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CUARTA MEMORIA
SEMINARIO DE ADMINISTRACIÓN Y GERENCIA EDUCATIVAS
SAGEAC-ENCUENTRO SEIS
En el sexto encuentro del SAGEAC, del 11 enero 2019, nos propusimos un diálogo sobre la
administración y la gerencia educativas (AGE) desde la mirada decolonial de Catherin Walsh
(2017). El procedimiento propuesto fue, por un lado, dilucidar vínculos y aspectos comunes
entre lo pedagógico y lo administrativo gerencial de la educación y, por otro lado, estar alerta
del destino a donde nos llevaría la conversación.
Walsh hace una aclaratoria importante para nuestra maestría en las artes y las culturas del
Sur. Ella distingue entre descolonizar y decolonizar. El objetivo de cualquiera de los dos
términos, es la liberación de aquellas secuelas que en nosotros hayan dejado, como
Colonialidad, la colonización española y demás colonizaciones posteriores. Descolonizar
implica la erradicación de la Colonialidad al punto de quedar sin ella; de la misma manera
que “destapar” deja sin tapa el objeto tapado. Al respecto Walsh piensa que no hay punto
cero de la Colonialidad; así que en nosotros siempre quedarán restos y presencias de
Colonialidad de alguna manera. De allí que la autora proponga la palabra “decolonizar” que,
así como “degradar” solo quita grados dejando algo de lo mismo, decolonizar trabaja sobre la
Colonialidad para hacer consciencia de ella y ponerla bajo control y dominio de la voluntad
(hasta donde sea posible). El proceso de decolonizar se hace, entonces, permanente en la
persona, pues se trata de sacar a la luz de la consciencia, prejuicios, creencias, miedos para
saber que existen y que están allí.
En relación con el vínculo de la AGE y la pedagogía, podemos decir que como disciplinas
(modernas, racionalistas, objetivas), ellas nos resultan áreas separadas y en pugna, al menos
en el imaginario docente; pues mientras la una se centra en los aspectos técnicos contables, la
otra navega en terrenos filosóficos y de las ideas. Si miramos la AGE en vida diaria de las
instituciones de educación, vemos que tienen un uso instrumental, limitando a la distribución
de recursos y a los liderazgos locales para el logro de objetivos coyunturales de la educación.
En cuanto a la pedagogía en la vida diaria de la escuela, esta ocupa ciertamente espacios en
los discursos escolares, muy prolijos, por cierto; pero hay un gran vacío de esos discursos
pedagógicos en los relacionamientos cotidianos de las comunidades, los cuales son
predominantemente prácticas de la AGE. En este sentido, sabemos que entre los profesores lo
pedagógico está más en el decir que en el hacer o actuar (Manterola, 2011). Igualmente
observamos en la literatura educacional la ausencia de lo pedagógico en la AGE y viceversa;
por ejemplo, en un estudio reciente de Rico (2016) sobre gestión educativa, la palabra
pedagogía no aparece en todo el texto, excepto cuando el documento identifica dos oficinas
de la universidad donde trabaja la autora. Así las cosas, todo parece indicar que la
administración, la gerencia y la pedagogía son áreas de trabajo y de reflexión separadas en los
imaginarios, en el estudio y en la práctica de la educación en nuestro medio venezolano.
Sobre la separación y por consiguiente fragmentación del hecho pedagógico, de la gestión y
la gerencia, se crea evidentemente una tricotomía de lo que en suma se supone debe ir
indivisible en cuanto a proceso sistemático refiere. La interrelación de sus partes no da lugar
a mirarlas como fenómenos aislados, tanto así que tal desarticulación repercute en las
políticas de estados en las que parece que las acciones no están ancladas a los objetivos, por
lo menos no en la práctica. Además esta disgregación produce naturalmente el borramiento
de puntos de encuentros o coincidencias entre los objetivos del estado y los procesos
pedagógicos, siendo este último el que afectadamente se presenta.
En los enlaces que Walsh intenta entre lo pedagógico y lo decolonial, tampoco están
previstos los vínculos entre la pedagogía, la administración y gerencia, pues la autora hace
una segunda distinción teórica. Walsh separa la pedagogía en contextos de la escolaridad de
la pedagogía en contextos de la lucha social. En el contexto escolar de la tradición de la
educación, la autora considera la pedagogía como productora de instrumentos que facilitan la
enseñanza y la transmisión de conocimientos. En tanto que en el contexto de las luchas
sociales, la pedagogía tiene el sentido amplio que le da Paulo Freire al pensarla como
metodología (acción, práctica), la cual es seguida en las luchas sociales que construyen
modos de vida liberadas de la opresión, y que forman oprimidos conscientes como seres que
se saben y se sienten (ontología) parte de la causa por la que luchan, y conocen las razones y
las ideas (epistemología) que la justifican.
Tampoco es el caso que estos gobiernos ignoren esta realidad del extractivismo. El propio
Comandante Hugo Chávez declaro que la construcción del socialismo era para salvar la vida
ya que el capitalismo, el desarrollismo, el consumismo, estaban acabando con el planeta
Tierra (Cumbre contra el ALCA, Mar del Plata, Argentina, noviembre de 2005). El
Presidente Rafael Correa (2013) declaro que el extractivismo es “la gran oportunidad que
Dios nos ha dado para salir de la miseria”. Y la propia Presidenta Cristina Fernández de
Kirchner (2011) dijo en un encuentro con empresarios: “Lo que estoy proponiendo (…) es
volver al capitalismo en serio, porque esto que estamos viviendo, señores, no es capitalismo.
Esto es un anarco-capitalismo financiero total, donde nadie controla a nadie”, Walsh no
comenta que estos gobernantes, si bien se acogieron al dogma económico neoliberal de la
atracción de inversores extranjeros para la extracción/exportación de bienes naturales,
también consideran el extractivismo como una fase transitoria necesaria para crear un Estado
fuerte con ingresos para la inversión social y en infraestructuras, y para tener una base que
permita después, tener una economía no extractivista. (Lang, 2013:p.1)
Realmente el tema del extractivismo no fue tratado en el seminario, pero pudiera servir estas
notas para motivar la conversación del próximo encuentro.
Referencias
1. Carta de Principios del Foro Social Mundial (2001). Foro Social Mundial de las
Migraciones 2018. México (http://fsmm2018.org/carta-de-principios/)
2. Cortina, A. (2017): Aporofobia, el rechazo al pobre: un desafío para la sociedad
democrática. Paidos Iberica
3. Cristina Fernández pide al G20 acabar con el “anarco-capitalismo financiero” 3
noviembre 2011. Cubadebate
4. Declaración de La Habana, julio de 2018: (http://forodesaopaulo.org/declaracion-
final-del-xxiv-encuentro-del-foro-de-sao-paulo-15-al-17-de-julio-de-2018/)
5. Giroux, H. (1986). Teorías de la reproducción y la resistencia en la nueva sociología
de la educación: un análisis crítico. Revista Colombiana De Educación, (17).
Universidad Pedagógica Nacional. No. 17. Semestre 1986
https://doi.org/10.17227/01203916.5140
[1] Fuente no disponible públicamente. Publicación próxima de la UNEARTE. Puede solicitarse directamente al
autor freddysanchez@unearte.edu.ve
CASANOVA, P.(2003): Colonialismo interno una redefinición. México.
http://conceptos.sociales.unam.mx/conceptos_final/412trabajo.pdf