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Este documento describe la experiencia de un profesor universitario jubilado con la asignatura de matemáticas durante su educación secundaria a mediados de los años 1970. A pesar de cursar matemáticas varias veces y reprobarla, eventualmente logró aprobarla y graduarse de la universidad como veterinario. Su fracaso inicial con matemáticas lo motivó a esforzarse más en el futuro.
Este documento describe la experiencia de un profesor universitario jubilado con la asignatura de matemáticas durante su educación secundaria a mediados de los años 1970. A pesar de cursar matemáticas varias veces y reprobarla, eventualmente logró aprobarla y graduarse de la universidad como veterinario. Su fracaso inicial con matemáticas lo motivó a esforzarse más en el futuro.
Este documento describe la experiencia de un profesor universitario jubilado con la asignatura de matemáticas durante su educación secundaria a mediados de los años 1970. A pesar de cursar matemáticas varias veces y reprobarla, eventualmente logró aprobarla y graduarse de la universidad como veterinario. Su fracaso inicial con matemáticas lo motivó a esforzarse más en el futuro.
FACULTAD DE CIENCIAS ADMINISTRATIVAS Y SOCIALES MATERIA: ESCUELA DE PSICOLOGÍA
OPERADORES MENTALES
PROF: HÉCTOR URBANO AUTORA: MARÍA HERNÁNDEZ
SECCIÓN: “1” C.I.: 25.691.334
| TURMERO, SAN JOAQUÍN, OCTUBRE DE 2022
| ¿PORQUÉ TE ENSAÑAS CONTRA MI SEÑOR?
Este título me pareció adecuado y pintoresco después de escuchar la
narración que me hizo un docente universitario jubilado sobre su amarga experiencia en Segundo año de Ciencias del Ciclo Diversificado a mediados de la década de los setenta con la asignatura Matemáticas. Durante toda su educación secundaria dicha materia lo persiguió acompañada del fantasma de la reparación (segundo, cuarto y quinto año), llegando a pensar de manera negativa, ¿por qué te ensañas contra mi señor?, claro como una justificación a su falta de responsabilidad como estudiante y reconociendo hoy día que la impartieron docente de calidad. Para esa época mis padres me recalcaban insistentemente ¡Tienes que estudiar, no tienes otra responsabilidad! y desde mi punto de vista me preguntaba ¿Ok debo estudiar pero con que propósito?, sumando a esta tragedia griega que estaba de novio con una chica de Segundo año de Humanidades algo mayor que él y considerada su primera prioridad. Esta demás decir que no aprobó la materia y sintió una gran tristeza al ver sus compañeros de clases celebrando haber alcanzado su título de bachiller, reparo en diciembre del 76, por Consejo técnico en la Oficina Regional de Educación en San Juan de los Morros y fracaso, logrando aprobar en Marzo de año siguiente. En Mayo del año 78, ingreso a la Facultad de Ciencia veterinarias de la UCV, curando Matemáticas durante el primer semestre, aprobándola con dieciséis (16), ya con 18 años había cambiado su forma de pensar, logrando graduarse en 5 años y convirtiendo estos como algo motivador para alcanzar futuros triunfos como profesional con estudios de doctorado inclusive. Siempre “Hazlo o no lo hagas, pero no lo intentes”.