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La inmoralidad es un tema difícil porque siempre ocasiona mucho dolor en las personas.
Y por supuesto hablar de dinero es difícil porque a la mayoría de nosotros nos cuesta dar, no queremos
soltar.
Ahora, quiero hacerte una pregunta: ¿Alguna vez te han estafado? A mi varias veces.
A mí me apasionan las misiones, y en una ocasión, conocí en Muzquiz, Coahuila, a un misionero que estaba
buscando apoyadores así que, yo decidí apoyar aun cuando ganaba muy poco como pastor. Y cada mes le
depositaba.
Más de un año después, me entero que ese hombre, nunca había ido de misiones, y tenía un pésimo
testimonio, pues ni siquiera un alma había ganado para Cristo y no se iría a las misiones nunca. Me sentí
estafado.
¿Pero te han estafado en la iglesia? ¿Alguna vez te han dicho que des para que Dios te de mas? ¿Alguna vez
te han pedido que des dinero por una petición de oración?
El evangelio de la prosperidad:
Dios quiere hacerte rico, eso dice el evangelio de la prosperidad y por eso hay gente que da, porque hasta las
corbatas venden, o ropa ungida etc.
Pacta ahora y Dios hará eso por ti, ¿qué quieres? Pacta y Dios te responderá.
Y algunos mal entienden las palabras de Pablo y piensan que Jesús se hizo pobre para que tu fueras rico
materialmente, pero no, Jesús se hizo probre, es decir, dejó su gloria, para que tú un día puedes llegar a la
gloriosa presencia de él. Diap. 4.
Pero lamentablemente, la mayoría de las veces se interpreta la bendición de Dios tristemente solo acerca del
dinero, pensando en que Dios quiere enriquecernos solo en dinero, pero hay muchas otras áreas más donde
Dios nos quiere enriquecer.
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Dios quiere ver a su peblo en salud emocional, un pueblo amistoso, Dios nos quiere enriquecer con
ministerios, prosperos, es decir, con mucho trabajo de la iglesia etc.
Pero tristemente el cristiano la ha reducido a la riqueza más insignificante que es la riqueza material.
Dios quiere enriquecerme en todo, pero yo solo me voy a concentrar en buscar el enriquecimiento material.
El chiste de pepito y el pastor que es bueno para sacar el dinero.
Y con todas estas ideas de ser rico materialmente, hay quienes dicen que, si no prosperas económicamente,
es que tienes un pecado oculto.
La bendición de Dios, no se resume en si tienes una casa hermosa, o un carro último modelo o una cuenta de
banco grande.
Ahora esto no quiere decir que no queramos prosperar, claro que sí, pero no reducimos las bendiciones de
Dios solo a lo material. Diap. 5.
Pero si pensamos así, hacemos sentir a la gente culpable, inferior, menos cristiana o menos espiritual o
menos bendecida si no están prosperando como dicen que debemos prosperar.
En una ocasión, un familiar lejano que es cristiano, me decía que, si yo como pastor tenía necesidades, es
porque había algo mal en mí, pues al ser hijo del Rey, debía vivir como príncipe.
Y en algún momento si me empecé a preguntar si había algo malo porque obvio, tenía muchas necesidades.
Bien pues en este día, te quiero pedir perdón por esos pastores y por la iglesia en general de Cristo que te ha
metido estas ideas equivocadas en la cabeza. Diap. 6.
Tanto la idea de que Dios solo te prospera económicamente, como por la idea de que, si no prosperas, estás
en pecado.
Para algunos pastores, en este caso yo me identifico, era difícil hablar del tema del dinero en la iglesia, por
tanto daño que han hecho otros pastores y tantas malas ideas que se tienen sobre el tema.
Y aún sigue siendo duro hablar del tema, por todo lo que les platiqué ya, hasta que entendí que Jesús mismo
habló mucho sobre el tema del dinero y la biblia misma habla mucho de dinero, y del dar, porque el dar, es
por nuestro propio bienestar. Diap. 7.
Así como el fruto del Espíritu que es amor, gozo, paz, paciencia… que son buenos para mi alma, también el
dar es bueno para mi alma, para mi bienestar, para mi bendición.
Y gracias a Dios porque en la iglesia hay gente muy generosa y siempre de alguna forma u otra hay
bendición… pero siendo honestos, a Jesús si le interesa el tema del dinero.
En este pasaje donde leímos, dice que Jesús se sentó a ver las ofrendas que estaban dando en el templo, y
observaba detenidamente lo que cada persona estaba dando ¿por qué? ¿por qué le importaba el dinero?
NO…! Porque le interesaba lo que había en el corazón de los que daban.
Jesús no estaba pensando en que ahora si le iba a ir bien al templo por lo que daban; no, Jesús quería saber la
intención real del corazón.
Porque hay una relación muy directa en cuanto al corazón y el dar.
2 Corintios 9:7: Cada uno debe decidir en su corazón cuanto dar; y no den de mala gana ni bajo presión,
porque Dios ama a la persona que da con alegría. NTV Diap. 8.
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Dice Pablo que cada uno debe decidir, no sentirse manipulado, no sentirse extorsionado, no sentirse cansado
de dar, ni obligado, o intimidado por un infierno.
Si alguna vez, estando aquí en El Reino, vas a dar de mala gana o porque te sientes obligado, por favor, no
des ese dinero.
No des porque es una ofrenda que no agrada a Dios, mejor quédate con eso.
Dios está más interesado en tu corazón que en tu dinero. Pero el dinero lo usa, para ver que hay en tu
corazón.
Malaquías 3:10 dice: Traed todos los diezmos al alfolí y haya alimento en mi casa; y probadme ahora en
esto, dice Jehová de los ejércitos, si no os abriré las ventanas de los cielos, y derramaré sobre vosotros
bendición hasta que sobreabunde. Diap. 10.
Y no quise leer los versículos anteriores, desde el 8, pueden leerlos en casa, póngale un separador ahí,
porque están fuertes. Pero es una realidad.
El diezmo es una prueba de tu corazón.
En el Nuevo Testamento hay menos referencias sobre los diezmos debido a que maneja el concepto de
ofrendas mayores al diezmo.
Por ejemplo, tenemos el caso de las dos blancas de la viuda, dos moneditas llamadas blancas, y ella era todo
lo que tenía y lo dio por amor a Dios.
Ahora, imagínense la escena, Jesús viendo cuanto echaban, pasaban los fariseos ricos alardeando de su
ofrenda pero ahh cuando pasa la viuda, Jesús aplaude.
¿Por qué? ¿Por la cantidad? No..!! por la fidelidad.
Es el caso del famoso 2 Corintios 9:7, que leí hace un momento, donde se dice que cada uno debe dar
conforme lo propuso en su corazón, pero pone como ejemplo a los que han dado más allá de sus fuerzas:
2 Corintios 8:2-4: Estas iglesias están siendo probadas con muchas aflicciones y además son muy pobres;
pero a la vez rebosan de abundante alegría, la cual se desbordó en gran generosidad. 3 Pues puedo dar fe
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de que dieron no solo lo que podían, sino aún mucho más. Y lo hicieron por voluntad propia. 4 Nos
suplicaron una y otra vez tener el privilegio de participar en la ofrenda para los creyentes de Jerusalén.
NTV. Diap. 11.
Las pocas referencias al diezmo en el Nuevo Testamento están primero en la enseñanza de Jesús
Mateo 23:23: que dice: ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el
eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era
necesario hacer, sin dejar de hacer aquello. Diap. 13.
Jesús aquí está diciendo algunas cosas muy importantes, primero dice que en la ley lo más importante es la
justicia, la misericordia y la fe.
Con esto no valida la ley pero si dice que debemos aprender lo mejor de ella. Segundo, dice que debemos de
practicar la justicia, la misericordia y la fe, pero “sin dejar de hacer aquello”; ¿qué significa sin dejar de
hacer aquello? Pues, sin dejar de diezmar.
Luego aparece con claridad en la enseñanza de Pablo 1Corintios 9:13-14: ¿No sabéis que los que trabajan
en las cosas sagradas, comen del templo, y que los que sirven al altar, del altar participan? Así también
ordenó el Señor a los que anuncian el evangelio, que vivan del evangelio. Diap. 14.
Aquí la palabra diezmo no es usada, pero está implicada, y cualquiera que conozca en Antiguo Testamento
la puede ver.
"Los que sirven en el altar" se refiere a los sacerdotes del templo judío, los cuales comían o vivían de los
diezmos ofrecidos en el altar. Luego Pablo dice "Así también ordenó el Señor", y la palabra "Así" significa
"Del mismo modo". Diap. 15.
Pero, ¿Por qué es tan difícil hablar del diezmo y por qué para los creyentes es muy difícil diezmar?
La respuesta esta en el mismo número.
El número 10 en la biblia significa “PRUEBA”. Diap. 16.
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La palabra “diezmo”, está muy relacionada con la prueba. Mire, en la Biblia el número 10 tiene que ver
siempre con pruebas:
¿Cuántas plagas hubo en Egipto? Porque Dios estaba probando el corazón de faraón.
¿Cuántos son los mandamientos? Porque Dios está probando nuestro corazón.
¿Cuántas veces puso a prueba Dios a Israel en el desierto? Porque estaba probando su
fidelidad.
¿Cuántas veces Labán cambio el salario de Jacob? Porque Labán estaba probando el corazón
de Jacob.
¿Cuántas vírgenes fueron probadas? 10, 5 prudentes y 5 imprudentes.
¿Cuántos días estuvo a prueba Daniel? Por eso comió solos vegetales para pasar esa prueba.
¿Cuántos días de prueba se mencionan en apocalipsis 2:10? ¡Diez días!! Diap. 17
¿Cuántos eran los discípulos? ¡No eran 10, eran 12…!!! Jejeje estaba probándolos.
El número 10 representa pruebas en toda la Biblia, y Dios nos está probando con la décima parte de nuestros
ingresos. Y el mismo nos dice, pruébenme.
Básicamente Dios nos dice: Te desafío. Yo pruebo tu corazón con esto, pero tu pruébame a mí, dame el
diezmo y yo te abro las ventanas de los cielos.
Esto es un principio, si cada uno aprende a amar a Dios por encima de sus pertenencias, Dios derramaría
sobre su iglesia tanta bendición que las finanzas nunca serían un problema.
Podríamos construir, evangelizar, hacer y enviar misioneros etc.
Mucha gente viene a la iglesia y ve y dice: “no, no voy a dar porque seguramente están nadando en dinero”.
Pero no es así.
Ahora, déjenme decirles algo, algo que es una revelación muy poderosa, ¿saben que el 100% de los
cristianos diezmamos?
Si..!! El 100%, solo que o diezmamos a Dios, o el diablo nos quita el diezmo, pero de que diezmamos,
diezmamos. Diap. 18.
No es para que te sientas mal, pero en nuestra iglesia, como el 30% diezmaí; es decir, el 30% entrega sus
diezmos.
El otro 70% también diezma, pero por otra vía… Si porque, todos los diezmos que no son traídos a la iglesia
donde uno se congrega, como quiera se diezma… pero vía devorador.
Si todos diezmaran a Dios, este lugar sería increíble.
Si tú crees que has sido estafado o que te han decepcionado en la iglesia, eso no tiene nada que ver con el
principio, tu das y Dios te aprueba.
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Es un principio que tienes que vivir, darle a Dios el 10% y darle a Él primero.
Es importante darle a Él primero, ponerlo en primer lugar. Es como cuando la conquista de Canaán; yo creo
que ya lo había explicado antes.
Dios pidió la primera ciudad, no la segunda, ni la tercera, sino la primera, Jericó.
Si tu no das, no pasa nada, Dios se las arregla para sacar esta iglesia adelante, el asunto es que Dios está
probando tu corazón, tus intenciones y tú fe.
En algún momento de mi vida también me resistía mucho a darle al Señor lo que le corresponde, pero un día
decidí atreverme, decidí probarlo y honestamente nada me ha faltado.
Ustedes vieron cuánto me da la iglesia como ofrenda mensual por el ministerio que hago, y la verdad, yo no
sé como le hago, pero siempre Dios me bendice.
Yo sé que a Dios no se le compra con diezmos ni con ofrendas.
¡TODO ESE CUENTO YO LO SÉ!
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Lo que pasa es que me atreví a honrar a Dios con mis finanzas, porque honestamente quiero honrar a Dios
con toda mi vida y con todo lo que pueda hacer o tener y cada cosa que he recibido ha venido de Dios.
Regularmente veo comentarios e imágenes de personas que critican el diezmo y se atreven a señalar a
pastores y ministros, SIN CONOCER ABSOLUTAMENTE NADA DEL TEMA, y honestamente los
entiendo.
Los entiendo porque sólo han compartido lo que alguien les ha contado, NO lo que ellos han vivido, los
entiendo porque nuestra mente siempre quiere materializar todo y si en nuestro entendimiento algo no cabe,
entonces lo damos por falso, los entiendo porque muchos los han intentado estafar, pero mi Dios no es así,
mi Cristo es totalmente distinto.
Nunca acostumbro hablar de estos temas porque mucha gente piensa que somos materialistas o que siempre
estamos pidiendo, sobre todo si viene gente nueva.
¿Pero cómo explicarte de algo que estoy convencido si tú quieres ver todo con pruebas científicas o
muestras instantáneas haciendo a un lado la fe?
Me atreví a probarlo y honestamente he sentido cómo las ventanas de los cielos se han abierto y he sido
bendecido increíblemente, con bendiciones que sobreabundan y de formas que me es difícil explicarte.
Como aquél día que alguien me regaló una guitarra porque no teníamos en la iglesia.
O aquél día que alguien me bendijo con justo lo que necesitábamos para pagar la renta.
O aquél día que mi esposa y yo teníamos $0 pesos y no teníamos para alimentar a las hijas y alguien se
acercó y me dijo "Dios me mandó a darte esto" y todos comimos bien rico.
O aquél día que sin dinero y con recibos en puerta le oré a Dios y ese mismo día me llegó trabajo...
Pero me atreví, me atreví a probarlo y no me arrepiento.
Y quiero cerrar con la tan afamada frase: "En vez de dar tu diezmo a la iglesia, dáselo a los pobres"...
A lo que puedo contestarles: ¿saben que el diezmo sólo es el 10% del todo, cierto?... ¿Por qué te preocupa si
honro a Dios con mi 10%?
Quiero que tengas la tranquilidad de que siempre trato de apoyar al necesitado con mi 90% restante ¿es
mejor, no crees? ¡es mucho más!, solo que no esperes verme entregando dinero o recursos en las redes
sociales, porque de hacer esto, perdería totalmente el sentido la palabra "DAR".
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Cada quien de como propuso en su CORAZÓN, en el corazón nace el dar y también el NO dar a parte de
otras cosas perversas.
Sin embargo, Dios siempre nos sorprendía, justo cuando decíamos o pensábamos que no se podía seguir más
y había que tomar otro camino, Dios se hacía presente. Y cuando digo que se hacía presente, no solo estoy
pensando en que solo proveía, sino que lo hacía con un sello distintivo que nosotros podíamos reconocer,
como las cantidades exactas de lo que necesitamos o el momento exacto.
No se qué estes pasando, y qué necesidades tengas. Las cuentas llegan a tu casa y los pagos no esperan. Tu
dinero parece no ser suficiente y no hay ahorros.
Quizá no tengamos finanzas y los bolsillos casi rotos, pero mira como acaba el escrito:
“Con todo, yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salvación.”
Habacuc”. 3:17-18.
Hermano, gózate..! Dios no te dejará ni te desamparará; pronto pasará tu prueba y contarás con gozo: “Dios
ha sido bueno”.
Atrévete a honrar a Dios con tus finanzas, con tus diezmos y verás cosas que nunca has visto.
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