

ESPECIALES
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
 
 COLUMNISTAS
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
o
JAIME CRUCES ROSAS

Vargas Llosa en su laberinto

 PUBLICADO HOY 

Semanas atrás, Vargas Llosa, entrevistado sobre por qué la pandemia había
golpeado tanto al Perú, sostenía sin vergüenza y sin hacer ningún esfuerzo
intelectual, que se debía a las medidas populistas aplicadas en Perú; el cinismo
político no es novedad en el escritor pero la evidente pobreza de argumentos
sí.

Sus tesis políticas se cofunden con el nivel de Becerril y Acuña, pero lo dice un
Nobel y lo replica la barra brava de la CONFIEP. Después de la fuga de
Fujimori todos los gobiernos han tenido el sello de garantía del novelista,
Toledo, García, Humala y PPK, todos siguieron en piloto automático el modelo
fujimorista y enterraron la economía de mercado y la libre competencia.

Acentuaron los monopolios y oligopolios, fusiones empresariales mafiosas,

aumento de empresas en paraísos fiscales, exoneraciones tributarias, intereses
de espanto en bancos, abuso de las AFP, tarifas abusivas en clínicas y más.

Ahora Vargas Llosa y sus falsos liberales han inventado una narrativa; consiste
en decirnos que el modelo fujimorista-mercantilista está bien, pero que falló el
populismo y el izquierdismo, 30 años ininterrumpidos de gobiernos
mercantilistas corruptos y ahora nos salen con que faltaron reformas.

Vargas Llosa es un escritor brillante en el campo literario pero en política utiliza

su prestigio al servicio del conservadurismo, el liberalismo le sirve para adornar
o maquillar sus posturas y defender el neoliberalismo en su versión
mercantilista y mafiosa en el Perú.

Vargas Llosa, “el liberal”, es un fiel admirador de la caduca y putrefacta

monarquía española, es admirador y amigo entrañable del Rey Juan Carlos,
que ahora ha tenido que fugar de España acusado de corrupción, ¿alguna
condena del liberal?

Recorre el mundo hablando de liberalismo y saca cara por Bolsonaro y el

impresentable Donald Trump, es admirador del pinochetista Sebastián Piñera y
defiende al Matarife Álvaro Uribe y su muñeco Iván Duque.

Hoy Vargas Llosa tiene un laberinto de candidatos de la derecha, son más de

una docena de neofujimoristas o fujimoristas apoyados por el club de
construcción, de la banca y minería, esos “liberales” llaman a defender este
modelo mafioso heredado de Fujimori y continuado por sus apadrinados.
Atormentado por la victoria del MAS en Bolivia, el triunfo anti pinochetista en
Chile y el inminente retorno de la izquierda en Ecuador, el escritor grita el
peligro es el populismo, lo mismo dice Keiko Fujimori, ya no ocultan sus
coincidencias y juntos llaman castrochavistas a todo el que difiera de ellos, el
resentimiento por la derrota de los 90 habría llegado a su fin.