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Artículos y Entrevistas
Este nuevo rol en el sector educativo de los diferentes niveles se ha vuelto necesario en
este entorno 2.0. Aquí su perfil, responsabilidades y principales desafíos a afrontar.
Los adolescentes de hoy llamados por Prensky (2001) nativos digitales, se encuentran
inmersos en la denominada sociedad del conocimiento con posibilidades de comunicación e
interacción infinitas, generando una nueva concepción de cultura basada en el uso y
posibilidades de desarrollo a partir de las tecnologías.
El ámbito educativo no es ajeno a esta revolución digital, y uno de los retos más importantes
es explorar la relación actual de los jóvenes con su cultura digital. En base a esto no hay
que olvidar el papel del docente, que ha crecido en una sociedad distinta, donde el
conocimiento y uso de las nuevas tecnologías implica un reto para personas que poseen
una brecha digital marcada, Prensky (2001) los denominó inmigrantes digitales.
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http://www.learningreview.com/capital-intelectual/articulos-y-entrevistas-capital/2654-el-
community-manager-educativo-retos-y-posibilidades#.Tx3J-G8ZoyQ.twitter
Redes sociales y posibilidades educativas
Inmersos en la era del conocimiento encontramos que cada día se acrecientan las
relaciones de los estudiantes y su entorno, siendo el medio más común el uso de las redes
sociales o comunidades virtuales. Las redes sociales son “una estructura social formada por
nodos –habitualmente individuos u organizaciones– que están vinculados por uno o más
tipos de interdependencia, tales como valores, puntos de vista, ideas, intercambio financiero,
amistad, parentesco, aversión, conflicto, comercio, enlaces web…”. Santamaría (2008)
Ahora bien, el uso de estas redes sociales y los medios de comunicación de la web 2.0
como los blogs, Youtube, Facebook, Twitter, Flickr, entre otros, han llevado a dilucidar un
nuevo panorama en las instituciones educativas, pues el fenómeno del social media absorbe
a la gran población estudiantil en América Latina y abre la posibilidad de aplicar estas redes
sociales con fines netamente educativos y así transformar la relaciones entre docentes y
estudiantes, como a las instituciones mismas con su entorno y los agentes educativos.
Así, en los entornos educativos se pueden construir procesos paralelos en las redes
sociales, construir ambientes propicios de aprendizaje donde convergen el material humano
enriquecedor de nuestros estudiantes con la utilización de elementos de la web 2.0 en
espacios colaborativos, mejorando el dialogo y fortaleciendo los conocimientos en los
estudiantes brindando un entorno libre para que el estudiante pueda utilizarlo a favor de su
aprendizaje.
En las escuelas ya no será algo novedoso ver cómo los docentes aplican y utilizan redes
sociales y comunidades virtuales con fines educativos, ya sea para sus materias, cursos o
tutorías generando mayor atención entre los estudiantes y profundizando espacios
asincrónicos y sincrónicos de interacción, difusión de conocimientos, aprendizaje
cooperativo y construcción de saberes, ya que estas redes fortalecen la inteligencia
colectiva, la creatividad y valoración promoviendo posibilidades de trabajo colaborativo,
acceso a la información y distribución de contenidos.
En una institución educativa, ya sea a nivel básico o universitario estas redes se harán cada
vez más fuertes; todos los docentes o la gran mayoría de ellos utilizarán el apoyo de redes
sociales en sus respectivos cursos, así como la propia institución tendrá espacios en
conocidas redes como Facebook u otras netamente educativas como Edmodo. Pero
muchos de estos docentes inmigrantes digitales necesitarán administrar los contenidos,
monitoreo y capacitación para el uso correcto de las redes, tratando de promover redes de
calidad con contenidos acertados y gestionados de una forma eficaz y eficiente.
En los últimos años emerge la figura del Community manager, conocido esencialmente en
entornos empresariales, figura de administración y gestión del social media. En la opinión de
Gallego (2009), presidente de Aerco España, el community manager es: “quien se encarga
de cuidar y mantener la comunidad de fieles seguidores que la marca o empresa atraiga…”;
pero nosotros debemos administrar una empresa más importante que son los aprendizajes,
es por ello que en los entornos educativos, hablaremos de una figura emergente: el
Community manager educativo.
Dentro de las instituciones educativas existe un alto grado de requerimiento por el uso de
herramientas y recursos que nos proporciona la tecnología, desde la utilización de software,
open source o la denominada web 2.0, web semántica, entre otras. Sin embargo, el control
inmediato de las comunidades virtuales, redes sociales, incluso aulas virtuales deben recaer
no sólo en los docentes encargados de los cursos, sino en la figura de una oficina del
community manager educativo que tenga a bien tanto capacitar a docentes como
administrar de manera efectiva los contenidos y servir de apoyo a los diversos estamentos
de la institución para la distribución y asesoría de contenidos.
El Community manager debe tener una oficina denominada Departamento de
comunicaciones institucionales educativas, la cual será la oficina donde los Community
managers efectúen su labor. Ésta estará conformada por un Moderador, el encargado de
controlar a grupos en general, el gestor de contenidos quien analizará y revisará los
contenidos a fin de dar el visto bueno para su publicación, y el gestor de calidad quien
tendrá la difícil tarea de elaborar un modelo educativo de calidad para la utilización de las
comunidades virtuales.
Esta oficina debe coordinar de manera permanente con los docentes y estudiantes a fin de
hacer mejoras en la estructura de las comunidades virtuales.
Es así como se erige la figura del Community manager educativo, aquel líder con visión y
manejo del social media quien velará por dar un giro a la educación, convirtiendo lo digital
en lo cotidiano, y lo cotidiano en algo sumamente provechoso para el intercambio de
información, aprendizaje y crecimiento de los estudiantes, docentes y comunidad en
general.
Bibliografía