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EDICIÓ N FACSÍMIL

Edició n de FSB
Valencia, Agosto 2019
INTRODUCCIÓ N DE LA PRESENTE EDICIÓ N

La permanencia del conde De Maistre

Pocos personajes de los ú ltimos siglos han logrado sobrevivir a


la depuració n de las nuevas corrientes después de haber sido
representantes del Antiguo Régimen. Y uno de ellos es Joseph
de Maistre.

Cuando la evolució n de los tiempos se impone, poco o nada se


puede hacer paa impedir la libre caída. Y aunque utilizamos la
palabra evolució n, deberíamos haber dicho involució n, porque
desde el punto de vista tradicional lo que está transcurriendo es
una clara involució n, o si hablamos de evolució n debería
matizarse que es evolució n hacia el caos.

Habiendo sido un conocido y convencido masó n, De Maistre


intentó convertirse en un baluarte de la tradició n, recuperando
los valores perdidos y haciendo una regeneració n de ideas de
una manera muy decidida y potente.

En un momento en que Europa se debatía entre la resistencia


del Antiguo Régimen y el avance hacia una nueva sociedad
burguesa y revolucionaria, Josep de Maistre intenta salvar la
esencia, esa esencia que ya no se vivía con plena conciencia
desde las instituciones que él mismo pretendía salvar. Y he aquí
el problema, el Antiguo Régimen tenía que caer porque no había
una élite consciente de su necesidad de regeneració n. Tan só lo
hubo reacció n, y ante la reacció n de cualquier tipo nadie puede
evitar que haya buenos y malos militando en ambos bandos, en
una constante que se repetirá de forma reiterada y cíclica hasta
nuestros días.

Pero De Maistre hizo una aportació n de profundidad, y ese


detalle es lo que hace de él una figura por encima de su tiempo y
má s allá de los tiempos, aprecidado en la edad contemporá nea
incluso por quienes de forma natural deberían de ser sus
enemigos.

Su intento de regeneració n intentó enfocarlo hacia dos sentidos.


Por una parte, para salvar la esencia del Antiguo Régimen,
recuperando aquellos valores que desde hacía tiempo ya casi
nadie vivía, lo cual estaba condenado al fracaso, tal y como se
vio, a pesar de que en Europa hubo una reacció n
postrevolucionaria que, por un momento, parecía suponer un
triunfo de los esfuerzos de pesonajes como De Maistre, pero la
fuerza revolucionaria perduró y se fortaleció pudiendo, poco a
poco, durante todo el siglo XIX, enquistarse de forma
irreversible en todos los sectores de la sociedad.

El otro intento de regeneració n lo situó en la misma masonería a


la que pertenecía. Consciente de que esa institució n, devenida
en algo especulativo y no por ello forzosamente negativo, de
fuertes raíces traicionales, estaba siendo desviada y utilizada en
gran medida para conseguir los objetivos contra los que luchaba
en el á mbito social y político, contribuyó , también sin éxito, para
evitar que esa institució n acabara siendo un importante motor
de los ideales revolucionarios. Décadas después, René Guenó n
elogiaría su intento, habiendo intentado él mismo, por un
momento, imitar la acció n de aquél en el mismo á mbito
masó nico.

En el presente escrito se refleja un aspecto de esa lucha por


conservar y revalorizar lo que estaba a punto de clausurarse
para siempre. Y vemos aquí un valor intelectual y brillantez que
le hace duradero má s allá de las ideologías y de los tiempos.

F.S.Bas
Agosto 2019

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