Teoría del Estado

De manera explícita o de manera implícita existe una teoría, nosotros podemos ir formulando
nuestra teoría cuando nos enfrentamos a un problema de la realidad.

No hay oposición en lo que es la teoría y la práctica y esto se puede apreciar de cuatro formas

La teoría siempre va a ser una consideración objetiva, imparcial de los hechos y de las verdades

Teoría opuesta a la práctica.

Un juicio es la negación o afirmación en la diferencia de una idea, con la relación o no que existe de
un concepto a otro.

Es la relación que existe entre un sujeto y un predicado.

Ya sea de forma explícita o implícita siempre hay teoría. la teoría es un conocimiento puro, una
reflexión o consideración contemplativa y es opuesta a la práctica.

En todas las ciencias y artes hay una parte teórica o especulativa en la que se establecen postulados,
leyes, formulas, reglas y normas de cómo se logra un fin exterior objetivo inmediato, es decir hay
una parte práctica, es decir, tanto en las ciencias naturales como sociales, hay una parte teórica y
práctica, a esto se le denomina técnica.

Teoría opuesta a la hipótesis.

En esta se procede llevando a cabo una serie de pasos, observación, experimentación, descripción
unitaria (exenta de contradicciones), formulación y explicación de sus leyes y causas necesarias.
Cuando tenemos una explicación y esta no excluya a otras, estamos hablando de una hipótesis. Esta
hipótesis logrará ser teoría cuando logre ser una sola explicación a los hechos. Dicha teoría conduce
al descubrimiento de nuevos hechos y eso respalda y confirma su existencia como teoría.

Teoría opuesta a la doctrina.

Es muy frecuente que la teoría y la doctrina se usen como sinónimo.

Pero el termino teoría se contrapone a la doctrina, porque con un enfoque estricto y riguroso el
termino teoría es siempre una consideración objetiva, cuando hablamos de teoría hay que tener
claro que debe ser objetiva e imparcial de los hechos y las verdades.

Cuando estamos en la doctrina y estamos frente a los hechos y verdades… es una decisión de la
voluntad basada en la aceptación de ciertas categorías axiológicas

En una se toma partido y en otra no, es decir, la teoría es objetiva y por consiguiente la doctrina es
subjetiva.

En la doctrina los juicios axiológicos imprimen su matiz definitivo a los hechos y verdades que
exponen, es decir, hacen énfasis en la doctrina.
Algunos autores consideran que muy en el fondo la teoría predispone y sirve de base para que se
fundamente la doctrina.

Todas las normas o generalmente todas las normas tienen un aspecto prescriptivo y un aspecto
valorativo.