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RESUMEN DE LIBRO EL CHOQUE DE LAS CIVILIZACIONES POR SAMUEL

HUNTINGTON.
El presente libro, trata sobre el argumento que la identidad cultural sería
el factor más importante en la configuración de la política global después de la
Guerra Fría, con el final de este conflicto, entre Estados Unidos y la Unión
Soviética sobre la base de sus ideologías democráticas capitalistas y liberales
frente a las comunistas y socialistas, afrontando un nuevo equilibrio de poder.
Las potencias que tienen sometidos bajo patrones de conflicto y
cooperación a todo el mundo, no esclarecen el destino de sus relaciones
internacionales. El ambiente político es incierto e imprescindible en los años 90,
e intenta proporcionar una nueva estructura para explicar cómo se desarrollará
la política global en el nuevo siglo. Importante es mencionar el contexto
histórico en una época dominada por el resurgimiento de conflictos étnicos y el
reciente final de la Guerra Fría, previo a los ataques terroristas del 9/11.
El choque de civilizaciones argumenta que la identidad cultural sería el
factor más importante en la configuración de la política mundial después de la
Guerra Fría.
La idea sobre la importancia de las civilizaciones se constituyó en gran
medida en respuesta la tesis de cómo progresarían las relaciones
internacionales después de la Guerra Fría demostró que la democracia liberal
occidental había sido el sistema de gobierno más avanzado y con la derrota de
la Unión Soviética, Occidente demostró que la democracia liberal era mejor que
el comunismo; exportando su ideología por todo el mundo a través del
imperialismo, pero la verdadera realidad era que la democracia liberal
occidental simplemente se universalizaría como el principal y superior sistema
de gobierno en todo el mundo.
Y pasaría con el tiempo a los mismos patrones de declive externo e
interno que llevaron al fin del Imperio Romano. Algunos opositores se
resistieron a su afirmación de que la democracia occidental era simplemente
una entre muchas ideologías igualmente válidas en una variedad de
civilizaciones. Estos críticos enfatizan las formas en que la democracia es en
realidad un sistema de gobierno particularmente exitoso y deseable. El
economista y filósofo Amartya Sen, por ejemplo, enumera el surgimiento de la
democracia como el desarrollo más importante del siglo XX. Sin embargo,
también descarta su asociación con Occidente, sobre una base cultural; en
cambio, argumenta que surgió primero en las civilizaciones occidentales de
acuerdo con las circunstancias históricas, pero no debe considerarse como un
"valor occidental" exclusivo. Otros señalan las formas en que el argumento de
Huntington justifica los conflictos occidentales con otras civilizaciones. Al abogar
por la preservación de cada civilización única, algunos estudiosos creen que
Huntington también aboga por acciones que de otro modo se considerarían
inmorales; por ejemplo, rechazar refugiados porque provienen de una cultura
diferente que es “incompatible” con la cultura occidental.
El defensor más famoso de esta crítica es Noam Chomsky, el lingüista y
activista político estadounidense. Otros, como el intelectual público Edward
Said, descartaron el argumento de Huntington como uno problemáticamente
reductivo. Said enfatizó la naturaleza complicada de las relaciones entre
civilizaciones, que él cree que Huntington pasa por alto al separar las culturas
en siete civilizaciones distintas. También argumenta que la afirmación de
Huntington de que las sociedades islámicas representan la mayor amenaza
para la cultura occidental fomenta el miedo y el maltrato a árabes y
musulmanes.
Hoy en día, las ideas de Huntington continúan resonando entre muchos y
generando críticas de otros. En general, han demostrado ser fundamentales
para las formas en que las naciones occidentales abordan los asuntos
exteriores y han contribuido a un debate acalorado y continuo. En particular, su
enfoque en el ascenso económico de China y los cambios demográficos en las
sociedades islámicas se refleja en las prioridades de la política exterior de los
Estados Unidos: China y el mundo islámico se han convertido en dos temas
importantes y controvertidos para la nación. Muchos políticos estadounidenses
se refieren a las ideas de Huntington como justificación de su enfoque de la
política exterior.
El debate continúa con respecto a la descripción de Huntington de la
civilización islámica, en particular. Muchos académicos y políticos aceptan el
argumento de Huntington de que Occidente está en guerra con el Islam mismo
y creen que este conflicto nunca se puede reconciliar porque es una batalla
entre dos civilizaciones diferentes e incompatibles. Otros, sin embargo, señalan
las formas en que este argumento en sí mismo genera conflicto al enfatizar las
diferencias entre las personas.
Antes de 1500 dC, las civilizaciones estaban separadas por la geografía.
Las ideas tardaban en viajar. El cambio fue gradual y se produjo a lo largo de
los siglos. Después de 1500, las ideas se difundieron rápidamente, con avances
en la navegación oceánica, que hicieron que el mundo fuera mucho más
pequeño.
En el siglo XX, Occidente ya no influye en el resto del mundo. La
influencia cultural se ha vuelto interdependiente. El declive occidental ha
sido muy lento, lo que no representa una amenaza inmediata para el mundo. El
declive puede revertirse o acelerarse, y está influido por quienes ocupan
posiciones de poder. La pérdida de fe en la ideología política en el siglo anterior
creó un vacío. La religión llenó el vacío, como lo había hecho durante siglos. El
aumento de la comunicación, combinado con una pérdida general de
significado, identidad y moralidad, ha allanado el camino para un renacimiento
religioso.
Las sociedades asiáticas responden menos a la presión estadounidense
de lo que solían ser. Huntington cita como ejemplos a Hong Kong, Corea del
Sur, Taiwán, Singapur y Japón. Estos países se han desarrollado sin la
influencia cultural de Occidente. La economía y la tecnología son sistemas de
valores ambivalentes. La civilización islámica ha rechazado los valores
europeos, pero ha aceptado el modernismo y Huntington que la importancia
dada a la religión islámica se debe al fracaso del estado en décadas anteriores,
además de una gran población joven y un liderazgo autoritario.
Durante la Guerra Fría, los países se vieron obligados a elegir un bando;
los EE.UU. o la U.R.S.S. Después de la guerra mundial, esta dicotomía se
disolvió. Hubo más democratización del poder. Los estados nacionales
centrales, como Francia y Alemania, se convirtieron en líderes de su civilización
europea. Pero la civilización islámica carece de un estado central, lo que impide
que las naciones musulmanas se modernicen con éxito.
El futuro choque de civilizaciones será entre China, el Islam y Occidente.
Según los estados no occidentales, Occidente solo ha logrado mantener el
liderazgo global, debido al poder militar, la promoción de los valores
occidentales a nivel mundial y la restricción de inmigrantes en Occidente.
El conflicto entre el Islam y Occidente se debe al conflicto histórico entre
el Islam y el cristianismo, las diferencias entre los valores religiosos y una gran
población musulmana joven y desempleada, que son reclutados para las
causas islámicas. El resurgimiento del Islam llevó a la reafirmación de la
relevancia del Islam. El intento de Occidente de universalizar sus valores e
instituciones condujo al resentimiento musulmán. Sin el comunismo, el Islam y
Occidente se consideran enemigos.
Hace dos décadas, después del final de la guerra fría y el triunfo de la
democracia liberal de libre mercado, Samuel Huntington, predijo que el conflicto
futuro sería puramente de civilizaciones y entre estados nacionales. los
antagonistas de occidente en estos futuros conflictos serían las culturas no
occidentales, no asimiladas remanentes en el mundo: el confucianismo, pero
especialmente el islam. en la última década, el conflicto de civilizaciones con el
islam, de hecho, se ha intensificado. estas luchas, sin embargo, están teniendo
lugar, dentro y no entre, estados-naciones, incluyendo la guerra interna dentro
del Islam. Finalmente, y lo más importante, la cultura y la civilización son
inseparables de la economía, la política y la sociedad. Las culturas no se
forman, ni evolucionan, en un antidoto socioeconómico, lo que hace
virtualmente imposible un conflicto puramente entre civilizaciones.
Tcnel. Art. DEM Julio Edgardo Martínez Alvarado

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