Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
La revelación de Dios
1. Introducción
Todo mundo tiene dudas innatas con respecto a la divinidad,
preguntas como ¿Existirá Dios? y si existe, ¿Cómo llegamos a
conocerle? O ¿Cómo nos podemos comunicar con él? Estas dudas
universales se responderán, pero con un mayor énfasis en el modo,
en el cual Dios se da a conocer al mundo.
2. El conocimiento de Dios
¿Qué es el conocimiento? Es la primera pregunta que debemos
respondernos para entender mejor este tópico. Charles Hogde nos
dice que el conocimiento es lo que percibimos de cualquier objeto o
cosa, ya sea intuitivamente o por medio de una explicación, esto es
lo que conocemos. Este conocimiento se forma de las cosas de
nuestro alrededor que son perceptibles y tenemos conciencia,
nuestra mente intuitivamente produce un concepto en nosotros lo
cual podemos llamar conocimiento. Algunas de estas cosas las
podemos demostrar, probar y muchas otras no. Es así que nuestro
conocimiento se forma de todo tipo de cosas visibles e invisibles.
Cuando hacemos referencia a algo difícil de conocer y entender,
como el mundo espiritual, los sentimientos, las emociones en cierto
grado tiene sus dificultades, pero con todo eso, sabemos que hay
ese algo, sea lo que sea sabemos que es, aunque incomprensible
pero tenemos la certeza de ello porque es perceptible, de la misma
manera sabemos que hay un Dios. Y lo que parece misterioso y
oculto, es en realidad conocible para nosotros por medio de la
revelación de sí mismo.
De igual manera Berkof comenta al respecto: el ser humano
desde su creación siempre ha tenido la interrogante suprema acerca
de la existencia de Dios. Desde las culturas más antiguas hasta las
más modernas siempre ha habido esta tensión existencial y
necesaria para responder a las preguntas más trascendentales de la
vida. Por lo cual por medio de la intuición, razonamiento o necesidad
se concluye inevitablemente en la existencia de Dios.
la teología es el tratado o discurso de lo que de Dios es revelado,
parte necesariamente de la existencia de Dios que además es
evidenciado y manifestado no solamente intuitiva, racional o
necesariamente sino de manera superior por medio de la Fe en las
escrituras. Esto se demuestra en la primera frase del Génesis donde
dice, ―En el principio, Dios creo…‖ (Gen 1:1) Esta afirmación nos
muestra, no, una idea impersonal, una fuerza o un algo; si no a un
Dios personal del que se originan todas las cosas, un Dios
trascendente y todo poderoso Creador. El cristiano acepta por fe esta
verdad, pero no una fe ciega, ilógica o irracional; si no que hasta
cierto grado puede ser conocida y entendida por el hombre.
Dios como un ser infinito supone que nosotros como criatura no
podemos llegar a siquiera imaginar su naturaleza total. La escrituras
muestran, por ejemplo Job 11:7 ¿Llegaras a la perfección de Dios?‖
Isaías 40:18 ―¿a que pues haréis semejante a Dios…? afirmando la
idea que no podemos llegar a conocer a Dios. Pero al mismo tiempo
Jn. 17:3 nos dice que la voluntad del Padre es que le conozcan para
que tenga vida eterna, y en 1 Jn 5:20 ―El hijo de Dios ha venido y
nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y
estamos en el verdadero, en su hijo Jesucristo. Por tanto, el
conocimiento que el hombre puede alcanzar de Dios es en el grado
en el que El soberanamente ha dispuesto revelarnos, pero
entendiendo la diferencia de naturalezas que hay entre la criatura y el
Creador. este conocimiento se ha dispuesto a la humanidad en forma
especial en su hijo Jesucristo.
3. La revelación de Dios
En muchas ciencias y disciplinas cuando se estudia algo, el objeto
a ser estudiado está por debajo del que la estudia. El que la estudia y
conoce tiene cierta potestad y dominio del objeto de Estudio, extrae
de ella todo el conocimiento que quiera por medio de cualquier
método o forma con tal de obtener la información deseada. No
obstante, en la teología no es el mismo caso. Como declara Job 11:7
―¿Descubrirás tú los secretos de Dios? ¿Llegaras tu a la perfección
del todopoderoso?‖ Esta pregunta retórica nos conduce a una única
conclusión y es que el hombre es incapaz de acercarse siquiera un
poco al conocimiento de los secretos y perfecciones de Dios. Esto es
muy claro, puesto que el hombre es creación de Dios, formados de
barro, finitos en nada semejantes a las perfecciones eternas del
Creador.
Berkof dice: el hombre puede conocer a Dios únicamente hasta donde
Dios se hace conocer. Dios ocupa el primer lugar entre los seres que
le comunican conocimiento al hombre y puede convertirse en objeto
de estudio para el hombre solo hasta donde este se apropia y refleja
el conocimiento que se le proporciona por medio de la revelación. Sin
revelación el hombre jamás habría sido capaz de adquirir el menor
conocimiento.
La palabra revelación denota acción de destapar algo, de quitar el
velo que lo oculta, de descubrir algo que previamente se desconocía.
Esta palabra tiene su origen latino y significa Develar, es la traducción
de la palabra griega ―Apokalipsis” del cual tiene el nombre el último
libro de la Biblia. Ordinariamente la palabra revelar no se utiliza con
objetos o cosas ni a personas, sino dar a conocer UNA VERDAD. la
doctrina de la revelación en la teología es según Oliver Buswell que
Dios se ha dado a conocer a sí mismo, su naturaleza, sus atributos y
su voluntad y toda verdad pertinente al hombre quien no podía
alcanzarla por sí mismo.
Esta doctrina se acostumbra a dividir en 2 partes: La revelación
General y la Revelación Especial. La distinción entre estas dos tipos
de revelación es definida de forma magistral por B.B. Warfield citado
por Luis Berkof.: La primera generalmente se dirige a todas la
criaturas inteligentes y por tanto gozan de ella todos los hombres; la
segunda se dirige a una clase especial de pecadores, a los cuales
Dios quiere hacer reconocer su salvación. La primera tiene por objeto
reconocer o satisfacer la necesidad natural de las criaturas de
conocer a si Dios. la segunda, rescatar del pecado y sus
consecuencias a los caídos y deformados pecadores.
1. La revelación general
La revelación general se fundamenta en la ley natural, se dirige al
hombre en general, y más particularmente a la razón humana. Incluye
la evidencia para creer en Dios aparte de Cristo y la biblia. Sin
embargo esta revelación solo muestra los aspectos generales de
Dios, por lo que no dice nada de Jesucristo, la Trinidad, la redención,
el perdón de pecados o el camino al cielo. Revela lo suficiente para
emitir condena pero es limitado y ha de ser complementado por la
revelación especial para salvación.
Tanto el ser más insignificante y pequeño hasta las más
inmensas, desconocidas y hasta los confines de universo mismo son
muestra de las perfecciones de Dios. Las leyes de la ciencia, la física,
la química, la materia, todo elemento perceptible e imperceptible, la
vida desde su inicio hasta su fin, las leyes naturales, los cambios y
todo cuanto el hombre ha podido descubrir y lo que aún no, son
pequeñas muestras de la manifestación de la omnipotencia y
sabiduría infinita que Dios ha desplegado.
Las 3 formas de esta revelación son:
a) La creación:
En la creación Dios se revela así mismo mostrando su poder y su
naturaleza divina. Dios es Espíritu, todopoderoso y también
trascendente, diferente a nosotros. Esto es manifestado a la
humanidad por medio de cosas visibles accesibles a nuestra
percepción. Una muestra de ello es la naturaleza humana que lleva
intuitivamente a la admiración de este ser.
―Porque las cosas invisibles de él, su eterno poder y deidad, se
hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo
entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen
excusa. ‖ Rom 1:20
―Los cielos cuentan la gloria de Dios, Y el firmamento anuncia la obra
de sus manos. ‖
Sal 19:1
EL CANON
1. Introducción
Hoy en día muchas de las más grandes religiones poseen un libro
representativo en el cual esta sus orígenes, sus normativas, sus
formas de culto, su forma de piedad y en general su regla de fe y de
conducta. Por ejemplo, el Corán para los musulmanes es su libro
sagrado, para los judíos la tanak y finalmente para los cristianos, el
libro considerado sagrado, es la Biblia contenida por los 66 libros, 39
del Antiguo testamento y 27 del Nuevo testamento.
La división testamentaria surge a raíz principalmente de Hebreos
8:13; 9:18-20; Mateo 14:24; 1 Cor. 11:25 En el cual, hace una
distinción entre el Antiguo Pacto y el cumplimiento del Nuevo
Testamento en Cristo. EL vocablo testamento viene del latín
“testamentum” que también significa voluntad pero que en la biblia se
la utiliza como traducción del griego “Diateke” que se refiere a última
voluntad o acuerdo entre dos partes que no necesariamente son
iguales. El proceso en el cual se estableció este grupo de escritos es
lo que nos concierne Por lo cual es lo que se tratara.
2. Concepto
El término «canon», tomado por los griegos de los semitas,
quienes a su vez probablemente lo habían tomado de los sumerios,
en su uso original significaba ―caña". Dado que las cañas se
usaban generalmente como varas de medición, la palabra adoptó
diversos significados relacionados con las medidas, entre ellos:
«regla», «norma», «ley», «límite», «lista»,
«índice». El termino Canon o regla, se aplica con diversos sentidos
1. Cualquier regla o vara que sirva para medir
2. En sentido prefigurado, modelo que permite fijar las
normas, especialmente de los libros clásicos; guía, norma
utilizado en (Ga. 6:16; Fil 3:16)
3. Doctrina cristiana ortodoxa, en contraste con la heterodoxa
4. Las escrituras consideradas como norma de la fe y de
conducta El término canon proviene del griego, aunque la idea
viene del hebreo.
5. El canon es también una lista normativa de libros
inspirados y recibidos de parte de Dios. Cuando hablamos de
canon del A.T. o del N.T. hablamos en este sentido.
En el lenguaje eclesial primitivo el uso del término ―Canon‖ era muy
utilizado:
―Kanon‖ se utiliza referido a la regla de fe, la
norma de la verdad revelada: (1 Clem 7:2) menciona el
―glorioso y santo kanon de nuestra tradición‖
IRENEO DE LYON: se refiere frecuentemente la
―regla de verdad‖, acerca de la cual atestiguan ―las
Escrituras y la tradición, pero que, sin embargo, es pervertida
por los herejes.‖
EUSEBIO DE CESAREA emplea el vocablo
―kanones‖ para las listas que compilo de las fechas de los
monarcas asirios, hebreos, egipcios. Se conocen como los
―cánones de Eusebio‖ a listas de referencias y citas de
pasajes paralelos de los Evangelios contenidas en su ―Carta a
Carpiano‖
LAS DECISIONES DEL CONCILIO DE NICEA(325)
fueron designadas como
―cánones‖, en tanto que eran las decisiones
disciplinares de los sínodos, que funcionaban como reglas
para los cristianos para vivir conforme a ellas
ATANASIO parece ser el primer cristiano que trata
el tema del canon en el sentido de lista de libros inspirados
cuando afirma hacia el 367 d.C. que ―El Pastor de Hermas no
forma parte del canon‖. Además, en su carta de Pascua del año
367, estableció el contraste entre ―los libros incluidos en el
canon y transmitidos y creídos como divinos‖, con ―los libros
llamados apócrifos‖ Que los herejes mezclaron con los libros de
la Escritura divinamente inspirada. (Mendoza, 2011)
Posteriormente, en la edad media, puesto que el
canon se había ―concretado‖ el término canon también se
refería a las escrituras como autoritativas; ―regla de fe‖.
Tomas de Aquino (1225-1274) dijo que ―Solo la escritura
canónica es la regla de fe‖. y en la Confesión de fe de
Westminster (1647) tras el reconocimiento de los 66 libros
añade: “Los cuales son proporcionados por la inspiración de
Dios para ser regla de fe y conducta‖. Afirmando la sagradas
escrituras como el canon o Regla de fe. Hoy la palabra Canon
solo se utiliza para referirse a la lista de libros aceptados como
inspirados, y no como ―regla o patrón de medida‖. Pero el uso
histórico implicaba que el canon es una implicación de la
inspiración. Por tanto regla de fe y conducta.
Por tanto, el termino Canon será utilizado como Atanasio lo hizo,
para referirnos a la lista de libros de fueron Inspirados por Dios y
que la iglesia los compilo.
La canonicidad de las Escrituras tiene que ver con cómo los libros
inspirados por Dios fueron reconocidos por el pueblo de Dios. La
inspiración tiene que ver con cómo los libros de la Biblia recibieron su
autoridad. La canonicidad tiene que ver con cómo esa autoridad fue
reconocida. La canonicidad tiene que ver con la aceptación de los
libros inspirados.
EL Canon del Antiguo Testamento
EL canon del antiguo testamento se formó por medio de un
proceso inherente a la historia de Israel. Por lo cual, no fue en un
momento establecido o un hito en el cual marco la historia en el
proceso de formación del Canon del Antiguo Testamento.
1. Método de Canonización.
Para que un libro sea considerado, podría decirse, como William S.
L. Dice ―Estos presentan, de una forma que no lo hacen los libros
apócrifos, los acontecimientos y el significado de la historia de la
redención. Se trascienden a sí mismos, apuntan a un día y a una
liberación que están más allá de su propio alcance. Según el
testimonio de estos mismos libros, la historia de la redención desfila a
través de sus páginas hacia un cumplimiento futuro‖
Young expresa con respecto a la forma de ver la inspiración y su
posterior reconocimiento, que ―el creyente posee una convicción
que las escrituras son la palabra de Dios, y esta es una convicción
que es implantada en la mente por la Tercera Persona de la trinidad.
El pueblo de Dios ha poseído esta convicción desde que se escribió la
primera porción de las Escrituras.
No hay duda de que el verdadero Israel reconoció
inmediatamente la Revelación de Dios‖ Por tanto se reconoció a los
libros canónicos o inspirados por medio de su testimonio Interno el
cual en unidad apuntaban a la redención, por testimonio externo y el
reconocimiento de su autoría por una figura emblemática o un
profeta, confirmada por el testimonio del Espíritu Santo.
2. Proceso de Canonización
En el antiguo testamento no tenemos evidencia de una discusión
abierta que ponía en tela de Juicio la autoridad de los libros. Los
libros de la Biblia hebrea son tradicionalmente 24, el primer grupo es
el Torah compuesta por los primeros 5 libros (Génesis, Éxodo,
Levítico, Números y Deuteronomio), el segundo grupo es el de los
Nebihim, o Profetas, que se subdivide a la vez en los 4 Profetas
Anteriores (Josué, Jueces, Samuel y reyes,) y los 4 Profetas
Posteriores (Isaías, Jeremías, Ezequiel, y el Libro de los doce
profetas menores). EL tercer grupo se le denomina Ketubim o
Escritos, Comprenden los once libros, Los salmos, Proverbios y Job,
después un grupo 5 Rollos llamados Meguillod, (Cantar de los
Cantares, Ruth, Lamentaciones, Eclesiastés y Esther), por ultimo
Daniel, Esdras. Nehemías (considerado como uno solo) y Crónicas.
Este es el orden de la biblia hebrea en la cual se basa la Biblia
cristiana posteriormente con algunas variantes en el Orden.
El proceso de formación de estos grupos, como ya dijimos, fue
algo inherente a la historia del pueblo hebreo, por lo cual estas 3
secciones se desarrollaron y se establecieron hasta algún punto o
hito histórico.
a) El pentateuco o Torah
Desde los inicios de la historia hebrea se le atribuyen a un cierto
número de escritos autoridad divina por lo cual eran consideradas
como normativas.
Para el pueblo de Israel, el principio de canonicidad comenzó
cuando recibieron la ley por medio de Moisés en el monte Sinaí. Dios
pronunció palabras duras; el pueblo se comprometió
a obedecerlas que las puso por escrito Ex. 24.3s. Las palabras de
los profetas, desde Moisés eran para el pueblo, la voz de Dios, por lo
cual su obediencia y preservación eran importantes. Pasando las
generaciones los hebreos tenían más conciencia de la palabra
hablada por sus antecesores, guardaron y atesoraron los
mandamientos y las promesas hechas a los patriarcas como palabras
sagradas que servían de fuente de fuerza y consuelo.
Esto se ve en el libro que Moisés proclama como Libro del Pacto
Éxodo 24:7, 2 reyes 22-23;2Cro 34 y posteriormente Esdras lee el
libro de la ley al pueblo Neh 8:9, 14-17; 0:28-39; 13:1-1-3. Estas
menciones del pentateuco hace alusión que desde Moisés, ya
existían un numero establecido de Libros Ex. 40:20, Dt. 31:24-26. La
razón por la cual Moisés escribió el mensaje de Dios es que debían
ser preservados para las futuras generaciones. La mejor forma de
resguardar las palabras de Dios fue por medio de Escritos y esto
posteriormente dio lugar para el surgimiento de las secciones y
posteriormente del Canon.
Es probable que los cinco libros de Moisés, llamados también la
Ley (Torá) o «Pentateuco», se hayan concluido básicamente con la
forma actual alrededor de la época de David 1000 a. C. Es posible
que alguna revisión menor haya continuado realizándose a lo largo
de los siglos aproximadamente hasta el tiempo de Esdras (400 A.C.).
Pero a ciencia cierta no se sabe con certeza cuando fue que el
Pentateuco tomo la forma actual en la que se conoce. Y es muy
probable que pudo haber sido complementado con algunos relatos
que pasaron en forma de tradición oral y también por medio de otros
autores sin llegar a ser sacrilegios o profanaciones, teniendo como
base los escritos de Moisés. A esto hacen alusión estos pasaje de
Josué Jos.24:26 Samuel 1 Sam 10:25 en el cual ya se ve
sobreentendido que existían un libro de la ―ley‖.
Por muchas otras referencias dentro del Antiguo Testamento y
posteriormente la literatura intertestamentaria el Pentateuco se cerró
en una época muy temprana, por ser la primera sección del Antiguo
Testamento que narra historia primigenia, y que además fue escrito
por un profeta en un apoca muy temprana. Para la época de Esdras
y Nehemías. no hay duda que ya existía la Tora con la posibilidad de
que fue escrito mucho tiempo atrás. Otra evidencia es que después
del regreso del exilio se dio la ruptura definitiva entre los samaritanos
y judíos que llevo al primer grupo a guardar su propia versión de este
grupo de 5 libros.
b) Los profetas o Nebihim - Los escritos
o Ketubim
Este segundo grupo llamado Profetas compuesta por Josué,
Jueces Reyes y Samuel, fueron incluidos, aunque fueron autores
desconocidos pero que tenían la autoridad de profeta, quien
representaba a Dios delante del pueblo. Los profetas fueron ya
anunciados. Deut.18:18. Los profetas sabían que eran palabras de
Dios y demandaban obediencia. Isa. 8:5; 31:4; Jer 3:6; Eze. 21:1;
Amos 3:1. sus escritos tenían autoridad y eran considerados como
inspirados.
Se acostumbraba dividir a los Profetas en dos grupos, Anteriores y
Posteriores. Los Profetas Anteriores son los libros históricos: Josué,
Jueces, Samuel y Reyes. Los Posteriores son los grandes
predicadores de Israel: Isaías, Jeremías, Ezequiel y los profetas que
forman el Libro de los Doce. A veces llamados «menores» por ser
relativamente breves. Estos doce escritos con frecuencia se reunían
en un solo rollo. La edición definitiva de los Profetas Anteriores, que
relatan la historia del pacto de Israel desde la conquista de Canaán
hasta el cautiverio babilónico (1250-550 a.C.), no pudo haberse
realizado antes del exilio. Sin embargo, las narraciones son
virtualmente contemporáneas a los acontecimientos que allí se
relatan.
En virtud de ser la continuación de la historia de las relaciones de
Dios con Israel, los libros de los Profetas Anteriores gozaron de la
aceptación y la reverencia del pueblo del pacto. Los títulos
vinculados a los grandes líderes de Israel en especial a Josué y
Samuel, acentuaban su honor; asimismo por hablar de profetas
como Elías y Eliseo y presentar una interpretación de la historia de
Israel semejante a la de los grandes profetas, su prestigio era aún
mayor. No se ha determinado con certeza cuánto tiempo después de
Malaquías se reunió a los Profetas posteriores en una colección.
Quizá muchos de los escritos pre exílicos, como Amós, Oseas,
Miqueas, Isaías, Sofonías, Jeremías, Nahúm y Habacuc, ya habían
sido reunidos en una colección de escritos autorizados durante la
época del exilio, cuando la destrucción y el cautiverio sacudieron de
tal forma al pueblo de Judá que reconocieron que Dios mismo les
había hablado por medio de los profetas, cuando les advirtieron del
desastre.
La situación de los Escritos es aún más compleja dada la
diversidad en la naturaleza de los distintos libros. Salmos, Proverbios
y Job son libros poéticos y devocionales. Cinco de los libros, escritos
en rollos distintos, se leían por separado en las diferentes
celebraciones anuales: EL Cantar de los Cantares para la Pascua;
Rut en Pentecostés; Lamentaciones el noveno día del mes de Ab, el
día en que Jerusalén fue destruida en el año 586; Eclesiastés en la
Fiesta de los Tabernáculos; Ester en Purim. Daniel es el único profeta
y en la Biblia Hebrea los Escritos concluían con las narraciones
históricas de Esdras, Nehemías y Crónicas.
La manera con que se agruparon estas 2 divisiones es algo que
no se puede saber a ciencia cierta, pero es sabido que una de las
directrices es que fueron ordenados por el carácter literario, ya sea
profético o narrativo. Aunque aparentemente este algo confuso y
―desorganizado‖ esto es muestra de que estos libros se
desarrollaron paralelamente a los accidentes históricos del pueblo
judío en un progreso. Se cree que cada libro tuvo un proceso
independiente en el cual es muy probable que se haya canonizado
individualmente y posteriormente organizado en estas 2 secciones en
un tiempo posterior cuando se hubo reconocido que la actividad
profética había cesado.
c) Las 3 divisiones establecidas.
La fecha en el que probablemente se ha organizado estos grupos
fue alrededor del 165 A.C. La tradición de 1 Macabeos 1:56; 2
Macabeos 2:13 nos dice que Judas, el autor, recopilo los escritos y
es probable que el los ha organizado en el modo en el que los
tenemos con Crónicas al final por las referencias que hacen de ella
Mateo 23:35 y Lucas 11:51 haciendo referencias desde Gen 4:3-15 a
2 Cr. 24:19-22. Esta división es ya hecha hacia el fin del Siglo II A.C.,
cuando en el prólogo del libro de Eclesiástico se mencionan estas 3
secciones (La ley, los profetas y los otros libros de nuestros Padres)
pero se deja entrever que aún no había un nombre establecido para la
tercera sección del canon. A la primera sección la llama Ley, la
segunda sección, Profetas, pero a la tercera sección simplemente los
describe como los ―escritos ancestrales‖ o ―el resto de Libros‖
También se hace referencia a la división de estas 3 partes y sus
respectivos contenidos es en una Bataitha (70-200 D.C) citada en el
talmud Babilónico Baba Bathra en el cual se asigna autoridad
inspirada a os 24 libros. Esta corrobora el orden del Pentateuco, y
también de los 4 profetas anteriores y cuestiona la orden de los
siguientes libros del que siguen el Orden Hebreo. En 1 Macabeos
12:9 escrita aproximadamente en el siglo 100 a.C. ya se mencionan
los ―libros sagrados que poseemos‖. En 2 Mac 2:13, datado en el
100 A.C se nos habla de una biblioteca, se cree que para este
tiempo de Esdras y Nehemías ya había un canon establecido. Jesús
menciona las 3 divisiones del antiguo testamento. En Lucas 24:44 en
donde Jesús habla, menciona ―la ley de moisés, los profetas y los
salmos‖. ―La ley y los profetas‖ Mat 5:17; 7:12; Luc 16:16 en los
cuales los escritos y los profetas se tomaran en un mismo grupo.
d) La evidencia de Josefo
Josefo en su primer volumen de su tratado Contra Apion escrito
hacia el año 100 d.C. dividía el canon hebreo en 3 secciones con 22
libros.
a) 5 Libros son de Moisés; contienen sus leyes y las
enseñanzas acerca del origen de la humanidad; tiene su
conclusión con la muerte de Moisés.
b) Los profetas que vinieron después de Moisés
consignaron en 13 libros, hasta Artajerjes. Estos libros
comprendían la disposición de la Septuaginta, son Josué,
Jueces – Ruth, Samuel, Reyes, Crónicas, Esdras – Nehemías,
Esther, Job, Daniel, Isaías, Jeremías- Lamentaciones, Ezequiel,
y los 12 profetas menores.
c) Los 4 libros restantes podrían ser: Salmos, Cantar
de los cantares, los proverbios y Eclesiastés. (probablemente)
e) Discusiones en Jamnia
Aproximadamente al mismo tiempo en que Josefo escribía su
obra, las escrituras hebreas estaban siendo debatidos por los rabinos
que tenían su sede en Jamnia (90 D.C) por la preservación de sus
libros sagrados y su religión ya que el templo judío había sido
destruido (70 d.C.) y se estaba esparciendo una nueva religión que
hacían peligrarlos, esto es el Cristianismo.
Entre algunos libros que tratados eran: Ester (que no menciona a
Dios), Eclesiastés (por sus estallidos de escepticismo y sugerencias
al hedonismo, Proverbios (Por las supuestas contradicciones
internas y Ezequiel. El conflicto con estos libros, no eran que tenían
que incluirse, porque ya estaban, sino al contrario, se debatía si eran
lo suficientemente sagrados para que continúen estando en el
Canon. En este mismo periodo de Josefo y Jamnia, existe otra
referencia de los 24 libros en el Libro de Apocalipsis de Esdras o
denominado en otros lugares como 4 Esdras, escrito después de la
destrucción del templo. En este libro en los versos 14:45 se
mencionan los 24 libros, que parecen ser los 24 libros de la biblia
hebrea.
f) Los rollos de Qumran.
Los descubrimientos hechos en el Mar muerto en los años 1947,
sorprendentemente se encuentran todos los libros del Antiguo
Testamento con la excepción de Ester y con la inclusión de Judith,
Jubileos y el libro de Enoc. También se incluyeron varios libros
normativos entre los cuales se distinguían comentario que tenían un
prólogo identificando los libros como revelación entre los que se
podía distinguir los libros canónicos. Es muy probable que los
Esenios concordarían con los libros de autoridad divina, con quizás
algunos diferencias con los Escritos.Ya en los tiempos de Jesús, no
se divisa ninguna discusión con respecto a la autoridad de los libros
del antiguo testamento. Cuando Jesús y sus oponentes citan las
escrituras del antiguo testamento, tanto Jesús como los fariseos y
escribas no descalificaban los argumentos. Por tanto se puede
concluir que con toda confianza que en los tiempos de Jesús ya
existía un consenso entre los judíos sobre el número de los libros
considerados como escritura inspirada y autoritativa del antiguo
testamento. Sin embargo no se puede asegurar lo mismo con
respecto a Ester, Eclesiastés o el Cantar de los Cantares por que no
existen evidencia de ello.
3. El Antiguo Testamento Griego
Desde que Alejandro el Magno fundo Alejandría Egipto en el año
331 A.C. hubo un sector judío que creció considerablemente por
diferentes circunstancias, ya sean los conflictos en Judea o las
facilidades y ventajas de una ciudad pujante. Este grupo de judíos
poco a poco fue dejando su idioma materno (hebreo) hasta el punto
en que fue necesario la tenencia de una versión griega de las
escrituras. La traducción griega fue llevada a cabo poco a poco
durante los siglos III y II A.C. (250- 150). Primero la ley porque era
imprescindible para los servicios judíos en las sinagogas.
Posteriormente se la atribuyo origen legendario, la leyenda que decía
que era obra de setenta o setenta y dos ancianos de Israel que
habían sido llevados a Alejandría con ese propósito. Es por esta que
la versión griega recibió el nombre de SEPTUAGINTA (Lat. Setenta).
Parte de la leyenda cuenta que los setenta ancianos tradujeron
el Pentateuco en setenta y dos días consiguiendo una aversión en la
que todos estaban de acuerdo. Esta leyenda se centra en una carta
de Aristeas a finales del siglo II, Tolomeo II Filadelfo que reino en
Egipto. Ordeno por medio de su bibliotecario Demetrio Falereo que
hiciera una traducción. Por instrucciones del rey, Aristeas viajó de
Alejandría a Jerusalén para pedir ayuda al sumo sacerdote Eleazar,
que enviará un equipo de traducción. El sacerdote envió a 72
ancianos, los cuales tradujeron en 72 el pentateuco. Esto
posteriormente se extendió a todo el Antiguo Testamento. Filón, el
filósofo judío de Alejandría atribuía inspiración y autoridad a esta
versión, al igual que Justino Mártir en su Carta de Aristeo (160 d.C)
El orden de los libros en las copias de la septuaginta que han llegado
a nosotros difiere del orden tradicional de la Biblia hebrea y es el que
está detrás del orden evangélico del Antiguo Testamento. Los libros
añadidos son los que posteriormente Jerónimo las denomina
Apócrifos (ocultos), esto es a: Tobías, Judit, 1-2 Macabeos,
Sabiduría, Sirácida (Eclesiástico) Baruc, Carta de Jeremías (Baruc
6); Ester 10,4-16,24 y Daniel 3,24-90 Esta versión es, la que en
tiempos de Jesús era conocida, utilizada y a la postre fue como el
abono para la llegada del evangelio. Fue por esto que el día del
nacimiento de la Septuaginta fue comparado como el día en que
Israel hizo el becerro de Oro. Los cristianos lograron comprender de
una mejor forma las escrituras que eran mal interpretadas por los
judíos por lo cual adoptaron un libro que converja en Jesucristo.
Posteriormente se produjeron versiones para los judíos
específicamente, como la versión de Aquila y una más popular de
Teodosion (En esta versión, Daniel es superior que a la versión de la
septuaginta).
4. El Canon Cristiano en la Zona Oriental.
a) Tertuliano
Desde la segunda mitad del siglo II d .C se vio la necesidad de
una traducción al latín, principalmente en las provincias Romanas
Occidentales como Cartago y la misma Capital Romana. Tertuliano
de Cartago destaco a los finales del siglo II fue probablemente el
primero que Denominaba a los dos Testamentos ―Instrumentos‖
(en latín: Instrumenta) .El antiguo testamento era el Instrumento
Pleno de la literatura Judía. Aunque no hay una lista brindada de lo
que él creía que contenía el Antiguo Testamento, se cree que
adoptaba la Septuaginta ampliada. Se sabe que por medio de citas,
consideraba autoritativas el cantar de los Cantares, Sabiduría de
Salomón y la carta de Jeremías, las partes añadidas a Daniel, Bel el
Dragón y el cantico de los 3 hebreos, El apocalipsis de Esdras (4
Esdras), con respecto al Libro de 1 Enoc, no hay evidencia que lo
encontrara lugar en el canon aunque lo aprobaba. En la iglesia Etíope
si lo reconocen como autoritativa. Otro de los escritos autoritativos
para Tertuliano fueron los Oráculos Sibilinos, eran poemas judíos y
cristianos compuestos en idioma profético compuesto entre el 200
A.C. y el 259.d.C.
b) Jerónimo (346- 420)
Su nombre completo era Eusebius Sofronius Hieronymus en latín.
Nació el 346 d.C. en Estridon, en Dalmacia. Fue educado en Roma
en la escuela de Donato, una de las escuelas de gramática más
importantes y finalmente se licencio en Literatura griega y Latina. Sus
primeras obras cristianas fueron una nueva edición de los evangelios
y del salterio en latín. Posteriormente produjo una revisión de los
Salmos, para lo cual aprovecho la Hexapla de Orígenes en Cesárea.
Posteriormente convencido de la necesidad acudirá a los originales
hebreos, se dedicó traducir a partir de esta, terminando su obra en el
405 d.C. esta obra incluía su nueva versión del salterio hebreo. Se
dice que tuvo que acudir a judíos para que le ayudaran en la
comprensión del hebreo, entre ellos esta Tiberias, Lydda y Bar Anina.
Su estudio fue muy profundo a tal punto que inevitablemente
examino la cuestión de la Septuaginta Ampliada. Reconoció el
número del Canon Hebreo con 24 libros que creía que eran los 24
ancianos del Apocalipsis, pero prefería considerarlas 22 por el
número de letras del alfabeto hebreo. Jerónimo hace solo una
distinción entre los libros a diferencia de Atanasio. Para Atanasio
existían 3 categorías, los Canónicos, los libros que no están dentro
del Canon pero que son edificantes y los apócrifos (los que son
totalmente subversivos al evangelio). En cambio para Jerónimo,
todos los libros que no son considerados Canónicos son
denominados Apócrifos que equivalen a los libros edificantes de
Atanasio pero también que no pueden ser considerados para
formular doctrina. La versión latina la denominó Vulgata Latina.
c) Agustín (354 – 430)