Gálatas puede ser analizada según la retórica greco-romana y la epistolografía. Esa
posibilidad pone de relieve el relacionamiento de Pablo con las disciplinas retóricas, literarias y culturales. Gálatas trae un mensaje que es parte de un constante debate, y establece una comunicación en primer lugar, entre el remitente y los destinatarios, y luego con los oponentes, de tal modo que todos los lectores de la carta se sientan participantes del debate. Se nota que el apóstol escribe por tanto esta carta en defensa de su evangelio y de su persona: él ha sido enviado por Dios, y el evangelio que predica es el único válido. Si los cristianos buscan someterse a la Ley de Moisés, quiere decir que no confían en Dios que envió a su Hijo para salvarnos. La lectura de la carta a los Gálatas ofrece algunos datos importantes sobre la vida de Pablo narrados por él mismo, como su vocación y envío por parte de Dios a predicar el Evangelio a las naciones. También permite descubrir algo de la personalidad del apóstol: sus sentimientos y cariño por sus hermanos en la fe, su amor por Cristo, y su celo por predicar el Evangelio, a pesar de que ello le acarreara persecuciones y críticas. Pablo ante todo va a defender su apostolado, el cual proviene de Cristo Jesús por voluntad de Dios y a esa defensa dedicará los dos primeros capítulos de la carta. Defender su calidad de apóstol es lo más importante, pues había el peligro de que su evangelio fuera considerado como un simple discurso inventado por él. Diferencias Pablo comienza la carta a los colosenses identificándose como remitente, lo mismo que a sus destinatarios y a continuación, saluda con una expresión de simpatía y de bendición. En cambio, el comienzo de Gálatas es diferente. Tras su nombre, viene una negación, seguida de un contraste bastante notorio: Pablo es apóstol, no de parte de los hombres sino por Jesucristo y Dios Padre y tampoco pronuncia palabras de agradecimiento o de grato recuerdo, sino de amonestación. Explicación Estas diferencias entre el inicio de Gálatas y el de las demás cartas paulinas, hace suponer que Gálatas aparece como una respuesta inmediata a una situación problemática en Galacia. Como veremos, la situación en las Iglesias de Galacia no era digna de elogio, sino de reproche. Más todavía, Pablo necesitará defender desde el inicio su calidad de apóstol. Carta a los colosenses. En la carta a los colosenses llama profundamente la atención que la falta de la invocación «hermanos», que figura frecuentemente en todas las cartas auténticas de Pablo. Este escrito tiene un tono más bien parecido al de una exposición en forma de carta también parece que el autor hace un recuerdo histórico de la misión de Pablo.