LECCIÓN 2

Curso
Liderazgo y trabajo colaborativo

Módulo 4
Trabajo colaborativott

Lección 2
Equipos de alto rendimiento
 ¿Qué veremos en esta lección?
• Las características que hacen que un equipo sea de alto rendimiento.
• Los 9 roles de Belbin.

¿Qué hace que un equipo sea de alto rendimiento?

Seamos honestos, a muchos de nosotros no nos gusta trabajar en equipo. Para la mayoría, las
experiencias positivas de trabajo en equipo son, por decir lo menos, raras. Si es que hemos
sido parte de algún equipo extraordinario en el pasado, probablemente ahora lo extrañemos.
Las personas, por lo general, vamos y venimos entre buenas y malas experiencias de trabajo
en equipo, constantemente preguntándonos qué es “eso” que hace que un equipo funcione
y cómo podemos hacer para replicar la fórmula. Un elemento clave para hacer que el
funcionamiento de un equipo sea más predecible y eficiente es entender las características
que los equipos exitosos tienen en común.

El siguiente modelo muestra seis características esenciales para el buen desempeño, tanto
interno como externo, de un equipo de trabajo.

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 Propósito en común

Excelente comunicación Roles claros

Relaciones sólidas Liderazgo establecido

Procesos efectivos

Propósito en común

El ingrediente más importante para el éxito de un

equipo es una misión clara, común y atractiva. El poder
de un equipo fluye de cada uno de sus miembros
hacia el propósito. La tarea de cada equipo es lograr
un objetivo y a niveles excepcionales. Los equipos no
son fines en sí mismos, sino medios para lograr un
fin. Por lo tanto, un equipo de alto rendimiento estará
orientado hacia su propósito y evaluado en base a
sus resultados.

Roles claros

Los equipos de alto rendimiento se caracterizan por definir los roles de manera precisa.
Cada miembro del equipo tiene claro su rol y el de los demás. Los roles tienen que ver con
cómo diseñamos, dividimos y desplegamos el trabajo para el equipo. Aunque el concepto es
básico, para muchos equipos es desafiante implementarlo en la práctica. A menudo existe
la tendencia a llevar las definiciones de roles a extremos o a no llevarlas lo suficientemente
lejos. De cualquier manera, cuando se hace bien, los miembros del equipo descubren que
al encontrar el equilibrio sus esfuerzos colectivos son fundamentales para la sinergia y los
buenos resultados.

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 Liderazgo establecido

Los equipos de alto rendimiento necesitan

liderazgo claro y competente. Cuando
falta liderazgo, o no cumple con estas
características, los grupos se pierden.
Mientras que una misión en común es la
mayor contribución para la efectividad
de un equipo, puede que un liderazgo
inadecuado sea la mayor razón para que
un equipo no funcione. Los equipos son,
en el más verdadero sentido, voluntarios. Los voluntarios no son administrados, pero exigen
un liderazgo establecido capaz de motivar la iniciativa y creatividad necesarias para alcanzar
niveles excepcionales tanto a nivel personal como grupal.

Procesos efectivos

Los equipos y los procesos van de la mano. Es de esperar que, en cada uno de los procesos del
equipo, cada miembro tenga su rol claro en base a sus funciones, habilidades y conocimientos.
Los equipos de alto rendimiento identifican, mapean y conocen en su totalidad los procesos
clave. Además, están constantemente evaluando su efectividad.

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 Relaciones sólidas
Una de las impresiones más erróneas sobre los equipos y el trabajo en equipo es creer que para
trabajar y comunicarse efectivamente los miembros de un equipo deben ser camaradas. Esto
no es cierto. De hecho, la diversidad de habilidades, experiencia y conocimientos necesarias
para dividir tareas casi excluye la posibilidad de amistad, la cual se basa más en intereses en
común.

Hablando de diversidad, nos encontraremos con que mientras más diferente sea el equipo,
más inteligente será. Un equipo cuyos miembros miran el mundo desde diferentes puntos
de vista en cuanto a funciones, género, etnia, personalidad, experiencia y perspectiva tiene
grandes ventajes sobre otros grupos más homogéneos. Serán capaces de encontrar soluciones
de maneras más creativas al ser capaces de canalizar sus diferencias hacia una sinergia.

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 Excelente comunicación
Ya hablamos en la lección anterior de la
colaboración, y la comunicación es una parte
clave de ella. Una de los motivos principales
por los que las compañías forman equipos es
porque las organizaciones basadas en este
modelo son más receptivas y ascienden más
rápido. Un equipo, o la organización a la que
pertenece, no se puede mover más rápido de
lo que comunica. La comunicación rápida,
clara y oportuna es un sello de los equipos de
alto rendimiento. Los equipos eficientes son
expertos en comunicarse de forma directa,
donde queda muy poco lugar para malos
entendidos y confusión. Las ideas fluyen como agua. El equipo entiende que la comunicación
efectiva es fundamental para el pensamiento colectivo y encontrar la sinergia para solucionar
problemas. Como resultado, comunicar se vuelve un acto con un propósito determinado.

Los 9 roles de Belbin

Volvamos a los roles. El doctor Meredith Belbin identificó nueve estilos de comportamiento
diferentes (o contribuciones) que las personas muestran en el lugar de trabajo. A continuación,
identificaremos las características de cada uno.

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Cohesionador

Contribución. cooperador, perceptivo y diplomático. Escucha e impide los

enfrentamientos.
Debilidad permitida. puede ser indeciso en situaciones cruciales y puede tender a
evitar confrontaciones.
Advertencia. puede dudar a la hora de tomar decisiones poco populares.

Coordinador

Contribución. maduro, seguro de sí mismo, identifica el talento. Aclara las metas.

Delega eficazmente.
Debilidad permitida. se le puede percibir como manipulador y se puede descargar de
trabajo personal.
Advertencia. puede delegar en exceso, dejando para sí mismo poco trabajo que hacer.

Cerebro

Contribución. creativo, imaginativo, librepensador. Genera ideas y resuelve problemas

difíciles.
Debilidad permitida. creativo, imaginativo, librepensador. Genera ideas y resuelve
problemas difíciles.
Advertencia. puede ser despistado, abstraído u olvidadizo.

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Monitor evaluador

Contribución. serio, perspicaz y estratega. Percibe todas las opciones y juzga con
exactitud.
Debilidad permitida. en ocasiones carece de iniciativa y de habilidad para inspirar a
otros. Puede ser excesivamente crítico.
Advertencia. puede ser lento a la hora de tomar decisiones.

Especialista

Contribución. entregado, independiente, con intereses limitados. Aporta cualidades

y conocimientos específicos.
Debilidad permitida. puede contribuir sólo en áreas muy limitadas y explayarse con
tecnicismos.
Advertencia. puede saturarte con una gran cantidad de información.

Impulsor

Contribución. retador, dinámico, trabaja bien bajo presión. Tiene iniciativa y coraje
para superar obstáculos.
Debilidad permitida. puede ser propenso a provocar y en ocasiones puede ofender
los sentimientos de la gente.
Advertencia. Puede tornarse agresivo y malhumorado en su afán de conseguir que las
cosas se hagan.

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 Implementador

Contribución. práctico, de confianza, eficiente. Transforma las ideas en acciones y

organiza el trabajo que debe hacerse.
Debilidad permitida. puede ser inflexible en cierta medida y lento en responder a
nuevas posibilidades.
Advertencia. puede ser lento a la hora de renunciar a sus planes en favor de cambios
positivos.

Finalizador

Contribución. esmerado, concienzudo, ansioso. Busca los errores. Pule y perfecciona.

Debilidad permitida. puede tender a preocuparse excesivamente y ser reacio a
delegar.
Advertencia. puede ser acusado de llevar su perfeccionismo al extremo.

En resumen
Recordemos que el liderazgo también es un proceso de aprendizaje y retroalimentación.
Apliquemos las cosas que hemos visto en este curso, pero no olvidemos que somos personas
y, muchas veces, vamos a necesitar ayuda. Para eso lo mejor es contar con un equipo confiable,
honesto y empático. El primer paso es el del líder, pero el resto del camino lo hacemos en
equipo.