Traducido del inglés al español - www.onlinedoctranslator.

com

CAPÍTULO

23
Mejores Prácticas en Intervención

El excelente médico es un vehículo dedicado para fomentar los

cambios cerebrales y ayudar a las personas a compensar y
hacer frente a los desafíos crónicos. Como discutimos en el
contexto de las mejores prácticas en evaluación (Capítulo 17),
centrarse en las personas con las que estamos en un rol clínico
fortalecedor y afirmador es primordial para servir como ese
vehículo. En este capítulo, consideramos la sabiduría sobre las
mejores prácticas de intervención ofrecidas por los afasiólogos
clínicos durante muchas décadas. También revisamos los
medios para determinar los niveles de evidencia para los
métodos de intervención, las formas en que los excelentes
médicos integran y equilibran la evidencia de la literatura de
investigación con la evidencia de las personas a las que
servimos y la importancia de la traducción del conocimiento a
través de la ciencia de la implementación.
Después de leer y reflexionar sobre el contenido de
este capítulo, idealmente podrá responder, con sus
propias palabras, las siguientes preguntas:
1.¿Cuáles son las mejores prácticas en el tratamiento de los
trastornos neurogénicos del lenguaje?
2.¿Qué sabe el excelente afasiólogo clínico sobre
la práctica basada en la evidencia?
3.¿Dónde podemos encontrar información pertinente para
apoyar la práctica basada en la evidencia?
¿Cuáles son las mejores prácticas en el tratamiento?
de los trastornos neurogénicos del lenguaje?
Comencemos este capítulo con una lista de las mejores
prácticas para alcanzar la excelencia clínica en el tratamiento de
los trastornos neurogénicos del lenguaje. Todas las mejores
prácticas recomendadas para la evaluación en el Capítulo 17
también se aplican al tratamiento, aunque algunas de las que se
mencionan aquí tienen una naturaleza especial que es
importante considerar en el contexto del tratamiento. Por
supuesto, existen mejores prácticas adicionales que son
particulares del tratamiento en sí.
Adoptar la comunicación como un derecho humano
La capacidad de comunicarse es un derecho humano
fundamental. Abogue vigorosamente por las personas a las que
sirve. Asegúrese de revisar las estrategias de promoción para
impulsar el acceso a servicios y apoyos para personas con
trastornos neurogénicos de la comunicación en el Capítulo 14.
Reconocer la evaluación como un

4.¿Cómo integra el excelente clínico la práctica basada proceso de intervención continuo

en la evidencia con la evidencia basada en la
práctica?
5.¿Cómo pueden los excelentes médicos apoyar la traducción del
conocimiento a través de la implementación y la ciencia de
sistemas?
Señalamos en el Capítulo 17 que, aunque se espera que
documentemos que participamos en una sesión de
evaluación formal antes de iniciar el tratamiento,
debemos continuar haciendo y respondiendo preguntas.

343
344Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje
sobre las habilidades de comunicación de una persona en
particular durante todo el tiempo que se les atiende para
servicios profesionales. Cada sesión de tratamiento implica una
evaluación de algún tipo. Por ejemplo, ¿cuánto se ha retenido de
una interacción clínica a la siguiente? ¿Hay traspaso de progreso
de un área a otra? ¿Cómo está progresando esta persona hacia
sus metas? Constantemente aprendemos nueva información
sobre el contexto de vida de una persona que podría influir en
nuestras metas, el contenido y la ubicación de nuestras
sesiones, y quién podría estar incluido en cualquiera de
nuestras interacciones.
El seguimiento del progreso a lo largo de la intervención
encaja en el esquema de prueba de hipótesis de caso único similar al
proceso de investigación centrado en la evaluación que se ilustra en
el Capítulo 17. Con una persona individual, podemos aplicar un
enfoque específico para el cual hay apoyo empírico detallado en la
literatura basada en en casos individuales o colectivos. Luego, a
medida que evaluamos sus efectos con un individuo en particular,
podemos ajustar continuamente el proceso para que se adapte
mejor a las necesidades de ese individuo (Turkstra, 2010). Ylvisaker
(p. ej., en Ylvisaker et!al., 2002) se refirió a esto comoprueba de
hipótesis específicas del pacienteytoma de decisiones basada en
casos.
Estar centrado en la persona
La atención centrada en la persona se refleja en nuestra
demostración de que las personas a las que servimos son el
núcleo de nuestro propósito como profesionales clínicos (DiLollo
& Favreau, 2010; Hickey & Bourgeois, 2018; Hickey & Douglas,
2021; Kitwood, 1997; Kitwood & Bredin, 1994; Leach et al., 2010;
Lewin et al., 2001; Peri et!al., 2004; Worrall, 2006). En el centro
de la atención centrada en la persona se encuentra la inclusión
directa de la persona con un trastorno de la comunicación en las
decisiones sobre todos los aspectos de la evaluación, la
planificación del tratamiento y las alternativas de intervención y
el seguimiento después de la intervención directa (Hinckley et
al., 2014; Lund et al. al., 2001). Esto puede parecer obvio cuando
se considera en abstracto. Sin embargo, en nuestros entornos
clínicos y de investigación ocupados todos los días, tenemos
presiones financieras y de tiempo constantes. Tenemos muchas
demandas que no involucran el contacto directo con las
personas a las que servimos. Por lo tanto, el objetivo de la
atención centrada en la persona puede verse fácilmente
socavado (Rohde et al., 2012). No importa cuán estresados
estemos, quién nos observa o no, cuánta confianza nos puede
faltar. . . cuando nosotros
están en marcha como médicos, idealmente nos enfocamos principalmente en
aquellos a quienes servimos y no en nosotros mismos o en nuestro propio
desempeño.
Incluya miembros de la familia, cuidadores y
Otros cuyos roles son relevantes
La comunicación no suele ser una actividad que
realicemos solos. Se basa en la interacción y el
compromiso de los demás. Lograr el éxito
comunicativo con una persona que tiene un trastorno
de la comunicación depende no solo de las
habilidades y estrategias de la persona con el
trastorno, sino también de las habilidades y
estrategias de las personas con las que se comunica.
Incluya cuidadores y otras personas importantes
para mejorar y expandir la red de personas de apoyo en
el entorno de una persona y para garantizar la máxima
generalización del progreso para el uso diario en
entornos naturalistas. Los autores de varios estudios
han demostrado que la capacitación de las parejas en el
uso de estrategias de comunicación de apoyo mejora los
resultados del tratamiento a corto y largo plazo (ver
Simmons-Mackie et al., 2010). Exploramos más esta
noción en el Capítulo 24.
Tener un sentido claro de propósito y metas
Un principio clave de las estrategias de Covey (2013) para
“personas altamente efectivas” escomenzar con el fin en mente.
En el Capítulo 2, señalamos que es importante tener esto en
cuenta en términos de nuestro propio desarrollo como
excelentes médicos. Kagan y Simmons-Mackie (2007) declaran
elocuentemente que el concepto decomenzando con el final en
mentees fundamental para la planificación del tratamiento
centrado en los resultados. Es poco probable que alcancemos
una meta si no sabemos cuál es la meta, y mucho menos cómo
llegar allí. Como se señaló anteriormente y a lo largo de este
libro, nuestro objetivo final es ayudar a las personas con
trastornos neurogénicos del lenguaje a llevar una vida lo más
exitosa y satisfactoria posible. El camino hacia ese objetivo está
formado por las personas a las que servimos: sus fortalezas y
debilidades, sus sistemas de apoyo y su propio sentido de lo que
es "exitoso" y lo que es "satisfactorio". Como se mencionó en
nuestra discusión sobre las mejores prácticas de evaluación, los
excelentes médicos saben lo que

están haciendo con una persona y por qué en un momento
dado. Comienzan con el fin en mente. Si no conocemos las
propias metas personales de nuestros clientes, lo que define
el "fin" para ellos, entonces no podemos tener el final en
mente. Al menos no el extremo derecho.
Desafortunadamente, las historias de SLP no
preparados que demuestran su ignorancia de la literatura
sobre métodos de tratamiento no son infrecuentes. Para
algunos, parece que completar hojas de un libro de
ejercicios fotocopiadas de un libro de ejercicios de lenguaje
o hacer que una persona nombre los objetos representados
en un conjunto de tarjetas constituye un enfoque de
tratamiento. Las prácticas sin fundamentos teóricos sólidos
y evidencia de efectividad son poco éticas e indignas de las
habilidades y destrezas de un SLP calificado.
Directamente relacionado con tener un propósito y
objetivos claros está tener una base sólida que respalde
los métodos que usamos y las actividades en las que nos
involucramos a lo largo de la intervención. Como
discutimos a lo largo de este libro, los excelentes clínicos
generalmente no defienden un marco teórico sin
reconocer la validez o utilidad de otros. Conocen
múltiples enfoques y marcos, integran múltiples teorías,
evalúan críticamente los resultados de investigaciones
publicadas a la luz de lo que es más relevante para
personas específicas con trastornos del lenguaje y
permanecen abiertos a modificar perspectivas teóricas
basadas en nuevos aprendizajes.
Involucrar a socios de comunicación fuera del
círculo inmediato de amigos y familiares del cliente
En los casos en que no haya un número suficiente de personas
que realmente apoyen, busque formas de reclutar voluntarios
que puedan ser útiles. Los miembros de organizaciones de
servicio comunitario, los estudiantes de programas académicos
clínicos o preclínicos y los jubilados pueden convertirse en
maravillosos socios de comunicación para ayudar a apoyar la
comunicación social en general y la transferencia de objetivos
de comunicación específicos en particular.
Acepte las diferencias culturales y lingüísticas
El contenido y los objetivos del tratamiento deben tener en cuenta
los antecedentes únicos de cada individuo. Esto es esencial para
nuestro enfoque en la persona y en la participación en la vida.
23. Mejores Prácticas en Intervención 345
Fomente el autoentrenamiento
Ylvisaker, bien conocido por los enfoques centrados en la
persona que promueven la autorregulación emocional en los
sobrevivientes de TBI, prefirió la metáfora deautoentrenamiento
a autorregulaciónpara mejorar la relevancia de la noción para
los clientes. La mayoría de nosotros probablemente
preferiríamos ser entrenadoqueregulado(Ylvisaker, 2006).
Tengamos esto en cuenta cuando trabajemos con personas que
tienen problemas de funciones ejecutivas, falta de conciencia de
los déficits y necesidades de autosupervisión o autoseñales
mejoradas.
Considere el momento óptimo
Debemos hacer todo lo posible para programar las sesiones de
tratamiento para minimizar las influencias negativas del dolor,
la enfermedad, la fatiga, la distracción, etc. Además, está
surgiendo una importante investigación que indica que el
momento de la intervención en términos de etapas de
recuperación de un accidente cerebrovascular o una lesión
cerebral es de vital importancia. Discutimos esto con más detalle
en el Capítulo 24, bajo preguntas sobre los tiempos óptimos de
recuperación para iniciar el tratamiento, y sobre la intensidad y
duración del tratamiento.
Considere ubicaciones y condiciones óptimas
A menudo, el entorno ideal para el tratamiento cumple los
mismos criterios que los de las condiciones óptimas de
evaluación: bien iluminado, tranquilo, sin desorden ni exceso de
estimulación visual, e incluyendo o excluyendo a personas
específicas según corresponda. También es importante que
contextualicemos el tratamiento en entornos del mundo real
para mejorar la probabilidad de trasladar al máximo los
beneficios del tratamiento a los contextos de la vida cotidiana.
Asegúrese de salir de los contextos clínicos típicos. Cuando sea
posible y cuando sea apropiado, participe en visitas domiciliarias
y vaya a otros lugares donde la comunicación es fundamental
para la persona con la que está trabajando (por ejemplo, lugares
de trabajo, reuniones de organizaciones cívicas, centros
comerciales, restaurantes y entornos escolares, universitarios o
universitarios) . Discutiremos esto más adelante cuando
consideremos la "comunicación funcional" más adelante en este
capítulo.
346Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje
Centrarse en la comunicación funcional
El términofuncionalen la práctica clínica tiene múltiples
interpretaciones. En las décadas de 1980 y 1990, nuestro campo
vio una oleada de enfoques "funcionales" para el tratamiento de
los trastornos de la comunicación. Audrey Holland ha sido una
magnífica catalizadora de tales enfoques, a través de sus
primeros trabajos sobre la comunicación funcional per se
(Holland, 1982) y su trabajo más reciente desde entonces sobre
la calidad de vida en la afasia. Muchos otros unieron sus fuerzas
para enriquecer los enfoques sobre la mejora de la calidad de
vida a través de la intervención de la comunicación.
Lo que típicamente pretendían los autores de tales
enfoques era dejar de centrarse en constructos lingüísticos
específicos en intercambios clínicos descontextualizados y
orientar la intervención más hacia el uso del lenguaje en
situaciones comunicativas reales de formas que son
importantes para la persona tratada. Por ejemplo, algunos
enfoques de tratamiento temprano para ayudar a mejorar las
habilidades de nombrar (como el enfoque de la jerarquía de
indicaciones [Linebaugh & Lehner, 1977]), descritos en la
Sección VIII, nos hicieron centrarnos en trabajar a través de una
serie de indicaciones para ayudar a las personas a mejorar en la
denominación. objetos. Los autores de enfoques funcionales
hacia el mismo método nos alentaron a asegurarnos de que los
estímulos (palabras, objetos e imágenes) fueran muy relevantes
para cada individuo en términos de sus propias necesidades
diarias de búsqueda de palabras. También nos alentaron a
asegurarnos de que probamos para ver que las mejoras en la
búsqueda de palabras en el nivel de una sola palabra se
trasladaban a oraciones y conversaciones. Extendiendo esto
más allá, varios autores de enfoques funcionales aumentaron
nuestra conciencia colectiva de la necesidad de que los médicos
salgan de la sala de la clínica y se relacionen con situaciones del
mundo real con las personas a las que servimos para
asegurarse de que las ganancias de comunicación que vimos en
la clínica se transfirieran a interacciones del mundo real.
Los enfoques funcionales de las décadas de 1980 y 1990 se
convirtieron en modelos sociales para contextualizar el trabajo
con personas con trastornos neurogénicos de la comunicación
cerca del comienzo del siglo XXI. A medida que la Clasificación
Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud
(CIF) de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha cobrado
importancia, se nos ha hecho más conscientes de su relevancia
para trabajar con personas con trastornos neurogénicos de la
comunicación. En ese sentido, el términofuncionalahora se
aplica con frecuencia
a abarcar aspectos de la participación en la vida que pueden
mejorarse mediante mejores habilidades de comunicación.
Ejemplos (lejos de ser una lista exhaustiva) de pioneros en
esta área son los siguientes:
• Roberta Chapey, Judith Duchan, Roberta Elman,
Linda Garcia, Aura Kagan, Jon Lyon y Nina
Simmons Mackie, The LPAA Project Group,
quienes lanzaron el Enfoque de participación en la
vida para la afasia (p. ej., LPAA Project Group,
2000)
• Barbara Shadden, quien destacó el impacto de
los trastornos neurogénicos del lenguaje en los
cuidadores y los efectos de la afasia en la
identidad (p. ej., Shadden, 2005)
• Mark Ylvisaker, Jon Lyon, Susie Parr, Sally Byng, Sue
Gilpion, Judith Duchan y Carole Pound, quienes
enfatizaron la importancia de ayudar a los
sobrevivientes de accidentes cerebrovasculares y
lesiones cerebrales a enfrentar las consecuencias a
largo plazo de sus desafíos de comunicación (p. ej.,
Byng et al., 2000; Lyon, 1998; Ylvisaker, 1992)
• los múltiples autores de un maravilloso libro
editado sobre el apoyo a la comunicación para
personas con afasia (ver Simmons-Mackie & King,
2013)
• los múltiples autores de un fantástico libro editado sobre
enfoques de participación en la vida para personas con
trastornos neurogénicos de la comunicación (ver Holland
& Elman, 2021)
• Margaret Rogers, Nancy Alarcon y colegas, quienes
enfatizaron los medios prácticos para capacitar a los
cuidadores de personas con afasia en el uso de la
comunicación asistida (p. ej., Alarcon & Rogers,
2006)
• Travis Threats, quien promovió y encabezó una gran
cantidad de trabajo internacional destinado a
incorporar las necesidades de comunicación y los
servicios relacionados en ICF y otros programas y
proyectos relacionados con la OMS (p. ej., Threats,
2010a)
• Kerry Byrne y JB Orange (2005), quienes
promovieron principios para el uso de
construcciones y principios de ICF en la evaluación,
tratamiento y apoyo de personas con demencia.
• Aura Kagan, Nina Simmons-Mackie, Jack Damico
y colegas, quienes desarrollaron medios para
indexar los resultados de la vida real de

intervención de afasia y enfatizó la
importancia del análisis conversacional para
capturar muchos de estos (p. ej., Kagan et
al., 2008; Simmons-Mackie et al., 2007)
• David Beukelman y colegas, quienes
desarrollaron el Modelo de participación de
AAC (p. ej., Beukelman et al., 2007; Beukelman
& Mirenda, 2013)
• Michelle Bourgeois, Natalie Douglas y Ellen Hickey,
quienes han promovido enfoques de participación
en la vida centrados en la persona para personas
con demencia (Bourgeois & Hickey, 2009; Hickey &
Douglas, 2021)
• Los miembros fundadores de Aphasia Access, una
organización vibrante creada en 2014 para
promover los enfoques LPAA (http://www
. aphasiaaccess.org)
Mientras tanto, algunos afasiólogos se han opuesto a la
noción de que todas las cosasfuncional debe estar más allá del
nivel del análisis lingüístico y expresarse en términos de
participación en la vida. Por ejemplo, ¿qué sucede si alguien
tiene deficiencias limitadas en el procesamiento gramatical, lo
que dificulta el procesamiento de oraciones largas y complejas?
Las frases y oraciones compuestas gramaticalmente son
vehículos primarios a través de los cuales se expresa el
significado. Entonces, ¿no es la gramática, en sí misma,
funcional, en el sentido de que es útil y relevante para la
comunicación en el mundo real? La comprensión de oraciones
pasivas reversibles, el manejo de ambigüedades sintácticas, el
análisis sintáctico de cláusulas relativas y la interpretación de
referencias de pronombres son esenciales para el uso
competente del lenguaje en la vida diaria. Por lo tanto, solo
porque el enfoque de un enfoque de tratamiento en particular
puede apuntar al nivel de discapacidad, ese enfoque no debe
necesariamente considerarseno funcional. Siempre que un
método de tratamiento centrado en las deficiencias se exprese
en un marco más holístico que asegure la pertinencia en la vida
real y la permanencia de tal manera que se mejore la
participación en la vida de la persona individual, ciertamente
también se puede considerar funcional.
Involucrar a la persona de manera activa y
significativa en el establecimiento de metas
Si una persona puntúa mal en comprensión de
lectura pero bien en comprensión auditiva, esto no
23. Mejores Prácticas en Intervención 347
significa que trabajar en la comprensión lectora es
más importante para esa persona. Si una persona
tiene problemas para comprender y producir
estructuras de oraciones complejas pero siente
que trabajar en el procesamiento gramatical es
irrelevante para sus necesidades de comunicación,
es importante prestar atención a eso. Si está
interesado en trabajar con su cliente en su entorno
laboral con la esperanza de capacitar a sus
compañeros de trabajo para apoyar la
comunicación profesional y mantener el estado y
la productividad de la persona en el trabajo, tenga
en cuenta que están mucho más preocupados por
los problemas que están teniendo para conectarse
con sus hijos adolescentes. niños—entonces
cambie sus planes y siga sus preferencias. En
resumen, asegúrese de sintonizar con la persona y
sus propias percepciones,
En línea con este enfoque centrado en la persona es
Escala de consecución de objetivos (GAS). Introducido por
primera vez en el contexto de la evaluación de los resultados del
tratamiento de salud mental (Kiresuk & Sherman, 1968), GAS
implica que las personas en cualquier tipo de intervención de
rehabilitación seleccionen sus propios objetivos como parte de
la planificación de la intervención, comuniquen esos objetivos a
los miembros del equipo interdisciplinario y colaboren. a través
de los tipos de intervención para ayudar a las personas a
alcanzar sus metas. GAS se ha aplicado en muchas áreas de la
práctica clínica y diversos entornos de práctica, incluida la
afasiología (p. ej., Escher et al., 2018; Kucheria et al., 2020; van
Alphen, 2019).
Básicamente, así es como funciona.
Comprometerse con el cliente a través de entrevistas
motivacionales, considerar objetivos potenciales y cuáles
serían los resultados de cada uno. Haga que el cliente
elija uno o más objetivos y aclare el resultado
correspondiente para cada uno. ¿Qué resultado se
utilizará para indicar que se ha cumplido la meta? En una
escala de -2 a +2, considere que cumplir esa meta será
en 0, justo en el medio de la escala. Si la puntuación
alcanzada es mayor o igual a 0, esto indica una mejora
clínicamente significativa (Kiresuk et al., 1994).
Las ventajas de GAS incluyen lo siguiente:
• Los objetivos son inherentemente significativos para la persona
involucrada; Desempeñar un papel central en el proceso de
establecimiento de objetivos ayuda a las personas a participar más
activamente en el logro de los objetivos.
348Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje
• Se evitan los problemas de los efectos techo y
suelo asociados con muchas medidas
estandarizadas.
• La sensibilidad de la medición es mayor que para la
mayoría de las medidas estandarizadas,
especialmente porque no hay elementos irrelevantes.
• Las puntuaciones son adaptables a cualquier dominio
o nivel en la ICF (Schlosser, 2004; Turner-Stokes, 2009;
van Alphen, 2019).
Los desafíos en la aplicación de GAS incluyen los siguientes:
• Los médicos deben tener una formación sólida en el
establecimiento de objetivos y en la creación de alianzas
terapéuticas para una entrevista motivacional eficaz.
• Los procesos de establecimiento de objetivos varían
ampliamente entre los médicos y los contextos clínicos.
• Establecer objetivos al principio del proceso de rehabilitación
puede ser difícil cuando no está claro qué objetivos serán
realistas para una persona.
• Algunos clientes pueden carecer de la comprensión
adecuada del proceso y de la comprensión de las
deficiencias y las expectativas realistas asociadas.
Para indexar los logros de un grupo de personas, las
puntuaciones GAS se pueden convertir en puntuaciones t.
La validez y confiabilidad de los análisis entre individuos
dependen de la precisión y consistencia con la que se miden
los resultados para cada persona. Kucheria et al. (2020)
desarrollaron y probaron un proceso GAS electrónico para
ayudar y capacitar a los SLP en el uso de GAS durante las
entrevistas motivacionales. Krasny-Pacini et!al. (2016)
abogan por la aplicación de criterios de evaluación para
fortalecer la viabilidad del uso de GAS en prácticas de SLP
hospitalarias de investigación clínica. Tal trabajo es un buen
augurio para futuras investigaciones y direcciones para
mejorar el uso de GAS en el informe de resultados del
tratamiento.
Centrarse en el material relevante
Un enfoque en el uso de tareas y estímulos relevantes no es
solo un principio sólido en términos de marcos sociales para
la intervención. También tiene el mejor sentido en términos
de enfoques neuropsicológicos de intervención: El
tratamiento más relevante y personalmente destacado
son los focos, mayor es la activación de las redes neuronales
involucradas en el procesamiento de ese material (Kleim &
Jones, 2008; Raymer et al., 2006), y mayor es la probabilidad
de generalización al uso espontáneo.
Centrarse en las fortalezas
Por supuesto, a menudo es apropiado centrarse en los déficits cognitivo-lingüísticos de
un cliente. Después de todo, esas son las razones por las que probablemente nos hayan
remitido. Debemos documentar claramente los déficits para realizar evaluaciones
efectivas y justificar el trabajo con los clientes. Debemos analizar la naturaleza de las
deficiencias de una persona y sus efectos negativos sobre la participación en la vida a
medida que facilitamos la planificación del tratamiento. Reconocer los déficits
directamente con un sobreviviente de accidente cerebrovascular o lesión cerebral suele
ser esencial durante la evaluación y durante la intervención. Por ejemplo, durante el
tratamiento, podemos estar revisando los resultados de las pruebas que resaltan las
deficiencias cognitivas lingüísticas. Es posible que estemos rastreando la cantidad de
errores durante una tarea de tratamiento dada para monitorear el progreso. Es posible
que estemos señalando las debilidades como un medio para mejorar la autoconciencia
de una persona sobre la falla en la comunicación. Todo esto es típicamente apropiado.
Y mientras hacemos esas cosas, esa persona puede estar viendo a otros profesionales
(terapeutas físicos y ocupacionales, médicos, etc.) que también se están enfocando en
sus impedimentos en otras áreas. Tengamos en cuenta que tal enfoque en los déficits
requiere un abundante equilibrio de positividad. El excelente clínico es un motivador,
animador y animador. Celebrar los éxitos, por pequeños que sean, es esencial para
ayudar a una persona a persistir frente a los desafíos y mantenerse comprometida con
la recuperación. El excelente clínico es un motivador, animador y animador. Celebrar los
éxitos, por pequeños que sean, es esencial para ayudar a una persona a persistir frente
a los desafíos y mantenerse comprometida con la recuperación. El excelente clínico es
un motivador, animador y animador. Celebrar los éxitos, por pequeños que sean, es
esencial para ayudar a una persona a persistir frente a los desafíos y mantenerse
comprometida con la recuperación.
Sea un jugador de equipo interprofesional
Aprovechar la experiencia de nuestros colegas en medicina,
rehabilitación y otras disciplinas de la salud es esencial, al igual
que compartir estrategias de intervención complementarias,
educar a otros de manera constructiva sobre nuestro ámbito de
práctica y abogar por la atención a los problemas cognitivo-
lingüísticos que afectan la vida. desafíos que enfrentan las
personas a las que servimos. Si las reuniones periódicas de
equipo interprofesional, sinérgicas y centradas en la acción se
centraran en las personas a las que tratamos

no se llevan a cabo dentro de una agencia en la que
trabajamos, es importante que aboguemos por tales
reuniones, o las iniciemos nosotros mismos.
Integrar la práctica basada en la evidencia
Con evidencia basada en la práctica
Exploramos la importancia de esta integración, y cómo cada uno de
nosotros podría participar en ella, más adelante en este capítulo.
Combina el arte con la ciencia
Como se discutió en el Capítulo 2, la capacidad de equilibrar
el arte con la ciencia en el trabajo clínico es esencial para la
excelencia clínica. Dominar el conocimiento científico
importante en áreas disciplinarias clave que son pertinentes
a la afasiología, y ser capaz de recurrir a ese conocimiento
de manera aplicable, es vital. Al mismo tiempo, el excelente
médico utiliza un juicio agudo y sensible y se relaciona con
las personas de manera empática, reflexiva y creativa en el
arte de la práctica clínica.
Fomentar la comunicación favorable a la afasia
Las recomendaciones generales para un lenguaje adecuado
para la afasia, ya sea hablado o escrito, incluyen el uso de
estructuras de oraciones cortas y simples, respaldadas por
fotografías claras o pictografías que carecen de contenido
irrelevante. Teniendo en cuenta que algunas personas con
afasia y trastornos relacionados tienen una buena
comprensión lectora y/o del lenguaje oral, es importante no
simplificar demasiado el lenguaje para un individuo
determinado. Aún así, los materiales escritos, de audio y de
video destinados al uso general de las personas con afasia
deben diseñarse para facilitar la comprensión de las
personas con déficits de comprensión de moderados a
severos para aumentar la accesibilidad del contenido.
Las recomendaciones para el lenguaje oral incluyen el
uso de múltiples modalidades (habla, gestos, expresiones
faciales, lenguaje corporal, escritura con palabras clave
señaladas o subrayadas y apoyo fotográfico y pictográfico) y
repeticiones, expansiones y paráfrasis, según corresponda.
Algunos autores han recomendado evitar el “discurso
exagerado”. De hecho, el discurso claramente articulado
que excede la articulación
23. Mejores Prácticas en Intervención 349
Se ha demostrado que la precisión histórica del habla informal
cotidiana facilita la comprensión, especialmente en personas
con discapacidad auditiva. Aunque el habla clara a veces se
confunde con el lenguaje de los ancianos (ver Capítulo 19), los
dos son distintos; el habla clara facilita la comprensión, y el
lenguaje de los ancianos transmite discriminación por edad.
Hay dos constructos relacionados con la facilidad de
lectura que son relevantes para los medios potenciales de
optimizar la impresión: legibilidad y legibilidad.Legibilidad
se refiere a la facilidad o dificultad de identificar letras,
números o caracteres impresos individuales.Legibilidadse
refiere al grado de facilidad o dificultad para comprender un
texto escrito. Ambos influyen en el tiempo de lectura y la
eficiencia de lectura.
Las recomendaciones publicadas para
materiales impresos aptos para la afasia incluyen
el uso de amplios espacios en blanco y el énfasis
de las palabras clave mediante subrayado,
mayúsculas o negrita. Algunas recomendaciones
para la impresión adecuada para la afasia incluyen
una fuente "fácil de leer" (p. ej., Rose et al., 2009,
2010; Simmons-Mackie, 2013a). Se han hecho
recomendaciones para el uso de fuentes sans-
serif; sin embargo, tales recomendaciones aún no
se han corroborado con evidencia sólida
publicada. Incluso en personas sin trastornos
neurológicos, los hallazgos sobre la legibilidad y
legibilidad de la letra serif frente a la sans serif son
equívocos (Poole, 2012). Algunos argumentan que
el uso de marcas serif ayuda a la legibilidad
porque agregan redundancia a las señales
grafémicas, mientras que otros sugieren que la
letra en bloque es más legible.
También se han recomendado varios tamaños de
fuente mínimos. Por ejemplo, Simmons-Mackie (2013a)
sugiere una fuente mínima de 20 puntos, mientras que
otros sugieren un rango de 14 a 22 (Australian Aphasia
Association Inc., 2010; Brennan et al., 2005). Ciertamente, un
factor importante en este sentido es la agudeza visual y la
sensibilidad al contraste del lector (Connolly, 1998; Owsley &
Sloane, 1990). Se necesita más evidencia de la legibilidad
mejorada de cualquier estilo y tamaño de fuente en
particular para las personas con afasia y trastornos
relacionados, y su influencia potencial en la legibilidad. Por
supuesto, independientemente de lo que puedan revelar los
estudios grupales, sería ideal probar fuentes variadas.
350Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje
tamaño y estilo con un individuo en particular cuando sea
posible para optimizar el material escrito personalizado.
Atender los desafíos de comportamiento que
Impedir interacciones exitosas
El manejo del comportamiento basado en antecedentes es un
enfoque proactivo para reducir los comportamientos
problemáticos al reducir la probabilidad de que ocurran en
primer lugar. Promovido por Ylvisaker (Ylvisaker & Feeney, 2009)
para su uso con sobrevivientes de lesiones cerebrales
traumáticas, es aplicable para trabajar con cualquier persona
que tenga un comportamiento disruptivo o inapropiado. El
médico toma nota proactivamente de los patrones en los
sucesos anteriores a los comportamientos problemáticos (los
antecedentes) y luego trabaja para evitar que sucedan.
Asimismo, el clínico se sintoniza con los antecedentes del
comportamiento positivo y trabaja para facilitarlos. El objetivo
es aprovechar las formas constructivas de ayudar a moldear el
entorno de una persona y los roles de los demás en él para
reducir la necesidad de consecuencias negativas para abordar
los comportamientos problemáticos (Turkstra, 2010; Ylvisaker &
Feeney, 2009).
Thomas Kitwood (1997) adopta un enfoque similar,
más holístico, en su texto seminal, Demencia reconsiderada,
y por Power en sus libros populares,Demencia más allá de
las drogas: cambiando la cultura del cuidado(2010) y
Demencia más allá de la enfermedad: mejorar el bienestar(
2014). Como consideramos en el Capítulo 13, centrarse en
abordar las necesidades insatisfechas de las personas con
Caja
23-1 Resumen de Mejores Prácticas en Intervención
• Adoptar la comunicación como un derecho humano.
• Reconocer la evaluación como un proceso de
intervención continuo.
• Estar centrado en la persona.
• Incluya a miembros de la familia, cuidadores y otras
personas cuyos roles sean relevantes.
• Tener un sentido claro de propósito y metas.
• Involucrar a socios de comunicación fuera del
círculo inmediato de amigos y familiares del
cliente.
• Acepte las diferencias culturales y lingüísticas.
• Fomentar el autoentrenamiento.
• Considere el tiempo y las condiciones óptimas.
la demencia como causa de un comportamiento no deseado, en
lugar de reaccionar a dicho comportamiento a través de
enfoques conductuales y farmacológicos, es más eficaz y más
humana. Power destaca la importancia de considerar los
problemas de comportamiento como síntomas de desafíos
fundamentales para el bienestar de una persona. Recomienda
que nos concentremos en las fortalezas desde una perspectiva
de bienestar en lugar de los problemas de conducta desde una
perspectiva biomédica. El poder proporciona evidencia de que
los enfoques basados en una perspectiva de bienestar
mantienen mejor la calidad en las relaciones con personas que,
de otro modo, se podría considerar que se comportan mal, son
rebeldes o están fuera de control. Hickey y Douglas (2021)
repiten maravillosamente esta filosofía en su libro sobre
intervenciones de memoria y comunicación centradas en la
persona para personas con demencia.
En el Cuadro 23-1 se resume una lista de las mejores prácticas
para el tratamiento.
¿Qué hace la excelente clínica
Afasiólogo saber sobre
¿La evidencia se basa en la practica?
La práctica basada en la evidencia implica la implementación de
métodos para los que existe un apoyo de investigación
conocido, mientras se basa en nuestra propia experiencia clínica
y se tienen en cuenta las características personales de las
personas a las que servimos y las características del entorno
local. Excelentes médicos conocen la base de evidencia
• Considere ubicaciones óptimas.
• Centrarse en la comunicación funcional.
• Involucrar a la persona de manera activa y significativa en el
establecimiento de metas.
• Centrarse en el material relevante.
• Concéntrese en las fortalezas.
• Ser un jugador de equipo interdisciplinario.
• Integrar enfoques basados en evidencia con enfoques
basados en evidencia basados en la práctica.
• Mezcla el arte con la ciencia.
• Fomentar la comunicación favorable a la afasia.
• Atender los desafíos de comportamiento que impiden
interacciones exitosas.

para lo que sea que hagan profesionalmente, según lo
documentado en la literatura de investigación revisada por
pares y también según su propia recopilación de datos y
observación con las personas a las que sirven. Aquí, revisemos
la información sobre la práctica basada en la evidencia más
pertinente para la excelencia clínica.
Cuatro constructos son especialmente importantes cuando
consideramos los tipos de evidencia para los resultados del tratamiento:
• eficacia, la probabilidad de beneficiarse de un
tratamiento determinado para una población definida
en condiciones ideales (aplicable a una población, no
a un individuo)
• eficacia, la probabilidad de beneficio del
tratamiento para un individuo en condiciones
promedio (basado en estudios de tratamiento
eficaz)
• eficiencia, un índice de productividad, es decir,
cuánto se puede ganar con un mínimo de gasto,
tiempo y esfuerzo (especialmente importante al
comparar dos o más tratamientos que se han
encontrado eficaces)
• resultado, un índice de cambio que ocurre como
resultado del tiempo, la intervención o ambos (un
término que abarca eficacia, efectividad y
eficiencia) (Golper et al., 2001; Wertz & Irwin,
2001)
La fuerza de las recomendaciones para la práctica clínica
se basa idealmente en los niveles de evidencia. Los niveles de
evidencia relacionados con los resultados del tratamiento y la
fuerza de las recomendaciones han sido definidos de manera
diferente por diferentes autores y grupos.
El grupo de trabajo Grading of Recommendations
Assessment, Development and Evaluation (GRADE) (http://
www.gradeworkinggroup.org) es un grupo internacional
dedicado a ayudar a evaluar la calidad de la evidencia para
las prácticas de atención médica. La evidencia se clasifica de
la siguiente manera:
• Alto: es muy poco probable que la investigación
adicional cambie la confianza en la estimación
de la efectividad del tratamiento.
• Moderado: es probable que la investigación
adicional afecte la confianza en la estimación de la
efectividad del tratamiento.
• Bajo: es muy probable que la investigación adicional tenga
un impacto en la confianza en la estimación de la
efectividad del tratamiento.
23. Mejores Prácticas en Intervención 351
• Muy bajo: Cualquier estimación de la efectividad
es muy incierta.
Las Directrices clínicas para el tratamiento de accidentes
cerebrovasculares que ofrece la Stroke Foundation of Australia
(https://strokefoundation.org.au) son directrices vivas,
actualizadas a medida que evoluciona la evidencia. La fuerza de
cualquier recomendación encaja en una de dos categorías,
según la evidencia disponible:
• fuerte, “donde los autores de la guía están
seguros de que la evidencia respalda un
equilibrio claro hacia los efectos deseables o
indeseables”; o
• débil, “donde el panel de la guía no está seguro
sobre el equilibrio entre los efectos deseables y los
indeseables”.
Las pautas también incluyen recomendaciones para prestar
atención a la cantidad y calidad de la evidencia, el impacto
clínico potencial, la generalización y la aplicabilidad.
La Academia Estadounidense de Neurología (AAN;
https://www.aan.com/) identifica cuatro niveles de
recomendación:
• A: establecido como efectivo, ineficaz o
dañino (o establecido como útil/predictivo o
no útil/predictivo) para la condición dada en
la población especificada
• B: probablemente eficaz, ineficaz o perjudicial
(o probablemente útil/predictivo o no útil/
predictivo) para la afección dada en la
población especificada
• C: posiblemente efectivo, ineficaz o dañino (o
posiblemente útil/predictivo o no útil/
predictivo) para la condición dada en la
población especificada
• U: datos inadecuados o contradictorios; dado el
conocimiento actual, el tratamiento (prueba, predictor) no
está probado
La determinación de las clases de evidencia se basa
en las fortalezas combinadas de las recomendaciones.
Las clases de pruebas son las siguientes:
• I: evidencia de uno o más ensayos clínicos
controlados aleatorios bien diseñados que incluyen
medidas objetivas y controles de referencia y que
cumplen con cinco criterios adicionales
352Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje
• II: evidencia de uno o más ensayos clínicos controlados,
aleatorizados y bien diseñados o un estudio de cohorte
prospectivo emparejado que incluya medidas objetivas
y controles de referencia y que cumpla con todos
menos uno de los cinco criterios adicionales para el
Nivel I
• III: todos los demás ensayos controlados (incluidos los
controles de antecedentes de casos o los participantes que
sirven como sus propios controles y medidas objetivas)
• IV: estudios que no cumplen los criterios de Nivel
I, II o III, incluidas las opiniones de expertos y las
declaraciones de consenso (AAN, 2017; French &
Gronseth, 2008; Gronseth & French, 2008).
Un enfoque alternativo es el de Robey y Schultz (1998) y el
de Robey (2004)modelo de investigación de resultados de cinco
fases. En lugar de definir los niveles de evidencia, se describen
cinco fases de la investigación de resultados:
• Fase I: Afase de descubrimiento, cuando los investigadores
desarrollan hipótesis sobre el tratamiento, estiman la
intensidad óptima del tratamiento y especifican la población
que se beneficiará del tratamiento.
Los estudios de fase I incluyen participantes individuales o
estudios de casos, estudios con tamaños de muestra
pequeños y estudios sin grupo de control.
• Fase II: Unafase de optimización, cuando se refinan las
hipótesis, se especifica una justificación del método de
tratamiento, se detallan explícitamente los criterios de
selección de los participantes y se estandariza el
protocolo de tratamiento. Al igual que los estudios de
Fase I, los estudios de Fase II incluyen estudios de un
solo participante o de casos y estudios con tamaños de
muestra pequeños; pueden incluir estudios sin grupo de
control.
• Fase III: Unafase de prueba de eficacia, que implica la
prueba de un método de tratamiento desarrollado a
través de las Fases I y II, con grandes muestras de
personas que representan las poblaciones objetivo en un
ensayo de control aleatorio(un ensayo en el que los
participantes que cumplen con los criterios de selección
explícitos se asignan aleatoriamente a grupos de
tratamiento y control, a menudo realizados en múltiples
sitios).
• Fase IV: Unafase de prueba de eficacia, cuando
los efectos del tratamiento ya estudiado en Fase
III se estudian en condiciones clínicas medias.
Los estudios de fase IV permiten
variación en la frecuencia e intensidad del
tratamiento e incluso en la definición del objetivo
poblaciones Estos incluyen estudios de un solo
participante, réplicas de estudios de fase III y
estudios de grupos grandes.
• Fase V: Unafase de prueba de eficacia y eficiencia,
en el que se estudian la distribución del tiempo y el
coste junto con los índices de satisfacción y calidad de
vida de grandes muestras de personas tratadas, así
como de sus seres queridos y sus cuidadores.
ElColaboración Cochrane(http://www.coch rane.org) es
una red internacional de académicos, profesionales y
consumidores establecida para ayudar a considerar la base de
evidencia que respalda cualquier área de intervención
relacionada con la salud. Las Bibliotecas Cochrane (http://
www.cochranelibrary.com) incluyen una base de datos de
revisiones sistemáticas de evidencia para una amplia gama de
prácticas de atención médica. Los criterios Cochrane para los
niveles de evidencia incluyen la atención a las fortalezas en
términos de diseño de investigación (siendo los ensayos clínicos
aleatorizados y controlados el nivel más alto), precisión
estadística, relevancia o utilidad, ytamaño del efecto(la medida
estadística del grado de probabilidad de que un tratamiento sea
beneficioso o perjudicial). Actualmente, hay pocas revisiones
sistemáticas específicas de los trastornos neurogénicos
adquiridos del lenguaje en la Colección Cochrane. Es probable
que la colección en esta área crezca, y tanto los médicos como
los académicos pueden encontrar útil mantenerse al tanto de
los nuevos estudios a medida que se agregan a la colección.
Un desafío importante en la construcción de una base de
evidencia sólida para el tratamiento de los trastornos
neurogénicos del lenguaje es que el estándar de oro para la
práctica basada en la evidencia, el ensayo clínico controlado,
aleatorizado, doble ciego, es extremadamente difícil de realizar.
Las razones para esto incluyen lo siguiente:
• tiempo necesario para completar un ensayo clínico
aleatorizado (la mayoría de las veces, varios años), e
incluso más tiempo necesario para evaluar el
mantenimiento a largo plazo y la generalización
• requisitos de financiación
• Desafíos en el reclutamiento y retención de
participantes que cumplen estrictos criterios de
inclusión y exclusión.
Como consecuencia, tenemos muy pocos estudios de
este tipo en el ámbito de la afasiología. Además, los
excelentes médicos reconocen las deficiencias de los
ensayos controlados aleatorios. Estos incluyen lo siguiente:

• preguntas de investigación generadas por los
investigadores en lugar de a través de la colaboración
con representantes de las poblaciones en estudio
• falta de atención a las diferencias, preferencias y
objetivos individuales de los participantes
• Problema ético de asignar personas al azar a
grupos sin tratamiento, reteniendo así el
tratamiento que el tratamiento puede ser útil.
• pura heterogeneidad de personas en cada
categoría y subcategoría diagnóstica, por lo que
siempre hay factores potencialmente confusos y
la generalización de los resultados siempre es
cuestionable
• descarte de algunos resultados que pueden ser importantes
dentro de las condiciones de control como efectos "placebo"
• sesgos conocidos (ver Higgins et al., 2011 para una
descripción de diversas formas de sesgo en este
contexto) (Chabon et al., 2011; Code, 2012; Code &
Petheram, 2011; Lemoncello & Ness, 2013; Ylvisaker
et al. , 2002). Además, muchos estudios implican una
frecuencia e intensidad de tratamiento que no es
factible de lograr en la mayoría de los entornos
clínicos.
Por esta razón, los estudios que supuestamente
representan un nivel de evidencia "más bajo" (p. ej.,
estudios de casos clínicos y de un solo caso inicial múltiple)
pueden ser más factibles, relevantes y aplicables a nuestro
trabajo clínico cotidiano. Dichos estudios son importantes
para respaldar la evidencia basada en la práctica en la
literatura y en nuestro trabajo clínico diario.
¿Dónde podemos encontrar información pertinente?
para apoyar la práctica basada en la evidencia?
Un excelente recurso para los SLP que buscan orientación práctica
basada en evidencia en prácticamente cualquier área de la patología
del habla y el lenguaje esSpeechBite(habla mordida.com).
SpeechBite es una base de datos gratuita, en línea y de búsqueda de
estudios de intervención, junto con calificaciones de la calidad de la
investigación para cada estudio. Las calificaciones de calidad se
basan en la escala PEDro (Sherrington et al., 2000), un sistema de
calificación de 11 ítems para evaluar la validez externa e interna y la
interpretabilidad de la investigación. La Asociación Estadounidense
del Habla, el Lenguaje y la Audición también proporciona un sistema
y pautas de práctica basadas en evidencia en línea que se pueden
buscar de forma gratuita.
23. Mejores Prácticas en Intervención 353
atic reviews en su sitio web (http://www.asha.org) a través
de su Centro Nacional para la Práctica Basada en la
Evidencia en Trastornos de la Comunicación (N-CEP). La
Academia de Trastornos y Ciencias de la Comunicación
Neurológica (ANCDS; http://www.ancds.org) proporciona un
amplio conjunto de pautas de práctica basadas en evidencia
y recursos de práctica en su sitio web.
¿Cómo integra el excelente clínico la
práctica basada en la evidencia?
¿Con evidencia basada en la práctica?
Es importante poder juzgar los niveles de evidencia para cualquier
método de tratamiento que consideremos. Esto requiere
mantenerse al tanto de la literatura de investigación revisada por
pares y examinar la calidad y cantidad de evidencia subyacente a
cualquier método. Aún así, hay aspectos vitales de cualquier
situación de tratamiento que dan forma a la probabilidad de que
nuestro trabajo con una persona conduzca a una mejora. La práctica
basada en la evidencia no debe aplicarse como práctica de libro de
cocina. Podemos crear listas de estrategias de "cómo hacer" para
llevar a cabo enfoques específicos; esto no significa que cada paso
deba llevarse a cabo de una manera prescrita con un individuo en
particular, a menos que ese individuo esté inscrito en un estudio de
investigación y haya dado su consentimiento abierto para participar
en dicho estudio.
Es esencial que consideremos los rasgos de la persona (los
factores ambientales del mundo real de la persona, la
motivación, el apoyo social percibido, la personalidad, la cultura,
la gravedad de los problemas de comunicación, las
discapacidades concomitantes, el estado de salud, etc.) además
de nuestros propios rasgos (nuestra competencia y confianza en
la realización de un determinado abordaje, nuestras
preferencias personales y las formas individuales en que
adaptamos el tratamiento a los individuos, nuestra capacidad
para fomentar y mantener una alianza terapéutica eficaz con la
persona, etc.). Dentro de la práctica clínica real, la evidencia
científica externa es irrelevante si no se considera a la luz de las
características de la persona y del médico, al mismo tiempo que
se tiene en cuenta el contexto de la prestación del servicio y sus
limitaciones. Idealmente, hay una integración constante de la
evidencia basada en la práctica con la práctica basada en la
evidencia en nuestro trabajo (Figura 23-1).
El uso diario de la evidencia basada en la práctica
implica
• usar evidencia de intervenciones del mundo real para dar
forma a lo que realmente hacemos como médicos; y
354Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje

Figura 23–1.La integración e interacción esenciales de la práctica basada en la

evidencia con la evidencia basada en la práctica dentro de un entorno de
intervención. La integración de los dos está incrustada en el modelo de los tres
componentes principales de la práctica basada en la evidencia. Crédito de la
imagen: Taylor Reeves. Se puede encontrar una versión a todo color de esta
figura en el Inserto de color.

• evaluar críticamente cómo los hallazgos de la
investigación pueden interpretarse y traducirse mejor
en un sentido práctico a las personas individuales con
las que trabajamos, a la luz del entorno, los rasgos de
la persona y nuestros propios rasgos.
método dado. Aún así, estar armado con una amplia
gama de enfoques y saber cuándo usar cuál y por qué es
esencial para la práctica clínica sin importar la situación.
En cualquier momento dado, el clínico debe ser capaz de
responder lo siguiente:

En el contexto de las mejores prácticas en evaluación • ¿Cuál es el método en uso?

(Capítulo 17), examinamos las formas en que el proceso de
evaluación puede verse como un proceso de investigación.
También es importante ver el proceso de tratamiento para cada
individuo como un proceso científico continuo que requiere la
generación repetida de hipótesis, la recopilación de datos, el
análisis, la interpretación y la planificación de acciones para
guiar los próximos pasos.
Ciertamente, hay momentos en los que debemos
pensar sobre la marcha, sin tener necesariamente un aviso
previo sobre una sesión de tratamiento inminente que
permita investigar el historial clínico detallado de un
individuo o el tiempo de preparación que nos permita reunir
los materiales que serían apropiados para usar un
• ¿Cuál es el propósito de ese método?
• ¿Cuáles son las teorías que sustentan el método?
• ¿Qué evidencia hay en la literatura de
investigación de que el método funciona?
• ¿El método se alinea con los objetivos centrados en la
persona?
• ¿Qué evidencia hay de que una persona determinada
se está beneficiando de una manera que afectará la
comunicación y la participación cotidianas?
Consideramos esto más a fondo en el contexto de la
base de evidencia que respalda cada uno de los enfoques de
tratamiento discutidos en los capítulos siguientes.

Cómo pueden ayudar los excelentes médicos
¿Traducción del conocimiento a través de la
implementación y la ciencia de sistemas?
En el Capítulo 15, presentamos la importancia de la traducción
del conocimiento como un componente del papel de defensa de
los afasiólogos. Cada vez hay más apoyo en la afasiología para
ampliar nuestraciencia de la implementación, que implica el
estudio de cómo se pueden utilizar los resultados de la
investigación para mejorar la calidad de los servicios clínicos y
los resultados de la intervención. Se está produciendo un
progreso emocionante con oportunidades cada vez mayores
para que los médicos colaboren con los investigadores para
ayudar a dar forma a la utilidad de la nueva evidencia a medida
que surge (Douglas & Burshnic, 2018; Eccles & Mittman, 2006;
Goldstein & Olswang, 2018). Al mismo tiempo, las asociaciones
de investigación y práctica se están expandiendo con unciencia
de sistemas enfoque, en el que ocurre lo siguiente:
• Los miembros de las poblaciones clínicas en estudio se
involucran no solo como participantes en el estudio, sino
también como expertos que ayudan a determinar cuáles son las
preguntas de investigación más importantes como estudios.
Actividades de aprendizaje y reflexión
1.Enumere y defina cualquier término en este
capítulo que sea nuevo para usted o que aún no
domine.
2.Considere las mejores prácticas recomendadas para
la intervención enumeradas en el cuadro al final de
esta sección. Para cada uno (marcando la casilla
correspondiente), califique el grado en que valora su
importancia en su propio rol como médico. Utilice
sus calificaciones para ordenarlas de mayor a menor
importancia. Luego compare sus calificaciones y
orden general con las de otros colegas. Discuta las
similitudes y diferencias en sus puntos de vista
sobre la importancia relativa de aspectos específicos
de las mejores prácticas.
3.Comparar y contrastar el significado de los
términos.eficacia,eficacia,eficiencia, y
resultado.
23. Mejores Prácticas en Intervención 355
son concebidos. (Consulte Hinckley et al. [2014] para obtener una
descripción general).
• Las partes interesadas (p. ej., personas con trastornos
neurogénicos, familias, cuidadores, profesionales de
diversas disciplinas, formuladores de políticas,
representantes de agencias de financiamiento) que
finalmente influyen en cómo se puede usar la investigación
se incluyen en la formulación de preguntas de investigación
significativas, evaluando la utilidad de la evidencia.
• El conocimiento se traduce en cambios
significativos, como mejores métodos de
intervención, políticas, accesibilidad de los servicios,
equidad, educación clínica y financiación.
Para obtener más información sobre este enfoque,
consulte la información y los recursos en el sitio web de
Learning Health Systems Rehabilitation Research Network
(https://sites.brown.edu/learrn).
Con una base sólida en las mejores prácticas para la
intervención, pasamos al siguiente capítulo, considerando
los propósitos específicos de la intervención y las teorías
que subyacen a la justificación de los métodos de
intervención generales y específicos.
4.¿Cómo podrían superponerse las fases de la investigación de
resultados de cinco fases de Robey (2004) con las clases de
evidencia de la Academia Estadounidense de Neurología y
con el esquema de calificación para los niveles de evidencia
sugerido por la Fundación de Accidentes Cerebrovasculares
de Australia?
5.¿Cuál de los medios para considerar los niveles de
evidencia presentados en este capítulo sería más
útil para los médicos en ejercicio al evaluar la base
de evidencia para cualquier método de
tratamiento en particular?
6.Lea detenidamente cada una de las bases de datos
en línea mencionadas como recursos de práctica
basada en la evidencia en este capítulo. ¿Cómo
podría utilizar esos recursos al considerar varios
enfoques de intervención para una persona
determinada?
356Afasia y otros trastornos neurogénicos adquiridos del lenguaje

7.¿Cómo planea implementar la práctica basada en la
evidencia y la evidencia basada en la práctica en
su propio trabajo clínico?
8.Describa los desafíos para la práctica basada en la
evidencia que visualiza en el trabajo clínico diario.
¿Qué son las estrategias específicas?
podría implementar para abordar esos
desafíos?
9.¿Cómo podría diseñar un estudio que
beneficiaría a las personas con lesiones
cerebrales utilizando un marco de ciencia de
implementación?

1 = Extremadamente importante 3
= Moderadamente importante 5 =
De poca importancia 1 2 3 4 5
Adoptar la comunicación como un derecho humano

Reconocer la evaluación como un proceso de intervención

continuo.

Estar centrado en la persona

Incluya a miembros de la familia, cuidadores y otras personas

cuyos roles sean relevantes

Tener un sentido claro de propósito y metas.

Garantizar las mejores condiciones de tratamiento posibles

Involucrar a socios de comunicación fuera del

círculo inmediato de amigos y familiares del cliente

Acepta las diferencias culturales y lingüísticas

Fomentar el autoentrenamiento

Considere el momento óptimo

Considere ubicaciones óptimas

Centrarse en la comunicación funcional.

Enfóquese en las habilidades que el individuo realmente necesita

y quiere mejorar

Centrarse en el material relevante

Enfócate en las fortalezas

Ser un jugador de equipo interdisciplinario.

Utilice enfoques basados en la evidencia

Fusionar el arte con la ciencia

Fomentar la comunicación favorable a la afasia

Atender los desafíos de comportamiento que impiden

interacciones exitosas

www
Los materiales de enseñanza y aprendizaje adicionales están disponibles en el sitio web complementario.