende, no podremos averiguar cuál era el deber de
cuidado que incumbía al agente, lo que nos impedirá saber si lo había violado y,
consiguientemente, no podremos averiguar si la conducta era o no típica.
No hay un deber de cuidado general, sino que a cada conducta corresponde u deber de cuidado.
De allí que sea inevitable que los tipos culposos sean abiertos, y la única manera de cerrarlos sea
sabiendo de que conducta se trata. Para saber que una conducta es de conducir, de demoler, de
OM
Todos los planteamientos que se han hecho de la teoría de la culpa a partir del resultado, han
sido completamente erróneos, precisamente por sobrevalorar la función del mismo, que en el
tipo culposo no tiene otra que delimitar los alcances de la prohibición. El resultado es un
delimitador de la tipicidad objetiva culposa, que algunos han llamado “componente de azar”.
.C
propia función garantizadora que debe cumplir el tipo es un sistema de tipos legales. El
resultado integra el tipo porque así lo exige la función garantizadora que cumple el tipo y la ley
DD
penal en general, por no decir que todo el derecho.
Caso 1:
1 Sujeto conduce a 120km/h, llega a destino sin inconvenientes.
FI
1: conducta atípica.
Caso 1
2: conducta típica.
Caso 2
responder
El resultado determina qué caso se debe res no..
ponder y en qué caso no
La causalidad.
causalidad.
La causalidad en el tipo culposo participa de las mismas penurias que el resultado pero, por lo
demás, sigue siendo un concepto físico al igual que en el tipo doloso.
El nexo de determinación.
determinación.
No basta con que la conducta sea violatoria del deber de cuidado y cause el resultado, sino que,
además, debe mediar una relación de determinación entre la violación del deber de cuidado y la
causación del resultado, es decir que la violación del deber de cuidado debe ser determinante del
resultado.
OM
Causalidad hay cuando la conducta de conducir un vehículo causa a alguien la muerte, haya o no
violación del deber de cuidado. Lo que aquí se requiere es que en una conducta que haya
causado el resultado y que sea violatoria de un deber de cuidado, el resultado venga
determinado por la violación del deber de cuidado.
Para establecer esta relación de determinación entre la violación del deber de cuidado y la
.C
producción del resultado: debemos imaginar la conducta cuidadosa en el caso concreto, y si el
resultado no hubiese sobrevenido, habrá una relación de determinación entre la violación del
DD
deber de cuidado y el resultado; por el contrario, si aun en el caso en que la conducta hubiese
sido cuidadosa, el resultado se hubiese producido, no existirá relación de determinación entre la
violación del cuidado debido y el resultado.
Se llama culpa con representación o culpa consciente a aquella en que el sujeto activo se ha
representado la posibilidad de la producción del resultado, aunque la ha rechazado en la
confianza de que llegado el momento, lo evitará o no acontecerá. Este es el límite de la culpa con
FI
el dolo eventual.
En la culpa inconsciente o culpa sin representación no hay un conocimiento efectivo del peligro
que con la conducta se introduce para los bienes jurídicos, porque se trata del supuesto en que
La tipicidad culposa se satisface con un conocimiento potencial del peligro de los bienes
jurídicos, sin que requiera el conocimiento efectivo de dicho peligro, es decir, que la tipicidad
culposa contenta con la forma inconsciente, sin que sea menester la culpa consciente o con
representación.
a) en la tipicidad,
tipicidad implica la necesidad de que la conducta (para ser típica) deba al
menos ser culposa;
b) en la culpabilidad,
culpabilidad implica que no hay delio si el injusto no es reprochable al autor.
OM
No solo hay responsabilidad cuando se pena una conducta solo porque ha causado un resultado,
sino también cuando se agrava la pena por la misma razón. Ambos casos implican, pues,
violaciones al principio nullum crimen sine causa.
La preterintención supuestos.
preterintención y otros supuestos.
.C
La preterintención es el caso en que se tipifica conjuntamente una conducta como dolosa por
dirigirse a un fin típico y como culposa por la causación de otro resultado.
DD
De un tipo doloso y de un tipo culposo
Las figuras abarcan supuestos en que una sola (preterintencional).
conducta típica. De dos tipos dolosos (tipicidad plural dolosa).
De dos tipos culposos (tipicidad plural culposa).
LA
quienes por delitos calificados por el resultado entienden formas de agravación fundadas en la
mera causación de un resultado más grave, sin que medie dolo o culpa.
En nuestra legislación penal no hay ningún supuesto típico en que la producción del resultado no
La teoría de la actio libera in causa parece bastante convincente, porque funcionaria del siguiente
modo: si un sujeto bebe para embriagarse completamente y en ese estado mata a su enemigo,
de hacerlo efectivamente habría un homicidio doloso. Si el mismo sujeto bebe para embriagarse,
sabiendo o debiendo saber que suele tener reacciones agresivas en ese estado, y comete un
homicidio en ese estado, habrá un homicidio culposo. Por último, si bebe tomando todas las
OM
precauciones imaginables para que no pase nada y no obstante, se embriaga y comete un
injusto, la conducta será atípica.
Critica a la teoría.
Quien injuria a otro sin tener en cuenta que puede tener una reacción violenta, está obviamente
.C
violando un deber de cuidado. Si su conducta violatoria del deber de cuidado, en cualquiera de
estos casos causa una lesión a alguien, tendremos perfectamente configurada la tipicidad
culposa. En consecuencia, hablar de actio libera in causa culposa no tiene sentido, debiendo
DD
reducirse el ámbito de la actio libera in causa al dolo.
El argumento mecánico.
mecánico.
Se ha argumentado que la culpabilidad no tiene por qué coincidir con el momento en que se
produce el resultado, defendiendo así a la actio libera. Es verdad que si alguien coloca una
FI
bomba de tiempo, poco importa que este ebrio o loco en momento en que la bomba estalle, pero
esto no tiene nada que ver con la actio libera in causa, porque la acción de colocar una bomba de
tiempo es un acto ejecutivo, una tentativa acabada de homicidio o de otro delito, en tanto que
beber no es un acto de tentativa de homicidio, y tampoco es un acto ejecutivo de lesiones i una
conducta típica de injurias. En tanto que en el caso de la bomba hay tipicidad, en el otro no la
hay, y cuando comienza a haberla, ya no hay culpabilidad.
Adelantamos algo que se podrá comprenderse mejor mas adelante: en la estructura del tipo, la
objetividad típica ya surge cuando un sujeto se coloca en un estado o situación que le impide
realizar la conducta debida. Aquí tampoco tiene nada que ver la teoría de la actio libera in causa,
sino que hay una tentativa cuando quien requiere cierta precisión de movimientos para la
conducta debida, se coloca en un estado que le impide realizarla: el médico que se embriaga en
OM
.C
DD
LA
FI
a) Tipos omisivos
omisivos.
isivos. (Zaffaroni)
Naturaleza de la omisión.
omisión.
El tipo legal se puede presentar de dos maneras:
OM
Tipos Activos Prohíben conductas Prohibitivos
Se le antepone una norma enunciada “prohibitivamente” (No mataras)
Art. 108.- Será reprimido con multa de $ 750 a $ 12.500, el que encontrando perdido o desamparado a un menor de
.C
diez años o a una persona herida o inválida o amenazada de un peligro cualquiera, omitiere prestarle el auxilio
necesario, cuando pudiere hacerlo sin riesgo personal o no diere aviso inmediatamente a la autoridad.
(Nota: texto con la modificación dispuesta por ley Nº. 24.286)
DD
Como puede observarse, se trata de una descripción de la conducta que el sujeto debe
hacer en esa eventualidad: prestar el auxilio necesario, o dar inmediatamente aviso a la
autoridad. Lo prohibido es realizar cualquier otra conducta distinta de esas. Este es un tipo
omisivo.
Según Mir Puig, la diferencia entre ambos tipos está en la estructura y el significado normativo.
En tanto que los tipos activos individualizan la conducta prohibida mediante descripciones que
FI
completan con algunos elementos normativos, los tipos omisivos lo hacen describiendo la
conducta debida y estando, por ende, prohibida cualquier otra conducta que difiera de la debida.
Acción y omisión son, en definitiva, dos técnicas diferentes para prohibir conductas humanas. En
tanto que en el enunciado prohibitivo se prohíbe hacer la acción que se individualiza con el verbo
(matar), en el enunciado perceptivo se prohíbe realizar cualquier otra acción que no sea la que
individualiza el verbo (ayudar).
Antes del Tipo, es decir, a nivel de la conducta, no hay omisiones, sino que todas son
acciones. “Omitir” es solo “no hacer” lo que se debe hacer y esto último nunca puede
saberse hasta que no se alcanza la norma, es decir, hasta que no se llega a la tipicidad.
Esto sucede porque la omisión solo puede ser entendida normativamente.
impropias..
El autor de los tipos omisivos. Omisiones propias e impropias
OM
Se llaman omisiones propias o tipos de omisión propia a aquellos en que el autor puede ser
cualquiera que se encuentre en la situación típica.
Se llaman omisiones impropias o tipos de omisión impropia a aquellos en que el autor solo
puede ser quien se encuentra dentro de un limitado círculo que hace que la situación típica de la
.C
omisión equivalga a la de un tipo activo. Los tipos de omisión impropia tienen un tipo activo
equivalente y la posición en que debe hallarse es autor se denomina posición de garante.
DD
LA
FI
OM
los tipos activos.
2. Siempre hay un resultado.
3. Solo algunos pueden ser
autores de una omisión
impropia, solo aquellos que
se encuentren en posición
de garante (delicta propia).
.C
OMISIÓN PROPIA: El delito propio de omisión en particular.
particular.
DD
Los delitos propios de omisión son delitos tipificados expresamente en el Código Penal que se
agotan en el incumplimiento del mandato de acción.
cumplido con esta obligación y que haya tenido capacidad de hecho para hacerlo.
Esta situación típica está descripta en la ley como presupuesto del deber de actuar y es, por lo
tanto, el primer elemento del tipo de los delitos de omisión. Ej: Art. 108 del Código Penal, que
consiste en “encontrar perdido o desamparado a un menor de diez años o a una persona herida o
inválida o amenazada de un peligro cualquiera”.
Esta disposición legal determina las circunstancias en las que cualquier persona está obligada a
realizar una acción. La comprobación de estas circunstancias es el primer paso para verificar la
tipicidad de una omisión.
La tipicidad de la omisión depende de que el omitente haya tenido capacidad para realizar la
acción mandada. Capacidad de prestar auxilio o de contribuir a la alimentación de otra persona,
etc. El omitente que carece de esta capacidad no habrá omitido típicamente.
OM
del fin de la acción.
Ej: el paseante al lado de un lago en el que un bañista se halla a punto de ahogarse, tiene que
haber tenido conocimiento de la situación; debe haber tenido la posibilidad de saber cómo podía
prestarle ayuda y además haber sabido de la finalidad de salvamento con que debía realizarse la
.C
acción; por último, debe haber tenido suficiente destreza natatoria como para salvar al
necesitado, esta era la única acción eficaz.
DD
LA
FI
El dolo en la omisión.
omisión
También el concepto de dolo de los delitos de omisión requiere una reformulación. En los delitos
de comisión el dolo consiste en la voluntad de realización del tipo. Implícitamente ello supone
que el dolo es la sobredeterminación de la causalidad. Pero en los delitos de omisión falta la
realización de la acción, por lo que no es pensable hablar en este ámbito de una voluntad de
realización, y, además, al no haber exactamente una relación de causalidad tampoco es posible
una sobredeterminación de esta. No hay voluntad de realización de una acción que no se realiza,
ni sobredeterminación de una causalidad que no ha tenido lugar.
OM
Por lo tanto, la forma más grave de lo ilícito, la correspondiente a los delitos de comisión
dolosos, en los delitos de omisión será el delito “cuasi-doloso”.
.C
1) Conocimiento de la situación típica generadora del deber de obrar;
2) Conocimiento de las circunstancias que fundamentan la posibilidad de obrar;
DD
3) Haya sido por lo menos indiferente a la producción del resultado o la lesión del bien
jurídico.
culposo.
El delito de omisión culposo.
LA
El concepto general de la culpa no sufre en la omisión alteración que sea fundamental para el
mismo. Invariablemente, debe estar presidido por el elemento fundamental de la violación del
deber de cuidado.
La violación del deber de cuidado puede surgir en especial en los siguientes casos:
FI
La culpa, dentro de la estructura típica omisiva, puede tener tanto la forma de culpa consciente
como inconsciente. La culpa inconsciente en la omisión da lugar a los llamados “delitos de
olvido”.
Varios países contienen en sus códigos penales “cláusulas de equiparación”, cláusulas generales
que determinan que, bajo ciertas condiciones, no evitar un resultado que se estaba obligado a
evitar es equivalente a la realización activa del tipo penal que prohíbe la producción activa de ese
mismo resultado. Ej: el guardavidas, al que le incumbe salvar a un bañista en peligro de
OM
ahogarse, responderá de la misma manera que si hubiera causado la muerte de éste si el bañista
muere ahogado sin que él, pudiendo, no hubiera intentado, por lo menos, el salvamento. Es
decir, habrá cometido un homicidio por omisión.
Por eso, Bacigalupo dice que los tipos que llamamos “delitos impropios de omisión” no son en
.C
realidad variedades de los tipos de omisión propia, sino de los tipos de comisión, a los que
complementan mediante la forma omisiva de “no evitar el resultado”.
DD
objetivo también en la omisión impropia pertenecen al aspecto
Tipicidad. Aspecto objetivo:
objetivo la descripción de la situación típica generadora del deber de actuar, la omisión de
la realización de la acción debida y la capacidad de hecho para realizarla. ¿Qué es lo que,
entonces, caracteriza a esta forma de omisión para que sea equivalente a la realización del
LA
Posición de garante.
garante
impedir el resultado es la estrecha vinculación del omitente con el bien jurídico protegido. La
persona que se encuentre en esa posición de estrecha de vinculación con el bien jurídico es
denominada garante. La madre que no da de comer a su niño pequeño o el guardavidas que no
salva al bañista que corre peligro de ahogarse tienen con los bienes jurídicos respectivamente a
su cargo una estrecha relación que permite afirmar que se encuentran en posición de garantes
frente al orden jurídico, y de ello se deduce que su omisión es, en principio, equivalente a la
realización activa del tipo: no responderán solo por la omisión de socorro, sino por homicidio.
- Teoría formal.
formal. Las fuentes formales de la posición de garante tuvieron gran influencia en
el primer tercio del siglo pasado. Basándose en ellas, la posición de garante se afirma
acudiendo a la existencia de deberes extrapenales emanados principalmente de la ley, de
un contrato y de un actuar precedente peligroso (injerencia).
OM
La ley:
ley: es la primera de las fuentes formales de las posiciones de garantía, en base a ella se
impone, por ejemplo, a los padres una posición de garante respecto de la vida, la salud, la
educación y el sustento de sus hijos. Son deberes específicos establecidos por el código civil, la
legislación de menores y de familia. Según este criterio, si un padre, ante una enfermedad de su
.C
hijo no hace nada y el hijo muere, el padre responde de delito de homicidio (al menos con dolo
eventual) en comisión por omisión. Pero las cosas podrían ir más lejos y se podría imputar al
DD
padre un delito en comisión por omisión (como autor o como partícipe) por no haber impedido la
comisión de un delito por parte de su hijo.
También debe tomarse en cuenta que el propio Código Civil impone deberes de garante a los
esposos entre sí, de cuidar y velar unos por otros; deberes de cuidado y vigilancia de los hijos
LA
respecto de sus padres, sin aclarar en cada caso qué tipo de peligros son los que deben evitarse
ni qué tipo de bienes jurídicos son los que deben protegerse.
Los criterios de posiciones de garante derivadas de la ley no hacen distinción sobre la clase de
FI
ley que le sirve de fundamento pudiendo incluirse leyes de carácter civil, mercantil,
administrativas, etc. Este aspecto habrá de ser tomado en cuenta especialmente cuando se
derivan posiciones de garante de preceptos de carácter mercantil o administrativo relativos a
El contrato:
contrato: es la asunción voluntaria de una obligación de protección de un bien jurídico. Se dice
que con la firma del contrato, se asume la posición de garante y se agota con su vencimiento. Por
eso, la jurisprudencia estima posición de garante en el caso del guardabarreras, del encargado de
una red eléctrica, de los directores de obras, del socorrista de playa, del guía alpino, etc.
Pero ¿qué pasa cuando el contrato contiene un vicio (formal o material) que acarrea su nulidad?
En ese caso, habrá que negar la posición de garante y, de ser así, también habrá que hacerlo en
aquellos contratos que presenten problemas de interpretación. Esta fuente es interesante porque
Por estas y otras razones que podrían objetarse, las relaciones contractuales no pueden dar lugar
a posiciones de garante; así lo dedujo dese hace mucho tiempo la doctrina alemana y buena
parte de la doctrina española.
OM
la posición de garante debe de ser fortuita (lícita) o imprudente (ilícita). En este punto, la doctrina
se divide. Sin embargo, lo más correcto parece, y aquí el segundo de los puntos, que ni el acto
fortuito ni el imprudente deban dar lugar a un delito impropio de omisión, sino más bien
constituir un tipo de omisión pura agravada, al estilo del delito de omisión de socorro a la propia
.C
víctima, para los que sería conveniente la creación de omisiones puras de garante, más graves
que las omisiones puras y menos graves que los supuestos de comisión por omisión.
DD
Sin embargo, se admite de manera unánime la comisión por omisión en los casos en que la
actuación precedente es dolosa, aunque en realidad la posterior omisión dolosa es subsumida
por la acción precedente, también dolosa, que permite no recurrir a la figura de la comisión por
omisión, sino a un delito comisivo.
LA
imprudente y un delito omisivo (omisión pura), siempre que esté previsto legalmente o, cuando
se trate de caso fortuito, apreciar simplemente una omisión pura.
OM
haber dado alcohol al que luego tiene que conducir un vehículo).
Dentro de esta categoría aparecen, también, los deberes de vigilancia, referidos a la evitación de
daños en los bienes jurídicos de terceros (Ej: el cumplimiento de las medidas de seguridad en los
ámbitos de trabajo).
.C
Cuando se trate de los peligros emanados de un hecho anterior del omitente la posición de
garante solo deberá admitirse cuando los peligros generados por el comportamiento previo
DD
hayan sido previsibles y evitables en el momento de la realización de la acción que originó el
peligro.
fuente de peligro vigilada. Esto quiere decir que los únicos resultados que pueden fundamentar
la responsabilidad son los que un observador imparcial podría considerar ex-ante como
adecuados a la fuente de peligro vigilada. Aquí se utiliza el criterio de la teoría de la adecuación,
pero solo para establecer el límite del deber de actuar del garante.
FI
Cuidado de un bien jurídico determinado frente a los peligros que puedan amenazarlo:
amenazarlo la
segunda categoría fundamentadora de la posición de garante contiene deberes de cuidado y
protección de uno o varios bienes jurídicos determinados.
Caben aquí, en primer término, los deberes que tienen por objeto el cuidado de personas
necesitadas, como, por ejemplo, enfermos, paralíticos, niños, etc. Asimismo, los deberes de
protección de personas que están expuestas a un determinado riesgo, como es el caso de la
protección de los alpinistas por el guía de montaña.
También pertenecen a esta categoría los deberes de cuidado y protección que corresponden a los
funcionarios en el marco de su competencia. En esta esfera encontraremos las más variadas
obligaciones y los más diversos deberes; es cuestión de interpretación comprobar cuáles son los
OM
deberes que por su entidad son idóneos para fundamentar la posición de garante y cuáles no.
Resumiendo: la omisión
omisión de impedir un resultado es típica en la forma de un delito impropio de
omisión si el omitente era garante; y es garante cuando se encuentra en alguna de las
situaciones descriptas.
Resultado típico.
típico
.C
Debe darse la producción de un resultado típico, aunque no siempre este existe. Es decir, lo que
DD
se prohíbe es la realización de ese resultado típico, pero NO SIEMPRE está presente en la omisión
impropia (aunque en la mayoría de los casos lo está).
Nexo de evitación.
evitación (Zaffaroni)
LA
Dado que la producción del resultado de un delito de comisión es requisito del tipo del delito
impropio de omisión, se presenta le problema de la relación que debe existir entre la omisión del
garante y el resultado.
FI
teoría de la conditio sine qua non elaboró una formula según la cual sería causal del resultado
toda acción que supuesta mentalmente determinaría la no producción del resultado.
Sin embargo hay que tener en cuenta que en las omisiones lo que resulta causal del resultado es
el omitente mismo. Piénsese, por ejemplo, en el que está al borde de una piscina y ve a otro en
peligro de ahogarse, no obstante lo cual no hace nada para evitar el resultado. La condición
negativa, es decir, la ausencia de una acción que impida el resultado de muerte se da tanto
La cuestión debe plantearse, por lo tanto, como un problema de imputación objetiva. Lo que
importa es la causalidad potencial, no la causalidad real: ¿habría evitado el resultado la acción
que el omitente podía realizar? Esta pregunta deberá contestarse positivamente cuando la acción
omitida habría reducido considerablemente el peligro que luego se concretó en el resultado.
OM
.C
DD
LA
FI
A) Antijuridicidad.
Antijuridicidad.
Según la teoría indiciaria, la tipicidad es un indicio de antijuridicidad, pero para que la conducta
sea antijurídica no deben encontrarse causas de justificación (permisos para infringir normas que
OM
son creados por el ordenamiento jurídico).
Concepto de antijuridicidad
.C
La realización del tipo no es suficiente para establecer la ilicitud del comportamiento. Esta
requiere que la realización del tipo no esté especialmente autorizada, es decir, que sea
DD
antijurídica. En otras palabras, la cuestión de la antijuridicidad no es otra que la de saber si la
realización del tipo está o no amparada por una causa de justificación.
las pulsiones del poder punitivo. El juego de pulsiones de éste y de las contrapulsiones del
derecho penal determina una dialéctica, que se reitera en todos los niveles analíticos.
norma deducida del tipo, considerada aisladamente (tipo sistemático) y conjugada con las otras
normas prohibitivas deducidas de toda la legislación (tipicidad conglobante).
Pero las leyes no solo contienen normas prohibitivas, porque a veces se hace necesario reconocer
que la realización de la acción antinormativa es, precisamente, un derecho que no puede negarse
al agente como parte de su ejercicio de libertad social que disuelve el conflicto o, al menos, la
pretensión de injerencia punitiva.
El orden jurídico se compone del orden normativo completado con los preceptos permisivos. La
tipicidad no es más que un indicio de la antijuridicidad, porque con la primera no tenemos
afirmada nada más que la antinormatividad de la conducta.
OM
En un sentido formal, una conducta típica será antijurídica cuando sea contraria a derecho, es
decir, cuando ese comportamiento contradiga al ordenamiento jurídico entendido en su
conjunto.
.C
constatación de que la conducta típica (antinormativa) no está permitida por ninguna causa de
justificación (precepto permisivo) en ninguna parte del orden jurídico (no sólo en el derecho
DD
penal, sino tampoco en el civil, comercial, administrativo, labora, etc.).
Sin embargo, un importante sector doctrinal afirma que no basta con comprobar que no existe
ninguna autorización legal (causa de justificación) para afirmar la antijuridicidad de una
conducta. Es necesario que se presenten ciertas características materiales que permitan
LA
• Von Litsz:
Litsz debe darse una dañosidad social, es decir, deben verse dañados bienes
jurídicos de una forma socialmente inaceptable. Pero aun así, la lesión o puesta en peligro
FI
OM
“El tipo permisivo de la legítima defensa, por ejemplo, contiene dentro de su aspecto objetivo a:
a) La agresión ilegítima.
b) La necesidad racional del medio empleado.
c) Falta de provocación suficiente.
.C
Y dentro de su aspecto subjetivo:
- Causalismo clásico:
clásico: no, las causas de justificación solo funcionan de manera objetiva
(Zaffaroni).
- Opinión mayoritaria:
mayoritaria: sí, se requieren ambos aspectos para que la conducta esté justificada.
FI
OM
b. Otros autores: por analogía in buona partem habría que tratarlo como un error de
tipo (el cual podrá ser vencible o invencible).
.C
monistas: encuentran el fundamento de las causas de justificación en un único
principio rector.
DD
Teoría del fin (Von Litsz):: considera justificada a la acción que constituye un medio adecuado
para lograr un fin reconocido por el derecho.
Sarner: El principio justificante estaría dado por la circunstancia de constituir más beneficios que
LA
perjuicios.
2) Teorías pluralistas
pluralistas:
listas aceptan más de un principio justificante.
Principio del interés preponderante: sirve para explicar la justificación de la defensa propia o de
FI
Principio de ausencia de interés: sirve para fundar el carácter justificante del consentimiento
presunto.
Las causas de justificación excluyen la antijuridicidad del hecho. No suprimen una antijuridicidad
existente, sino que la cancelan ab initio, impidiendo que el hecho sea antijurídico. En cambio, la
inimputabilidad y la inculpabilidad no excluyen la antijuridicidad del hecho sino la condición del
autor imputable y culpable. Las causas de justificación son transitivas (pasan de uno a otro). Los
actos justificados son ilícitos y quienes cooperen en un acto justificado, quedan cubiertos por su
OM
licitud. La inimputabilidad y la culpabilidad en cambio, son personales e intransitivas y excluyen
la inimputabilidad o la culpabilidad solo respecto del agente que se halla personalmente cubierto
por tales causales.
.C
simplemente, la norma y el precepto encajan como engranajes en un mecanismo
indispensable para evitar que la norma, derivada de un instrumento abstracto, lleve al
campo de lo antijurídico conductas que la violan, para ejercer derechos que no pueden
DD
negarse sin incurrir en la grosera irracionalidad.
• Deben ser más particularizadas
particularizadas que las prohibiciones:
prohibiciones la mayor particularización de las
causas de justificación obedece a que éstas trabajan en los límites del ámbito de
restricción de la libertad social, donde pese a la existencia de una conflictividad lesiva,
LA
Cuando falta la tipicidad subjetiva requerida conforme al tipo permisivo de que se trate, no habrá
justificación, aunque se hayan dado todos los elementos requeridos por el tipo objetivo de
justificación o permisivo.
Tampoco habrá tipicidad permisiva cuando falten los elementos objetivos de la justificación y
solo existan los subjetivos. Se tratara de un caso de error, es decir, del supuesto que se
denomina “justificación putativa”, que, en realidad, es un problema de error de prohibición.
OM
El fundamento genérico
genérico de los tipos permisivos
Hemos visto que la naturaleza última de las causas de justificación es la del ejercicio de un
derecho. No obstante, no cualquier ejercicio de derechos es una causa de justificación o tipo
permisivo. Los ejercicios de derechos que surgen de los tipos permisivos son a los que hace
referencia el inc. 4 del Art. 34 CP, porque los derechos que surgen de la CN, por ejemplo, no
.C
necesitan ser mencionados en dicho artículo, puesto que basta a su respecto el principio de
reserva. Los ejercicios de derechos que surgen de los tipos permisivos no son fomentados por el
DD
estado, sino solamente concedidos ante la imposibilidad de resolver la situación conflictiva de
otra manera.
Es difícil señalar un fundamento común para todos los tipos permisivos, aunque la teoría del “fin”
puede ser quizá un indicador: el fin de coexistencia demanda que en ciertas situaciones
LA
La justificación determina:
OM
“justificaciones específicas”. Los restantes se encuentran en cualquier parte del orden jurídico,
como resultado de la remisión que “el legítimo ejercicio de su derecho” del art 34 inc. 4 implica.
.C
ARTÍCULO 34.- No son punibles:
6º (Defensa propia). El que obrare en defensa propia o de sus derechos, siempre que concurrieren
las siguientes circunstancias:
DD
a) Agresión ilegítima;
Se entenderá que concurren estas circunstancias respecto de aquel que durante la noche rechazare
el escalamiento o fractura de los cercados, paredes o entradas de su casa, o departamento habitado
o de sus dependencias, cualquiera que sea el daño ocasionado al agresor.
Igualmente respecto de aquél que encontrare a un extraño dentro de su hogar, siempre que haya
FI
resistencia;
7º (Defensa de terceros). El que obrare en defensa de la persona o derechos de otro, siempre que
concurran las circunstancias a) y b) del inciso anterior y caso de haber precedido provocación
suficiente por parte del agredido, la de que no haya participado en ella el tercero defensor.
Fundamento.
Fundamento.
La legítima defensa tiene su fundamento en la máxima “el derecho no necesita ceder ante lo
ilícito”, o “nadie puede ser obligado a soportar lo injusto”. Pero, no solo se otorga un derecho de
defensa, sino también una facultad de ratificar el orden jurídico, procediendo el agredido de una
manera equivalente a como lo habría hecho el Estado en defensa de los bienes jurídicos
agredidos.
Aspecto objetivo
1) La agresión ilegítima:
ilegítima:
Tanto la agresión como la defensa deben ser conductas. No hay agresión cuando no hay
OM
conducta, como sucede cuando se trata del ataque de un animal. Ilegitima significa antijurídica, y
no puede ser antijurídico algo que no es conducta.
Por ello, la agresión debe partir de un ser humano. La agresión de un animal puede generar una
situación de estado de necesidad, pero no de legítima defensa. No es necesario que el agresor
.C
embista o que la acción sea violenta; por lo tanto, puede ser activa, o inclusive, omisiva.
Queda claro entonces que, contra ataques que no son conductas sólo cabe el estado de
DD
necesidad.
LA
y por lo tanto el agredido deberá intentar seriamente, por lo menos, eludir la agresión,
antes de hacer uso del derecho de defensa.
Cualquier bien jurídico puede ser objeto de una agresión, sin embargo, solo los bienes
personales (y no los colectivos) pueden ser defendidos utilizando la legítima defensa. Ej: no se
admite la defensa frente a la agresión a la patria, a la esencia de la nacionalidad, etc. Estos casos
están excluidos de las disposiciones de la legítima defensa y solo caben respecto de ellos los
medios institucionales previstos en la constitución.
OM
ya ha iniciado, pero se la impide cuando aún no ha tenido comienzo.
- La antijuridicidad de la agresión: la agresión es antijurídica cuando es contraria al derecho.
No se requiere que sea típica ni tampoco que constituya un delito. La contrariedad al
derecho se define desde dos puntos de vista diferentes: por una parte se piensa que la
agresión es antijurídica cuando el agredido no está obligado a tolerarla; por otra parte se
.C
la define como una acción no-autorizada. El último punto de vista es más restrictivo,
aunque en la práctica ambos criterios son difícilmente diferenciables en su alcance.
DD
La agresión debe ser:
a) Una conducta,
b) Antijurídica.
LA
El carácter antijurídico de la agresión excluye la posibilidad de una legítima defensa contra una
legítima defensa. Nadie puede defenderse legítimamente contra quien, a su vez, se está
defendiendo legítimamente.
FI
Por ello, nos dice Bacigalupo: “No habrá agresión antijurídica cuando el “agresor” obre
justificadamente”.
2) Necesidad de la defensa.
defensa
La defensa, para ser legitima, debe ser, ante todo, necesaria, es decir, que el sujeto no haya
estado obligado a realizar otra conducta menos lesiva o inocua en lugar de la conducta típica.
La necesidad debe siempre valorarse ex-ante, es decir, desde el punto de vista del sujeto en el
momento en que se defiende: quien dispara sobre el que le apunta se defiende legítimamente,
aunque después se descubra que el agresor le apuntaba con un arma descargada.
Por ejemplo: una mujer puede repeler un intento de violación con la muerte del agresor, si no
tiene otra forma de evitar el hecho con menores daños. Este es el sentido con el que debe
entenderse la expresión racional. La racionalidad significa adecuación de la defensa al fin de
repeler la agresión.
OM
Para establecer si la acción de defensa es necesaria o no, es preciso recurrir a un método
hipotético-comparativo: debe pensarse qué comportamientos podía ejecutar el agredido para
repeler la agresión o para impedirla y tomar en consideración aquél que habría causado menos
daños. Por ejemplo: X puede evitar la agresión de Y dándole con un bastón en la cabeza o
.C
utilizando un arma de fuego que lleva consigo; el menor daño para una defensa igualmente
efectiva, lo causaría con el bastón; luego, solo se debe admitir como defensa necesaria, la acción
de defenderse con el bastón.
DD
Como dice Bacigalupo, agredido no está obligado a huir. Solo cuando la agresión provenga de un
inimputable o de un niño estaría obligado a evitar la agresión de esta manera.
3) La provocación suficiente.
LA
justificados.
provocado suficientemente solo tiene el derecho limitado de defensa que se reconoce cuando el
que agrede lo hace en estado de inimputabilidad.
De todas las posibles conductas provocadoras, son desvaloradas como elemento negativo del
tipo permisivo, sólo las que presentan el carácter de suficientemente provocadoras. Lo suficiente
OM
motivo a la agresión, y que se desvalora como suficiente cuando hace previsible una
agresión, sin que a este efecto puedan tomarse en cuenta las características personales
antisociales del agresor.
.C
Es previsible el desencadenamiento de la agresión
Suficiente es cuando
Sin que para ello deban tomarse en cuenta los
caracteres personales antisociales del autor de la agresión
DD
LA
FI
OM
Ejemplo: Sujeto A y B, ambos con arma de fuego, tienen una riña, y cuando el sujeto A se da la
vuelta para marcharse, se gira bruscamente a los pocos metros y dispara al sujeto B, siendo en
ese momento inconsciente de que el sujeto B iba a dispararle hacer lo mismo, con lo que ha
ejecutado una defensa legítima, salvo por el hecho de que desconocía la existencia de la
situación de defensa, con lo que no cabe causa de justificación.
.C
2. Voluntad de obrar defensivamente
DD
El fin perseguido por el sujeto no tiene por qué ser la defensa. Aunque será necesaria la
presencia de una voluntad de defensa, vinculada a la consciencia que exista de la situación
defensiva. Así, una vez que el sujeto entre en conocimiento de la situación de defensa, bastará
con que haya voluntad defensiva, no siendo necesario un ánimo defensivo.
LA
Cabe aclarar que la finalidad de defenderse no tiene por qué ser alcanzada, es decir que la
legitimidad de la defensa no depende del éxito de la misma. Aunque se fracase y no se evite la
agresión, igualmente habrá defensa legítima.
FI
evitar la agresión y el que ésta habría causado. Sin embargo, esta regla reconoce excepciones:
Ejemplo: la defensa de la propiedad de una cosa de poco valor no autoriza a producir lesiones
graves al agresor (pongamos por caso, la pérdida de una mano), aunque éstas sean necesarias
para evitar que se apodere de la cosa, es decir, para evitar el hurto.
Defensa de terceros
Como es dable observar, la única diferencia que media entre la defensa propia y la de terceros es
respecto de la provocación: en tanto que quien provocó suficientemente no puede defenderse
legítimamente, puede hacerlo un tercero a condición de que no haya participado en la
OM
provocación. La circunstancia de que el tercero conozca la provocación no le inhabilita para
defender legítimamente al agredido.
.C
para algunos autores la defensa legítima del Estado es inadmisible, mientras que para otros es
viable.
DD
Zaffaroni, por ejemplo, se inclina por la viabilidad de este tipo de defensa y explica, citando a
Blasco y Fernández de Moreda: "una cosa es la defensa del Estado en su existencia y otra la
defensa del régimen político del Estado". La inadmisibilidad de la legítima defensa de terceros es
respecto de ésta última. La defensa de la existencia misma del Estado está perfectamente
LA
justificada, así por ejemplo quien la ejerce en caso de invasión cooperando por su cuenta con las
fuerzas armadas. Por otra parte, ninguna duda cabe de que se pueden defender legítimamente
bienes del estado de la misma forma en que pueden defenderse los de propiedad de particulares.
FI
(a) Se entenderá que concurren estas circunstancias respecto de aquel que durante la noche
rechazare el escalamiento o fractura de los cercados, paredes o entradas de su casa, o
departamento habitado o de sus dependencias, cualquiera que sea el daño ocasionado al
agresor.
(b) Igualmente respecto de aquel que encontrare a un extraño dentro de su hogar, siempre
que haya resistencia.
Por lo demás, en ambos casos son de aplicación las reglas generales de la legítima defensa: la
expresión “cualquiera sea el daño ocasionado al agresor” no puede entenderse como un
privilegio que abdica el límite de la racionalidad, sino como una ratificación de la general
exclusión de la ponderación de males del estado de necesidad.
OM
agresión y defensa.
.C
intruso opusiere resistencia.
Se entiende que media necesidad cuando el agente no dispone de otro medio menos ofensivo
para evitar la lesión. No obstante, los efectos son diferentes:
a. En la legítima defensa, la necesidad justifica, salvo que la lesión que se causa sea
aberrante en relación a la que se evita;
b. En el estado de necesidad justificante se justifica solo la lesión menor que la que se evita;
c. En la exclusión de la culpabilidad la conducta sigue siendo antijurídica (la necesidad no
justifica), el mal que se causa es igual o mayor que el que se evita y sólo exculpa cuando
no es exigible una conducta menos lesiva.
Está previsto en el inc. 3 del Art. 34 CP: “El que causare un mal por evitar otro mayor inminente a
que ha sido extraño”. Este artículo limita el estado de necesidad justificante al caso en que se
causa el mal menor para evitar el mayor, distinguiendo nítidamente esta justificación de la
Hay que destacar que, a diferencia de la legítima defensa, en que solo tiene valor correctivo para
los extremos en que excede la racionalidad, la ponderación de los males (el que se evita y el que
se causa) tiene una importancia capital.
El mal que se quiere evitar puede provenir tanto de una fuerza de la naturaleza como de una
acción humana.
El fundamento general del estado de necesidad justificante es, según la opinión dominante, el
OM
interés preponderante que con la acción se salva. Es decir, la necesidad de salvar el interés
mayor, sacrificando el menor, en una situación no provocada de conflicto externo.
Hay dos formas de estado de necesidad: estado de necesidad en el que colisionan intereses
jurídicos y estado de necesidad en el que colisionan deberes jurídicos.
•
.C
El estado de necesidad por colisión de intereses
La situación de necesidad.
DD
La situación que se encuentra en la base de todo estado de necesidad es una colisión de
intereses jurídicos, caracterizada por la inminencia de pérdida de uno de ellos y la posibilidad de
salvación del de mayor valor sacrificando el de menor valor.
LA
Esta situación solo dará lugar a justificación cuando no haya sido creada por el titular del interés
jurídico amenazado (Art. 34, inc. 3°).
El interés que se salva debe ser de mayor valor que el interés que se sacrifica. Para la
determinación de la mayor jerarquía de los intereses en juego resulta importante que la situación
de necesidad haya sido concebida como una colisión de intereses o, como lo hacía la opinión
tradicional, como una colisión debienes jurídicos.
a) Debe partirse de la relación jerárquica de los bienes jurídicos (por ejemplo: la relación
existente entre la vida y la propiedad, la verdad documental y el honor, etc.).
b) Debe considerarse luego el merecimiento de la protección del bien jurídico de más
jerarquía en la situación social concreta (por ejemplo: la vida de las personas después del
nacimiento es de mayor jerarquía –atendiendo a la pena con que los códigos penales
amenazan la lesión de cada uno de estos bienes- que la vida humana en germen; sin
embargo, la práctica del aborto para salvar la vida de la embarazada, ejecutándola contra
OM
la voluntad de la madre, no puede ampararse en el estado de necesidad.
c) La diferencia de valor de los intereses que colisionan debe ser esencial; no cualquier
diferencia, entonces, sino solamente una diferencia considerable.
En todo caso, está excluida del estado de necesidad una colisión de intereses en que la salvación
.C
de uno de ellos requiera la lesión de un bien jurídico altamente personal (por ejemplo: la vida, la
integridad corporal, el honor, etcétera).
•
DD
La necesidad de la acción
La acción por la que se sacrifica el interés de menor jerarquía debe ser necesaria para la
supervivencia del interés que se salva. Si no es necesario sacrificar el bien que resulta lesionado,
no puede admitirse la justificación. La necesidad de la acción debe juzgarse de la misma manera
LA
• El estado de necesidad solo puede invocarlo el que no esté obligado a soportar el peligro.
Por ejemplo, un soldado no podrá invocar el estado de necesidad en el que se encontraría su vida
FI
Ejemplo: como testigo en un proceso, A tiene la obligación de declarar lo que sabe, mientras que,
como médico (o sacerdote, abogado, etc.), tiene también obligación de guardar un secreto.
Una colisión de deberes de esta naturaleza podría darse, acaso, en el supuesto en el que un
médico tiene el deber de salvar la vida y a la vez tiene el deber de evitar sufrimientos inútiles al
paciente cuya vida se extingue, le aplica calmantes que implican un alto riesgo de acortarle la
vida (debe admitirse, sin embargo, que la solución en este caso es discutible).
El fundamento de la diferencia que acaba de señalarse reside en que el que cumple uno de los
OM
deberes que le incumbe, cumple de todos modos con el derecho y cumplir con el derecho no
puede ser antijurídico. Un sector minoritario de la doctrina sostiene, sin embargo, que en el
estado de necesidad por conflicto de deberes de igual jerarquía sólo puede admitirse una
exclusión de la culpabilidad, pero no de la antijuridicidad.
mayor. Estos bienes jurídicos deben ser susceptibles de ser salvados mediante una acción
justificada por estado de necesidad.
o El mal puede provenir de cualquier fuente, es decir, humana o natural, entre las que
cuentan las propias necesidades fisiológicas, como la sed o el hambre.
FI
o El mal debe ser inminente: inminente es el mal que puede producirse en cualquier
momento.
o El mal amenazado debe ser inevitable de otro modo menos lesivo.
o El mal causado debe ser menor que el que se quiere evitar: el mal menor se
individualiza mediante una cuantificación que responde fundamentalmente a la
jerarquía de los bienes jurídicos en juego y a la cuantía de la lesión amenazada a
cada uno de ellos.
o La ajenidad del autor a la amenaza del mal mayor implica que el mismo no se haya
introducido por una conducta del autor en forma que, al menos, hiciera previsible la
posibilidad de producción del peligro.
• Cuando el ejercicio del derecho recae sobre bienes jurídicos propios excluirá directamente
tipicidad Por ejemplo: no realiza el tipo de hurto el que se apodera de una cosa propia,
la tipicidad.
OM
ni viola domicilio alguno el que entra en su propia casa.
• Sin embargo, cuando el ejercicio de un derecho recaiga sobre bienes jurídicos ajenos
estaremos ante una cuestión referente a la justificación.
justificación En este caso, la justificación
dependerá de que se den los presupuestos del ejercicio del derecho. (Debe señalarse que
.C
autorizaciones de esta naturaleza, que permitan lesionar bienes jurídicos ajenos, que no
se superpongan con el estado de necesidad por colisión de intereses, son difíciles de
imaginar).
DD
De todo esto se deduce que las reglas específicas contenidas en nuestras legislaciones sobre el
cumplimiento de un deber y el ejercicio de un derecho son superfluas.
LA
Para que obre la causa de justificación, el autor debe actuar en torno a los límites que se le han
impuesto a su función, no puede excederse.
También existe el cumplimiento de un deber cuando una norma coloca a alguien en posición de
garante y debe actuar en consecuencia (cumpliendo el deber de garante).
• Bacigalupo:
Bacigalupo: El cumplimiento de un deber entrará en consideración como causa de
justificación solo cuando colisione con otro deber. Esta colisión de deberes no se
OM
diferencia en nada del estado de necesidad por colisión de deberes y, por lo tanto, debe
regirse por las reglas de éste cuando los deberes sean equivalentes.
• Luigi: Cuando hay contraposición o colisión de deberes, se aplica el estado de necesidad
como causa de justificación.
.C
G) El consentimiento del ofendido.
ofendido.(Bacigalupo)
Aunque los códigos penales latinoamericanos no incluyen, en general, disposiciones expresas
DD
respecto del consentimiento del ofendido, la doctrina le otorga existencia.
El código Argentino, por ejemplo, no tiene un Art. que lo regule, pero encontramos disposiciones
en la parte especial que nos permiten aludir al consentimiento, o deducir la existencia de esta
figura en nuestro derecho.
LA
OM
Consentimiento: es una causa de justificación. Excluye la antijuridicidad.
• Para Bacigalupo, la distinción entre el consentimiento que excluye el tipo y el que excluye
la antijuridicidad es en verdad incorrecta. En efecto, el consentimiento solo tiene
relevancia allí donde la lesión recae sobre un bien jurídico sobre el cual el sujeto pasivo
.C
tiene derecho de disposición (por ejemplo: nadie tiene derecho a disponer sobre el bien
jurídico vida, o sobre la seguridad del Estado, etc.). Por lo tanto, cuando se trata de bienes
DD
jurídicos disponibles (por ejemplo: la propiedad) la realización del tipo requerirá siempre
una lesión de la autodeterminación del sujeto pasivo a su ámbito de dominio autónomo.
En consecuencia, allí donde el consentimiento sea relevante excluirá en todos los casos la
tipicidad.
LA
Como la naturaleza del acuerdo es la de ejercicio de un derecho, de carácter subjetivo, éste solo
puede ser revocado conforme a las leyes que reglamentan su ejercicio, las que, en un buen
número de casos, impiden que lo sea en cualquier momento. Por el contrario, el consentimiento
es eminentemente revocable.
OM
El acuerdo, con su sola existencia, y aunque no fuese conocido por el autor, deja atípica la
conducta (porque elimina la afectación al bien jurídico). El consentimiento, por su parte, requiere
ser conocido por el autor (porque da lugar a la causa de justificación y su conocimiento forma
parte del aspecto subjetivo del tipo permisivo).
La falsa suposición del acuerdo puede dar lugar a un error de tipo que elimina el dolo (en el caso
.C
en que la falta de acuerdo es un requisito del tipo objetivo), o a un error de prohibición (en el
supuesto en que la falta de acuerdo determina la atipicidad conglobante). El consentimiento, al
DD
operar como límite a una causa de justificación, tiene por resultado excluir la antijuridicidad,
pero esto para nada afecta a la tipicidad de la conducta. Su desconocimiento hará que la causa de
justificación no opere, porque faltará el elemento subjetivo de la justificación, o aspecto
subjetivo del tipo permisivo, en tanto que su falsa suposición siempre dará lugar a un error de
LA
prohibición.
El exceso, por lo tanto, solo puede tener relevancia en el caso en el que el autor no sepa que se
excede, es decir, cuando haya obrado con un error respecto de la necesidad de la acción que
realiza. Si el autor se excede sabiendo del exceso no tendrá derecho a invocar esta circunstancia.
El caso del autor que obra con error sobre la necesidad, por lo tanto, debe tratarse de acuerdo
con las reglas del error sobre la prohibición (distinguiendo, por consiguiente, entre errores
evitables e inevitables), ya que el exceso en el ejercicio de una causa de justificación es un caso
especial dentro de los errores de prohibición.
H) El problema de la obediencia
obediencia debida.
debida.
“La obediencia debida es una situación que exime de responsabilidad
penal por delitos cometidos en el cumplimiento de una orden impartida por un
superior jerárquico; el subordinado, autor material de los hechos, se beneficia de esta eximente,
dejando subsistente la sanción penal de su superior.”
OM
Es decir, el inferior sería inimpunible, pero el superior que dio la orden es punible. La obediencia
debida desplazaría la autoría. La coacción proviene de la misma ley, que coacciona al sujeto a
obedecer al superior.
Naturaleza Jurídica:
•
Jurídica:
.C
DD
Zaffaroni: hay que eliminar a la obediencia debida de las causas justificantes autónomas
del Art. 34 CP, porque goza de una autonomía legislativa sobreabundante, pues no es una
institución unitaria, sino un conjunto de instituciones varias.
• Ramos y Gómez: encuadran a esta figura como el cumplimiento de un deber.
•
LA
cumplimiento de un deber.
• Meyer: hay inculpabilidad por error invencible.
• Bacigalupo: lo ubica en la culpabilidad y dice que no es un caso de error, sino una
eximente de pena.
• Fallo de la CSJN: la doctrina, a fin de ubicar sistemáticamente a la "obediencia debida", ha
recorrido todos los estratos de la teoría del delito, contemplándola como una causa de
justificación o de inculpabilidad y dentro de esta categoría, como variante de la coacción,
o una especie de error. Empero, la solución que corresponde que los jueces den al
problema, deberá elaborarse frente al caso concreto sometido a su conocimiento,
evaluando los hechos acreditados en la causa y teniendo en cuenta las circunstancias
históricas en que se produjeron, sin atarse a los márgenes dentro de los que ocurrieron
aquéllas.
OM
colisión de deberes.
Los principios del Estado de Derecho excluyen de manera absoluta el cumplimiento de órdenes
antijurídicas y, ni que decirlo, de órdenes constitutivas de hechos delictivos (por ejemplo:
torturar, matar, privar ilegalmente de la libertad, etc.). La exigencia de estos casos de un exceso
.C
por parte del que cumple la orden antijurídica y delictiva para fundamentar su responsabilidad
criminal es totalmente incompatible con la idea fundamental del Estado de Derecho.
DD
Como es claro, los casos de error del que cumple la orden sobre la obligación de obedecer se
rigen por las reglas del error de prohibición.
La antijuridicidad disminuida.
disminuida. (Zaffaroni Copy
Copy-
-paste
paste))
LA
Suele afirmarse que no hay grados de antijuridicidad, aunque hay grado de injusto, es decir, que
se puede hablar de un injusto menor o mayor, pero no se puede hablar de una antijuridicidad
mayor o menor.
FI
A nuestro juicio, tanto la antijuridicidad como la culpabilidad son características graduables. Así
como puede decirse de un camino que es curvo, será más o menos curvo según el grado de
curvatura que presente, del mismo modo se puede decir que un injusto era mayor o menor
Esta disposición ha dado lugar a las interpretaciones más dispares. Para unos son conductas
culposas. Para otros son conductas dolosas, solo que sin culpabilidad disminuida. Para nosotros
OM
Hay justificación incompleta cuando falta algún requisito de la justificación, en tanto que hay
exceso en la justificación cuando se pasan los límites de la misma. Para exceder los límites de
algún ámbito es necesario haber estado antes dentro de ese ámbito. Quien en ningún momento
estuvo dentro del tipo permisivo, en modo alguno puede exceder sus límites. No excede los
.C
límites de la legítima defensa quien contesta un cachetazo con un obús, sino que nunca estuvo
dentro de los límites de la legítima defensa y jamás puede pretender que se le aplique el Art. 35
CP: Es más antijurídica la conducta que comienza y termina siendo antijurídica, que la que
DD
comienza siendo conforme a derecho y termina siendo antijurídica.
LA
FI
A) La culpabilidad.
culpabilidad.
Concepto.
Concepto.
La culpabilidad, reprochabilidad o responsabilidad es la reprochabilidad del injusto al autor.
OM
Culpable es, este sentido, aquel que, pudiendo, no se ha motivado ni por el deber impuesto por
la norma ni por la amenaza penal dirigida contra la infracción a ella.
.C
¿Por qué se le reprocha no haberse motivado en la norma? Porque le era exigible que se motivase
en ella.
DD
Un injusto, es decir, una conducta típica y antijurídica, es culpable, cuando al autor le es
reprochable la realización de esa conducta porque no se motivó en la norma, siéndole exigible,
en las circunstancias en que actuó, que se motivase en ella. Al no haberse motivado en la norma
LA
cuando podía y le era exigible que lo hiciese, el autor muestra una disposición interna contraria
al derecho.
hiciese.
Una conducta está justificada cuando el derecho le concede al autor un permiso para que en esa
circunstancia actúe de esa manera. Hemos visto también que la conducta justificada sólo está
permitida, pero no está fomentada y menos ordenada por el derecho.
Ante la conducta incurable puede haber una legítima defensa o cualquier otra causa de
justificación, caben las reparaciones civiles, las sanciones administrativas, etc. Cuando media una
legítima defensa, un estado de necesidad o cualquier ejercicio legítimo de derecho, la conducta
En la justificación hay una situación conflictiva que el derecho debe resolver dando un permiso,
porque de no hacerlo resultaría perjudicado su objeto general. En la inculpabilidad hay una
situación en la que solo se excluye el reproche porque el autor no se le puede exigir otra cosa,
pero reconociendo perfectamente que su conducta afectó la finalidad general del orden jurídico.
OM
hoy en dos diferentes niveles: en uno de ellos funciona el “nullum crimen sine culpa”, es decir,
que no puede haber delito si al menos no es culposo; en otro, opera la condición de
reprochabilidad para que haya delito. El primero es un problema de tipicidad y el segundo es el
requerimiento general de la culpabilidad normativa en el delito. Nos toca ocuparnos aquí de este
.C
segundo requerimiento.
Si leemos nuestro CP, veremos que no resiste el más superficial análisis de sus disposiciones
desde un punto de vista determinista. Si suprimimos la libertad de la voluntad veremos que
LA
nuestro CP es inexplicable.
Es la relación
No resuelve el problema de la culpa, el de la
Teoría psicológica psicológica entre la
imputabilidad y el de la necesidad inculpante.
conducta y el resultado.
Otra cuestión es la de saber si la culpabilidad personal debe ser una culpabilidad por la comisión
de un hecho o por la personalidad del autor. ¿Juzgar al autor por lo que hizo o por lo que es?
OM
Entre ambos extremos surgieron, bajo la influencia de la idea de prevención especial, las teorías
de la culpabilidad por conducción de la vida (Mezger) o las de culpabilidad por la decisión de la
vida (Bockelmann) que reconocen una decisión libre en el comienzo de la carrera delictiva. Estas
teorías son rechazadas, en la actualidad, porque esa decisión libre que fundamentaría la
culpabilidad no es demostrable en un proceso penal.
.C
La cuestión de la culpabilidad debe tratarse independientemente de las polémicas relativas a la
libertad y al determinismo. NI el libre albedrío ni el determinismo pueden alegar una prueba
DD
decisiva de sus puntos de vista.
El sistema del derecho penal debe fundarse en la culpabilidad por la comisión del hecho ilícito,
por lo tanto, la culpabilidad será siempre un juicio sobre un hecho aislado.
LA
La llamada co-
co-culpabilidad.
culpabilidad.
Todo sujeto actúa en una circunstancia dada y con un ámbito de autodeterminación también
dado. En su personalidad misma hay una contribución a ese ámbito de autodeterminación puesto
que la sociedad nunca tiene la posibilidad de brindar a todos los hombres las mismas
FI
que aquí hay una co-culpabilidad con la que debe cargar la sociedad misma. Se pretende que
este concepto de co-culpabilidad es una idea introducida por el derecho penal socialista.
Creemos que en nuestro CP hay una clara aplicación del principio de co-culpabilidad en el Art. 41
CP, cuando se exige que para graduar la pena se tome en cuenta “la miseria o la dificultad de
ganarse el sustento propio necesario y el de los suyos”.
Elementos (Requisitos)
La culpabilidad está estructura por tres elementos que se tienen que dar simultáneamente para
que el sujeto sea culpable:
La capacidad de motivación en sentido estricto o imputabilidad requiere que el autor haya podido
comprender la desaprobación jurídico-penal del hecho y haya podido comportarse de acuerdo
con esa comprensión (Art. 34, Inc. 1° CP).
OM
La cuestión de la determinación de la capacidad de motivación no es una cuestión médica, sino
estrictamente jurídica. El tribunal no está obligado a ajustarse en este punto a lo que dictaminen
los peritos médicos que lo asesoren.
.C
Las definiciones legales de la capacidad de motivación hacen referencia a dos elementos:
• Fijan los presupuestos biológicos (por ejemplo: enfermedad mental, etc.) que condicionan
DD
la exclusión de la capacidad;
• Establecen las consecuencias normativas que deben producir tales presupuestos
psicológicos (incapacidad de comprender la desaprobación jurídico-penal y de dirigir el
comportamiento de acuerdo a su comprensión).
LA
La enfermedad mental.
mental
Dentro de este concepto caben, ante todo, las psicosis en sentido médico, tanto endógenas
Pero, además, se consideran incluidas en este concepto las psicopatías graves y las neurosis en la
medida en que sean equiparables en sus efectos a las psicosis.
El desarrollo
desarrollo mental insuficiente.
Esta categoría se refiere a los casos de insuficiente desarrollo de la inteligencia, como son
especialmente las oligofrenias (debilidad mental, imbecilidad e ideócea, según el grado de
desarrollo alcanzado).
Puede ser patológica o fisiológica. Entre estas últimas entra el sueño. De especial importancia en
esta categoría son la ebriedad y las intoxicaciones con drogas.
OM
Dice Zaffaroni que, cuando se encuadra una conducta en el embudo de la teoría del delito, no se
puede excluir per se la culpabilidad de quien lo cometió en estado de inconsciencia.
La doctrina -desde un voto de Frías Caballero de los años 60- entiende que, en principio, no
pasa el test de culpabilidad quien cuando incurre en delito sufre de insuficiencia o alteración de
.C
sus facultades mentales. Esto abarca tanto al psicótico o al oligofrénico como al drogadicto y al
borracho. No será culpable el que esté incapacitado (accidentalmente o no)de tal manera que no
haya podido prever el resultado antijurídico que, finalmente, se iba a producir.
DD
Sin embargo, si -por ejemplo- el autor se emborracha habiendo podido anticipar que va a causar
un daño, la disminución de facultades mentales no excluiría la culpabilidad. La propia
negligencia del autor, al llevar adelante la acción que desembocó en la causa del delito
LA
(emborracharse) es la que hace nacer la responsabilidad penal por el delito que cometió en un
momento que podría ser de inimputabilidad. En este supuesto, el autor estaría cumpliendo los
requisitos del tipo culposo.
FI
Por otro lado, si yo me emborrachara sabiendo que cuando entre en ese estado voy a cometer un
delito, estaría directamente en un tipo doloso. La causa es dolosa, el autor se emborrachó para
hacerlo, y por tanto, el delito es doloso, aunque cuando lo cometa esté en estado de
inimputabilidad.
Esto son las actionesliberae in causa: aquellas en las que el agente no es libre en el momento del
hecho, pero sí en su causa, por lo que la culpabilidad se traslada al momento previo.
2. Conciencia de antijuridicidad
OM
En la práctica esto significa que no es necesario que el autor haya tenido o podido tener
conocimiento de la especie de pena que amenaza al hecho (por ejemplo: saber si es pena de
prisión o de multa) ni de la cuantía de la pena amenazada (por ejemplo: conocer el marco penal,
es decir, el mínimo y el máximo de la amenaza). Si bien el conocimiento de la antijuridicidad
.C
material no es suficiente para el conocimiento exigido por la culpabilidad es, sin embargo, un
indicio del conocimiento potencial de la desaprobación jurídico-penal del acto.
DD
La duda sobre la punibilidad (conciencia eventual de la punibilidad) puede dar lugar a una
atenuación de la gravedad de la culpabilidad, si de haber carecido el autor totalmente de la
conciencia de la punibilidad el error hubiera sido inevitable.
tenía capacidad de comprender y de dirigir sus acciones, se tornan aplicables las reglas de la
actio libera in causa. De acuerdo con ellas, el juicio sobre la capacidad de motivación debe ser
hecho al momento en el que el autor pone la causa del estado posterior.
Ejemplo: el autor ingiere una considerable cantidad de alcohol para darse ánimos, a fin de
cometer una violación, y, cuando realiza la acción típica, está en un estado grave de perturbación
de la conciencia que excluye su capacidad de motivación; la capacidad relevante debe juzgarse
en el momento en que el autor voluntariamente se puso en el estado de incapacidad de
motivación.
La actio libera in causa puede llevarse a cabo dolosamente, cuando el autor se pone en un estado
de incapacidad para cometer el delito (dolo directo) o cuando se representa seriamente la
posibilidad de que éste tenga lugar y se conforma con ello (dolo eventual). Asimismo, culpa
OM
.C
DD
LA
FI
El error que recae sobre los elementos que son exigidos en el tipo objetivo es el error de tipo,
que invariablemente excluye la tipicidad dolosa de la conducta. Cuando el error de tipo es
invencible elimina cualquier tipicidad, en tanto que, cuando es vencible, puede dar lugar a
tipicidad culposa, en caso de que los extremos de la misma estén dados.
El error de prohibición no pertenece para nada a la tipicidad ni se vincula con ella, sino que es un
puro problema de culpabilidad. Se llama error de prohibición al que recae sobre la comprensión
de la antijuridicidad de la conducta. Cuando es invencible, es decir, cuando con la debida
diligencia el sujeto no hubiese podido comprender la antijuridicidad de su injusto, tiene el efecto
OM
de eliminar la culpabilidad. Cuando es vencible, para nada afecta a la tipicidad dolosa o culposa
que ya está afirmada al nivel correspondiente, teniendo solo el efecto de disminuir la
reprochabilidad, es decir, la culpabilidad, lo que se traduce en la cuantía de la pena que,
siguiendo a Zaffaroni, puede disminuirse hasta donde la ley autoriza: hasta el mínimo legal
.C
según el Art. 41 CP, o aplicando disposiciones especiales, como la del párr. 2 del Art. 80 del CP
(Circ.Extraord. de atenuación). Bacigalupo, en cambio, propone aplicar la pena siguiendo el Art.
35 CP.
DD
El error de tipo asume diversas formas:
Error directo:
directo: Será directo el error de prohibición si el sujeto desconoce el contenido de la
norma penal. Puede suceder, incluso, que tenga un conocimiento completo de la norma
LA
pero que, por razones ulteriores, no la crea vigente o que la interprete mal.En todos estos
casos procederá la aplicación de las reglas del error de prohibición.
a. El autor no conoce en cuanto tal la norma o ignorantia legis.
b. El autor conoce la norma pero la considera no vigente.
FI
Tanto el error de prohibición directo como el indirecto tienen los mismos efectos, según sean
OM
vencibles o invencibles. Si el error es invencible excluirá la culpabilidad y con ella la
responsabilidad penal. Por el contrario, si el error es evitable, solo cabe la posibilidad de una
atenuación de la pena.
.C
requisitos de la evitabilidad son los siguientes:
mediante reflexión. Pero en la mayoría de los casos, cuando el autor haya tenido razones
para pensar en la punibilidad, la forma de aclarar la situación jurídica será la información
obtenida a través de fuertes confiables.
Resumiendo: el error sobre la desaprobación jurídico-penal será evitable si el autor tuvo razones
para pensar en la punibilidad de su hecho y dispuso de los medios adecuados para alcanzar el
conocimiento de la punibilidad.
La falsa suposición de la
Error que afecta el
existencia de un permiso que la ley no
conocimiento de la antijuridicidad, que
Indirecto: que recae sobre la otorga, o en
puede ser
permisión de la conducta, y que puede
consistir en
La falsa admisión de una
situación de justificación que no está
dada (justificación putativa).
OM
Error de comprensión, que afecta la comprensión de la antijuridicidad.
Elimina la culpabilidad y el
Si es invencible
injusto no llega a ser delito.
Efectos el error de
.C
prohibición, de cualquier clase que
Reduce la culpabilidad y hay
fuere
Si es vencible delito, pudiéndose solo rehuir la pena
hasta el mínimo legal establecido para
el delito de que se trate.
DD
**Cuando el Error de prohibición es vencible, Zaffaroni propone usar el Art. 41 CP para adecuar la pena,
mientras que Bacigalupo propone aplicar la pena siguiendo el Art. 35 CP. **
Se excede en el ejercicio de una causa de justificación el que realiza una acción típica que no es
necesaria para la salvación del bien jurídico (Art. 35 CP).
El exceso, por lo tanto, solo puede tener relevancia en el caso en el que el autor no sepa que se
FI
excede, es decir, cuando haya obrado con un error respecto de la necesidad de la acción que
realiza. Si el autor se excede sabiendo del exceso no tendrá derecho a invocar esta circunstancia.
El caso del autor que obra con error sobre la necesidad, por lo tanto, debe tratarse de acuerdo
con las reglas del error sobre la prohibición (distinguiendo, por consiguiente, entre errores
evitables e inevitables), ya que el exceso en el ejercicio de una causa de justificación es un caso
especial dentro de los errores de prohibición.
Al error sobre las condiciones objetivas del tipo permisivo, se atribuye en doctrina diferentes
efectos, según se trate de un error vencible o invencible. Actualmente existe una extendida
coincidencia en considerar al error invencible como un supuesto de error de prohibición, que
excluye la culpabilidad. En cambio, respecto al error vencible sobre los presupuestos fácticos de
OM
una causa de justificación se sostienen distintas posiciones a las que se las conoce como: “teoría
estricta de la culpabilidad”; “teoría limitada de la culpabilidad”; “teoría estricta del dolo”; “teoría
limitada del dolo”; por citar sólo las más conocidas. Oportunamente se analizarán cada una de
estas concepciones.
.C
Situaciones diferentes al error de prohibición
DD
Error sobre la punibilidad
En este tipo de error se sabe delictivo el acto pero se cree no punible por alguna razón de
exclusión de pena.Son situaciones diferentes al error de prohibición.
Ejemplo: Quien hurta dinero a su hermano creyendo que está exento de pena por el vínculo de
LA
parentesco, cuando en realidad tal exención sólo se da si los hermanos viviesen juntos (art. 185,
inc. 3 del C.P.).
Delito putativo
En el delito putativo, el agente también se halla en un error. Pero el equívoco consiste en creer
que la conducta que realiza está penalmente prohibida, cuando en realidad no lo está. El delito
putativo constituye un “error de prohibición al revés”.
Ejemplo: Quien comete adulterio pensando que aún tal conducta es delictiva, comete un delito
putativo al hallarse en un error de “prohibición al revés”.
Error de subsunción
Tampoco tiene relevancia penal el llamado error de subsunción, el cual consiste en un equívoco
del autor respecto a la tipicidad de su acción, cree que encuadra en un tipo penal y en realidad se
subsume en otro.
Ejemplo: “A” rompe una vidriera y se lleva prendas de vestir. “A” piensa que su conducta es
OM
configurativa del delito de hurto (art. 162 del C.P.), cuando en verdad, al haber ejercido fuerza
sobre las cosas ha cometido el delito de robo (art.164 del C.P.).
No tiene ninguna incidencia esta clase de error en la medida en que el agente conocía
perfectamente lo que hacía, siendo su error producto de una falta de formación jurídica,
totalmente irrelevante desde el punto de vista penal. Será castigado por el delito cometido (robo)
.C
y no por el que él creyó cometer (hurto).
Los errores de subsunción no deben confundirse con supuestos de error sobre circunstancias
DD
agravantes o atenuantes en los que el autor desconoce que se dan o supone falsamente su
presencia, al momento de llevar a cabo su acción, circunstancias que forman parte del tipo
objetivo. Estas situaciones tienen distintas soluciones según se trate de atenuantes o agravantes.
LA
agente abarcó los elementos del tipo base, se podrá subsumir en él.
Ejemplo: Quien mata a otro sin saber que era su padre, desconoce la circunstancia
agravante del vínculo de parentesco, por lo que su conducta será atípica del parricidio (art.
80, inc. 1 del C.P.), pero al saber que mataba a un hombre, tenía los conocimientos
suficientes para el dolo del homicidio simple (art. 79 del C.P.).
OM
subjetivas en congruencia típica). Sólo se podría considerar que, al haber querido cometer
el tipo base, el cual no se consumó por circunstancias ajenas a su voluntad, habría,
además, una tentativa. Por lo tanto, se lo podría castigar por el delito atenuado en
concurso ideal con tentativa inidónea del delito base.
b. Por falsa suposición de
de una circunstancia atenuante: En tal caso, el autor responderá por la
.C
el delito atenuado. La razón para resolver de esta manera, finca en que el sujeto ha tenido
la comprensión de la criminalidad del acto propia del delito atenuado y no la del que
DD
realizó. En tal caso hay una menor culpabilidad del autor, por lo que, habrá que aplicarle la
pena del delito atenuado. Si el delito que cometió, admite la forma culposa, se lo podría
castigar por tal delito en concurso ideal con el atenuado.
LA
FI
El derecho penal dentro de sus lineamientos exige de los individuos que conviven bajo sus reglas
un determinado comportamiento, proceder que será posible en tanto y en cuanto ese sujeto
pueda inclinarse a cumplimentar lo dispuesto, aun cuando puedan ser exigencias difíciles, más
no imposibles.
Determinándose el nivel a partir del que se le va a pedir cuentas al individuo sobre la base de
criterios objetivos concretos, aunque siempre bajo el vórtice de la persona individual, la cual
será, la que de un modo u otro se comportara en consecuencia en el hecho en concreto.
OM
Ejemplo claro de lo anterior es el supuesto de dos individuos que se quedan atorados en un
elevador, siendo uno de ellos claustrofóbico, por lo que al cabo de unos minutos e impulsado por
su fobia, uno de los individuos empieza a darle patadas al elevador para intentar salir,
ocasionándole daños de consideración a la maquina, de lo cual podemos decir en este supuesto,
que el derecho no le podía pedir al sujeto que tenía esa afección en particular, que se comportara
.C
de otra manera, pues aunque se le pudiera exigir a los sujetos en general que esperaran a que se
arreglara el problema del elevador, a una persona con esa problemática de los espacios cerrados
DD
no le era posible la espera, contrario a lo que se pedía de su compañero de encierro, que no tenía
problemas y podía exigírsele una conducta diferente.
Es preciso añadir que este elemento no concurre cuando se presentan en el caso en concreto
causas que neutralizan las posibilidades de actuación del sujeto sobre todo porque no se le hace
LA
reproche al autor por existir una causa que le impide al comisor actuar diferente a ese
comportamiento dañoso.
FI
La regulación legal del estado de necesidad exculpante se halla en el inc. 2 del Art. 34 del CP, en
la parte que dice “el que obrare violentado por… amenazas de sufrir un mal grave e inminente”.
Este supuesto suele considerarse como limitado a la coacción, es decir, al supuesto en que la
amenaza proviene de una conducta humana: “te mato si no matas”.El que bajo amenaza de
muerte es obligado a integrar un pelotón de fusilamiento, por ejemplo. Este supuesto de estado
de necesidad exculpante proveniente de la acción de un tercero, que suele llamarse “vis
compulsiva”, para distinguirlo de la “vis absoluta” o fuerza física irresistible, contemplada en la
primera parte del mencionado inc. 2 y que, como vimos, es un supuesto de ausencia de
OM
conducta.
El inc. 2 del Art. 34 del CP requiere que el mal amenazado sea grave e inminente, sin que exija
que sea exactamente igual que el mal que se evita. Lógicamente, no puede haber una
desproporción notoria entre el mal que se evita y el que se causa, porque en tal caso la magnitud
.C
del bien salvado no podrá tomarse en cuenta para disminuir el injusto cometido.
Por “mal grave” debe entenderse en su relación respecto “al mal causado”, pues que también se
DD
requiere una cierta ponderación de males y también, “grave conforme a las circunstancia
personales del amenazado”, puesto que no cualquier nimiedad da lugar a una inculpabilidad. En
cuanto a la inminencia, debe entenderse por tal el requerimiento de que el mal pueda producirse
en cualquier momento y en forma tal que no deje posibilidad temporal de arbitrar otra solución
LA
menos lesiva.
En todos los casos de necesidad exculpante hay un menor injusto, porque siempre se salva un
bien, lo que da lugar a que la exigibilidad de evitar el injusto cometido sea menor.
FI
Para que esté reducido el injusto y, por ende, sea menor la exigibilidad de evitarlo, hasta el punto
de no alcanzar el umbral mínimo necesario para la formulación del reproche de culpabilidad, es
necesario que el autor no se halle en ninguna particular situación jurídica de la que se derive el
Dentro de nuestro esquema, que se maneja con un concepto personal del injusto, es admisible
que el interpuesto para la comisión de un acto antijurídico actúe justificadamente. Cuando el
obligado actúa justificadamente, el agredido no podrá defenderse contra el (porque no se admite
causa de justificación contra causa de justificación), pero podrá actuar en estado de necesidad
exculpante.
OM
Art. 34 (necesidad justificante)
realizar (coacción justificada)
.C
se obliga a realizar (coacción
exculpante) Que además de la coacción
contempla las necesidades
provenientes de hechos de la
naturaleza.
DD
En todos los supuestos de estado de necesidad exculpante, el injusto cometido debe ser una
necesidad, es decir, deben ser supuestos en que no se pueda exigir justificadamente que el autor
realice otra conducta menos lesiva.
LA
motivación.
Inversamente, cuando el sujeto supone falsamente que se halla en una situación de necesidad
inexistente, se tratara de un caso que debe resolverse como si fuese un error de prohibición,
aunque no lo es totalmente.
El autor sea inculpable cuando el error sea invencible, porque no habrá podido comprender la
criminalidad de su conducta, puesto que la culpabilidad también forma parte de la criminalidad y
le era imposible reconocer que actuaba culpablemente. En caso de ser vencible el error, reducirá
la exigibilidad, lo que deberá tomarse en cuenta a los efectos de la pena.
A) El concepto de autoría.
autoría.
Siempre que hay una concurrencia de personas en un evento, cabe distinguir entre las que son
autores y otras que participan en el mismo, pero que no son autores.
OM
En este segundo sentido restringido o estricto, participación es participación en la conducta del
autor, que puede tener la forma de instigación (cuando se decide a alguien a la comisión de un
injusto o de un delito) o de complicidad (cuando se coopera con alguien en su conducta
delictiva).
.C Participes Instigadores
Cómplices
DD
Naturaleza de los conceptos de autor y participe.
participe.
Los conceptos de autor, cómplice e instigador no son conceptos creados por el derecho penal,
sino tomados de la vida cotidiana, de la realidad de lo óntico. El concepto de autor en una
conducta de escribir un libro no se distingue fundamentalmente del concepto de autor en una
LA
conducta de escribir una carta injuriosa. Llamamos cómplice al que coopera con el autor, al que
presta ayuda, y el concepto de cómplice en el derecho penal no es distinto del que manejamos
cuando nos referimos a los colaboradores en un prólogo y les agradecemos su ayuda.
FI
Tampoco el que nos decide con el consejo oportuno, o con un ofrecimiento de dinero, a
emprender una obra, como concepto se distingue del que nos decide a cometer un delito. El que
nos ayuda y el que vuelca nuestra voluntad hacia una empresa cualquiera, toman el nombre de
Resulta obvio que el CP recepta la distinción entre el autor y el cómplice, lo que emerge del Art.
47, que es donde usa la palabra “complicidad”, indicando que cómplice es el que coopera con el
autor.
El Art. 83 pena al “que instigare a otro al suicidio”; el 99, al que “instigare a otro a provocar o a
aceptar un duelo”, y el 209 al que “instigare a cometer un delito”. No nos dice que es la
instigación, pero por la forma en que usa la expresión en la parte especial deducimos que no
altera el concepto semántico de “inducir a alguien a hacer algo”.
OM
autor porque le faltan los caracteres típicos y que tampoco puede ser instigador, porque falta
una conducta de la que sea accesoria la instigación.
Los efectos de fijar la pena, el CP se limita, en los Art. 45 y 46, a establecer que la pena del delito
se aplicara a los ejecutores, a los determinadores y a los cooperadores necesarios, en tanto que
.C
la escala reducida se aplicara a los cooperadores no necesarios.
Ejecutores Autores
DD
Determinadores Instigadores
Cooperadores Cómplices
LA
Teoría subjetiva
Para esta teoría, la distinción entre cómplices y partícipes no es posible en el nivel objetivo, y por
ello buscan esta diferenciación en el plano subjetivo.
FI
En consecuencia, para esta teoría, es autor el que hace un aporte al hecho queriéndolo como
suyo (con ánimusautoris) y cómplice el que quiere el hecho como ajeno (obra con ánimussocii).
Esto plantea la cuestión de cuándo se quiere el hecho como propio. La respuesta se apoyó en el
interés del partícipe: quiere el hecho como propio quien tiene un interés en el resultado
perseguido. De esta manera, lo decisivo para determinar la autoría no es el aporte, ni la forma
exterior de comportamiento, sino la voluntad.
Los resultados a los que conduce esta teoría son insatisfactorios básicamente porque la acción
típica depende de la exclusiva voluntad del autor y cualquier aporte objetivo puede ser una
acción típica. Así, en el caso del infanticidio, en el que la madre pide a la hermana que mate al
niño ahogándolo, la hermana resultará cómplice y la madre autora.
Este punto de vista presupone que sólo es posible realizar la acción ejecutiva por sí mismo: el
OM
que se vale de otra persona, por ejemplo, de un demente, para matar a otro, no realiza un
comportamiento que exteriormente tenga la forma de una acción de matar.
En el caso del médico que con intención de matar al paciente pone una sobredosis en la jeringa,
que entrega a la enfermera para que, ignorante del contenido de la inyección, la aplique a la
víctima, esta teoría se encuentra en un callejón sin salida.
.C
En efecto: el médico no es autor porque no realiza una acción de matar; tampoco es instigador
porque la enfermera obra sin dolo y la instigación requiere la creación del dolo en el autor; por lo
DD
tanto, solo queda la posibilidad de considerarlo cómplice de la acción de autoría de la enfermera.
Como para esta teoría el dolo es un elemento de la culpabilidad, por la época en que fue
formulada, la enfermera sería absuelta, de todos modos, por falta de culpabilidad.
LA
Si la teoría formal-objetiva quiere utilizarse en el marco de una teoría personal de lo ilícito (para
la que el dolo es un elemento de lo ilícito) el médico ni siquiera podría ser punible como
cómplice, pues no ha tomado parte de un hecho principal doloso.
FI
Estos problemas también se extienden a otros casos, por ejemplo, en la coautoría: si dos
personas se ponen de acuerdo en envenenar a una tercera no serían coautoras si uno pone el
veneno en la sopa y el otro se encarga de distraer a la víctima para que no perciba el sabor
Teoría final-
final-objetiva: o del dominio del hecho.
hecho.
De acuerdo con esta teoría, el autor es quien tiene el dominio del hecho, mientras que los que
toman parte, sin dominar el hecho, son partícipes.
El concepto del dominio del hecho no es susceptible de ser definido de la misma manera que los
anteriores, es decir, mediante una descripción de sus elementos. Se trata de un concepto
regulativo para la interpretación del sentido del hecho. Solo en presencia de todas las
circunstancias puede establecerse quién o quiénes tuvieron el dominio del hecho.
OM
Según esta concepción de la autoría, son necesarios dos elementos en el autor:
El dominio del hecho puede presentarse de diferentes maneras: como dominio de la acción
(consiste en la realización de la propia acción), como dominio de la voluntad (que consiste en
dominar el hecho a través del dominio de la voluntad de otro; casos de autoría mediata), o como
FI
dominio funcional del hecho (que consiste en compartir el dominio funcionalmente con otro u
otros; casos de coautoría).
En todos los casos es fundamental que el autor haya obrado con dolo;
dolo el que obra sin dolo carece
del dominio del hecho. Por lo tanto, el problema de la distinción entre autores y partícipes sólo
se presenta en los delitos dolosos. En los delitos culposos son autores todos los que infringen el
deber de cuidado que caracteriza lo ilícito del delito culposo.
El concepto de dominio del hecho presenta algunas particularidades en los siguientes casos:
• Cuando el tipo penal requiere para la autoría un especial elemento subjetivo de la autoría:
autoría
por ejemplo, ánimo de lucro; aquí será preciso que, además del dominio del hecho, se
tenga este elemento subjetivo.
OM
Algunos autores, como Roxín, distinguen entre delitos de dominio y delitos de infracción de
deber. En estos últimos piensan que el criterio del dominio del hecho no resulta apropiado para
caracterizar la autoría. Dentro de los delitos de infracción del deber (delitos especiales propios,
delitos culposos y delitos de omisión) lo decisivo para la autoría sería la infracción del deber y no
.C
el dominio del hecho.
Con respecto a los delitos de omisión y a los culposos hay un acuerdo general: la teoría del
DD
dominio del hecho considera que éstos están excluidos de su explicación y reconocen reglas
específicas. Con relación a los delitos especiales propios, la teoría del dominio del hecho recurre
al llamado dominio social del hecho, según el cual solo tiene dominio del suceso el que ostenta
la calificación jurídica requerida por el tipo para la autoría.
LA
De esta manera se llega a los mismos resultados prácticos de la teoría de los delitos de infracción
de deber: puede considerarse autor de un prevaricato al que hace confeccionar la sentencia a
otro que tiene el dominio “material” del hecho, sin tener la calificación de juez.
FI
En los llamados “delicta propia” solo puede ser autor el que tiene los caracteres que están
exigidos al autor en el tipo objetivo. Así, no puede ser autor de cohecho pasivo el que no sea
funcionario público, ni puede cometer prevaricato judicial el que no sea juez, etc.
Estos huecos que se producen entre la autoría y la participación y que nuestro CP soluciona
creando un tipo de determinación a cometer delito y penando con la pena del delito, obedecen a
que los delitos de propia mano y los delicta propia son imitaciones de carácter legal al principio
del dominio del hecho como caracterización de la autoría.
Individual.
Como vimos, según la teoría actualmente más aceptada, el autor es quien tiene el dominio del
hecho.
Coautoría
Coautoría.
autoría. (Bacigal
Bacigalupo
upo))
upo
Coautor es el que tiene juntamente con otro y otros el codominio del hecho. También el coautor
debe tener todas las características exigidas para el autor. Es decir que si se exige, por ejemplo,
ser funcionario, el coautor tiene que ser también funcionario.
OM
El codominio del hecho en la coautoría presupone la comisión común del hecho. De acuerdo con
ello, habrá codominio cuando los coautores se dividan funcionalmente las tareas de acuerdo con
un plan común; sin un plan que dé sentido unitario a la acción de cada uno no puede haber
coautoría.
.C
Pero no basta con esta participación según un plan común; se requiere también una contribución
objetiva a la realización del hecho.
DD
Resumiendo, las condiciones que se exigen para la coautoría son:
En los casos en que el dominio del hecho pueda aparecer compartido por más de una persona,
FI
sin que éstas hayan tenido un plan común habrá autoría accesoria.
Autoría directa.
directa.(Zaffaroni)
Es el autor que puede ejecutar por sí mismo (personalmente) el delito, valiéndose para ello de
sus propias manos o de cualquier otro instrumento.
Como elemento general, tiene el dominio final del hecho quien dirige a la totalidad del suceso
hacia un fin determinado. Depende además de la posición relativa del sujeto respecto de los
demás participes.
El caso en que un sujeto llene objetiva y subjetivamente los requerimientos de la conducta típica
en forma personal y directa no ofrece ninguna duda cerca de que tiene en sus manos el curso del
devenir del hecho.
OM
A esta forma de autoría, llamada autoría directa, se contrapone la autoría indirecta o autoría
mediata, que es la que realiza quien se vale de otro que no comete injusto, sea porque actúa sin
dolo, atípicamente o justificadamente. La autoría mediata es el tipo de autoría que analizaremos
a continuación.
Autoría mediata.
.C
mediata.(Bacigalupo)
(Bacigalupo)
Autor mediato es el que se vale de otro para la realización del tipo. La autoría mediata
DD
presupone el dominio del hecho, como la autoría, y además la posesión de los demás elementos
de la autoría. Esta forma de la autoría no es siempre aceptada, sea porque se cuestiona su
necesidad, sea porque se le formula reparos desde el punto de vista del principio de la legalidad
(estas últimas solo serían sostenibles si se considerara que la única explicación admisible de la
LA
El autor mediato domina el hecho mediante el dominio de otro (instrumento) que realiza el tipo
en forma inmediata.
FI
• Cuando el instrumento obra sin dolo. Se trata de casos en los que el instrumento ignora
las circunstancias del tipo (obra con error de tipo) y por lo tanto no sabe qué hecho está
llevando a cabo. Ejemplo: el médico que, para matar a un paciente, utiliza a una enfermera
que ignora que la jeringa contiene una dosis mortal. El dominio del hecho proviene del
conocimiento del autor mediato y del desconocimiento del instrumento.
• Cuando el instrumento obra coaccionado. En esta hipótesis los puntos de vista se dividen.
Por una parte se sostiene que el coaccionado obra con dolo y que, por lo tanto, tiene el
dominio del hecho; consecuentemente, el que coacciona sería instigador, pero no autor
mediato. Otros autores sostienen que cuando el efecto de la coacción sobre el
coaccionado es muy fuerte y reduce altamente su libertad hasta el punto que pierde la
OM
también la autoría mediata, pues, aunque no se excluya la capacidad de motivación del
instrumento, el que obra por detrás adquiere el dominio de la voluntad de éste en razón
de su mayor conocimiento (a este respecto las opiniones no son unánimes). Naturalmente
esto no excluye la autoría del que obra en forma inmediata, la que se fundamenta en el
.C
dominio que conserva sobre su acción. Brevemente: el autor mediato tiene el dominio del
hecho a través de la voluntad del instrumento; y éste mantiene el dominio del hecho a
través del dominio de su acción.
DD
• Cuando el instrumento carece de la calificación de autor o bien obra sin el elemento
subjetivo especial de la autoría. La primera cuestión es complicada porque el que actúa
directamente lo hace con dolo y libertad; razón por la cual sería quien tendría el dominio
del hecho, aunque no pudiera ser autor por carecer de la calificación necesaria. Si el
LA
dominio normativamente concebido del hecho (Jeshcheck). Por otra parte se afirma que en
estos casos la presencia de una forma mixta de participación según la cual el intraneus
debe ser sancionado como si fuera un instigador (Schmidhäuser). Otro punto de vista
OM
hecho porque el juez que obra de acuerdo con lo que prevén las leyes ignora la situación
real a causa del engaño.
• poder El jefe de un aparato de poder
Cuando el instrumento obra dentro de un aparato de poder.
(por Ej: un servicio secreto), que da la orden a un subordinado de que mate a otro, tiene el
.C
dominio del hecho y es, por lo tanto, autor mediato, porque tiene la posibilidad de
reemplazar al subordinado que se negare a cumplir su orden por otro que la cumpliría. La
autoría directa o inmediata del que cumple la orden está fuera de toda duda (Roxín).
DD
El que realiza personalmente la conducta típica aunque utilice como
Es autor directo
instrumento físico a otro que no realiza conducta.
La verdad es que, en tanto que la autoría dolosa se basa en el dominio del hecho, la culposa en la
causación del resultado.
La diferente fundamentación que tiene la autoría dolosa (en el dominio del hecho) y la culposa
(en la causación del resultado) tienen consecuencias harto diferentes con respecto a la
participación: la participación solo es concebible en la autoría dolosa.
C) Participación.
Participación.(Bacigalupo)
El CP no limita la punibilidad a los que realizan la acción típica, es decir, a los autores, sino que
OM
contiene prescripciones que permiten sancionar también a los partícipes.
.C
realización del delito por el autor, pero no son acciones típicas en el sentido de que no realizan
por sí solas la acción descripta en el tipo. Determinar a otro matar a un tercero (instigar) no es
matar a otro; prestar ayuda a otro para que robe no es robar, sino cooperar en el robo
DD
(complicidad).
Resumiendo: todos los que no realizan la acción típica, es decir, que no son autores, ni
coautores, ni autores mediatos, sólo pueden ser responsables si han determinado al autor a
LA
cometer el hecho punible (instigación) o si le han prestado una ayuda para que lo cometa
(complicidad).
Es frecuente que en la teoría se sostenga que autores son los que “toman parte en la ejecución
del hecho”. Sin embargo, es claro que esas expresiones son demasiado amplias para dar una
FI
definición adecuada de los límites entre la autoría y la participación, pues también los partícipes
toman parte en la ejecución del hecho, dado que todo el que participa debe haber tomado una
parte de su ejecución. Esa “parte” puede consistir en motivar al autor (instigación) o en ayudarlo
Las formas que puede asumir la participación son, entonces, las siguientes:
1) Instigación:
Instigación: determinación de otro a la comisión de un hecho punible en el que otro
tiene el dominio del hecho. (Art. 45 CP)
1.Teoría
1.Teoría de la participación en la culpabilidad.
culpabilidad Esbozada por H. Mayer, también llamada
OM
Teoría de la corrupción; lo esencial de esta teoría es la influencia que el partícipe ejerce sobre
el autor, pues ha obrado corrompiéndolo, conduciendo al autor a la culpabilidad y la pena se
impone por haber hecho de él un delincuente.
.C
aceptada, pues sólo permite fundamentar la pena en el caso de la instigación sobre un autor
culpable, pero es difícil que justifique la sanción en supuestos de instigación sobre un autor no
DD
culpable o incluso en supuestos de complicidad.
un motivo para atenuarle la pena, pues muestra que el partícipe se encuentra a mayor
distancia respecto del hecho.
Los partidarios de esta teoría no consideran necesario derivar de lo injusto del hecho principal al
FI
injusto del partícipe; siendo así el partícipe no es responsable por favorecer un hecho ajeno sino
por realizar su propio injusto.
que la razón del castigo de la participación está en que el partícipe induce o favorece una
conducta típica y antijurídica a través de la provocación del dolo en el autor; por ende el
contenido del injusto en la participación se determina según el contenido de lo injusto del
hecho en el cual se participa; conforme a esta teoría, la participación afecta el mismo bien
jurídico que la conducta principal.
La instigación
Instigador es el que dolosamente determina a otro, en forma directa, a la comisión de un delito.
Instigador es el que crea el dolo en la cabeza del autor, es decir, el que genera la idea de la
comisión dolosa del delito en el autor.
La punibilidad del instigador depende de: que el instigado no estuviera decidido ya con
anterioridad a la comisión del delito; y de
Que el instigado dé por lo menos comienzo a la ejecución del hecho.
OM
Cuando la instigación no logre su propósito por razones ajenas a la voluntad del instigador cabe
pensar en la posibilidad de sancionar por tentativa de instigación. El Código Penal Argentino (Art.
48) determina que si se trata de elementos personales que agravan la punibilidad, tienen efecto
respecto de la punibilidad del partícipe si eran conocidos por éste. A su vez, si se trata de
.C
elementos personales que disminuyen la punibilidad sólo tienen efecto personal, es decir en
favor de aquel en quien concurren.
DD
La instigación debe cometerse mediante un “medio psíquico”, pero no constituyen instigación los
medios sutiles o las meras insinuaciones. Se extrae el requisito de que la instigación debe ser
hecha en forma concluyente de la palabra “directamente”, empleada por el Art. 45 CP.
Hay determinación directa cuando el que determina es autor, pero también la hay cuando el que
LA
determina es instigador; pero no hay determinación directa cuando un sujeto se limita a hacer
sutiles sugerencias, sugerimientos ambiguos o medias palabras.
El medio hemos dicho que debe ser psíquico y directo. Por medio psíquico y directo no debe
FI
entenderse solo la palabra clara y determinante, son que puede ser cualquier otro medio
simbólico: gestos, actitudes, palabra escrita, claves, etc.
La autoría medita presupone que al tercero, su incapacidad o error, le impidan darse cuenta de lo
que hace; o por el temor que excluye su libertad, obra como instrumento del autor mediato. Bajo
este aspecto se diferencia la autoría mediata de la instigación, que requiere que el ejecutor del
delito sea determinado a cometerlo, lo que supone su decisión consciente y libre.
El determinador (Zaffaroni)
La figura del determinador, que frecuentemente se confunde con la del instigador, encierra
verdaderos casos de autoría junto con casos de instigación: el que determina a otro puede ser el
autor mediato, pero también determina a otro el que se vale de quien no realiza conducta, que es
En los llamados “delicta propia” solo puede ser autor el que tiene los caracteres que están
exigidos al autor en el tipo objetivo. Así, no puede ser autor de cohecho pasivo el que no sea
OM
funcionario público, ni puede cometer prevaricato judicial el que no sea juez, etc.
Estos huecos que se producen entre la autoría y la participación y que nuestro CP soluciona
creando un tipo de determinación a cometer delito y penando con la pena del delito, obedecen a
que los delitos de propia mano y los delicta propia son imitaciones de carácter legal al principio
.C
del dominio del hecho como caracterización de la autoría.
lo hace sin ser autor ni instigador. Este último solo puede ser penado como autor de la
determinación misma y no del delito a que ha determinado. La mujer no es penada como autora
de violación, sino que se le aplica la pena de la violación por haber cometido el delito de
determinar a la violación; el sujeto no es penado como autor de cohecho pasivo, sino como autor
de la determinación al cohecho pasivo.
Para determinar si la ayuda prestada es de tal naturaleza que sin ella el delito no habría podido
cometerse puede utilizarse la fórmula de la conditio sine qua non: si se elimina mentalmente la
acción del partícipe y el hecho no habría podido cometerse, estaremos ante una participación
necesaria.
Es preciso tener en cuenta que el que presta una colaboración sin la cual el delito no habría
OM
podido cometerse, en determinadas circunstancias, puede tener el dominio del hecho, pues
quien dispone sobre una colaboración decisiva tiene también una decisión sobre la continuación
o no de él. Por ello debe distinguirse si el aporte sin el cual el delito no habría podido cometerse
tuvo lugar antes del comienzo de la ejecución o después de él.
.C
El que colabora con un aporte sin el cual el delito no podría cometerse después del comienzo de
ejecución, tiene el codominio del hecho y es por lo tanto coautor. El que presta una ayuda de tal
DD
naturaleza antes del codominio del hecho, consecuentemente, será un cómplice primario o
necesario.
Partícipe primario:
primario: (art. 45 del CP) Quien presta al autor un auxilio o cooperación sin los
Partícipe secundario:
secundario: (art. 46) Quien coopera de cualquier otro modo a (“a” y no “en”) la
FI
ejecución del hecho o presta una ayuda posterior cumpliendo promesas anteriores al
mismo.
Co-
Co-autoría y complicidad
complicidad primaria
Hemos dicho que la co-autoría de distingue de la participación en que hay una división del
trabajo que implica un aporte necesario para la realización del hecho (dominio funcional del
hecho) conforme al plan concreto.
Sintetizando todo nuestro planteo, vemos ahora que los ejecutores son autores, los
determinadores pueden ser autores mediatos, autores del tipo especial de determinación de otro
o instigadores, y los auxiliadores o cooperadores son cómplices, sean necesarios o simples
(primarios y secundarios).
Complicidad y encubrimientos
El principio general es que solo puede haber participación mientras el injusto no se ha ejecutado;
OM
cuando termina la ejecución del injusto, ya no es posible la participación y solo es posible
contemplar la posibilidad de que la conducta encuadre dentro de algunos de los supuestos
típicos de encubrimiento.
.C
ejecución, da lugar a la distinción entre lo que se ha dado en llamar consumación (o
consumación formal, en que ya no hay tentativa sino delito completo) y agotamiento del delito
DD
(también llamado consumación material).
hurta mil pesos diarios de la caja que maneja durante un año (en que no hay 365 hurtos, son un
hurto en forma de delito continuado), también la consumación se distancia del agotamiento. El
delito se consuma con el primer apoderamiento de mil pesos, pero se agota con el último. Hasta
que no hay ahogamiento puede también en estos casos haber participación.
FI
Es síntesis: la participación puede tener lugar mientras no se ha agotado la ejecución del injusto,
aun cuando ya se halle consumado.
respecto del mismo hecho (convergencia objetiva). Este hecho común puede ser consumado o
tentado.
Por consiguiente, es punible la participación en una tentativa (ser partícipe de un delito en grado
OM
tentativa. Es esta la solución dada por el art. 47 último párrafo del Código Penal “Si el hecho no
se consumase, la pena del cómplice se determinará conforme a los preceptos de este artículo y a
.C
Pero no es punible la tentativa de participación: Aquellos casos en que el pretendido partícipe no
alcanzó a efectuar los actos en que iba a consistir su participación. Ello no representa aporte a
DD
ningún delito, no hay participación si esta no ha sido eficaz Igualmente no existe participación
del autor del injusto, la conducta del participe en los actos preparatorios no puede ser punible,
porque es atípica.
Entonces, la punibilidad del partícipe depende de la punibilidad del autor, que depende del grado
de ejecución del delito.
- Zancinetti:
Zancinetti no pareciera que esta solución fuera justa, porque el partícipe, con su
colaboración, ya introduce todo lo que va a introducir en el injusto que se planea. Por lo
Aspecto interno:
b) Convergencia intencional:
intencional Las voluntades deben concurrir respecto del mismo hecho
(convergencia subjetiva), es decir los partícipes deben orientar su voluntad hacia un único hecho.
c)Accesoriedad:
c)Accesoriedad La participación es accesoria. No existe complicidad sin autoría. La actividad del
OM
La accesoriedad es un rasgo distintivo de la participación, lo cual supone dependencia del hecho
del partícipe respecto del hecho del autor o de los autores. Esta característica ha sido puesta en
tela de juicio por alguna parte de la doctrina actual, propiciando el camino hacia un concepto no
.C
accesorio de la participación criminal (Ej: Castro, basándose en los arts. 83, 99, 209, 212, 227
Accesoriedad mínima:
mínima: Requiere que el hecho principal sea típico;
Accesoriedad extrema:
extrema: requiere que el hecho principal sea típico antijurídico y culpable;
del partícipe.
Accesoriedad limitada
limitada:: En nuestro país se sigue la teoría de la accesoriedad limitada de la
Como ya se dijo, por accesoriedad limitada se entiende aquella concepción que hace depender la
responsabilidad del partícipe de la realización por parte del autor de un hecho típico y
antijurídico. Por tanto, si el autor principal realiza un hecho permitido por el Derecho aunque sea
típico (Ej: matar a otra persona en legítima defensa) la contribución del partícipe al hecho
conducta del autor, que es la conducta principal, eximimos a éste de responsabilidad penal en
base a que se ha ajustado a Derecho, no podemos incriminar la conducta del partícipe, que no es
Derecho. Además, para que la participación sea punible, el partícipe tiene que realizar la
contribución a la comisión del hecho delictivo realizado por el autor, con conocimiento y
OM
.C
DD
LA
FI
OM
En nuestro derecho penal merced al principio de individualidad de la culpabilidad, es de
.C
extrema tiene ciertos adherentes. El resto de las teorías han quedado descartadas.
DD
Se puede participar en los delitos de acción o en los de omisión: quien tiene el deber de actuar
Participación y culpabilidad:
culpabilidad:
No se admite la posibilidad
posibilidad de participar culposamente en un delito doloso.
afirmando que en el delito culposo no es verdad que el autor no quiera algo. Puede
En este sentido cabe citar “tanto participa en el delito el que se unió a otro para
cometerlo, como el que se unió a otro para realizar la conducta culposa que causó
puesto que ambos, desoyendo los dictados del deber objetivo de cuidado, y
OM
La comunicabilidad de las circunstancias.. (Art. 48 CP)
CP) (Zaffaroni)
El Art. 48 CP establece que las relaciones, circunstancias y calidades personales, cuyo efecto sea
disminuir o excluir la penalidad, con tendrán influencia sino respecto al autor o cómplice a
quienes correspondan. Tampoco tendrán influencia aquellas cuyo efecto sea agravar la
.C
penalidad, salvo el caso en que fueran conocidas por el participe.
Algo análogo pasa cuando se trata de causas que simplemente atenúan la culpabilidad: el que
coopera con otro que se halla en estado de emoción violenta, no puede ser penado conforme al
Art. 81 inc. 1 a) si no se encuentra el mismo en estado de emoción violenta. E estado de emoción
violenta solo podrá tomarse en cuenta para el autor, co-autor o cómplice que lo presente.
FI
La ley entiende que la mayor peligrosidad del autor perjudica al participe (instigador o cómplice)
en cuanto a la cuantificación penal (Art. 41), lo que no excluye que pueda verse neutralizada por
las propias características personales del participe, que el juez debe valorar al cuantificar la pena.
De igual modo, la ley toma en cuenta el mayor contenido de culpabilidad que hay en helecho del
autor cuando se revela especialmente para agravar la penalidad. Aquí se tiene en cuenta la
participación en la culpabilidad, es decir, en la reprochabilidad del autor especialmente calificada;
en los casos en que el participe la conoce. Si tomamos, por ejemplo, el Art. 80 del CP, veremos
que en sus incisos hay calificaciones que obedecen a un mayor contenido de reprochabilidad y no
a un aumento del injusto: así, las calificantes que obedecen a los motivos, son un claro problema
de mayor culpabilidad. El inc.4 pena al que matare “por placer, codicia, odio racial o religioso” y
el 3 al que matare “por precio o promesa remuneratoria”. Estas son claras referencias a una
OM
.C
DD
LA
FI
OM
Por lo tanto, el iter criminis es un desarrollo dogmático, creado por la doctrina jurídica, con idea
de diferenciar cada fase del proceso, asignando a cada fase un grado de consumación que
permita luego aplicar las diferentes penas.
.C
Para llegar a la consumación del delito, es necesario seguir un "camino", realizar todo un proceso
que va, desde la idea o propósito de cometerlo –que surge en la mente del sujeto–, hasta la
consumación misma del delito. Ese camino, ese conjunto de actos para llegar al delito, se
DD
denomina "iter criminis", o sea: "camino del crimen" o "camino del delito".
Dentro del "iter criminis" (o sea: en el camino que va desde la idea, hasta la consumación del
delito), es posible distinguir cuatro etapas:
LA
La importancia de esta distinción, reside en que algunos de estos actos punibles, en tanto que
otros no lo son.
Porque sin acción, no hay delito; y para que haya acción, no bastan los actos internos
(elemento psíquico de la acción), sino que se requiere también la exteriorización
(elemento físico de la acción).
Porque lo anterior está apoyado por la Constitución Nacional, en el art. 19: "Las acciones
OM
privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral pública, ni
perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios y exentas de la autoridad de los
magistrados".
.C
2. Los actos preparatorios.
preparatorios Constituyen el primer paso extremo del "iter criminis", la primera
manifestación o exteriorización de la acción. Son actos que, si bien no tienden
directamente a ejecutar o consumar el delito, tienden a prepararlo.
DD
Sobre los actos preparatorios, Soler dice: "Antes de ejecutar es posible, o a veces, necesario,
realizar otras acciones no ejecutorias, sino preparatorias. Así, el que piensa robar, prepara antes
los instrumentos con los cuales ha de forzar la puerta; el que piensa falsificar un documento,
LA
ensaya antes la imitación de la letra o estudia la calidad de los reactivos a emplear. He aquí actos
preparatorios. Ninguno de ellos importa comenzar la ejecución del delito; tienen con la
consumación de éste solamente una relación remota, subjetiva y equívoca" (Soler, T. II, pág. 208,
Ed. 1970).
FI
A raíz de que estos actos guardan, con la consumación del delito, una relación muy remota, y
sólo de carácter subjetivo –ya que sólo el autor conoce que sus preparativos son para consumar
el delito–, la ley, por lo general, no los considera punibles.
A veces, por excepción, la ley castiga actos preparatorios. Así sucede, por ejemplo, en el art.
299, en el cual se castiga la mera tenencia de elementos o instrumentos destinados a cometer
falsificaciones o en el caso del art. 210, en el cual se reprime el sólo hecho de formar parte de
una asociación ilícita, o sea, destinada a cometer delitos.
En estos casos, la razón por la cual se castiga el acto preparatorio, es que, entre él y el delito, hay
una relación evidente, o sea, una relación inequívoca. Así, por ejemplo, en el caso del art. 299, si
el individuo tenía máquinas destinadas a la falsificación, resulta inequívoco que pensaba ejecutar
la falsificación.
En nuestro Derecho Penal, no sólo se aplica pena cuando el sujeto consumó el delito, sino
también cuando a pesar de no haberlo consumado ya ha "comenzado a ejecutarlo". Esto último,
es lo que se conoce como "tentativa".
El hecho de que la tentativa se caracterice por el "comienzo de ejecución" del delito, hace que sea
de una importancia fundamental, establecer una distinción entre los actos preparatorios y los
OM
actos de ejecución; ya que, mientras los primeros, por lo general, no son punibles, los segundos
dan lugar a la tentativa, y por lo tanto, son punibles. Al efecto, en esta misma bolilla
desarrollaremos las teorías acerca de la diferencia entre actos preparatorios y actos de ejecución.
.C
está consumado, cuando se han reunido todos los elementos o condiciones exigidas por la
figura delictiva de que se trate (algunos autores, denominan "delito perfecto" o "delito
DD
agotado", al delito consumado).
LA
FI
Habrá Tentativa cuando se dé comienzo a la ejecución del delito pero no se lo consume por
circunstancias ajenas a la voluntad del autor. Dentro de este concepto, cabe tanto el caso de la
tentativa que no habría podido alcanzar la consumación (tentativa inidónea = delito imposible)
como la tentativa que habría podido consumar el delito (tentativa idónea).
irreales.
Solo quedan fuera del concepto las llamadas tentativas irr eales. En estas el autor quiere lograr la
etc.
realización del tipo recurriendo a medios mágicos, supersticiosos, etc. Ej: el uso de muñecos
boodoo para procurar la muerte de alguien.(Bacigalupo)
OM
-
En el delito doloso no se pena solo cuando la conducta llega a realizarse totalmente o que se
produce el resultado típico, sino que la ley prevé la punición de la conducta que no llega a llenar
todos los elementos típicos, por quedarse en una etapa anterior de realización.
.C
El delito se inicia cronológicamente como una idea en la mente del autor, que a través de un
proceso que abarca la concepción (idea criminal), la decisión, la preparación, la ejecución, la
DD
consumación y el agotamiento, llega a afectar el bien jurídico tutelado en la forma descripta por
el tipo. Este proceso o camino, que va desde la concepción hasta el agotamiento del delito, se
llama iter criminis.
El Art. 42 CP establece: “El que con el fin de cometer un delito determinado comienza su
LA
ejecución, pero no la consuma por circunstancias ajenas a su voluntad, sufrirá las penas
determinadas en el Art. 44”. Esta fórmula legal, deja fuera del ámbito de la tentativa los actos
preparatorios previos a la ejecución del hecho.
FI
Delito incompleto:
incompleto sostiene que la tentativa es un delito incompleto, en el que no se dan
todos los caracteres típicos porque la conducta se detiene en la etapa ejecutiva o porque
no se produce el resultado.
Tipo independiente:
independiente pretende que la tentativa es un tipo independiente, de la misma
manera que lo es, por ejemplo, el encubrimiento, que nada tiene que ver con el tipo de la
parte especial a que se refiere la voluntad criminal.
No se trata de que la sensación de inseguridad la tengan los demás (lo que sería afectación de la
seguridad jurídica en su aspecto subjetivo, es decir, alarma social), sino de la sensación de
inseguridad que como resultado de la acción que se percibe como amenazadora pueda tener el
titular del bien jurídico.
Toda acción que se aproxima más o menos a la materialización de una tipicidad penal que
afectaría alguno de nuestros bienes jurídicos, aunque no haga correr efectivo peligro al mismo,
OM
no cabe duda de que nos puede perturbar en nuestro sentimiento de disponibilidad, no porque
siembra la inseguridad jurídica en los demás solamente, sino porque lo puede sembrar en
nosotros en mayor medida, que somos los destinatarios de este dolo.
Esta tercera forma de afectación del bien jurídico no consiste en la alteración o supresión de la
.C
relación de disponibilidad por daño lesión, ni en la alteración de esa relación por puesta en
peligro de la misma, sino en la alteración por el peligro de perturbación subjetiva de titular de la
DD
disponibilidad, es decir que, al lado del daño y del peligro, aparece la perturbación como tercera
forma de afectación del bien jurídico.
Cabe aclarar que la posibilidad de una tentativa culposa es insostenible, porque el tipo culposo
no individualiza las conductas por la finalidad sino por la forma de obtener la finalidad.
El dolo de la tentativa es el mismo dolo del delito consumado, es decir, el querer del resultado
FI
muerte es el mismo, sea que la bala haya causado la muerte o que no la haya causado.
Hay tentativa desde que se inicia la ejecución hasta que se consuma el delito. Con la
consumación termina toda posibilidad de tentativa.
Aquí debemos aclarar que por la forma de consumación suelen distinguirse los tipos en
instantáneos y permanentes. Se llama delito instantáneo al que tiene solo un momento
consumativo y permanente al que tiene un estado consumativo, es decir, que la consumación se
mantiene en el tiempo, como sucede con el secuestro. No es el resultado lo que se mantiene,
sino la consumación misma. De cualquier manera, la circunstancia de que estos tipos tengan una
prolongación temporal de la consumación, no les quita que también tengan un momento
Para unos la tentativa se pena atendiendo a criterios objetivos, es decir, porque pone en peligro
un bien jurídico.
Para otros la teoría subjetiva es la que predomina, es decir, la tentativa se pena porque revela
una voluntad contraria al derecho.
OM
Otros se limitan a fijarse solo en el autor y a fundar la punción de la tentativa en la peligrosidad
del autor.
A partir de la teoría de la prevención general, se ha dicho que la tentativa se pena por ser
peligrosa “cualquier conducta que en el marco de la comunidad produce la impresión de una
agresión al derecho mediante la que se perjudica su segura validez en la conciencia de la
comunidad”.
.C
Ninguna de estas posiciones resulta sostenible dentro de nuestro sistema positivo, en el que
DD
creemos que la tentativa tiene
tiene una doble fundamentación: obedece a que hay en ella dolo y la
exteriorización de ese dolo siempre implica la afectación de un bien jurídico.
LA
Teorías negativas
FI
Las teorías negativas son un grupo de opiniones diferentes, que tienen solo una conclusión
común: es imposible determinar cuándo hay un acto de ejecución y cuando un acto de tentativa.
Conforme a estas teorías, la ley no debería distinguir entre actos ejecutivos y actos de tentativa y
Un criterio objetivo puro de distinción no puede funcionar, porque cualquier acto de preparación
termina siendo un acto de tentativa, ya que voluntad criminal hay en todas las etapas.
Criterios objetivos
- Univocidad de los actos de tentativa: según este criterio, cuando los actos externos son
inequívocos, es decir que no pueden considerarse más que dirigidos a la consumación del delito
desde el punto de vista de un tercero observador, serán actos de tentativa o ejecutivos, en tanto
OM
complementos, al peligro para el bien jurídico y a la inclusión de las acciones que, por su
vinculación necesaria con la acción típica, aparecen, según una natural concepción, como parte
integrante de ella.
- Criterio objetivo-individual (del plan concreto del autor): es el criterio que mayor grado de
.C
aproximación permite dentro de todos los enunciados hasta el presente. Conforme a este
criterio, se toma en cuenta para establecer la diferencia, el plan concreto del autor (de allí lo de
DD
individual), no urdiéndose en establecer la separación entre acto ejecutivo y preparatorio
prescindiendo del plan concreto.
Conforme a este criterio la tentativa comienza con la actividad con que el autor, según su plan
delictivo, se aproxima inmediatamente a la realización del plan delictivo, o también, hay tentativa
LA
en toda actividad que, juzgada sobre la base del plan concreto del autor, se muestra conforme a
una natural concepción, como parte integrante de una acción ejecutiva típica.
si lo será si su plan es matarla. Para esta teoría el comienzo de ejecución no necesita ser
una parte de la acción típica.
Zaffaroni entiende que es imprescindible tomar en cuenta el plan concreto del autor para poder
configurar una aproximación a la distinción entre ejecución y preparación, la que de otro modo
sería imposible, pero estima que el llamado criterio objetivo-individual tampoco alcanza para
resolver los problemas, aunque contribuye aportando esta verdad.
OM
• Tentativa inacabada.
inacabada Es aquella en la que el autor no hizo todavía todo lo que según su
plan era necesario para lograr la consumación. Ej: el autor comenzó con un engaño que
requiere varios pasos sucesivos según lo ha planeado y todavía no realizó todos los pasos
previstos en su plan.
.C
En consecuencia, para establecer si una tentativa está acabada o no, es preciso comparar la
acción ejecutada por el autor con su plan de realización del delito.
DD
omisión.
Tentativa de omisión.
Las reglas y principios que se aplican a la tentativa en los tipos activos, son también aplicables a
los tipos omisivos.
Eso es lo que sucede cuando la madre deja de alimentar al niño para que muera, porque a
LA
medida que transcurre el tiempo aumenta el peligro para la salud y la vida de la criatura.
Hay tentativa inidónea o tentativa imposible cuando los medios empleados por el autor son
notoriamente inidóneos para causar el resultado.
Bacigalupo dice que, en la práctica, la tentativa puede presentarse en tres hipótesis diferentes:
Inidoneidad
a. Ini doneidad de los medios.
No deben considerarse dentro de estos casos los de las llamadas tentativas irreales (en las que el
autor utiliza medios mágicos o supersticiosos).
OM
En estos supuestos, la acción recae sobre un objeto que no permite la consumación o en los que
el objeto falta totalmente.
Por ejemplo: el aborto practicado en mujer no embarazada; la acción de apuñalar a una almohada
creyendo apuñalar a otro que ya no está en el lugar.
.C
c. Inidoneidad del autor
El error “al revés” del autor consiste en estos casos en suponer que tiene la calificación de autor
DD
necesaria para la comisión del delito.
Por ejemplo: el autor cree ser funcionario, sin serlo realmente, y cree haber cometido un delito
de cohecho.
LA
• Los que suponen que este elemento es un elemento del tipo, no dudan en admitir aquí
FI
una tentativa de autor inidóneo, pues el autor ha supuesto erróneamente que se daba una
circunstancia del tipo que en realidad falta. Su error “al revés” es creerse funcionario. El
caso será por lo tanto resuelto, desde este punto de vista, como una tentativa inidónea, y
en consecuencia, punible.
• Bacigalupo:
Bacigalupo Por el contrario, los que suponen que los elementos de la autoría no
pertenecen al tipo (por lo menos no pertenecen al tipo del error, aunque puedan
pertenecer al tipo de la adecuación), piensan que el autor no ha supuesto erróneamente
un elemento del tipo, es decir, que su creencia de ser funcionario no es un error de tipo “al
revés”, porque el carácter de funcionario (o de médico, etc.) no pertenece al tipo. Por lo
tanto, aquí no habría tentativa alguna. El error sobre el carácter de funcionario sería en
realidad un error sobre el deber especial que constituyen los delitos especiales propios. La
En toda tentativa hay un error del autor acerca de la idoneidad de los medios. La única diferencia
que hay entre la tentativa idónea y la inidónea es que en la segunda el error es grosero, burdo,
grueso, tal como querer envenenar con azúcar, con medio supersticioso, demoler un edificio con
alfileres, envenenar por medio de una culebra que en realidad es una lombriz grande, etc.
OM
El fundamento de la punición de la tentativa inidónea
En la tentativa inidónea hemos visto que hay afectación de bien jurídico tutelado al igual que en
la tentativa idónea. La diferencia que media entre ambas es que en la tentativa inidónea es menor
la afectación por la notoria inidoneidad del medio. De cualquier manera, la perturbación se puede
.C
sufrir y nadie está obligado a soportar conductas que tiendan a lesionar sus bienes jurídicos, por
mucho que sea burdamente inidóneos los medios aplicados para ello.
DD
El fundamento de la punición de la tentativa inidónea no es otro, pues, que el fundamente de la
punición de la tentativa en general. En la tentativa inidónea hay un bien jurídico que resulta
afectado, por cierto no con lesión ni con peligro, pero si con afectación en forma de
perturbación.
LA
Otros fundamentan la punición en la peligrosidad del autor (art. 44 in fine). Esto es insostenible.
En la tentativa inidónea debe haber culpabilidad porque quien intenta matar a otro con un alfiler
en un estado de incapacidad cualquiera, no puede ser penado por mucha que sea su
FI
peligrosidad.
Es verdad que las reglas de individualización de las penas del art. 41 se alteran respecto de la
tentativa inidónea, pero ello obedece a que la falta de peligrosidad opera aquí como una causal
E) El desistimiento de la tentativa.
tentativa.
Dice la letra del Art. 43 CP: “El autor que voluntariamente desista de la tentativa quedará exento
de pena.”
Para que haya desistimiento voluntario, este no debe hallarse motivado en:
1. Ninguna acción del sistema penal que ponga en peligro la realización del plan delictivo.
OM
2. El convencimiento de la imposibilidad de consumarlo.
.C
Voluntariedad del desistimiento: el autor debe haberse dicho según la fórmula propuesta
por Frank: “no quiero, aunque puedo”. La voluntariedad faltará cuando las circunstancias
DD
objetivas de la realización le impiden continuar con la acción (por ejemplo: encuentra el
Banco que piensa asaltar fuertemente custodiado); o cuando la consumación ya no tiene
sentido “ante sus ojos” (por ejemplo: las cosas que encuentra carecen de valor);
• Carácter definitivo: la postergación hasta una ocasión más propicia no constituye
LA
desistimiento.
voluntariedad del desistimiento, carácter definitivo) que el autor impida la consumación por los
medios a su alcance.
El desistimiento solo puede tener lugar hasta la consumación formal del delito o hasta el
En todos estos supuestos al desaparecer la pena de la tentativa persiste la pena de los delitos
que se han consumado en su curso, porque el Art. 43 CP solo excluye la pena que le corresponde
al sujeto como “autor de tentativa”. En otras palabras, lo que queda impune es la tentativa en sí
misma, pero no los delitos consumados en su curso, cuya tipicidad solo estaba interferida por
efecto de la punibilidad de la tentativa, pero que resurge al desaparecer esta.
OM
.C
DD
LA
FI
A) El concurso de delitos
La legislación y la teoría distinguen entre los casos en que una acción realiza más de un tipo
penal y los de varias acciones que realizan más de un tipo penal, o más de una vez el mismo tipo
penal.
OM
La unidad de acción con pluralidad de lesiones de la ley penal se denomina concurso ideal de
delitos. La pluralidad de acciones con pluralidad de lesiones de la ley penal (lesión repetida de
una o de varias leyes) recibe el nombre de concurso real o material.
.C
Concurso ideal
ÚNICO
DD
Concurso aparente
HECHO
LA
Concurso real
FI
PLURAL
CP.Arts. 54,
El concurso de delitos y el alcance de la expresión “hecho” en el CP.
55, 56, 57 y 58 del CP. (Zaffaroni)
ARTICULO 54.- Cuando un hecho cayere bajo más de una sanción penal, se aplicará solamente la que
fijare pena mayor.
ARTICULO 55.- Cuando concurrieren varios hechos independientes reprimidos con una misma especie
de pena, la pena aplicable al reo tendrá como mínimo, el mínimo mayor y como máximo, la suma
aritmética de las penas máximas correspondientes a los diversos hechos.
ARTICULO 56.- Cuando concurrieren varios hechos independientes reprimidos con penas divisibles de
reclusión o prisión se aplicará la pena más grave, teniendo en cuenta los delitos de pena menor.
Si alguna de las penas no fuere divisible, se aplicará ésta únicamente, salvo el caso en que
concurrieren la de prisión perpetua y la de reclusión temporal, en que se aplicará reclusión perpetua. La
inhabilitación y la multa se aplicarán siempre, sin sujeción a lo dispuesto en el párrafo primero.
ARTÍCULO 57.- A los efectos del artículo anterior, la gravedad relativa de las penas de diferente
naturaleza se determinará por el orden en que se hallan enumeradas en el artículo 5º.
ARTICULO 58.- Las reglas precedentes se aplicarán también en el caso en que después de una
OM
condena pronunciada por sentencia firme se deba juzgar a la misma persona que esté cumpliendo pena
por otro hecho distinto; o cuando se hubieren dictado dos o más sentencias firmes con violación de
dichas reglas. Corresponderá al juez que haya aplicado la pena mayor dictar, a pedido de parte, su
única sentencia, sin alterar las declaraciones de hechos contenidas en las otras.
Cuando por cualquier causa la justicia federal, en autos en que ella haya intervenido, no pueda aplicar
esta regla, lo hará la justicia ordinaria nacional o provincial que conoció de la infracción penal, según
.C
sea el caso.
Dentro de la doctrina nacional existen al menos tres posiciones en torno al significado que el CP
le otorga a la expresión “hecho” en estos artículos.
DD
• Unidad de resultados (Núñez):
(Núñez):concibe al “hecho” como unidad de resultado material de la
conducta del delincuente, sea que éste logre el resultado con una o con varias acciones,
sea que persiga uno o varios fines, esto es, unidad de lo que el hombre ha hecho en el
LA
mundo externo material, unidad del“hacer objetivo” del delincuente o unidad de su obra
desde el punto de vista objetivo material. La unidad o pluralidad de hechos se
determinaría por el número de resultados materiales causados.
• (Soler/Masucci/Alimena):: Masucci dice que el sujeto puede
Lesiones jurídicas inseparables (Soler/Masucci/Alimena)
FI
haber querido un solo efecto real pero varias lesiones jurídicas, y esto para él descartaría
la unidad de delito; es decir, solo cuando estas múltiples lesiones sean separables de
modo que no sea necesaria producirlas a todas o no producir ninguna, puede concurrir la
OM
A juicio de Zaffaroni, cuando el CP dice “un hecho” en el contexto de los Art. 54 y 55, está
diciendo una conducta, una acción, y no un resultado.
El CP usa la expresión “hecho” en sentido diverso del de “resultado”, esto es algo evidente
si nos fijamos, por ejemplo, en el inc. 1 del Art. 34 que, como es obvio, cuando se refiere
.C
al momento del hecho, se está refiriendo al momento de la acción y no al momento del
resultado.
El número de resultados no tiene nada que ver con el número de conductas y, por ende,
DD
con el número de delitos. Para determinar si hay uno o varios delitos debemos determinar
si hay una o varias conductas, lo que no es sencillo, pero para lo cual no nos sirve en
absoluto el número de resultados.
LA
La postura de la “unidad de acciones” es la más aceptada hoy en día, ya que se tiene en cuenta
que el derecho castiga acciones, no resultados.
Sin embargo, el tomar esta posición doctrinaria nos supone también el realizarnos ciertas
interrogantes:
FI
Al darse cuenta de estas dos interrogantes, Núñez afirma que el poder unificador que le da esta
teoría a la acción es tal, que no desaparece ni siquiera cuando el delincuente había tenido la
voluntad determinada de producir todas las violaciones del derecho; por lo que las consecuencias
son graves, pues llevaría a la injusticia de castigar más benignamente verdaderas situaciones de
concurso real (pluralidad de resultados causados por la acción única finalmente dirigida a
producirlos). Sin embargo se le ha objetado a Núñez confundir acción, que es lo único que puede
penarse, con su resultado cuyo número no necesariamente coincide con el de aquella y que no
puede multiplicarla.
“Es evidente que hay un mínimo de unidad de conducta, es decir, algo que no puede ser más que
una conducta, y es la unidad biológica o fisiológica: un solo movimiento, una sola innervación
muscular, no puede ser sino solo una conducta. Pero ese criterio fisiológico no puede servirnos
para saber cuándo hay una conducta y cuando varias, porque resultaría infantil creer que cada
movimiento es una conducta.
Consecuentemente, cuando hay un solo movimiento hay una conducta: una bomba aunque hiera
o mate a varios, realiza una sola conducta: el que descarga un puñetazo realiza una sola
OM
conducta aunque lesione a dos personas.
El problema surge cuando hay varios movimientos exteriores voluntarios. Para que esos varios
movimientos exteriores puedan ser considerados como una conducta única, requieren
necesariamente que haya un plan común, es decir, una unidad de revolución.”
.C
Cuando hay un solo movimiento
Por eso, la tesis moderna de la unidad de acción tiene en cuenta tanto la finalidad como la
normatividad (tipicidad).
LA
Hay unidad de conducta cuando hay un plan común en la realización de varios movimientos
FI
1. Integran una conducta típica que eventualmente puede escindirse en varios movimientos
- En la omisión, la unidad de conducta se verifica cuando el agente omite evitar varios resultados
contra el mismo deber de garante.
- En la tipicidad culposa, la unidad de acción tiene lugar aunque sobrevengan una multiplicidad
OM
de resultados y aun cuando todos ellos provengan de una multiplicidad de infracciones a
cuidados debidos, siempre a condición de que los resultados se deriven simultáneamente.
- La misma unidad de acción se da en la llamada realización progresiva del tipo penal, cuando en
la intensificación del injusto tienen lugar distintos actos que se dan en el curso de una
.C
progresión delictiva hasta su consumación.
- Un supuesto especial que da lugar a la unidad de acción aun cuando supone reiteración de
DD
conducta, aunque sin reiteración de tipicidad, es el delito continuado.
Mediante el concurso de delitos se procura evitar la vulneración del principio “non bis in ídem”. Si
existe un solo hecho corresponde una sola pena. Si existen varios hechos corresponde también
una sola pena, pero esta debe contemplar la totalidad de los hechos cometidos.
• Para varios delitos: una pena “total” (fundamento: unidad de reacción delictiva; pues la
pena se dirige a una persona, con prescindencia de la cantidad de delitos cometidos).
También se quiere asegurar una aplicación racional y segura de la ley penal y facilitar la tarea de
la determinación de la pena aplicable.
También conductas configuradas por una unidad fisiológica, es decir, por un solo movimiento,
también pueden ser pluralmente típicas: el que arroja una granada puede dar lugar a homicidio y
daños; el que dispara sobre otro y lesiona a un tercero puede ser autor de homicidio doloso y
lesiones culposas, etc.
OM
para determinarlo.
El que en el curso de un robo decide matar a la víctima sin ninguna relación con el robo, sino
porque en ese momento descubrió que era un antiguo enemigo, no incurre en ningún tipo de
concurso ideal, porque falta la unidad de conducta.
.C
El concurso ideal presupone la unidad de la conducta, que viola las normas antepuestas a
diferentes tipos penales. Debe tratarse de tipos penales diferentes (concurso ideal heterogéneo),
DD
porque el llamado concurso ideal homogéneo, es decir, la conducta que viola varias veces la
misma norma incurriendo en el mismo tipo, no tiene relevancia práctica alguna.
LA
grave. Ello obedece a que, frente a esta posibilidad de concurso, estamos siempre frente a un
único delito.
Ahora, según Creus deben considerarse dos situaciones para determinar cuál es la pena mayor,
estos son:
Por último, vale aclarar la correcta apreciación de Vidal cuando sostiene que el hecho de aplicarse
al caso del concurso ideal una sola pena (la del tipo que prevea la pena mayor), ello no quiere
decir que si un sujeto arroja una bomba y mata a dos personas y hiere a otras cuatro, que por el
solo hecho de tratarse de un concurso ideal (al que se aplica sólo una pena, la mayor, o sea, la
del homicidio = de 8 a 25 años) uno de los homicidios y las cuatro lesiones queden impunes,
sino que dichas mutaciones del mundo exterior (resultados) deberán tenerse en cuenta al
OM
momento de la determinación judicial de la pena, pero NUNCA el número de resultados
multiplicará la cantidad delitos cometidos.
.C
RESUELTO el problema de la unidad de acción, el paso siguiente consiste en determinar si
se está en presencia de un encuadramiento múltiple (concurso ideal) o solo aparente.
DD
Hay supuestos en los que parece que concurren varios tipos penales, pero que observados más
cercanamente nos permiten percatarnos de que el fenómeno es aparente, porque en la
interpretación adecuada de los tipos la concurrencia resulta descartada, dado que uno de los
tipos excluye al otro o a los otros. Suele llamase a estos casos “concurso aparente de tipos”.
LA
Habrá entonces concurso (aparente) de leyes penales cuando el contenido de ilícito de un hecho
punible ya está contenido en otro y, por lo tanto, el autor sólo ha cometido una única lesión de la
ley penal.
FI
Hay tres principios que son utilizados para descartar la aplicación de tipos penales en los casos
de concurrencia aparente y que la doctrina admite pacíficamente. Entonces, para la doctrina,
habrá concurso aparente cuando entre los tipos penales que serían aplicables al caso concreto
Principio de especi alidad: Responde a la antigua y conocida regla según la cual la ley
especialidad
alidad:
especial deroga a la general. Conforme a este principio, un tipo que tiene, además de los
caracteres de otro, algunos más o con tipos alterados respeto de tipos no alterados.
También resulta desplazante el tipo del injusto as grave, cuando el injusto menor es
excluido por una cláusula especial. La especialidad es un fenómeno que tiene lugar en
razón de un encerramiento conceptual que un tipo hace del otro y que presupone una
relación de subordinación conceptual entre los tipos.
OM
interferencia por progresión, que se produce cuando la tentativa queda interferida por la
consumación punible o el acto preparatorio eventualmente típico queda interferido por el
acto de tentativa. El mecanismo que rige a la subsidiaridad es la interferencia, lo que debe
tenerse presente, pues es lo que explica la razón por la cual es punible el delito
.C
consumado en el curso de una tentativa calificada cuando por desistimiento no resulta
punible la tentativa: se trata de un fenómeno de interferencia y desaparecido el
mecanismo interferente al desaparecer la nubilidad de la etapa posterior, resurge la
DD
tipicidad punible de la anterior.
que desplaza a los otros y, además, en la determinación de esa pena no se deben computar otras
violaciones de la ley, dado que sólo se ha infringido una de las normas aparentemente
concurrentes. Esto último marca una diferencia fundamental con la consecuencia jurídica del
concurso ideal, en el que, de acuerdo con el principio de absorción, se aplica la pena del delito
FI
más grave, pero teniendo en cuenta que el autor también ha cometido otras violaciones de la ley
penal.
Como consecuencia del concurso aparente, un tipo penal “DESPLAZA” a otro. Esto nos hace
preguntarnos si: ¿El tipo penal “desplazado” queda incluido en el otro o queda excluido de la
consideración?
CONSECUENCIA:
CONSECUENCIA UN TIPO PENAL “DESPLAZA” AL OTRO. ¿El tipo penal “desplazado” queda
incluido en el otro o queda excluido de la consideración? Posturas. Consecuencias: efectos
OM
.C
DD
LA
FI
En otras palabras, en el concurso real a una persona se le imputan varios hechos independientes
OM
anteriores a una sentencia judicial; es decir, hay una pluralidad de conductas que concurren en
una misma sentencia judicial.
Ahora, debe quedar absolutamente que el único caso en que la pluralidad de hechos se traduce
en una pluralidad delictiva es en el concurso real, pues el agente comete varios hechos
.C
independientes. Así, en estos casos los tipos penales en juego prohíben aspectos diferentes de la
conducta, sin tener elementos comunes, porque no existe repetición alguna de prohibición.
DD
Cuando esos varios hechos independientes llevados a cabo por el agente se adecuan al mismo
tipo penal, estamos frente a un concurso real homogéneo (ej., un sujeto mata a su vecino, dos
días después mata a otra persona). Por el contrario, si esos varios hechos independientes se
adecuan a distintos tipos penales, se verifica un concurso real heterogéneo (ej., un sujeto asalta
LA
un banco, al otro día mata a una persona y, posteriormente, accede carnalmente a una mujer).
Entonces, conforme al concepto que venimos analizando, cabe concluir en que los requisitos que
deben verificarse para tener por acreditada la existencia del concurso real son:
FI
1. Que concurran
concurran varias acciones independientes entre sí;
sí es decir, que un mismo sujeto
lleve a cabo varios movimientos que configuren varias conductas que se materialicen en
varios delitos.
OM
presuponerse que hay una única la conducta.
conducta.
Solo puede ser heterogéneo (una sola Puede ser homogéneo (varias
conducta lesiona tipos penales conductas lesionan el mismo tipo
diferentes), porque el concurso ideal penal) o heterogéneo (varios delitos
homogéneo no tiene relevancia práctica con tipicidades diferentes).
alguna.
.C
DD
LA
FI
OM
Concurso real y reincidencia
Uno de los elementos que componen el concurso real es que se debe tratar de un caso en que el
sujeto haya cometido varios delitos por los que deba ser juzgado en un mismo proceso judicial.
Por el contrario, si entre los distintos delitos media una sentencia condenatoria firme queda
descartado el concurso real, pudiendo haber reincidencia si se dan los requisitos del art. 50 del
CP.
.C
Por ello, la diferencia que media entre el concurso real y la reincidencia es que en esta última ya
DD
ha habido sentencia condenatoria cuando el sujeto comete un nuevo delito; mientras que en el
concurso real se juegan simultáneamente varios delitos sobre ninguno de los cuales recayó
sentencia condenatoria.
LA
máximas correspondientes a los diversos hechos; aclarando dicha norma que dicha suma jamás
podrá exceder de (50) cincuenta años de reclusión o prisión.
acumulación (o suma aritmética) para determinar la pena aplicable en caso de concurso real,
aunque Zaffaroni lo llama aspersión, dado que la acumulación sólo opera respecto de los
máximos, pero no de los mínimos, motivo por el cual no se trataría de una acumulación lata o
pura.
Sostiene Lascano, citando a Nuñez, que nuestro Código Penal ha consagrado el sistema de pena
única que rige tanto para el supuesto en que cada uno de los distintos delitos esté reprimido con
una sola pena, como también para el caso en que alguno de ellos o todos lo estén con penas
alternativas.
En este sentido, como se ha dicho, la pena única fija una escala abstracta para graduar la pena en
función de los artículos 40 y 41 del CP., la cual se establece de la siguiente manera:
OM
Distinto era el supuesto en la redacción anterior, según la cual se establecía un tope: el máximo
de la escala de la pena única no podía exceder del máximum legal de la especie de pena de que
se trate.
.C
En cuanto al mínimo de la escala del concurso real, Creus entiende que debe ser el mínimo
mayor de las escalas penales de los tipos en juego; ello, aunque dicho mínimo pertenezca a un
tipo cuyo máximo de pena sea inferior a los demás (ej., si un sujeto comete una estafa -de 1 mes
DD
a 6 años, art. 172 CP.- y, al ser aprehendido por la policía constatan que portaba un arma de uso
civil sin autorización legal -de 6 meses a 3 años, art. 189 bis.3º p. del CP.-), la escala queda
compuesta con el mínimo mayor: 6 meses y la suma de los máximos: 9 años.
LA
conversión conforme dispone el art. 5º del CP., la pena más grave prevista por
Sistema de conversión:
dicho cuerpo legal es la de reclusión; entonces, si en un concurso real los distintos delitos
juzgados están conminados con penas divisibles de diversa especie (reclusión o prisión) se
aplica la más grave, es decir, la de reclusión.
FI
Por ejemplo: si una persona comete el delito de homicidio en estado de emoción violenta (CP., 81
inc. 1º “a”: reclusión de 3 a 6 años) y luego ayuda a su abuela a que se suicide (CP., 83: prisión de
1 a 4 años), para poder establecer la escala penal única para este concurso deberá convertirse la
escala penal del segundo hecho a la del primero, pues éste prevé la especie más grave. Así,
aplicando lo dispuesto por el art. 24 CP., la escala penal aplicable al delito de ayuda al suicidio
será de 6 meses a dos años de 20reclusión; por lo tanto, teniendo ya las dos escalas
Conforme dispone el 2º párrafo del art. 56 del CP., cuando concurran penas privativas de
libertad divisibles con una pena de igual naturaleza no divisible, se aplicará únicamente
esta última (ej., si concurre un robo calificado por lesiones -art. 166 inc. 1º, de 5 a 15
años- con un homicidio calificado -cualquier supuesto del art. 80 del CP., prisión o
reclusión perpetua-, se aplica esta última). Ahora, si concurren una pena de prisión
perpetua con una de reclusión temporal, se aplicará la pena de reclusión perpetua. A este
OM
respecto toda la doctrina interpreta la norma aquí analizada de idéntica manera, pero a la
hora de buscar ejemplos en el Código Penal, no se encuentran delitos reprimidos
solamente con prisión perpetua, siempre que la ley prevé la pena absoluta, lo hace de
manera alternativa con la fórmula prisión o reclusión.
Por último, el 3º párrafo del art. 56 CP., establece que si alguno de los tipos concurrentes
.C
conmina penas de inhabilitación o multa, éstas se aplicarán siempre, sumándose a la pena
privativa de libertad que resulte de las reglas precedentes; es decir, se abandona el
DD
principio de la aspersión por el de la combinación (ej., el delito de homicidio imprudente
tiene una pena prevista privativa de libertad con más la de inhabilitación, por lo tanto, se
aplican de manera combinada o conjunta).
Unificación de penas
LA
El art. 58 del CP. regula lo que la doctrina ha llamado “unificación de penas”, por lo que la
finalidad de dicha norma -sostiene Núñez- subyace en establecer las pautas necesarias para
poder unificar las penas impuestas en distintas sentencias a una misma persona, aunque hayan
FI
Según Creus los distintos supuestos contemplados por el Código Penal son los siguientes:
• Cuando un sujeto, mientras está cumpliendo una pena impuesta por sentencia firme,
comete un nuevo delito, el tribunal que juzgue este último tiene que unificar la pena que
le asigne con la impuesta anteriormente, aplicando para ello las reglas de los artículos 55
y 56 del CP.
• Cuando un sujeto ha sido juzgado por diferentes hechos en distintos tribunales, llegando
a registrar varias sentencias condenatorias cuando, en realidad, debió haber sido juzgado
en un mismo proceso por todos esos hechos, corresponde que el juez que aplicó la “pena
mayor” de todas las aplicadas en los distintos procesos, deba practicar la unificación
Ahora, dado que éste es el ámbito en que con mayor frecuencia se discute si corresponde aplicar
el método de absorción o aspersión, puede pensarse que la ley ha querido consagrar éste último
al emplear la expresión “suma aritmética”.
La redacción actual del artículo 55 del catálogo sustantivo no ha venido a cambiar ninguno de los
extremos de discusión, tanto en la doctrina como en la jurisprudencia, por cuanto impone
taxativamente la suma aritmética, pero lo hace sólo respecto del máximo de la escala penal
aplicable al caso. Así, dado que el legislador no ha modificado el artículo 58 del código penal,
OM
esta norma sigue remitiendo a las disposiciones precedentes, por lo que puede afirmarse que el
sistema de unificación de penas -regido por el método composicional- se ha mantenido intacto.
El delito continuado
.C
Existen algunos tipos penales en los cuales la repetición de las conductas típicas no implica un
concurso real, sino un mayor choque de la conducta típica contra el derecho, es decir, un mayor
DD
contenido de injusto de la conducta.
Esto se deduce que la interpretación de los mismos, en el sentido de que la repetición da lugar a
un concurso real, lleva a resultados absurdos y a la imposición de penas aberrantes. Ej: quien
durante seis meses extrae una pequeña cantidad de dinero diariamente, con el propósito de
LA
apoderarse de una suma total que no puede sustraer en una única oportunidad porque sería
descubierto, conforme a otro criterio interpretativo cometería ciento ochenta hurtos y, conforme
a la regla del Art. 55 CP, podría ser penado con la aplicación de la acumulación de penas. Desde
el punto de vista de la norma que da origen al tipo, no cabe duda que lo razonable es, en estos
FI
Por supuesto, esta interpretación racional de los tipos que impide caer en lo absurdo solo puede
operar a partir del análisis de cada tipo penal y, particularmente, solo en los casos en que la
forma de afectación del bien jurídico admite grados. Cuando el contenido del injusto del hecho
es único (Ej: homicidio), esta interpretación no puede hacerse y en tales supuestos
necesariamente nos hallaremos ante una repetición de conductas que da lugar a un concurso
real.
OM
• No obstante poder existir varios ofendidos o víctimas de los delitos cometidos en
forma continuada, la naturaleza de los bienes jurídicos debe permitir la unificación
delictiva. Ej: los bienes personalísimos (como la vida) son incompatibles con la
continuidad delictiva.
.C
4. Identidad del bien jurídico afectado y en ciertos casos, en los cuales el tipo implica una
injerencia en la persona misma del titular y no solo en sus derechos, Zaffaroni afirma que
se requiere la identidad del titular del bien jurídico. Ej: no se puede hablar de continuidad
DD
si las víctimas de violación son distintas.
continuado genera como principal consecuencia que los plurales hechos dependientes sean
sancionados con una pena única, la del tipo penal que reiteradamente es llevado a cabo por el
autor.
FI
a) La individualización de la pena.
pena.
“Consiste en la determinación de las consecuencias jurídicas del hecho punible. Es una función
OM
que le corresponde al juez y que debe cumplirla dentro del marco que ofrece la legislación”.
Concepto.
Concepto.(Creus)
La individualización (o determinación) de la pena es el acto mediante el cual el juez fija las
consecuencias de un delito. Se trata de un acto complejo, en el cual, según las disposiciones
.C
legales, se debe dar cumplimiento a las diferentes funciones de la reacción penal estatal frente a
la comisión de un hecho punible.
DD
Para ello, y por estar así previsto por nuestra ley penal, el juzgador está obligado a tomar
conocimiento directo – a más de la información relativa a la causa y de las pruebas del juicio- del
delincuente que está juzgando. Tal cual reza el Art. 41 C.P. en su última parte: “… El juez deberá
tomar conocimiento directo y de visu del sujeto, de la víctima y de las circunstancias del hecho
LA
a) un criterio restringido:
restringido limitado a la determinación del quantum de la pena, es decir, a la
elección de su clase y monto; o bien
b) un criterio amplio:
amplio que comprende en el problema de determinación de la pena las formas
de cumplimiento, es decir, el modo de ejecución de la pena impuesta (ej.: suspensión de la
1. LEGAL:
LEGAL Cuando el legislador señala la pena o medida conforme al delito, de un modo
general y abstracto. Aquí se toma en cuenta las especificaciones del tipo y las pautas de la
Parte General del Código Penal.
2. JUDICIAL:
JUDICIAL Cuando la determinación de la pena la realiza el juez en su sentencia. Se delega
así en el juez el grado de precisión que el legislador no pudo darle, pues depende de las
circunstancias concretas de cada individuo y su caso.
3. EJECUTIVA:
EJECUTIVA (o Administrativa) Cuando la pena se va adecuando a la persona del condenado
OM
mediante la ejecución de la misma, en procura de su fin preventivo especial. Comprende
así a todas aquellas medidas relativas al tratamiento penitenciario.
Cada Estado, según su política criminal y sistema penal que adopte, podrá arribar a la pena del
condenado por diversos sistemas, pero existe algo común y relevante a todos, y es que: primero
.C
estará la tarea del legislador, luego la etapa de la investigación y sentencia definitiva, y
finalmente la ejecución de la pena impuesta.
DD
La historia de la determinación de la pena se ha debatido siempre entre dos valores: el de la
seguridad jurídica (que conduciría a penas absolutamente predeterminadas), y la idea de justicia
(sólo es justa aquella pena que se adecua a las particularidades del caso concreto).
está conminada de una forma fija, sino que el legislador dispuso dejar a cargo del juzgador la
tarea de optar por el monto, cantidad y especie, cuando así está previsto.
La ley determina la pena, pero es el juez quien la individualiza. Debiendo cumplir éste último con
FI
No obstante, reconocer que la pena debe ser “individualizada”, y que es el juez quien valora las
El fundamento del sistema flexible adoptado por nuestro Código, radica en la observancia de
principios fundamentales como los de: legalidad, igualdad ante la ley, abstracción de la norma y
proporcionalidad de la pena. Y por otra parte, la flexibilidad contribuye también a que la norma
no pierda vigencia ni aplicabilidad en el tiempo.
Para este autor, la individualización de la pena es la precisión que en cada caso concreto se hace
para determinar la calidad de los bienes jurídicos de que es necesario y posible privar al autor de
un delito para procurar su resocialización.
En nuestro CP, entendemos que el criterio general es que la pena debe guardar cierto grado de
relación con la magnitud del injusto y de la culpabilidad, sin perjuicio de admitir el correctivo de
la peligrosidad.
OM
Al margen de estas reglas generales, el CP establece escalas especiales, agravadas o atenuadas,
en razón del mayor o menor contenido de injusto del delito, o de la mayor o menor
reprochabilidad del injusto, dentro de las que, a su vez, el tribunal debe individualizar la pena
atendiendo siempre al criterio general antes señalado.
.C
Por último, al individualizar la coerción penal, el tribunal tiene también en algunos casos, la
posibilidad de condenar en forma condicional.
DD
B) Los criterios legales para la individualización de la pena.
pena.(Creus)
Ya sea en su faz legislativa, judicial o administrativa, el proceso de determinación de la pena no
LA
puede prescindir del estudios de los fines de la pena, analizándose las teorías absolutas
(culpabilidad), preventiva general y especial como también la integración de los criterios.
pena de toda finalidad preventiva. Para esta teoría, una vez que el infractor de la norma haya
expiado su culpabilidad, entonces podrá reingresar a la sociedad como un hombre libre.
Fue Kant quien sostuvo que el sentido de la pena es la retribución de la culpabilidad, señalando
que "como la imposición del castigo no se justifica en virtud de la utilidad social, éste no podría
ser impuesto como medio para alcanzar otros fines".
Con la aflicción de una compensación justa, según esta teoría, se agota el contenido de la pena.
Todos los otros efectos, intimidación, corrección, entre otros, son efectos concomitantes
favorables que nada tienen que ver con la naturaleza misma de la pena.
OM
.C
DD
LA
FI
Esta concepción de los castigos penales propone como fin de la misma desarrollar una influencia
inhibitoria del delito en el autor. Esta finalidad se subdivide en tres fines de la pena:
OM
porque buscan reincorporar el autor a la comunidad, el aseguramiento da expresión al aspecto
negativo de la resignación en la recuperación del autor para la comunidad. Al respecto,
solamente cuando la influencia resocializadora sobre el autor no ofrezca perspectivas de éxito, la
medida de la pena se orienta conforme a la necesidad del aseguramiento de la colectividad,
.C
donde se acaba toda posibilidad de corrección.
Von Liszt afirmaba que sólo la pena necesaria es justa, siendo el castigo necesario cuando, desde
DD
el punto de vista preventivo especial, impide la reincidencia del autor del delito. Por esa causa,
dentro de la prevención especial, la culpabilidad carece de toda función en la determinación
judicial de la pena.
Entre las principales críticas a esta posición se indica que, en pos de una supuesta
LA
"resocialización" no se ponen límites fijos a las penas, ya que el término queda condicionado a la
confirmación de un eventual resultado reeducativo.
Además es importante señalar que las medidas reeducativas impuestas en forma coactiva no son
FI
Por otra parte, desde el punto de vista preventivo, sería factible proponer la privación de la
Las teorías preventivas especiales padecen en gran medida de la insuficiente distinción entre
penas y medidas de seguridad, dado que toman como medida para la pena no la gravedad del
juicio de culpabilidad sino la peligrosidad social del autor (en especial la probabilidad de
reincidencia), para lo cual el hecho cometido tiene sólo el valor de síntoma, no pudiéndose dar
una medida para la pena.
OM
La posición de las teorías de la prevención general se orienta más bien a la intimidación, ya sea
mediante la ejecución ejemplificadora de la pena o a través de graves conminaciones de penas,
enmarcándose en este aspecto la teoría de la coacción psicológica de Anselm von Feuerbach.
Este último explicó que la prevención general encuentra sustento en la existencia de una
coacción psicológica, consecuencia del efecto intimidatorio que la aplicación de las penas tiene
.C
sobre los potenciales infractores a la ley.
proceso de punición no ha de ser la maldad del hecho sino, por el contrario, el mantenimiento de
una determinada configuración social. Indica este autor que las sociedades sólo existen en tanto
están reguladas por normas reales y generales, es decir, los individuos no deben actuar conforme
a sus esquemas individuales sino que deben comportarse en concordancia con un ordenamiento
FI
Los cuestionamientos principales se refieren a que no existen criterios definidos acerca de frente
a que comportamientos el estado está facultado a intimidar y, en segundo lugar, que existe una
imposibilidad empírica de demostrar el efecto intimidatorio que se le asigna a los castigos
legales. Asimismo esto nos lleva a la peligrosa situación de que la prevención general, para
alcanzar sus objetivos, no fija un límite al poder punitivo del estado.
Queda dicho que rechazamos de plano las teorías que pretenden que en el Art. 41 CP se hallan
solo indicios de peligrosidad, la que pretende que su inciso 1 se refiere a la cuantificación del
OM
injusto y su inciso segundo a la culpabilidad integrada con la peligrosidad solamente, como
también la que afirma que la peligrosidad es en nuestro sistema solo uno de los índices sino que,
por nuestra parte, entendemos que tiene el valor de correctivo, puesto que la principal
proporción requerida es entre el delito y la pena restando la peligrosidad como un simple y
.C
eventual correctivo atenuante.
La cuantía de lo injusto
DD
En nuestra legislación penal:
Art. 40 prevé: “En las penas divisibles por razón de tiempo o de cantidad, los tribunales
fijarán la condenación de acuerdo con las circunstancias atenuantes o agravantes
particulares de cada caso y de conformidad a las reglas del artículo siguiente”.
LA
condiciones personales, así como los vínculos personales, la calidad de las personas y las
circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión que demuestren su mayor o menor
peligrosidad. El juez deberá tomar conocimiento directo y de visu del sujeto, de la víctima
y de las circunstancias del hecho en la medida requerida para cada caso”.
El artículo 41 del C.P. tiene una estructura similar al parágrafo 46 del Código Penal Alemán, en
cuanto en ambas normas se enuncian factores a ser tenidos en cuenta por el juez al fijar la pena,
pero sin predeterminar si ellos agravan o atenúan, o cuánto valor ha de asignársele. Y si bien
nuestra ley no contiene la afirmación explícita del ilícito culpable como base de la pena, esto ha
El correctivo de la “peligrosidad”.
“peligrosidad”.(Zaffaroni)
OM
las circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión del hecho, y consideradas en el estado que
presentan al tiempo de imponer la pena, a efectos de hacer un pronóstico de su conducta futura,
para determinar el grado de probabilidad de comisión de futuros delitos que guarden cierta
relación vinculatoria con el ya cometido.
culpabilidad
En principio la peligrosidad es un juicio que mira hacia el futuro, en tanto que la culpa bilidad es
.C
un juicio que mira hacia el pasado.
No obstante ser un juicio de probabilidad, no puede menos que ser un juicio “total” acerca del
DD
hombre, lo que es tarea irrealizable para otro hombre y, en particular, para el tribunal.
Por otra parte, las circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión revelan ciertas características
personales que deben considerarse no tal como se hallaban en el momento que tuvo lugar la
LA
conducta, sino como se encuentra cuando es menester aplicar la pena, es decir, condenar, toda
vez que este juicio opera a los efectos de la penalidad y no a los de determinar si hubo delito.
Además, la peligrosidad como juicio de probabilidad acerca de la comisión futura de delito, deja
FI
abierto un interrogante: ¿De qué delitos? La respuesta no puede ser “de cualquier delito”. Hay una
limitación que emerge del propio requisito de la ley (que la proclividad resulte de las
circunstancias del hecho), lo que indica que puede tratarse solo de posibles delitos futuros que
deben hallarse en cierta relación vinculatoria con el delito cometido.
El análisis de los factores que los agravan o atenúan debe ser realizado en forma amplia, de
acuerdo a las representaciones morales de la comunidad en su conjunto.
En efecto, el ilícito culpable es la base de la determinación de la pena pues la sanción penal debe
OM
ser proporcional al ilícito cometido, de lo que se infiere que la medida de la pena se gradúa
fundamentalmente de acuerdo a la gravedad de la culpabilidad y, en este sentido, los factores
generales y los individuales son decisivos para la determinación del grado de culpabilidad y la
gravedad de la pena.
.C
Por esta razón, en primera instancia, luego de haber individualizado la figura legal aplicable al
caso, el juez debe valorar qué alcance tuvo la lesión jurídica, analizando la magnitud y cualidad
del daño causado.
DD
En efecto, nuestra ley ordena que, al momento de establecer la pena aplicable al caso concreto el
juez tenga en cuenta "la extensión del daño causado".
En el derecho penal este problema es tratado con la denominación de "repercusiones del hecho".
LA
En esta legislación, este concepto, tomado en términos amplios, abarca tanto las consecuencias
típicas cuanto las extratípicas, pudiendo ellas tomar la forma de lesión y puesta en peligro.
lesión del bien jurídico (gravedad de las lesiones corporales, duración de la privación de la
libertad, medida de la puesta en peligro producto de haber conducido en estado de ebriedad).
Sin embargo, al considerar este tipo de consecuencias no debe obviarse que existe la prohibición
de la doble valoración.
En este sentido, algunos autores creerán que es imprescindible realizar una clara distinción entre
el componente de acción y el del resultado. Quienes no acepten los postulados de una teoría
basada en el disvalor de la acción, afirmarán que la no producción del resultado es una causa
legal para atenuar la pena. En esta misma línea de pensamiento dirán que, los esfuerzos del reo
OM
para reparar el daño o para llegar a un compromiso con la víctima, también operan aminorando
el castigo.
.C
monto de la sanción aplicable.
La intervención de la víctima
DD
El tema tratado en el punto anterior nos introduce a otro aspecto de la determinación judicial de
la pena que se relaciona con la importancia práctica que reviste la conducta de la víctima en
la materia que nos ocupa.
LA
Los aspectos centrales de la influencia del accionar de la víctima son los siguientes: los efectos
sobre las consecuencias del hecho, su influencia en la conducta del autor y la significación de la
víctima para la prevención especial y general.
FI
Asimismo, en aquellos casos en los que su facultad de disposición no sea tan amplia, su
aprobación al hecho, tendrá relevancia para graduar la pena aplicable.
Las cualidades personales y sociales de la víctima también pueden ser relevantes para poder
valorar el grado de daño asumido por el autor. Así, por ejemplo, desde el punto de vista de las
consecuencias del hecho tienen efecto de incremento de la ilicitud cuando el abuso se comete
respecto de una persona enferma, cuando se sustraen los ahorros de un jubilado, los abusos
sexuales a los niños, etc.
Otro problema a tratar en este punto se relaciona con la actitud de la víctima que, de algún
modo, "provoca" la comisión del delito. La resolución de este tipo de cuestionamientos, en
definitiva, depende de decisiones de tipo valorativas.
OM
En todos los casos cobra especial relevancia la naturaleza de la acción y los medios empleados
para llevarla a cabo.
A la ejecución del hecho pertenece la elección de la modalidad de comisión del ilícito, para lo
cual es necesario conocer en qué lugar u hora fue cometido. Estas circunstancias de tiempo,
.C
lugar, modo y ocasión -a las que alude el inciso 2º del artículo 41- son útiles para revelar la
gravedad del ilícito.
DD
Asimismo, los medios utilizados para consumar el delito y la peligrosidad emanada de ellos,
ocupan un lugar importante en la determinación judicial de la pena.
doblemente. Esto es así ya que en muchos supuestos, las circunstancias del hecho, ya
constituyen el fundamento del tipo penal; y en esos casos, la prohibición de la doble valoración
impide que esa característica sea considerada nuevamente.
FI
En efecto, en un robo calificado por el uso de un revólver cargado y apto para el tiro, no se
podría agravar el hecho por el uso del arma. Sin embargo, sí podría considerarse que "es más
peligroso" utilizar como arma un revólver cargado que un palo de billar.
Las circunstancias que agravan o atenúan tipos penales básicos pueden ser útiles para
orientarnos en otros supuestos delictivos en los que existan diferencias semejantes. Es lógico
que, si se sigue esta guía, deberá identificarse previamente la categoría de delitos que se va a
agravar o atenuar.
En cuanto a la intervención del autor en el hecho corresponde hacer las siguientes distinciones.
La intervención de varias personas en un hecho delictivo, revelará un ilícito más grave en cuanto
represente un mayor poder ofensivo para la víctima, derivado de las circunstancias de comisión
del delito plurisubjetivo.
OM
La letra del artículo 41 del Código Penal es clara. Al momento de evaluar cuáles fueron los
motivos que impulsaron al autor de un delito a cometerlo debe tomarse en cuenta la miseria o la
dificultad para ganarse el sustento propio o de los suyos.
Generalmente, una situación económica apremiante, cuando fue la que condujo a la realización
de un delito contra la propiedad, será considerada como un factor que disminuye el reproche
penal.
.C
Por el contrario, cuando el autor de un delito actuó movido por sentimientos de odio, codicia,
DD
con placer ante un delito contra la vida o integridad física de una persona, la doctrina es conteste
en valorar este tipo de motivaciones en contra del imputado, es decir, agravando el reproche
penal. Sin perjuicio de ello, al considerar este tipo de motivaciones debe cuidarse de no realizar
dobles valoraciones. En efecto, toda vez que existen algunas normas penales que incluyen en el
LA
tipo objetivo referencia a especiales elementos subjetivos, este tipo de motivaciones no puede
ser imputado contra el infractor en dos oportunidades.
El inciso 2º del artículo 41 del Código Penal hace mención a la personalidad del autor como un
aspecto de particular importancia al momento de graduar la pena.
A las circunstancias personales del autor pertenecen, entre otras, su edad, su estado de salud,
su sexo, su inteligencia, su educación su posición profesional y social. Esta enunciación
demuestra que el problema que aquí se plantea se relaciona con el tratamiento igualitario de los
casos llevados a estudio.
Al igual que los otros factores enunciados en este inciso, se plantea la cuestión de si estos
factores son relevantes sólo desde el punto de un enfoque de la prevención especial o si también
entran en consideración para determinar, en cualquier caso, el monto de la pena a aplicar.
Sin embargo, consideramos que –aún en un derecho penal de acto, sería imposible no considerar
determinados aspectos de la personalidad del autor ya que ellos, es indudable, inciden en la
realización de su ilícito.
Esto rige especialmente para la cuestión relativa al posible efecto agravante de una elevada
posición profesional o social del autor cuando ella fundamenta deberes incrementados sobre el
OM
bien jurídico lesionado. El sexo, en cuanto tal, no es una causa suficiente para la diferenciación
en la pena, sino más bien, se le debe agregar puntos de vista especiales que caractericen la
situación del hecho (por ejemplo, por la mayor o menor agresividad impuesta sobre la víctima).
La calidad de extranjero no tiene, por lo general, efecto agravante o atenuante de la pena. Sin
.C
embargo, su condición sí debe ser tenida en cuenta si alega la existencia de un error de
prohibición ya que la mayor o menor evitabilidad del mismo puede tener un efecto atenuante de
DD
la culpabilidad.
Para algunos autores, la calidad de funcionario tampoco representa, por lo general, una causal de
agravación. Esto es así ya que lo común resulta que el elemento de esa calidad determina la
conminación penal en cuanto tal, de manera que una valoración de esta circunstancia en la
LA
En síntesis, la situación personal del autor -su nivel de instrucción, su origen social,
su estructura familiar- resulta determinante para poder establecer si él pudo ser más prudente,
FI
si pudo conocer la antijuridicidad de su hecho o si, por ejemplo, era capaz de motivarse en la
norma y actuar conforme a ese conocimiento.
La conducta precedente
OM
Hay reincidencia siempre que el condenado por sentencia firme a pena privativa de la libertad,
dictada por cualquier tribunal del país, cometiere un nuevo delito (artículo 50, inciso 1). La
condena anterior, que debe estar firme, vale decir, que no admita recurso alguno, puede haber
sido dictada en el país o en el extranjero. La primera condena impuesta a la persona no se tendrá
.C
en cuenta a los efectos de la reincidencia, cuando hubiere transcurrido otro término igual al de
ella, que nunca excederá de diez años ni será inferior a cinco (artículo 50, inciso 4).
DD
Con relación a la determinación de la pena y al establecimiento de un marco de culpabilidad
adecuado, la reincidencia es uno de los puntos más debatidos en la doctrina nacional.
El artículo 41 del Código Penal ordena tomar en cuenta las reincidencias en que hubiere incurrido
el autor. La doctrina y la jurisprudencia, por su parte, se han encargado de sostener que ésta
LA
debe ser valorada como agravante. El fundamento de tal afirmación encuentra apoyo en el
artículo 14 del Código Penal que deniega a los reincidentes la posibilidad de acceder a la libertad
condicional.
FI
Cabe hacer mención a la modificación introducida al artículo 50 del Código Penal. En virtud de
esta reforma se reemplazó el sistema de reincidencia "ficta" por el de reincidencia "real". Hasta
ese momento, sólo se exigía la preexistencia de una condena, sin importar si había sido
efectivamente ejecutada o no. La condena misma era considerada como advertencia suficiente.
OM
Debemos tener presente que el analizado constituye un tema de suma importancia práctica
habida cuenta que mediante el mismo el condenado puede obtener enormes beneficios y, por el
contrario, una defectuosa aplicación del mismo puede ocasionarle enormes perjuicios.
Muchas veces los funcionarios actúan en forma irresponsable omitiendo cumplir con la
.C
unificación o bien al realizarla no aplican un criterio de razonabilidad y justicia al individualizar la
pena única. En todos estos casos muchas veces la consecuencia culmina siendo que el ciudadano
debe afrontar una pena más gravosa -sea esta de ejecución condicional o efectiva- o bien que se
DD
vea impedido de recuperar su libertad ambulatoria por Ej: por aplicación del art. 13 del C.P. como
acontece en el caso de que recaiga una nueva sentencia en la cual el juez omita unificar cuando
el ciudadano se encuentra próximo a obtener el beneficio pues el condenado deberá aguardar
dicho trámite a efectos de determinar su situación.
LA
Esta somera explicación denota claramente la importancia práctica del instituto analizado.
Unificación De Sentencias
FI
Este instituto se encuentra regulado en la frase: “….cuando se hubieren dictado dos o más
sentencias firmes con violación de dichas reglas”.-
La unificación de sentencias tiene lugar toda vez que una persona haya sido juzgada conculcando
Las reglas del concurso real establecen que cuando un sujeto deba ser juzgado por más de un
hecho delictivo siendo los mismos independientes entre sí la escala sancionatoria debe
computarse tomando como mínimo el mínimo mayor de ambas escalas sancionatorias y como
máximo el equivalente a la sumatoria de los máximos de las escalas previstas para cada delito
hasta el límite de cada especie de pena (arts. 55 y 50 del C.P.).-
Sin embargo, muchas veces los hechos que han configurado un concurso real son juzgados en
forma independiente en procesos diferentes recayendo diferentes sentencias y penas lo cual
La primer parte del art. 58 se encuentra destinada a remediar esta situación. Disponiendo que
en caso de mediar una sentencia condenatoria firme toda vez que se deba juzgar al mismo sujeto
por un hecho cometido con antelación al hecho que diera origen a la primer condena, deben ser
OM
aplicadas las reglas concursales debiendo el juez que pronuncia la segunda condena proceder a
la unificación de las sentencias o condenas aplicando para ello las pautas del art. 55 del C.P.-
Además, dispone que en caso de que se vulnere esta regla la unificación deberá ser practicada
por el magistrado que haya pronunciado la pena de mayor entidad.-
.C
Obviamente el concurso real entre la condena pronunciada y el hecho juzgado posteriormente
solo tendrá lugar cuando el delito juzgado en segundo término sea cometido con antelación al
DD
hecho juzgado en la sentencia dictada en primer término, pues en ese caso es evidente que
ambos hechos debieron ser juzgados en un único proceso y ser sometidos a un análisis único y
es de esperar que la omisión o imposibilidad de aplicar las reglas concursales conduzca a un
agravamiento de la pena.-
LA
Unificación De Penas
Penas
El segundo instituto regulado en el art. 58 del C.P. es la unificación de penas. Se encuentra
reglamentado en la frase: “Las reglas precedentes se aplicarán también en el caso en que
FI
después de una condena pronunciada por sentencia firme se deba juzgar a la misma persona que
esté cumpliendo pena por otro hecho distinto”.-
La unificación de penas tiene lugar toda vez que haya sido dictada una condena y el sujeto deba
ser juzgado por un hecho cometido con posterioridad al dictado de la condena precedente,
siempre y cuando la primer pena conserve su vigencia.-
En estos supuestos el problema no radica en la conculcación de las reglas concursales sino que
se intenta lograr el respeto del principio de pena única ya que un sujeto no puede cumplir
simultáneamente dos penas (por ej. no puede cumplir el tratamiento penitenciario tendiente a su
resocialización en dos provincias distintas en forma simultánea de modo que hay que unificar la
ejecución de la pena) como así tampoco en forma sucesiva lo cual conculcaría derechos
fundamentales. Es decir que se busca unificar la ejecución de la pena, de modo que podríamos
Considero que la unificación de penas debe ser diferenciada de la acumulación de penas prevista
en el art. 27 del C.P. la cual es aplicable cuando el condenado comete un nuevo delito estando
vigente una condena de ejecución condicional, el C.P. dispone que en esos caso debe cumplir
ambas sanciones y que la misma necesariamente será de cumplimiento efectivo) -si bien la
finalidad es la misma pena única, aquí es una sanción y el procedimiento de unificación es
diferente-.-
OM
se arriba a la pena única, tienen en común la finalidad de lograr una ejecución única de diversas
penas pero el procedimiento y resultado de unificación es diferente en ambos casos.-
En definitiva, en el caso del art. 27 el sujeto debe cumplir la totalidad de ambas penas es decir,
las mismas se acumulan o adicionan.-
.C
Cabe aclarar que las reglas de competencia son comunes a todos estos institutos: el juez que
dicta la segunda condena debe unificar y si lo omite la obligación recae sobre el que haya dictado
DD
la pena mayor.-
COMPETENCIA
El art. 58 del C.P. regula además la competencia del tribunal que debe realizar las operaciones de
LA
unificación. La norma señala que la pena única, tanto por unificación de sentencia como de pena
debe formularla el órgano jurisdiccional que imponga la segunda condena.-.
Una vez que ambas sentencias han adquirido firmeza es el tribunal que haya impuesto la pena
mayor quien debe realizar la operación de unificación, y la misma ya no puede ser realizada de
oficio sino a pedido de parte.-
El criterio para determinar cuál de las dos penas es mayor es recurrir a la especie de pena y
dentro de una misma especie la de mayor duración temporal.-
Ocurre que en este caso ambas penas pierden vigencia ya que cede la cosa juzgada, porque
obviamente, al menos, la sentencia precedente debe encontrarse firme. Esto es en teoría,
producto de que cede la cosa juzgada, sin embargo, en los hechos es difícil que un juez imponga
una pena menor a la de la primer condena o a la que haya pronunciado el tribunal unificante. En
efecto, si el proceso de unificación recae en el juez que dictó la primer condena es difícil
imaginar un caso en el cual el juez pueda explicar porque motivo al unificar modifica el criterio
de individualización que adoptara anteriormente en el mismo caso, sin embargo, debemos
OM
admitir que el juez conserva dicha facultad por. ej. podría haberse producido una notable
modificación en las condiciones socioeconómicas o familiares del condenado: ha conseguido
trabajo, posee un núcleo familiar estable, no ha cometido nuevos delitos, etc., pero es obvio que
el nuevo criterio deberá ser debidamente explicado, es decir es difícil que se aparte del mínimo o
de la pena que impuso el juez unificante pero no imposible.-
.C
En conclusión, en caso de unificación de sentencias pierde vigencia la sentencia única y
exclusivamente en lo referente a la pena: por lo que el juez unificante deberá volver a analizar la
DD
modalidad de ejecución, las reglas de conducta a las que se somete al condenado, pierde
vigencia la libertad condicional, la inhabilitación absoluta del art. 12 del C.P., la medida de
seguridad del art. 52 del C.P., la inhabilitación del art. 20 bis, la multa del art. 22 bis del C.P.,
etc..-
LA
Diferente es la situación en caso de unificación de penas toda vez que en este caso ambas penas
conservan su vigencia pues han pasado en autoridad de cosa juzgada y no se han conculcado las
reglas concursales de modo que no existe impedimento alguno para la ejecución de ambas penas
FI
En este caso simplemente se trata de realizar una suerte de cómputo único, por lo que es obvio
que dicha operación se hace tomando la porción de pena que le resta cumplir auditando al
No tiene sentido realizar un trámite tendiente a la unificación , pues ello genera dilaciones ya que
en la sentencia única se unifica la pena y una vez firme la misma se hace el cómputo, de modo
que .-
Trámite
Las reglas de unificación del art. 58 del C.P. contienen aspectos sustanciales y formales ya que
OM
determinan quien es el tribunal competente para realizar la unificación prescribiendo además
que dicho órgano debe dictar una sentencia, sin embargo, no establecen cual es el trámite que se
debe adoptar a efectos de la unificación.-
.C
pretensión punitiva por lo que el tribunal debe recopilar los antecedentes del caso necesarios
para realizar la nueva individualización de pena (copia de ambas sentencias, documentación que
acredite el tiempo de detención en cada uno de los procesos, actas de audiencias de visu,
DD
actualizar antecedentes penales, etc.).-
Cuando la persona permanece en libertad no existe problema alguno, la misma aguardará a que
se realicen estos trámites y le notifiquen cual ha sido la decisión, sin embargo, si la persona se
LA
puede carecer de dicha información por ej. por ignorar cuanto tiempo lleva de cumplimiento de
pena, en este aspecto debemos tener presente que en algunas provincias como Sta. Fe el control
de la ejecución de la pena está a cargo de otro juzgado diferente al sentenciante, por lo que, en
el caso planteado, se deberá oficiar a dos dependencias judiciales diferentes) por lo que dicho
dato deberá ser solicitado al juez de ejecución penal.-
OM
traslado a las partes, el problema es que esta inteligencia se basa en una de las posibles
interpretaciones de la norma.-
Aspectos problemáticos
La norma del art. 58 establece que para que la unificación -de pena o sentencia- proceda es
.C
necesario que el ciudadano “…esté cumpliendo pena”,
pena” lo cual es incorrecto; en realidad debe
estar vigente la pena aunque el sujeto no necesariamente la esté cumpliendo ya que en el caso
del art. 27 el sujeto no está cumpliendo pena sino que la misma conserva vigencia por cuatro
DD
años aunque por ej. la misma sea de un año de ejecución condicional, de modo que si a los tres
años comete un nuevo delito no está cumpliendo pena pero se debe unificar la pena por el
procedimiento de acumulación.-
LA
La norma analizada en su primer párrafo expresamente señala que debe estar cumpliendo pena
siendo evidente que si la sanción feneció el condenado no está cumpliendo pena o no está
FI
De todos modos es claro que no puede hacerse cumplir a alguien una pena que se extinguió pero
esto no impide que pueda computarse o valorarse la pena cumplida al momento de individualizar
la pena única.-
El no computar la pena anterior puede desencadenar un claro perjuicio para el condenado toda
vez que por ej. la privación de libertad durante el proceso o cumpliendo pena puede ser
significativa (ej. cumplió una pena de 10 años por homicidio y ahora recae una sentencia de un
mes o un año por daño o hurto). Si se computa la sentencia cumplida podría unificarse en la pena
única de 10 años y de esa manera evitar el cumplimiento de la segunda pena.-
En realidad esta posibilidad se encuentra vedada por la norma, por lo que una futura reforma
debería modificarse el art. 58 y, estando vigente dicha norma las partes deberían plantear la
inconstitucionalidad del mismo en cuanto veda la posibilidad de computar la pena extinguida
perjudicando al imputado.
OM
efectivo con otras de carácter condicional.-
.C
criterio jurisprudencial que admite la unificación de una pena de cumplimiento efectivo con otra
de ejecución condicional, contempla el caso de que siendo condicional la primera, debiese ser
DD
revocada por causa de la efectividad de la segunda (C. Nac. Cri. yCorr. Sala III, 23/12/86, “Lucero
Funes”); o de que siendo condicional la segunda, dejase sin efecto una pena anterior de
cumplimiento efectivo (Trib. Oral en lo Crim. n°1, 2/10/03, “Duarte Miguel”), pero ni uno ni otro
supuesto se ajustan a la especie”, f.281 vto.).-
LA
Por mi parte, considero que no existe impedimento porque se trata de aplicar reglas de índole
sustancial y el tema del perjuicio no es un argumento viable pues es evidente que nadie puede
argumentar “no se me pueden aplicar las reglas concursales porque ello me perjudica” pues
además ello sería extensible a todos los institutos por ej. Libertad condicional, además que las
FI
reglas concursales siempre implican un perjuicio porque en el caso del concurso material
permiten elevar el tope máximo de la escala única.
OM
Por otra parte, hay una coerción formalmente penal, que abarca a la anterior y la excede
sobradamente, porque se ocupa de todas las medidas que dispone la ley penal, incluso para los
casos en que no hay más que una exterioridad del delito, como también de otras consecuencias
del delito que por su naturaleza no pertenecen al derecho penal, pero que están tratadas en la
ley penal (reparación del perjuicio).
.C
A) Alcance y sentido de la voz “Punibilidad” (Zaffaroni)
DD
La punibilidad.
punibilidad.
Cuando Beling introdujo el concepto de tipo, también siguió definiendo al delito como “punible”
(delito es, dentro de los que dan esta respuesta, una conducta típica, antijurídica, culpable y
LA
punible).
conceptuales.
¿Cuál es la solución correcta? Entendemos, con casi toda la doctrina nacional, que la punibilidad
no es un carácter del delito, sino un resultado de su existencia.
1. Puede significar merecimiento de pena, ser digno de pena: es este sentido (toda conducta
típica, antijurídica y culpable) por el hecho de serlo, es punible;
2. Puede significar posibilidad de aplicar pena: en este sentido no a cualquier delito se le
puede aplicar pena, es decir, no a todo delito se le puede dar lo que tiene merecido. La
punibilidad en el sentido a) no siempre puede satisfacerse en el sentido b). Ello no
obedece a que falte ningún carácter del delito, sino a una cuestión que tiene lugar y opera
dentro de la misma teoría de la coerción penal. La afirmación de que el delito es punible
(sentido a) surge de la afirmación de que es delito, pero la coercibilidad a que da lugar el
OM
delito no siempre opera, porque hay una problemática que le es propia y que
ocasionalmente impide su operatividad (sentido b).
Una conducta es punible Digna de pena Por ser típica, antijurídica y culpable
(delito)
Hemos visto que pese a que todo delito es merecedor de pena, ocasionalmente la pena no se
aplica, porque hay algún impedimento que obsta a que su imposición opere, es decir, algún
impedimento a la operatividad de la coerción penal.
FI
Esto significa que la coerción penal por el delito solo opera dadas ciertas condiciones, que
genéricamente llamamos condiciones de operatividad de la coerción penal.
también requisitos de perseguibilidad, y son las que rigen para ciertos delitos en particular, las
que se refieren a las condiciones de ejercicio de las acciones procesales en general, y un tercer
grupo que consiste en la ausencia de impedimentos de perseguibilidad, es decir, de causas de
extinción de la acción penal.
Las condiciones de operatividad de la coerción penal que tienen carácter penal, pueden consistir
en causas personales que excluyen la penalidad, o bien pueden ser causas personales que
cancelan la penalidad.
OM
1. Condiciones de carácter procesal.
procesal.
Son las que incluyen las exigencias del propio debido proceso legal, como ineludible presupuesto
constitucional.
Éstas impiden el castigo, no por afectar la potestad estatal de castigar en sí misma -como en el
.C
caso de las condiciones de carácter penal-, sino por tener como principal objetivo evitar el inicio
o la prosecución de un proceso penal. Razón por la cual, a estas condiciones suele llamárselas
DD
también: “requisitos de perseguibilidad”.
Pese a su carácter material, el Código Penal Argentino se refiere en varias ocasiones a ellas, lo
cual reviste un fundamento también constitucional: establecer un mínimo que deje a salvo el
principio de igualdad ante la ley, frente a la diversidad de legislaciones procesales penales.
LA
Se trata, en definitiva, de condiciones para ciertos delitos, para ciertas acciones privadas o
dependientes de instancia privada, y para la extinción de la acción penal.
FI
La muerte del autor puede operar como causa personal de cancelación de la pena si se produce
después de la sentencia y mientras esta se está ejecutando.
Finalmente, el presupuesto de esta causal es: la muerte del sujeto. Puede tratarse de la muerte
natural o real (art. 103 C.C.), que se produce en el instante en que se detienen las funciones
cardiocirculatorias y respiratorias; o puede tratarse de un proceso irreversible de muerte cerebral
OM
(art. 23 Ley de Trasplante de órganos Nº 24.193).
.C
delito, a su facultad de iniciar o proseguir el ejercicio de la acción penal, siempre que se
trate de un delito de acción privada (art. 73 C.P.).
DD
Así como el perdón del ofendido es una causa personal de cancelación de la pena cuando tiene
lugar después de la sentencia condenatoria, la renuncia del agraviado extingue la acción penal en
los delitos de acción privada.
El fundamento de esta causal extintiva, por su parte, se vincula con la naturaleza del bien jurídico
LA
ofendido en el que el interés del particular se torna tanto o más importante que el del propio
Estado.Sus notas distintivas son:
Puede ser general o personal: la ley se refiere a la renuncia del agraviado sin restricción
alguna.
Sólo perjudica al renunciante y a sus herederos: la renuncia no puede hacerse extensiva a
c) Oblación de la multa:
multa
“El Art. 1 de la ley 23.077 establece la extinción de la acción por delito penado con multa, en
cualquier estado del jurídico por el pago voluntario del máximum de la multa correspondiente al
delito de las indemnizaciones a que hubiere lugar.”
En virtud de ella se hace cesar la facultad de perseguir y juzgar un hecho delictuoso ya ocurrido,
impidiendo así un pronunciamiento jurisdiccional condenatorio, a partir del pago por el imputado
de un monto determinado de la multa que le hubiese correspondido.
Reviste entonces un carácter netamente personal. Con lo cual, si el delito ha sido obra de varios
partícipes, la acción sólo se extinguirá respecto de aquel que hizo el pago.
Como bien afirma Carlos Luis Lascano (h): “Lo que se pretende es la liberación de la sanción
OM
informal y estigmatizante que significa el sometimiento a proceso penal. Es el precio que el
ciudadano paga por detener el funcionamiento de la maquinaria estatal represiva”.
Este instituto es viable sólo cuando se trate de delitos reprimidos exclusivamente con pena de
multa.
multa Y no será factible tampoco cuando pueda aplicarse, aunque sea en abstracto, otra pena:
.C
alternativa, conjunta, accesoria o complementaria.
Por último, los efectos de la sentencia condenatoria que recepta la oblación voluntaria de la
DD
multa, no produce efecto a los fines de:
de
-la reincidencia,
de las acciones.
El titulo XI de nuestro CP lleva por rubrica “Del ejercicio de las acciones”. Se refiere a las acciones
procesales, es decir, lo que en derecho procesal penal se llaman “acciones penales” y que
consisten en “el poder jurídico de promover la actuación jurisdiccional a fin de que el juzgador se
pronuncie acerca de la punibilidad de hechos que el titular de aquella reputa constitutivos del
delito”.
La regla general en la materia es el carácter público de la acción penal. Ello surge del art. 71 que
establece que deberán iniciarse de oficio todas las acciones penales con excepción de las que
dependieren de instancia privada y las acciones privadas (arts. 72 y 73 C.P.), en concordancia con
el artículo 120 de la Constitución Nacional (texto reformado en 1994), conforme al cual: “el
Ministerio Público tiene por función promover la actuación de la justicia en defensa de la
legalidad, de los intereses generales de la sociedad”.
OM
Los caracteres de la acción penal pública son:
• Oficialidad:
Oficialidad La oficialidad de la acción significa que la misma debe promoverse por el
Ministerio Público, sin necesidad y con independencia, de cualquier instancia o
manifestación de voluntad del ofendido o de cualquier otro particular.
.C
• Legalidad u obligatoriedad:La
obligatoriedad legalidad u obligatoriedad
obligatoriedad refieren a que el Ministerio Fiscal
debe promover la acción, ante el mero conocimiento, por cualquier vía, de la posible
DD
comisión de un hecho con apariencia delictual, sin que pueda dejar de hacerlo por
razones de oportunidad, mérito o conveniencia, menos aún por cualquier manifestación
de voluntad en contrario del titular del bien jurídico protegido.
• Irretractabilidad:
Irretractabilidad Por su parte, la irretractabilidad de la acción implica que, una vez
LA
promovida, la misma no puede suspenderse o dejarse sin efecto, salvo disposición legal
expresa en contrario, debiendo continuarse hasta que el proceso culmine por
sobreseimiento o sentencia de condena o absolución; aún a pesar de cualquier interés o
manifestación de voluntad en contrario de la víctima del delito o su eventual conciliación
FI
con el autor.
• Indivisibilidad:
Indivisibilidad La indivisibilidad trae como consecuencia que la acción debe dirigirse
contra todos los posibles autores o partícipes en el hecho, no pudiendo hacérselo solo
Con esas características huelga decir que la víctima resulta totalmente ajena al ejercicio de la
acción.
OM
Acciones dependientes de instancia privada,
privada son acciones procesales públicas que se
hallan sometidas a la condición de que el agraviado o su representante formule la
correspondiente denuncia.
.C
ellas se supedita a la denuncia o acusación del agraviado o de su tutor, guardador o
representantes legales, la decisión de instar el inicio o promoción de las mismas.
DD
El fundamento de estas acciones es tutelar el interés de la víctima que, a pesar de la lesión a sus
derechos que implican los delitos de que se trata, puede legítimamente preferir evitar la
divulgación del hecho y toda las consecuencias que para su intimidad representa la tramitación
del proceso penal. Impedir en definitiva, el riesgo de la revictimación.
LA
El fundamento aludido, sin embargo, sólo es válido respecto de los delitos previstos en el inciso
1° del artículo 72 (arts. 119, 120 y 130 Código Penal), pues se trata de delitos que, por sus
connotaciones sexuales, su divulgación puede afectar legítimos sentimientos de la víctima.
FI
Aunque con distinto alcance, también puede aplicarse este fundamento a los casos del inciso 3°
del art. 72 (impedimento de contacto de los hijos menores con sus padres no convivientes), en
cuanto al daño que la ventilación del proceso puede significar para los hijos menores.
En cambio el supuesto del inciso 2° del artículo 72 (lesiones leves dolosas o culposas) es ajeno a
los fundamentos de la norma y sería más propio incluirlo entre los delitos de acción privada
(artículo 73 Código Penal).
En estos casos, entonces, la iniciación de la acción está subordinada a la instancia inicial del
ofendido o sus representantes, mediante denuncia o querella. Pero efectuada dicha instancia
estas acciones participan de todos los demás caracteres de las acciones públicas: el Ministerio
Público debe continuarlas oficiosamente contra todos los eventuales autores y partícipes, no
• Acciones privadas,
privadas solo se procede por querella del agraviado o de sus guardadores o
representantes legales. En tanto que la denuncia es la mera noticia que del hecho se da al
juez o a la autoridad preventora, la querella es la acción misma que se lleva adelante en el
OM
proceso (que mueve el proceso).
En un muy reducido grupo de delitos (art. 73 C.P.), todos ellos de escasa gravedad, cede la regla
del carácter público de la acción. Se trata de los delitos de acción privada, cuya titularidad y
ejercicio corresponde al agraviado o sus guardadores o representantes legales, y -sólo en los
.C
casos de calumnias e injurias- al cónyuge, hijos, nietos o padres sobrevivientes, después de la
muerte del ofendido (art. 75 C.P.).
DD
Aquí únicamente puede procederse por iniciativa de los mencionados, no pudiendo hacerlo de
oficio el Ministerio Público (art. 76 C.P.).
El carácter distintivo de esta acción es su disponibilidad por el ofendido, lo que supone también
FI
su retractabilidad.
retractabilidad Pues éste puede no sólo suspender su ejercicio, sino también renunciar a la
misma con efecto extintivo (art. 59 inc. 4º C.P.), antes o después de haber iniciado el proceso.
Incluso después de dictada la sentencia condenatoria es admitido el perdón del ofendido con
efecto extintivo de la pena (art. 69 C.P.). En este caso el perdón a cualquiera de los partícipes
beneficia a los otros, lo que relativiza el carácter divisible de esta acción.
La disponibilidad de esta acción por la víctima, permite que la misma se concilie con el autor del
delito, componiendo privadamente el conflicto por él suscitado.
Entonces:
OM
transcurso del tiempo desde la comisión del delito, según los plazos legales. La prescripción no
borra el hecho penalmente típico, antijurídico y culpable, sino lo que elimina es su punibilidad;
ya que extingue la persecución penal sea ésta: pública de oficio, pública dependiente de
instancia privada o privada. Y con respecto sólo a los responsables a quienes beneficia,
subsistiendo en relación a los demás.
.C
Para el CP argentino prescriben todas las penas, menos los crímenes de lesa humanidad. Esto es
DD
así porque nuestro país ha receptado la Convención de Roma, que estipula la imprescriptibilidad
de estos delitos.
como:
Las dificultades probatorias, dado que el transcurso del tiempo hace desaparecer los
rastros y efectos del delito, y paralelamente torna compleja también la prueba de
FI
descargo.
La seguridad jurídica, porque la prescripción elimina un estado de incertidumbre en las
relaciones jurídico-penales entre el delincuente y el Estado.
La desaparición de la necesidad de la pena, ya que el derecho penal no debe actuar sobre
Los plazos de la prescripción de la acción procesal se establecen en el Art. 62 del CP: La acción
penal se prescribirá durante el tiempo fijado a continuación:
OM
Suspensión e interrupción de la prescripción
prescripción
ART. 67 CP*
CP Ley 25.990 (desde el 19.01.2005):
19.01.2005)
“La prescripción se suspende en los casos de los delitos para cuyo juzgamiento sea
.C
necesaria la resolución de cuestiones previas o prejudiciales, que deban ser resueltas en
otro juicio. Terminada la causa de la suspensión, la prescripción sigue su curso.
DD
La prescripción también se suspende en los casos de delitos cometidos en el ejercicio de la
función pública, para todos los que hubiesen participado, mientras cualquiera de ellos se
encuentre desempeñando un cargo público.
artículos 226 y 227 bis, se suspenderá hasta restablecimiento del orden constitucional.
OM
cuenta computando el que corre desde el 13 de junio hasta el 24 de diciembre y sumándole el
que corre desde el 31 de enero.
La prescripción de la acción penal se suspende en los casos de delitos para cuyo juzgamiento sea
necesaria la resolución de cuestiones previas o prejudiciales, que deban ser resultas en otro
.C
juicio.
Se diferencian en cuanto, las cuestiones previas deben ser decididas antes del proceso penal,
pero no hace cosa juzgada (ej.: juicio político o jurado de enjuiciamiento). Mientras
las cuestiones prejudiciales no son anteriores, ni impiden la iniciación o prosecución del proceso
penal, pero obstan el dictado de la sentencia en sede penal hasta tanto exista una resolución en
FI
otro juicio, que sí hace cosa juzgada (ej.: juicio civil de validez o nulidad del matrimonio –
proceso penal por el delito de bigamia).
Abarca los siguientes delitos: cohecho, malversación de caudales públicos, peculado de bienes y
servicios, negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas, exacciones ilegales,
enriquecimiento ilícito de funcionarios y empleados públicos, y prevaricato.
La ley 21.338 introdujo un segundo párrafo en el Art. 67 CP, según el cual la prescripción
también se suspende en los casos de delitos de cohecho, malversación de caudales,
negociaciones incompatibles con el ejercicio de funciones públicas, exacciones ilegales,
El Art. 9 de la ley 23.077 establece que en los delitos previstos en los Arts. 226 y 227 bis CP, la
prescripción de la acción penal se suspenderá hasta el restablecimiento del orden constitucional.
La disposición resulta lógica, puesto que en tales tipicidades, cuando la conducta se agota, es
OM
decir, que alcanza el fin ultra-típico propuesto, el poder queda en las manos de los delincuentes
y, por ende, resulta ilógico que estos se beneficien con el resultado del delito que impide el
ejercicio de la acción.
.C
subsiguiente del programa, fue incorporada en nuestro Código Penal por la Ley 24.316, y
establece que el tribunal según la gravedad del delito, podrá disponer la suspensión de un juicio
DD
penal durante el término de uno a tres años; durante el cual se suspenderá también la
prescripción de la acción penal.
interruptivo, es decir, el plazo de la prescripción vuelve a contarse desde cero. Por lo tanto, es
presupuesto de esta causal que el término de prescripción haya comenzado a correr y no se
encuentre suspendido.
FI
anteriormente interrumpido.
El cuarto párrafo del Art. 67 CP establece: la prescripción se interrumpe por la comisión de otro
delito o por la secuela del juicio.
Cuando la prescripciónse interrumpe por la comisión de un nuevo delito, el término para que
corra nuevamente deberá contarse desde la fecha de ese segundo delito, y no desde la sentencia
que lo condene por él.
Si desde la fecha de comisión del segundo delito ha transcurrido el término de prescripción del
primero, la acción penal correspondiente a éste debe declararse prescripta, sin perjuicio de
OM
condenar por el segundo si su respectivo término de prescripción, siendo mayor que el del
primero, no hubiera aún transcurrido.
Para que la comisión de un nuevo delito interrumpa la prescripción del delito previo, debe existir
sentencia firme que condene por el delito interruptor; y si la culpabilidad del agente en el delito
.C
interruptor depende del pronunciamiento que recaiga ante otra jurisdicción, se deberá aplazar el
pronunciamiento sobre la prescripción hasta que aquel proceso se resuelva.
DD
Sin embargo importante jurisprudencia sostiene que este procedimiento prolonga
indefinidamente las causas penales y contraría a la garantía de debido proceso consagrada en el
art. 18 de la Constitución Nacional. De acuerdo a los principios de progresividad y de preclusión
que reconocen sustento en motivos de seguridad jurídica es necesario lograr una administración
LA
de justicia rápida dentro de lo razonable (CNCPenal, Sala 3ra., 07.11.2000, causa “Grosso,
Carlos”; CNCPenal, Sala 1ra., 10.06.2002, causa “Marchant Jara, Daniel”).
de la Capital Federal en el año 1949 sentó la siguiente doctrina: procede la suspensión del
pronunciamiento sobre prescripción de la acción penal cuando el imputado hubiere sido llamado
a prestar declaración indagatoria en el hecho presuntamente interruptor, si se trata de delitos de
Por el contrario, en el caso de que no se hubiera materializado esta medida coercitiva se debía
considerar que la mera existencia de una simple imputación en su contra no era suficiente para
aplazar un pronunciamiento judicial en condiciones de ser dictado.
Especificando más aún nuestra jurisprudencia: “...deben ser actos esenciales de procedimiento,
directamente enderezados a hacer valer la pretensión punitiva, tales como: el auto de
procesamiento, la declaración indagatoria, los careos, el secuestro de efectos o documentos
destinados a servir de prueba inculpatoria, los peritajes con el mismo fin, la sentencia de primera
instancia, la expresión de agravios de la parte acusatoria y la prueba de cargo producida en la
alzada.” (CC Cap., 31/10/58, JA, 1959-II-78; GF, 225-49. Del voto en disidencia dek Dr. Millán.)
OM
secuela de juicio, al enumerar taxativamente los actos procesales con entidad para interrumpir el
plazo de prescripción. Algunos autores dicen que se ha derogado la “secuela de juicio”, pero
otros afirman que resultaría demasiado optimista sostener que la enmienda legal (Ley 25.990)
ha derogado la controvertida fórmula, sino que simplemente la ha reemplazado por una de
.C
mayor precisión.
Como consecuencia, hoy es imposible hacer valer supuestos o actos procesales por vía
DD
jurisprudencial, los cuales antes otorgaban efectos interruptivos en la etapa instructora, tales
como pedido de captura, dictado de auto de procesamiento o el propio acto de prestar
declaración indagatoria.
Se observa que la reforma ha optado por dar prevalencia a los actos jurisdiccionales, como los
LA
son el primer llamado a prestar declaración indagatoria, el auto de citación a juicio y la sentencia
condenatoria. Sólo ha previsto como acto impulsorio de la actividad fiscal, el requerimiento
acusatorio de apertura o elevación a juicio.
FI
hallarse al momento del hecho; en las causas que cancelan la penalidad, las mismas son
sobrevinientes al hecho, posteriores al mismo. Obviamente las causales que cancelan la pena
también la excluyen, sólo que la exclusión es a posteriori y no ab initio. Por ejemplo, en el
desistimiento de la tentativa (art. 43), la conducta es punible hasta el instante en que se desiste
la comisión del ilícito, recién con el desistimiento aparece la impunidad de la tentativa, después
de haber surgido ya la posibilidad de coerción penal.
Se trata de causas personales que solo excluyen la penalidad de la conducta y que se establecen
por puras consideraciones político-penales, basadas éstas últimas en la priorización legislativa
de ciertos intereses jurídicos distintos a los que normalmente informan a la potestad estatal de
castigar o, lo que es lo mismo, a la infracción de la norma primaria.
OM
El más clásico ejemplo al respecto, se halla en el Art. 185 del C.P:
ARTICULO 185. - Están exentos de responsabilidad criminal, sin perjuicio de la civil, por los hurtos,
defraudaciones o daños que recíprocamente se causaren:
2. El consorte viudo, respecto de las cosas de la pertenencia de su difunto cónyuge, mientras no hayan
.C
pasado a poder de otro;
En este caso, como en otros de similares características, ab initio la coerción penal no puede
ponerse en movimiento, y se trata de una causa que solo beneficia al que se encuentra
LA
comprendido en ella, es decir, al autor o cómplice en forma individual, sin extenderse a los otros
concurrentes (de allí su calificativo de personales). Ej: en la normativa analizada: cónyuges,
ascendientes, descendientes, afines en línea recta, consorte viudo (con ciertas reservas), y
hermanos y cuñados cuando viviesen juntos.
FI
vendió a terceros lo sustraído, responde por defraudación, aunque por aplicación del art. 185 no
pueda hacerlo por hurto.
Cabe aclarar que lo único que elimina el indulto es la pena, pero no el delito, que solo puede ser
eliminado por amnistía.
OM
El indulto no cancela la pena totalmente cuando se la ha ejecutado parcialmente: una pena de
multa que se ha obrado parcialmente y que es indultada, solo puede serlo en la parte que no se
ha ejecutado.
.C
extinguirá la pena impuesta por delito de los enumerados en el Art. 73. Si hubiere varios
participes, el perdón a favor de uno de ellos aprovechará a los demás.
Solo es admisible en los delitos de acción privada y es una causa personal de cancelación de la
DD
penalidad que nada tiene que ver con la renuncia del agraviado, que es una causa de extinción de
la acción penal, ni con el perdón del cónyuge en el adulterio.
c) Prescripción de la pena.
pena (Explicado más abajo)
d) Otros casos:
casos
LA
Las causas personales que cancelan la pena, por supuesto que también la excluyen.
Prescripción de la pena
Su fundamento:La prescripción de la pena representa un límite al poder punitivo del Estado,
dando seguridad jurídica el imputado, resultando entonces, que una persona no pueda estar
condenada de por vida, como tampoco sumergida en sospecha eterna.
OM
fundamental de la prescripción es que no es el mismo hombre el que está delante del
tribunal que el que cometido el hecho, como no es el mismo hombre el que está delante
del órgano de ejecución que el que fue sentenciado. Si la resocialización se produce sola,
sin intervención de la coerción penal, esta carece de sentido.
.C
Su fundamento constitucional lo podemos encontrar en el derecho que asiste al imputado
Para el CP argentino prescriben todas las penas, menos los crímenes de lesa humanidad. Esto es
así porque nuestro país ha receptado la Convención de Roma, que estipula la imprescriptibilidad
FI
de estos delitos.
La respuesta nos la da el art 66 CP: “La prescripción de la pena empezará a correr desde la
medianoche del día en que se notificare al reo la sentencia firme o desde el quebrantamiento de
la condena, si ésta hubiese empezado a cumplirse.” La prescripción de la pena presupone que la
misma no se haya cumplido o no se haya cumplido totalmente, y, como es natural, que medie
una sentencia condenatoria.
que la pena no se haya ejecutado nunca: en esta hipótesis se requiere que una sentencia
haya resuelto la aplicación de la pena.
OM
3º. La de reclusión o prisión temporal, en un tiempo igual al de la condena;
.C
si el imputado comete un nuevo delito.
DD
citación a declaración indagatoria.
requerimiento de elevación a juicio.
citación a los fines de comparecer a juicio.
sentencia condenatoria aunque no esté firme.
LA
La prescripción por el paso del tiempo sin tener lugar una sentencia condenatoria da lugar a la
afectación a la garantía del plazo razonable.
FI
uno haya cometido, de modo separado, salvo que sea un delito cometido como funcionario
público, mientras que alguno de ellos aún se encuentre ejerciendo el cargo, se suspenderá la
prescripción para todos los partícipes.
Sin embargo, las condiciones de punibilidad que aquí veremos constituyen algo diverso, ya que
su naturaleza no es subjetiva como en el caso anterior sino, por el contrario, objetiva.
Estas condiciones se refieren al hecho y no a las personas. Con lo cual se vinculan a la objetiva
relevancia jurídico-penal del hecho en sí mismo, quedando comprendidas dentro de la categoría
de la tipicidad. Y no ya como categoría autónoma, tal cual es el caso de la punibilidad stricto
sensu. De este modo, las condiciones objetivas de punibilidad subordinan
subordinan el castigo de todos y
no sólo de algunos intervinientes.
OM
Se trata entonces, de circunstancias típicas ajenas al comportamiento o al resultado del hecho
punible.
punible Éstas se encuentran descriptas por la ley penal en la figura respectiva y sólo aluden
a: modalidades de ejecución (Art. 97 C.P.), calidades del autor (Art. 143 C.P.), ocasión (Art. 108
C.P.), o condiciones del supuesto típico (Art. 115 C.P.).
.C
Zaffaroni se cuestiona sobre la existencia de estas condiciones objetivas de punibilidad.
Basándose para ello en la idea de que su existencia unitaria choca fuertemente con el principio
DD
de culpabilidad. Si se pretende que haya elementos objetivos de los cuales depende la
punibilidad y que no resultan abarcados por el conocimiento o la posibilidad de conocimiento,
entonces no se estaría cumpliendo la máxima penal de que no hay delito si por lo menos no tiene
la forma típica culposa.
LA
Pero luego dicho autor hace algunas concesiones, y concluye afirmando que no habría ningún
problema en admitir estas condiciones en tanto se trate de meros requisitos de perseguibilidad
del delito, es decir, de condiciones procesales de operatividad de la coerción penal. El riesgo
FI
surge al otorgarles carácter de derecho penal de fondo y extraer de los tipos objetivos ciertos
elementos para trasladarlos a este nivel, sin que puedan ser comprendidos por el conocimiento
en el dolo o por la posibilidad de conocimiento en la culpa.
Sin embargo, si consideramos a estas condiciones como parte integrante del tipo objetivo, ya que
delimitan la tipicidad de un evento y operan restringiendo la punibilidad en sentido amplio,
resulta indiferente que estas circunstancias sean comprendidas por el dolo o la culpa,
constitutivas éstas últimas del tipo subjetivo. Podrán serlo o no según las particularidades de
cada caso.
Por su parte, Jiménez de Asúa, tomando como fuente principalmente a la doctrina alemana, se
refiere a las condiciones objetivas como: “presupuestos de punibilidad”, y entiende que se trata
de aquéllos de los que el legislador hace depender la efectividad de la pena conminada y que,
OM
por ser extrínsecos e independientes del acto punible mismo, no quedan abarcados por la
culpabilidad de su autor.
En síntesis y para concluir el tema, repasemos las condiciones objetivas de punibilidad previstas
por nuestro Código Penal:
.C
1) Consumación o tentativa de suicidio: para que sea penado quien instiga o ayuda al suicida
(art. 83);
DD
2) Notoriedad o constancia del embarazo: para ser merecedor de castigo penal, quien con
violencia haya causado un aborto sin tener la intención de hacerlo (art. 87);
99);
causa (art. 156), por destrucción o inutilización de obras destinadas a la defensa común
contra desastres (art. 188, 1º párr.), por delitos contra la seguridad de los medios de
transporte y comunicación (art. 190), o por la falsificación de documentos (arts. 292/293);
9) Previa declaración de insolvencia fraudulenta o culpable: para el caso de quebrados y otros
deudores punibles (arts. 176/180);
1) divorcio previo para perseguir el adulterio (art. 74 derogado por ley 24.453),
2) ejercicio de funciones públicas en caso de desacato (art. 244 derogado por ley 24.198), etc.
OM
.C
DD
LA
FI
OM
la inhabilitación. Las mismas están enunciadas en el Art. 5 del CP.
Las dos primeras son penas que privan de la libertad personal, en tanto que la multa afecta al
patrimonio del penado y la inhabilitación a ciertos derechos del mismo.
•
.C
Hay conminación separada cuando solo se conmina una de las penas: prisión de uno a
DD
cuatro años en el Art. 83 CP, por ejemplo.
• Hay conminación alternativacuando
alternativa se conminan dos penas, entre las que el juez debe
elegir.
La conminación alternativa puede ser paralela, en el caso en que la cantidad de
LA
También se hallan las PENAS ACCESORIAS, que son las que se derivan de la imposición de las
principales, sin que sea menester su especial imposición en la sentencia. Las penas accesorias
son la inhabilitación absoluta del Art. 12 P, y el decomiso del Art. 23.
El cuadro de las penas accesorias se completa dentro de nuestra legislación penal con una pena
accesoria que requiere ser expresamente impuesta por el tribunal, que es la reclusión accesoria
por tiempo indeterminado del Art. 52 del CP.
OM
indeterminadas”. Salvo las penas que por su naturaleza no admiten la cuantificación, las demás
se establecen legalmente en forma relativamente indeterminada, es decir, fijando un mínimo y un
máximo y dejando que el juez determine en concreto la cuantía de la misma conforme a las
reglas de los Arts. 40 y 41 CP.
.C
La llamada pena de muerte.
muerte.
El Art. 18 CN dice: “Quedan abolidos para siempre la pena de muerte por causas políticas, toda
especie de tormento y los azotes”. A contrario sensu surge que la pena de muerte por causas que
DD
no son políticas no está abolida en nuestro texto constitucional.
Es un medio groseramente inadecuado para la obtención del propósito perseguido, lo que viola
el principio republicano de gobierno (Art. 1 CN).
FI
El modo y los casos para los cuales se implanto en la argentina y suele reclamársela en
Latinoamérica, generalmente viola la pauta tradicional de no imponer esa “pena” por causa
política, que la CN consagra expresamente.
nuestra
Formas de manifestación de la coerción penal excluidas de nuestra legislación.
legislación.
Todas las formas de castigo corporal quedan excluidas de nuestra legislación penal por
disposición del Art. 18 CN, al descartar “toda especie de tormento y los azotes”.
Acabamos de ver que la llamada pena de muerte queda hoy incluida como una especie de
tormento, lo que la excluye de nuestro sistema penal.
El Art. 17 de la CN proscribe tan bien la confiscación de bienes: “La confiscación de bienes queda
borrada para siempre del código penal argentino”.
En función del principio de humanidad debe considerarse que nuestra legislación penal no
admite ninguna pena irracionalmente cruel, puesto que, tal como lo señaláramos, la proscripción
del tormento y de los azotes no es limitativa, sino indicativa del principio de la racionalidad y del
principio de humanidad.
Está proscripta cualquier pena que importe una incapacitación física u orgánica del sujeto
(castración, esterilización, amputaciones, etc.), como cualquier pena verdaderamente perpetua y
OM
cualquier consecuencia perpetua de un delito.
.C
DD
LA
FI
La principal virtud del dualismo, estriba en que estatuye dos reacciones jurídico-penales que
responden a distintos fundamentos y que ambas, son necesarias para el cumplimiento de los
fines del derecho penal. En efecto, cabe manifestar que la pena, se funda en la culpabilidad y se
impone como castigo, mientras que la medida de seguridad, encuentra fundamento en la
OM
peligrosidad del sujeto y responde a finalidades distintas: en algunos casos serán curativas, en
otros educativas o aún, de mejoramiento.
.C
Educativas y Tutelares:
Tutelares
Previstas para los menores que delinquen y no han cumplido 18 años de edad (ley 22.278); y
DD
para las personas que tienen estupefacientes para uso personal y no dependen de ellos (art. 21,
ley 23.737);
De Mejoramiento:
Mejoramiento
LA
Que se aplica, luego de cumplida la pena, en los casos de multireincidencia, en los supuestos
previstos en el art. art. 52 CP; y también puede aplicarse, a quienes resulten condenados por el
delito de homicidio agravado (art. 80 CP).
FI
Curativas:
Curativas
Previstas para las personas que, en estado de inimputabilidad, cometen un delito y son
peligrosas (art. 34 inc 1º, párrafos segundo y tercero del CP); también para las personas,
- Zaffaroni considera que la medida de seguridad del Inc. 1° del Art. 34 no tiene carácter
penal, pues llega a ser aplicable a sujetos que ni siquiera han realizado una acción,
resultando absurdo pretender la existencia de una consecuencia penal para lo que ni
siquiera es conducta humana.
Diferencias
Diferencias entre la reclusión y la prisión.
prisión.
La diferencia fundamental entre la reclusión y la prisión deriva históricamente de que la primera
OM
se remonta a las viejas penas infamantes, es decir, que en un origen era una pena que quitaba la
fama, la reputación, privaba del honor, en tanto que la prisión se remonta a penas privativas de
libertad que no tenían ese carácter. En la sanción de CP de 1921 puede observarse el resabio del
origen remoto de la diferencia en que los sometidos a reclusión podían ser usados en trabajos
públicos, en tanto que los sometidos a prisión solo lo podían ser en trabajos dentro de los
.C
establecimientos dedicados exclusivamente a ellos.
El régimen de trabajo a que se debía someter al recluso, conforme al texto original del CP, era
DD
más duro que el que debían soportar los sometidos a prisión.
No obstante, las diferencias en cuanto a la ejecución de las penas de reclusión y prisión han
quedado derogadas, puesto que los Arts. 6, 7, y 9 CP, si bien no están formalmente derogados,
han perdido vigencia como resultado de la ley penitenciaria nacional (24.660). Esa ley no
LA
establece diferencia alguna para la ejecución de las penas de reclusión y prisión, suprimiendo las
denominaciones de recluso y preso y unificándolas con la de “interno” (Art. 15), sin prescribir
ninguna diversificación de tratamientos, de establecimientos ni de régimen de trabajo basada en
FI
esa distinción.
Prisión Reclusión
• El
Puede reemplazarse por arresto domiciliario en los casos No puede reemplazarse por arresto domiciliari
arr del Art. 10 CP.
Debe cumplirse durante ocho meses para obtener la
est Debe cumplirse durante un año para obtener la lib
libertad condicional por el condenado a tres años o menos
condicional por el condenado a tres años o menos (A
(Art. 13).
o
Un día de prisión preventiva se computa por uno de prisión Dos días de prisión preventiva se computan por un
do (Art. 24). reclusión (Art. 24).
Puede imponerse condicionalmente en los supuestos del No puede imponerse condicionalmente.
mic Art. 26 CP.
iliar La reclusión perpetua se reduce en casos de tentativ
La prisión perpetua se reduce en caso de tentativa (Art. 44)
44) y de complicidad (Art. 46) por reclusión de qui
y de complicidad (ara 46) a prisión de diez a quince años.
io veinte años.
El mínimo por delito consumado es de quince días El mínimo por delito consumando es de seis mes
sus (conminado en el Art. 243). (conminada en el Art. 93).
OM
suele prolongarse frecuentemente por años. Puesto que la prolongación de la prisión
preventiva no es imputable al procesado, sino a los mismos órganos del estado, es lógico
que toda reacción estatal nacida del delito y que prive de la libertad al procesado sea
imputada después a los efectos de la pena, principio que recoge el Art. 24 del CP,
.C
estableciendo que se computara, por un día de prisión preventiva uno de prisión y por dos
días de prisión uno de reclusión.
• La reclusión no se puede imponer condicionalmente.
DD
• Las escalas de reducción por tentativa y participación son diferentes para la reclusión y
para las prisiones perpetuas.
• La reclusión y la prisión tienen distintos mínimos.
LA
accesoria de la última condena”. Las diferencias que tiene ésta respecto de la reclusión común
son su indeterminación y el régimen especial de libertad condicional.
Ella se cumple en los mismos establecimientos penales que para las demás penas privativas de la
El Art. 53 CP dispone que “los condenados con la reclusión accesoria por tiempo indeterminado
deberán cumplirla en establecimientos federales”. En la práctica esta disposición no se cumple y
muchos condenados a esta pena la cumplen en establecimientos provinciales.
En síntesis, las diferencias entre la reclusión accesoria por tiempo indeterminado del Art. 52 CP y
las penas ordinarias privativas de la libertad son las siguientes:
Cómputo.
Cómputo.
El Art. 44 C dice: “El día es el intervalo entero que corre de media noche a media noche; los
plazos de días no se contara de momento a momento, ni por horas, sino desde la media noche
OM
en que termina el día de su fecha. Así, un plazo que principie el 15 de un mes, terminara el
quince del mes correspondiente, cualquiera que sea el número de días que tengan los meses o el
año”. Así, una condena a diez años que haya comenzado a cumplir el 15 de agosto de 1984,
terminara a las 24 hs. Del 14 de agosto de 1994 o –lo que es lo mismo- a la 0 hora del 15 de
agosto, porque el día de la detención se cuenta como día entero.
.C
Igual criterio debe tenerse en cuenta cuando se interrumpe la ejecución de la pena. Si el
condenado del ejemplo hubiese fugado el 18 de octubre de 1966 permaneciendo prófugo hasta
DD
el 31 de diciembre del mismo año, deberán agregarse los dos meses (noviembre y diciembre) y
catorce días (de la cero hora del 18 de octubre hasta las veinticuatro horas del 31 de octubre),
con lo que la condena, en lugar de cumplirse el 15 de agosto de 1974, se habrá cumplido el 29
de octubre de 1974 a las veinticuatro horas.
LA
La prisión preventiva se computa igualmente desde la cero hora del día en que el sujeto fue
detenido, calculándose en la forma en que lo establece el Art. 24 CP, es decir, un día de prisión
por cada día de prisión preventiva y un día de reclusión por cada dos días de prisión preventiva.
FI
La ley 21.931 del 16 de enero de 1979 reformo el ara 77 del CP disponiendo que la libertad de
los penados se opere el día del vencimiento de la pena a las 12 horas en lugar de las 24 horas,
que sería la hora de vencimiento. Se trata de una libertad anticipada que se otorga por razones
prácticas, pero no altera los plazos, ya que la condena se considerara cumplida recién a la
medianoche.
C) Sistemas penitenciarios.
penitenciarios.
Clases.
Clases.
Dentro de la historia de la cárcel podemos establecer tres regímenes penitenciarios a los que
podemos agrupar como tradicionales, entre ellos: el régimen celular o filadélfico, el régimen
OM
.C
DD
LA
FI
Una parte de la doctrina pretende situar el origen de este régimen en Filadelfia, pero se cree que
es mucho más remoto, y que surge del pensamiento de la Iglesia Católica. El pensamiento
eclesiástico hizo suya la finalidad de la expiación moral de la pena, a lo que propuso recapacitar
el comportamiento individual con el arrepentimiento en un encerramiento solitario.-
OM
Aun cuando las primeras cárceles celulares surgen en la península itálica, de las cuales la más
antigua es la DelleMurate en la ciudad de Florencia que data de 1.677, el pensamiento católico
vuelve a ser objeto de una reformulación y ampliación teórica en los Estados Unidos de
Norteamérica.-
.C
En la época de la colonización de América del Norte, William Penn, en 1.682, somete una ley a la
Asamblea Colonial de Pennsylvania que se denominará “Gran Ley”. Penn, propone un drástico
cambio de las condiciones de ejecución de la pena privativa de libertad basada en un sistema de
DD
aislamiento permanente en la celda, donde se obligaba a la lectura de las Sagradas Escrituras.-
Posteriormente, Franklin y otros, forman la primera asociación americana para la reforma penal y
penitenciaria, sentando las bases de lo que será el régimen celular o filadélfico que se denominó
“ThePhiladelphiaSocietyforAlleviatingtheMiseries of PublicPrisions”.-
LA
La reclusión en estas celdas procuraban un cambio moral del reo y en buena medida omitieron
cambios materiales que humanizaran la ejecución de la pena.-
En correlación con este pensamiento se crea la prisión Walnut Street Jail, que luego se reformaría
FI
OM
Las críticas que se pueden realizar al régimen son, que se desconoce la naturaleza social del
hombre; se dificulta el ejercicio del trabajo-taller y del proceso educativo que requieren
indefectiblemente la comunidad humana, viendo frustrarse los dos pilares del proceso
resocializador formal; tiene un alto costo de infraestructura; es una crueldad que obstaculiza la
formal readaptación del reo pues impone un cruel sufrimiento, lo expone al abatimiento, en el
.C
lugar de tonificar su voluntad, lo enerva; menoscaba la salud psíquica y moral del interno; no
refleja la realidad de la comunidad a la cual el interno deberá reintegrarse a su egreso y a la que
DD
seguramente no se adaptará.-
El aislamiento celular continuo respondió a razones de seguridad e higiene, más que a las
pretendidas razones de la reforma moral del delincuente.-
LA
Actualmente subsiste en algunos países donde conjuntamente con otros regímenes conforman
sistemas penitenciarios heterogéneos, es usado como régimen de castigo de todos los modelos
de ejecución de la pena privativa de libertad ante faltas de conducta o reglamento de parte de los
internos.-
FI
Propicia corregir leves faltas con el régimen más riguroso de segregación total sin proponer un
régimen abierto y es violatorio del principio constitucional de inocencia, la imposición en
cualquier establecimiento de las cargas del sistema carcelario.-
• Régimen auburniano
auburniano
Posteriormente (1.816 - 1.820), comienzan obras para la construcción de una prisión con
régimen celular en la ciudad de Auburn, hasta que en 1.821 se agrega la regla de silencio al
trabajo común.-
OM
2. silencio absoluto y obligatorio,
3. trabajo común diurno.-
.C
salubridad.-Se pretende imponer una regla obligatoria, sin excepciones, de silencio. La violación
de la regla del silencio conllevaba a severos castigos, que usualmente se unían a las torturas y
azotes que eran el medio para mantener la disciplina interna del establecimiento.-
DD
Los teóricos que sostienen la aplicabilidad de este sistema, argumentaron que: es un régimen
más económico que el celular, la reunión de los internos al objeto de su trabajo-taller reduce los
costos, crea una producción útil y se inserta en la economía nacional; la regla del silencio reporta
LA
b) la regla del silencio es antinatural y contraria al ser social del hombre como la reclusión
celular,
c) la aplicación de tormentos físicos crea individuos con ansias vindicativas y falsamente
domesticados.-
Los regímenes celular y auburniano, se disputaron la supremacía dentro de los diversos sistemas
penitenciarios mundiales, teniendo por principal finalidad la expiación del delito y la mejora del
delincuente, considerando al tratamiento penitenciario como la herramienta de la ciencia penal
que impuesta por el Estado causa la aflicción necesaria y suficiente por la comisión de un delito.-
• Régimen progresivo
De origen inglés, con sucesivas e importantes variantes, consiste en medir la duración de la pena
por una sumatoria de trabajo y disciplina interna. Se subdivide en períodos hasta la reintegración
El régimen se basaba en la conducta y el trabajo del condenado, suprimiendo los tratos crueles e
imponiendo un sistema de recompensa en lugar de castigos.-
El régimen progresivo irlandés es recreado por Sir Walter Crofton. La importancia de las
OM
modificaciones del régimen reside en la incorporación de un nuevo período que se denominará
Intermedio o Intermédiate Prisión, que reproduce un régimen de semi-libertad.-
.C
fábricas y talleres, disposición de parte de las remuneraciones, más posibilidades de visitas,
correspondencia y excepción al uso de uniforme.-
DD
Con respecto al régimen progresivo español, el Coronel Manuel de Montesinos y Molina
desarrolla en la ciudad de Valencia una obra humanizante de la prisión.-
humanitario que sirviese a la resocialización del reo por un lado y a la prevención del delito por
el otro.-
voluntario y educacional.-
condicionada por el tiempo estimado, que verificase la sujeción al trabajo, la verificación de los
resultados del proceso educativo y la adecuada reinserción social y laboral del reo en la
sociedad.-
• Régimen abierto
OM
limitar la permanencia del condenado en establecimientos cerrados y promoviendo en lo posible
y conforme su evolución favorable su incorporación a instituciones semiabiertas o abiertas o a
secciones separadas regidas por el principio de autodisciplina" , el segundo que "El régimen
penitenciario....se caracterizará por su progresividad...".
.C
ARTICULO 12. — El régimen penitenciario aplicable al condenado, cualquiera fuere la pena impuesta,
se caracterizará por su progresividad y constará de:
a) Período de observación;
DD
b) Período de tratamiento;
c) Período de prueba;
PERÍODO DE OBSERVACIÓN
b) Recabar la cooperación del condenado para proyectar y desarrollar su tratamiento. A los fines de
lograr su aceptación y activa participación, se escucharán sus inquietudes;
c) Indicar el período y fase de aquel que se propone para incorporar al condenado y el establecimiento,
sección o grupo al que debe ser destinado;
d) Determinar el tiempo mínimo para verificar los resultados del tratamiento y proceder a su
actualización, si fuere menester.
PERÍODO DE TRATAMIENTO
ARTICULO 14. — En la medida que lo permita la mayor o menor especialidad del establecimiento
penitenciario, el período de tratamiento podrá ser fraccionado en fases que importen para el condenado
PERÍODO DE PRUEBA
OM
SALIDAS TRANSITORIAS
ARTICULO 16. — Las salidas transitorias, según la duración acordada, el motivo que las fundamente y
el nivel de confianza que se adopte, podrán ser:
I. Por el tiempo:
.C
b) Salidas hasta 24 horas;
DD
c) Salidas, en casos excepcionales, hasta setenta y dos horas.
b) Para cursar estudios de educación general básica, polimodal, superior, profesional y académica de
grado o de los regímenes especiales previstos en la legislación vigente;
c) Para participar en programas específicos de prelibertad ante la inminencia del egreso por libertad
condicional, asistida o por agotamiento de condena.
FI
a) Pena temporal sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal: la mitad de la condena;
b) Penas perpetuas sin la accesoria del artículo 52 del Código Penal: quince (15) años;
c) Accesoria del artículo 52 del Código Penal, cumplida la pena: tres (3) años.
III. Poseer conducta ejemplar o el grado máximo susceptible de ser alcanzado según el tiempo de
internación.
IV. Merecer, del organismo técnico-criminológico, del consejo correccional del establecimiento y, si
correspondiere, del equipo especializado previsto en el inciso l) del artículo 185 de esta ley, concepto
favorable respecto de su evolución y sobre el efecto beneficioso que las salidas o el régimen de
semilibertad puedan tener para el futuro personal, familiar y social del condenado.
V. En los casos de las personas condenadas por los delitos previstos en los artículos 119, segundo y
tercer párrafo, 120, y 125 del Código Penal, antes de adoptar una decisión, se requerirá un informe del
equipo interdisciplinario del juzgado de ejecución y se notificará a la víctima o su representante legal
que será escuchada si desea hacer alguna manifestación.
OM
El interno podrá proponer peritos especialistas a su cargo, que estarán facultados a presentar su propio
informe.(Artículo modificado Por el art. 2° de la Ley N° 26 .813 B.O. 16/1/2013)
.C
DD
LA
FI
Dentro de la ejecución penal, tiene particular importancia el trabajo del penado. “El producto del
trabajo del condenado a reclusión o prisión se aplicara simultáneamente:
• A indemnizar los daños y perjuicios causados por el delito que no satisficiera con otros
recursos.
• A la prestación de alimentos según el código civil.
• A costear los gastos que causare al establecimiento.
• A formar un fondo propio, que se le entregara a su salida.
OM
----
La ley incorpora en la tercera sección del capítulo II una serie de figuras alternativas al encierro
carcelario bajo el título "Alternativas para situaciones especiales". En ella contempla la prisión
.C
discontinua (Art. 36), la semidetención (Art. 39, con sus dos modalidades prisión diurna y prisión
nocturna) y el trabajo para la comunidad (Art. 50).
DD
La movilidad dentro de los distintos períodos está condicionada, por un lado al cumplimiento de
ciertos requisitos temporales (por ejemplo los establecidos en el artículo 17 para la concesión de
las salidas transitorias o la incorporación al régimen de semilibertad), y por el otro, a la
calificación de concepto del condenado.
LA
Del sucinto análisis, se observa que la ley 24.660 contempla u verdadero régimen progresivo
(con características particulares) al esquematizar una serie de periodos sucesivos durante la
ejecución de la pena privativa de la libertad, a los cuales se va accediendo según criterios
temporales y subjetivos.
FI
Una norma que quiebra un poco la armonía de esta progresividad está dada por el artículo 7 de
la ley, al prever la posibilidad de que el condenado sea promovido excepcionalmente a cualquier
fase del período de tratamiento que mejor se adecue a sus condiciones personales, de acuerdo
con los resultados de los estudios técnico-criminológicos y mediante resolución fundada de la
autoridad competente (esta normativa es propia de un sistema de individualización).
Conforme a esta disposición, una condena que estableciese una pena de diez años y que hubiese
comenzado a cumplirse el 15 de enero de 2000, porque el imputado fue detenido a las 13 horas
de ese día, la pena se cumplirá el 15 de enero del año 2010 o, lo que es lo mismo, a las 0 horas
del día 16 de enero de 2010.
La única excepción que hace el código civil es la del Art. 128, en el caso de los menores que
alcanzan su capacidad el día en que cumplieren la mayoría de edad, es decir, desde las 0 horas
OM
de ese día.
Sin embargo, en el derecho penal el día en que el sujeto se encuentre cumpliendo pena en forma
parcial debe contarse como día completo de ejecución, para de esta manera, no prolongar la
pena más allá de lo merecido. En el ejemplo previamente dado, la pena culminaría a las 24hs del
.C
día 14, o a las 0 horas del día 15 (lo que es lo mismo), ya que el sujeto fue detenido a las 13
horas de un día 15 y no es justo extenderle la pena un día más.
DD
En los supuestos de interrupción, debe considerarse que esta se produce a las 24 horas
del día en que tiene lugar, y cesa a las 0 horas del día en que el sujeto vuelve a perder su
libertad. Ej: si la pena se hubiese interrumpido el 1° de enero de 2000 y hubiera cesado su
interrupción el 13 de febrero de ese año, se considerará que estuvo interrumpida desde
LA
las 0 horas del día 2 de enero hasta las 0 horas del día 13 de febrero, es decir que estuvo
interrumpida por un mes y once días.
La ley de facto 21.931 agregó en el Art. 77 que, aunque los plazos se cuentan conforme al
FI
ARTICULO 1º-La prisión preventiva no podrá ser superior a dos años. No obstante, cuando la cantidad
de los delitos atribuidos al procesado o la evidente complejidad de las causas hayan impedido la
finalización del proceso en el plazo indicado, ésta podrá prorrogarse un año más por resolución fundada
ARTICULO 2º-Los plazos previstos en el artículo precedente serán prorrogados por seis meses más
cuando los mismos se cumpliesen mediando sentencia condenatoria y ésta no se encontrare firme.
ARTICULO 3º-El Ministerio Público podrá oponerse a la libertad del imputado cuando entendiera que
existieron de parte de la defensa articulaciones manifiestamente dilatorias y el tribunal deberá resolver
la cuestión dentro del plazo de cinco días.
En las causas que se inicien a partir de la vigencia de la presente ley, el Ministerio Público solamente
podrá formular aquella impugnación si se hubiese opuesto por el carácter dilatorio de la articulación de
que se trate, en la oportunidad de tomar conocimiento de la misma.
ARTICULO 4º-No mediando oposición o cuando ésta fuese rechazada el imputado recuperará la
OM
libertad bajo la caución que el tribunal determine.
Si la oposición fuese aceptada, no se computarán las demoras causadas por aquellas articulaciones.
ARTICULO 5º-En el acto de prestar la caución el imputado deberá fijar domicilio, denunciando el real y
las circunstancias de trabajo que pudieren imponerle la necesidad de ausentarse por más de
veinticuatro horas, lo que no podrá ser alterado sin autorización del tribunal.
.C
Además, el tribunal establecerá las reglas de conducta que deberá cumplir el imputado conforme las
previsiones del artículo 27 bis del Código Penal y que resultaren compatibles con su situación procesal.
DD
ARTICULO 6º-El auto que dispuso la libertad será revocado cuando el imputado no cumpla con las
reglas que se le impusieren o no compareciere al llamado del tribunal sin causa justificada. En todos los
casos, previamente, el tribunal fijará un término no superior a los quince días para que el imputado
cumpla con sus obligaciones con el apercibimiento de revocación.
ARTICULO 7º-Transcurrido el plazo de dos años previsto en el artículo 1, se computará por un día de
prisión preventiva dos de prisión o uno de reclusión.
LA
ARTICULO 8º-Modifícase el artículo 24 del Código Penal para los casos comprendidos en esta ley.
ARTICULO 9º-La presente ley es reglamentaria del artículo 7, punto 5, de la Convención Americana
sobre Derechos Humanos.
FI
ARTICULO 10º-Quedan expresamente excluidos de los alcances de la presente ley los imputados por
el delito previsto en el artículo 7 de la ley 23.737 y aquellos a quienes resultaren aplicables las
agravantes previstas en el artículo 11 de la misma ley.
El Art. 7, Inc. 5 de la Convención Americana de Derechos Humanos al que hace referencia la ley,
es este:
“5. Toda persona detenida o retenida debe ser llevada, sin demora, ante un juez u otro funcionario
autorizado por la ley para ejercer funciones judiciales y tendrá derecho a ser juzgada dentro de un
plazo razonable o a ser puesta en libertad, sin perjuicio de que continúe el proceso. Su libertad
podrá estar condicionada a garantías que aseguren su comparecencia en el juicio.”
OM
Conforme a los antecedentes y al texto de nuestra ley penal, se impone una condena en forma
condicional y se suspende la pena. La condición es que no se cometa un nuevo delito dentro de
los cuatro años subsiguientes a la condena.
Durante ese tiempo la pena queda suspendida y la condena impuesta en forma condicional;
.C
transcurrido ese plazo, la pena desaparece y la condena también, produciéndole la desaparición
de la pena como consecuencia de la desaparición de la condena, ya que el Art. 27 dice
claramente que “la condenación se tendrá como no pronunciada”.
DD
La condenación condicional implica una suspensión de la pena y una condenación sometida a la
condición de que el condenado no cometa un nuevo delito.
LA
Transcurridos cuatro años a partir de la condenación, sin que el condenado haya cometido un
nuevo delito, esta se tendrá como no pronunciada, no pudiéndose ejecutar la pena ni tomársela
en cuenta para ningún efecto, excepto para la imposición de una segunda condenación
condicional.
FI
Los efectos de la condicionalidad son distintos según sea el momento en que el condenado
cometa un nuevo delito.
OM
la condenación condicional.
Estos plazos se cuentan desde que queda firme la sentencia en que se condena
condicionalmente. No obstante, el tercer párrafo del Art. 27 del CP dispone que “en los casos de
sentencia recurridas y confirmadas, en cuanto al carácter condicional de la condena, los plazos
.C
se computaran desde la fecha del pronunciamiento originario”. Con esto se evita que la doble
instancia pueda perjudicar a los condenados.
DD
Régimen legal
Este instituto encuentra su régimen legal en los artículos 26 a 28 del CP.
ARTICULO 26.- En los casos de primera condena a pena de prisión que no exceda de tres años, será
facultad de los tribunales disponer en el mismo pronunciamiento que se deje en suspenso el
LA
cumplimiento de la pena. Esta decisión deberá ser fundada, bajo sanción de nulidad, en la personalidad
moral del condenado, su actitud posterior al delito, los motivos que lo impulsaron a delinquir, la
naturaleza del hecho y las demás circunstancias que demuestren la inconveniencia de aplicar
efectivamente la privación de libertad. El tribunal requerirá las informaciones pertinentes para formar
criterio, pudiendo las partes aportar también la prueba útil a tal efecto.
FI
Igual facultad tendrán los tribunales en los casos de concurso de delitos si la pena impuesta al reo no
excediese los tres años de prisión.
ARTICULO 27.- La condenación se tendrá como no pronunciada si dentro del término de cuatro años,
contados a partir de la fecha de la sentencia firme, el condenado no cometiere un nuevo delito. Si
cometiere un nuevo delito, sufrirá la pena impuesta en la primera condenación y la que le
correspondiere por el segundo delito, conforme con lo dispuesto sobre acumulación de penas.
La suspensión podrá ser acordada por segunda vez si el nuevo delito ha sido cometido después de
haber transcurrido ocho años a partir de la fecha de la primera condena firme. Este plazo se elevará a
diez años, si ambos delitos fueran dolosos.
La suspensión podrá ser acordada por segunda vez si el nuevo delito ha sido cometido después
de haber transcurrido ocho años a partir de la fecha de la primera condena firme. Este plazo se
elevará a diez años, si ambos delitos fueran dolosos.
OM
ARTICULO 27 bis.- Al suspender condicionalmente la ejecución de la pena, el Tribunal deberá disponer
que, durante un plazo que fijará entre dos y cuatro años según la gravedad del delito, el condenado
cumpla todas o alguna de las siguientes reglas de conducta, en tanto resulten adecuadas para prevenir
la comisión de nuevos delitos:
.C
2. Abstenerse de concurrir a determinados lugares o de relacionarse con determinadas personas.
eficacia.
8. Realizar trabajos no remunerados en favor del estado o de instituciones de bien público, fuera de sus
FI
Las reglas podrán ser modificadas por el Tribunal según resulte conveniente al caso.
Si el condenado no cumpliere con alguna regla, el Tribunal podrá disponer que no se compute como
plazo de cumplimiento todo o parte del tiempo transcurrido hasta ese momento. Si el condenado
persistiere o reiterare el incumplimiento, el Tribunal podrá revocar la condicionalidad de la condena. El
condenado deberá entonces cumplir la totalidad de la pena de prisión impuesta en la sentencia.
**La jurisprudencia ha entendido que las reglas de conducta previstas en los incisos primero a
octavo de este artículo resultan taxativas, y que imponer alguna obligación que no esté
enumerada en el texto legal resulta incompatible con el principio de legalidad de la pena. En
igual sentido se afirmó que dado que el cumplimiento de las reglas de conducta impuestas
implica una nueva condición para la subsistencia de la condena de ejecución condicional, no es
OM
1. Fijar residencia y someterse al cuidado de un patronato.(Inc. 1°)
Esta obligación consiste en establecer un lugar que posibilite la supervisión del patronato de
liberados y las citaciones o notificaciones del tribunal. Su cumplimiento durante la etapa de
ejecución debe ser armonizado con el derecho constitucional a la libertad ambulatoria, por lo que
.C
no sería aceptable desde esa óptica impedir que el condenado se desplace por el territorio de)
país si ha fijado domicilio. En este punto también deben tenerse presentes las previsiones de la
DD
ley de cooperación internacional en materia penal, en cuanto contemplan el cumplimiento de la
condena condicional en el extranjero.
La aplicación de esta regla requiere una detallada especificación de los lugares o personas
respecto de los cuales se impone.
FI
Por otra parte, para que la obligación supere el control de constitucionalidad, la exclusión
del lugar o la limitación del vínculo con determinadas personas debe aparecer ligada a los hechos
de la causa. Por ejemplo: es razonable que un condenado por lesiones o amenazas no concurra
al domicilio particular y/o laboral de la víctima o incluso al de un testigo, pero no que quien fue
condenado por hurtar una billetera a bordo de un colectivo se abstenga de utilizar ese medio de
transporte.
Debe resaltarse la diferencia entre los verbos "usar" y "abusar" utilizados en el texto legal. El
primero impide todo consumo de sustancias estupefacientes, mientras que sólo el abuso de las
bebidas alcohólicas resulta restringido.
Debe recordarse que estas medidas se orientan hacia una finalidad de prevención especial
positiva, por lo que si el uso de estupefacientes o el abuso de alcohol no ha tenido vinculación
con la comisión del delito por el que se condenó al sujeto, la imposición de aquéllas resultará
una carga incompatible con el principio de reserva consagrado por el art. 19 de la Constitución
OM
Nacional.
.C
La obligación de asistir a la escolaridad primaria para los condenados que no la tuvieren
cumplida sólo puede exigir la presencia regular en el ciclo primario, independientemente del
resultado obtenido. Además, la asistencia a cursos regulares del ciclo primario excedería el
DD
tiempo de prueba que establece el artículo, por lo que la utilización del término "escolaridad" en
lugar de "escuela" permite suponer que el condenado podrá asistir a cursos acelerados, a manera
de lograr un certificado de estudios, previo al vencimiento del plazo de prueba.
LA
5. Realizar estudios o prácticas necesarios para su capacitación laboral o profesional. (Inc. 5°)
Es ineludible la existencia de un previo informe del que se desprenda que resulta imperioso o
indispensable que el condenado se someta a un tratamiento psicológico o médico. En ese
sentido, se ha considerado adecuada la imposición de esta regla si, en concordancia con los
hechos de la causa, se acredita en el condenado un alto nivel de agresividad.
Se ha observado que esta regla introduce abiertamente al derecho penal en una esfera propia de
la medicina, y también se han destacado las dificultades que pueden presentarse en la práctica,
por ejemplo, en la libertad del condenado para elegir el profesional que lleve adelante el
OM
.C
DD
LA
FI
La alusión a que el condenado debe "adoptar" un oficio, arte, industria o profesión sugiere un
resultado que quizás no se le pueda exigir. La dificultad que puede generar la imposición de esta
medida indica que su cumplimiento puede considerarse satisfecho si el condenado ha arbitrado
los medios para procurarse todo aquello que se le exige.
OM
La imposición de trabajos comunitarios no puede transformarse en una carga excesiva para el
condenado, desentendiéndose de la situación familiar, económica, social y laboral del sujeto. A
tal efecto, resulta imperioso que se tengan en cuenta cuestiones tales como el horario, la
distancia y las características del trabajo que se impone realizar.
.C
En la jurisprudencia se ha considerado que no resultaba arbitraria la regla de conducta de
realizar tareas para la comunidad en una institución cuyos fines políticos no eran compartidos
por el condenado condicional.
DD
--
Las reglas podrán ser modificadas por el Tribunal según resulte conveniente al caso.
LA
Si el condenado no cumpliere con alguna regla, el Tribunal podrá disponer que no se compute
como plazo de cumplimiento todo o parte del tiempo transcurrido hasta ese momento. Si el
condenado persistiere o reiterare el incumplimiento, el Tribunal podrá revocar la condicionalidad
de la condena. El condenado deberá entonces cumplir la totalidad de la pena de prisión impuesta
FI
en la sentencia.
ARTICULO 28.- La suspensión de la pena no comprenderá la reparación de los daños causados por el
delito y el pago de los gastos del juicio.
Condiciones de procedencia:
procedencia:
Este instituto resulta procedente en aquellos casos en que el imputado haya cometido un delito
cuya pena no sea mayor a tres años y que sea su primer (delito) condena.
La condena se tendrá por cumplida si transcurrido cuatro años de la sentencia firme, el sujeto no
cometiere nuevo delito y hubiere cumplido las condiciones impuestas por el tribunal. Este
beneficio procesal permite dejar la condena de prisión en suspenso, dándose por cumplida si se
cumplimentan los requisitos que exige la norma.
Sin embargo, hoy día parte de la doctrina, entiende que estos plazos no resultan adecuados y
postulan que puede otorgarse una segunda condena de ejecución condicional antes del plazo de
ley.
En tal sentido, se sostiene que podría concederse antes del tiempo de ley de acuerdo al caso
concreto, en especial en aquellos casos donde la condena a recaer sea de corta duración. Su
OM
planteo recae en parte en el fin de la ley de Ejecución Penal, Ley 24,660 Art. 1 (resocialización del
interno), Convención Americana de Derechos Humanos art 8, y Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos Art. 10.3. Ya quenuestro ordenamiento adopta como fin de la pena el
“Preventivo Especial”.
.C
Evidentemente las condiciones impuestas al imputado deben sí o sí tener relación con el hecho
cometido y con las aflicciones que éste sujeto presente. Ej: De nada sirve imponer como
condición que se abstenga de beber bebidas alcohólicas si el sujeto no tiene problemas de
DD
adicción al alcohol.
La condicionalidad de la condena puede ser dictada mediante sentencia recaída en juicio, o por
juicio abreviado.
LA
La probation encuentra regulada en la ley 24.316, que añadió al Código Penal los siguientes
artículos:
ARTICULO 76 bis.- El imputado de un delito de acción pública reprimido con pena de reclusión o
prisión cuyo máximo no exceda de tres años, podrá solicitar la suspensión del juicio a prueba.
En casos de concurso de delitos, el imputado también podrá solicitar la suspensión del juicio a prueba si
el máximo de la pena de reclusión o prisión aplicable no excediese de tres años.
Al presentar la solicitud, el imputado deberá ofrecer hacerse cargo de la reparación del daño en la
medida de lo posible, sin que ello implique confesión ni reconcimiento de la responsabilidad civil
correspondiente. El juez decidirá sobre la razonabilidad del ofrecimiento en resolución fundada. La parte
Si las circunstancias del caso permitieran dejar en suspenso el cumplimiento de la condena aplicable, y
hubiese consentimiento del fiscal, el Tribunal podrá suspender la realización del juicio.
Si el delito o alguno de los delitos que integran el concurso estuviera reprimido con pena de multa
aplicable en forma conjunta o alternativa con la de prisión, será condición, además, que se pague el
mínimo de la multa correspondiente.
El imputado deberá abandonar en favor del estado, los bienes que presumiblemente resultarían
decomisados en caso que recayera condena.
No procederá la suspensión del juicio cuando un funcionario público, en el ejercicio de sus funciones,
hubiese participado en el delito.
OM
Tampoco procederá la suspensión del juicio a prueba respecto de los delitos reprimidos con pena de
inhabilitación.
Tampoco procederá la suspensión del juicio a prueba respecto de los ilícitos reprimidos por las Leyes
22.415 y 24.769 y sus respectivas modificaciones. (Párrafo incorporado por art. 19 de la Ley N°
26.735 B.O. 28/12/2011)
.C
(Artículo incorporado por art. 3° de la Ley N° 24.316 B.O. 19/5/1994)
ARTICULO 76 ter.- El tiempo de la suspensión del juicio será fijado por el Tribunal entre uno y tres
DD
años, según la gravedad del delito. El Tribunal establecerá las reglas de conducta que deberá cumplir el
imputado, conforme las previsiones del artículo 27 bis.
La suspensión del juicio será dejada sin efecto si con posterioridad se conocieran circunstancias que
LA
Si durante el tiempo fijado por el Tribunal el imputado no comete un delito, repara los daños en la
medida ofrecida y cumple con las reglas de conducta establecidas, se extinguirá la acción penal. En
caso contrario, se llevará a cabo el juicio y si el imputado fuere absuelto se le devolverán los bienes
FI
abandonados en favor del Estado y la multa pagada, pero no podrá pretender el reintegro de las
reparaciones cumplidas.
Cuando la realización del juicio fuese determinada por la comisión de un nuevo delito, la pena que se
imponga no podrá ser dejada en suspenso.
La suspensión de un juicio a prueba podrá ser concedida por segunda vez si el nuevo delito ha sido
cometido después de haber transcurrido ocho años a partir de la fecha de expiración del plazo por el
cual hubiera sido suspendido el juicio en el proceso anterior.
No se admitirá una nueva suspensión de juicio respecto de quien hubiese incumplido las reglas
impuestas en una suspensión anterior.
ARTICULO 76 quater.- La suspensión del juicio a prueba hará inaplicables al caso las reglas de
prejudicialidad de los artículos 1101 y 1102 del Código Civil, y no obstará a la aplicación de las
sanciones contravencionales, disciplinarias o administrativas que pudieran corresponder.
¿La probation alcanza a delitos sobre los cuales puede recaer condena condicional o el
máximo de tres años debe entenderse como abstractamente previsto para el tipo
respectivo?
Todo imputado de un delito que pueda ser condenado condicionalmente puede pedir la
OM
suspensión del juicio a prueba. En este sentido se ha entendido que el instituto abarca solo los
delitos considerados “leves”, cuyas penas no suelen exceder de los tres años.
.C
El anteúltimo párrafo del Art. 76 bis excluye del beneficio los delitos reprimidos con pena de
inhabilitación. Este requisito negativo plantea la siguiente situación:
DD
La ley se sancionó y promulgó para que la instancia penal concentre sus recursos sobre delitos
más graves y se decidan rápidamente para cumplir con los tiempos razonables del proceso
impuestos por los tratados internacionales de derechos humanos y por la constitución.
LA
El universo de delitos graves se determina por sus consecuencias, o sea, por la posibilidad de
prisión de cumplimiento efectivo en caso de recaer condena.
En consecuencia, todos los que pueden ser condenados condicionalmente tienen la chance de
requerir que el juicio en su contra se suspenda bajo las condiciones que fije el tribunal o el juez.
FI
Sin embargo, la ley pareciera indicar, además, que todos los que pueden ser inhabilitados no
pueden requerir la suspensión del juicio a prueba. Es sencillo advertir que la presencia de este
aspecto en la norma genera un dilema. Esto ocurre porque (como es apreciable) la inhabilitación
tiene una finalidad diferente que la probation.
1. El imputado de un delito de acción pública reprimido con pena de reclusión o prisión cuyo
máximo no excede de tres años podrá solicitar la suspensión del juicio a prueba.
2. En los casos de concurso de delitos el imputado también podrá solicitar la suspensión del
juicio a prueba si el máximo de la pena de reclusión o prisión aplicable no excediere de
OM
tres años.
3. Si las circunstancias del caso permitieran dejar en suspenso el cumplimiento de la
condena aplicable y hubiere consentimiento del Fiscal, el tribunal podrá suspender la
realización del juicio.
.C
Este artículo entonces, nos fija los requisitos de admisibilidad del instituto de las probation, que
institucionalmente comprende los siguientes supuestos:
DD
- Ante el juez con competencia correccional por un solo delito o concurso real, cuando la pena
máxima o la suma de los máximos no supere los tres años de prisión;
- Ante el juez con competencia criminal o el tribunal oral en cualquier momento antes de abrir el
LA
debate, cuando el delito o concurso de ellos tenga una pena de prisión máxima superior a los
tres años pero un mínimo o mínimo mayor que permita, según las circunstancias del caso, una
condena condicional en los términos del Art. 26.
“Todo imputado de delito que pueda ser condenado condicionalmente tiene derecho a requerir la
suspensión del juicio a prueba”.
OM
CONDICIONES NEGATIVAS No procederá la probation cuando un funcionario público
(entendido según el Art. 77 CP), en ejercicio de sus
funciones, hubiera participado en el delito.
.C
No procede la probation en el caso de los delitos cuya
pena sea la inhabilitación (explicado arriba).
DD
LA
FI
Esto podría entenderse como un tercer requisito negativo, pues la suspensión quedaría
supeditada al dictamen favorable del ministerio público. En principio, el requisito es de dudosa
constitucionalidad porque:
OM
entrometerse en ello.
Otorga funciones judiciales al ministerio público, porque condiciona la decisión del juez o
tribunal. El único caso en que el dictamen del fiscal obliga al tribunal es cuando éste
solicita la absolución en el debate, pero esto sucede porque no hay acusación, es decir,
por falta de un elemento necesario para que haya juicio. Este texto solo puede entenderse
.C
en forma compatible con la Constitución, interpretando que el dictamen del fiscal es
vinculante cuando solicita la suspensión del juicio, pero no a la inversa.
DD
Y si bien, doctrinariamente, se acepta que el consentimiento del fiscal NO es vinculante, existe
una excepción en los casos de violencia de género.
Concepto.
Concepto.
Se trata de una suspensión parcial de la privación de libertad –es decir, del encierro- que tiene
lugar durante un período de prueba que, resultando favorable, determina la extinción definitiva
del resto de la pena privativa de libertad que le quedaba por cumplir al condenado.
Mediante este método el imputado condenado por un hecho ilícito con sentencia firme de prisión
o reclusión, puede obtener su libertad antes de cumplida la totalidad de la condena, si registra
buen comportamiento durante su detención.
OM
No debe olvidarse que siempre que se hable de libertad condicional, es porque la persona se
encuentra cumpliendo sentencia condenatoria firme privativa de libertad, es decir, reclusión o
prisión.
El cálculo debe efectuarse según nos indica la ley del siguiente modo:
•
•
• .C
Condena de prisión menor a 3 años: puede solicitarse a los 8 meses de encierro.
Condena de reclusión menor a 3 años: puede solicitarse al año de encierro.
Condena de reclusión o prisión mayor a 3 años: se solicita a los 2/3 de su cumplimiento
DD
(es decir si una persona es condenada a 4 años de prisión, entonces podría solicitar el
beneficio a los 2 años y 6 meses).
• Condena de reclusión o prisión perpetua: puede solicitarla cuando haya cumplido 35 años
de la condena.
LA
A aquel que sea reincidente, no se le concederá este beneficio. Parte de la doctrina entiende que
con ello se refleja el derecho penal de autor y se afecta la garantía de non bis in idem, dado que
habiendo sido juzgado y condenado por un delito determinado, el imputado es vuelto a juzgar
FI
por un nuevo delito, y también por el que ya se lo juzgó, motivo que lleva a que no se le pueda
conceder la libertad condicional.
Naturaleza.
Naturaleza.
Habiendo transcurrido cierta parte de la condena, el penado puede obtener su libertad
OM
condicional, según determinadas normas. Estas son positivas (art. 13 Código Penal) y negativas
(art. 14 Código Penal).
Gómez y Soler decían que es: Una ejecución de la pena sin encierro.
.C
Diferencia con la condena condicional.
condicional.
Mientras la libertad condicional presupone el cumplimiento de cierta parte de la condena, la
DD
condena condicional significa el suspenso del total de ésta (art. 26 del Código Penal).
A su vez, el art. 27, dice: “La condenación se tendrá como no pronunciada si dentro del término
de cuatro años, contados a partir de la fecha de la sentencia firme, el condenado no cometiere un
nuevo delito.
LA
El Juez no debe concederla de oficio con la palabra podrán no debe significar que el Tribunal la
puede denegar pese a estar reunidos los requisitos legales, sino que se refiere al condenado,
quien por cierto puede solicitarla cuando se encuentra en las condiciones de los arts. 13,14 y 17.
También corresponde distinguir entre libertad condicional (art. 13 que estamos comentando y la
liberación condicional (art. 53 del Código Penal).
Es el primer y más importante requisito para la obtención de la libertad condicional. Este período
es de:
En el fallo Donato González Dardo, el Juzgado Nacional de Ejecución Penal entendió que quien es
condenado a menos de 8 meses de prisión tiene derecho a obtener la libertad condicional, por lo
cual en este caso declaró la inconstitucionalidad del Art. 13 CPN. Se dijo:
“(...) Seguimos imponiendo criterios de prevención general de la pena en nuestro derecho penal,
OM
siendo que, como afirmábamos al principio, tanto éste como la prevención especial, han
resultado un fracaso tanto para los condenados como para la sociedad(...)”
.C
Es el principio más criticado de la ley vigente, que modifica una expresión todavía más
desafortunada, proveniente de los Arts. 99 y 110 del Código de Tejedor, que exigía para la vieja
gracia que el condenado diese pruebas de una reforma positiva.
DD
Por reglamentos carcelarios deben entenderse las pautas que determina la ley de ejecución para
la disciplina carcelaria (arts. 79 a 99). En tal sentido, la valoración es exclusivamente
jurisdiccional, es decir, que los organismos administrativos informan e ilustran con sus informes,
LA
pena- anterior al pedido. Para el código penal lo único necesario es que el recluso haya cumplido
el encierro sin faltas de disciplina de inusitada gravedad.
En los casos que hubieran serias dudas sobre la regularidad del cumplimiento de los
3. Ningún penado cuya libertad condicional haya sido revocada podrá obtenerla nuevamente.
Esta disposición significa que no puede volver a obtenerla para el cumplimiento de esa pena, sin
que obste para cualquier otra pena futura.
OM
4. Fijación judicial de la parte de los salarios que el condenado debe destinar a la reparación
del daño.
Es un requisito que debe ser cumplido por el tribunal al momento de conceder la libertad
.C
condicional. El inc. 4° del Art. 29 dice que cuando la reparación civil no se hubiese cumplido
durante la condena, o cuando se hubiese establecido en favor del ofendido o de su familia una
pena de indemnización, el juez, en caso de insolvencia, señalará la parte de los salarios del
DD
responsable que debe ser aplicada a dichas obligaciones antes de proceder a concederle la
libertad condicional.
Cabe observar que el requisito consiste únicamente en la fijación de la parte que debe destinar a
ese efecto, pero que en modo alguno queda subordinada la libertad condicional al pago, puesto
que el pago no es requisito para concederla ni su falta constituye causal de revocación.
FI
---
Si bien la libertad condicional es un beneficio, no por ello puede ser considerada un acto
graciable ni discrecional. Cuando están reunidos los requisitos formales y materiales, el
condenado tiene derecho a reclamarla y el tribunal tiene el deber de acordarla. Lo contrario sería
aplicar la libertad condicional del ámbito de los actos judiciales y remitirla a la categoría de acto
político, en que la cesación del encierro quedaría supeditada a una pretendida neutralización de
peligrosidad, es decir, librada a organismos técnicos criminológicos de la administración que
operan con criterios siempre discutibles y bastante arbitrarios.
La expresión “podrán” del Art. 13 no puede entenderse en el sentido de que el tribunal la puede
negar, pese a estar reunidos los requisitos legales. La fórmula “podrán obtener” no faculta a la
autoridad a decidir arbitrariamente, sino que faculta al penado para ejercer su derecho.
OM
6. Someterse a tratamiento médico, psiquiátrico o psicológico, que acrediten su necesidad y
eficacia de acuerdo al consejo de peritos.”
Primer párrafo:
.C
DD
Conforme a la primera hipótesis, la libertad condicional será revocada cuando le
penado cometiere un nuevo delito o violare la obligación de la residencia. Esta última
debe cometerse de modo que no se justifique, que le sea reprochable y que lo
sustraiga o dificulte el control por parte del patronato. En estos casos no se computará
LA
Segundo párrafo:
• La segunda parte del Art. 15 se refiere a la violación de las demás condiciones del
Art. 14. En estos supuestos, el tribunal podrá disponer que no se compute en el
término de la condena todo o parte del tiempo que hubiese durado la libertad,
hasta que el condenado cumpliese lo dispuesto en dichos incisos. Además de fijar
una facultad, el criterio para tomar una u otra medida (no computar todo el período
de incumplimiento o solo computar una parte) o de no aplicarla, no puede ser
arbitrario.
OM
La libertad condicional del Art. 53 CP.
CP. (Tratado Zaffaroni)
Primero hay que leer estos dos artículos:
ARTÍCULO 52.- Se impondrá reclusión por tiempo indeterminado como accesoria de la última condena,
cuando la reincidencia fuere múltiple en forma tal que mediaren las siguientes penas anteriores:
.C
1. Cuatro penas privativas de libertad, siendo una de ellas mayor de tres años;
ARTICULO 53.- En los casos del artículo anterior, transcurridos cinco años del cumplimiento de la
reclusión accesoria, el tribunal que hubiera dictado la última condena o impuesto la pena única estará
facultado para otorgarle la libertad condicional, previo informe de la autoridad penitenciaria, en las
condiciones compromisorias previstas en el artículo 13, y siempre que el condenado hubiera mantenido
LA
buena conducta, demostrando aptitud y hábito para el trabajo, y demás actitudes que permitan suponer
verosímilmente que no constituirá un peligro para la sociedad. Transcurridos cinco años de obtenida la
libertad condicional el condenado podrá solicitar su libertad definitiva al tribunal que la concedió, el que
decidirá según sea el resultado obtenido en el período de prueba y previo informe del patronato,
institución o persona digna de confianza, a cuyo cargo haya estado el control de la actividad del
liberado. Los condenados con la reclusión accesoria por tiempo indeterminado deberán cumplirla en
FI
establecimientos federales.
La violación por parte del liberado de cualquiera de las condiciones establecidas en el artículo 13 podrá
determinar la revocatoria del beneficio acordado y su reintegro al régimen carcelario anterior. Después
de transcurridos cinco años de su reintegro al régimen carcelario podrá en los casos de los incisos 1º,
OM
delictiva agravaría las penas únicamente cuando se trate de delitos conminados con pena
privativa de libertad y el autor haya cumplido anteriormente una pena de la misma naturaleza. El
fundamento de la agravación seria que el anterior sometimiento a un régimen de prevención
especial no ha dado los resultados requeridos a los efectos preventivos.
.C
ARTICULO 41.- A los efectos del artículo anterior, se tendrá en cuenta:
DD
1º. La naturaleza de la acción y de los medios empleados para ejecutarla y la extensión del daño y del
peligro causado;
2º. La edad, la educación, las costumbres y la conducta precedente del sujeto, la calidad de los motivos
que lo determinaron a delinquir, especialmente la miseria o la dificultad de ganarse el sustento propio
necesario y el de los suyos, la participación que haya tomado en el hecho, las reincidencias en que
hubiera incurrido y los demás antecedentes y condiciones personales, así como los vínculos
LA
personales, la calidad de las personas y las circunstancias de tiempo, lugar, modo y ocasión que
demuestren su mayor o menor peligrosidad. El juez deberá tomar conocimiento directo y de visu del
sujeto, de la víctima y de las circunstancias del hecho en la medida requerida para cada caso.
Por regla general, el concepto tradicional de reincidencia se vincula con una agravación de la
pena en razón de anteriores delitos, aunque no es fácil definirla en perspectiva comparada,
porque:
OM
Marco legal. Título VIII del CP: Reincidencia
Reincidencia.
eincidencia.
ARTICULO 50.- Habrá reincidencia siempre que quien hubiera cumplido, total o parcialmente, pena
privativa de libertad impuesta por un tribunal del país cometiere un nuevo delito punible también con esa
clase de pena.
.C
La condena sufrida en el extranjero se tendrá en cuenta para la reincidencia si ha sido pronunciada por
razón de un delito que pueda, según la ley argentina, dar lugar a extradición.
No dará lugar a reincidencia la pena cumplida por delitos políticos, los previstos exclusivamente en el
Código de Justicia Militar, los amnistiados o los cometidos por menores de dieciocho años de edad. La
DD
pena sufrida no se tendrá en cuenta a los efectos de la reincidencia cuando desde su cumplimiento
hubiera transcurrido un término igual a aquél por la que fuera impuesta, que nunca excederá de diez ni
será inferior a cinco años.
ARTICULO 51.- Todo ente oficial que lleve registros penales se abstendrá de informar sobre datos de
un proceso terminado por sobreseimiento o sentencia absolutoria. En ningún caso se informará la
LA
existencia de detenciones que no provengan de la formación de causa, salvo que los informes se
requieran para resolver un hábeas corpus o en causas por delitos de que haya sido víctima el detenido.
1. Después de transcurridos diez años desde la sentencia (art. 27) para las condenas condicionales;
FI
2. Después de transcurridos diez años desde su extinción para las demás condenas a penas privativas
de la libertad;
3. Después de transcurridos cinco años desde su extinción para las condenas a pena de multa o
inhabilitación.
En todos los casos se deberá brindar la información cuando mediare expreso consentimiento del
interesado. Asimismo, los jueces podrán requerir la información, excepcionalmente, por resolución que
sólo podrá fundarse en la necesidad concreta del antecedente como elemento de prueba de los hechos
en un proceso judicial.
2. Cuando se lleve a cabo el cómputo de las penas temporales, sean condicionales o de cumplimiento
efectivo;
4. Cuando declaren la extinción de las penas en los casos previstos por los artículos 65, 68 y 69.
La violación de la prohibición de informar será considerada como violación de secreto en los términos
del artículo 157, si el hecho no constituyere un delito más severamente penado.
ARTICULO 52.- Se impondrá reclusión por tiempo indeterminado como accesoria de la última condena,
cuando la reincidencia fuere múltiple en forma tal que mediaren las siguientes penas anteriores:
1. Cuatro penas privativas de libertad, siendo una de ellas mayor de tres años;
OM
Los tribunales podrán, por una única vez, dejar en suspenso la aplicación de esta medida accesoria,
fundando expresamente su decisión en la forma prevista en el artículo 26.
ARTICULO 53.- En los casos del artículo anterior, transcurridos cinco años del cumplimiento de la
reclusión accesoria, el tribunal que hubiera dictado la última condena o impuesto la pena única estará
facultado para otorgarle la libertad condicional, previo informe de la autoridad penitenciaria, en las
condiciones compromisorias previstas en el artículo 13, y siempre que el condenado hubiera mantenido
.C
buena conducta, demostrando aptitud y hábito para el trabajo, y demás actitudes que permitan suponer
verosímilmente que no constituirá un peligro para la sociedad. Transcurridos cinco años de obtenida la
libertad condicional el condenado podrá solicitar su libertad definitiva al tribunal que la concedió, el que
decidirá según sea el resultado obtenido en el período de prueba y previo informe del patronato,
institución o persona digna de confianza, a cuyo cargo haya estado el control de la actividad del
DD
liberado. Los condenados con la reclusión accesoria por tiempo indeterminado deberán cumplirla en
establecimientos federales.
La violación por parte del liberado de cualquiera de las condiciones establecidas en el artículo 13 podrá
determinar la revocatoria del beneficio acordado y su reintegro al régimen carcelario anterior. Después
de transcurridos cinco años de su reintegro al régimen carcelario podrá en los casos de los incisos 1º,
LA
Requisitos
Según nuestra normativa, existen y se exigen condiciones para su aplicabilidad:
FI
2) la existencia de una condena anterior por un delito, sin que haya transcurrido el plazo del art.
4) que la pena impuesta en esa condena anterior haya sido efectivamente cumplida como tal,
aunque sea en una parte que pueda ser considerada, legalmente, suficiente para contramotivar al
condenado y cumplir los proclamados fines de “reintegración social” (conf. arts. 50 y 13 del
Código Penal –la citada en último término es la única disposición legal referida al tema);
OM
Clases de reincidencia
Se distingue, en primer lugar, una reincidencia genérica y una reincidencia específica.
.C
si fue condenado por Robo Agravado por Efracción y comete posteriormente un
Homicidio Culposo.
DD
• En cambio, es reincidencia específica, cuando el nuevo delito cometido es idéntico o
análogo a aquel por el cual el sujeto fue condenado anteriormente.
La ley argentina agrava la pena para el reincidente en cuanto impide la libertadcondicional, pero
también destina a los multirreincidentes la pena de relegaciónllamada accesoria de reclusión por
LA
tiempo indeterminado en dos hipótesis: cuando el condenado registre cuatro penas privativas de
la libertad, siendo una de ellas mayor de tres años, y cuando existieren cinco condenas a penas
privativas de libertad iguales o menores a aquel máximo (art. 52).
FI
Se adopta el sistema de la reincidencia real (lo que se requiere es el cumplimiento de la pena del
anterior delito), en oposición al de reincidencia ficta (que no requiere cumplimiento efectivo de
pena), y el de reincidencia genérica frente a la específica (que requiere identidad o similitud entre
los delitos), y ello con la previsión de que la suspensión de la pena accesoria puede ser acordada
por única vez (último párrafo del art. 52). Todas estas disposiciones son inconstitucionales: (a)
por violar el mínimo de racionalidad al imponer una penaque excede el marco de la culpabilidad
por el acto; (b) por afectar la prohibición de doble desvaloración; (c) por lesionar el principio de
prohibición de doble punición; (d) y, en el caso del art. 52, por imponer una pena que no guarda
absolutamente ninguna proporción con el delito cometido.
Debe tratarse de una cadena de reincidencias, en forma que con anterioridad a la pena que se
impone es esa sentencia, el sujeto haya cumplido cuatro penas privativas de libertad, siendo una
de ellas mayor de tres años, o cinco penas de la misma clase de tres años o menores. Recién en
OM
la quinta o con la sexta pena, según el caso, podrá imponerse la pena de deportación.
La cadena de reincidencias debe haber sido sucesivamente declarada en cada sentencia, de modo
que el juez que imponga la deportación se encuentre con una sentencia previa que declare al
procesado reincidente por tercera o por cuarta vez y que la pena impuesta en la última sentencia
.C
se haya cumplido total o parcialmente. Las declaraciones de reincidencia anteriores a la ley
23.057 debelan revisarse a este efecto, pues estarán hechas conforme a los requisitos de la
reincidencia ficta y pueden no cumplimentar los de la reincidencia real consagrada en el Art. 50.
DD
El Art. 52 del código penal.
penal.
En el texto vigente la reincidencia tiene por efecto impedir el beneficio de la libertad condicional
y, eventualmente, dar fundamento a la pena de deportación en caso de cuarta reincidencia o de
LA
quinta reincidencia. En definitiva, esas eran las consecuencias conforme al texto de 1921, pero
las reformas de facto de 1967 y de 1976, habían agregado una escala de aumento de un tercio
del mínimo y del máximo de la pena, que ha sido derogada, volviéndose al régimen de
consecuencias originario. Por nuestra parte, insistimos en que, pese a esta reducción nos parece
FI
que no puede sostenerse la constitucionalidad de estas consecuencias, pues incluso ellas violan
el principio de que nadie puede ser juzgado dos veces por el mismo hecho, por lo cual creemos
que los artículos 14, 50, 52 y 53 del CP son inconstitucionales.
ARTICULO 52. - Se impondrá reclusión por tiempo indeterminado, como accesoria de la última condena,
cuando la reincidencia fuere múltiple en forma tal que mediaren las siguientes penas anteriores:
1. Cuatro penas privativas de libertad, siendo una de ellas mayor de tres años;
2. Cinco penas privativas de libertad, de tres años o menores.
Los tribunales podrán, por una única vez, dejar en suspenso la aplicación de esta medida accesoria,
fundando expresamente su decisión en la forma prevista en el artículo 26.
OM
mismo. Y así como en la criminalidad habitual influye primeramente el ambiente, los inclinados a
delinquir pueden serlo por disposición con-genita.
.C
A éste tópico, resultó aclarado en el precedente “Gramajo”, fallo por el cual la Corte Suprema de
la Nación en 2006, declaró inconstitucional el art. 52 del Código Penal, habida cuenta que el
DD
mismo establece la reclusión por tiempo indeterminado. En dicho fallo entre otras cosa, se
expreso que “…dentro de nuestro régimen constitucional sólo es posible que el Estado restrinja a
título de “pena” los derechos de un ciudadano (y en particular su libertad), cuando esa injerencia
se produce como reacción a un hecho cometido con culpabilidad. Dicho principio, que esta Corte
LA
ha derivado del art. 18 de la Constitución Nacional, supone como requisito ineludible para la
aplicación de una sanción la preexistencia de una acción ilícita que pueda ser atribuida al
procesado tanto objetiva como subjetivamente, y ello supone la posibilidad real y efectiva de
ajustar la conducta individual a los mandatos de las normas jurídicas… que asimismo, y como
FI
correlato del principio de reserva, “no es conciliable con los principios básicos de nuestra
Constitución establecer un sistema represivo que formule tipos penales que no estén fundados
en la descripción de conductas punibles, sino en características personales…”.-
La condena sufrida en el extranjero se tendrá en cuenta para la reincidencia si ha sido pronunciada por
razón de un delito que pueda, según la ley argentina, dar lugar a extradición.
No dará lugar a reincidencia la pena cumplida por delitos políticos, los previstos exclusivamente en el
Código de Justicia Militar, los amnistiados o los cometidos por menores de dieciocho años de edad. La
pena sufrida no se tendrá en cuenta a los efectos de la reincidencia cuando desde su cumplimiento
ARTICULO 51.- Todo ente oficial que lleve registros penales se abstendrá de informar sobre datos de
un proceso terminado por sobreseimiento o sentencia absolutoria. En ningún caso se informará la
existencia de detenciones que no provengan de la formación de causa, salvo que los informes se
requieran para resolver un hábeas corpus o en causas por delitos de que haya sido víctima el detenido.
1. Después de transcurridos diez años desde la sentencia (art. 27) para las condenas condicionales;
2. Después de transcurridos diez años desde su extinción para las demás condenas a penas privativas
de la libertad;
OM
3. Después de transcurridos cinco años desde su extinción para las condenas a pena de multa o
inhabilitación.
En todos los casos se deberá brindar la información cuando mediare expreso consentimiento del
interesado. Asimismo, los jueces podrán requerir la información, excepcionalmente, por resolución que
sólo podrá fundarse en la necesidad concreta del antecedente como elemento de prueba de los hechos
en un proceso judicial.
.C
Los tribunales deberán comunicar a los organismos de registro la fecha de caducidad:
3. Cuando se cumpla totalmente la pena de multa o, en caso de su sustitución por prisión (art. 21, párr.
2º), al efectuar el cómputo de la prisión impuesta;
LA
4. Cuando declaren la extinción de las penas en los casos previstos por los artículos 65, 68 y 69.
La violación de la prohibición de informar será considerada como violación de secreto en los términos
del artículo 157, si el hecho no constituyere un delito más severamente penado.
FI
ARTICULO 52.- Se impondrá reclusión por tiempo indeterminado como accesoria de la última condena,
cuando la reincidencia fuere múltiple en forma tal que mediaren las siguientes penas anteriores:
1. Cuatro penas privativas de libertad, siendo una de ellas mayor de tres años;
Los tribunales podrán, por una única vez, dejar en suspenso la aplicación de esta medida accesoria,
fundando expresamente su decisión en la forma prevista en el artículo 26.
ARTICULO 53.- En los casos del artículo anterior, transcurridos cinco años del cumplimiento de la
reclusión accesoria, el tribunal que hubiera dictado la última condena o impuesto la pena única estará
facultado para otorgarle la libertad condicional, previo informe de la autoridad penitenciaria, en las
condiciones compromisorias previstas en el artículo 13, y siempre que el condenado hubiera mantenido
buena conducta, demostrando aptitud y hábito para el trabajo, y demás actitudes que permitan suponer
verosímilmente que no constituirá un peligro para la sociedad. Transcurridos cinco años de obtenida la
libertad condicional el condenado podrá solicitar su libertad definitiva al tribunal que la concedió, el que
decidirá según sea el resultado obtenido en el período de prueba y previo informe del patronato,
institución o persona digna de confianza, a cuyo cargo haya estado el control de la actividad del
La violación por parte del liberado de cualquiera de las condiciones establecidas en el artículo 13 podrá
determinar la revocatoria del beneficio acordado y su reintegro al régimen carcelario anterior. Después
de transcurridos cinco años de su reintegro al régimen carcelario podrá en los casos de los incisos 1º,
2º, 3º y 5º del artículo 13, solicitar nuevamente su libertad condicional.
Requisitos
Según nuestra normativa, existen y se exigen condiciones para su aplicabilidad:
OM
2) la existencia de una condena anterior por un delito, sin que haya transcurrido el plazo del art.
51 del Código Penal;
4) que la pena impuesta en esa condena anterior haya sido efectivamente cumplida como tal,
.C
aunque sea en una parte que pueda ser considerada, legalmente, suficiente para contramotivar al
condenado y cumplir los proclamados fines de “reintegración social” (conf. arts. 50 y 13 del
Código Penal –la citada en último término es la única disposición legal referida al tema);
DD
5) que dicha pena anterior no haya sido cumplida por “delitos políticos”, por delitos previstos
exclusivamente en el Código de Justicia Militar, por delitos amnistiados o cuando ellos fueron
cometidos cuando el autor era menor de dieciocho años;
LA
“La pena sufrida no se tendrá en cuenta a los efectos de la reincidencia cuando desde su
cumplimiento hubiera transcurrido un término igual a aquél por la que fuera impuesta, que
nunca excederá de diez ni será inferior a cinco años.”
Clases de reincidencia
Se distingue, en primer lugar, una reincidencia genérica y una reincidencia específica.
Se adopta el sistema de la reincidencia real (lo que se requiere es el cumplimiento de la pena del
anterior delito), en oposición al de reincidencia ficta (que no requiere cumplimiento efectivo de
pena), y el de reincidencia genérica frente a la específica (que requiere identidad o similitud entre
los delitos), y ello con la previsión de que la suspensión de la pena accesoria puede ser acordada
OM
por única vez (último párrafo del art. 52). Todas estas disposiciones son inconstitucionales: (a)
por violar el mínimo de racionalidad al imponer una penaque excede el marco de la culpabilidad
por el acto; (b) por afectar la prohibición de doble desvaloración; (c) por lesionar el principio de
prohibición de doble punición; (d) y, en el caso del art. 52, por imponer una pena que no guarda
absolutamente ninguna proporción con el delito cometido.
.C
Casos de reincidencia múltiples.
múltiples. (Ver más en el punto “I”)
La reclusión accesoria por tiempo indeterminado o deportación, es una pena que se agrega a la
DD
del último delito cometido y que presupone una reincidencia múltiple. La actual redacción del
Art. 52 ha eliminado la deportación para ciertos concursos reales y ha aclarado definitivamente
que se trata de un supuesto de reincidencia múltiple, lo que acaba con la arbitraria invención de
la habitualidad como concepto autónomo.
LA
Debe tratarse de una cadena de reincidencias, en forma que con anterioridad a la pena que se
impone es esa sentencia, el sujeto haya cumplido cuatro penas privativas de libertad, siendo una
de ellas mayor de tres años, o cinco penas de la misma clase de tres años o menores. Recién en
FI
la quinta o con la sexta pena, según el caso, podrá imponerse la pena de deportación.
La cadena de reincidencias debe haber sido sucesivamente declarada en cada sentencia, de modo
que el juez que imponga la deportación se encuentre con una sentencia previa que declare al
procesado reincidente por tercera o por cuarta vez y que la pena impuesta en la última sentencia
se haya cumplido total o parcialmente. Las declaraciones de reincidencia anteriores a la ley
23.057 debelan revisarse a este efecto, pues estarán hechas conforme a los requisitos de la
reincidencia ficta y pueden no cumplimentar los de la reincidencia real consagrada en el Art. 50.
En el texto vigente la reincidencia tiene por efecto impedir el beneficio de la libertad condicional
y, eventualmente, dar fundamento a la pena de deportación en caso de cuarta reincidencia o de
quinta reincidencia. En definitiva, esas eran las consecuencias conforme al texto de 1921, pero
las reformas de facto de 1967 y de 1976, habían agregado una escala de aumento de un tercio
del mínimo y del máximo de la pena, que ha sido derogada, volviéndose al régimen de
consecuencias originario.
Zaffaroni insiste en que, pese a esta reducción parece que no puede sostenerse la
constitucionalidad de estas consecuencias, pues incluso ellas violan el principio de que nadie
OM
puede ser juzgado dos veces por el mismo hecho, por lo cual cree que los artículos 14, 50, 52 y
53 del CP son inconstitucionales.
.C
¿Hasta cuándo el Registro Nacional de Reincidencia puede seguir informando que una persona ha
sido condenada como responsable de un delito?
DD
La respuesta a esta pregunta resulta trascendente en la práctica cotidiana del derecho penal
porque implica una solución al drama de quienes se ven estigmatizados por haber sido alguna
vez condenados a una pena, generalmente privativa de la libertad.
Es sabido que quien presenta este antecedente, según la jurisprudencia mayoritaria en Argentina,
LA
no podrá gozar de la libertad provisoria mientras se lleve a cabo un nuevo proceso penal en su
contra, sin importar la escasa entidad del nuevo hecho por el que se lo investigue o someta a
juzgamiento.
FI
Además es más que evidente la repercusión negativa que tiene el hecho de haber sido alguna vez
condenado penalmente a la hora de buscar un trabajo digno, o de procurar la regularización de
la situación migratoria tanto en Argentina como en el extranjero.
"Todo ente oficial que lleve registros penales se abstendrá de informar sobre datos de un
proceso terminado por sobreseimiento o sentencia absolutoria. En ningún caso se
informará la existencia de detenciones que no provengan de la formación de causa, salvo
1. Después de transcurridos diez años desde la sentencia (art. 27) para las condenas
condicionales;
2. Después de transcurridos diez años desde su extinción para las demás condenas a
penas privativas de la libertad;
3. Después de transcurridos cinco años desde su extinción para las condenas a pena
de multa o inhabilitación.
OM
En todos los casos se deberá brindar la información cuando mediare expreso
consentimiento del interesado. Asimismo, los jueces podrán requerir la información,
excepcionalmente, por resolución que sólo podrá fundarse en la necesidad concreta del
antecedente como elemento de prueba de los hechos en un proceso judicial.
.C
Los tribunales deberán comunicar a los organismos de registro la fecha de caducidad:
65, 68 y 69.
penado.”
En la práctica muchas veces los Registros Oficiales, sobre todo los que se encuentran a cargo de
las Policías de las Provincias, sigue informando el antecedente aún mucho tiempo después de
En consecuencia se torna necesario accionar judicialmente para solicitar la supresión del dato
que debiera permanecer secreto.
Por medio de esta acción constitucional, el interesado podrá solicitar al Juez que ordene la
inmediata supresión del dato que, de acuerdo con la Ley, ya no puede ser informado, ni tenido
en cuenta en contra de los intereses del afectado.
Además, el artículo 51 del Código Penal prevé la posibilidad de denunciar penalmente a los
funcionarios encargados de los Registros que infringieran la obligación de no informar datos
caducos, en cuyo caso, la figura aplicable es la de violación de secretos, pudiendo el interesado
OM
en el marco del proceso que así se instaure constituirse en parte a fin de solicitar la condena
penal del responsable y la reparación de los daños y perjuicios sufridos por su parte.
Jurisprudencia
“Es cierto que en el artículo 51, inc. 2°, del cuarto párrafo, según el texto de la ley 23.057, se
.C
dispone que debe comunicarse al Registro Nacional de Reincidencia el cómputo de las penas
temporales, "sean condicionales o de cumplimiento efectivo", pero esto parece más un desliz por
inadvertencia que el producto de
DD
una decisión elaborada. Basta repasar el funcionamiento institucional del Código
para caer en cuenta de que un cómputo sobre el vencimiento de la pena condicional es
inoperante, puesto que las penas condicionales no vencen, caducan, extinguiéndose sus efectos
si dentro de los 4 años desde la fecha de la misma no se comete otro delito (art.27)”.
LA
Por lo que resulta más apropiado en vez de enunciar un concepto, enunciar sus características,
pues aunque persigue una finalidad utilitaria orientada a la satisfacción del interés común,
resulta evidente la dificultad que existe para distinguirlas de las penas, por cuanto:
OM
- Se trata de medidas coactivas, ya que la conformidad del destinatario no es presupuesto de su
imposición.
- Su efecto es una privación o restricción de Derecho, con lo cual se debe admitir que se
traducen en padecimiento para quienes las soportan.
.C
De todas formas, podemos afirmar que las medidas de seguridad, en Derecho penal, son
aquellas sanciones complementarias o sustitutivas de las penas, que el juez puede imponer con
efectos preventivos a aquél sujeto que comete un injusto (hecho típico y antijurídico); pero, que
DD
de acuerdo con la teoría del delito, al ser inimputable no puede ser culpado por un defecto en
su culpabilidad. Esta persona es susceptible de recibir una medida de seguridad para evitar
nuevos injustos. Sin embargo, existen sistemas penales en los que también se aplican medidas
de seguridad a personas imputables, tal es el caso del sistema penal mexicano.
LA
Las medidas de seguridad, atienden a la peligrosidad del sujeto, exteriorizada en todo caso a
través de un ilícito penal: son medidas de prevención especial que tienen que ser determinadas
por peritos, tomando como base los antecedentes del inculpado, y su finalidad es prevenir
FI
afectaciones futuras.
OM
de peligrosidad pre-delictual.
Aquí se requiere que el sujeto sea peligroso en el sentido común y corriente de la expresión, es
LA
decir, capaz de causar cualquier daño, a sí o a terceros. En nuestro CP hay dos clases de medidas
de reclusión no penales:
1) Reclusión manicomial: Esta establecida en el párrafo 2 del inciso primero del Art. 34 CP:
FI
Esta reclusión supone enajenación. Por enajenación no deben entenderse únicamente los cuadros
sicóticos, sino cualquier padecimiento psíquico que cause, como mínimo, una perturbación grave
de la conciencia y que tenga carácter permanente o más o menos prolongado, aunque fuere
episódico o en forma de brotes.
2) Reclusión en establecimiento adecuado: Esta prevista en el párrafo 3 del inciso primero del
Art. 34 CP: “En los demás casos en que se absolviere a un procesado por las causales del
presente inciso, el tribunal ordenara la reclusión del mismo en un establecimiento
adecuado hasta que se comprobase la desaparición de las condiciones que le hicieren
peligroso”.
En estos casos, para que cese la medida no se requiere el dictamen de peritos, sino la
OM
comprobación de que han cesado las condiciones que determinaros la reclusión. Esta
comprobación se hará en la forma que establezcan las leyes procesales, no siendo descartable el
reconocimiento directo por parte del tribunal.
.C
Autores de injustos, es decir, inimputables no alienados.
Autores d econductas atípicas por error de tipo psíquicamente condicionado, pero que no
DD
son alienados.
Involuntables no alienados.
Sujetos que actúan en error invencible culturalmente condicionado, sean errores de tipo o
de prohibición.
LA
FI
Posibilidades.
OM
Casos de tenencia de
estupefacientes, para uso
Tratamiento EXITOSO: eximición de aplicación de la pena.
personal
Tratamiento NO SATISFACTORIO: transcurrido 2 años y medio y sin
colaboración; se aplicará la pena y además continuará con la medida de
seguridad o sólo con ésta.
Se aplican a los menores. Al menor de 14 años que no es punible pero puede ser sometido a
medidas tutelares:
1) Tutela Privada.
2) Pérdida o suspensión de la potestad tutelar privada.
3) La entrega al Consejo Nacional del Menor en el orden nacional o la internación en un
establecimiento adecuado en el orden provincial. Entre los 14 y 16 años puede ser
sometido a proceso y ser reprimido con pena privativa de la libertad. A partir de los 21
años de edad será trasladado a un establecimiento común para adultos.
OM
años, multa o inhabilitación.
.C
Medidas de reclusión por tiempo indeterminado.
indeterminado.
DD
ARTÍCULO 52.- Se impondrá reclusión por tiempo indeterminado como accesoria de la última condena,
cuando la reincidencia fuere múltiple en forma tal que mediaren las siguientes penas anteriores:
1. Cuatro penas privativas de libertad, siendo una de ellas mayor de tres años;
Los tribunales podrán, por una única vez, dejar en suspenso la aplicación de esta medida accesoria,
fundando expresamente su decisión en la forma prevista en el artículo 26.
ARTÍCULO 26.- En los casos de primera condena a pena de prisión que no exceda de tres años, será
facultad de los tribunales disponer en el mismo pronunciamiento que se deje en suspenso el
FI
cumplimiento de la pena. Esta decisión deberá ser fundada, bajo sanción de nulidad, en la personalidad
moral del condenado, su actitud posterior al delito, los motivos que lo impulsaron a delinquir, la
naturaleza del hecho y las demás circunstancias que demuestren la inconveniencia de aplicar
efectivamente la privación de libertad. El tribunal requerirá las informaciones pertinentes para formar
criterio, pudiendo las partes aportar también la prueba útil a tal efecto.
Igual facultad tendrán los tribunales en los casos de concurso de delitos si la pena impuesta al reo no
excediese los tres años de prisión.
El Art. 52 establece la aplicación de una pena de reclusión por tiempo indeterminado como
accesoria de la última condena, en particulares supuestos de multirreincidencia, que enumera
taxativamente.
Esta pena no solo es inconstitucional por violar el principio de la mínima irracionalidad, sino
OM
también por su genealogía antirrepublicana e incompatible con la antropología constitucional,
pues no es más que una síntesis de las viejas penas de deportación y de relegación.
En efecto:
.C
Se trata de una pena eliminatoria, y así fue proyectada y sancionada en su origen, copiada
textualmente de la ley de deportación francesa de 1885.
Se proponía eliminar, mandándolos a un paraje de los territorios del sur, a condenados
DD
por delitos en concurso real calificado y a multirreincidentes, aunque se interpretó que no
era necesaria la última condición, sino que se tomaban en cuenta los delitos cometidos a
lo largo de toda la vida, por prolongada que fuese.
Fue el complemento legal necesario para la erección del más vergonzoso monumento de
LA
Del paraje del sur no regresaban más, salvo que el poder ejecutivo los indultara. Esto
terminó en 1944, con el establecimiento del régimen de libertad condicional especial para
esta clase de penas.
Naturaleza
Dado que se ha demostrado que las llamadas medidas de seguridad postdelictuales son penas a
las que se cambia de nombre para burlar sus límites razonables, queda claro que se trata de una
pena, y no una simple medida.
Es una pena fundada en la peligrosidad, y esto importa una violación expresa al principio
de culpabilidad.
Lesiona el principio non bis in ídem, por agravar una pena tomando como fundamento un
delito anterior ya penado.
La regla del Art. 52 viola toda regla de proporcionalidad y, por ende, el principio de
irracionalidad mínima que debe mediar entre delito y pena.
La indeterminación de su duración es lesiva de la legalidad de las penas.
OM
Sus antecedentes y genealogía son autoritarios e incluso bochornosos.
Pocas dudas podemos tener, luego de analizar estos ítems, respecto de la inconstitucionalidad de
esta medida pena.
.C
DD
LA
FI
A) Pena de multa.
multa.
La multa penal es una pena prevista en el Art. 5° del código que opera sobre el patrimonio del
OM
condenado, con el límite constitucional de la prohibición de confiscación, pero que no reconoce
el objetivo reparador que caracteriza a la multa administrativa.
.C
No obstante, su aplicación puede dar lugar a notorias injusticias, puesto que para algunos puede
ser realmente sentida como una disminución patrimonial y, por ende, una motivación para
rectificar su conducta de vida, en tanto que otros, de mayor capacidad económica, pueden no
DD
sentirla.
concreta, o sea, un monto global que resulta de conjugar dos coordenadas: gravedad del
delito y situación económica del condenado.
• Tiempo o plazo de multa: el juez individualiza en cada caso concreto la cuantía
correspondiente a cada tipo o porción, teniendo en cuenta la capacidad patrimonial del
FI
penado, de manera que –de sus ganancias- le quede la cantidad mínima necesaria para
sus obligaciones elementales.
La multa no se paga de una vez, sino a lo largo de cierto tiempo, en plazos fijos según los
ingresos, de modo que se prolonga en relación progresiva o regresiva según los ingresos,
cuyo límite máximo está dado por la preservación de lo necesario para la satisfacción de
las necesidades básicas.
• Días multa o días de multa: se determina la importancia o gravedad de la multa no por una
suma de dinero, sino por un número de días, según la gravedad del delito. Cada día
equivale a una concreta cantidad de dinero, según la posición económica del condenado.
La ley debe fijar el número de días de multa que se imponen como pena a cada delito,
según la gravedad de éste. Establecerá un número proporcionalmente igual al de días que
le correspondería de privación de libertad si se aplicare esta pena.
El sistema más tradicional, el de la multa total, es el que rigió siempre en el Código Argentino.
No obstante, suaplicación puede dar lugar a notorias injusticias, puesto que para algunos puede
ser realmente sentida como una disminución patrimonial y, por ende, una motivación
pararectificar su conducta de vida, en tanto que otros, de mayor capacidad económica, puedenno
sentirla. Debido a esta circunstancia es que se pensó en reemplazar el sistema
deindividualización de la multa, estableciendo el sistema del día-multa, de origen brasileño.
OM
Este sistema, que debería denominarse sistema brasileño o sistema del “día de multa”, fue
acogido favorablemente y hoy se considera que es el más conveniente, dentro de los tres
sistemas que hemos analizado previamente.
Conforme a este sistema se fija un precio diario, teniendo en cuenta los ingresos diarios del
multado,y se establece la pena en un cierto número de días-multa, esto teniendo en cuenta la
.C
magnitud del delito y, en especial, la culpabilidad.
Este sistema permite que todoslos multados sientan la incidencia patrimonial de la multa de
DD
manera semejante. Este es elsistema que tiende a imponerse en la legislación más moderna y
que fue propagando entrenosotros en los proyectos de 1960 y 1975, tendiendo a reemplazar a la
pena privativa delibertad corta.
LA
Conforme al Art. 5°, la multa tiene el carácter de pena principal, de modo que puede ser
impuesta como pena única (Ej: arts. 99, inc. 1; 103, segunda parte; 175; etc), o como se la ve la
mayoría del tiempo, en forma conjunta con la prisión (Ej: Art. 110). También aparece conminada
conjuntamente con la inhabilitación absoluta (Art. 270) y con la pena de inhabilitación especial
(Art. 242); y otras veces en forma alternativa con la pena privativa de libertad (Art. 94);
finalmente, en los casos de delitos con ánimo de lucro, aparece en combinación conjunta por
efecto del Art. 22 bis, cuya imposición queda a criterio del tribunal.
Las causas generales del Art. 40 son las circunstancias objetivas y subjetivas a que se refiere el
Art. 41.
OM
insuficiente, debe proporcionarse en la mayor medida posible a la situación económica del
penado: a mejor situación, mayor monto de multa, y a peor situación, menor monto de ella,
teniendo en cuenta siempre el esfuerzo económico que su satisfacción le demandaría al
condenado.
La situación económica no atiende solo al capital y entradas del condenado, sino también a todo
.C
lo que, como sus obligaciones pecuniarias, su estado civil, cargas de familia, profesión, oficio o
empleo, edad y estado de salud, concurren para determinar las mayores o menores posibilidades
DD
económicas de la persona.
pago constituye una vía indirecta para reintroducir lo que se intenta evitar (es decir, la pena
privativa de libertad).
No obstante, antes de proceder al encierro, en caso de incumplimiento del pago, el Art. 21, 2°
FI
b) Cuando no fuese posible, puede sustituir esta clase de pena por trabajo libre, siempre que
se presente ocasión para ello. Esta alternativa, sin embargo, casi no se usa en Argentina,
ni en Suiza, que es el país del cual proviene la medida. Se trata de que el penado amortice
su deuda mediante su trabajo personal en una entidad de bien público, en la forma en que
está indicada en el inc. 8 del Art. 27 bis, como pena accesoria a la libertad condicional o
probation. Como se trataría de una pena accesoria, el tribunal no puede imponerla contra
la voluntad del condenado, ni puede imponérsela en forma que los horarios de trabajo
coincidan con sus tareas habituales.
Cuando la voluntad reprochable del penado diese lugar a que la multa se convierta en pena
privativa de libertad:
OM
Pago y conversión de la multa.
multa.
La multa, debe pagarse en la actualidad en pesos (Ley 24.286). El pago debe efectuarse en el
término que fije la sentencia. A veces la ley procesal establece el pago en papel sellado y
determina el término que debe fijar la sentencia para hacerlo efectivo (Ej: CPP de Córdoba y CPP
de la Nación).
.C
Si el reo no paga la multa en término, antes de transformar la multa en prisión, el tribunal
DD
procurará su satisfacción haciéndola efectiva sobre los bienes, sueldos y otras entradas del
condenado, salvo el derecho de éste a solicitar y la facultad del tribunal:
conversión de la multa en prisión, sino que previamente el tribunal deberá procurar el pago de
aquella mediante la ejecución ya mencionada y, si esta no da resultado o lo da solo parcial, el
tribunal debe convertir toda la multa o su saldo en prisión, computando un día de ésta pena por
La prisión aplicable no podrá exceder de año y medio, cualquiera sea el monto de la multa
impaga.
La conversión no es irreversible, sino que el reo quedará en libertad cualquier tiempo que
satisficiere la multa, descontándose del importe de ésta, de acuerdo con las reglas establecidas
para el cómputo de la prisión preventiva, la parte proporcional al tiempo de detención que aquel
hubiere sufrido.
Concepto.
Concepto. (Núñez - Soler)
Soler)
“Las inhabilitaciones son incapacidades referidas a esferas determinadas de derechos. En ningún
caso la inhabilitación importa que el sujeto quede despojado de todo derecho; la muerte civil es
una institución relegada a la historia.
historia.” (Soler)
La pena de inhabilitación es una pena principal que, de acuerdo al artículo 5° del Código Penal,
ocupa el último lugar en el orden de gravedad relativa de las penas. La inhabilitación puede ser
una pena principal, o accesoria (inherente de la pena principal), dependiendo de lo que la ley
OM
disponga.
En su especie más grave, que es la absoluta, la inhabilitación es solo una reminiscencia de las
.C
gravísimas penas que en la antigüedad producían una “capitisdiminutio” tan grave que reducía al
afectado a la condición de un verdadero muerto civil (capitis diminutio máxima). Ejemplo de este
tipo de penas vendría a ser la antigua privación de ciudadanía de los romanos.
DD
Naturaleza.(Núñez)
Hoy existe una tendencia de darle a la inhabilitación el carácter de una medida de seguridad. Sin
LA
La inhabilitación no es una pena que, como la privativa de libertad, busque la reforma del
delincuente, mediante su tratamiento. Sus valores esenciales son la intimidación y la seguridad
para los terceros. Lo primero por la pérdida de bienes que involucra, y lo segundo, por las
abstenciones que importa.
Clases.
Clases.
1. Según su extensión.
extensión Puede ser:
Absoluta;
Especial.
Zaffaroni comenta que tanto la inhabilitación absoluta como la especial provienen del código de
Tejedor, que las abarcaba dentro de un conjunto más vasto, bajo el título de “penas privativas del
honor y humillantes”.
humillantes” A lo largo de los años se ha querido diluir este origen con diversas
modificaciones en la legislación, quedándonos hoy, los arts. 19 y 20
20 como regulación de estas
dos clases de inhabilitación.
OM
.C
DD
LA
FI
La llamada inhabilitación absoluta está prevista en el Art. 19 CP y tiene una extensión limitada, ya
que, de no existir esta limitación, resultaría inconstitucional por producir la muerte civil del
condenado, inadmisible en el derecho contemporáneo.
No se trata más que de la privación de un número limitado de derechos que están expresamente
previstos en la ley. No es una pena que se diferencie solo “cuantitativamente” de la inhabilitación
especial: la inhabilitación absoluta se aplica porque la naturaleza de la conducta hace
incompatible con ella el ejercicio de los derechos que se priva.
OM
Según los incisos del Art. 19, la inhabilitación absoluta consiste en:
• Inc. 1: La privación del empleo o cargo público que ejercía el penado aunque provenga de
elección popular. Como la pena surte el efecto de privar de los derechos desde que la
condenación queda firme, en ese caso la inhabilitación importará la pérdida del empleo o
.C
cargo público que el autor haya adquirido con anterioridad a la sentencia, aunque lo
hubiera adquirido con posterioridad a cometer el delito.
• Inc. 2: La privación del derecho electoral. La privación de este derecho solo puede alcanzar
DD
a los condenados por sentencia firme, tal como lo dispone el Art. 75 inc. 22 constitucional
(Art. 23,2 de la CADH), de modo que toda norma que interfiera sobre el derecho electoral
de una persona no condenada es inconstitucional, sin que puedan oponerse como
argumento válido dificultades de orden administrativo, como los que pueden surgir de la
LA
(cargo obtenido por elección popular, que tiene lugar en las democracias representativas),
además de perder los que había adquirido.
• Inc. 4: La suspensión del goce de toda jubilación, pensión o retiro, civil o militar, cuyo
importe será percibido por los parientes que tengan derecho a pensión. El tribunal podrá
disponer, por razones de carácter asistencial,
asistencial, que la víctima o los deudos que estaban a su
cargo concurran hasta la mitad de dicho importe, o que lo perciban en su totalidad,
cuando el penado no tuviere pariente con derecho a pensión, en ambos casos hasta
integrar el monto de las indemnizaciones fijadas
fijadas. Para Zaffaroni, este inciso del Art. 19
resulta inconstitucional por su carácter confiscatorio y por la trascendencia de la pena a
terceros. Las críticas a esta previsión provienen de lejos, pues se consideró que las
jubilaciones y pensiones constituían una propiedad que debía respetarse y su afectación,
con motivo de una inhabilitación, constituye lisa y llanamente una confiscación prohibida.
OM
de aportes al sistema privado, esta medida seguirá siendo inconstitucional, pues se basa
en el enriquecimiento del Estado a costas del penado, por medio de una confiscación.
Aun así, nada obsta que las pensiones o jubilaciones puedan ser afectadas a la reparación
civil de la víctima o de los deudos que estaban a su cargo.
.C
Inhabilitación absoluta: principal o accesoria.
accesoria.
La inhabilitación absoluta puede ser impuesta como pena principal o accesoria.
DD
La inhabilitación absoluta se aplica como pena accesoria en el supuesto del Art. 12, en que
acompaña a la pena privativa de libertad mayor a tres años. La primera parte del Art. 12
establece que la pena privativa de libertad por más de tres años lleva como inherente la
inhabilitación absoluta, por el tiempo de la condena, la que podrá durar hasta tres años más si
LA
así lo resuelve el tribunal, de acuerdo con la índole del delito. Las pensiones y jubilaciones
tampoco pueden ser aplicadas por la previsión del Art. 12.
Conforme a la ley, el criterio para que el tribunal pueda prolongar la inhabilitación no es el del
FI
Art. 41, sino la índole del delito, lo que significa que la prolongación estará autorizada sólo
cuando el goce de esos derechos sea incompatible con la naturaleza del delito. Tal sería el
supuesto, por ejemplo, de una condena por delito cometido en el ejercicio de una función
La inhabilitación accesoria del Art. 12 cesa cuando se agota la pena impuesta y, en caso de
libertad condicional, tampoco se alteran los principios generales, puesto que la pena accesoria
sigue la suerte de la principal cuando ésta termina de cumplirse en libertad condicional.
Por otro lado, como dice el Art. 16: si transcurren los plazos del Art. 13 sin que se revoque la
libertad condicional, la pena quedará extinguida, lo mismo que la inhabilitación absoluta del Art.
12.
La inhabilitación absoluta es una pena principal siempre que se aplica fuera del supuesto reglado
por el Art. 12 del CP, sea que su aplicación tenga lugar como pena única o como pena conjunta.
Cabe advertir que no debe confundirse la accesoriedad con la aplicación conjunta, que no le
quita en nada su carácter de pena independiente.
OM
Como pena principal la inhabilitación absoluta puede ser temporal (Como pena única, por Ej: en
los Arts. 273 y 274; y como pena conjunta, por Ej: en los Arts. 256 y 265) o perpetua (como pena
conjunta, por Ej: en los Arts. 241 o 261).
• especial (Zaffaroni)
Inhabilitación especial.
.C
La inhabilitación especial esta reglada en el Art. 20 y tiene por efecto: la privación del empleo,
cargo, profesión o derecho sobre que recayere y la incapacidad para obtener otro del mismo
DD
género durante la condena. El mismo artículo agrega que la inhabilitación especial para derechos
políticos producirá la incapacidad de ejercer durante la condena aquellos derechos políticos
sobre los cuales recayere.
priva, aun cuando se trate de una actividad reglamentada. Esto quiere decir, que la
inhabilitación especial puede, no solo ser suspensiva, sino también impeditiva.
- La duración de la pena es la que se establece en cada caso, pero el plazo se cuenta desde
el momento de la condena. La inhabilitación especial es, por regla, temporal, y
FI
excepcionalmente perpetúa.
La inhabilitación especial siempre se impone como pena principal, pudiendo ser temporal o
perpetua.
La inhabilitación especial se distingue de la absoluta porque se limita a los derechos que guardan
una particular relación con el delito cometido; en este sentido tiene un mayor grado de
imprecisión que la inhabilitación absoluta en cuanto a su determinación legal; de allí que para la
imposición de pena del Art. 19, basta en general con la identificación legal, en tanto que la
aplicación de la inhabilitación especial requiere una determinación judicial precisa; por ende, en
2. Según su duración.
duración Puede ser:
Temporal.
OM
Perpetua.
Esto es, según la duración. Esta clasificación se cruza con la anterior (clasificación según la
extensión de la inhabilitación), y da a luz la inhabilitación absoluta perpetua, absoluta temporal,
especial perpetua y especial temporal. Ejemplos de perpetuidad: arts. 174, 214, 256, 261, 265,
.C
268, etc.
Siempre hay que tener en cuenta que:“Para todos los efectos, en los plazos de inhabilitación no
DD
se computará el tiempo que el inhabilitado haya estado prófugo, internado o privado de su
libertad” (art. 20 ter, párr. 3), salvo que se trate de la prisión preventiva, ya que frente a la regla
general del Art. 20 ter. CP, subsiste la regla especial para el cómputo de la prisión preventiva del
Art. 24 CP, cuya vigencia no puede ser anulada.
LA
OM
necesarias para imponer la inhabilitación especial expresamente prevista para el delito
cometido, así como, en este caso, no es necesario que la profesión o la actividad en cuyo
ejercicio se cometió el delito esté reglamentada por la autoridad.
La incompetencia es la falta de saber o de aptitud, cualquiera que sea su causa, para ejercer el
.C
empleo o cargo, o para desempeñar la profesión o actividad sobre que recayere. El abuso en su
ejercicio o desempeño contrarios a los fines de la ley o que excede los límites impuestos por la
buena fe, la moral o las buenas costumbres.
DD
La inhabilitación especial es, por regla, temporal, y excepcionalmente perpetúa.
Rehabilitación.
Rehabilitación.
De acuerdo con el texto originario del Código Penal, la condena a inhabilitación perpetua no
LA
tenía fin. Los proyectos de PECO y de 1960, admitieron la rehabilitación para los inhabilitados
perpetua o temporalmente, y la Ley 17.567 la incorporó al Código Penal (art. 20 ter),
manteniéndola la Ley 23.077.
FI
la condena sufrida, ni la reposición del inhabilitado en el cargo público, tutela o cúratela objeto
de la inhabilitación (art. 20 ter, inc. 3). No se trata, por consiguiente, de una rehabilitación
general respecto de cualquier condenación, sino únicamente de la relativa a la pena de
inhabilitación.
La rehabilitación procede:
OM
Si la mitad de la pena de inhabilitación supera los diez años, el límite para este supuesto es
lógico que no supere al previsto para la pena más grave, es decir, la inhabilitación absoluta
perpetua.
.C
temporal o de cinco años si la inhabilitación es perpetúa.
En esos plazos no se computa el tiempo que el inhabilitado estuvo prófugo, internado o privado
DD
de su libertad (art. 20 ter, Inc. 4). Pero sí se cuentan los períodos de libertad o condenación
condicionales. La regla no rige para la inhabilitación accesoria del artículo 12.
El comportamiento correcto implica el gobierno de las propias acciones sin incurrir en delitos o
excesos u omisiones de otra índole, indicativos de desarreglo o dejadez material o moral.
LA
Los daños están integrados por los conceptos señalados por los tres primeros incisos del artículo
FI
29.
cargas que sobre él pesan. Con arreglo a aquélla y a éstas, para obtener la rehabilitación será
exigible la efectividad de la reparación total o parcial, o bastará que por el todo o por parte de
ella el juez proceda como lo indica el inciso 4° del artículo 29.
inhabilitación..
Improcedencia de la suspensión condicional de la inhabilitación
La condenación condicional o condena de ejecución condicional es “una condena que el juez
pronuncia dejando en suspenso su ejecución bajo la condición de que el condenado —durante el
lapso fijado por la ley— no vuelva a cometer nuevos delitos y cumpla otras condiciones que se le
impongan” (v. XVIII-2). Este instituto se estudiará en la siguiente Unidad, pero con lo dicho basta
OM
para entender lo que dispone el Código Penal en su art. 26, párr. 3: “No procederá la
condenación condicional respecto de las penas de multa e inhabilitación”.
“No tiene sentido —dice FontánBalestra— que el autor culpable de un delito puede seguir
creando el riesgo que resulta de su abuso, imprudencia o impericia como si no hubiera
delinquido”.
.C
DD
E) Reparación de perjuicios.
perjuicios.(Pizarro y Vallespinos)
Un mismo hecho puede ser un delito penal y a la vez causar un daño. Aquí entrará en juego la
faz punitiva del Estado para aplicar la ley penal y castigar al culpable, pero también la víctima del
delito tiene derecho a reclamar por los daños sufridos conforme a las normas del Código Civil.
LA
Y aquí es donde surgen los problemas entre la acción penal a cargo del estado (Ministerio
Público: fiscales) y la acción civil que ejerce la víctima para reclamar daños.
FI
La acción civil y la acción penal resultantes del mismo hecho pueden ser ejercidas
independientemente. En los casos en que el hecho dañoso configure al mismo tiempo un delito
del derecho criminal, la acción civil puede interponerse ante los jueces penales, conforme a las
OM
juicio criminal, con excepción de los casos siguientes:
1. Si hubiere fallecido el acusado antes de ser juzgada la acción criminal, en cuyo caso la
acción civil puede ser intentada o continuada contra los respectivos herederos;
2. En caso de ausencia del acusado, en que la acción criminal no puede ser intentada o
.C
continuada.”
esperar
Nulidad de la sentencia civil que es dictada sin esp erar la sentencia penal.
penal Cualquier
sentencia dictada contrariando esta norma será NULA, de NULIDAD ABSOLUTA.
En estos supuestos el juez civil puede dictar sentencia no obstante que el juez penal no haya
fallado.
ARTÍCULO 76BIS DEL CÓDIGO PENAL: “El imputado de un delito de acción pública
reprimido con pena de reclusión o prisión cuyo máximo no exceda de tres años, podrá
solicitar la suspensión del juicio a prueba.
En casos de concurso de delitos, el imputado también podrá solicitar la suspensión del
juicio a prueba si el máximo de la pena de reclusión o prisión aplicable no excediese de
OM
tres años.
Al presentar la solicitud, el imputado deberá ofrecer hacerse cargo de la reparación del
daño en la medida de lo posible, sin que ello implique confesión ni reconocimiento de la
responsabilidad civil correspondiente. El juez decidirá sobre la razonabilidad del
.C
ofrecimiento en resolución fundada. La parte damnificada podrá aceptar o no la reparación
ofrecida, y en este último caso, si la realización del juicio se suspendiere, tendrá habilitada
la acción civil correspondiente.
DD
Si las circunstancias del caso permitieran dejar en suspenso el cumplimiento de la
condena aplicable, y hubiese consentimiento del fiscal, el Tribunal podrá suspender la
realización del juicio.
Si el delito o alguno de los delitos que integran el concurso estuviera reprimido con pena
LA
ARTICULO 76 ter.DEL PENAL “El tiempo de la suspensión del juicio será fijado por
ter DEL CÓDIGO PENAL:
el Tribunal entre uno y tres años, según la gravedad del delito. El Tribunal establecerá las
reglas de conducta que deberá cumplir el imputado, conforme las previsiones del artículo
27 bis.
Durante ese tiempo se suspenderá la prescripción de la acción penal.
OM
La suspensión de un juicio a prueba podrá ser concedida por segunda vez si el nuevo
delito ha sido cometido después de haber transcurrido ocho años a partir de la fecha de
expiración del plazo por el cual hubiera sido suspendido el juicio en el proceso anterior.
No se admitirá una nueva suspensión de juicio respecto de quien hubiese incumplido las
.C
reglas impuestas en una suspensión anterior.”
Por último, existe una excepción más, que no surge ni del Código Penal ni del Código Civil, sino
de la jurisprudencia de nuestra Corte Suprema de Justicia. Se trata de la demora injustificada. La
Corte Federal trajo a coalición dicha excepción en el caso “ATAKA” y, más tarde, ratificó su
FI
Kemelmajer de Carlucci enseña que el Art. 1.101 del Código Civil, debe interpretarse
“En la nueva era constitucional que principia con la sanción en el año 1994 de la reforma de la
magna Ley, se estatuyó la incorporación de los Tratados Internacionales a la jerarquía
constitucional (art. 75 inc. 22 C.N.), y con ello, la elevación a la máxima jerarquía normativa del
principio de la razonabilidad de la duración de los procesos judiciales. En este sentido, el art. 8
de la “Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica), regula
que “...toda persona tiene derecho a ser oída, con las debidas garantías y dentro de un plazo
razonable por un juez o tribunal competente, independiente e imparcial, establecido con
anterioridad por la ley, en la sustanciación de cualquier acusación penal formulada contra ella, o
OM
para la determinación de sus derechos y obligaciones de orden Civil, Laboral, Fiscal o de
cualquier otro carácter...” Como se puede colegir, la norma que establece la razonabilidad del
plazo para el dictado de la sentencia civil tiene mayor jerarquía que la contenida en el Art. 1.101
del Código Civil, lo cual implica reconocer que la tesis judicial que declara la inoperancia de la
prejudicialidad penal cuando la misma se torna en un obstáculo que no pudo ser removido en un
plazo prudente tiene fundamento en la ley y no es una mera especulación doctrinaria. Por el
.C
contrario, este criterio formula la aplicación lógica racional de las distintas normas que
conforman el plexo nacional, las cuales aspiran en la actualidad que el dictado de las sentencias
se lleven a cabo en un tiempo socialmente prudente. ”
DD
En igual sentido en el VII Congreso Internacional de Daños, Buenos Aires, octubre 2002, por
unanimidad se aprobaron las siguientes recomendaciones, de lege lata, por unanimidad:
“1.- El artículo 1101 del Código Civil que consagra el principio de la prejudicialidad penal no es
LA
Sólo podría discutirse el daño resarcible (existencia, monto) y el nexo causal, dentro del cual,
eventualmente, podrá incidir parcialmente la propia culpa concurrente de la víctima, y la
participación del civilmente responsable.
OM
Sentencia Penal Absolutoria:
Absolutoria: Art. 1.103del
1.103 Código Civil.
En general el “hecho
• .C
hecho principal”:
principal”
DD
Que el hecho no existió;
• Que el imputado no fue su autor;
• Que el hecho no encuadra en una figura penal ;
• Que el hecho no es antijurídico porque existió una causal de justificación.
LA
Si se puede discutir sobre la culpa del demandado (absuelto en sede penal) porque la culpa civil
se puede apreciar de manera diferente a la penal.
La culpa civil "...se aprecia menos rigurosamente que la culpa penal para no dejar sin
FI
resarcimiento a la víctima del daño injusto", siendo que "...puede no haber culpa para castigar
pero sí para imponer la debida reparación del daño". (Bustamante Alsina).
Principio general.
general
CC “Con excepción de los dos casos anteriores, o de otros que sean exceptuados
Art. 1.105 CC.
expresamente, la sentencia del juicio civil sobre el hecho no influirá en el juicio criminal, ni
impedirá ninguna acción criminal posterior, intentada sobre el mismo hecho, o sobre otro que
con él tenga relación.”
Actualmente, sólo existiría prejudicialidad en el supuesto de” validez o nulidad del matrimonio en
OM
el caso de delito de bigamia”, porque el resto de delitos, como el adulterio y la calificación de
conducta en la quiebra han sido derogados.
.C
DD
LA
FI
OM
Contenido de la reparación:
reparación:
El reintegro de la cosa material obtenida por el hecho y -más genéricamente- el restablecimiento
al estado de cosas previo al delito, puede ser dispuesto sin necesidad de un reclamo expreso del
.C
interesado; sin embargo, es indiscutible que este último puede ejercitar, dentro del proceso
penal, la acción civil tendiente a obtenerlo y/o a lograr el resarcimiento del daño material y -
en su caso- moral causados por el delito.
DD
Al respecto, señala Creus, que aquíno se establece un "orden de reparación", sino que cada inciso
se refiere a distintas especies de delitos: el inc. l°, a los delitos en que la restitución al estado
anterior es posible (p. ej., delitos contra la propiedad) y el inc. 2°, a los delitos en que esa
restitución es imposible (p. ej., un delito contra la vida); en el primer caso sí se determina un
LA
más general: así, si el delito consistió en falsificar una escritura, dictar una sentencia prevaricante
o contraer un matrimonio bigámico, la condena respectiva debería disponer las rectificaciones
correspondientes, pues "la obra creada por el delito debe ser desmantelada por el derecho".
Por otra parte, aunque la restitución puede ser demandada por el interesado mediante una acción
civil, ello no impide que el tribunal penal la decida aun en casos en que dicha acción no ha sido
ejercitada, ya que se trata de una medida que procede de oficio.
OM
4. El pago de la multa.”
Orden de preferencia:
preferencia:
.C
El presente artículo establece el orden que hay que seguir en caso de insolvencia total o parcial
del condenado. Es decir que, si los bienes del condenado no son suficientes para afrontar todos
los rubros que surgen de la condena, debe procurarse su satisfacción respetando el criterio de
DD
prelación aquí estipulado.
4). Sin embargo, en virtud de que este orden de preferencia se establece sobre el patrimonio y
no sobre la persona, es preciso evitar que traiga como consecuencia la conversión de la multa en
prisión; si ello se presenta como posibilidad, el orden deberá invertirse atendiendo, en primer
lugar, a la pena de multa.
FI
Los gastos del juicio (inc. 2) son los gastos ocasionados al titular de la acción civil por la
necesidad de reclamar en la justicia su pretensión. Se requiere que sean reclamados por quien
ejerce la acción civil.
En cuanto al decomiso del producto o provecho del delito (inc. 3) corresponde remitirse a los
comentarios realizados al anotar el art. 23.
“Art. 31. - La obligación de reparar el daño es solidaria entre todos los responsables del
delito.”
Cuando la ley habla de responsables del delito se refiere a todas las personas que hayan sido
condenadas como autores, cómplices o instigadores, más no a quienes simplemente han
participado, por título lucrativo, de los efectos de aquél, que responden únicamente (art. 32 Cód.
OM
Penal) hasta la cuantía en que hubiesen participado. Se encuentra discutido el caso de los
encubridores, ya que existe jurisprudencia que los ha considerado abarcados por la solidaridad
aquí prevista, pero también la hay en sentido contrario; incluso, se ha señalado que la solución
no puede ser idéntica para cualquier caso de encubrimiento.
.C
Conforme a lo dispuesto, el damnificado tiene el derecho de demandar la totalidad del daño
contra uno o todos los responsables. El que paga la totalidad no puede repetir del codeudor, ya
que el art. 1082 del Cód. Civil veda dicha posibilidad.
DD
La regla versa sobre los daños exclusivamente y, en consecuencia, no comprende las costas del
juicio.
LA
“Art. 32. - El que por título lucrativo participare de los efectos de un delito, estará
obligado a la reparación hasta la cuantía en que hubiere participado.”
FI
parte de la doctrina opina que esto no sería así, pues la norma no se refiere a los responsables
del delito, sino a quienes, no siendo responsables de él, han recibido "beneficios originados en el
hecho o por el hecho".
Esto, en virtud de que debe entenderse que "título lucrativo" quiere significar "título gratuito", es
decir, el negocio en que una de las partes adquiere algo sin otorgar contraprestación alguna -lo
contrario del negocio oneroso-. (Ej: quien recibe el objeto robado como donativo o como
regalo, sin tener noticias del robo).
En este sentido, se ha señalado que sólo ciertos encubridores con responsabilidad penal propia
por el delito de encubrimiento, que han recibido efectos del delito gratuitamente, quedarían
comprendidos en la norma. Aquí la obligación no es solidaria sino que la responsabilidad sólo se
extiende hasta la cuantía en que hubiesen participado.
“Art. 33. - En caso de insolvencia total o parcial, se observarán las reglas siguientes:
OM
1. Tratándose de condenados a reclusión o prisión, la reparación se hará en la forma
determinada en el Art. 11.
.C
DD
Insolvencia del condenado:
condenado:
En este artículo se establece el procedimiento a seguir en caso de insolvencia total o parcial del
condenado, variando el sistema según esté o no cumpliendo pena privativa de libertad.
pena privativa de libertad "la reparación se hará en la forma determinada por el art. 11”.
Sin embargo, hay que señalar que la parte del producto del trabajo que se asigne a la
reparación no podrá ser superior al diez por ciento, según lo dispuesto por el art. 121 de
FI