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EDUCACION PARA LA ETICA

Para formar a las personas requerimos de la educación moral que permita desarrollar una
conciencia crítica de la realidad, de las normas sociales y morales actuales de manera que
podamos construir formas mas justas para convivir en una sociedad en la que es necesario
también construir la paz y el bienestar.

Es además necesario profundizar la conciencia moral de la persona, para actuar libre y


responsablemente; a través de la educación se forma la conciencia moral como un proceso
de estimulación y motivación hacia los valores presentes en las actitudes de cada persona.

Cada persona va direccionando sus valores en lo que llamamos el discernimiento ético,


optando por lo más conveniente ese modo de actuar ético se traducirá en lo justo lo correcto
lo propio lo oportuno lo que corresponde al bien personal y al bien social.

Cuando se adquieren los principios que guían nuestras elecciones y decisiones propias se
desarrolla el juicio moral, Sabemos que de una sólida educación moral depende el futuro
de nuestro país y del mundo, por ello como educadores no podemos desinteresarnos en
la formación de nuevas generaciones con capacidad de orientarse en la vida, de discernir
el bien del mal, de generaciones con una salud mental y moral, de formar hombres con
esperanza con fuerza y valores claros.

La educación moral y la educación cívica coinciden en la libre aceptación de las normas


morales universales que son fundamento y garantía para una justa y pacífica convivencia
entre los seres humanos y también para lograr una verdadera democracia, basada en la
igualdad de todos, reconociendo sus derechos y deberes, aceptando sus diferencias y
diversidades culturales. Los educadores debemos ser los primeros en asumir la
responsabilidad compartida respecto a la construcción de una sociedad justa, solidaria, de
respeto intercultural y de respecto a nuestra naturaleza y ecología.

Como formadores para influir en los discentes debemos lograr la capacidad de discernir
entre lo prudente, lo correcto, lo propio, lo oportuno y aquello que nos lleva al bien común y
bien personal, la búsqueda y transmisión de la verdad es decir la esencia de la educación
cuya finalidad es buscar la perfección de las personas.

En dichos procesos formativos de los docentes debemos abordar la dimensión personal y


social del educador y su formación debe apuntar al carácter ético respecto a los objetivos
personales y sociales, así avanzaremos hacia una sociedad educada genere procesos de
VIDA HUMANA, (Tueros 1997) señala el dialogo la concertación participación responsable en
la cual hayan espacios para la defensa y protección de los derechos y deberes humanos.

Nuestros compromisos para avanzar hacia una sociedad educada y educadora, será la de
contribuir a formar educadores que humanicen, al respecto debo mencionar los sgtes:

 Un educador que humaniza en primer lugar debe haber descubierto el sentido de su


vocación en propia vida, construye su ser persona en relación al rol que le toca
como educador en varias dimensiones , no solo el ejercicio de su profesión como
transmisor de conocimientos, o ser un profesional eficiente, sino que asume un
compromiso consigo mismo y con los demás, en actos concretos que muestran su
lado espiritual, su compromiso, vocación de servicio, la entrega en su labor de formar
personas. Es importante considerar los problemas de conducta que implican las
relaciones del profesor consigo mismo y que algunas relaciones dependen
fundamentalmente, de la manera como el profesor se encara y se trata a si mismo, un
aspecto básico es que el crea en lo que hace y vea la escuela como órgano educador
y no vea su actividad como mera forma de ganarse la vida. En relación a lo anterior
es necesaria la convicción de su papel y su importancia en la formación del
educando, como agente que influye en las mentalidades que se están formando.

La vocación, precisa Cordero es una tarea de alcance singularmente social, no sólo porque
el ejercicio de la función educadora sobrepasa al horario de trabajo, sino que también es “un
compromiso personal totalizador”, que caracteriza una vida de entrega sin límites, con una
actitud dictada por la fe y el amor. Por la fe en lo que se hace y por el amor, el aprecio por
ellas mismas, hacia las personas de los educandos, son imprescindibles para el verdadero
profesional educador.

 Otro rasgo de un educador que humaniza es que todo educador debe asumir la
defensa de la igualdad de los seres humanos y sus derechos, la paz luchando contra
la violencia, la falta de equidad y la marginación y exclusión, por ello en su ámbito
personal y familiar su practica debe ser coherente de acuerdo a los valores de la
justicia, la solidaridad, la paz, responsabilidad y sensibilidad que, además, favorece,
motiva, impulsa en su labor educativa y de formador de docentes.
 Practica la responsabilidad de su labor como educador en todas los ámbitos, personal,
social y profesional , es decir de estar y sentirse bien preparado para enfrentar la s
exigencias de su labor cotidiana , sin temor y no como una carga pesada, lo cual tiene
que ver con su deseo de perfeccionarse y de realizarse personal y profesionalmente.
 El educador con autoridad moral coherentes con la práctica de valores como la
solidaridad la justicia, la gratuidad y al responsabilidad. La autoridad moral del
educador se sustenta en la coherencia no sólo de los valores morales que predica,
como formador y educador y la práctica de estos valores en su vida privada y
pública, coherencia que reposa en opiniones autenticas de su modo de pensar, de
ser, de creer, de querer, en su relación con los demás, o del modo de satisfacer sus
necesidades.
 El ejercicio de la autoridad al servicio del bien común. Poner al servicio el bien común
ideas creencia usos y costumbres
 Construir climas de armonía con respeto activo, verdad dialogo honestidad inclusión
creatividad y participación
 Desarrollo de corrientes pedagógicas transformadoras que construyen democracia y
ciudadanía

La formación d elos educadores no puede estar sometida a criterios políticos


menores o a l aooyuntura d emoda.

Al respecto Elsa Tueros, señala en el modulo PUC “la persona moral se manifiesta
y realiza en los actos humanos “Es precisamente mediante sus actos como el
hombre construye su perfección”. Y la autoridad moral del educador se sustenta
no en sus capacidades ni competencias diversas, sino en la moralidad de los
actos que está definida por la relación de la libertad del hombre con el bien
auténtico, con el bien absoluto, el Bien del cual procede todo bien.
Jesús Cordero, resume las cualidades de una autoridad moral del educador. Pero
la condición social de la profesión educadora va mucho más allá, y es social con
un alcance distinto y más radical: el compromiso en la construcción de una
sociedad ética. “Y ahí radicará precisamente la singular dimensión ética de la
actividad del profesional educador: en que genera una sociedad ética en su
estructura, susceptible de la realización en ella de los valores y contenidos éticos;
o por el contrario una sociedad amoral, opaca y resistente incapaz de mostrar los
comportamientos y contenidos éticos”.
La responsabilidad profesional del docente debe conducirlo a querer perfeccionarse
constantemente, desde el punto de vista técnico, profesional y social.
6- La ultima obligación del profesor es la de desarrollar espíritu de autocrítica, de criticar
continuamente su propia conducta. El profesor debe desconfiar de su propia acción, a fin de
ajustarla, a las realidades humanas y sociales de sus alumnos y de la escuela donde
colabora.
En el proceso educativo, el trabajo docente se ve rodeado por un aura de poder que le otorga
su misma función, como también por la autoridad que le otorgan su propio saber y su edad.
De ahí que el perfil del profesor/a, incide en el alumnado, de manera que los logros se dan en
función a este perfil.
Generalmente, en procesos de conflicto la posición del profesor es siempre la dominante y
hace que en las situaciones concretas, sean estas conflictivas o no, concluya casi siempre
con una única interpretación, la del profesor o la profesora.
Muchas veces el comportamiento ético del profesorado, se orienta por la siguiente afirmación:
"lo prioritario son los deberes y nunca los derechos", "la actividad debe estar guiada por los
deberes frente al alumnado, de esta manera esta queda protegido/a si son sus derechos lo
que van por delante, aunque ninguno tenga que renunciar al otro aspecto".
Como enseñantes somos permanentes modelos de conducta y actitudes que algunos
denominan "extra clase de moral", porque ninguno de nosotros puede mostrar
comportamientos neutros, pues en toda acción traducimos valores mas allá de las
intenciones, tanto en el ámbito escolar como fuera de el. La forma de ser, la forma de actuar,
de trabajar, entregan siempre un mensaje todo ello es también formativo para los y las
estudiantes. Por lo tanto, es imprescindible la coherencia entre el juicio y la acción, entre lo
que se dice y lo que se hace.
En el sistema educativo nacional, educar en valores significa, ante todo, crear las condiciones
favorables, para generar el clima que permita la vivencia de valores.
5.5- Semejanzas y diferencia entre ética y moral
El uso de la palabra Ética y la palabra Moral está sujeto a diversos convencionalismos y que
cada autor, época o corriente filosófica las utilizan de diversas maneras. Pero para poder
distinguir será necesario nombrar las características de cada una de estas palabras así como
sus semejanzas y diferencias.
Características de la Moral: la moral es el hecho real que encontramos en todas las
sociedades, es un conjunto de normas a saber que se transmiten de generación en
generación, evolucionan a lo largo del tiempo y poseen fuertes diferencias con respecto a las
normas de otra sociedad y de otra época histórica, estas normas se utilizan para orientar la
conducta de los integrantes de esa sociedad.
Características de la Ética: es el hecho real que se da en la mentalidad de algunas personas,
es un conjunto de normas a saber, principio y razones que un sujeto ha realizado y
establecido como una línea directriz de su propia conducta.
Semejanzas entre Ética y Moral: los puntos en los que confluyen son los siguientes:
En los dos casos se trata de normas, percepciones, deber ser.
La Moral es un conjunto de normas que una sociedad se encarga de transmitir de generación
en generación y la Ética es un conjunto de normas que un sujeto ha esclarecido y adoptado
en su propia mentalidad.
Diferencias entre Ética y Moral: ahora los puntos en los que difieren son los siguientes:
La Moral tiene una base social, es un conjunto de normas establecidas en el seno de una
sociedad y como tal, ejerce una influencia muy poderosa en la conducta de cada uno de sus
integrantes. En cambio la Ética surge como tal en la interioridad de una persona, como
resultado de su propia reflexión y su propia elección.
Una segunda diferencia es que la Moral es un conjunto de normas que actúan en la conducta
desde el exterior o desde el inconsciente. En cambio la Ética influye en la conducta de una
persona pero desde su misma conciencia y voluntad.
Una tercera diferencia es el carácter axiológico de la ética. En las normas morales impera el
aspecto prescriptivo, legal, obligatorio, impositivo, coercitivo y punitivo. Es decir en las normas
morales destaca la presión externa, en cambio en las normas éticas destaca la presión del
valor captado y apreciado internamente como tal. El fundamento de la norma Ética es el valor,
no el valor impuesto desde el exterior, sino el descubierto internamente en la reflexión de un
sujeto.

La educación moral y la educación cívica confluyen en la libre obediencia a las


normas morales universales. En efecto, estas normas constituyen el fundamento
inquebrantable y la sólida garantía de una justa y pacífica convivencia humana, y
por tanto de una verdadera democracia, que puede nacer y crecer solamente si se
basa en la igualdad de todos sus miembros, unidos en sus derechos y deberes,
aceptados en su diversidades culturales.

Los educadores debemos ser los primeros en asumir una responsabilidad


compartida con respecto a la construcción de una sociedad justa, solidaria, de respeto
intercultural y de respecto a nuestra naturaleza y ecología. Al respecto, e n una
entrevista hecha a Vicent Santuc, sobre los cambios climáticos, precisa que
“puede ser que se esté exagerando en la dramatización de la incidencia del ser
humano sobre los actuales cambios climáticos, pero nadie niega que exista una
incidencia, y ella nos llama a reconsiderar nuestra manera de habitar nuestro
planeta y nuestra propia vida. Por eso, la pregunta que tenemos en manos, ya no
es cómo dominar el mundo sino como dominar nuestro propio dominio”. “Ese
dominio de nuestro dominio” es prioritario en la educación de la personalidad y del
carácter que es un aspecto olvidado en la formación del educando, pero que
ahora, precisa su reflexión tal como hace notar Santuc. Es más, “ha llegado a ser
una “necesidad” en cuanto la carrera ciega de la tecnociencia es productora
irresponsable de cualquier cosa. Nos toca tomar seriamente conciencia de que las
consecuencias de nuestros actos se tornan en las condiciones tanto de nuestra
sobre-vivencia como de la posibilidad de vida de futuras generaciones. Es allí que
se levanta la exigencia de una nueva educación. No una educación para formar
jóvenes y adultos a fin de que estén en condiciones de asumir lo que fue el
problema de ayer, a saber el del dominio de la naturaleza, sino jóvenes que estén
en condiciones de asumir y buscar respuestas nuevas a las preguntas de hoy y a
las que nos vienen de las futuras generaciones”.

¿Que podemos hacer nosotros como educadores? ?

Cultivar los valores que permitan el crecimiento de la personas que libre y autónomamente
encuentran valores e ideas que marcan y orientan sus vidas cuando disfruten y gocen con el
saber y este saber los lleva a comunicar , crear y estar mas abierto a la profundidad de su ser
y a su entorno personal, social , profesional y la persona se va identificando con los alores
éticos y morales que les permiten crecer y los sitúan en un espacio social histórico
determinado.

la educación moral debe estar separada de la educación en ciudadanía y democracia?

Con el estudio de la Unidad 1 y 2 y los anexos (muy importante), deben hacer el trabajo final.

Elaborar un perfil etico del educador que humaniza y,Explicacion sustentada de la relacion
entre educacion moral y educacion civica....

Los indicadores miden eso, la propia re-elaboración de los contenidos estudiados:

Qué he aprendido de mi propio aprendizaje? Con qué recursos cuento? YO!!

Qué puedo mejorar en mi desempeño profesional? en mis planes de formación?

Sean descriptivos, fundamenten, lean dos veces lo que escriben y no dejen pasar la
oportunidad de aportar para luego socializar todos estos últimos trabajos!!

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