Gestión Pública en Salud

Eliana Virginia Muñoz Gamarra

Título: Escasos recursos de atención en salud mental en el Perú.

Desde antes de la situación pandémica, nuestro país viene presentando

grandes problemas de salud mental, hecho que se complicó aún más a
consecuencia de el factor emocional que trajo consigo el covi-19. Antes de la
pandemia, de cada 100 peruanos, 20 presentaban algún problema de salud
mental, entre los principales trastornos encontramos depresión, ansiedad y
adicciones a sustancias como alcohol y drogas, y de estos de cada 10
personas, tan solo 2 tenían acceso a atención estatal a un servicio
especializado.

Con la llegada del coronavirus, las cifras de presencia de trastornos se fueron

en subida abruptamente, debido al enorme impacto en los determinantes
sociales como la protección financiera, la seguridad alimentaria, deudas,
situación de los bienes, condición laboral y sobre todo de salud.

Cuando hablamos de salud mental nos referimos a un estado de bienestar en

el cual el individuo es consciente de sus propias habilidades y capacidades
para afrontar problemas, malestares emocionales, y desempeñarse
fructíferamente en la vida.

Pero, antes del covid 19 estas habilidades ya venían deterioradas en miles de

peruanos, y con la emergencia sanitaria y el encierro, los malestares
emocionales crecieron vertiginosamente, siendo ahora 7 de cada 10 personas
las que presentan un trastorno de salud mental que puede ser limitante en su
desarrollo personal.

Al evidenciarse este aumento, la situación de salud mental en nuestro país

entra en una condición de crisis, para los cuales se activaron algunos
protocolos como las brigadas de emergencia psicológica y la inclusión del
psicólogo dentro del equipo básico de emergencia en los hospitales y centros
de salud de las principales regiones.
Sin embargo, el problema radica en que el personal de salud mental en las
regiones, para atención dentro del servicio de salud del estado sigue siendo
escasa, ya que la crisis no solo abarca a las principales regiones del país, sino
también en las zonas más alejadas de la costa, sierra y selva. A pesar de haber
aumentado la cantidad de plazas de trabajo para psicólogos en las regiones,
sigue siendo necesario la contratación de más personal que pueda dar abasto
para las necesidades de las regiones, y así también asignar mayor cantidad de
recursos y presupuestos para hacer llegar la salud mental a la mayor cantidad
de comunidades posibles.

Desde mi experiencia laborando en el sector público (serums e internado), se

denotan muchas deficiencias en cuando a los recursos asignados, y la
distribución del presupuesto para los programas de salud mental. Además
existen dos grandes factores dentro de este ámbito que encrudecen la
situación, la primera es la poca cantidad de plazas laborales que se abren para
los puestos de salud, generalmente están designados a hospitales mayores o
centros de salud, pero para las postas o puestos de salud de menor rango es
muy difícil encontrar un profesional de salud mental de manera permanente,
estos generalmente solo llegan a realizar visitas mensuales pero pertenecen a
una jurisdicción más grande y alejada, por lo que se deja ver que existe
necesidad de abrir más puestos de trabajo para que la salud mental llegue para
todos.

Por otro lado, es de suma importancia que estos puestos brinden mayor
estabilidad laboral al profesional que lo adjudica, ya que también eso
beneficiaria a la población asegurando la permanencia de un profesional
durante una mayor cantidad de tiempo, a diferencia de como se mantiene
actualmente que es de 3 meses de contratación. Esto viene de la mano, con
que los puestos para psicólogos son escasos, y muchos de ellos ocupados por
profesionales nombrados.

Frente a esto, reitero es necesario extender la contratación de profesionales,

con mayor estabilidad y normativizar los nombramientos, para que se maneje
una equidad y brindar oportunidades a las nuevas generaciones de
profesionales que ingresan en el campo laboral.
Para comentar, entre la utilización de los puestos y recursos considero
necesario implementar mas centros de salud comunitarios con internamiento
para problemáticas graves en salud mental que lo requieren y que estos
puedan encontrarse descentralizados, ya que existe una gran dominancia (por
factores culturales, genéticos, etc), de problemáticas de violencia, consumo de
alcohol o trastornos de la conducta alimentaria, en zonas donde no existe un
centro de salud que brinde el servicio de internamiento. La mayoría de estos se
encuentran en la capital o solo se puede acceder a ellos de manera privado,
dejando de lado a las personas que no cuentan con los recursos necesarios
pero que requieren acceder a ese servicio. Además, es también de suma
importancia implementar los centros de salud con los materiales necesarios
para el trabajo psicológico como los tests y elementos utilizados y debidamente
actualizados.

Finalmente, manifiesto que es de gran relevancia implementar una política para

que los profesionales en salud mental también podamos pasar por chequeos
que corroboren nuestro estado emocional y la capacidad para el desempeño de
nuestras labores, puesto que nuestra condición emocional va a influenciar
enormemente en el tratamiento que brindemos a nuestros pacientes, siendo los
principales referentes de su recuperación.