Está en la página 1de 17

Tema 3. 2. Renacimiento.

1. Introducción

¿Puedes creerte que la moda del


renacimiento fue considerada un estilo
natural dónde se liberaba el cuerpo y se
buscaba lo confortable?

Durante el Renacimiento el individuo


comenzó a tener mas conciencia de la
moda, no solamente de las clases más
acomodadas sino también la próspera
clase media.

El renacimiento comienza en el S. XIV,


alcanza su plenitud a finales del S. XV y
continúa su desarrollo a lo largo del s. XVI. Se expandió y se
transformó en una importante corriente cultural e intelectual, que
cobró impulso a finales del S. XIV.

El sistema feudal es reemplazado por la economía monetaria y las


mercancías de consumo, comenzaron a estar disponibles en un
mercado abierto. En el plano artístico las obras más influyentes
fueron las de Vitrubio, un arquitecto romano del S. I a. C., que se
interesó enormemente por la proporción y la simetría.

Según Vitrubio el cuerpo humano representaba la belleza de la


proporción en la naturaleza, lo cual tuvo una enorme repercusión en
las líneas de las prendas, que se acomodaban a estas
proporciones.

“El Hombre de Vitrubio”

El Renacimiento se extendió por toda Europa occidental, pero los


principales focos de actividad se asentaron al norte y centro de
Italia.

Los pañeros flamencos crearon los tejidos más lujosos del


continente utilizando como materia prima lanas importadas de
Inglaterra.

1
Durante el Renacimiento, Florencia se convirtió en el centro artístico
de Europa destacando, entre otros, Leonardo Da Vinci y Miguel
Ángel. El interés en el arte de la antigüedad. Esto trajo aparejado un
nuevo criterio referido al arte, la arquitectura y la moda. La ropa era
excesiva, artificial, y rígida cuando estaba comparada al período
anterior de formas naturales redondeadas y de una dignidad
relajada.

También los gremios fundados durante la Edad Media fueron de


gran importancia en esta época siendo los más poderosos y ricos
los relacionados con el trabajo textil. Estos gremios preservaban los
controles de calidad y fijaban los precios de las mercancías.

Durante esta época, floreció en Europa la literatura destacando,


entre otros grandes escritores como Tetrarca en Italia y Cervantes,
con el Quijote en España.

La innovación más importante de la época fue la imprenta,


inventada en 1452 por Johann Gutenberg. Anteriormente los libros
se imprimían a mano y se escribían en latín, pero la nueva clase
media (la burguesía que podía comprar libros) buscaba libros
escritos en su propia lengua. Así comienza a florecer el comercio
para todo tipo de libros.

El Renacimiento fue una época de viajes, inventos, comunicaciones


y descubrimientos, destacando:

- El descubrimiento de América por Cristóbal Colón.

- Roma reemplazó a Florencia como centro artístico de Italia.


Miguel Ángel pintó el techo de la Capilla Sixtina.

- Inglaterra y Francia adoptaban las ideas italianas sobre arte,


arquitectura y moda.

- Da Vinci creía que el círculo era la forma más pura y perfecta;


influyó en las nociones de simetría y proporción que
dominaron la estética durante el Renacimiento.

- La imprenta ayudó a propagar las ideas de Lucero, surgiendo


la iglesia protestante al norte y la católica al sur.

Comparado con los excesos de la moda del gótico, este estilo de


vestidos era natural, ya que se liberaba de todo lo anterior. Las

2
prendas de mujer acentuaban la forma natural de su figura
mediante su énfasis en la cintura; la falda era generosa con amplios
pliegues, y el corsé, muy ajustado, tenía un escote circular o
cuadrado. Al principio esta prenda se dividía en un corsé y una
falda larga. La manga sencilla y ajustada se cortó después para un
mayor confort y elegancia. Sobre esta prenda se llevaba otra
prenda sin mangas, cuya pieza frontal estaba abierta a modo de
abrigo.

Entre las innovaciones renacentistas en la indumentaria destacan:

- La gorguera, elemento usado por ambos sexos, resultado de


fruncir con un cordón el escote de la camisa, dando la
apariencia de volante. Los frunces cada vez se plegaban más
y mas, de manera que sobresalían mucho y agobiaban por su
altura. Se llegaron a hacer de gasa y con bordados de encaje.
A medida que le siglo avanzó, las gorgueras se hicieron cada
vez mayores y se convirtieron en un símbolo de privilegio
aristocrático.

La gorguera fue perfeccionada gracias a la utilización del almidón,


haciendo que este accesorio adquiera rigidez, además de teñir el
blanco y agregar un matiz azulado o amarillento. Para mantener la
rigidez de la gorguera también se utilizaban soportes debajo de la
misma que consistían en alambres forrados de seda. La gorguera

3
cada vez fue más plegada con lo que sobresalía mucho y
agobiaban por su altura. Más tarde se confeccionan de gasa, con
los característicos bordes plateados o dorados en encaje, se podían
utilizar en el escote del vestido o de la camisa.

Nota el “ESCOTE COMPROMISO”: En Europa


(salvo España, donde reinaba un estilo discreto),
las mujeres explotaron sus encantos femeninos
a través de la ropa, por medio del escote y del
“compromiso isabelino”, que consistía en abrir la
gorguera por la parte delantera y elevarla por
detrás de la cabeza con unas estructuras de
gasa en forma de alas para acentuar el escote.
Durante el reinado de Isabel I de Inglaterra, el
peinado ganó altura, se rizaba y se puso de moda el color pelirrojo. Se
afeitaban las cejas y la frente para imitar a las esculturas clásicas.

- Las cuchilladas, rasgaduras en la tela de las prendas a


través de las cuales se dejando a la vista el forro. Fue un tipo
de adorno adoptado por hombres, mujeres y niños, que
llevaban rasgada la ropa en incluso los zapatos.

El estilo “Acuchillado”, surge como resultado de la derrota de


Carlos el Temerario en 1477, cuando los suizos cayeron

4
sobre sus tropas en Nancy, para celebrar la victoria cortaron
los estandartes, las tiendas y los lujosos vestidos del ejército
de borgoñón, atando tiras a los desgarradores de sus
vestidos.

- Las agujetas, cordones o cintas que recuerdan a un sistema


de cordones de los zapatos y se usaban para sujetar las
calzas a la cintura del jubón o bien las mangas desmontables
a la sisa del mismo. La clase alta las llevaba con motivos
decorativos, lo que hacía el vestido mas suntuoso y
ornamental.

- Las mangas eran desmontables y constituían un método


asequible para cambiar el aspecto de una prenda. Podían ser
dobles, una muy estrecha que podían ir sujeta al interior y la
otra más amplia. Con el tiempo se hicieron muy anchas.

- Las pieles de animales eran de uso corriente en las


indumentarias masculina y femenina. Las favoritas eran de
lince y lobo.

- Los pañuelos y abanicos fueron los grandes accesorios del


Renacimiento; alcanzaron una gran popularidad durante el
reinado de Isabel I de Inglaterra, conocida por sus abanicos
de plumas y enjoyados como complementos de sus
suntuosos trajes. Los pañuelos, que utilizaban tanto hombres
como mujeres, tenían carácter decorativo y se llevaban en la

5
cabeza, alrededor del cuello o simplemente en la palma de la
mano. En el S. XVI, el pañuelo era de lino o seda y estaba
muy decorado con remates de encaje o ganchillo bordes
adornados con borlas y bordados. Fue considerado objeto
distintivo de lujo, los pobres tenían prohibido su uso por ley.

- Los sombreros realizados son materiales duros, bonetes de


copa alta y sombreros de ala ancha y copa baja que podían
llevarse rectos sobre la cabeza, ladeados o caídos hacia la
nuca.

En el Renacimiento, los estilos de vestir permanecieron más o


menos constantes durante el S.XV, pero a principios del S.XVI
comenzaron los cambios. Siguiendo la teoría de Leonardo Da
Vinci de que el círculo era la forma más perfecta, los trajes,
especialmente el femenino, comenzaron a tener un aspecto
visual más redondeado. Las mangas y faldas se ensancharon u
se emplearon tejidos tupidos, lujosos y suaves como el damasco
o el terciopelo, o brocados con adornos y extravagancias para
añadir belleza y volumen a este nuevo ideal de cuerpo.

Las prendas de los campesinos y de las gentes de clase media


no sufrieron estos cambios, pero todo ciudadano medio poseía lo
que los alemanes denominaban schaube, un sobretodo que iba
generalmente sin mangas y forrado de piel. Fue utilizado por
Lutero y se convirtió en la prenda típica de los que seguían la
doctrina, llamados humanistas.

En España, durante la primera mitad del S.XVI, los trajes de las


clases altas tomaron influencias de otros países europeos y eran
de un colorido muy vivo, pero a mediados de siglo la moda
cambió y comenzó a triunfar la moda autóctona, caracterizada
por prendas ceñidas, sobrias y de colores oscuros.

Debido a los cambios entre los S.XV y XVI, vamos a estudiar las
características de la indumentaria femenina y masculina en cada
uno de estos siglos.

2. INDUMENTARIA.

La moda era un pasatiempo de las personas acomodadas,


pero también durante el Renacimiento llegó a ser
preocupación de la próspera edad media.

6
Las comunicaciones y el transporte eran más rápidos y
efectivos, proliferaron las espléndidas mercancías de lujo, y la
gente empezó a desearlas.

Las prendas eran confeccionadas por sastres, y se adaptaban


a los gustos de la clientela. La tienda, hogar y el taller se
localizaban en el mismo lugar.

2.1.INDUMENTARIA FEMENINA.

Siglo XV

El vestuario femenino básico se


componía de una camisa interior
de lino blanco, de manga larga y
voluminosa. Sobre ella se llevaba
un vestido de cintura alta y,
generalmente, cuello alto de un
color contrastado. A finales de
siglo, al vestido se le añadió una
pieza rígida de tejido para tapar el
pecho, llamado tassel. Las
mangas se abrían en los hombros
y en los codos, en la parte
posterior, para dejar asomar por
las aberturas las mangas de la
prenda interior.

La pieza principal del


guardarropas femenino será la
cota o vestido interior.

7
Había tres tipos de verdugados, el tambor, muy popular en
Francia, el reducido, español y el de campana, para
incrementar el ancho de las faldas era requerido gran
cantidad de material.

Las prendas enfatizaban hombros


anchos, un largo y estrecho talle y
caderas anchas. La parte superior del
cuerpo femenino era oprimida con la
Basquiña, que era una prenda
interior tipo corsé de material rígido,
proyectando el pecho hacia arriba y
aplanándolo, este efecto se veía
potenciado al utilizar el peto, rígido y
triangular.

En España, el enorme lujo que


alcanzó el traje fue frenado por los
Reyes Católicos, que, dando ejemplo
de la sobriedad en el vestir, impusieron un traje mas serie y
elegante de colores oscuros y pocos adornos. Las mujeres
españolas seguían una indumentaria de marcado carácter

8
nacional, aunque con ciertas influencias extranjeras. Las
características de la moda nacional española femenina en
este período son:

- El tranzado, cofia con una larga cola dentro de la cual se


metía el pelo en una trenza.

- Los chapines, zapatos sin tacón con suela de corcho muy


alta y, a veces,
lujosamente decorados.

- Las camisas labradas y bordadas con ricas labores de


pasamanería.

- Las camisas listadas que llevaban cintas de colores cosidas


en la tela, y las escacadas, con adornos ajedrezados.

- Los alharemes y almaizares, dos tipos de turbantes moros.

- De Francia se adoptaron los vestidos


plegados, tocados de cuernos, rollos y
bonetes.

9
- De Italia gustaron las aberturas en las mangas de los
vestidos, a través de las cuales asomaban las mangas
blancas de la camisa.

Siglo XVI

En la última etapa del


Renacimiento, las prendas
enfatizaban unos hombros
amplios, un talle largo y unas
caderas anchas. Las mujeres
se vestían con abultadas
mangas y voluminosas faldas
que ocultaban sus caderas.
Durante el siglo XVI destaca la
reducción de líneas rectas y
geométricas gracias a la forma
del vestido y a dos prendas: el
cuerpo y el verdugo.

Isabel I de Inglaterra, 1563

Isabel I, era famosa por su suntuosidad al vestir, su estilo era


la rigidez, usaba gorguera Tudor, hombreas, cuerpo rígido,
verdugado y una peluca enjoyada. Se afeitaba las cejas y el
nacimiento del pelo.

Durante el reinado de Elizabeth I, de Inglaterra, aparecen los


tacones, ha trascendido que la reina estaba muy orgullosa de
sus minúsculos pies e hizo acortar sus faldas apenas sobre el
tobillo para exhibirlos.

-El cuerpo: era un corsé rígido colocado en punta encima de


la falda y sobre la camisa.

Estaba forrado de tela basta y bordeado de alambre e iba


endureciendo. Se mantenía en su sitio con armazores,
normalmente de madera, tan rígidos que suprimían la

10
redondez natural del seno y lo proyectaba hacia arriba. Su
efecto era a su vez el de alargar el talle.

-El verdugado: lo llevaban las señoras de clase alta y tenía


una estructura redondeada, producía un balanceo de la falda,
y le daba una forma acampanada que acentuaba la finura de
la cintura. Había diferentes tipos: el español (el reducido), el
francés (el tambor o de rueda), el italiano (un poco levantado
por detrás mediante un cojín, como el futuro polisón del siglo
XIX) y el verdugado de rollo.

A partir de la segunda mitad del siglo XVI, la creciente


importancia de la monarquía española impone en Europa el
estilo de la corte del emperador Carlos I de España, un estilo
sobrio, de colores oscuros, muy ceñido y con aspecto rígido.

En las mujeres se impone el uso


del verdugado. También, se impone el
negro como color básico, símbolo de la
austeridad y elegancia propias de
Felipe II, que adoptó ese color después
de su primera viudez y cuando se
descubre el palo Campeche en América.
Durante este período, se usaron
los gregüescos o trusas, que consistían
en dos grandes bullones acuchillados y
con un forro de diferente color a la tela
exterior.

Durante este período, la moda fue influenciada por España.


Las telas fueron endurecidas y adornadas con bordado o
joyería metálica.

11
2.2. INDUMENTARIA MASCULINA

12
En el renacimiento se mantuvieron las prendas de la Edad
Media, añadiéndole colores brillantes, en forma de parches,
rallas, cuadrados y triángulos.

Los nobles podían vestir a sus sirvientes con los mismos


colores que usaban ellos, en actividades específicas tenían
reservados ciertos colores, como por ejemplo, el rojo se
utilizaba en las actividades rurales.

Se dejaron de usar las calzas, siendo reemplazados por las


medias, acentuándose por medio de la bragueta la
entrepierna.

SIGLO XV

En el traje masculino, la prenda


principal era el jubón, que se llevaba
extremadamente corto e incorporó el
cuello alto. Se llevaba acolchado (se
acolchan con heno) y con hombreras
para aumentar la apariencia del tórax
y ensanchar los hombros y los
pectorales, lo que acentuaba el físico
y la masculinidad. Con la misma
finalidad se acolchaban los abrigos y
se colocaban un cinturón en la
cintura.

Se usaba mucho el sombrero, que podía tener distintas


formas: de copa baja, alta, con ala estrecha, sin ala, con
plumas o estilo bombín. A finales de siglo destaca el uso de
una gorra plana con ala levantada y adornada con una joya.

Los zapatos más populares los de punta muy alargada,


conocidos como zapatos a la polonesa o
cracoviana.

SIGLO XVI

Las prendas principales de la indumentaria varonil fueron


durante este siglo:

13
-El jubón, va a ser la prenda principal del vestuario masculino,
luego evolucionará para dar paso al chaleco y la chaqueta.

Como el siglo anterior llevaba hombreras (solían acabar en


punta) rellenos y armazores de ballenas que daban forma a la
prenda y le proporcionaban volumen adicional. Las mangas
se hicieron mas anchas, estaba acuchilladas y se ataban con
agujetas (rasgaduras de la prenda) en la sisa. Cuando la
manga era doble, la exterior era suelta y de distinto color. El
jubón podía tener varios largos, de forma que podía llegar
incluso a las rodillas. En este caso se hacía una abertura en la
parte central a través de la cual se podía ver la bragueta. Los
tejidos favoritos de algunos monarcas como Enrique VIII
fueron el terciopelo, el raso y las telas
de oro con perlas cosidas alrededor.

La bragueta fue otro accesorio


importante, remarcaba la ingle
masculina, se llevaba a la entrepierna
con un triángulo protector con relleno,
la bragueta iba sujeta al jubón.

Las calzas eran únicamente


utilizadas por hombres adinerados, ya
que eran muy caras de producir. Los
encañonados eran unas piezas
ajustadas tubulares que se llevaban
sobre las calzas para cubrir los
muslos.

Las medias evolucionan, ya que


eran realizadas con tejido plano
imitando la forma de la pierna, pero la
invención de la profesión del “tejedor”
se convierte en una prenda cómoda,
ornando el tobillo. Se llevaban muy
ajustadas a la pierna. Podían ser de
punto, de seda y de colores vivos como el amarillo, uno de los
colores favoritos.

Los calzones, a diferencia de las calzas o medias, no se


amoldaban a la forma de las piernas y eran más sencillos.

14
La camisa de lino blanco y de cuello fruncido y adornado
con bordados que posteriormente se convertirían en la
gorguera.

El sayo, era un traje con faldas que se vestía directamente


sobre el jubón.

Otras prendas,

La jarreteras (finas cintas anudadas por encima de la rodilla)


eran las que sujetaban las medias.

También utilizaban el justillo, (equivalente a la chaqueta


moderna de traje). Lo utilizaban abierto sobre el jubón, para
que permitiese que este pudiera verse, podía tener cuello alto

15
o bajo. Las mangas desmontables se suprimen poniendo un
ribeteado en el
contorno.

Una capa larga que iba


sobre el justillo y se
sujetaba holgadamente
sobre los hombros
cayendo en amplios
pliegues hasta los pies.
Generalmente iba
ribeteada en piel.

La zornea, es una capa


con mangas anchas y
ceñida a la cintura.

Otras capas; se usaba


el tudesco (una capa
corta que colgaba a
veces del hombro) y la
capa maneloville,
amplia, con el cuello
levantado y las
costuras laterales
abiertas dando lugar a
dos paños: uno
delantero y otro en la
espalda. Llegaba hasta
las rodillas y se
abotonaba desde el
cuello hasta el pecho.

El calzado, los zapatos


fueron reemplazados
por los “pato en pico”
que eran muy anchos y
redondeados en la
puntera. Con frecuencia
estaban acuchillados y,
en ocasiones adornados con joyas. Tenían tacones bajos, y
suelas y empeine de cuero, terciopelo o seda. Las botas, que

16
hasta el último cuarto de siglo se habían usado para montar a
caballo, se incorporaron a la indumentaria cotidiana. Estuvo
de moda una bota pegada que llegaba al muslo, dando a
veces la vuelta a la parte superior de diferentes maneras.

Los sombreros, el más habitual era la gorra plana o adornada


con pluma. También se llevaron bonetes blandos y bajos que
a veces tenían ala, la cual podía subirse por delante
sujetándola con una joya o bien doblando las alas laterales
sobre las orejas.

Visita la página web:


- https://historiadeltraje.com/tag/gorguera/

17

También podría gustarte