“Los hombres perduran por sus obras, pero sus pensamientos trascienden las barreras del

tiempo y del espacio”.

Honorables miembros del jurado calificador, autoridades municipales, grupos liberales y

público en general:

Muy buenos días, mi nombre es Melissa Guadalupe León Estrada, me siento muy
orgullosa de pertenecer a la Escuela Secundaria Técnica N°53, de La Trinidad, Guasave,
Sinaloa y exponer ante ustedes:

“LA VIDA Y OBRA DE DON BENITO JUÁREZ GARCÍA”

La emoción me embarga al recordar a tan ilustre personaje que figura en las páginas de
nuestra historia como un ejemplo de tesón, inteligencia y un gran amor a su patria por la
que ofrendo todo su esfuerzo, dedicación y la vida misma defendiendo los ideales del
liberalismo para la instauración de la República agredida por la usurpación de un imperio
ajeno a los intereses de pueblo mexicano y representante de las fuerzas oscuras de la
traición y del antinacionalismo.

De origen zapoteco, nació en sierra de Oaxaca en un caserío llamado San Pablo Guelatao,
alejado de toda civilización y donde la educación no llevaba para nadie. Al quedar
huérfano a temprana edad fue recogido por un tío que lo ocupo en las faenas del campo,
lo enseñó a leer y le inculco deseos de superación.

Poseedor de un espíritu inquieto y buscando mejores oportunidades para superarse,

decide emigrar a la ciudad de Oaxaca, encontrando el apoyo de su preceptor, el
Franciscano Don Antonio Salanueva, quien influyó en sus deseos de aprendizaje y lo
motivó a la carrera eclesiástica.

Es preciso señalar que el transcurrir de su vida política y el implacable asedio de sus

detractores y acérrimos enemigos, encontró el apoyo de su esposa, Doña Margarita Masa
de Juárez, madre de sus hijas, compañera ejemplar en todas las vicisitudes que lo
acompañaron en su lucha ideológica.

Desde el exilo fue requerido por Juan Alvares, liberal posicionado en la presidencia de la
república para ocupar la Secretaria De Justicia, donde crearía y lograría la promulgación de
la "Ley Juárez" que suprimía los fueros y facultaba al gobierno federal para nombrar a la
suprema corte de justicia, La chispa que produjo el incendio de la reforma"

Fue larga su lucha para lograr sus objetivos, los cuales nunca perdió de vista y donde
ejemplifico con la austeridad y humildad de siempre lo caracterizó.
Aprovechando su momento histórico, promulgo "las Leyes de Reformas" que acabaron
con el fuero eclesiástico separándolo de su intromisión en los asuntos del gobierno. Su
obra, presente en la libertad e independencia del México actual nos invita y compromete
para la constante preparación en la búsqueda de un mejor país donde se logren mejores
oportunidades de vida y podamos decidir sobre los rumbos deseados.

Los mexicanos estamos viviendo un momento histórico que nos llama a todos a dar la
mejor de nosotros mismos para construir una sociedad más armónica, plural, inclusiva,
justa, intercultural, productiva y feliz.

Me despido de ustedes con su frase célebre "Entre los individuos, como entre las
naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz"